La última reunión de la Comisión Clasificadora de Riesgo (CCR), la entidad encargada de determinar en qué instrumentos pueden invertir las AFPs chilenas, estuvo especialmente activa. Según informó la entidad en su último reporte, la reunión realizada a fines de octubre dio luz verde a una variedad de inversiones, incluyendo 37 ETFs, un fondo mutuo y una serie de acciones que cotizan en Perú.
La gestora que más destacó entre las aprobaciones del último mes fue Xtrackers, el brazo de ETFs de DWS. La firma consiguió el visto bueno de la entidad para poder ofrecer 25 de sus estrategias UCITS de renta variable, un amplio espectro de estrategias que incluye distintos sectores –salud, TI, energía, etc– y distintos mercados, tanto desarrollados como emergentes. Incluso hay una estrategia de inteligencia artificial y big data y una de renta fija –de bonos corporativos de corta duración– en dólares.
HSBC también recibió el visto bueno para siete de sus ETFs de renta variable, una estrategia de acciones estadounidense, una de europeas y cinco de distintos mercados asiáticos.
A estos ETFs se sumaron otros vehículos indexados. De Global X, entraron a la lista de instrumentos aprobados los fondos MSCI Argentina y Russell 2000; de Invesco, los vehículos Global Active ESG Equity y Global Enhanced Equity; y de Putnam ETF Trust, la estrategia Focused Large Cap Value ETF.
Otros instrumentos agregados
Si bien la batería de fondos cotizados se llevó el protagonismo de la última reunión de la CCR, otros instrumentos también consiguieron la autorización.
Uno de ellos es el fondo mutuo Emerging Market Corporate Investment Grade Bond de UBS, un vehículo heredado de Credit Suisse registrado en Luxemburgo.
Por el lado de las acciones, también aprobaron los títulos de empresas extranjeras que estén inscritas y coticen en la Bolsa de Valores de Lima y que estén incluidas en el índice de referencia MSCI Nuam Perú Select Capped 15%.
“A contar de esta fecha, el índice S&P/BVL Perú Select Index dejará de ser referencia para la aprobación de acciones de dicha bolsa”, indicó la CCR en su comunicado.
La Bolsa de Lima está en proceso de integración operacional con la Bolsa de Santiago y la Bolsa de Valores de Colombia, todas bajo la matriz Nuam. Uno de los pasos que ya han tomado es la creación de una familia de índices benchmark en la región andina.
La histórica supremacía del dólar estadounidense como divisa de reserva global está cada vez más cuestionada. Los giros en la política exterior de EE.UU., las dudas sobre la sostenibilidad fiscal del país y la erosión de la confianza en sus instituciones bajo la presidencia de Trump están impulsando a los inversores internacionales a diversificar y alejarse de la divisa. El euro está emergiendo como una alternativa creíble y que la independencia del BCE, junto con el respeto al Estado de derecho, podrían otorgarle una ventaja a largo plazo. Destacamos que un mayor uso del euro como divisa de reserva lo haría más estable durante las recesiones cíclicas y probablemente reduciría los costes de financiación de los gobiernos europeos. A más largo plazo, el aumento de la demanda y la pérdida del excepcionalismo estadounidense deberían permitir una mayor apreciación del euro, que en la actualidad difícilmente puede considerarse sobrevalorado. Con todo, reconocemos que este es un proceso largo y lleno de obstáculos por superar.
Una vía para incrementar la demanda de euros sería acelerar el desarrollo del euro digital. Iniciado en 2021, el proyecto del BCE para crear una moneda digital de banco central (CBDC) ha avanzado hasta la fase de preparación, abriendo la puerta a su futura emisión. Mientras tanto, la administración Trump ha optado por un camino distinto. La Orden Ejecutiva 14178, firmada el 23 de enero, prohíbe a las agencias federales desarrollar y emitir un dólar digital como CBDC, mientras que la GENIUS Act, promulgada el 18 de julio, estableció el marco legal para las stablecoins basadas en el dólar en el mercado estadounidense. Esta ley refuerza la supremacía del dólar en el ámbito de los activos digitales y consolida su papel como divisa de reserva global al generar una demanda adicional de activos tradicionales denominados en dólares. Para el BCE, que aspira a reforzar la relevancia del euro como divisa de reserva internacional, la GENIUS Act representa una mala noticia, pues implica que Europa debería acelerar la creación del marco jurídico necesario para la introducción del euro digital.
En principio, el euro digital ofrece ventajas sustanciales respecto a su versión no digital, lo que también podría otorgar al euro una ventaja significativa frente a otras monedas locales en el futuro. De forma similar a las stablecoins, el euro digital incrementará la eficiencia de los pagos al permitir liquidaciones en tiempo real o casi instantáneas, mejorando especialmente los pagos transfronterizos. Al reducirse la necesidad de intermediarios como bancos o compañías de tarjetas de crédito, es probable que las comisiones de transacción caigan de manera drástica. Además, la introducción del euro digital impulsaría la inclusión financiera al ofrecer opciones de pago a personas sin cuenta bancaria, en particular en zonas remotas o desatendidas. Lo más importante es que, al estar respaldado por el BCE, el euro digital estaría libre de riesgo de impago, lo que supondría una ventaja competitiva frente a las stablecoins privadas respaldadas por dólares. Por último, el euro digital reforzaría la autonomía monetaria y estratégica, reduciendo la dependencia de sistemas de pago no europeos —como las compañías estadounidenses de tarjetas de crédito o las carteras digitales de las grandes tecnológicas—, al tiempo que mejoraría la transparencia de las transacciones y respaldaría los esfuerzos de lucha contra el blanqueo de capitales.
Artículo escrito porClaudio Wewel, estratega de divisas en J. Safra Sarasin Sustainable AM.
La Clasificación Europea de Fondos (EFC) es un sistema desarrollado por la industria europea para clasificar fondos de inversión de manera objetiva, transparente y gratuita. Está gestionado por la Asociación Europea de Fondos y Gestión de Activos (Efama, por sus siglas en inglés) y es único en el sentido de que es propiedad y está controlado íntegramente por la propia industria, no por entidades comerciales. Ahora bien, ¿sigue siendo útil frente al entorno regulatorio y de mercado actual?
Para dar respuesta a esta pregunta, Efama ha realizado una evaluación del EFC, cuya conclusión es clara: es sólido y mantiene su valor como estándar fiable para la industria. Según explican, gran parte de su robustez se debe a que clasifica los fondos según la composición real de sus carteras, en lugar de hacerlo por etiquetas comerciales. “Es gratuito y está diseñado para garantizar la objetividad, la transparencia y la comparabilidad entre productos de inversión”, señalan.
Destacan que el EFC es actualmente el sistema de clasificación más “inclusivo para fondos UCITS”, incluyendo más de 43.000 fondos o 200.000 clases de acciones, basándose en criterios transparentes y orientados a la cartera. Su evaluación señala que es altamente adaptable “tanto para la industria como para los organismos reguladores, ya que integra una amplia gama de atributos de datos”, matizan.
Además, consideran que proporciona grupos de fondos coherentes y representativos, con distribuciones de rendimiento dentro de las categorías EFC que “son consistentemente más estrechas que las del universo general de fondos”. Por último, destacan que este sistema de clasificación captura con éxito patrones empíricos clave en el rendimiento de los fondos y la dinámica general del mercado.
“Nuestro análisis confirma que el EFC es un marco de clasificación fiable y coherente. Al agrupar eficazmente fondos con características similares y conservar patrones de mercado ampliamente observados, el EFC ofrece a inversores, gestores de activos y responsables políticos mayor transparencia y precisión analítica. Este tipo de claridad es esencial en el dinámico panorama financiero actual”, afirma Vera Jotanovic, economista senior en Efama.
Por su parte, Tanguy van de Werve, director general de Efama, considera que la Clasificación Europea de Fondos es una pieza clave para la transparencia del mercado y la protección del inversor. “Como estándar propiedad de la industria y gestionado por ella, fortalece las bases para una política basada en evidencia, una supervisión informada y mercados de capital eficientes. Animamos a una mayor adopción y reconocimiento del marco EFC en toda Europa para mejorar la coherencia en la presentación de informes de fondos y la evaluación de productos”, concluye.
Los dividendos globales siguen batiendo récords, reflejando la resiliencia y solidez de las empresas a nivel mundial. Según el informe Dividend Watch, parte del Global Equity Study de Capital Group, los dividendos interanuales brutos aumentaron un 6,2%, alcanzando 518.700 millones de dólares en el tercer trimestre de 2025, la cifra más alta registrada para este periodo. Destaca que, ajustando factores puntuales, tipos de cambio y calendario, el crecimiento de los dividendos “core” fue del 6,1%.
«El tercer trimestre continuó con el fuerte crecimiento de los dividendos globales, prolongando una secuencia de cuatro años de máximos trimestrales. La diversificación mundial permite a los inversores acceder a fuentes duraderas de crecimiento, desde Estados Unidos y su mercado diverso hasta tendencias sectoriales y regiones con expansión significativa, como Europa. Las empresas que pagan y aumentan sus dividendos consistentemente suelen mostrar beneficios sólidos, flujo de caja saludable y gestión disciplinada, siendo un punto de referencia incluso en tiempos de incertidumbre», apunta Christophe Braun, director de Inversiones en renta variable de Capital Group.
Desde una perspectiva sectorial, casi la mitad del aumento global en el tercer trimestre provino del sector financiero, que registró un crecimiento de los dividendos core del 11%, exactamente el doble que el resto de sectores combinados (5,5%). El crecimiento más rápido se produjo en el sector de las aseguradoras, cuyos dividendos ascendieron a 18.000 millones de dólares, lo que supone un aumento del 18,6% en términos core, mientras que los bancos registraron un aumento del 8 % y las entidades financieras en general del 16,1%.
Según muestra el informe, entre enero y septiembre, los bancos, las entidades financieras generales y las aseguradoras fueron los tres sectores que más contribuyeron en dólares estadounidenses al aumento de los pagos globales, con un incremento de los dividendos de 44.000 millones de dólares. En todo el mundo, el 88% de las empresas aumentaron sus dividendos o los mantuvieron estables en el tercer trimestre, y el crecimiento medio de los dividendos fue del 5,7%.
Visión por geografía
Si hacemos un análisis de cómo ha sido la distribución de dividendos por geografía, destaca que los pagos récord en EE.UU. alcanzaron 179.300 millones de dólares, con un crecimiento core del 5,7 %. «En los últimos 15 años, solo se registraron dos trimestres consecutivos de descenso, ambos durante la pandemia», apunta el informe. En cambio, en Europa, Polonia y España impulsaron la mitad del crecimiento regional (10,2 % core). Según el documento, los dividendos europeos subieron 6,1% en términos core, y en España, los pagos alcanzaron 5.200 millones de euros, con un aumento del 13,5%, liderado por el sector eléctrico.
Otro mercado clave fue Japón. El país mantuvo su rápido crecimiento de los dividendos en el tercer trimestre (13%, core), pero los patrones estacionales hicieron que no fuera un importante motor de crecimiento a nivel mundial. «Los pagos de Hong Kong aumentaron casi una sexta parte (15,4 %) en su temporada alta de dividendos y no hubo recortes entre las empresas incluidas en el estudio. Sin embargo, en China no hubo crecimiento en términos core y más de un tercio de las empresas redujeron la distribución», señalan las conclusiones.
Respecto a otros mercados, el informe indica que el rendimiento del Reino Unido fue moderado, con un descenso del crecimiento de los dividendos core del 0,9 %. Los mercados emergentes registraron un rápido crecimiento (11,2 %, core), en particular India, ArabiaSaudí, Sudáfrica y México. Por último, Australia fue un punto débil, con una nueva caída de los pagos en el tercer trimestre (7,4 %, core), impulsada por los recortes en los sectores minero y energético, lo que situó al país en la última posición de la clasificación mundial en lo que va de año entre los principales mercados.
La próxima década será decisiva para las familias más ricas del mundo. Las transiciones generacionales, el optimismo económico y los rápidos avances tecnológicos están transformando la forma en que los family offices administran y preservan el patrimonio intergeneracional, de acuerdo al estudio Transition on the horizon for family offices de Bank of America Private Bank.
Con un 87% de family offices aún sin entregar a la siguiente generación —y un 59% de ellos esperando esa transición dentro de los próximos 10 años— los cambios de liderazgo están preparados para introducir nuevos enfoques en la inversión, la filantropía y el uso de la tecnología. De hecho, entre las oficinas familiares con principios menos involucrados, el 73% de los encuestados espera que la siguiente generación redefina la misión o el propósito de la oficina.
Según la investigación, la filantropía tendrá un mayor peso. Con líderes más jóvenes que priorizan el impacto social, el 51% de las oficinas familiares espera que los objetivos y la estrategia filantrópica jueguen un papel mayor después de la sucesión. El 7% de las oficinas se fundaron principalmente para servir misiones filantrópicas o de legado, según BofA Private Bank.
“A medida que las generaciones más jóvenes asumen roles de liderazgo, están preparadas para redefinir lo que significa gestionar riqueza multigeneracional —desde la integración de la inteligencia artificial hasta la ampliación de las misiones filantrópicas”, señaló Elizabeth Thiessen, jefa de Soluciones para Oficinas Familiares de Bank of America Private Bank. “Esta evolución configurará la oficina familiar moderna para las generaciones por venir”, agregó.
El estudio inaugural encuestó a 335 responsables de toma de decisiones de oficinas familiares en Norteamérica para entender cómo están evolucionando estas organizaciones. Los principales hallazgos incluyen:
Principales desafíos hoy: Las oficinas familiares identificaron sus desafíos más urgentes como invertir, hacer crecer y preservar la riqueza (64%), planificar el futuro (56%), uso estratégico del crédito (50%) y navegar la tecnología (44%).
Innovación mediante IA y automatización: Más de la mitad (57%) de las oficinas familiares han utilizado inteligencia artificial para investigación de inversión y estrategia. La automatización se usa ampliamente para pronósticos (76%), análisis de inversiones alternativas (74%) y modelado de portafolios (73%).
Fuerte optimismo económico: Más del 60 % de las oficinas familiares espera crecimiento en los mercados bursátiles estadounidenses, capital privado y actividad de fusiones y adquisiciones en el próximo año. Entre oficinas que gestionan 500 millones de dólares o más, más de la mitad anticipan un aumento del PIB de EE.UU.
Las inversiones alternativas ganan prioridad: Los portafolios de oficinas familiares están ahora casi equitativamente divididos entre valores negociables y alternativas. El capital privado, las inversiones directas en empresas y los bienes raíces son vistos como las oportunidades más prometedoras.
Complejidad operativa: Las oficinas familiares supervisan operaciones intrincadas que van mucho más allá de la gestión de inversiones. Muchas manejan la banca diaria, planificación patrimonial, presentación de impuestos, personal doméstico, y gestionan decenas —o incluso cientos— de cuentas bancarias e inversiones.
Los negocios familiares siguen siendo fundamentales: El 60% de las oficinas familiares fueron fundadas con activos de un negocio familiar, y el 85% continúa generando ingresos de empresas de propiedad familiar. Estas empresas a menudo comparten infraestructura, personal y plataformas con la oficina familiar.
Ciberseguridad como preocupación crítica: Casi un tercio de las oficinas familiares o miembros de familias apoyadas han sufrido un ciberataque, con el 40% reportando un impacto significativo en los activos familiares. Las oficinas más grandes enfrentan mayor riesgo, y el 10% de las oficinas que gestionan menos de 500 millones de dólares no tienen ninguna protección formal de ciberseguridad.
Foto cedidaTomas Hildebrand, Senior Portfolio Manager en Evli Investment Management
El entorno actual es un auténtico reto para las carteras de los inversores. Las gestoras internacionales insisten en la diversificación y la gestión como fórmula para «navegar», pero la gran pregunta es cómo concretar estas dos ideas. En opinión de Tomas Hildebrand, Senior Portfolio Manager en Evli Investment Management, la diversificación es beneficiosa para todo tipo de inversores, independientemente de su tolerancia al riesgo y su estilo de inversión.
Según Hildebrand, una de las claves para realizar una diversificación de la cartera eficaz es, aunque suena repetitivo, «conocer cómo es el inversor». En su experiencia, el primer paso es saber si el inversor tiene aversión al riesgo, es neutral, o busca el riesgo para alcanzar buenos retornos en la inversión. «Porque saber cuál es el horizonte de inversión, los objetivos y las circunstancias personales que influyen en el perfil individual como inversor, en el fondo es un reflejo, en la cartera de inversión, de la forma en la que cada persona gestiona su vida en sus diferentes etapas, Así, por ejemplo, un inversor joven y con ingresos regulares, puede asumir más riesgos que un inversor cercano a la jubilación, que aplica un enfoque más cauteloso», explica.
La cuestión de la diversificación
Respecto a la diversificación, Hildebrandt indica que, para cualquier tipología de inversor, es beneficiosa, independientemente de la clase de activo. «Consigue que el inversor no dependa excesivamente de una sola inversión o de un factor externo. Tener diferentes activos en la cartera que no se mueven en la misma dirección es siempre positivo. Y ello, porque invertir siempre conlleva riesgos, pero es más fácil gestionarlos si las inversiones de la cartera reaccionan de manera diferente, y a diferentes ritmos, a los eventos del mercado», recuerda.
Una de las recomendaciones que realiza es enfocar la diversificación a través de cuatro ámbitos de la inversión: efectivo, inversiones líquidas, inversiones alternativas e inversiones protegidas contra la inflación. «El efectivo, debe ser obviamente el capital necesario para vivir. Y también, puede incluir inversiones en bonos a corto plazo que pueden actuar como colchón con el que realizar otras inversiones. Las inversiones líquidas, como acciones y bonos, deben poder convertirse rápidamente en efectivo si fuera necesario. Para los inversores profesionales y los grandes inversores, es frecuente la diversificación en un tercer ámbito, las inversiones alternativas. Inversiones que contemplan activos como capital privado, inmobiliario, préstamos o inversiones en infraestructuras», afirma.
Una vez que la se ha definido la perspectiva de la cartera en función de la distribución de sus activos, según Hildebrandt es necesario diversificar dentro de cada clase de activo: «Para muchos inversores, los fondos que invierten en múltiples activos son la forma más fácil de invertir, porque aportan diversificación en diferentes sectores o geografías. Además, los pequeños inversores, en la práctica, sólo pueden acceder a productos como bonos corporativos si lo hacen a través de fondos de inversión, porque las cantidades requeridas para la inversión directa en bonos suelen ser elevadas».
Revisar la diversificación
Además, según Hildebrandt, vale la pena evaluar el estilo de inversión y la diversificación de la cartera por parte del inversor, especialmente cuando ocurren cambios significativos en los mercados o en sus circunstancias personales. «Un inversor a largo plazo no debe reaccionar a cada movimiento del mercado. Sin embargo, si los cambios son más significativos, es bueno que el inversor considere cómo afectan a su cartera, y qué oportunidades surgen. Esto se vio, por ejemplo, cuando cambió la política monetaria en junio de 2022, con los tipos de interés que estaban en nivel cero, y empezaron a subir hacia niveles más elevados», explica.
Para este experto, es bueno revisar la estrategia de inversión cuando los mercados fluctúan significativamente. «Pero no hay que apresurarse; hay que considerar en qué consiste realmente el cambio que se está produciendo, y cómo puede afectar a la cartera. Además, el inversor debe tener en cuenta qué ocurre con sus inversiones cuando se producen cambios en su vida personal. Por ejemplo, cuando llegan nuevos miembros a la familia, o cuando reciben herencias. Este tipo de situaciones pueden provocar que el inversor quiera replantearse su enfoque hacia los riesgos, y los objetivos de inversión, que había definido inicialmente», advierte.
Ajustar los pesos de la inversión
El último paso en el proceso para una diversificación eficaz que propone Evli, es actualizar la diversificación que se refleja en una distribución de activos determinada, si las condiciones del mercado cambian de forma relevante. Según su visión, para que el inversor pueda llevarlo a cabo, en primer lugar debe observar la distribución de los activos y evaluar si la relación entre los cuatro ámbitos de inversión, es la adecuada para su situación y objetivos particulares.
Y, en segundo lugar, conviene reflexionar sobre cuestiones como si las diferentes clases de activos son apropiadas en su forma y su perfil para el inversor, si las inversiones en acciones y bonos están diversificadas adecuadamente, o si el análisis da como resultado que hay demasiada exposición a un mercado o activo en particular.
«También es necesario tener en cuenta las implicaciones fiscales al ajustar las inversiones. Porque invertir no debería causar demasiados dolores de cabeza. Siempre es una buena idea buscar ayuda profesional”, concluye Hildebrandt.
Con la segunda edición del Funds Society Investment Summit en Chile a la vuelta de la esquina, FlexFunds se prepara para tomar el podio en el Hotel Las Majadas de Pirque. El objetivo es delinear tendencias en gestión de activos, además de compartir perspectivas con un panel de actores del mercado local.
Con la premisa de “Perspectivas 2025-2026: tendencias clave para gestores de activos”, la firma presentará –este jueves 13 de noviembre– la tercera versión de su informe anual, consolidado como una referencia para comprender el rumbo de la gestión de activos a través de vehículos titulizados.
El estudio recoge un análisis exhaustivo basado en la opinión de profesionales de más de 100 compañías del sector, abarcando América Latina, Estados Unidos y Europa, detallaron desde la firma de servicios financieros.
Junto con esta presentación, el evento contará con un panel de invitados de distintas aristas del sector de inversiones. Se trata de Maricarmen de Mateo, Head of Alternatives Distribution en VinciCompass; José Quiroga, Managing Partner de Cross Assets Solutions & CTO en Ventum Group; y María Francisca Silva; gerente de Inversiones de Administración de Cartera de Inversiones Security.
La energía nuclear vuelve a ser objeto de atención tras años en la sombra, siendo objeto de debate sobre su viabilidad a largo plazo y si sus posibles beneficios -energía fiable y limpia- compensan sus riesgos -seguridad, impacto medioambiental-. Actualmente, tres fuerzas clave están impulsando la inversión en el ecosistema de la energía nuclear, según explican en VanEck.
1.- Aumento de la demanda de electricidad: La Agencia Internacional de la Energía prevé que la demanda mundial de energía eléctrica aumentará impulsada por economías emergentes como China e India.
Pero también por otras macrotendencias, como la inteligencia artificial, cuyo uso intensivo de datos están aumentando rápidamente la necesidad de centros y el consumo de energía asociado a ellos. También, los vehículos eléctricos, tanto automóviles como una gama de maquinaria que funciona con baterías. A ambas se unen las criptomonedas, que requieren energía, así como el clima: las intensas olas de calor en muchas regiones han contribuido a esta elevada demanda de electricidad.
2.- Fuente de energía limpia y fiable: Los esfuerzos mundiales por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante el desarrollo de la capacidad de energía renovable se han retrasado, según varios estudios. Esto ha aumentado la importancia de las instalaciones nucleares existentes y de las nuevas construcciones como componentes importantes de la transición energética mundial.
La energía nuclear tiene unas emisiones notablemente más bajas en comparación con algunas fuentes de energía renovables y no hay límites en cuanto al momento en que las instalaciones nucleares pueden generar energía. A diferencia de la energía eólica y solar, que se enfrentan a los obstáculos de los vientos calmados y los cielos oscuros, la energía nuclear puede proporcionar una energía constante y fiable.
Además, necesita una fracción del terreno en comparación con la solar y la eólica, lo que la convierte en una fuente de electricidad compacta y eficiente. Por ejemplo, una central nuclear media de 1.000 megavatios en Estados Unidos necesita alrededor de 1,3 millas cuadradas de terreno, en comparación con 31 veces más terreno para la energía solar y 173 veces más para la eólica.
3.- Mayor apoyo normativo: Un importante impulso para la energía nuclear es el renovado apoyo de muchos gobiernos. Tras el accidente nuclear de Fukushima en 2011, muchos países dejaron de dar prioridad a la energía nuclear en favor de otras fuentes. Sin embargo, en los últimos años, muchos han cambiado de postura. Estados Unidos, Japón, China, Suiza, India y Noruega están en este escenario regulatorio a favor de la energía nuclear.
Existen fondos cotizados para beneficiarse de esta megatendencia de futuro. El VanEck Uranium and Nuclear Technologies UCITS ETF ofrece a los inversores una exposición completa al ecosistema de la energía nuclear. Además de empresas mineras de uranio, la estrategia también incluye en su cartera a productores de energía nuclear, compañías dedicadas a la construcción, ingeniería y mantenimiento de proyectos nucleares, y a suministradores de equipos, tecnología y/o servicios a la industria de la energía nuclear. En 12 meses presenta una revalorización que ronda el 50%.
Asimismo, el ETF Global X Uranium UCITS ofrece a los inversores acceso a empresas dedicadas a la extracción de uranio y la producción de componentes nucleares, incluidas las que se dedican a la extracción, refinado, exploración o fabricación de equipos para las industrias del uranio y la energía nuclear.
Por su parte, Wisdom Tree cuenta con el WisdomTree Uranium and Nuclear Energy UCITS ETF, que busca replicar el rendimiento del índice WisdomTree Uranium and Nuclear Energy. El índice está diseñado para replicar el rendimiento de las empresas que operan en el sector del uranio y la energía nuclear.
BNY Investments, parte de BNY, compañía global de servicios financieros, ha anunciado el lanzamiento de BNY Global Short Dated Credit Fund, gestionado por Insight Investment. Según explica la gestora, el fondo ofrece una solución alternativa de vencimiento a corto plazo frente al BNY Mellon Global Credit Fund, el fondo más grande de la gama de productos de BNY Investments, que ha atraído a clientes en el Reino Unido, Europa y Asia, con un patrimonio gestionado de 2.900 millones de euros.
“Ante el contexto actual del mercado, los clientes buscan cada vez más soluciones de crédito flexibles y dinámicas con perfiles de vencimiento a corto plazo. Nuestro Fondo se ha lanzado en respuesta a esta demanda. Ofrece a los inversores acceso a una cartera de crédito global y la oportunidad de lograr rentabilidades atractivas ajustadas al riesgo e ingresos, manteniendo al mismo tiempo una menor sensibilidad a los tipos de interés”, ha señalado Gerald Rehn, director de Distribución para EMEA en BNY Investments.
Desde la gestora destacan que el fondo tiene como objetivo obtener una rentabilidad total a partir de los ingresos y del crecimiento del capital. Invierte principalmente en deuda a corto plazo con vencimiento inferior a cinco años, y su rendimiento se mide frente a un índice de referencia de 1 a 5 años. El vehículo está gestionado por Adam Whiteley, director de Crédito Global en Insight, junto con los gestores de cartera Shaun Casey y Alex Schiffeldrin.
“Esta estrategia se basa en la selección de valores con grado de inversión, beneficiándose de la diversificación y del mayor abanico de ideas que ofrece un conjunto de oportunidades global. El actual entorno de elevada incertidumbre económica, política y de política monetaria debería seguir generando oportunidades para los gestores activos», ha añadido Whiteley.
El fondo está registrado para su venta en Reino Unido, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Italia, Alemania, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, España, Suecia y Suiza.
La industria minera a nivel global atraviesa una etapa de redefinición estratégica. Según el informe PwC Mine 2025, se encamina hacia un nuevo ciclo de inversión impulsado por la demanda de minerales críticos, la digitalización de operaciones y la búsqueda de mayor resiliencia ante la volatilidad económica.
El informe, que analiza la evolución de las 40 principales compañías mineras del mundo, destaca un proceso de consolidación en curso: menos transacciones, pero más enfocadas en activos estratégicos. Los metales vinculados a la transición energética —como el cobre, el litio y el níquel— lideran el interés de los inversores, al tiempo que las empresas fortalecen su estructura de capital y priorizan proyectos con retorno sostenible.
“La minería está ingresando en una etapa de madurez donde el desafío no es solo producir más, sino hacerlo de manera inteligente, rentable y socialmente aceptada. El foco está en combinar eficiencia financiera con credibilidad institucional: la licencia social para operar hoy es un activo de gestión tan relevante como cualquier otro”, explicó Leonardo Viglione, socio de PwC Argentina.
“El futuro de la minería en la región se definirá por la capacidad de construir ecosistemas colaborativos. Las empresas que logren integrar tecnología, talento y sostenibilidad serán las que consoliden el crecimiento en la próxima década”, agregó Viglione.
Por otra parte, según el reportePwC Industrial Products Insights Q3 2025, los avances en inteligencia artificial responsable y la reconfiguración de las cadenas de suministro están transformando la estrategia industrial, incluida la minería.
El estudio también revela que los aranceles y la fragmentación comercial global actúan como impulsores de resiliencia, acelerando la digitalización logística y la relocalización de procesos críticos. “Este escenario denota que la energía está dejando de ser un recurso pasivo para convertirse en un activo estratégico, gestionado por algoritmos que optimizan su uso, reducen desperdicios y mejoran la sostenibilidad operativa. Es así como la IA, junto con el análisis de datos y la automatización, están impulsando una transición hacia modelos energéticos más resilientes, descentralizados y eficientes”, comentó Juan Manuel Gallego Tinto, socio de PwC Argentina, líder de Energy, Utilities & Mining.
En este sentido, el informe detalla que la inteligencia artificial (IA) se está consolidando como un factor transformador y relevante para la minería global: el 87% de las empresas del sector afirma que la IA generará un impacto positivo directo en la eficiencia operativa en los próximos tres años. En particular, las compañías mineras líderes ya están aplicando modelos predictivos de mantenimiento, sistemas de visión por computadora para control de calidad en línea y algoritmos de optimización de flotas y perforaciones, reduciendo tiempos de inactividad y emisiones.
El uso de IA generativa y aprendizaje automático también está cambiando la planificación geológica: los sistemas avanzados integran imágenes satelitales, datos sísmicos y variables climáticas para identificar y modelar depósitos minerales con mayor precisión y menor riesgo exploratorio. A nivel de seguridad, los sensores inteligentes y las redes neuronales permiten monitorear condiciones críticas en tiempo real, anticipar fallas y proteger al personal en entornos de alto riesgo.