Foto cedidaNaïm Abou-Jaoudé, nuevo CEO de New York Life Investment Management.
Cadriam ha anunciado importantes cambios en su organigrama a raíz de la decisión de New York Life, la mayor mutua de seguros de vida de Estados Unidos, de nombrar a Naïm Abou-Jaoudé, hasta ahora CEO de la gestora, nuevo consejero delegado de New York Life Investment Management.
En consecuencia, Vincent Hamelink, director general de Inversiones de Candriam, sucederá al Abou-Jaoudé como consejero delegado de Candriam, y Renato Guerriero, director general de Ventas y Distribución, ocupará el cargo de consejero delegado adjunto a su actual cargo. Según matizan desde la compañía, ambos comenzarán a desarrollar sus nuevas funciones a partir del 1 de mayo de 2023.
Tras una carrera de 30 años en la gestión de inversiones, incluidos 16 años como CEO de Candriam, Abou-Jaoudé asumirá el cargo de consejero delegado del negocio global de gestión de inversiones de New York Life el 1 de mayo de 2023. Desde su nuevo cargo dependerá de Alain Karaoglan, director de Negocios Estratégicos de New York Life y será responsable de la operativa global multiboutique de NYLIM, con oficinas en EE.UU., Reino Unido, Europa, Asia y Australia, y de sus plataformas operativas diversificadas de fondos de inversión y ETF en EE.UU.
«Naïm es un líder consumado en el sector de la gestión de activos, con un sólido historial de logros como Consejero Delegado de Candriam. Confío plenamente en el liderazgo y la visión que aportará a NYLIM en los próximos años», ha destacado Craig DeSanto, consejero delegado y presidente de New York Life.
Desde la firma destacan que, en la última década, NYLIM ha visto cómo sus activos gestionados se han duplicado con creces hasta alcanzar los 371.000 millones de dólares gracias a una combinación de expansiones geográficas, iniciativas orgánicas y adquisiciones. En la actualidad, el negocio internacional de NYLIM representa el 45% del total de activos gestionados.
«Candriam es uno de los gestores de activos de más rápido crecimiento en Europa, una historia de éxito que estamos muy orgullosos de compartir, duplicando los activos bajo gestión desde que Candriam fue adquirida. Tengo plena confianza en que, bajo la dirección de Naïm, NYLIM y Candriam continuarán su trayectoria de crecimiento», ha declarado Alain Karaoglan.
Tras conocer su nombramiento, Naïm Abou-Jaoudé, CEO de New York Life Investment Management, ha declarado: ·Me siento honrado de dirigir NYLIM como su Consejero Delegado. Formó parte de la familia New York Life desde hace casi una década y durante este tiempo he sido testigo de una empresa que demuestra los mejores principios de gestión de activos. Confío en que seguiremos aportando un importante valor a largo plazo a todas nuestras partes interesadas”.
Además, sobre el relevo anunciado en Candriam ha añadido: “Estoy inmensamente orgulloso de traspasar el liderazgo de Candriam a Vincent Hamelink y Renato Guerriero, que han desempeñado un papel decisivo en el crecimiento de la empresa, desarrollando una plataforma de inversión que ha proporcionado sistemáticamente rendimientos a largo plazo a los inversores y acelerando la demanda de la marca Candriam. Espero que Candriam siga cosechando éxitos bajo su dirección».
Por su parte, Vincent Hamelink, nuevo CEO de Candriam, ha comentado: “He trabajado con Naïm durante más de 20 años, desarrollando el negocio y la plataforma de inversión de Candriam, que hoy es conocida por su capacidad de gestión de fondos high yield y sus innovadoras soluciones de inversión. Es un privilegio asumir el cargo de Consejero Delegado y confío en que seguiremos aportando un valor significativo a nuestros clientes, accionistas y a todas nuestras partes interesadas”.
Inversis ha ofrecido su visión global y regional del actual escenario macroeconómico en base al cual prepara su estrategia de inversión para el primer trimestre de 2023. Así, de la mano de su estratega jefe macroeconómico, Ignacio Muñoz-Alonso, la entidad ha destacado que tanto los mercados como la economía global estarían entrando en un punto de inflexión, con la aparición de los primeros indicios que apuntan a una normalización, aunque sin poder descartar todavía la llegada de nuevas turbulencias. En este contexto, Inversis prevé una contracción de la economía menor de lo esperado, del 1,7% para 2023.
Al ser esta una desaceleración provocada por los bancos centrales, los expertos de la entidad descartan que se vaya a producir una recesión profunda y duradera ya que todo apunta a que podrá ser gestionada por los propios bancos centrales. A pesar de que algunas economías como la de la zona euro podrían haber entrado ya en territorio negativo o que lo pueda hacer EE.UU. el próximo trimestre, la previsión es que las principales zonas económicas del planeta puedan cerrar el conjunto del año en positivo.
La inflación y tipos de interés seguirán marcando 2023
La inflación a nivel global ha mejorado en los últimos meses y ya cada vez menos economías registran crecimientos del IPC; sin embargo, es improbable que el índice de precios cierre 2023 dentro del rango de confort de los bancos centrales. Según Inversis, aún persisten riesgos de desvíos incontrolados de los precios a medio plazo debido al riesgo de empeoramiento de las condiciones geopolíticas, del impacto de la reapertura de China o un repunte inflacionario.
Pese a esta moderación de los índices generales, la inflación subyacente continúa siendo persistente en muchas economías y se ha convertido en una de las prioridades de los bancos centrales, que de persistir esta tendencia al alza les obligaría a mantener los tipos de interés en niveles máximos durante más tiempo del anticipado por los mercados.
En todo caso, estas decisiones dependerán del efecto que sobre las economías tengan los mayores tipos de interés. Todo apunta a que 2023 debería marcar el punto de inflexión, aunque no el inicio de un ciclo de bajadas que podría retrasarse hasta 2024 y siempre condicionado a una moderación de la inflación subyacente, el enfriamiento del mercado de trabajo en Estados Unidos ya en un período prolongado de estabilidad de precios.
Panorama regional
La economía de EE.UU. sigue dando muestra de resistencia más allá de lo esperado y apunta a un crecimiento del 0,5% a final de año ayudado por una tasa de desempleo en mínimos, y la resistencia del consumo de servicios. El crecimiento de los salarios se sitúa como motor de la subida de la inflación subyacente y, por tanto, prioridad de la Fed. Aun así, todo apunta a que la inflación habría tocado techo en junio y la tendencia general apunta a una moderación de los precios con un IPC que podría moverse entre el 3 y el 3,5% a cierre de 2023.
En Europa, la actividad se contraerá, pero de una manera menos intensa y duradera de lo inicialmente previsto. Todo apunta a un cierre de año en tablas, con un crecimiento del 0% de PIB. La energía, en especial el gas y la electricidad, y la demanda interna marcarán el ritmo de la inflación que seguirá al alza durante los primeros meses del año con una previsión de moderación para la segunda mitad del ejercicio que podría finalizar en el 6,3%. La inflación subyacente también continuará aumentando impulsada por los alimentos y los salarios hasta superar el 4%.
En el caso de China, el fin de las políticas de COVID cero impulsarán su PIB hasta el 4,3% este año. La reapertura de la economía del gigante asiático comienza ya a notarse en los países vecinos que podrían disfrutar de una normalización de la demanda en verano pero que a nivel global no se registraría hasta 2024. La vuelta de China tiene también un componente de preocupación al representar una mayor demanda de energía y materias primas con la consecuente amenaza para los precios.
El papel de los bancos centrales
Todo apunta a que la Fed continuará subiendo los tipos de interés, pero a un ritmo menor, que podría concretarse en las reuniones de febrero y marzo con subidas de entre el 0,25 y el 0,5%. En consecuencia, lo esperable es un periodo prolongado de tipos en niveles máximos hasta alcanzar niveles del 5 o 5,5% a final de año, y no sería hasta 2024 cuando veamos las primeras bajadas.
El BCE por su parte cambia el tono ante una previsión de desaceleración más leve. El organismo no espera alcanzar el objetivo de inflación del 2% hasta el año 2025, lo que anticipa también un ciclo largo de subidas que podría extenderse hasta final de año. La previsión es que en febrero se anuncie una subida de medio punto hasta el 2,5% sin descartar que a cierre de ejercicio los tipos de intervención lleguen al 3%.
Estrategia de Asset Allocation de Inversis para este primer trimestre del año
En renta fija las expectativas de moderación de los bancos centrales hacen atractivos de nuevo los bonos soberanos con un aporte positivo a la diversificación de carteras y retornos moderados en 2023 si se confirma el enfriamiento de la inflación. Las curvas de tipos actuales invitan a tomar posiciones en corto plazo, disminuyendo duración.
En cuanto a renta variable aún es demasiado pronto para anticipar tendencias, aunque los mercados de acciones parecen mostrar un tono más constructivo con algunos titubeos en el arranque de 2023. Hay sensación de que lo peor ya ha pasado, de que el riesgo de recesión persiste, pero controlado, y que se está produciendo una ralentización de rotación de carteras hacia la renta fija. Con este escenario, las estimaciones de rentabilidad se presentan en general con ganancias moderadas para 2023.
A nivel sectorial, Inversis apuesta por deshacer a corto plazo posiciones en sectores ganadores del periodo COVID, como tecnología, energía y salud y posicionarse en sectores defensivos proclives a crecer en los próximos trimestres como el consumo básico o utilities, y también en aquellos que pueden trasladar precios a márgenes, como servicios de consumo, hostelería y turismo.
Foto cedidaIván Piqueras, Pablo del Moral y Gerardo González.
A&G continúa ampliando su red en el territorio español con la apertura de una oficina en La Coruña, ubicada en el número 5 de la Calle Sánchez Bregua. La presencia de A&G en Galicia se consolida con la apertura de una nueva oficina en La Coruña tras la incorporación de tres banqueros senior.
Como parte del compromiso de ofrecer el mejor servicio al cliente a través de una relación cercana y del talento humano, en junio de 2022 A&G incorporó a sus filas a tres banqueros senior basados en Galicia, con una dilatada trayectoria profesional y gran reconocimiento en el sector. Los banqueros Pablo del Moral, Gerardo González e Iván Piqueras lideran desde entonces la actividad de A&G en la comunidad.
La recién inaugurada oficina en La Coruña es la undécima que A&G tiene en España que se suma a las que la firma posee en Madrid, Barcelona, Bilbao, León, Logroño, Santander, Sevilla, Pamplona, Valladolid y Valencia.
Juan Espel, director general comercial de A&G, señala: “Estar cerca del cliente, ofrecer el mejor servicio y contar con el mejor equipo son piezas fundamentales de nuestro negocio, no se trata de abrir oficinas sin más, sino de contar con el equipo adecuado, el motor y el alma de A&G. Estamos muy satisfechos con la apertura en Galicia».
A&G fue fundada en 1987 y es una de las principales entidades independientes de banca privada en España. En la actualidad cuenta con 225 empleados además de 91 banqueros distribuidos en once oficinas y 12.405 millones de euros en activos bajo gestión a 31 de diciembre de 2022. El grupo tiene una gestora en España y otra en Luxemburgo, así como una entidad especializada en Inversiones no financieras como Real Estate y Corporate
Finance- M&A.
A&G ha sido elegida como la Mejor Banca Privada de España y el Mejor Servicio al Cliente, en las dos ediciones de los premios otorgados por Citywire, y como la Mejor entidad nacional de Banca Privada, en la primera edición de los Wealth Management Awards de FundsPeople, galardón votado íntegramente por proveedores de la industria de Banca Privada.
Dunas Capital AM ha cerrado 2022 con toda su gama en terreno positivo y un crecimiento del 30% en captaciones respecto al año anterior. La gestora, según ha explicado Borja Fernández-Galiano, responsable de Ventas, ha alcanzado los 1.750 millones de euros en activos líquidos bajo gestión tras registrar captaciones netas por valor de 445 millones de euros. En activos alternativos, gestionan ya alrededor de 300 millones de euros, por lo que en total Dunas Capital cuenta con más de 2.000 millones de activos bajo gestión.
Según ha explicado Alfonso Benito, CIO de Dunas Capital AM, ha sido su enfoque multidisciplinar basado en la diversificación por activos lo que les ha permitido cerrar 2022 con todos los fondos de la gama Dunas Valor en terreno positivo. «Además, los fondos Dunas Valor Equilibrado y Dunas Valor Flexible han obtenido la clasificación cinco estrellas de Morningstar. De cara a 2023, seguiremos poniendo el foco en la gestión colegiada, que nos permite ser predecibles y confiables al invertir con paciencia únicamente cuando identificamos valor en el medio plazo», explica.
Posiciones largas en deuda pública estadounidense y más duración en crédito
La gestora también ha aprovechado para hacer pública su visión de mercados y estrategia de inversión para este año. Por tipos de activos, la gestora mantiene posiciones ligeramente largas en deuda pública americana y ha ido incrementando las duraciones de crédito respecto hace 12 meses, tras aumentar sus posiciones en bonos más líquidos y en empresas de mayor calidad.
En cuanto a la renta variable, los expertos consideraron que los precios de las acciones aún tienen que ajustarse a la baja, ya que las valoraciones actuales todavía no reflejan la ralentización de la economía ni las condiciones de los tipos normalizados.
Asimismo, señalaron que los márgenes empresariales, tras mantenerse en niveles elevados por la capacidad de trasladar a los precios las subidas de los costes, se ven ahora amenazados por la desaceleración de la economía, los incrementos salariales y los costes financieros, lo que podría traducirse en un deterioro de los beneficios por acción. En este sentido, estiman que a corto plazo muchas empresas se verán obligadas a priorizar la solvencia frente a la retribución al accionista para contener sus costes financieros. Además, observaron que la rentabilidad exigida por los inversores tras los acontecimientos de 2022 ha cambiado de forma muy significativa, especialmente en el mundo de la renta fija, y más concretamente en high yield, que ahora ofrece rentabilidades próximas a la renta variable.
Por sectores, el equipo gestor de Dunas Capital AM ve una clara oportunidad de invertir en empresas de redes de transporte de energía y en petroleras integradas con exposición a gas. Al mismo tiempo, se mantienen moderadamente optimistas en defensa. También encuentran valor en algunas compañías en industrias cíclicas muy castigadas por los incrementos de costes de energía, transporte y materias primas, pero con carteras de pedidos récord y valoraciones muy atractivas, en las que se espera una evolución positiva.
El optimismo de los mercados podría llevar a decepciones
Desde un punto de vista macro, prevén que la inflación general, por efectos base, caiga en la primera parte del año, aunque podría repuntar al final de 2023 debido a una posible reaceleración de la economía y a efectos de segunda ronda apoyados por las subidas salariales, especialmente en Europa. La evolución de la inflación será la clave de las decisiones de los bancos centrales y de los mercados financieros durante los próximos meses. Los mercados ya han ido descontando bajadas de tipos en la última parte del año y podrían llevarse una decepción relevante si esto no ocurre.
Por otro lado, la guerra de Ucrania, además de impactar en el mercado energético, continuará provocando tensiones en la producción y en la oferta de alimentos. La clave para evitar la estanflación será el mantenimiento de los empleos a nivel mundial. Si se mantienen, a pesar de la significativa pérdida de las rentas del poder adquisitivo, el consumo sostendrá a la economía, aunque a tasas bajas.
Amundi ha anunciado el lanzamiento de un nuevo ETF de bonos corporativos en euros que replica un de los índices PAB (Paris-Aligned Benchmark). Según señala la gestora, esta nueva oferta reafirma su compromiso de ofrecer a los inversores una gama amplia y granular de ETFs climáticos. Sobre el fondo explica que “esta nueva exposición es el resultado de un cambio de índice y de marca de Lyxor ESG Euro Corporate Bond (DR) UCITS ETF, que se produjo el 11 de enero”.
Amundi EUR Corporate Bond Climate Net Zero Ambition PAB UCITS ETF replica el índice Bloomberg MSCI Euro Corporate Paris Aligned Green Tilted. Según la gestora, se trata del ETF más competitivo en esta exposición y uno de los mayores disponibles en el mercado. El índice replicado por el ETF proporciona exposición a bonos corporativos investment grade denominados en euros, aplica exclusiones ESG estrictas para compañías implicadas en actividades controvertidas y cumple los requisitos de los índices de referencia alineados con el Acuerdo de París de la UE, apoyando un mundo Net Zero para 2050 y limitando el aumento de la temperatura media global a 1,5 °C. También sigue una trayectoria de reducción absoluta de las emisiones de carbono del 7% anual y una reducción inmediata del 50% de la intensidad de carbono en comparación con el universo de inversión. Además, el índice integra un sesgo hacia los bonos verdes, sobreponderando los bonos verdes y favoreciendo compañías con necesidades de financiación de proyectos ecológicos4
“Los ETF son componentes básicos importantes para apoyar la transición climática de las carteras de renta fija. Con este nuevo ETF, seguimos comprometidos con la transformación de nuestra oferta de ETF para ofrecer a los inversores una amplia gama de ETF climáticos, tanto en clases de activos de renta variable como de renta fija”, señala Arnaud Llinas, director de ETF, Indexing & Smart Beta de Amundi.
Por su parte, Juan San Pío, director comercial de Amundi ETF, Indexing &Smart Beta para Iberia y Latinoamérica, subraya que “con la ampliación de nuestra gama de ETFs climáticos en renta fijaofrecemos a los inversores un instrumento adicional respondiendo a la creciente demanda que vemos en este tipo de soluciones”.
Amundi cuenta con la mayor oferta de ETFs climáticos y ESG disponible en el mercado, con cerca de 100 ETF UCITS5 . Esta iniciativa forma parte del Proyecto Social del Grupo Crédit Agricole y de su compromiso con el clima.
La gestora australiana Maple-Brown Abbott ha anunciado una asociación con Hyde Park Investment (HPI) para distribuir sus fondos UCITS en varios países europeos, entre ellos en Reino Unido, Suecia, España, Italia, Suiza, Alemania y Francia.
Según ha explicado Sophia Rahmani, consejera delegada y directora general de Maple-Brown Abbott, esta asociación con HPI permitirá distribuir los fondos UCITS de la gestora a una amplia gama de compradores de fondos UCITS, incluidos gestores de patrimonios, family offices y banca privada, al tiempo que se seguirá trabajando con inversores institucionales y sus asesores. Además, este acuerdo de distribución amplía la actual relación de Maple-Brown Abbott con Douse Associates, que ha sido su socio de calidad durante 17 años en los que se ha centrado en inversores institucionales y sus asesores, y algunos compradores de UCITS en el Reino Unido y Suiza. En el caso de España, South Hub Investments se encargará de la distribución de los fondos.
«Nuestro objetivo es consolidar nuestra presencia actual en el Reino Unido y Europa para nuestros fondos UCITS existentes sobre infraestructuras cotizadas globales y renta variable asiática, así como para los fondos que tenemos previsto lanzar en el futuro, como los de mercados emergentes globales», ha matizado Rahmani.
En su opinión, cuentan con las capacidades de inversión atractivas y diferenciadas, gestionadas por equipos galardonados y reconocidos en todo el mundo. “Esto incluye la integración desde hace tiempo de los factores medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en el proceso de inversión de todas nuestras estrategias. Todos nuestros fondos UCITS existentes están registrados con arreglo al artículo 8″, ha añadido la responsable de la firma. Según Rahmani, confían en que el equipo de HPI esté alineado con su cultura y valores en Maple-Brown Abbott, y creen que el modelo de distribución de HPI, con equipos experimentados sobre el terreno en el Reino Unido, Suecia, Francia, Italia y España y su sólida trayectoria en la captación de activos, ampliará su base de inversores en estos mercados.
Sobre este nuevo acuerdo, Hako Finckenstein, director de Hyde Park Investment, ha señalado: “Estamos encantados de representar los fondos UCITS de Maple-Brown Abbott en el Reino Unido y Europa. Esta asociación es una alineación natural de nuestros negocios y valores, en particular nuestro compromiso mutuo con la ESG. Maple-Brown Abbott tiene casi 40 años de excelente pedigrí de inversión y una oferta de productos única muy reconocida en el mercado. Nos anima el interés que ya han mostrado nuestros clientes, especialmente en relación con la capacidad ESG integrada de Maple-Brown Abbott”.
“Como gestora boutique de inversiones a nivel con una gama de estrategias de inversión diferenciadas, estamos entusiasmados de trabajar con dos socios establecidos y bien respetados para continuar construyendo relaciones más profundas con clientes existentes y futuros en el Reino Unido y Europa”, ha concluído Rahmani.
Creemos que los bonos investment grade de alta calidad, especialmente los bonos del Estado, se encuentran en un punto dulce de cara a 2023, ya que una confluencia de rendimientos atractivos y un punto de inflexión en los tipos abre el potencial de fuertes rentabilidades. En el caso de los mercados de renta fija, el endurecimiento de la política en 2022 para atajar la inflación resultó doloroso a medida que los rendimientos aumentaban.
Sin embargo, la corrección de los precios elevó de nuevo los rendimientos de la deuda pública a niveles no vistos en más de una década. Algo similar ocurrió con los bonos corporativos con calificación investment grade, donde subieron tanto los diferenciales de crédito como los rendimientos.
Gráfico 1. Rendimiento de la deuda pública
Fuente: Bloomberg, rendimiento de la deuda pública genérica estadounidense a 10 años, rendimiento de la deuda pública genérica del Reino Unido a 10 años, rendimiento de la deuda pública genérica alemana a 10 años, del 1 de enero de 2020 at 29 de noviembre de 2022. Los rendimientos pueden variar y no están garantizados.
La rapidez y magnitud del endurecimiento de los bancos centrales provocó que las curvas de rendimiento se aplanaran e invirtieran, lo que significa que los bonos a más corto plazo están pagando rendimientos similares (si no superiores) a los bonos a más largo plazo. Esto está creando una rara oportunidad para que los inversores obtengan mayores ingresos por la tenencia de bonos a corto que por aquellos a largo plazo, al tiempo que se exponen a un menor riesgo de tipos de interés.
Sin embargo, los niveles atractivos de ingresos de los bonos muestran solo la mitad del panorama. Creemos que 2023 será también un punto de inflexión para el ciclo de tipos a medida que los bancos centrales modifiquen sus políticas en respuesta al descenso de la inflación y a la recesión económica. Esto significa que, aunque los bonos a corto plazo son de nuestro agrado, mantener únicamente bonos a corto plazo podría tener un coste de oportunidad, que sería renunciar potencialmente a mayores plusvalías por mantener bonos a más largo plazo a medida que bajan los tipos.
Los rendimientos de los bonos a menudo se desbordan cuando la inflación subyacente se disparada al entrar en una recesión económica. Esta disociación entre los rendimientos de la deuda pública y las perspectivas económicas se produjo a finales de 2022, cuando los rendimientos de la deuda subieron a pesar de la disminución de nuevos pedidos del sector manufacturero (gráfico 2). Esperamos que los rendimientos de la deuda pública vuelvan a vincularse a los datos económicos. Creemos que el rendimiento de la deuda pública estadounidense a 10 años podría acercarse al 2 % a finales de 2023, después de estar por encima del 4 % en el cuarto trimestre de 2022. Esto podría generar sólidas plusvalías en la deuda pública y también tener consecuencias positivas para los bonos corporativos de mejor calidad con calificación investment grade, ya que estos bonos suelen ser sensibles a los movimientos de los tipos.
Gráfico 2. Nuevos pedidos del ISM frente al rendimiento de la deuda pública estadounidense a 10 años
Los rendimientos de los bonos se desbordan cuando la inflación subyacente se dispara en las crisis del crecimiento (marcado con un círculo).
Fuente: Bloomberg, Janus Henderson Investors, nuevos pedidos del sector manufacturero del Institute for Supply Management (ISM), rendimiento de la deuda pública estadounidense a 10 años, del 30 de noviembre de 1972 al 30 de noviembre de 2022. La rentabilidad histórica no predice las rentabilidades futuras.
No hay garantía de que las tendencias pasadas continúen o que las previsiones vayan a cumplirse. Creemos que estamos atravesando un ciclo económico típico, en el que el exceso de estímulo de los dos últimos años está dando paso a una desaceleración y una recesión con el endurecimiento de las políticas. Los principales indicadores económicos están en alerta roja. El mercado de la vivienda ya ha empezado a sufrir y los beneficios empresariales parecen haber tocado techo. Creemos que es solo cuestión de tiempo (puede que incluso a principios de 2023) para que las nóminas no agrícolas comiencen a reflejar en sus datos de que las empresas están recortando empleos. La Encuesta de los hogares de EE. UU. ya está registrando pérdidas de trabajo mientras que los datos sobre retenciones de impuestos parecen respaldar el descenso de empleo observado en la encuesta. El índice de indicadores adelantados (LEI) de la Conference Board, un indicador muy fiable sobre el empleo desde los años sesenta, sugiere que las nóminas no agrícolas van a caer.
Gráfico 3. El LEI como indicador del empleo en unos seis meses
Fuente: Bloomberg, Janus Henderson Investors, índice de indicadores adelantados (LEI) de la Conference Board para EE. UU. con un adelanto de seis meses, Oficina de estadísticas laborales de EE. UU., nóminas no agrícolas. Del 30 de noviembre de 1972 al 31 de octubre de 2022. La rentabilidad histórica no predice las rentabilidades futuras.
Los mercados están descontando una pausa en las subidas de tipos de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) a principios de 2023, seguida de una fase de estancamiento mientras se evalúa el panorama y puede que quizá un recorte a finales de 2023. No estamos convencidos de que 2023 vaya a desarrollarse así. Y lo que es más importante, esto no es lo que suele hacer la Reserva Federal. La Fed rara vez deja de actuar. En los años setenta y ochenta, subió los tipos hasta que pudo controlar la inflación e inmediatamente después empezó a recortarlos. Tiene una baja tolerancia al aumento del desempleo.
Creemos que la Fed se alarmará y empezará a reducir los tipos tras unas cuantas publicaciones de datos negativos sobre nómina no agrícolas. Esto podría ocurrir incluso en la primera mitad de 2023. Las recesiones matan la inflación, así que, si el desempleo aumenta, creemos que la Fed reconsiderará su doble cometido (estabilidad de precios y pleno empleo) y pasará a prestar más atención a lo segundo.
Este cambio en la política depende de que baje la inflación, pero creemos que esta ya ha llegado a su máximo en EE. UU. y que podría descender rápidamente en 2023 en Europa a pesar de las distorsiones causadas por la crisis energética. Los precios de las materias primas y las mercancías se han tambaleado, lo que debería ayudar a reducir las cifras de inflación. El desplome del crecimiento del dinero amplio también sugiere que el reciente repunte de la inflación se desvanecerá a lo largo de 2023. Incluso medidas rezagadas, como los alquileres de mercado, se están suavizando.
Ninguno de los principales indicadores económicos que observamos ha tocado fondo, por lo que prevemos un mayor deterioro económico y nos cuesta creer que la economía vaya a lograr un aterrizaje suave. En este entorno, creemos que hay poco beneficio en exponerse demasiado en cuanto a riesgo crediticio, sobre todo porque los diferenciales de crédito en bonos high yield con calificación inferior a investment grade están descontando un aterrizaje suave y serían vulnerables a una ampliación en caso de recesión. Las ventas de high yield podrían suponer una gran oportunidad de compra para esta clase de activos más adelante en 2023, pero no vemos ninguna necesidad de arriesgarse prematuramente, cuando el potencial de rentabilidad ajustada al riesgo es tan atractivo en los bonos investment grade en este momento.
El riesgo para nuestra perspectiva es que los datos no cooperen, que el mercado laboral siga siendo sólido y que la inflación se niegue a bajar. Sin embargo, si este fuera el caso, entonces esperaríamos ver una política de los bancos centrales más restrictiva y una recesión económica aún más severa, un resultado que en última instancia favorecería a los bonos con más alta calificación, en particular a los bonos soberanos, ya que los inversores buscarían refugios «relativamente» seguros. Tal y como lo vemos, pensamos que simplemente hay demasiados datos que apoyan nuestra convicción de que estamos a un paso de que la deuda pública y corporativa investment grade muestre sólidos resultados en 2023.
Tribuna de John Pattullo y Jenna Barnard, codirectores de renta fija global de Janus Henderson Investors.
Puede encontrar más ideas de inversión de Janus Henderson Investors aquí.
Durante la presentación preliminar de sus resultados de 2022, GAM ha anunciado el nombramiento de Jacqui Irvine como vicepresidenta, en sustitución de Benjamin Meuli, quien se jubiló a finales de 2022. Según destacan desde la gestora, Irvine es miembro del Consejo de Administración de GAM Holding AG desde mayo de 2019; además de formar parte del comité de riesgos, del comité de compensación y presidenta del comité de gobernanza y nombramientos.
Cuenta con un larga trayectoria profesional de la que, en particular, destaca su paso por Janus Henderson Group, donde fue Consejera General del Grupo y Secretaria de la Sociedad hasta 2018. Ocupó el mismo cargo en Henderson Group, al que se incorporó en 1996, desde 2011 hasta la fusión con Janus Capital Group en 2017.
Irvine se tituló como abogada en 2000 y es licenciada en Derecho y Psicología por la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo, posee un diploma de posgrado en Derecho por la Universidad del Oeste de Inglaterra en Bristol, así como un diploma de posgrado en Práctica Jurídica por el College of Law de Londres. Nació en 1972 y es ciudadana británica.
Resultados anuales
Este anuncio se ha producido a la par que GAM Holding AG haya proporcionado una actualización de los resultados del ejercicio completo 2022 y cambiado la fecha de presentación de resultados al 25 de abril de 2023. Según ha adelantado la firma, el Grupo espera reportar una pérdida subyacente antes de impuestos de aproximadamente 42,8 millones de francos suizos (42,74 millones de euros) para todo el año 2022.
A estos resultados se suma otra noticia negativa en su accionariado, Bantleon AG, el mayor accionista de GAM, ha reducido su participación en GAM Holding AG, pasando de tener el 9,41% de las acciones en octubre de 2022 al 4,24% en 2023.
Por su parte, y a raíz de la previsión de los resultados anuales, David Jacob, presidente de GAM Holding AG, ha señalado: «2022 fue un año difícil, en el que nuestros resultados financieros acusaron el impacto de un descenso de nuestros activos bajo gestión impulsado por el mercado. Sin embargo, Peter Sanderson ha liderado un equipo que ha logrado un fuerte rendimiento de las inversiones para nuestros clientes y un progreso material en la simplificación del negocio, impulsando nuevas eficiencias y cumpliendo con nuestros objetivos de costes. El Consejo está trabajando incansablemente para garantizar que la empresa esté estratégicamente posicionada en el mejor interés de todas nuestras partes interesadas y por esta razón hemos decidido retrasar nuestra presentación de resultados para poder ofrecer una actualización más informativa sobre nuestros progresos».
Los habitantes de zonas costeras saben que las tormentas dan unas señales al inicio de su formación, pero el verdadero alcance de éstas no se conoce hasta que el huracán se acerca a tierra. A la luz de los datos, algo similar puede estar sucediendo con la economía europea para este 2023.
Desde nuestro punto de vista, no es atrevido afirmar que la esperada recesión económica para 2023 puede ser la más anticipada de la historia. Razones no han faltado para ello: la inflación, el cambio de sesgo radical de los bancos centrales, la inversión de la curva de tipos, las caídas de la renta variable en 2022… todo ello apuntaba a una rápida contracción económica para este año entrante.
El problema se encuentra en que, al igual que en las tormentas, en el camino desde su formación a la llegada a destino muchos factores pueden interactuar para cambiar el rumbo y el impacto de la crisis económica.
En el caso concreto de Europa, la evolución del precio de la energía parece ir drenando poco a la inflación y restando presión a un BCE decidido a subir los tipos lo que sea necesario. Adicionalmente, ese abaratamiento de la energía incidirá directamente sobre unas cifras de crecimiento que han venido revisándose sistemáticamente a la baja a lo largo de los últimos meses. La reapertura de China es otro factor que tiene un impacto significativo sobre las economías exportadoras europeas y que permitirá mejorar las perspectivas económicas del Viejo Continente.
Todo esto parece ser lo que están descontando los mercados europeos en este inicio del año, con subidas que alcanzan los dos dígitos en el Eurostoxx 50 o con un excelente comportamiento del espectro más arriesgado dentro de la renta fija. El comportamiento pendular de los mercados ha vuelto a aparecer para poner de manifiesto la inutilidad de intentar hacer previsiones certeras sobre eventos sobre los que no tenemos ningún control.
Tampoco nos haría bien ignorar ciertos factores que no han desaparecido y de los que todavía no conocemos el alcance concreto. Si miramos hacia Estados Unidos, seguimos encontrando signos preocupantes que parecen poco compatibles con una subida desmedida de los activos de riesgo. Una economía con una tasa de ahorro en mínimos desde 1959 y con el crédito al consumo en los máximos de los últimos veinte años parece muy vulnerable a cualquier empeoramiento de las condiciones económicas.
Este no es el único elemento para reflexionar: circunstancias como la continuada evolución negativa de los nuevos pedidos del ISM o el preocupante hecho de que la M2 americana haya mostrado un crecimiento negativo (año contra año) por primera vez en la historia, difícilmente encaja con este escenario de optimismo económico que parece estar descontando la renta variable.
Visto de esta manera no es descartable un desacoplamiento significativo entre las cifras de crecimiento de la economía europea y la estadounidense, algo que ya parece estar transmitiendo el comportamiento de los índices en este comienzo de año.
En términos de mercado, el arranque de año, con prácticamente todos los activos con rendimientos positivos, es bastante inusual. En algún momento los inversores tendrán que decidir si vamos a un escenario recesivo (lo que daría razón al comportamiento de la deuda en este enero de 2023) o, por el contrario, era la Bolsa la que estaba en lo cierto y la tormenta que esperábamos se ha transformado en una suerte de aterrizaje suave.
Mientras tanto, sin ningún ánimo de predecir, la prudencia nos sigue pareciendo el camino más lógico y la toma de beneficios en los activos de mayor riesgo nos parece adecuada a la espera de tener más información sobre esta tormenta que llevamos ya meses esperando.
Columna de David Ardura, director de Inversiones de Finaccess Value AV
Andrew Harvie es gestor de carteras de clientes de renta variable global en Columbia Threadneedle Investments. Recientemente, ha estado en una presentación en Miami para actualizar la estrategia del Threadneedle Global Focus, que este año cumple su décimo aniversario en funcionamiento habiendo generado un rendimiento en torno al 4% anual. Se trata asimismo de la estrategia de renta variable global de la firma que cuenta con una cartera más concentrada: “Se trata básicamente de un enfoque ‘go-anywhere’ y podemos invertir efectivamente sin restricciones, de modo que si nos gusta algo podemos invertir y estar significativamente sobreponderados allí, independientemente de la ponderación en el índice de referencia”, resumía el experto.
Así, la cartera se concentra típicamente en 50 posiciones, que condensan las ideas de mayor convicción del equipo en el largo plazo. El objetivo del equipo gestor es que las acciones en cartera puedan generar un beneficio compuesto en torno al 15% de media. El enfoque de selección de acciones se centra en la calidad: “Hablamos de querer invertir en compounders de alta calidad, básicamente negocios que podamos mantener durante un horizonte temporal de varios años y que puedan componer rendimientos de forma consistente y sostenible durante ese tiempo”, indica Harvie.
Para identificar a esas empresas, el equipo gestor realiza un análisis profundo para en primer lugar comprender el funcionamiento de la industria en la que ubica esa compañía: qué intensidad de competitividad tiene, cuál es la amenaza disruptiva de los nuevos participantes que entran en esa industria… Después, en el análisis fundamental de la empresa en cuestión, se fijan en aspectos como que presente una ventaja competitiva y, primordialmente, cómo de estable y sostenible es el crecimiento de sus ganancias en el tiempo. Buscan compañías que tengan oportunidad de capturar crecimiento a tasas estructurales, cuyos márgenes sean un poco más resistentes y que presenten flujos de caja recurrentes. “Estamos muy centrados en el crecimiento de calidad, lo que no estamos tratando de hacer es perseguir el crecimiento”, explicó Harvie, que añadió que este tipo de compañías se van a hacer más interesantes “en un mundo de crecimiento económico débil, de tasas de interés más altas y desafíos como la desglobalización”.
Un abanico más amplio
El gestor de Columbia Threadneedle destaca como elemento diferenciador respecto a fondos similares la amplitud de miras del equipo para seleccionar compañías de todo tipo de sectores y regiones del mundo: “Podría ser más fácil encontrar compañías de crecimiento de calidad en ciertas industrias o ciertas geografías y otras, pero no descartamos nada”. De hecho, una de las decisiones que ha tomado el equipo gestor últimamente ha sido reducir la exposición a EE.UU.: “Ha sido un gran coto de caza para la calidad gracias a empresas con crecimiento de calidad en los últimos años, ya que ha estado a la vanguardia de la revolución tecnológica. Pero hay algunas cosas que los EE.UU. no hacen tan bien y donde tal vez hay mejores oportunidades en otros lugares, por lo que hemos mirado a los mercados emergentes para nuestras acciones financieras”, detalla Harvey, que cita nombres como HDFC Bank o Kotak Mahindra, con nacionalidad india, o la Hong Kong Insurance Company. En Europa, ha explicado que el equipo ahora tiene más exposición al sector de consumo básico y alimentación y en salud.
Andrew Harvie explicó que una de las razones por las que se ha expandido el conjunto de oportunidades de inversión es porque “ha habido muy poco crecimiento económico, el crecimiento del PIB se estancó durante la pandemia”. Se refiere a que, al ser tan escaso el crecimiento en los últimos años, el mercado ha recompensado enormemente a las empresas que sí han reportado crecimiento, y estas han tendido a estar en los sectores de tecnología, servicios de comunicación, telecomunicaciones, salud o consumo básico, “por lo que podría ejecutar un enfoque bastante concentrado en ese tipo de entorno de mercado y usted podría hacer dinero”.
El experto anticipa que una de las creencias del equipo es que, de aquí en adelante, el mercado no va a estar tan concentrado por geografías e industrias: “Más empresas serán capaces de ofrecer crecimiento de las ganancias que hemos visto en el período posterior a la pandemia. Creo que sería muy importante centrarse en la calidad, pero la oportunidad es tal vez más grande ahora”. Al mismo tiempo matiza que, con el final del dinero gratis, nos dirigimos hacia una era de tipos de interés más alto que restará rentabilidad a muchos negocios, y como consecuencia “hay una necesidad real de centrarse en la visibilidad de las ganancias”.
La segunda consecuencia, siguió el experto, es que hoy “hay una gran necesidad de invertir a través de una serie de diferentes industrias que han sido crónicamente poco invertidas en los últimos años”. En consecuencia, el equipo gestor del Threadneedle Global Focus ha reducido su exposición a tecnología e incrementado la asignación a finanzas. También han añadido una empresa energía y, por primera vez en mucho tiempo, se han fijado en el sector del consumo básico y han incrementado la asignación a valores industriales.