Los family offices mantuvieron una “asignación estable” pese a la incertidumbre

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En un contexto de incertidumbre en materia de política comercial, tensiones geopolíticas y transformación tecnológica, el informe Global Family Office Report 2025, elaborado por Citi Wealth, concluye que la asignación de activos se ha mantenido estable.

Muestra de ello es que los family offices realizaron menos cambios que el año pasado, a la espera de una mayor claridad en materia de política comercial. Según el informe, entre los cambios que implementaron a mitad de año predominaron las medidas alcistas. Además, los family offices se mostraron optimistas sobre los rendimientos de las carteras a 12 meses, a pesar del escaso consenso sobre qué clases de activos podrían impulsar el rendimiento. Según el informe, este sentimiento positivo se explica por la posible desregulación en Estados Unidos, los recortes de los tipos de interés y los avances en inteligencia artificial.

«Son tiempos emocionantes para los family offices de todo el mundo”, reconoce Hannes Hofmann, director del Grupo Global de family offices de Citi Wealth. En su opinión, los sofisticados clientes que están detrás de los family offices están encontrando nuevas formas de satisfacer las expectativas cada vez mayores “Nuestro informe de 2025 destaca cómo están refinando sus prioridades, reinventando sus operaciones y buscando construir carteras resilientes. Estamos orgullosos de asociarnos con ellos, aprovechando el alcance global y los amplios recursos de Citi para ayudarles a aprovechar las oportunidades potenciales y alcanzar sus ambiciosos objetivos», señala Hofmann.

Según revela el informe, casi todos los encuestados afirmaron que esperaban una revalorización de sus carteras durante el próximo año, y casi cuatro de cada diez family offices esperaban obtener una rentabilidad del 10% o más. “Dicho esto, la opinión sobre muchas clases de activos individuales era algo menos positiva que en la encuesta de 2024”, matiza el documento en sus conclusiones.

Principales tendencias

Sin duda, los family offices han hecho frente a un 2025 complejo y lleno de sorpresas. Por ejemplo, frente a la volatilidad del mercado, el anuncio de aranceles por parte de Estados Unidos provocaron ajustes rápidos y calculados para reforzar la resiliencia de las carteras, y el 39 % de las family offices se decantó por una gestión activa. También se orientaron hacia clases de activos y geografías percibidas como defensivas, así como hacia estrategias de cobertura.

De hecho, en materia geopolítica, las disputas comerciales mundiales se convirtieron en la principal preocupación (60%) de los family offices, seguidas de las relaciones entre Estados Unidos y China (43%) y el resurgimiento de la inflación (37%). En este contexto de incertidumbre, el informe destaca que las tensiones y las iniciativas gubernamentales para atraer capital están alimentando el interés por la ubicación de los activos y una reevaluación de las jurisdicciones.

Entre las tendencias de inversión, destaca que hay un fuerte compromiso con las inversiones directas, ya que el 70% de los encuestados afirmó estar involucrado en inversiones directas. De ellos, cuatro de cada diez dijeron haber aumentado o incrementado significativamente su actividad en el último año, lo que sugiere confianza en su capacidad para seleccionar operaciones que generen rentabilidad.

“Los family offices de todo el mundo siguen muy centradas en la inversión directa, ya que buscan exposición a las tecnologías transformadoras clave del futuro y a empresas con valoraciones atractivas en todos los sectores», explica Dawn Nordberg, directora de relación integrada con el cliente de Citi Wealth. 

El negocio de los family offices

Este también ha sido un año de cambios para los family offices. Según el informe, han avanzado en la profesionalización de su función de inversión, aunque es necesario mejorar aún más la gestión del riesgo operativo, la ciberseguridad y la planificación de la sucesión del liderazgo

Una tendencia vista en 2025 es que, para gestionar sus crecientes responsabilidades de forma rentable, muchos family offices están considerando la posibilidad de recurrir a proveedores externos, pero la autoridad para tomar decisiones sigue recayendo en gran medida en la propia empresa.

Respecto a la implantación de inteligencia artificial y sus avances, la proporción de encuestados que mencionaron haber implantado la IA se ha duplicado desde el año pasado, especialmente en la automatización de tareas operativas y el análisis de inversiones. “Sin embargo, la integración completa llevará tiempo”, matiza el informe en sus conclusiones.

Alexandre Monnier, director de Asesoramiento Global para Oficinas Familiares de Citi Wealth, explica que, en esta profesionalización continua entre los family offices, también identifica áreas en las que es crucial un mayor desarrollo, como la gestión de riesgos y la adquisición de talento para servicios no relacionados con la inversión. “Nuestros hallazgos pueden ayudar a enmarcar el debate para aquellos que buscan formalizar sus operaciones, preparar a los futuros líderes de su familia y preservar y hacer crecer el patrimonio generacional”, afirma Monnier.

A la hora de hablar de los riesgos a los que se enfrentan, el 70% de los encuestados mencionó los relacionados con las inversiones, seguidos de los operativos (37%) y los familiares (33%). “Sin embargo, aunque muchos family offices afirmaron haber reforzado la gestión de riesgos, aproximadamente la mitad de los encuestados reconoció no estar lo suficientemente preparada para hacer frente a los riesgos de ciberseguridad, seguridad personal y geopolíticos. La escasez de recursos sigue siendo un reto importante en este sentido”, concluye la encuesta.

«En la industria va a haber más ETFs que fondos, se están comiendo el mercado; el core de las carteras será el ETF y el fondo aportará un extra de alfa»

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La historia de Pablo Bernal podría parecer una historia espejo de la de la industria de ETFs y fondos indexados a nivel global. El Country Head para España de Vanguard atesora años de desempeño profesional en México -dando servicio a varios países latinoamericanos y también al mercado offshore de EE.UU.-, un periodo en el que el acercamiento hacia la gestión pasiva ha pasado de ser casi evangelizador hasta convertirse en una filosofía de servicio al inversor, una herramienta para canalizar la transición del ahorrador a inversor. Tras su experiencia en las Américas, Bernal acaba de aterrizar en Madrid -con la apertura de oficina y un equipo de ocho profesionales- para ofrecer ese servicio a los clientes in situ, en un mercado que ha dejado de mirar a la gestión pasiva de reojo y que, desde una observación frontal, desvela su gran potencial.

Así, desde los albores de los ETFs y hasta su fase de desarrollo exponencial, desde su aceptación más institucional y hasta la conquista del inversor retail, y, sobre todo, desde su prolífico desarrollo en las Américas y hasta su adopción en el continente europeo, la historia profesional de Bernal ha transitado un camino paralelo al de estos vehículos: «Desde el comienzo de mi carrera, los ETFs han estado en el centro de mis roles, tanto como usuario, como vendedor e incluso como creador», confiesa en esta entrevista a Funds Society.

Bernal hace memoria de su paso por BlackRock -en un momento en el que las Afores empezaban a incorporarlos, allá por 2003-2004, como paso previo a una adopción más privada y retail, y en el que el asesoramiento independiente empezaba a ser una figura creciente- y de su siguiente aventura en Sherpa Capital, en este caso como gestor -de carteras institucionales, planes de pensiones o negocio wealth pero siempre desde el punto de vista de una gestión discrecional «bastante institucional», en contraste con lo que es hoy en España, por ejemplo- y donde conoció y usó en las carteras fondos cotizados e incluso participó en la creación de un ETF multifactorial, smart beta… ese fue el camino transitado hasta que se le presentó clara la oportunidad, con el aterrizaje de Vanguard en el mercado mexicano.

Con ojos nuevos en España

Juan Hernández, actual responsable de la gestora para Latinoamérica, le ofreció unirse al equipo y Bernal comenzó entonces una historia que dura ya ocho años y que, tal y como ocurre ahora con la de España, suponía desarrollar un mercado donde hasta el momento solo había existido cobertura desde el exterior. El paralelismo entre ambos aterrizajes -el de México entonces y el de España ahora- resulta evidente, salvando las distancias. «México cuenta con el SIC, el Sistema Internacional de Cotizaciones que permite listar instrumentos bursátiles internacionales en la bolsa, lo que facilita la operativa y hace de los ETFs el vehículo ideal para la diversificación internacional de las Afores», explica. La fiscalidad también es más eficiente que en España, con impuestos de en torno al 10% para los ETFs frente hasta un 35% en los fondos.

Bernal también tiene margen para comparar el mercado español con el latinoamericano puesto que, tras la pandemia y con el negocio consolidado y con varios partners en México, Vanguard decidió reestructurarse y reubicar sus recursos, trasladando a México la cobertura de mercados como Chile, Colombia, Perú, Brasil y EE.UU. Offshore, lo que terminó catapultando al equipo, y dando a Bernal un perfil más de intermediarios y wealth (con mercados como Miami, Brasil y Uruguay bajo su mando, si bien posteriormente, y al comprobar el tamaño del mercado offshore, se abrió una oficina específica en Miami).

Con esa experiencia sobre la mesa, y ante su nuevo reto en España, se muestra muy consciente del paralelismo pero también de la necesidad de mirar el mercado español con ojos nuevos. El experto considera que los ETFs son vehículos idóneos para los asesores independientes, por varios motivos, entre ellos la distribución y la custodia. Y, en este punto, cree que, aunque mirando al canal tradicional o bancario España está más avanzada en el sentido de que se han adoptado modelos de asesoramiento independiente o gestión discrecional de carteras, el surgimiento de proyectos independientes (en un origen representado por las EAFs) ha quedado más rezagado que en Américas. «En muchos países de Latinoamérica los bancos dominan la distribución y trabajan con comisión implícita y arquitectura cerrada pero ha surgido con fuerza un competidor, la figura de los asesores independientes, muy regulada, que no cobra retrocesiones y está moviendo el negocio, como ocurre con los RIAs en Miami», explica.

¿Está sobrevalorada la traspasabilidad?

Esta realidad hará que su desarrollo en España sea ligeramente diferente, aunque considera que en ambos modelos, los ETFs ofrecen grandes ventajas. Y también los fondos indexados, que en España pueden ayudar a romper el viento de cara de la fiscalidad. En este sentido, el responsable de Vanguard en España defiende que a un inversor activo al que le interese diferir constantemente las ganancias de capital pueden interesarle los fondos pero, para aquel de más largo plazo -«que es como creemos que debe ser un inversor»- no debería ser tan importante. Contando con que simplemente se está difiriendo el pago impositivo, no eliminándolo. «Creo que puede haber un sobredimensionamiento de la ventaja del fondo, que sí es real, pero no necesariamente es para todos», explica.

De hecho, la sencillez y facilidad operativa del ETF pueden acabar decantando la balanza a pesar de la traspasabilidad, confiesa, incluso desde su punto de vista personal como inversor en España: «Creo que la traspasabilidad se vuelve relevante para el inversor high net worth o affluent, pero para el inversor de un lado institucional y del otro lado retail, el ETF sí que tiene mucho más mérito», asegura.

En este sentido, preguntado por el atractivo de fondos indexados y ETFs, que nutren la mayor parte de su oferta, se muestra agnóstico con respecto al vehículo: «Lo veo de dos maneras: desde la estrategia de inversión y desde el vehículo o wrapper. Damos al cliente lo que quiera, puedo destacar los beneficios de ambos. Por ejemplo, estamos viendo que por ejemplo en la gestión discrecional se están usando mucho los fondos, pero en los fondos de fondos o en las plataformas digitales de inversión triunfan los ETFs», explica, y añade que, en España, «Vanguard tiene la oportunidad de posicionarse mejor en el mercado institucional, ahora que estamos aquí y que ese cliente demanda atención y servicio».

Crecer a doble dígito en España… también con gestión activa

Actualmente, la gestora cuenta con 16.000 millones de euros y, aunque su objetivo no es tanto llegar a un número determinado de activos sino hacer bien las cosas, Bernal espera crecer a doble dígito en los próximos años. «Vemos potencial en el mercado español, y mucho en renta fija. Nuestro libro está muy cargado de equities y, hasta ahora, por no tener presencia, no hemos logrado colocar mucho en renta fija activa. Ahí vamos a poder empezar a posicionar a Vanguard como un referente de renta fija activa, pero también en la parte indexada, donde tenemos vehículos sumamente competitivos», explica. Bernal defiende que la gestión indexada debe ser el core de la cartera, pero que la gestión activa tiene también una cabida importante, lo que explica esos nuevos proyectos en gestión activa de renta fija, «donde hay más capacidad de generar alfa, donde existen mercados más imperfectos y donde la indexación tiene más límites».

La gestora, que cuenta con una gama de producto compuesta por unos 500 fondos a nivel global, viene lanzando nuevos productos, aunque sin entrar en temas como el bitcoin. «Una cosa es innovar y otra cosa es lanzar productos que suenan sofisticados, pero más bien son complejos y no tienen una tesis de inversión de largo plazo, y pasa mucho en esta industria», dice el experto, crítico. Por eso defiende su gama, más limitada -a propósito- que la de otros competidores, pero también reconoce que el inversor necesita herramienta, por lo que están lanzando nuevos productos. Y adelanta: «En Europa este año lanzaremos casi una docena de nuevos productos, muchos ETFs, pero también algunos fondos activos. Y el año que viene el objetivo es lanzar más de diez productos nuevos«.

Entre sus planes están también los ETFs activos, y ya tienen algunos, aunque, insiste Bernal, son agnósticos con respecto al vehículo y lanzarán aquellos más eficientes en cada mercado. Eso sí, cree que «el fondo de inversión desde un punto de la vista de la tecnología es un poco más arcaico». Por eso, en esa batalla de equilibrios entre vehículos indexados, ETFs y fondos tradicionales, cree en el potencial de los fondos cotizados: «En la industria va a haber más ETFs que fondos, el core de las carteras va a ser el ETF y el fondo va a aportar un extra de alfa».

Bernal habla de la actual convergencia entre ETFs y fondos tradicionales y dibuja un entorno en el que los ETFs «se están comiendo el mercado», por su eficiencia, la robustez de sus infraestructuras, la liquidez o la innovación, captando más flujos de lo que representan en términos de cuota, aunque con un matiz: los fondos siguen teniendo sentido para ciertas estrategias, como por ejemplo los target date funds en EE.UU. «Ése es el futuro y ya lo vemos en Estados Unidos, el mercado más adelantado». El responsable de Vanguard en España recuerda los avances que está aprobando la SEC, no solo para registrar ETFs activos como clases de fondos sino también con innovaciones dentro de los mercados privados, por ejemplo, y donde el tamaño del mercado se acerca a los 20 billones de dólares (20 trillions en términos anglosajones)». En Europa también avanzan con fuerza, y algunos de los obstáculos y retos ya se están afrontado, como la unificación de los mercados.

España: ¿por qué ahora?

Al preguntarle por la reciente llegada a España, nos habla de razones tanto internas como externas. Entre las primeras, la gestora llevó a cabo un cambio de paradigma en Europa y se centró en asociarse con intermediarios e inversores profesionales e institucionales para llegar al minorista, por lo que se hacía clave la presencia local: «Redoblamos nuestros esfuerzos en cuanto al negocio B2B como forma de ampliar el alcance de nuestra oferta al inversor retail europeo, por lo que abrimos la oficina de Alemania en 2018, luego Italia y ahora España. Vamos a crecer, se le está dando más peso a Europa continental en nuestra estructura», asegura.

Con respecto a los motivos externos, la proliferación de los esquemas de comisión explícitas y GDC -con clases limpias y que favorecen el uso de ETFs- o la creciente participación del inversor minorista en plataformas independiente, roboadvisors o plataformas de ejecución fueron motivos clave. «Tenemos al inversor retail en nuestro ADN, queremos ayudar al inversor final», trabajando de la mano del institucional, y de los grandes bancos con modelo de gestión discrecional o asesoramiento independiente, explica.

Un enfoque en coherencia con la estructura de mutua de la gestora, propiedad de los inversores y que no obliga a dar beneficios a nivel grupo, algo que marca la diferencia: «Nuestra misión está grabada, tatuada en todos los empleados de Vanguard, y consiste en ayudar al inversor final, darle una mayor probabilidad de éxito en sus inversiones. ‘To take a stand for all investors, to treat them fairly and to give them the best chance for investment success’, es nuestra razón de ser». Y ello también explica su filosofía low cost, ante esa idiosincrasia de propiedad y una estructura operativa de bajos costes -con headquarters en Pensilvania y no en Manhattan, o con 500 productos a nivel global…-. «No somos low cost por estrategia comercial sino por cómo estamos constituidos y por nuestra filosofía. Buscamos reinvertir en el cliente final y eso lo podemos hacer bajando costes aún más. Pero también ya la industria está llegando a un límite en este sentido, con productos a 5 puntos básicos. Por eso, también destinamos márgenes a las plataformas».

La entidad, que no paga a los distribuidores, sí está a favor de abaratar el producto o el servicio al cliente final y, por ejemplo, en sus acuerdos con plataformas -donde ve un gran potencial de crecimiento en España y donde se acercan cada vez con más fuerza-, apuesta por que la parte que se devuelve a éstas vaya al cliente. «Estamos trabajando en buscar acuerdos con estas plataformas de distribución, entendiendo que todo lo que hagamos, todo lo que devolvamos a las plataformas, vaya al inversor», indica Bernal, lo que en la práctica significa abaratar el servicio para el cliente, darle un mejor servicio. Como ejemplos, habla de subsidiar las comisiones de compra de un ETF con un broker, de forma que al cliente final le sale gratis la compra; o de los savings plans en Alemania, donde se subsidia parte de la comisión que le cobra la plataforma al cliente, aunque Bernal reconoce que tampoco es algo que pueda hacerse de forma indiscriminada puesto que sus comisiones ya son muy competitivas.

También menciona un acuerdo con Trade Republic para su cuenta infantil, que permite a un menor invertir en tres ETFs de Vanguard, con el reembolso de toda la comisión, hasta una cierta edad. De hecho, hablamos también del potencial de los jóvenes como consumidores de ETFs, algo que Bernal ve lógico: «No es ningún secreto. Todo el mundo lo sabe que el sistema de pensiones en Europa, en el mundo y en particular en España, está bajo presión. Es importante que realmente las inversiones sean parte del día a día de la población en general».

En este sentido, apoya las iniciativas de unión europea en ahorro e inversiones (SIU), junto con la creación de una cuenta de ahorro que podría funcionar, con incentivo fiscal. «Es muy noble porque es dinero que se reinvierte en la economía. Lo que creemos que puede ser un error sería encasillarlo demasiado, que tenga un sesgo demasiado fuerte en activos europeos, porque la diversificación es clara. Pero lo apoyamos, pues hay países -Reino Unido, Suecia, Canadá…- donde ha funcionado muy bien». Y porque podría impulsar las inversiones en Europa, un continente donde ha triunfado el ahorro frente a la inversión, lo que ha hecho que desde 2009 la riqueza del hogar promedio de Estados Unidos haya crecido tres veces más que la del europeo.

Terminamos nuestra charla hablando del potencial de la tecnología, la digitalización, la IA o la tokenización en el mundo de los ETFs, pero, sobre todo, con una idea, un deseo muy claro: «Vanguard quiere ayudar en la transición del ahorrador español a inversor, para que deje de lado las cuentas de ahorros o el real estate y los productos a corto plazo e invierta; tendremos que ver cómo medimos ese impacto», dice Bernal. Sin olvidar otro propio: el deseo de igualar en España la posición que Vanguard tiene a nivel global.

¿Riesgo de burbuja?

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Los mercados de renta variable se están recuperando tras la última oleada de ventas masivas provocada por el temor a una burbuja de la inteligencia artificial. Aunque casi con toda seguridad esta no será la última vez que los inversores se muestren recelosos al respecto, lo cierto es que pensamos que el temor es exagerado. 

Podemos analizar los argumentos que respaldan la idea de una burbuja de la inteligencia artificial a través del ratio precio-beneficios (PER), ya que la preocupación por una posible burbuja se centra en los dos componentes de dicho ratio.

Empecemos con los beneficios. A los inversores les preocupan básicamente dos cosas (algo contradictorias): o bien las expectativas de beneficios no son lo suficientemente altas, y se piensa que las cifras de beneficios no van a ser suficientes para generar una rentabilidad adecuada sobre la inversión en gasto de capital que se está produciendo actualmente, o bien son demasiado elevadas y las consiguientes revisiones a la baja podrían derivar en una caída de los mercados.

La inversión de las compañías tecnológicas se ha acelerado en el último año. Las tasas de crecimiento de los beneficios han comenzado a repuntar, pero no con tanta rapidez, con la consiguiente reducción de la rentabilidad esperada de la inversión (véase el gráfico 1).

 

El interrogante principal para los inversores es si los beneficios de las compañías tecnológicas acabarán repuntando lo suficiente.

Dado el gran potencial del uso y la monetización de la inteligencia artificial en la economía, desde el desarrollo de nuevos fármacos a la sustitución de capital por mano de obra, seguimos siendo optimistas al respecto. Cabe señalar que no se prevé que el gasto de capital continúe creciendo a un ritmo tan rápido, lo que podría traducirse en una recuperación de la rentabilidad de la inversión en 2027.

La tasa de crecimiento de los beneficios prevista para los próximos años se sitúa ligeramente por encima de la media histórica, aunque sin desviarse de forma sustancial.

Ello apunta a que el segundo argumento a favor de una burbuja de la inteligencia artificial (unas expectativas de beneficios demasiado altas) carece de fundamento. Se prevé un crecimiento de los beneficios del índice tecnológico NASDAQ del 18% en 2026 y del 17% en 2027, frente a la media a largo plazo del 14%. No obstante, lo que sí indican estas previsiones es que la recuperación de la inversión actual en gasto de capital no será inmediata.

Valoraciones

Incluso en el caso de que dichas previsiones de beneficios lleguen a materializarse, el múltiplo de precio sobre dichos beneficios podría ser demasiado alto, lo que daría lugar a una rentabilidad inferior en los próximos años. El ratio PER proyectado del índice NASDAQ es de 27,5 veces, no muy inferior al nivel de 30,9 que se alcanzó a finales de 2021. El año siguiente, el mercado registró una fuerte caída.

En términos relativos, los niveles actuales de valoración son elevados, pero no tanto como en otros mercados. La puntuación z del ratio PER actual es de 0,5, frente al 1,5 del índice Russell Value (véase el gráfico 2).

Gráfico 2
Puntuación z del ratio PER proyectado

Información a 1 de diciembre de 2025. *Puntuación calculada desde 2010; para el resto de los índices, calculada desde el lanzamiento. †Tecnología en sentido amplio: tecnología, comercio minorista generalista, servicios y medios interactivos. Fuente: IBES, Bloomberg, BNP Paribas Asset Management.

 

Seguimos anticipando que la valoración del índice NASDAQ acabará volviendo a su valor medio de 21,3 veces; la duda es cuándo lo hará. No parece probable que el año próximo vayamos a asistir a un escenario como el de 2022, cuando una subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos provocó la caída del índice, ya que lo que se espera esta vez son recortes de tipos. Además, los economistas no prevén una recesión, ni una brusca desaceleración del crecimiento.

En un escenario más favorable, cabría esperar una apreciación más moderada del precio del índice que la subida del 21% registrada desde principios de año (hasta el 1 de diciembre), aun cuando los beneficios continúen aumentando. Una revalorización del índice del 10% con una previsión de aumento del 16% de los beneficios por acción daría lugar a una disminución del ratio PER.

Por tanto, el hecho de que las valoraciones sean elevadas no impide que el índice siga avanzando, aunque lo haga a un ritmo más lento que el crecimiento de los beneficios.

Mercados emergentes

El índice NASDAQ no es el único al que pueden recurrir los inversores para aumentar su exposición a la temática de la inteligencia artificial. Los mercados emergentes, y especialmente Taiwán, China y Corea del Sur, ofrecen oportunidades interesantes.

Aunque las valoraciones en relación con los datos históricos son similares a las del NASDAQ, las compañías tecnológicas de los mercados emergentes ofrecen dos ventajas fundamentales. Por un lado, las valoraciones en relación con el NASDAQ son comparativamente reducidas, con una puntuación z de -0,4 (véase el gráfico 2).

Además, las expectativas de crecimiento de los beneficios del sector tecnológico en los mercados emergentes, que se sitúan en el 30% en 2026 y 2027, son muy superiores a las de las compañías que componen el índice NASDAQ. Aun en el caso de que estas cifras acaben siendo demasiado optimistas, es probable que el crecimiento de los beneficios supere igualmente al de las empresas estadounidenses.

Asignación de activos

  • Seguimos siendo optimistas en relación con los activos de riesgo, que se ven respaldados por el sólido crecimiento de la economía mundial y por la orientación expansiva de las políticas monetarias. La renta variable estadounidense se ha visto favorecida por unos sólidos datos trimestrales de beneficios. Una vez reanudada la publicación de datos tras el cierre del gobierno, cualquier acontecimiento imprevisto podría afectar al mercado estadounidense de renta variable, que cotiza actualmente a unas valoraciones elevadas. La dinámica entre el riesgo y la rentabilidad es cada vez más asimétrica, lo que nos ha llevado a vender nuestra posición en el sector tecnológico estadounidense para recoger beneficios y a proceder a un cierre táctico de la posición.
  • Mantenemos una exposición sobreponderada a la renta variable japonesa, ya que pensamos que podría verse favorecida por los cambios estructurales que se están produciendo en la economía. Seguimos identificando oportunidades de valor en los mercados emergentes, tanto en renta variable como en renta fija. Pensamos que los bancos centrales de la región van a continuar o reanudar sus ciclos de recortes de tipos de interés en 2026. La heterogeneidad propia de las economías emergentes ofrece una valiosa diversificación a nuestro posicionamiento de riesgo.
  • Seguimos manteniendo una convicción positiva, aunque reducida, en el oro, que debería verse favorecido por el desequilibrio estructural entre la oferta y la demanda, especialmente por parte de los bancos centrales de mercados emergentes.

Global Macro: aprovechando ineficiencias en los rincones más remotos del mercado

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La experiencia colectiva del equipo Global Macro de Morgan Stanley Investment Management busca ofrecer acceso eficiente a los mercados y conocimiento profundo de infraestructuras únicas en más de 130 países. Los flujos cruzados en los mercados globales actuales presentan desafíos únicos para los inversores. Ya sea por posibles guerras comerciales, los avances de China en inteligencia artificial, el compromiso de la OTAN de aumentar el gasto en defensa, el retorno de Argentina al capitalismo o la revalorización de la moneda de Taiwán, la capacidad de interpretar las implicaciones de inversión nunca ha sido tan crucial.

En opinión del equipo de Morgan Stanley IM, estos flujos cruzados inevitablemente dan lugar a errores de valoración e ineficiencias en el mercado, lo que a su vez crea oportunidades de inversión para quienes cuentan con los recursos, la experiencia y la flexibilidad para descubrirlas. A continuación, se explica cómo la estrategia de Macro Global busca precisamente eso, y capturar valor para nuestros inversores.

¿Cómo puede beneficiar las rentabilidades absolutas de Global Macro a las carteras?

Como una estrategia de rentabilidades absolutas, Global Macro busca ofrecer a los inversores los siguientes objetivos clave:

  • Rentabilidades ajustadas al riesgo consistentemente sólidas.
  • Caídas limitadas en términos absolutos y relativas a otras clases de activos.
  • Diversificación efectiva de cartera, con sensibilidad cercana a cero frente a los mercados tradicionales de acciones y bonos.

Estos objetivos ofrecen a los inversores una amplia flexibilidad en cuanto a la asignación de la estrategia Global Macro:

  • Alternativa líquida. Global Macro suele a implementarse en vehículos de liquidez diaria, buscando beneficios históricos de diversificación sin empaquetar  los riesgos del mercado tradicional.
  • Complemento a la renta fija. La estrategia busca busca los beneficios de la renta fija —rentabilidad y mitigación de caídas— pero con sensibilidad limitada a cambios en tipos de interés, diferenciales de crédito y renta variable.
  • Puente entre bonos y acciones. El retorno histórico de Global Macro por encima de los T-bills a 90 días lo sitúa entre la prima de renta fija a largo plazo y la de renta variable.
  • Asignación flexible según la visión del mercado. Los inversores pueden ponderar más la estrategia cuando los activos tradicionales parecen caros, y reducirla cuando el panorama para dichos activos es más positivo.

 

La ventaja diferencial de Global Macro

Red de alcance amplio:

El equipo multidisciplinario de Global Macro está compuesto por más de 50 profesionales de inversión en Boston, Londres, Singapur, Nueva York, Washington, D.C., Abu Dhabi y Hong Kong, y cubre un universo de más de 130 países. La estrategia emplea un proceso de inversión descentralizado orientado a una construcción de cartera imparcial, donde el capital se asigna a posiciones con el perfil de riesgo/rentabilidad más atractiva.

Enfoque intenso en países:

El equipo de inversión genera ideas a través de un enfoque intenso en países individuales, especialmente aquellos que están en proceso de cambio estructural. Por ejemplo, actualmente, países como Egipto, Kazajistán y Argentina están implementando reformas positivas en política monetaria y fiscal, tipos de cambio y empoderamiento del sector privado.

Potencial de rentabilidad con riesgo preciso:

La investigación propia de Global Macro también identifica los factores de riesgo que pueden generar una rentabilidad positiva, y que pueden implementarse como posiciones largas o cortas, al tiempo que se eliminan o evitan factores que no aportan valor. 

Acceso a los mercados:

El trading es otra otra característica clave que distingue a Global Macro, gracias a un equipo de 14 personas en operaciones y trading integrado en el equipo. La experiencia colectiva del equipo busca ofrecer acceso eficiente los mercados y un conocimiento profundo de infraestructuras de mercado únicas en 130 países. Esta infraestructura permite una amplitud sin precedentes, eficiencias únicas y ejecuciones rentables.

Conclusión

El equipo de Morgan Stanley IM implementa estratégicamente las ideas derivadas de la investigación propia de Global Macro en sus estrategias, guiados por el potencial de riesgo y recompensa en crédito soberano, tipos de interés, mercados de divisas y otros factores en más de 130 países.

State Street IM: “El mercado europeo de ETFs está más fuerte que nunca”

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Antoine Lesné, Head of ETF Specialists EMEA de State Street Investment Managers, presentó en Madrid la visión macro y de mercados de la firma para 2026. Según explicó, el escenario base “no ha cambiado significativamente”, y la posibilidad de un soft landing “sigue abierta”. En términos globales, apuntó que el impacto de los aranceles “viene ligeramente retrasado”, por lo que consideran que “la ventana sigue abierta para el crecimiento”, con un avance que se mantendría en terreno positivo en EE.UU. y que “mejorará un poco en Europa”.

En renta variable, Lesné señaló que el mercado continúa impulsado por la inteligencia artificial, mientras que las grandes compañías estadounidenses “parecen caras de acuerdo con la mayoría de las métricas”. Sin embargo, subrayó que “no vemos un gran número de compañías que presenten valoraciones exuberantes” y defendió que los valores pequeños y medianos resultan “atractivos en términos absolutos”. En este contexto, destacó que una vía eficiente para ganar exposición a la IA, con sesgo growth y hacia small y mid caps, es la inversión en bonos convertibles, un segmento que este año “se ha visto bendecido” por la combinación de estos factores y por el aumento de las emisiones.

Lesné añadió que Europa “ha vuelto al territorio value”, aunque “Alemania parece cara”, y precisó que los mercados emergentes “están dando sorpresas positivas” apoyados por un dólar más débil y por los cambios estructurales en China, pese a que el posicionamiento inversor continúa “infraponderado en la región”.

En renta fija, el responsable de State Street describió 2025 como “una montaña rusa para la performance en EE.UU.”. No obstante, anticipó que el PIB estadounidense “se mantendrá en positivo” y podría entrar en una “fase expansiva” que, según indicó, aún no está reflejada plenamente en los indicadores macro, en referencia al contraste entre las lecturas negativas del PMI industrial y las positivas del PMI de servicios. 

Otro factor que, a su juicio, añadirá impulso a la economía estadounidense es el final del programa de reducción del balance de la Reserva Federal (QT), algo que calificó como “positivo en sí mismo”. State Street prevé que el PIB de EE.UU. alcance el 2,6% y espera que la Fed sea “más agresiva” en las bajadas de tipos que el consenso. En detalle, Lesné anticipa “3 bajadas hasta el segundo trimestre de 2026”. Para Europa, señaló que el BCE “quizás” podría recortar los tipos una vez más, con una previsión de crecimiento del 1,4%.

Donde la firma se muestra más cauta que el mercado es en China: Lesné anticipa un crecimiento del 4,4%, frente al 5% que estima el consenso.

¿Hacia dónde se está moviendo el dinero?

En un mercado donde la sospecha de burbuja ha empezado a copar titulares en los últimos meses, y muy dominado por el sentimiento, Lesné enfatizó la importancia de entender cuál es el posicionamiento de los inversores en los distintos tipos de activos. State Street realiza un análisis de flujos a partir de datos de custodios equivalentes a 4,5 billones de dólares de los activos globales (entre un 15% y un 20% del patrimonio mundial) que les sirve para obtener una aproximación de dicho posicionamiento. 

De acuerdo con State Street IM, en septiembre se registraron más de 47.000 millones de dólares en entradas netas hacia ETF, de los cuales 36.000 millones se dirigieron a ETFs de renta variable, llevando a Lesné a afirmar que “el mercado europeo de ETFs está más fuerte que nunca”.

Desde la firma indican que el posicionamiento en renta variable se mantiene elevado respecto a la historia reciente, y que en Europa los flujos hacia ETFs de renta variable han dado el sorpasso a los de renta fija. 

El experto interpreta este movimiento como el salto por parte de muchos de inversores “directamente de cash a renta variable, sin tocar la asignación a renta fija”.  Por categorías, la renta variable global fue la que atrajo más dinero en septiembre con 15.000 millones de dólares en entradas netas, seguida por la renta variable estadounidense, con suscripciones netas de 10.000 millones de dólares. Dicho esto, actualmente la firma detecta un mayor posicionamiento vía ETFs listados en Europa en renta variable estadounidense, frente a la preferencia por la renta variable europea vista particularmente en el primer trimestre del año; de hecho, Lesné indicó que en la firma venían constatando desde junio que “el movimiento de gran rotación desde activos estadounidenses a otras partes del mundo se está ralentizando”.

Al mismo tiempo, el responsable de State Street indicó que todavía hay áreas del mercado fuertemente infraponderadas en las carteras, como Reino Unido y mercados emergentes, particularmente la región Asia-Pacífico. No obstante, afirma que “los emergentes tienen más margen para ganar peso en las carteras”, y de hecho constata que los inversores compraron ETFs de mercados emergentes y de Japón en verano, y “un poco de EE.UU.”, y vendieron activos europeos. 

Por estilos, la polarización también está presente: Lesné describe una fuerte infraponderación del value, rentabilidad por dividendo y por factores de tamaño (small caps), mientras que ha prevalecido la sobreponderación en el estilo growth. La reflexión que hace de cara a esta recta final de año y mirando hacia 2026 es que los inversores necesitan “diversificar sus carteras con nuevos ángulos de inversión”. Por ejemplo, destaca que las mid caps “están menos apalancadas” que las small caps y presentan menor dependencia de lo que haga la Fed. Otra idea que lanza el experto es que los inversores deberían “seguir en EE.UU., pero estar más diversificados”, con ideas de inversión en convertibles, small caps y compañías que pagan dividendos estables y de forma consistente, por ejemplo. 

El posicionamiento de State Street IM 

La firma considera que el entorno actual es neutral, y en consecuencia han posicionado sus carteras con un tono ligeramente risk on. Por clases de activos, sobreponderan oro y materias primas y renta variable (con preferencia por small caps y mercados emergentes, ya que infraponderan la renta variable estadounidense salvo en exposiciones nicho) e infraponderan deuda soberana europea y REITs. 

De cara a lo que queda de año y en 2026, Lesné recomienda las conocidas estrategias Dividend Aristocrats and Free Clash Flow (FCF) Aristocrats, basados en la metodología propia de State Street Investment Management y que encajan con la idea ya citada de mantener exposición a Estados Unidos, pero buscando distintos ángulos de inversión. 

Para más información, visite State Street Investment Management

De la armonización de los UCITS al paso del ahorrador a inversor: 40 años de industria al calor de Europa

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Foto cedidaDe izquierda a derecha: Fernando Toledano, director de Desarrollo de Negocio de Cecabank; Jesús Pinilla, director de Administración y Medios de Kutxabank Gestión; Miguel López, director de Negocio de Ibercaja Gestión; Aurora Cuadros, directora corporativa de Securities Services de Cecabank; Rafael Valera, consejero delegado de Buy&Hold; Brenda Bol, Country Head de la sucursal de Cecabank en Luxemburgo; Jesús Sánchez-Quiñones, consejero director general de Renta 4 Banco; Elisa Ricón, directora de Regulación de Cecabank; y Ramón Cardil, director corporativo de Operaciones de Trea AM.

En el marco de la celebración de los 40 años de la puesta en marcha de la directiva UCITS en Europa, Cecabank ha reunido a la industria nacional para repasar los hitos que han dado forma al sector actual y hacia dónde camina ahora. En este sentido, palabras como armonización, apertura, regulación, transparencia, acceso a nuevos activos, asesoramiento, arquitectura abierta, tecnología y nuevos perfiles de inversores han reflejado las ideas que las gestoras nacionales han compartido. 

La directiva UCITS, aprobada en 1985 tras casi una década de negociaciones, sentó las bases para la creación de una industria sólida y armonizada en Europa. Hoy, los fondos UCITS superan los 15 billones de euros en activos gestionados -23 billones si se incluyen los fondos alternativos- y se han consolidado como una marca global sinónimo de transparencia, seguridad y prosperidad, tanto para inversores minoristas como institucionales. España, pionera en la armonización legislativa, aprobó en 1984 la primera Ley de Instituciones de Inversión Colectiva inspirada en esta normativa, anticipándose incluso a su entrada en vigor.

Durante estas cuatro décadas, la Directiva se ha modificado en más de veinte ocasiones, adaptándose a los cambios regulatorios y tecnológicos, y la industria española ha evolucionado hasta convertirse en un pilar del ahorro financiero de las familias.

“Miramos al pasado para reconocer nuestros orígenes, pero sobre todo analizamos el presente e imaginamos el futuro. Un futuro en el que Cecabank, como líder ibérico en depositaría, con más de 300.000 millones de euros depositados de medio centenar de gestoras, seguirá acompañando a la industria con rigor, innovación y compromiso, consolidando los fondos de inversión como un puerto seguro para el ahorro y la inversión”, ha destacado Ainhoa Jáuregui, consejera delegada de Cecabank.

El negocio de las gestoras

La conclusión de este viaje de cuatro décadas es que la industria española se encuentra en un punto de fortaleza, dinamismo y madurez, marcado por la fuerte evolución de la regulación. “En consecuencia, hemos vivido una importante profesionalización de todos los que intervienen en esta industria; muestra de ello es que los departamentos de riesgos y cumplimiento han experimentado un importante crecimiento y ganado relevancia en las organizaciones. En mi opinión, el mayor cambio que se ha producido tiene que ver con la introducción y desarrollo de la sostenibilidad”, reconoce Jesús Pinilla, director de Administración y Medios de Kutxabank Gestión.

A esta profesionalización, Ramón Cardil, director Corporativo de Operaciones de Trea AM, añade también la gran sofisticación de los productos y también del negocio de las gestoras. En su opinión, esto ha llevado a un entorno de alta competitividad, donde, según la visión de Cardil, las firmas se están orientando hacia la especialización, la calidad y el tamaño. “Vemos una clara tendencia de las gestoras hacia la especialización, para lo cual las compañías se están apalancando en sus productos y en su sofisticación. Además, hablamos de una industria de calidad soportada por una normativa restrictiva, que implica formación para nuestros profesionales, enfocada en la protección del inversor. Y, en tercer lugar, nos hemos configurado con modelos de negocio donde la escala es muy relevante, ya que las barreras de entrada y de mantenimiento son muy altas. Esta escalabilidad es necesaria para buscar la eficiencia”, explica Cardil.

Para Miguel López, director de Negocio de Ibercaja Gestión, estos años han demostrado que la industria tiene un gran dinamismo y capacidad de innovar y evolucionar. “Este dinamismo lo hemos visto tanto a nivel regulatorio; por ejemplo, con MiFID II pusimos el foco en la transparencia para, unos meses después, luego poner el objetivo en la sostenibilidad. Pero también dinamismo en la propia industria, ya que hemos vivido una consolidación muy fuerte y en 25 años, nuestros competidores han cambiado radicalmente”, matiza López.

La evolución de las redes de distribución

No solo el modelo de negocio de las gestoras ha evolucionado al calor de la directiva UCITS y del resto de la regulación europea, las redes de distribución, que son las que más cerca están del inversor y de los productos que demandan, han experimentado un notable cambio. “Aún recuerdo todo lo que teníamos que estudiar hace 30 años para poder explicar a un inversor algo tan básico como qué era un fondo de inversión. La llegada de los UCITS supuso una apertura a nuevos productos de inversión que, poco a poco, se fueron volviendo más sofisticados. Además, vivimos el fuerte cambio cultural de abrirnos a fondos de terceros y a la arquitectura abierta, ampliando de nuevo el abanico de posibilidades para los inversores. La evolución nos ha llevado a que deje de tener valor el qué, es decir, qué fondo o qué vehículo, para que el valor esté en el para qué, es decir, a estar más orientados en el asesoramiento”, ha afirmado Laura Comas, directora de Desarrollo y Transformación de Caixabank Wealth Management.

En opinión de Emilio Mejía, consejero delegado de Unicaja Asset Management, las redes de distribución han vivido cambios significativos a consecuencia de los cambios regulatorios, pero el principal cambio ha sido esa reorientación del producto al asesoramiento. “Coincido en que hemos pasado de un enfoque de producto a un enfoque de cliente, todo ello sustentado por la regulación. Ahora bien, creo que la velocidad de los cambios de los próximos cuatro años será mucho mayor que la experimentada los últimos 40”, ha señalado. 

Esta evolución en el enfoque de las redes de distribución ha tenido su reflejo en cómo ha cambiado la cartera de los inversores. Ignacio Izquierdo, Regional Manager Iberia de Allfunds, ha recordado como el punto de partida hace cuatro décadas eran los depósitos y la renta fija, con algunas acciones concretas. “La irrupción de los UCITS revolucionó esto y cambió las carteras de los inversores ofreciendo productos con liquidez, dando acceso a la diversificación, y cambiando el paradigma de las carteras que tenían esos clientes. Además, la Directiva sirvió para armonizar, es decir, para crear un concepto de mercado europeo. Hoy me llama la atención la falta de esa armonización en los productos alternativos. La falta de un mercado de capitales europeos hace que todo esté fragmentado. Puede que los ELTIFs se acaben convirtiendo en una estructura como son los UCITS ahora, pero aún no estamos en eso; por lo que estamos perdiendo mucha eficiencia, es ineficiente para el inversor final”, ha destacado Izquierdo.

Según la visión de Comas, en el entorno actual, las redes de distribución están demostrando que tienen un valor añadido en el asesoramiento que ofrecen, ya que se ha convertido en un factor fundamental para acceder a los productos de inversión. “Para el inversor sigue siendo complejo elegir los productos de inversión; esto no es como entrar a un supermercado, básicamente porque a veces el inversor no sabe qué quiere o qué es lo que necesita para cumplir con sus objetivos. Poder ofrecer ese asesoramiento, puntual o recurrente, y que se responda a un pago explícito aporta una primera capa de valor al inversor por encima del propio producto. Ahora bien, a veces el regulador hace complejo llevar ese asesoramiento a algunos modelos de negocio como, por ejemplo, las plataformas. Creemos que el regulador también tiene que colaborar en ese paso del ahorrador a inversor, y ayudar a que el inversor vea más allá del fondo y busque el asesoramiento”, ha defendido durante su participación en el evento.

40 años también para el inversor

Si los UCITS supusieron un cambio en el modelo de negocio de las gestoras y del valor de las redes de distribución, la industria coincide en que, sin duda, el inversor fue el gran beneficiado de su consolidación. “Hace 40 años, las carteras eran super sencillas y centradas en depósitos; ahora vamos camino de reducir su presencia y que el peso de los fondos de inversión sea mucho mayor”, ha matizado Izquierdo. 

Según la experiencia del CEO de Unicaja AM, el inversor sigue siendo conservador. “Creo que ese carácter conservador se explica principalmente con tres factores: las redes comerciales, que aportan esa confianza y seguridad -lo que explicaría que los bancos sigan representando dos tercios de la comercialización de los vehículos de inversión-; la concepción que se tiene de la vivienda como activo de más valor frente a la cultura inversora de otros países; y el horizonte de inversión que tiene el inversor”, ha afirmado Mejía. 

Para López, un gran cambio en el inversor es que ahora busca asesoramiento, lo cual también encaja con el cambio que ha sufrido su cartera. “Los inversores quieren un buen asesoramiento que les permita aspirar a una buena rentabilidad y nuestra obligación como ‘fabricantes de productos’ es poner una gama de soluciones amplias y adaptadas a las necesidades de cualquier perfil. Tenemos que hacer esto desde un enfoque innovador, como ha demostrado la industria española con la gestión discrecional, y la apertura a nuevos activos. El entorno de mercado ha cambiado y las tradicionales carteras 60/40 parecen no estar ya vigentes. Nos toca volver a reinventarnos, una reinvención que tiene que pasar por una nueva interpretación de la diversificación. En el caso de estas carteras tradicionales, vemos cómo se está introduciendo un tercer pilar de rentabilidad, diversificación y descorrelación a través de activos alternativos, materiales preciosos o materias primas”, ha comentado el director de Negocio de Ibercaja Gestión.  

Respecto a los inversores más jóvenes, Mega ha añadido que presentan una mayor demanda por la arquitectura abierta, por nuevos activos -entre ellos los activos digitales-, y también por los canales digitales. “Aunque está claro que el grueso de ese paso de ahorrador a inversor corresponde a un perfil de gente más mayor, ya que tiene un mayor patrimonio, esta generación más joven también se va a incorporar al ecosistema de la inversión y va a suponer un cambio relevante. Por suerte, contamos con una regulación robusta que nos permita realizar esos cambios a gran velocidad”, ha defendido.

Una mirada al futuro

A la hora de hablar del futuro de la industria, Rafael Valera, consejero delegado de Buy&Hold, defiende que habrá que aplicar el “sentido común”, primero para no perder competitividad y poder gestionar los riesgos que “están fuera del radar y de los manuales”.  “La tecnología y la inteligencia artificial, todo ello basado en la tecnología blockchain, va a tener un impacto determinante en los modelos de negocio de esta industria porque se va a desintermediar mucho. Hay que tener en cuenta que los nuevos jugadores digitales que entren en el negocio, lo harán tirando el precio”, ha afirmado Valera. 

En línea con esta disrupción tecnológica, Jesús Sánchez-Quiñones, consejero director general de Renta 4 Banco, ha señalado que el otro gran cambio para la industria llegará con la tokenización de los fondos de inversión: “Esto va a ser una revolución. Supondrá que los plazos se acortan en la inversión y que aparecerán nuevos riesgos. Esta tendencia se suele confundir con activos digitales tan significativos como el bitcoin, pero la revolución vendrá por la tecnología blockchain que está detrás”. Fuera del ámbito tecnológico, ha defendido que la otro gran salto para la industria sería “coger la oportunidad que está dando Europa para tener un vehículo con ventajas fiscales, que promuevan el ahorro año a año. Esto sería un espaldarazo tremendo para la industria española”.

En este futuro, las gestoras españolas consideran que el paso del ahorrador a inversor es una oportunidad de crecimiento, donde el asesoramiento tendrá un papel fundamental para movilizar todo ese ahorro. “El futuro pasa más por el servicio que por el producto. Estamos preparados para aportar valor al cliente del futuro, siendo conscientes de que buscará otros canales y que tendrá que afrontar otras realidades, como su longevidad, el alto coste de la vivienda o su incorporación más tarde al mercado laboral. Nuestro reto de los próximos años es ser capaces de aportarles valor y cumplir con sus necesidades financieras, y, en ese sentido, nos la vamos a jugar en la calidad del producto”, ha señalado López.

A esta reflexión, Cardil ha añadido un matiz, por no decir una petición: “Para este futuro, necesitamos que el regulador vaya a la velocidad que debe ir. Tienen un trabajo duro por delante, pero tienen que ser capaces de acompañar esa velocidad”.

 

Renta fija al alza e impulso de la IA: las claves de Columbia Threadneedle 2026

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Columbia Threadneedle Investments prevé para 2026 un escenario de crecimiento global moderado, con un entorno especialmente favorable para la renta fija gracias a un ciclo generalizado de bajada de tipos y a un contexto constructivo para la renta variable impulsado por la mejora de beneficios y el avance de la inteligencia artificial.  De acuerdo con la gestora, 2026 será un año de crecimiento global moderado pero resistente – entre el 2,5% y el 3% – impulsado por el consumo, la inversión tecnológica y políticas fiscales más expansivas, aunque condicionado por el impacto persistente de los aranceles sobre los precios y las cadenas de suministro. 

Según su visión, las economías desarrolladas crecerán en torno al 1,5%, frente al 4% previsto para los países emergentes, favorecidos por un dólar más débil y condiciones financieras más flexibles. A escala global, la inflación mostrará un panorama fragmentado y seguirá moderándose hasta el 2,9% en el G20, aunque persistirán riesgos derivados de las tensiones comerciales y los costes energéticos.

Estima que, en Estados Unidos, la inversión en inteligencia artificial seguirá sosteniendo la actividad pese a un mercado laboral menos dinámico y una inflación cercana al 3%, que llevará a la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) a bajadas graduales de tipos. Europa se beneficiará de mejores condiciones de financiación y estímulos en infraestructuras, con una inflación próxima al 2% y un crecimiento cercano al 1%. Asia mostrará un ritmo desigual, con China desacelerando hacia el 4,4% e India consolidándose como el principal motor regional.

En palabras de Ruben García Páez, director general para Iberia y Latam de Columbia Threadneedle Investments, “2026 será un año de resiliencia con riesgos, donde la gestión activa y la diversificación serán esenciales para capturar oportunidades. En este contexto, los inversores deben pensar en tres dimensiones: entre clases de activos -renta variable, renta fija y alternativos-; regiones -EE.UU., Europa y mercados emergentes-; y temáticas como, por ejemplo, inteligencia artificial, resiliencia fiscal o transición energética”.

Momento favorable para la renta fija

Columbia Threadneedle proyecta que 2026 será un año favorable para la renta fija, aunque no exento de riesgos. Según su visión, si bien la Fed ha iniciado en 2025 un ciclo de recortes preventivos, el mercado descuenta una bajada de tipos mucho más profunda – de hasta 175 puntos básicos entre 2025 y 2026 -, una expectativa que podría no cumplirse y que abre oportunidades para los inversores. En su escenario base, la gestora sitúa los rendimientos del Tesoro a 10 años en torno al 4% y el crédito con grado de inversión cerca del 5%, lo que configura una propuesta de valor atractiva en un entorno de inflación moderándose hacia el 3%. 

A partir de este punto, la firma identifica focos claros de oportunidad: préstamos al consumo; valores respaldados por hipotecas de agencias como alternativa más interesante al crédito corporativo; necesidades de financiación derivadas del despliegue de infraestructuras de inteligencia artificial y los bonos de mercados como Japón, Francia o Australia, además de oportunidades selectivas en deuda emergente. Asimismo, Columbia Threadneedle ve recorrido en los préstamos apalancados como extensión del universo high yield.

“En un entorno marcado por la dispersión crediticia, el posible enfriamiento del mercado laboral y el impacto retardado de los aranceles, apostamos por duración, rentabilidad y una diversificación disciplinada como claves para capear la volatilidad y capturar oportunidades en renta fija”, señala Roman Gaiser, responsable de Renta Fija para EMEA en Columbia Threadneedle Investments

Visión constructiva en renta variable

Columbia Threadneedle mantiene una visión constructiva para la renta variable en 2026 y pronostica un mayor abanico de oportunidades para la inversión selectiva y diversificada, apoyada por una política monetaria más relajada, el impulso de la inteligencia artificial y la expansión fiscal en Europa, junto con las reformas estructurales en Japón. En Estados Unidos, la gestora prevé que los beneficios empresariales vuelvan a ser un motor esencial del mercado, con un crecimiento robusto y ganancias de un dígito alto. 

En este sentido, Nicolas Janvier, director de Renta Variable Norteamericana de Columbia Threadneedle Investments, apunta que “las compañías estadounidenses han demostrado una notable capacidad para adaptarse a aranceles más altos y a un entorno más exigente, y esa resiliencia será un pilar fundamental en 2026”. 

Según la visión de la gestora, la tendencia a la baja de los tipos de interés y la ampliación de inventarios deberían favorecer a sectores que han atravesado años más complejos, mientras que Europa y Japón podrán avanzar al ritmo de Estados Unidos, con un conjunto más amplio de sectores – incluidos defensa y financiero – capaces de generar valor.

A pesar de los riesgos a medio plazo, como la fragmentación política o el elevado endeudamiento público, Columbia Threadneedle ve poco probable una corrección significativa en los valores ligados a la inteligencia artificial, pese a sus valoraciones elevadas, gracias a la combinación de tipos más bajos y un crecimiento de beneficios previsto de cara a 2026.

Olvídese de los stablecoins, abran paso al “dinero programable”

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Los tiempos van rápido y la industria financiera empieza a escuchar hablar del “dinero programable”, un nuevo animal dentro del sistema de pagos que tiene un uso mucho más claro y útil que el de sus hermanos digitales: las criptomonedas.

Definición de una innovación

¿Qué es el dinero programable?, Ronit Ghose, Head of Future of Finance del Citi Institute lo resume en un párrafo: “A diferencia del dinero tradicional o incluso de las primeras formas de dinero digital, el dinero programable incorpora lógica automática: cada unidad monetaria puede tener reglas preestablecidas que determinan cómo, cuándo y bajo qué condiciones se mueve o se utiliza”.

Esto no solo acelera las transacciones, sino que convierte cada pago en una operación inteligente: con liquidación en tiempo real, cumplimiento normativo integrado desde su origen y trazabilidad total.

Los smart contracts cambian la contabilidad tal y como la conocíamos

Según el experto, este enfoque cambia radicalmente la forma en que las empresas, y en particular los departamentos de tesorería corporativa, gestionan sus finanzas. En lugar de depender de reconciliaciones manuales, aprobaciones posteriores o sistemas fragmentados, las transferencias pueden automatizarse mediante “contratos inteligentes” (smart contracts) que ejecutan pagos cuando se cumplen ciertas condiciones — por ejemplo, cuando una mercancía ha pasado la aduana, cuando un hito de proyecto se completa, o cuando una factura es aceptada. Esto permite optimizar la liquidez en tiempo real, sincronizar pagos entre múltiples filiales y monedas, y reducir drásticamente los retrasos o errores humanos.

Para las instituciones financieras reguladas —bancos y grandes corporaciones— el atractivo fundamental del dinero programable radica en la posibilidad de integrar el cumplimiento normativo directamente en la capa transaccional.

“Las reglas regulatorias, los umbrales de riesgo, las validaciones de contraparte o de jurisdicción, pueden codificarse en el propio token monetario. En consecuencia, cada operación no solo se ejecuta automáticamente, sino que deja un rastro completo, auditable y verificable, con validaciones previas al pago. Esto transforma la función de cumplimiento de algo reactivo (revisar después del hecho) a algo proactivo, automático y permanente”, explica Ronit Ghose.

Los expertos de Citi estiman que este tipo de transacciones tokenizadas podrían crecer dramáticamente en los próximos años, llegando a volúmenes enormes, quizá superiores incluso a los del segmento de stablecoins hoy dominante.

Existen dificultades técnicas y operativas para que el “dinero programable” se convierta en una realidad como la necesaria interoperabilidad entre distintas cadenas o redes de pago, cuestiones de privacidad, tratamiento contable, normalización regulatoria y adaptación de sistemas heredados.

Pero el impulso es claro, asegura Ronit Ghose: “Muchas instituciones ya están pasando de pruebas piloto a implementaciones de escala empresarial, en colaboración con reguladores que preparan marcos normativos para activos digitales. Si este proceso continúa, la gestión financiera, la liquidez corporativa y el cumplimiento regulatorio podrían redefinirse profundamente”.

Deutsche Bank España nombra a Ben Turnbull nuevo miembro de su consejo de administración

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Deutsche Bank España ha anunciado la incorporación de Ben Turnbull a su Consejo de Administración. Turnbull cuenta con una trayectoria de más de 25 años en el sector financiero, más de 15 de ellos en Deutsche Bank ocupando cargos directivos.

El nuevo consejero Ben Turnbull, es desde 2021 CFO del clúster regional (Bélgica, España, Polonia, Portugal, Italia y Suiza) de Deutsche Bank, donde habitualmente desempeña funciones relacionadas con control financiero, análisis estratégico y gestión empresarial. Compatibiliza esta responsabilidad como Managing Director dentro del área financiera de Deutsche Bank desde 2023.

A lo largo de su carrera en Deutsche Bank, Turnbull ha desempeñado diversos cargos de alta dirección en áreas como Infraestructure Finance y Global Prime Financial Product, impulsando iniciativas de transparencia financiera, optimización de costes, mejora de procesos y modernización de modelos operativos. Ha liderado proyectos globales de transformación, incluidos programas de implementación de SAP 4 Hana y de driver-based costing, así como múltiples foros de riesgo, control y eficiencia operativa.

Con una sólida experiencia en gestión financiera, transformación operativa y gobierno corporativo, Turnbull forma parte del Regional Finance Executive Committee y participa activamente en la definición de la estrategia a medio y largo plazo, destacando su rol en el proceso de planificación anual del Grupo y su interlocución directa con el CFO global.

Asimismo, es miembro del Group Investment Committee Delegates, órgano encargado de revisar y valorar decisiones de inversión estratégicas. Turnbull es miembro del Institute of Chartered Accountants en Inglaterra y Gales (ICAEW) y licenciado en Matemáticas por la Universidad de Nottingham.

Este nombramiento continúa reforzando la estructura de gobierno corporativo del banco y su proyección global. De este modo, el Consejo de Administración de Deutsche Bank España queda configurado de la siguiente manera:

  • Consejero y Presidente del Consejo de Administración
    • D. Antonio Rodríguez-Pina Borges
  • Consejeros
    • D. Íñigo Martos Blázquez
    • D. Christian Nolting
    • D. Jan-Philipp Gillmann
    • Dña. María González-Adalid Guerreiro
    • Dña. Miriam González-Amézqueta López
    • Dña. Sonsoles Seoane García
    • Dña. Francesca Dalla Giovanna
    • D. Christian Berendes
    • D. Ben Turnbull
  • Secretaria no Consejera
    • Dña. Nieves Estévez Luaña
  • Vicesecretaria no Consejera
    • Dña. Aurora López-Barrajón Moren

Guillaume Allard, nuevo CEO de La Française Real Estate Managers

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Foto cedidaGuillaume Allard, CEO de La Française Real Estate Managers.

Grupo La Française, la filial de gestión de activos de Crédit Mutuel Alliance Fédérale, ha anunciado el nombramiento de Guillaume Allard como CEO de La Française Real Estate Managers (REM), con efecto a partir del 1 de enero de 2026.

Guillaume, que anteriormente ocupaba el cargo de director general adjunto y responsable de Fondos y Finanzas de la división Retail de La Française REM, sucede a Philippe Depoux, que se jubila. En su nuevo cargo, Guillaume contará con el apoyo de un equipo directivo compuesto por Virginie Wallut, Antoine Le Treut, Thierry Molton y David Rendarll para definir una nueva organización articulada en torno a tres áreas prioritarias: Estrategia, Activos y Oferta de productos.

Además, durante la reunión del Consejo de Supervisión del Grupo La Française celebrada el 9 de diciembre, Guillaume Allard fue nombrado miembro del Consejo Ejecutivo de la empresa, con efecto a partir del 1 de enero de 2026. Guillaume asumirá todas las responsabilidades que anteriormente desempeñaba Philippe Depoux.

“Me complace confiar a Guillaume estas nuevas responsabilidades, que son una extensión natural de su función en La Française REM y se ajustan perfectamente a su experiencia financiera y a su profundo conocimiento de los mercados inmobiliarios. El sector inmobiliario sigue siendo una piedra angular de la estrategia de crecimiento de La Française, y estoy seguro de que Guillaume estará a la altura de este nuevo reto. También me gustaría expresar mi más sincero agradecimiento a Philippe por su dedicación y contribución al desarrollo del grupo durante su mandato en La Française”, ha señalado Guillaume Cadiou, CEO del Grupo La Française. 

Guillaume Allard, de 41 años, comenzó su carrera en 2007 en DTZ Eurexi como director de proyectos, y posteriormente se incorporó a La Française Real Estate Managers en 2011, primero como gestor de carteras inmobiliarias y más tarde como gestor de fondos inmobiliarios. En 2017, fue ascendido a director de gestión de fondos SCPI y, en 2021, asumió la responsabilidad de la financiación de fondos minoristas. En 2023, Guillaume fue nombrado director general adjunto de La Française Real Estate Managers.