El objetivo que se han marcado las firmas de inversión para crecer en el segmento de activos alternativos es abrir el mundo ilíquido al inversor minorista. Para ello, la industria nacional cuenta con diversos vehículos como los FCR, las SCR, los FIL y los fondos alternativos. De todos ellos, los FCR y los fondos alternativos son los que más han crecido en el mercado español, registrando un CAGR anual aproximado del 11,5% y del 10,6%, respectivamente.
Sin embargo, durante el último evento de la Asociación de la Industria de Fondos de Luxemburgo (ALFI) en Madrid, las firmas nacionales reconocieron que los vehículos europeos, como los ELTIFs, tienen cada vez más peso en su oferta porque les permiten ser más internacionales, pero también por las ventajas que tienen para el inversor. Según la experiencia de Enrique Mestre Nieto, socio fundador de Alaluz Capital, “para saber si crear y registrar el vehículo en Luxemburgo o en España es necesario analizar a quién va dirigido, su tamaño y estrategia, y los aspectos fiscales, así como dónde quieres distribuir el producto”.
En opinión de Luis Felipe Castellanos, Managing Partner de Alantra, en España, el desarrollo del mercado privado ha sido similar al del resto de los países europeos. Y reconoce que uno de los retos a los que se enfrenta la industria es lograr que los fondos tengan unos volúmenes que sean atractivos para los inversores institucionales, pero también individuales. “La gran esperanza es la banca privada. Generalizando, el peso de alternativos en sus carteras está en el 5% y se espera que aumente hasta el 15%”, señala. Y reconoce que, en el caso español, la supervivencia de muchos de estos fondos se debe al sector público que “lanza campañas para apoyar la iniciativa privada”.
En este sentido, las firmas de la industria coinciden que el hecho de haber rebajado a 10.000 euros el mínimo para que los minoristas inviertan en capital riesgo es una gran oportunidad para “desbloquear el acceso” a los activos privados. “Este es uno de los motivos, junto con el cambio de las sicavs y la fiscalidad y los retornos negativos de los últimos años, que ha hecho que el peso del private equity y el venture capital cambie la composición de las carteras”, reconoce Enrique Mestre Nieto, socio fundador de Alaluz Capital.
Cambios en el modelo de negocio
El hecho de aumentar la presencia de los minoristas en las inversiones alternativas ha supuesto también un cambio en el modelo de negocio de las firmas. En este sentido, Castellanos reconoce cuatro tendencias en el sector: “En primer lugar, y dado que estamos ante un negocio que necesita escala, estamos viendo un proceso de concentración por el que las gestoras más grandes están comprando firmas nicho. Además, las gestoras están formando equipos concretos para atender a estos clientes y también ajustando sus productos, principalmente optando por fondos evergreen. Por último, el tema de la liquidez es muy relevante para los inversores minoristas, por lo que estamos intentando dar liquidez a un subyacente que es ilíquido, sobre todo para atraer a la banca privada. Esto último explica el gran desarrollo que está teniendo en la industria el tema de secundarios”.
Una visión que también comparte Felipe Zambrano, director de Langham Hall, quien además añade un aspecto más: ciudad la experiencia del inversor. “Es necesario gestionar las expectativas del inversor y ser especialmente transparentes, aportar cierta educación financiera para que comprendan bien esta clase de activo. También, hay que poner especial atención a la gestión de la liquidez porque son un perfil muy sensible”, comenta.
Por último, las firmas reconocen que esperan un aumento de la demanda de activos de deuda privada, así como una reactivación del private equity y del venture capital, gracias a la actual política monetaria. “La subida de tipos paralizó el mercado de private equity, ya que dejó sin poder salir a los inversores que estaban comprometidos. Ahora, con el ciclo de bajada de tipos, la situación ha cambiado y esos inversores atrapados comenzarán a moverse a nuevas inversiones”, señala Castellanos. En este contexto, Zambrano reconoce que “van a aparecer nuevos jugadores en la industria, que vendrán con más peso tecnológico y mayor digitalización”.
En los últimos años, el capital privado ha ganado protagonismo en las carteras institucionales por su potencial de rentabilidad ajustada al riesgo y su capacidad de diversificación. Sin embargo, su principal característica, la iliquidez, puede suponer un reto tanto para inversores como para los propios gestores de portafolios. En este contexto, la securitización se presenta como una solución innovadora y eficaz para transformar activos ilíquidos en títulos listados, líquidos y fácilmente accesibles.
Este artículo se explica de manera clara y práctica cómo funciona la securitización en el contexto del capital privado, qué beneficios ofrece y cómo se puede implementar, señalan desde FlexFunds.
La securitización de activos, o titulización, no es más que un proceso de transformación de cualquier tipo de activo financiero en un título valor negociable. A través de esta técnica financiera tiene lugar el nacimiento de productos cotizados (ETPs) que actúan como vehículos de inversión, siendo su objetivo dotar a los activos subyacentes de una mayor liquidez, flexibilidad y alcance.
Tradicionalmente, este proceso ha estado vinculado al sector bancario o hipotecario. Sin embargo, cada vez más gestores de fondos de capital privado están explorando esta vía para aportar mayor flexibilidad a sus carteras, monetizar activos sin necesidad de venderlos directamente y atraer a una base más amplia de inversores.
Los fondos de capital privado son instrumentos de inversión diseñado para respaldar el crecimiento de empresas que no cotizan en bolsa. Este vehículo se constituye a través de intermediarios financieros que recaudan fondos de inversores, los cuales son dirigidos hacia diversas empresas o proyectos con un potencial de crecimiento significativo.
Estos fondos suelen tener horizontes de inversión largos (8 a 10 años o más) y son estructuras cerradas, es decir, que no permiten la entrada o salida de inversores durante el período de vida del fondo. Esto puede limitar el acceso de ciertos inversores que requieren mayor liquidez o enfrentan restricciones regulatorias.
Entre los tipos de inversiones de capital privado más comunes se encuentran:
Mediante la securitización, es posible agrupar participaciones en un fondo de capital privado, y emitir valores que representen derechos sobre los flujos de caja futuros de esos activos. Estos valores pueden estructurarse en diferentes tramos de riesgo y rentabilidad, lo que permite adaptarse a distintos perfiles de inversores.
Ahora bien, implementar una estructura de securitización requiere experiencia en diseño financiero, regulación internacional y acceso a plataformas de distribución. En este punto, FlexFunds, compañía especializada en la creación de vehículos de inversión eficientes, puede jugar un rol clave.
FlexFunds ofrece vehículos de inversión que permiten a los gestores de capital privado:
1.- Aumento de la liquidez: La titulización convierte activos ilíquidos en productos listados con código ISIN, negociables a través de plataformas como Euroclear y Clearstream, y custodiables en cuentas de corretaje existentes.
2.- Diversificación del riesgo: al distribuir los riesgos asociados con los activos subyacentes entre múltiples inversores, la securitización ayuda a reducir la exposición al riesgo para cualquier inversor individual. Esto es especialmente importante en tiempos de volatilidad del mercado.
3.- Acceso a capital internacional: la securitización facilita el acceso a los mercados de capital internacionales, permitiendo a los gestores atraer inversión de una base global de inversores.
4.- Protección de los activos que están bajo la estructura: debido a que la emisión se ejecuta a través de una sociedad de propósito especial (SPV), el subyacente está aislado del riesgo crediticio que pueda afectar al gestor, y, por ende, al inversor.
Como toda herramienta financiera, la securitización conlleva desafíos que deben gestionarse, entre los que se destacan:
La correcta valoración de activos privados.
La transparencia informativa hacia inversores.
El cumplimiento normativo en múltiples jurisdicciones.
La securitización aplicada al capital privado es una tendencia en expansión. Ofrece una alternativa viable para abordar la iliquidez inherente al sector, ampliar el universo de inversores y aumentar la distribución en los mercados de capital.
Si está pensando en potenciar la distribución de su fondo de capital privado, la securitización puede ser una herramienta que le permitirá ampliar la base de inversores. Las soluciones de FlexFunds permiten reempaquetar este tipo de instrumento en menos de la mitad del tiempo y coste que cualquier otra alternativa del mercado.
Si desea conocer más información por favor contacte a nuestros expertos por contact@flexfunds.com
Block Asset Management ha anunciado el lanzamiento del BAM Blockchain Alpha Fund (BAF), una estrategia multigestor, market neutral, diseñada para generar rentabilidades consistentes y no correlacionadas mediante la identificación y aprovechamiento sistemático de ineficiencias estructurales en el ecosistema de los activos digitales.
El fondo iniciará operaciones el 1 de mayo de 2025, y los inversores interesados podrán suscribirlo hasta el 23 de abril de 2025.
Este nuevo fondo, entre otras cosas, está diseñado para obtener rendimientos absolutos consistentes, independientemente de la dirección del mercado cripto. Además, este vehículo cuenta con una cartera cuidadosamente seleccionada de equipos especializados que ejecutan estrategias basadas en arbitraje, rendimiento DeFi, préstamos y volatilidad.
Por otro lado, el fondo busca ofrecer resultados positivos en diversas condiciones de mercado. Su objetivo es alcanzar un rendimiento neto anual del 12,5% mediante un enfoque de alfa no correlacionado, enfocado tanto en la estabilidad como en el rendimiento. Además, cuenta con una gestión de riesgos de nivel institucional, con controles sólidos y de varios niveles que abarcan gestores, estrategias e infraestructura de negociación.
Por último, el fondo ofrece condiciones flexibles para el inversor, sin compromisos de inmovilización del capital prolongados, ya que cuenta con liquidez mensual. Por otro lado, no tiene exposición direccional al mercado cripto. El fondo se apoya únicamente en estrategias de alta convicción y baja beta.
La total imprevisibilidad y los cambios de política sin precedentes de la administración Trump, junto con los cambios sísmicos en la respuesta de Europa a estos, han llevado a una drástica reversión en el sentimiento y posicionamiento de los inversores en los últimos tiempos. Los expertos de Xtrackers de DWS han detectado varios cambios significativos en el rendimiento y la asignación de activos, entre ellos que los inversores se están alejando de las acciones estadounidenses y de las Siete Magníficas para dirigirse hacia regiones antes “olvidadas” y con baja exposición como, por ejemplo, Europa y China.
“Existe una clara reversión en la narrativa europea tras las elecciones en Alemania y el cambio en el enfoque de EE.UU. respecto al conflicto entre Rusia y Ucrania. Desde nuestro punto de vista, esto hace que el reciente repunte en Europa sea más que un simple efecto de reversión. En tiempos de alta incertidumbre, los flujos de ETFs parecen indicar que el mercado finalmente ha escuchado la llamada de atención para una mayor diversificación más allá de las grandes capitalizaciones estadounidenses”, explican.
Primeros brotes verdes de los valores con peores resultados a largo plazo
Gráfico: Rentabilidad relativa frente al S&P 500 (últimos 12 meses, rentabilidad total en dólares)
Los ETFs de renta variable estadounidense registran un fuerte descenso de los nuevos flujos, ya que los inversores se decantan por los índices europeos, mundiales y de mercados emergentes.
Una de las principales conclusiones que sacan es que el punto de inflexión del mercado podría abrir oportunidades para recalibrar carteras, puesto que los estos están experimentando una reversión clave del llamado “Trump Trade”, con una fuerte caída de las acciones estadounidenses en lo que va del año. En contraste, señalan que las valoraciones más atractivas de las acciones europeas, junto con el anuncio de mayores inversiones en infraestructura y defensa, han impulsado al alza los mercados en Europa. «Este movimiento está respaldado por factores estructurales, como las nuevas incertidumbres en torno a la IA y la historia de inversión en capital (capex) que la acompaña, así como el renovado impulso fiscal en Europa”, matizan en su último análisis.
Al mismo tiempo, consideran que las tensiones geopolíticas podrían hacer que recalibrar la exposición al riesgo sea una prioridad: «Para los inversores, esto representa una ventana para reposicionar sus carteras, diversificarse más allá de los ganadores tradicionales y aprovechar los impulsores macroeconómicos y temáticos en evolución. Varias regiones y sectores han sido identificados como los rezagados estructurales por los inversores (incluyendo Europa, China y el mundo excluyendo EE. UU.). Con un sentimiento inicial muy bajo y un nuevo entorno geopolítico, estos podrían convertirse en candidatos a una recuperación sostenida”.
La nueva narrativa: el “whatever it takes” de Europa
Por un lado, los expertos apuntan que un posible alto el fuego entre Rusia y Ucrania está mejorando el ánimo de los mercados, lo que contrasta con la urgencia de los miembros de la UE por aumentar de forma sustancial del gasto en defensa, con el objetivo de reducir su dependencia de EE.UU. “Alemania ha anunciado planes para realizar importantes inversiones en infraestructura y defensa, financiadas mediante una flexibilización del freno a la deuda y un fondo especial de 500.000 millones de euros. Esto podría incrementar el endeudamiento y la ratio de deuda pública, pero al mismo tiempo impulsar el crecimiento económico. Es probable que otros países de la UE sigan este camino”, ponen como ejemplo.
Desde la entidad esperan que estas medidas aceleren el crecimiento, especialmente a partir del próximo año. Las previsiones de Xtrackers estiman que Alemania crecerá un 0,4% en 2025 y un 1,6% en 2026. Para la Eurozona en su conjunto, proyectan un crecimiento del 1% en 2025 y 1,5% en 2026. Mientras tanto, el BCE ha respaldado aún más los mercados europeos con recortes en los tipos de interés, lo que hace que la renta variable sea más atractiva en comparación con los productos de ahorro tradicionales y, con el tiempo, alivie la carga de intereses para las empresas.
Por último, el consumo privado está comenzando a recuperarse gracias a un mercado laboral sorprendentemente sólido y una inflación en descenso. Además, los indicadores de sorpresas macroeconómicas han girado a positivo para Europa. “Creemos que el euro podría fortalecerse en el corto y mediano plazo. Además, las acciones europeas, especialmente las de mediana capitalización, que han quedado rezagadas en el reciente repunte, podrían beneficiarse del aumento del gasto planificado”, han explicado los analistas, quienes añaden que el impulso macroeconómico de Europa se ha convertido en un viento de cola para las acciones en lo que va de año, mientras que los indicadores de EE.UU. han girado a la baja.
“Entorno económico positivo, apetito por el riesgo positivo, factores estructurales positivos (el mayor BPA previsto históricamente debería impulsar la rentabilidad superior a lo largo del ciclo, la valoración ajustada al sector pymes de Europa frente a las empresas de gran capitalización está por debajo de la media histórica), mayor exposición al mercado doméstico que las empresas de gran capitalización”, concluyen los expertos de Xtrackers.
La creatividad y una cuidadosa selección de valores importan más que nunca para maximizar la rentabilidad, según el nuevo documento de perspectivas globales publicado por Columbia Threadneedle Real Estate, la división especializada en inversión y gestión de activos inmobiliarios de Columbia Threadneedle Investments.
El documento menciona una serie de ejemplos de creatividad, como son, la búsqueda de terrenos estratégicos con vistas a la obtención de permisos urbanisticos para el cambio de uso, o el reposicionamiento de los activos existentes mediante una modernización del edificio. Por su parte, la “relevancia funcional”, el grado en que los activos se ajustan a la demanda de los usuarios, debe estar en el centro de las estrategias de selección de activos.
La necesidad de una sólida selección de activos aplicada localmente y la capacidad de intervenir directamente para mejorar los activos, complementada por un análisis ‘top-down’, son una de las cinco conclusiones clave de este Global Outlook, junto a las tendencias estructurales a largo plazo que favorecen las asignaciones temáticas a los sectores retail, logístico y residencial.
Otra de las conclusiones a las que llegan desde Columbia Threadneedle es que el momento de implementación es “vital” dado el ritmo desigual de la recuperación mundial, que puede verse afectado por la evolución macroeconómica.
Por otro lado, desde la entidad explican que el “retail” está intrínsecamente poco entendido y presenta interesantes perspectivas de crecimiento gracias a unos cimientos sólidos (oferta y demanda restablecidas) y a la recuperación del gasto por parte de los consumidores. Por último, la previsible relajación de la política monetaria en apoyo del crecimiento económico, que dará lugar a un mayor margen de rentabilidad, probablemente propiciará el retorno del capital core y core plus.
Joanna Tano, jefa para Europa de Investigación Inmobiliaria de Columbia Threadneedle Investments, dijo: “Nuestro nuevo Global Outlook llega en un momento crucial para la economía mundial. Sin duda, el panorama de la inversión inmobiliaria sigue siendo complejo y es necesario que los inversores actúen con cautela, pero existen oportunidades claras, especialmente para aquellos inversores que sepan ver más allá de la incertidumbre actual”.
“Los inversores que quieran aprovechar estas oportunidades deben centrarse más que nunca en los fundamentales inmobiliarios subyacentes. Atrás quedaron los días en los que simplemente se compraba un inmueble y se obtenían ingresos. Los inversores deben tener un conocimiento detallado de lo que quieren los usuarios para maximizar la verdadera «relevancia funcional» de un activo, así como la capacidad de gestionar activamente los activos para proteger o aumentar el valor mediante intervenciones directas”, concluye Joanna Tano.
A medida que aumenta la volatilidad, mantenerse invertido es una prioridad estratégica para captar el potencial de rentabilidad a largo plazo en un mercado cada vez más amplio.
La renta variable mundial se enfrentó a nuevos retos en el primer trimestre de 2025 en medio de la creciente preocupación por la guerra comercial y los avances en inteligencia artificial (IA). Los episodios de volatilidad y las perspectivas cada vez más turbias subrayaron la importancia de centrarse en la diversificación, las valoraciones y los fundamentales de las empresas.
Tras un comienzo de año prometedor, la renta variable mundial perdió impulso en febrero y marzo (Mostrar). El índice MSCI ACWI de valores mundiales de mercados desarrollados y emergentes cayó un 1,3% en dólares estadounidenses durante el primer trimestre, al divergir los rendimientos regionales. Los rendimientos del mercado se ampliaron, como demuestra el rendimiento del S&P 500 Equal Weight Index superior al del S&P 500 ponderado por capitalización.
Desde el final del trimestre, los titulares han estado dominados por las políticas arancelarias sin precedentes. Incluso antes de los amplios anuncios del 2 de abril y de la reciente pausa, la incertidumbre de la política estadounidense sacudió los mercados cuando el presidente Donald Trump zigzagueó, pero finalmente impuso gravámenes a todas las importaciones procedentes de China y a determinados productos de México, Canadá y la Unión Europea. Durante el primer trimestre, la volatilidad del mercado también se vio alimentada por la presentación en enero por parte de la empresa china DeepSeek de un nuevo modelo de inteligencia artificial que minó la confianza en las perspectivas de beneficios de las siete megacapitales estadounidenses.
Cambio de tendencias regionales, sectoriales y de estilo
La falta de claridad en torno a la política comercial provocó una divergencia en los rendimientos regionales. En un brusco cambio de tendencia, los valores europeos y de los mercados emergentes superaron ampliamente a los estadounidenses durante el trimestre (véase más arriba). El índice MSCI Europe ex UK ganó un 10,7% en dólares estadounidenses. Por el contrario, los valores estadounidenses de gran capitalización -los claros vencedores del mercado en los últimos años- perdieron terreno, y el S&P 500 bajó un 4,3%.
Siguiendo una tendencia iniciada a finales del año pasado, el dominio de las megacapitales estadounidenses menguó. El modelo rentable de DeepSeek suscitó dudas sobre el gasto futuro en IA, lo que desencadenó una venta masiva de los Siete Magníficos que arrastró a los valores tecnológicos a una caída del 11,6% (Display). La energía y los servicios públicos lideraron las ganancias sectoriales en el trimestre, mientras que los valores sanitarios se recuperaron de un débil 2024. Los valores de menor volatilidad obtuvieron buenos resultados, ya que los inversores buscaron refugios seguros. Los valores de valor, que en los últimos años han obtenido peores resultados que los de crecimiento, también se beneficiaron de la ampliación del mercado.
Los complejos efectos de una guerra comercial
Los enigmas políticos que han dominado los titulares no van a desaparecer pronto. En particular, el enfoque intermitente de la administración Trump con respecto a los aranceles ha dejado a las empresas estadounidenses dependientes de las importaciones susceptibles a oscilaciones de precios volátiles, mientras que los exportadores de todo el mundo también sienten los efectos. Incluso después de que Trump anunciara el 9 de abril una pausa de 90 días para los aranceles a la mayoría de los países (excluida China), muchas empresas tendrán dificultades para avanzar en sus planes de inversión mientras el régimen comercial siga siendo fluido. La incertidumbre podría aliviarse si se consolida un enfoque más sistemático de los aranceles, lo que podría calmar la ansiedad de los inversores, a pesar de la preocupación por las consecuencias económicas de una guerra comercial.
Las tensiones comerciales y el riesgo geopolítico, desde las hostilidades en Ucrania y Oriente Medio hasta las tensiones entre China y Taiwán, han amenazado con reavivar la inflación y enturbiar las perspectivas de los tipos de interés. Durante el primer trimestre, la Reserva Federal de EE.UU. y el Banco de Japón mantuvieron la relajación monetaria, mientras que el Banco Central Europeo recortó su tipo de referencia 50 puntos básicos hasta el 2,5%, cerca de su objetivo a largo plazo.
Para las economías y las empresas, los resultados de una guerra comercial prolongada serán complejos. Por ejemplo, incluso Trump ha reconocido que EE. UU. podría enfrentarse a una recesión. Dicho esto, la economía estadounidense no es especialmente sensible al comercio, y algunas empresas son más resistentes a los aranceles que otras, en función de su sector y su huella operativa. Algunas empresas internacionales con operaciones en EE.UU. podrían incluso beneficiarse de los aranceles. Algunos ejemplos son los fabricantes de electrónica europeos y japoneses y las empresas de bienes de consumo con una gran presencia manufacturera en Estados Unidos.
Ampliación de los horizontes de inversión
Los inversores también se enfrentan a retos complicados, con la incertidumbre política casi en máximos históricos mientras los mercados de renta variable se amplían. Creemos que ha llegado el momento de reevaluar el estilo y la exposición regional, sobre todo teniendo en cuenta que en los últimos años muchos inversores han sobreponderado los valores de crecimiento estadounidenses debido al dominio anterior de los Siete Magníficos.
La renta variable defensiva podría aportar amplitud y fortaleza. Al invertir en valores de alta calidad con patrones de negociación estables, una estrategia defensiva puede ayudar a reducir la volatilidad creada por los riesgos políticos, tecnológicos y macroeconómicos. Los valores de valor ofrecen diversificación y siguen cotizando con grandes descuentos con respecto a los valores de crecimiento. Aunque los valores de valor se perciben como vulnerables a los ciclos económicos, creemos que los inversores pueden encontrar valores infravalorados con atractivos flujos de caja libres y atributos empresariales que pueden impulsar los beneficios, incluso en un entorno económico más lento.
La diversificación regional merece atención. Es posible que la renta variable europea esté por fin encontrando su equilibrio, aunque la guerra entre Rusia y Ucrania siga siendo un riesgo. Las valoraciones de las acciones europeas siguen siendo atractivas en comparación con sus homólogas estadounidenses, y la empresa europea media superó las expectativas de consenso en un 3% durante la temporada de resultados del cuarto trimestre. Incluso hay indicios de una reversión de las salidas de fondos de acciones europeas en los últimos tres años. Los inversores selectivos pueden encontrar empresas europeas con un crecimiento constante de los beneficios y negocios de calidad más resistentes a los riesgos macroeconómicos y geopolíticos regionales.
Los mercados emergentes también están dando señales de vida y ofrecen oportunidades ocultas. Algunos de los principales actores de la cadena de suministro mundial de inteligencia artificial (IA) tienen su sede en mercados emergentes. Las estimaciones de beneficios tienden al alza en el mundo en desarrollo, que representa el 90% de la población mundial y aproximadamente la mitad del PIB mundial. Y nuestro estudio muestra que perderse una recuperación de los mercados emergentes podría resultar costoso para los inversores.
¿Se está produciendo un reajuste de los beneficios?
Los recientes cambios en los patrones de rentabilidad de la renta variable exigen un análisis más detallado de las tendencias de los beneficios a largo plazo. En los últimos 15 años, el crecimiento de los beneficios de las empresas estadounidenses ha superado al de las empresas no estadounidenses, representadas por el índice MSCI EAFE. Sin embargo, antes de 2010, no siempre fue así. De hecho, nuestro estudio muestra que en tres de las cuatro décadas transcurridas desde 1970, los beneficios de las empresas no estadounidenses superaron a los de las estadounidenses.
Este año, se espera que el crecimiento de los beneficios de las empresas estadounidenses se aproxime al del resto del mundo. Mientras tanto, las valoraciones de las acciones fuera de EE.UU. siguen teniendo un descuento significativo, basado en los beneficios previstos para 2025.
Sin duda, incluso después de un trimestre difícil, creemos que las acciones estadounidenses siguen siendo parte integrante de cualquier asignación diversificada. Durante los últimos 60 años, el crecimiento de los beneficios en EE.UU. no ha dejado de aumentar, superando importantes perturbaciones económicas y geopolíticas. Las antiguas ventajas de EE.UU. -desde la innovación hasta la educación y la cultura empresarial- siguen siendo una potente fuerza para la rentabilidad de la renta variable. Pero lo que importa es cómo se accede a esos rendimientos. En nuestra opinión, una asignación a EE.UU. con carteras activas disciplinadas en todo el espectro de estilos es la forma correcta de aprovechar un mercado cambiante.
Centrar la atención en los «otros magníficos»
Las fuertes caídas del primer trimestre de los Siete Magníficos nos han recordado los riesgos de las posiciones concentradas. Aunque las megacapitales incluyen empresas de talla mundial a la vanguardia de la revolución de la inteligencia artificial, incluso las grandes empresas pueden plantear riesgos de inversión. Creemos que cada nombre debe mantenerse de acuerdo con la filosofía de una cartera y con las ponderaciones adecuadas, ya que los propios disruptores pueden sufrir disrupciones.
Los acontecimientos sin precedentes en torno a la política comercial también nos recuerdan que la investigación en profundidad de las empresas es fundamental para descubrir oportunidades de generar riqueza a largo plazo. En nuestra opinión, hoy en día los inversores deben esforzarse por comprender la resistencia de los márgenes empresariales frente a las perturbaciones de la oferta y el crecimiento, así como el impacto de otras fuerzas disruptivas como DeepSeek en las megacaps de IA en EE. UU. Seguimos viendo oportunidades atractivas entre lo que llamamos los Otros Magníficos: empresas de alta calidad dispersas por sectores y estilos que cuentan con balances sólidos y flujos de beneficios consistentes.
El último trimestre ha sido instructivo en muchos frentes. Hemos visto que las valoraciones sí importan, ya que las acciones de las megacapitales caras retrocedieron. Otra lección: las opiniones consensuadas pueden ser radicalmente erróneas, como la creencia generalizada a principios de año de que las políticas de Trump supondrían una victoria inequívoca para las empresas y las acciones estadounidenses.
En este entorno cambiante, mantener una cartera geográfica diversificada puede ayudar a lanzar una red más amplia para el crecimiento de las ganancias, lo que también puede ayudar a los inversores a hacer frente a la inflación. Una inflación rígida significa que nuestros activos deben esforzarse más para generar rendimientos, y la inflación suele traducirse en mayores beneficios nominales, que impulsan los rendimientos bursátiles. Por eso la renta variable tiene un largo historial de rendimientos reales positivos, por encima de la tasa de inflación.
También se nos ha recordado que la volatilidad forma parte integrante de la inversión en renta variable a largo plazo, y que la diversificación es uno de los mejores antídotos. Los inversores deben prepararse para más turbulencias en los mercados e incertidumbre política, especialmente en torno al ritmo, el nivel y los sectores afectados por los aranceles. Pero hay aspectos positivos en el nublado mercado de este año: un contexto de renta variable menos concentrado que podría recompensar a los inversores de renta variable pacientes que sigan centrados en encontrar empresas con sólidos fundamentales, y unas valoraciones más atractivas para quienes sigan invirtiendo para alcanzar sus objetivos a largo plazo.
Tribuna de opinión escrita por Nelson Yu, Vicepresidente Senior, Jefe de Renta Variable y miembro del Comité Operativo de AllianceBernstein.
Cecabank, el banco custodio especializado en Securities Services en España y Portugal, refuerza su Consejo de Administración con la incorporación de dos consejeras independientes: María Concepción Jiménez Gonzalo, exdirectora general de Efectivo y Sucursales y exmiembro de la Comisión Ejecutiva y del Consejo de Gobierno del Banco de España; y Ana Santillán Nieto, responsable de Instituciones Financieras para EMEA y codirectora general en Suiza de Fireblocks. Ambas se incorporan como vocales del Consejo de Administración.
La incorporación de las dos consejeras se produce tras el vencimiento del mandato de los consejeros independientes, sin posibilidad de renovación como consejeros independientes ya que llevaban 12 años en el Consejo, Santiago Carbó Valverde y María del Mar Sarro Álvarez.
El Consejo de Administración de Cecabank seguirá compuesto por once miembros –seis dominicales, cuatro independientes y un ejecutivo-, de los cuales cuatro son mujeres, lo que representa un 36%. Cecabank cumple así con la obligación de las entidades de interés público de alcanzar la cuota del 33% del sexo menos representado, antes del 30 de junio de 2026, de conformidad con lo establecido en la referida Ley Orgánica 2/2024 de representación paritaria. Asimismo, Cecabank tiene fijado como objetivo que el 50% de los consejeros independientes, al menos, sean mujeres. Con esta renovación, este porcentaje alcanza por primera vez el 100%, frente al 75% que se venía manteniendo desde 2019. Con la futura incorporación al Consejo de la nueva consejera delegada, Ainhoa Jauregui, el porcentaje de mujeres alcanzará el 45%.
El Consejo de Administración de Cecabank se apoya en cuatro comités especializados (Comisión de Auditoría, Comité de Nombramientos, Comité de Remuneraciones y Comité de Riesgos) que lo asisten en el ejercicio de sus competencias. De acuerdo con los Estatutos Sociales y el Reglamento del Comité de Riesgos, los consejeros independientes tienen un peso especial en los comités, teniendo, en todo caso, que ostentar su presidencia. María Concepción Jiménez Gonzalo será presidenta del Comité de Riesgos y miembro de la Comisión de Auditoría y del Comité de Nombramientos. En cuanto a Ana Santillán Nieto será presidenta del Comité de Remuneraciones y formará parte del Comité de Riesgos.
Una destacada trayectoria profesional
María Concepción Jiménez Gonzalo ha trabajado más de 40 años en el Banco de España, ocupando cargos de responsabilidad en distintos departamentos del banco hasta su nombramiento como directora del Departamento de Operaciones en 2006. En 2015 fue nombrada directora general adjunta de Gestión de Efectivo y Sucursales, hasta ocupar la dirección general en 2017 como exmiembro de la Comisión Ejecutiva y del Consejo de Gobierno del Banco de España. Asimismo, ha sido miembro de varios comités del Banco Central Europeo y del Banco de Pagos Internacionales y es auditora de cuentas inscrita en el ROAC. Licenciada en ciencias económicas y empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, ha cursado en el IESE el Programa de Dirección y el Programa de Liderazgo y Gestión del Cambio.
Por su parte, Ana Santillán Nieto comenzó su carrera profesional en Goldman Sachs como analista junior de carteras en Ginebra. En 2007, trabajó en las oficinas de Londres y Zurich de Morgan Stanley como Associate en Private Wealth Management y como especialista en ventas de renta fija. Nueve años después se incorporó a Credit Suisse como asesora para clientes de Corporate y Family Offices en España. Tras crear una startup de activos digitales y criptomonedas, en 2021 se incorporó a Fireblocks en Suiza, donde ostenta el cargo de Asesora y Ejecutiva de Ventas para Suiza, España, Italia y Portugal. Santillán Nieto es licenciada en administración y dirección de empresas por la Universidad de Deusto, cuenta con la certificación CFA, así como un Máster de Gestión Estratégica y Finanzas Corporativas en la École de Management de Lyon. Ha sido reconocida en la lista global The Twenty Most Influential Women in Crypto en 2023 por Financial News.
Cecabank, excelencia en políticas de igualdad
Estos últimos nombramientos responden al compromiso de Cecabank con la Igualdad que se ha visto recientemente reconocido con el otorgamiento del distintivo «Igualdad en la Empresa» (DIE), gestionado por el Instituto de las Mujeres del Ministerio de Igualdad. Este reconocimiento se concede a las empresas que demuestran un compromiso con la igualdad de trato y de oportunidades con sus plantillas, tanto en sus políticas internas como en sus prácticas laborales. En toda España, son solo 197 las empresas que tienen este reconocimiento, entre las que ya se encuentra Cecabank.
“Ser parte de la red DIE implica para el banco, un nuevo reconocimiento de excelencia por sus políticas de igualdad y entrar a forma parte de un foro donde las empresas pueden compartir experiencias y estrategias exitosas en materia de igualdad de género. La entidad cuenta con un Plan de Igualdad que regula las funciones de la Comisión de Igualdad, establece medidas de acción positiva y recoge las mejoras que en medidas de conciliación de la vida familiar y laboral han sido acordadas entre la representación laboral de las personas trabajadoras y la entidad”, han explicado desde la compañía.
Asimismo, el banco ha implementado diversas iniciativas para promover la igualdad de género y la diversidad. La entidad ha alcanzado en 2024 la paridad en su plantilla. Además, un 38% de los miembros del Comité de Dirección son mujeres y el 40% de los puestos directivos están ocupados por mujeres. Cecabank también ha diseñado programas de formación específicos para el Comité de Igualdad y ha creado la figura de agente de igualdad.
En este sentido, cabe destacar la certificación EFR (Empresa Familiarmente Responsable), que acredita la calidad en el empleo, conciliación, igualdad de oportunidades y desarrollo profesional. Además, Cecabank cuenta con los sellos de “Empowering Women’s Talent” y “Diversity Leading Company” que otorga Equipos y Talento y es firmante también de la Carta de Diversidad desde 2021 por sus políticas de igualdad, diversidad e inclusión.
Foto cedidaAraceli de Frutos Casado, asesora financiera
Alhaja Inversiones, el primer fondo asesorado por Araceli de Frutos como empresa de asesoramiento financiero (EAF), celebra su décimo aniversario con una destacada trayectoria en el sector de fondos de inversión. Registrada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) desde hace más de 12 años, la firma ha evolucionado hacia una especialización centrada en el asesoramiento de carteras de inversión, especialmente fondos.
Después de conseguir este hito de cumplir los 10 años, busca seguir siendo una solución para la mayoría del inversor español. Con esa idea nació y en ello cree su asesora. «Alhaja pretende ser una solución para la amplia mayoría del inversor español. El inversor “tipo” español es moderado/conservador, le aterra la idea de ver disminuir su patrimonio, lo que está íntimamente ligado a los escasos conocimientos financieros. No quiere asumir riesgos, no ha tenido mucha experiencia en materia de inversión, y cree que la bolsa es muy arriesgada. En esas dudas que tiene el cliente particular se ha enfocado este fondo», explica su asesora. Los intereses del asesor están alineados con el fondo, la implicación es máxima de cara a conseguir los objetivos planteados en el fondo desde su inicio, esto es, baja volatilidad y rentabilidad a anualizada a cinco años cercana al 5%.
En este contexto de volatilidad e incertidumbre en el que se encuentra actualmente el mercado, la diversificación y la inversión en multiactivos que estén descorrelacionados es un buen seguro para contener las posibles pérdidas en los mercados, defiende De Frutos. «En el actual escenario de volatilidad se recomienda paciencia y control de las emociones ya que, como decía uno de los grandes inversores Peter Lynch, «se ha perdido más dinero preparándose para las correcciones o tratando de anticipar las correcciones que el perdido en las correcciones mismas”. Hay que saber en lo que estamos invertidos, los fundamentales de las compañías, cómo están afrontando la situación y ver sus resultados. La inversión es a largo plazo y el tiempo y la paciencia son nuestros amigos. Hay que recordar a Warren Buffett cuando dice que Los mercados financieros están diseñados para transferir dinero del impaciente al paciente», añade la experta.
Estrategia de inversión diversificada
En estos diez años, Alhaja Inversiones ha conseguido situarse en el tramo alto de su categoría, logrando cuatro estrellas Morningstar, que reconocen su consistencia y rentabilidad ajustada al riesgo. Según la clasificación de la CNMV, se trata de un fondo de renta variable mixta internacional, con una exposición media del 50% a renta variable. Morningstar lo incluye dentro de la categoría de mixto moderado euro global.
La estrategia de Alhaja Inversiones se basa en una cuidada selección de compañías de calidad, con capacidad de generación de caja, bajo endeudamiento, una atractiva tesis de inversión y una política consistente de remuneración al accionista. La cartera de renta variable está diversificada en 49 valores, con las diez principales posiciones representando el 17% del patrimonio. La exposición media a renta variable en 2025 se sitúa en el 52%.
Geográficamente, el fondo mantiene una fuerte presencia en Europa (44% del patrimonio), región que la firma conoce en profundidad, mientras que la exposición a Estados Unidos ha crecido hasta el 14%.
En el apartado de renta fija, Alhaja Inversiones cuenta con 17 referencias, con las cinco principales suponiendo el 14% del patrimonio. Actualmente, la cartera presenta una TIR actual del 3,85 % y una TIR a vencimiento del 4,64%, complementada con una posición en el fondo de crédito de buy&hold.
El fondo Alhaja Inversiones está gestionado por Renta 4 Gestora y disponible tanto en esta entidad como en las plataformas Inversis y Allfunds.
En términos de rendimiento, el fondo presenta una rentabilidad anualizada del 2,63% a 10 años y acumula una revalorización superior al 35% desde su lanzamiento. Todo ello con una volatilidad a cinco años del 7,5%, lo que le otorga una calificación de riesgo 3 sobre 7 por parte de la CNMV: un perfil conservador dentro de su categoría. “Es un fondo para dormir tranquilo”, explican desde la firma, destacando la combinación entre rentabilidad y bajo riesgo como uno de sus principales atractivos.
En su libro Outlive, Dr. Peter Attia define la Medicina 1.0 como la era anterior al método científico, en la que las prácticas médicas eran sólo marginalmente más avanzadas que las conjeturas primitivas. Piense: sangrías y amuletos en la Edad Media como cura para la peste bubónica. Buena suerte.
La medicina 2.0 es lo que surgió en el siglo XVII con el desarrollo del método científico, la teoría de los gérmenes y los ensayos controlados aleatorios. La Medicina 2.0 es lo que experimentamos hoy cuando vamos al médico de cabecera y, para la mayoría de los que estamos leyendo esto, la Medicina 2.0 es lo que ha definido nuestra experiencia de la atención sanitaria desde que nacimos.
Pero a pesar de los avances significativos de la Medicina 1.0 a la 2.0, Attia sostiene que el sistema actual ha alcanzado sus límites. Reflexionando sobre sus primeros años como médico, señala: “El problema es que tratábamos a ambos tipos de pacientes, víctimas de traumatismos y enfermos crónicos, con el mismo guion básico: nuestro trabajo consistía en evitar que el paciente muriera, pasara lo que pasara”.
En su libro, Attia se centra en un problema concreto. Por un lado, vivimos mucho más tiempo que antes (medicina preventiva) mientras que, por otro, estamos cada vez más plagados de enfermedades neuro degenerativas crónicas como el Alzheimer y cardiovasculares como los accidentes cerebrovasculares. Mensaje clave: sobrevivimos más que nunca, pero nuestra calidad de vida en la tercera edad sigue igual o incluso ha empeorado. Este gráfico ilustra perfectamente el mensaje.
Esperanza de vida vs esperanza de vida saludable en Medicina 2.0 vs Medicina 3.0
Fuente: Outlive, Dr. Peter Attia
Es importante comprender las limitaciones de la Medicina 2.0 y, por tanto, del sistema de salud institucionalizado actual. La verdad es que existe un gran desfase entre lo que los médicos de cabecera han aprendido durante su formación (que en algunos casos podría haber sido hace décadas) y la vanguardia de la medicina hoy en día. Por ejemplo, a la mayoría de los médicos nunca se les ha enseñado formalmente el papel del sueño, el ejercicio y la nutrición en la prevención de problemas de salud. Esto es realmente desafortunado ya que estudios recientes han demostrado que estos se encuentran entre los principales determinantes absolutos de nuestro estado general de salud y la longevidad.
Aquí es donde entra en juego la Medicina 3.0. En esencia, la Medicina 3.0 es la siguiente fase de la evolución de la asistencia sanitaria: esta vez se hace hincapié en la medicina preventiva, personalizada y participativa. Como explica Attia, “la diferencia clave entre la Medicina 2.0 y la 3.0 tiene que ver con cómo y cuándo aplicamos nuestras tácticas. Normalmente, la medicina 2.0 interviene sólo cuando algo va mal de forma aguda, como una infección o un hueso roto, con soluciones a corto plazo para el problema inmediato. En la medicina 3.0, nuestras tácticas deben estar imbricadas en nuestra vida cotidiana. Las comemos, respiramos y dormimos, literalmente”. La medicina 3.0 se logra mediante una combinación de atención sanitaria preventiva (detección e intervención tempranas), así como medicina de precisión y toma de decisiones basada en datos (salud digital, IA y biomarcadores). “En resumen, la medicina 3.0 pone mucho más énfasis en la prevención que en el tratamiento… y considera al paciente como un individuo único”.
Del 2.0 al 3.0
Pasar de la 2.0 a la 3.0 significa, por definición, que cada persona tomará el control de su propia salud. A primera vista, esto puede asustar un poco. Otra forma de verlo es la democratización (o descentralización) de la asistencia sanitaria, que quizá suene un poco más atractiva. Este proceso de mayor responsabilidad por parte de las personas para sus propios resultados sanitarios sólo es posible ahora gracias a una confluencia de factores que, juntos, han hecho que la Medicina 3.0 sea por fin viable.
El primer pilar es la educación: libros como Outlive, del Dr. Peter Attia, adoptan un enfoque basado en los primeros principios de la salud y bienestar y empaquetan la ciencia de vanguardia en bocados digeribles que pueden ser consumidos (y puestos en práctica) por cualquier persona de la calle.
Del mismo modo, la proliferación de “influyentes de la salud y el bienestar” como Dr. Andrew Huberman (profesor asociado de neurobiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford) logra el mismo objetivo, pero a través del audio. Dr. Huberman produce un podcast semanal sobre un tema determinado relacionado con la salud, desde la higiene dental hasta cómo aprovechar la dopamina para superar la procrastinación. Muy recomendable.
Un segundo componente importante es la aparición de dispositivos sanitarios y pruebas de diagnóstico caseras. Uno de ellos es el anillo Oura, que recoge continuamente datos de más de 20 parámetros biométricos. Está diseñado para que parezca y se lleve como un anillo normal, pero lo mide todo: patrones de sueño, salud cardiovascular, temperatura corporal e indicadores de estrés. Mediante la recopilación de los datos del usuario, la aplicación Oura proporciona información y recomendaciones personalizadas para el usuario. Está claro que hay mercado para esto: Oura acaba de recaudar 200 millones de dólares con una valoración de 5.200 millones.
Pero la realidad es que para muchos de nosotros la medicina 2.0 seguirá dominando nuestras vidas durante algún tiempo. Y es importante señalar que la medicina 3.0 no es una condena total de la medicina institucionalizada. Por mi parte desde luego sé que, si me rompo la muñeca o tengo palpitaciones, lo primero a lo que acudiría sería a mi médico de cabecera, no a Spotify ni a mi estantería…
Tribuna de Faris Hamadeh, asesor en impacto en Portocolom AV.
Pese a que las caídas de los últimos días en los mercados puedan suponer oportunidades de compra, los responsables de inversiones de las gestoras españolas creen que todavía hace falta estabilidad y visibilidad para acercarse de nuevo al riesgo. En estos días de vaivenes extremos, en los que se negocian aranceles y se da la vuelta a todas las previsiones macroeconómicas, la cautela manda. Un posicionamiento defensivo, el uso de estructuras con opciones para prepararse ante los peores escenarios y la preferencia por Europa frente a EE.UU., así como la diversificación de las carteras, son algunas de las claves.
Hemos preguntado a CIOs y responsables de asset allocation de algunas gestoras nacionales sobre sus movimientos más recientes y la rotación de sus carteras, y sobre sus perspectivas macro y de mercado, y esto es lo que nos han contado.
Jacobo Ortega Vich, director de Inversiones para Europa de Santander Asset Management
Cambios y rotación de carteras: En circunstancias como las actuales, lo principal es ser paciente y no tomar decisiones extremas. Nuestro posicionamiento venía siendo ligeramente cauto en activos de riesgo, y los principales movimientos se han centrado en gestionar activamente las estrategias de opciones que teníamos implementadas, ya que el repunte de la volatilidad y vaivenes de los índices bursátiles nos han permitido ser activos en este frente. Si bien es cierto que a medio plazo caídas como las experimentadas suelen ser oportunidades de compra a largo plazo, se necesita cierta estabilidad. Es por ello por lo que seguimos abogando por cautela, poniendo el foco en horizonte de inversión y capacidad de asunción de riesgos de cada mandato.
Perspectivas macro y de mercado: El entorno macroeconómico venía apuntando a cierta desaceleración en el crecimiento con respecto al año 2024, principalmente en el caso de EE.UU. Las incertidumbres añadidas relativas a conflicto comercial no hacen sino apuntar a que incluso nos podamos encontrar ante un contexto todavía más complejo que no invita a tomar riesgos de manera agresiva. Seguimos poniendo el foco en el análisis fundamental y en la gestión activa de los riesgos como elementos diferenciadores a medio plazo, intentando evadirnos en la medida de lo posible de la volatilidad de las últimas sesiones de mercado.
Jorge Colomer, director general adjunto y director de Inversiones de CaixaBank AM
Perspectivas macro y de mercado: Cautela y gradualidad en los movimientos. Cautela porque el poso de fondo, detrás de anuncios y “desanuncios”, es el de una economía con mayor incertidumbre para operar, con un impacto en crecimiento y con un impacto en precios. El modelo de negociación de la administración americana nos lleva a ser cautos pero no extremos en el posicionamiento por diversos factores: la imprevisibilidad de dicho modelo, la demostración tácita de que puede existir un umbral máximo de impacto, el espacio de reacción fiscal para políticas de estímulo en el resto del mundo, el viento a favor del precio del crudo y el paso que puede suponer DeepSeek para la aceleración de la implementación de ganancias de productividad vía inteligencia artificial. Un escenario donde la política arancelaria podría llegar a arrastrar a la recesión a EE.UU. (en función de cómo termine el complejo entorno de negociación) y al resto del mundo a compensar parcial o totalmente el impacto. Por tanto, cautela sin caer en el pesimismo. Y gradualidad porque en este entorno de tanta volatilidad, con movimientos intradía de hasta un 10%, no hacerlo así puede convertir una buena decisión de fondo en un error de implementación. Una gradualidad con la que evitamos perseguir al mercado y sus noticias.
Cambios y rotación de carteras: Hemos reducido la exposición a renta variable situándola cerca de nuestro rango bajo histórico. Este movimiento lo hemos hecho reconociendo que el denominado “excepcionalismo” de crecimiento relativo de EE.UU. puede haber llegado a su fin: hemos reducido nuestra exposición al dólar, renta fija y renta variable americana en las carteras. De esta manera, en relativo marcamos una clara preferencia por la renta variable europea, con un ligero sesgo defensivo, y de países emergentes. En renta fija, nos mantenemos cerca de nuestros niveles de equilibrio en términos de duración y con una ligera preferencia por el riesgo de crédito o de países periféricos. En la construcción de carteras con distintas clases de activos, los diversificadores naturales como el dólar y su renta fija soberana no están funcionando en este escenario, por lo que, para compensar reducimos los niveles de riesgo, profundizamos en la diversificación geográfica y mantenemos la gestión alternativa.
Javier Egaña, director de Inversiones de Kutxabank Gestión
Cambios y rotación de carteras: En Kutxabank Gestión ya teníamos un posicionamiento prudente antes del anuncio de los aranceles, por lo que durante las últimas semanas los ajustes han sido puntuales. A partir de verano del pasado año ya pensábamos que las principales economías estaban cerca del final de ciclo económico y que el riesgo de una corrección ligada a las altas valoraciones de la renta variable americana era elevado. Por ello, durante los últimos meses en renta fija hemos mantenido duraciones altas y reducido la exposición a high yield.
En renta variable hemos resistido esta corrección gracias a un nivel bajo de inversión y una sobreponderación relativa de Europa frente a EE.UU y, en particular, a los Mag 7. Además de este posicionamiento fundamental, llevamos semanas construyendo una estructura de opciones para contener el peor de los escenarios, que hemos incrementado estos últimos días.
Perspectivas macro y de mercado: Prevemos que la volatilidad se mantendrá elevada durante los próximos meses, derivado del proceso de negociación arancelaria, con un ojo en el frente abierto entre EE.UU. y China por las potenciales repercusiones, tanto en el comercio internacional, como en los mercados de deuda y de divisas. No obstante, asumimos que la volatilidad es un factor intrínsecamente asociado a sentimientos puntuales de mercado y que la clave -y el actual escenario no es una excepción- es actuar racionalmente y no perder de vista los objetivos de largo plazo.
Aunque los últimos datos macro norteamericanos han sido razonablemente buenos, sobre todo los de IPC y empleo, sigue estando encima de la mesa un incremento de la inflación en el corto plazo y un fuerte impacto en el crecimiento en el medio y largo, sin descartar una recesión en EE.UU., si bien en nuestro principal escenario sería suave y corta. Por otro lado, las caóticas políticas de recortes en el gasto federal, el despido masivo de empleados públicos y la inminente deportación de inmigrantes añaden una incertidumbre estructural ya se reflejan en los indicadores adelantados de confianza empresarial. Por su parte la Fed ha tratado de suavizar los riesgos de recesión restando valor a las caídas de confianza debido a su escasa correlación con la actividad real y la creación de empleo.
En paralelo, el rumbo impredecible de la administración norteamericana y la dilución de los compromisos con sus aliados han sido catalizadores clave para que Europa apueste por el gasto público como palanca estructural que impulse el crecimiento. Alemania, el eslabón más débil, por su perfil cíclico y exportador y muy expuesto a los aranceles sobre automoción, ha abandonado su ortodoxia fiscal para dar luz verde a dos planes de estímulo masivo. Uno de 500.000 millones de euros en los próximos 12 años, con el foco en inversiones estratégicas en infraestructuras. Y otro en defensa e innovación tecnológica que se implementaría en un plazo de 5 años. La histórica decisión ha supuesto un cambio en la percepción del potencial de crecimiento de Alemania que, una vez estabilizadas las tensiones arancelarias, pensamos empujará al conjunto de países de la UE, reforzando nuestra preferencia por Europa.
Ignacio Dolz de Espejo, director de Soluciones de inversión de Mutuactivos
Perspectivas macro y de mercado: Los aranceles de Donald Trump han inyectado una gran dosis de incertidumbre en los mercados sobre las cadenas de suministro, los precios, la inversión y el crecimiento económico. La semana pasada, con las idas y venidas anunciadas por Trump, el mercado castigó a EE.UU. con la mayor subida semanal en TIR desde 1987 del bono del Tesoro a 30 años (+46 puntos básicos) y del bono a diez años (49 puntos básicos), hasta el 4,49%. También vimos la mayor ampliación entre el bono a 10 años y el Bund desde la reunificación alemana. Los mercados están imponiendo una “prima de riesgo” al “libre de riesgo” por excelencia.
Cambios y rotación de carteras: En el contexto actual, en Mutuactivos seguimos estando ligeramente infraponderados en bolsa, aunque hemos comenzado a comprar. Por otra parte, llevamos meses reduciendo el peso en renta fija privada y ahora también en este segmento estamos incrementando el peso en cartera, muy poco a poco y analizando bono a bono. Estamos en busca de oportunidades en ambos segmentos.
Miguel Castells, director de Inversiones de Unigest, la gestora del Grupo Unicaja
Cambios y rotación de carteras: Unas semanas antes del anuncio por parte de Donald Trump del nuevo sistema de aranceles de EE. UU. con el resto del mundo y de que se abriera el escenario de enorme incertidumbre económica en el que nos encontramos inmersos, consideramos que el riesgo que presentaban los mercados ya no justificaba los posibles retornos adicionales, y decidimos bajar exposición en activos de riesgo, principalmente renta variable y crédito. Al mismo tiempo, aprovechamos el fuerte repunte de rentabilidades en la deuda europea durante la primera mitad del mes de marzo, tras el anuncio del incremento de gasto previsto en Alemania y la dotación del fondo para la defensa del Viejo Continente, para incrementar la duración de tipos en nuestros fondos de renta fija y multiactivo a través de futuros sobre deuda soberana. Los cambios realizados nos han permitido capitalizar muy bien el movimiento de huida hacia la calidad en los mercados en estas primeras sesiones tras el ‘Día de la Liberación Económica’ de Estados Unidos, y por el momento hemos optado por mantener un posicionamiento muy prudente mientras dure esta situación de volatilidad extrema y los acontecimientos no permitan hacer un análisis más sosegado y fiable. Sin duda, el escenario que se ha abierto tendrá un enorme impacto sobre el crecimiento global y sobre la inflación, pero su magnitud dependerá en gran medida del tiempo que duren los nuevos gravámenes impuestos, las posibles contramedidas aplicadas por otros países o regiones y el nivel en el que finalmente se asienten, algo que está muy lejos de clarificarse.
Perspectivas macro y de mercado: En momentos de extremo pesimismo y enorme volatilidad como el actual, no conviene precipitarse a la hora de tomar decisiones en ningún sentido. Dicho esto, dada la magnitud del posible daño sobre el crecimiento en EE.UU. y el resto del mundo y las presiones que previsiblemente se observarán en los precios, parece que lo aconsejable por el momento es mantener un posicionamiento defensivo, a pesar de las fuertes caídas en estos primeros días tras el anuncio. En renta variable a corto y medio plazo, preferimos Europa frente a Estados Unidos, ya que, a pesar de que evidentemente se verá impactada por los aranceles, podrá ver compensado su efecto negativo con los vientos de cola que suponen los estímulos fiscales anunciados y la notable caída que están experimentando los precios de la energía. Preferimos por el momento defensivos frente a cíclicos y, aunque no tenemos un sesgo de inversión específico, sí creemos que las compañías de calidad en sectores menos impactados por la guerra comercial y con una buena retribución al accionista ofrecerán un mejor comportamiento.
En renta fija, es posible que sea momento para mantener un posicionamiento algo más agresivo en términos de duración a través de soberanos, ahora que las posibilidades de recesión han aumentado notablemente y con ellas las de un posicionamiento algo más dovish por parte de los bancos centrales, al menos en Europa. En crédito, hay que extremar la cautela, ya que es muy posible que veamos sufrimiento en los próximos meses, dado el entorno económico y unas valoraciones de partida muy elevadas. Dentro de este escenario general, trataremos de hacer una gestión táctica de la volatilidad y aprovechar las excelentes oportunidades que suelen surgir en momentos como el actual.
Jaime Martínez, director de Asset Allocation de BBVA Asset Management
Cuando se producen fuertes caídas en los mercados, se crea también un enorme riesgo de caer en sesgos conductuales. La probabilidad de tomar decisiones equivocadas en momentos de elevada tensión emocional son muy elevadas. Por este motivo, reajustar de forma radical el perfil de riesgo de nuestras carteras de inversión en estos entornos suele ser mala idea. Recomendamos no tomar decisiones en caliente, mantener la calma y la confianza en una hoja de ruta prefijada y confiar en que los gestores de su patrimonio serán capaces de sacar partido de un proceso de inversión disciplinado para adaptarse lo mejor posible al nuevo entorno.
Nuestro proceso de inversión está diseñado para separar el horizonte táctico, de corto y medio plazo, del horizonte estratégico, donde se recogen las perspectivas de largo plazo. A nivel estratégico, es evidente que se abre un escenario con un potencial impacto duradero en crecimiento e inflación, y por tanto en políticas monetarias y fiscales, como también en los márgenes empresariales y en las expectativas de crecimiento de beneficios de muchos sectores. Todas estas variables las analizaremos en detalle en las próximas semanas, junto con los cambios en las valoraciones de los diferentes activos, para establecer un nuevo marco de preferencias relativas.
Las medidas arancelarias anunciadas han sido peores que las esperadas y el daño dependerá del tiempo de su vigencia y de las posibles represalias de otros países. Como amortiguantes tendríamos el sector privado, donde familias y empresas mantienen una estructura bastante saneada, y en Europa, los efectos positivos del impulso fiscal. El impacto en crecimiento es claramente negativo, pero su magnitud depende de las incertidumbres antes apuntadas. Por otro lado, la inflación también sufriría presiones al alza, especialmente en EE.UU.
El riesgo de recesión global ha aumentado, al igual que el nivel de incertidumbre. Todo ello se traduce en un posicionamiento táctico más cauto en activos de riesgo, que nos permita navegar de forma más segura el fuerte oleaje de los mercados en los próximos días o semanas. Cabe recordar además, la importancia de mantener una verdadera diversificación de las carteras, no solo por clase de activo, sino también por horizonte temporal o a través de fuentes de rentabilidad alternativas.
Rui Mota Guedes, director de Inversiones de Loreto Inversiones
Nuestra opinión es que los mercados han sobrerreaccionado. Sin duda, un incremento de aranceles es negativo para el crecimiento global y la inflación, y eso debe tener un impacto en los mercados bursátiles. Sin embargo, no creemos que esta situación vaya a desencadenar una crisis económica como las dos últimas que hemos vivido, especialmente en las economías desarrolladas, donde el consumo se concentra mayoritariamente en servicios, y no en bienes. Incluso si asumiéramos que estos nuevos aranceles del 22 % en EE.UU. han llegado para quedarse, la economía global se encuentra en una situación de fortaleza muy diferente a la de antes de la crisis financiera.
Destacamos tres factores clave: los balances del sector privado están hoy mucho más saneados y tanto empresas como familias han reducido su endeudamiento, principalmente las familias; las instituciones financieras —especialmente los bancos— cuentan con niveles de capital mucho más elevados, lo que les permite afrontar una desaceleración económica con mayor solidez; y los gobiernos han aprendido —para bien o para mal— que pueden intervenir de forma decidida en la economía mediante políticas fiscales expansivas capaces de sostener la actividad en el corto plazo.
¿Significa esto que todo volverá pronto a la normalidad? No necesariamente. Es probable que tengamos que convivir con precios de productos algo más elevados y, lo que es peor, con una mayor incertidumbre sobre las futuras decisiones de la administración estadounidense. Pero, a día de hoy, no creemos que esto sea suficiente para justificar una caída prolongada y profunda en los activos financieros, especialmente en la renta variable, similar a las observadas en crisis anteriores.
Como siempre, seguiremos apostando por una gestión activa y flexible, adaptándonos al entorno cambiante y con el objetivo de generar valor para nuestros inversores a largo plazo.