Beltrán Palazuelo será el gestor.. beltranpalazuelo
Novedades en la gama de fondos de Dux Inversores. Tras integrarse recientemente en Abante Asesores, la gestora ha decidido ampliar su gama de producto con el lanzamiento de DLTV Europe, un fondo global que invertirá fundamentalmente en acciones europeas y que será gestionado por Beltrán Palazuelo. Se trata de un fondo de autor.
DLTV Europe posicionará su cartera fundamentalmente en renta variable europea, pero podrá invertir un 25% de la misma en acciones del resto del mundo. “La filosofía de inversión se basará en un profundo análisis fundamental, que permitirá identificar modelos de negocios atractivos con equipos gestores magníficos. Todo esto, unido a una profunda visión de largo plazo y total alineación de intereses”, explica Alfredo Ruiz de Azua, director ejecutivo en Dux Inversores.
El fondo llega con la idea de que la experiencia del gestor atraiga flujos hacia el activo. “Creemos que la experiencia del gestor atraerá a inversores conocedores de su buen hacer hasta la fecha. Este vehículo gozará de una base de coinversores estables que conocen y comparten la filosofía de inversión que implementará Beltrán Palazuelo”, explican desde la firma.
Una filosofía que se basa en aspectos como el análisis fundamental, la inversión a largo plazo, la alineación de intereses, la independencia total y la selección de “magníficas empresas dirigidas por excelentes equipos gestores”.
Palazuelo es un gestor que cuenta con una dilatada experiencia en renta variable. Llega a Dux Inversores (Abante) desde Santalucía AM, donde era coinversor de más de 1.000 millones de euros en acciones europeas.
Este fondo viene a complementar la apuesta de la gestora en fomentar el desarrollo de gestores que quieren poner en valor su conocimiento y buen hacer, explica Ruiz de Azua.
“Tanto Abante como Dux hemos intentado buscar siempre las mejores oportunidades de inversión para nuestros clientes. Cada uno de los lanzamientos es especial en sí mismo”, apostilla el experto.
Foto cedida. Fundación Triodos y Amnistía Internacional colaboran en la recaudación de fondos para proteger a la población civil de Ucrania
Fundación Triodos, entidad sin ánimo de lucro vinculada a Triodos Bank, colabora con Amnistía Internacional (AI) en la campaña Ucrania: grave crisis de derechos humanos,como apoyo a la labor que desempeña la organización desde el comienzo de la agresión armada.
Amnistía Internacional trabaja sobre el terreno, sin injerencias ni partidismos, para proteger la seguridad y los derechos humanos de las personas. Su Amnesty Crisis Evidence Lab documenta ataques contra civiles en Ucrania, denuncia la comisión de crímenes de guerra e insta a las autoridades rusas a ponerles fin. Asimismo, la organización pide a las instituciones internacionales como ONU y UE que exijan el respeto de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. AI también está en contacto con las autoridades españolas en relación con su rol en los foros internacionales y en la acogida y la protección de personas refugiadas.
Los fondos recaudados en la campaña Ucrania: grave crisis de derechos humanos se dedicarán, entre otras cosas a: enviar equipos de investigación para documentar y visibilizar los abusos contra los derechos humanos, denunciarlos y presionar a las autoridades con el objetivo de que los protejan; movilizar a su base social en todo el mundo como medida de presión ante Rusia y la comunidad internacional para que la agresión cese; presionar a diferentes organismos nacionales e internacionales para que sigan condenando la agresión a Ucrania y apoyar una investigación por parte de la Corte Penal Internacional para que se exijan responsabilidades individuales a todos los perpetradores de crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad en Ucrania, incluidos lo que ocupan altos cargos y tienen la máxima responsabilidad.
En palabras de Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España, “la invasión de Ucrania por Rusia es una violación manifiesta de la Carta de las Naciones Unidas y un acto de agresión intolerable que ha desencadenado la peor crisis de derechos humanos de la historia reciente de Europa. La principal tarea de Amnistía Internacional es contribuir a asegurar la protección de la población civil, tanto la que permanece en el país como la que ha tenido que abandonarlo para huir de los ataques indiscriminados del ejército ruso”.
Para Elena Hernando, responsable de proyectos de la Fundación Triodos, “nuestra labor siempre ha estado enfocada a fomentar la conciencia sobre el dinero de donación como herramienta de transformación social a través de iniciativas de valor y la colaboración con otras instituciones. En este caso queremos facilitar, con donaciones directas, la posibilidad de contribuir a proteger los derechos de la población ucraniana”.
La agresión militar que sufre Ucrania después de años de amenazas es una violación del orden jurídico internacional. Cuanto mayor sea el apoyo que muestre la sociedad civil global al pueblo ucraniano antes se darán las condiciones para detenerla.
Foto cedidaSeth Bernstein, director general y presidente de AB. . AllianceBernstein adquiere CarVal Investors, gestora especializada en inversión alternativa privada
Nuevo movimiento corporativo en la industria. AllianceBernstein (AB) y AllianceBernstein Holding han anunciado la compra de CarVal Investors, gestora especializada en inversiones alternativas privadas y centrada, principalmente, en el crédito oportunista o en dificultades, las infraestructuras de energías renovables, la financiación especializada y las inversiones en transporte. Actualmente, CarVal Investors cuenta con 14.300 millones de dólares en activos bajo gestión.
Según ha explicado en un comunicado, la operación representa un importante paso en su objetivo de “mejorar el servicio a los clientes” mediante la construcción y desarrollo de su negocio de Alternativos Privados a nivel mundial. La incorporación de CarVal Investors a su negocio, que cuenta con 190 empleados (incluidos 68 profesionales de la inversión) en cinco oficinas repartidas por cuatro países, mejora la plataforma de Alternativos Privados de AB al añadir capacidades de inversión complementarias en crédito oportunista y privado y al expandirse a nivel geográfico, en particular en Norteamérica, Europa, Latinoamérica y Asia.
“Dado que los clientes buscan cada vez más estrategias de mercados privados para mejorar la rentabilidad y el rendimiento, así como la diversificación, CarVal aporta capacidades complementarias de mercados privados al negocio de Alternativas Privadas de AB y aumenta la posición de la empresa como líder del mercado. La incorporación de CarVal amplía las capacidades de AB en los mercados privados hasta abarcar casi 50.000 millones de dólares en activos de forma proactiva”, destacan desde la compañía.
Desde AB matizan que el equipo directivo actual de CarVal seguirá dirigiendo la empresa. En este sentido, los equipos de CarVal seguirán siendo independientes, y continuarán operando desde su sede en Minneapolis (Minnesota) y sus oficinas en todo el mundo, sin que se produzcan cambios en el proceso de inversión ni en el personal actual, y se beneficiarán de los recursos más amplios de AB, incluida la distribución mundial y el desarrollo de productos.
Sobre los detalles de la operación, AB ha anunciado que el acuerdo definitivo para adquirir el 100% de CarVal está cifrado en 750 millones de dólares, y una ganancia plurianual si se alcanzan determinados objetivos. Al cierre de la transacción, que se espera que ocurra en el segundo trimestre de 2022, CarVal se convertirá en una filial de propiedad absoluta de AllianceBernstein L.P. y pasará a llamarse AB CarVal Investors. La transacción está sujeta a las condiciones reglamentarias y de cierre habituales.
La firma añade que “este acuerdo es un ejemplo de las sinergias únicas entre AllianceBernstein y Equitable, las dos empresas complementarias y bien establecidas de Equitable Holdings”. Equitable se ha comprometido a desplegar 10.000 millones de dólares en capital de inversión de su Cuenta General hacia la plataforma de Alternativas Privadas de AB. “De este compromiso, 750 millones de dólares se asignarán a estrategias específicas de CarVal, lo que mejorará aún más la rentabilidad ajustada al riesgo de Equitable y reforzará los esfuerzos de AB para hacer crecer negocios de mayor múltiplo, mayor margen y menos capital”, aclaran.
Valoraciones de los directivos
“Esta adquisición refleja el compromiso continuo de nuestra firma con el avance del negocio de Alternativas Privadas de AB. La presencia global de CarVal y su amplio conjunto de capacidades crea nuevas y emocionantes oportunidades de crecimiento para AB, diversificando y ampliando nuestros servicios para satisfacer las necesidades cambiantes de nuestros clientes”, ha destacado Seth Bernstein, director general y presidente de AB.
Por su parte, Matt Bass, responsable de Alternativos Privados de AB, ha añadido: “Estamos encantados de unir fuerzas con CarVal para ampliar nuestra plataforma global de Alternativas Privadas. La amplia experiencia de mercado de CarVal, combinada con su sólido equipo de liderazgo y su cultura de colaboración y emprendimiento, encaja de forma natural y sólida con las prioridades estratégicas de AB. Trabajando estrechamente con el equipo de CarVal, esperamos todo lo que lograremos juntos”.
Por último, Lucas Detor, director gerente de CarVal Investors, ha declarado: “El liderazgo, la trayectoria, los valores y la plataforma de AB lo convierten en un excelente socio comercial para CarVal y nuestros inversores a largo plazo, alineándose en la cultura, la ejecución y la excelencia. Esta adquisición permite a CarVal crecer conservando nuestra inversión e independencia diaria”.
Pixabay CC0 Public Domain. El cóctel chino que preocupa a los inversores: mayores riesgos internos y su posición en el conflicto ruso-ucraniano aún por definir
A lo largo de la semana, la renta variable china, el crédito chino y el yuan han mostrado una mayor volatilidad, mientras los mercados han vivido un ligero optimismo contenido derivado de los avances reconocidos por parte de Ucrania en las negociaciones con Rusia y la posición de China, que insiste en no querer verse afectada por las sanciones a Rusia. En este contexto, ¿qué está ocurriendo con los mercados y los activos chinos?
Con el foco puesto en la crisis de Ucrania, en especial lo que pueda ocurrir hoy con las conversaciones entre Joe Biden y Xi Jinping, y los últimos movimientos de la Fed, los mercados de China sufrieron un desplome sigiloso este año, con el MSCI China (MCHI) general cayendo un 29%. Según Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro, esto viene dado por dos motivos: “El aumento de los riesgos internos, ya que la economía número dos del mundo lucha con los problemas de deuda del sector inmobiliario y el impacto de su estrategia de cero COVID; y la incertidumbre se han sumado los riesgos globales, con el apoyo percibido de China a Rusia y el reciente movimiento de la SEC de Estados Unidos para iniciar el reloj de exclusión de cotización de tres años para los ADR chinos”.
Profundicemos algo más en estos motivos. Según explica Magdalene Teo, analista de Renta Fija en Asia en Julius Baer, el clima de aversión al riesgo derivado de los cierres ante un nuevo brote de COVID-19 y el temor a las sanciones explican parte del comportamiento durante esta semana. En su opinión, este cóctel ha empeorado los aspectos técnicos y ampliado los diferenciales de crédito hasta niveles no vistos desde 2020.
“Las razones para vender fueron abundantes, desde los temores a la exclusión de la lista de los recibos de depósito estadounidenses chinos (ADR), los débiles datos inmobiliarios, los cierres en ciudades como Shenzhen y Jilin, y hasta el aumento del riesgo geopolítico. Todo ello explica la debilidad de las perspectivas y la reducción de la valoración”, afirma.
En opinión de Stefan Kreuzkamp, Chief Investment Officer en DWS, los mercados aún se preguntan hasta qué punto China apoyará a Rusia cuando esto podría provocar sanciones por parte de Estados Unidos. Por ahora, China no está en el “frente occidental” y, de hecho, recientemente ha reforzado sus lazos estratégicos con Rusia, dado su gran interés en las materias primas y el equipamiento militar ruso.
“Prefiere la forma actual de gobierno en Moscú a cualquier experimento democrático, a lo que se suma que no quiere ser vista como un títere de Estados Unidos. Desde la invasión de Ucrania, ahora se afirma con más frecuencia el peligro de que China se atreva a llegar hasta el final con Rusia. Esto significa no solo comprar todas las materias primas de Rusia que Occidente ya no aceptará, sino también socavar el dominio mundial de Estados Unidos abandonando el dólar como moneda comercial. Como se ha demostrado con sus recientes conversaciones con Arabia Saudí sobre el comercio de petróleo en yuanes algún día”, explica.
Sin embargo, Kreuzkamp apunta que China hará todo lo posible por mantener una posición neutral en el exterior. “Como mercado, Rusia desempeña un papel insignificante para China en comparación con Europa y Estados Unidos. Por lo tanto, si es necesario, es probable que Pekín reduzca discretamente las exportaciones de bienes que son críticos desde la perspectiva occidental. Al mismo tiempo, el riesgo de enfadar a Rusia como proveedor de materias primas es manejable si ésta se queda sin clientes de todos modos. En cualquier caso, no es un buen momento para una escalada con Occidente. China no está rebosante de energía en este momento. El objetivo de un crecimiento económico de más del 5% para este año parece muy ambicioso, sobre todo con el telón de fondo de las crecientes cifras de COVID-19 y los consiguientes cierres de espacios clave como el Shenzhen”, añade el experto de DWS.
La comparación de las relativas fortalezas del mercado de valores tampoco es halagadora para China: el S&P 500 representaba el 41,3% de la capitalización bursátil mundial hace un año y el 44,9% en la actualidad; y las acciones de las empresas chinas cotizadas cayeron del 14,7% al 12,3%.
Las preocupaciones de China
Según señalan desde Mirabaud, el “colapso” que experimentaron los índices asiáticos el pasado lunes por la mañana no es lo que preocupa a los inversores. “El índice Hang Seng, por ejemplo, cayó casi un 5% a un mínimo de seis años, principalmente debido a las acciones chinas que cotizan en bolsa, las preocupaciones sobre las relaciones entre China y Rusia, los temores de una nueva represión regulatoria y la nueva ola de coronavirus que golpea a China. Por un lado, los medios estadounidenses informan que Rusia ha pedido a China asistencia militar y económica en su guerra con Ucrania, aunque los funcionarios chinos han negado que haya habido tal solicitud. Pero mientras, China está experimentando la mayor ola de COVID-19 desde finales de marzo de 2020, lo que llevó a las autoridades a bloquear la ciudad de Shenzhen y la provincia de Jilin (población de casi 18 millones). El índice de empresas chinas Hang Seng cerró con una caída del 7,2%, la mayor caída desde noviembre de 2008, mientras que el índice tecnológico Hang Sang se desplomó un 11%, la peor de su historia”, apuntan en su último informe.
En este sentido, el análisis que hacen las firmas de inversión coinciden en que China está demasiado ocupada con sus propios asuntos, por lo que se cuata y mantener una posición natural puede ser su mejor jugada. “China es una de las claves de la evolución futura de este conflicto y se encuentra en una posición bastante incómoda. Por una parte con respecto a la unidad mostrada por Occidente en la Unión Europea y en la OTAN. Por otra parte, su lucha por la hegemonía mundial, disputada con Estados Unidos, le convierte en un aliado natural de Rusia”, explica Pedro del Pozo, director de inversiones financieras en Mutualidad de la Abogacía, y recalca: “El mercado de China sigue siendo Occidente”.
En opinión de Yves Bonzon, CIO de Julius Baer, las sanciones financieras y económicas contra Moscú, anunciadas tras el estallido de las hostilidades en Ucrania, cambian bastante sus perspectivas. Según detalla: “Estos acontecimientos se producen en un momento en el que, por un lado, la Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. está enviando nuevas señales alarmantes en relación con las empresas chinas que cotizan en EE.UU. y, por otro, Pekín no muestra ninguna voluntad de apoyo a la economía mientras la crisis inmobiliaria continúa lenta pero inexorablemente y el país se enfrenta a una nueva ola de infecciones por COVID-19”.
En este sentido, el ministro de Asuntos Exteriores chino ha sido claro al explicar que China quiere evitar el impacto de las sanciones estadounidenses por la guerra de Rusia. “El daño se produjo cuando los diferenciales de los créditos asiáticos de alta calificación de inversión se ampliaron entre 5 y 6 puntos básicos, y las primas de rendimiento de las notas chinas subieron una media de 10 puntos básicos. El ritmo de ampliación es el más severo para cualquier trimestre en dos años (más que los pares estadounidenses), ya que los extranjeros recortaron su exposición a China, especialmente a las empresas de internet”, explican desde Juluis Baer.
Muestra de que el foco de China está en resolver sus problemas internos es que el Gobierno salió al rescate de los mercados, al más puro estilo de occidente. “Las acciones chinas subieron cuando las autoridades acudieron al rescate de los asediados mercados de valores. Esta venta de acciones respondió al intento del viceprimer ministro Liu de tratar de aclarar todas las preocupaciones de los inversores de una sola vez, desde tratar de hacer algo lo antes posible, pasando por la represión del sector tecnológico, hasta el compromiso de resolver los riesgos de los desarrolladores inmobiliarios. Esto se produjo después de la caída épica del 70% de las acciones chinas en comparación con Estados Unidos el año pasado, y con valoraciones de descuento del 50%, a pesar de los sectores tecnológicos igualmente grandes. Una política gubernamental de venta, una mejora de la economía y valoraciones baratas es una combinación atractiva. Una China en proceso de mejora también tiene impactos positivos desde el norte de Asia hasta Europa y sectores como el lujo”, concluye Laidler.
Foto cedida. La marca Columbia Threadneedle Investment sustituirá el nombre y el logotipo de BMO GAM (EMEA)
Columbia Threadneedle Investments ha anunciado que procederá al cambio de la marca comercial de BMO GAM (EMEA), en julio de 2022. Esta decisión llega tras completar la adquisición de la firma en abril de 2021 y, según la gestora, representa un hito importante en la integración de BMO GAM (EMEA) en Columbia Threadneedle.
En paralelo a la eliminación del nombre y la marca de BMO, se modificará el nombre de las gamas de fondos BMO1, que adquirirán el prefijo “CT” para reflejar la marca Columbia Threadneedle. Desde la gestora prevén que la gama de fondos con el nombre Threadneedle también pasará a adquirir gradualmente el mismo prefijo a partir de julio, “lo que permitirá armonizar todas las gamas de fondos minoristas de tipo abierto en Europa, Oriente Próximo y la región de Asia-Pacífico”. Mientras que ·”la convención de nomenclatura para la gama Columbia Funds en Estados Unidos permanece inalterada”, matiza la gestora en su comunicado.
A raíz de este anuncio, Nick Ring, consejero delegado para EMEA de Columbia Threadneedle Investments, ha declarado: “Reunir todos los productos y capacidades bajo nuestra marca global consolidada este verano representará una etapa apasionante de la integración. Estamos orgullosos de la amplia oferta que hemos conformado para nuestros clientes, en un esfuerzo por seguir atendiendo sus necesidades cambiantes. En concreto, la adquisición expande nuestros negocios de soluciones y productos alternativos existentes, además de mejorar nuestras capacidades en materia de inversión responsable. Llevar este abanico adicional de productos y soluciones al mercado bajo una única marca resultará beneficioso tanto para nuestros clientes como para nuestro negocio”.
Ring ha destacado que la “profunda afinidad cultural” entre ambas firmas ha sido un “factor trascendental” para esta operación, lo cual quedará reflejado al consolidarse la nomenclatura de la gama de fondos. “Compartimos una cultura centrada en el cliente, un enfoque de inversión colaborativo y basado en el análisis, y un compromiso arraigado con los principios de la inversión responsable; estas características comunes impulsarán el futuro desarrollo de nuestra identidad de marca”, ha añadido.
Por su parte, Leslie Walstrom, directora global de Comercialización de Columbia Threadneedle Investments, ha señalado: “La marca Columbia Threadneedle Investments está firmemente establecida y cuenta con un amplio reconocimiento en sus mercados estratégicos de EMEA, Asia-Pacífico y Estados Unidos, al situarse entre las 35 marcas de gestión de activos más reconocidas del planeta . Nos complace reunir las capacidades y los productos del negocio de BMO GAM (EMEA) en la oferta con la marca Columbia Threadneedle, así como lanzar un nuevo prefijo CT en nuestra gama de fondos ampliada para clientes del Reino Unido, Europa y Asia”.
Pixabay CC0 Public Domain. Flossbach von Storch amplía su equipo de análisis ESG y convierte todos sus fondos de inversión bajo el artículo 8
Flossbach von Storch refuerza su apuesta integral por la sostenibilidad y amplía su proceso de inversión para incluir criterios de sostenibilidad importantes, además de excluir determinados modelos de negocio de todo el grupo. Según explica la firma, este paso reforzará su estrategia ESG actual y se implementará en lo sucesivo en el proceso de análisis.
En este sentido, Flossbach von Storch matiza que uno de los factores a los que se prestará especial atención son las emisiones de gases de efecto invernadero, así como el cumplimiento de los principios del Pacto Mundial de las Naciones Unidas (United Nations Global Compact), que incluyen los derechos humanos, la regulación laboral, la protección del medioambiente y la lucha contra la corrupción.
“El tema de la sostenibilidad siempre ha formado parte de nuestra filosofía de inversión. Preservar el valor de los activos que nos confían nuestros clientes o generar rendimientos adecuados solo es posible a largo plazo, si durante el proceso de inversión estudiamos detenidamente en qué medida las empresas en las que invertimos actúan de forma responsable. Estamos convencidos de que, a la larga, las empresas solo pueden tener éxito si se esfuerzan por conciliar los aspectos económicos, ecológicos y sociales”, afirma Bert Flossbach, cofundador y consejero de Flossbach von Storch AG, sociedad matriz de Flossbach von Storch Invest S.A.
Este cambio va acompañado de la incorporación de especialistas en ESG al equipo de analistas. “Nuestro proceso de inversión se caracteriza por un análisis fundamental interno. Nos mantenemos fieles a nuestra filosofía: no externalizamos el tratamiento responsable de los factores de sostenibilidad, sino que los abordamos de forma crítica e integramos esa información como un componente importante en nuestro proceso de análisis integral de empresas”, explica Andreas Eickhoff, socio y Head of Equity Research de la firma.
Según señalan, su objetivo es excluir de todo el grupo las inversiones en empresas relacionadas con la fabricación y la distribución de armas ilegales, armamento y carbón, así como la producción de tabaco. También, quedarán excluidas las empresas que infringen gravemente los principios del Pacto Mundial de las Naciones Unides y los emisores públicos con una puntuación insuficiente en el índice de Freedom House.
Con la ampliación de la política de inversión, la firma realizará también ajustes normativos en consonancia con las obligaciones de divulgación establecidas por el reglamento (UE) 2019/2088 (SFDR). Así, a partir del 19 de abril de 2022, los fondos de inversión abiertos de Flossbach von Storch tendrán la consideración de productos conforme al artículo 8. Además, a partir del 2 de agosto de 2022, se tendrán en cuenta en el proceso de inversión las repercusiones negativas más importantes sobre los factores de sostenibilidad (conocidas de forma abreviada como PAI, principal adverse impacts). “De esta manera, todos los fondos de inversión abiertos del grupo Flossbach von Storch cumplirán los requisitos de la directiva MiFID II para el asesoramiento de inversión a inversores orientados a la sostenibilidad”, afirman.
Como cada año desde hace 12, Fidelity International ha presentado los resultados de su Encuesta a Analistas -realizada en diciembre de 2021 entre 156 analistas que fueron encuestados sobre las tendencias observadas en las empresas que siguen-. Entre sus principales conclusiones, la encuesta revela el incremento del énfasis en los factores ESG. Las empresas son ahora conscientes de que sus niveles de ingresos y costes están condicionados por su actuación en las cuestiones medioambientales, sociales y de gobierno corporativo.
En ese sentido, en Fidelity International dirigen sus esfuerzos a entender cuál es la actuación en materia ESG de las empresas en las que invierten con el objetivo de seleccionar aquellas empresas que tengan sentido en sus fondos artículo 8 y 9 según la normativa europea SFDR. Fondos por los que los inversores están mostrando una clara preferencia.
Un dato llamativo de la encuesta es la enorme mejora de las empresas chinas en su nivel de interés por los factores ESG con respecto al año pasado. Desde unos niveles muy bajos de compromiso en 2019, en los que apenas el 10% de las empresas seguidas por los analistas ponía énfasis en instaurar y comunicar sus políticas ESG, el 50% de las compañías muestra ahora una preferencia por estos factores a la hora de tomar decisiones. Los analistas han pasado de tener que preguntar a las empresas chinas por sus actuaciones en materia ESG a asistir a campañas de divulgación en las que las firmas presentan sus políticas. Además, las empresas chinas están preguntando a Fidelity International por sus valoraciones ESG en los ratings internos de la gestora, con la intención de realizar mejoras.
Los criterios ESG, que ya formaban parte de las conversaciones de las juntas de accionistas y de los comités de dirección en las economías desarrolladas, son ahora también una consideración en el proceso de la toma de decisiones de las empresas chinas.
Dentro de los factores ESG, el factor medioambiental, y en especial la descarbonización, gana peso con respecto a los factores sociales y de gobierno corporativo. Existen una serie de compromisos adquiridos para conseguir los objetivos de cero emisiones netas fijados en el Acuerdo de París para el año 2050. Sin embargo, cuando se pregunta a los analistas si creen que las empresas que siguen serán capaces de cumplirlos, la respuesta mayoritaria es que tan sólo un 25% de las empresas lo hará en 2030, un 33% en 2040 y un 48% en 2050. Todavía queda mucho recorrido para poder afirmar que las empresas están en el camino correcto para llegar a 2050 con cero emisiones netas y esta situación se explica porque los costes de transición son muy elevados. Tanto los gobiernos, como las empresas y particulares deben realizar una cuantiosa inversión para lograr una reducción en las emisiones de carbono.
En la encuesta de 2021, realizada en diciembre de 2020, menos del 5% de las empresas chinas realizaban una divulgación adecuada sobre los riesgos relacionados con el cambio climático, frente al 25% de la encuesta de 2022. Esta mejora está relacionada con el compromiso de China de alcanzar las cero emisiones en el año 2060. Aunque puede parecer poco probable que las economías occidentales logren sus objetivos en 2050, el carácter autoritario del gobierno chino puede incrementar las posibilidades de que las empresas de su país sí los cumplan.
Evolución de los temas presentes antes de la crisis de Ucrania
En diciembre de 2021, los analistas observaron una mejora en la confianza de las empresas. Sectores como el industrial, la tecnología de la información, el sector de consumo discrecional y la energía mostraban una mayor confianza en la situación económica que hace 12 meses. En aquel momento, los analistas afirmaban que la mayoría de sus empresas se encontraba en la fase de expansión madura del ciclo e incluso en la fase de desaceleración o recesión. Las empresas transmitían la sensación de que lo mejor ya había pasado, convirtiendo el ciclo que comenzó en el último trimestre de 2020 en el ciclo más corto de la historia.
2021 fue especialmente bueno en términos de flujo de caja para las empresas. Este exceso de liquidez fue utilizado por algunas empresas para introducir mejoras de eficiencia y tecnología; por otras, para replantear sus cadenas de suministros y fortalecer su capital y, por último, un grupo de empresas retomaron los procesos de fusiones y adquisiciones que se habían visto paralizados durante algún tiempo. Estos procesos se terminaron de materializar a principios de 2022, como ejemplos Microsoft, Unilever o Lockheed Martin.
Claramente, si los analistas fueran preguntados a fecha de hoy por la fase del ciclo en la que se encuentran las empresas que cubren las respuestas serían mucho más pesimistas que las de diciembre. Se esperaba que la inestabilidad geopolítica se hiciera notar, con elecciones en Francia, Brasil y elecciones legislativas en Estados Unidos. Existía algo de preocupación por las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, aunque todavía no se habían iniciado las conversaciones de Biden y Putin de enero y no se conocía que habría una intervención militar en Ucrania. En la actualidad, una situación geopolítica cargada de incertidumbre hace que las empresas descarten o retrasen sus planes de inversión hasta que puedan contar con una mayor visibilidad.
A finales de año, un tercio de los analistas a nivel global creían que las tensiones tendrían un impacto negativo o muy negativo. En las empresas chinas, esta preocupación era mucho mayor. Un dato sorprendente dada la distancia teórica del gigante asiático con respecto a la invasión de Ucrania. Muchas empresas se estaban replanteando mover sus suministros fuera de China, pero en ese momento nada era comparable con la situación actual.
Otra de las principales preocupaciones era la inflación, que en esos momentos se situaba en la mayoría de los países desarrollados en niveles cercanos al 5% o superiores. El debate se centró en el carácter temporal o permanente de esta inflación, sin definir la temporalidad ni los niveles en los que la inflación podría situarse a futuro. La Reserva Federal pasó de negar la inflación a admitir que la inflación no sería transitoria y tendría un carácter estructural.
Desde el verano de 2021, Fidelity International comenzó a ver motivos por los que probablemente la inflación tendría un carácter menos temporal de lo anticipado: la subida del precio en la vivienda de Estados Unidos, de los costes laborales en muchas de las economías desarrolladas, el impacto inflacionista de las medidas de política monetaria y fiscal que se estaban aplicando, los costes de la transición hacia la descarbonización y la disrupción en las cadenas de suministro. En la actualidad, la subida desbocada de los precios de las materias primas, que generan no sólo más inflación sino también agravan el problema de los suministros y mano de obra en términos generales.
La inflación es una mala noticia para las empresas que ven cómo se estrechan los márgenes a menos de que sean capaces de trasladar esas subidas de precios a sus clientes, algo que no siempre pueden hacer. También es un motivo de preocupación para los inversores a los que obliga a descontar los flujos futuros a tasas más altas, reduciendo su valor presente. Pero sobre todo es un factor adverso para los consumidores, en especial aquellos de rentas más bajas, por no contar con formas de diversificar sus fuentes de ingresos frente a la inflación.
Tal vez el único grupo que podría no verse tan afectado por una inflación elevada es el de los gobiernos altamente endeudados. Con unos tipos reales negativos, existe una erosión en el valor de la deuda. Algo que ya sucedió en Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial, cuando la inflación se disparó alcanzando niveles del 17%, mientras que los tipos nominales se mantuvieron en un 2%. Eso permitió que se redujera de forma significativa el fuerte endeudamiento que tenía el Tesoro estadounidense.
Las conversaciones con los inversores
Las conversaciones con los clientes siguen estando relacionadas con una menor visibilidad provocada por el incremento de la incertidumbre. En Fidelity International han realizado un esfuerzo para que los inversores se sintieran cómodos con la calidad y agilidad de la información suministrada por la gestora para facilitar la toma de decisiones. En los primeros días de la escalada de la tensión, no hubo unos reembolsos significativos. Estos no se provocaron hasta el jueves 24 de febrero, cuando se materializaba la invasión cuando muchos inversores optaron por la liquidez para esperar a un mejor momento. Algunos de los clientes institucionales que vendieron en ese momento han reconsiderado su decisión ahora que las valoraciones disminuyeron drásticamente en los mercados emergentes.
Entre los activos refugio que mejor se han comportado se encuentran los bonos ligados a la inflación. También la renta fija asiática, en concreto, la deuda china, había sido un refugio para el inversor. En renta variable se ha dado un efecto contagio, pocos mercados han sido capaces de mostrar resiliencia ante el incremento del riesgo geopolítico. El mercado de renta variable estadounidense con sesgo valor ha sido quizá el mercado que mejor ha soportado la caída.
Pixabay CC0 Public DomainImagen de Hardebeck Media. 1
A la vista del desenlace de su reunión de marzo, la Fed prioriza sin tapujos la inflación sobre el crecimiento, contextualizando la lectura estanflacionista que se deriva de la actualización del resumen de perspectivas económicas: la previsión del PIB real para 2022 se revisó fuertemente a la baja, hasta el 2,8%, frente a la estimación de diciembre del 4,0%, mientras que la PCE para 2022 se elevó del 2,6% al 4,3%.
Desde finales de febrero, las expectativas de inflación (medidas por los breakevens en TIPs a 10 años y a 5 años – 5 años adelantado, que registran subidas del 0,32% y del 0,2%, respectivamente) vienen alimentando las dudas y obligando al mercado a revisar sus pronósticos de subidas de tipos, que ahora apuntan a incrementos del 0,25% en cada una de las siete reuniones de la Reserva Federal de aquí hasta diciembre (0,45% en total hasta final de año en el caso del BCE).
De momento, el escenario más plausible continúa siendo el de un pico en los índices de inflación durante la primera mitad del año.
El precio del barril ha retrocedido colocándose por debajo de los 100 dólares, y el componente de mayor relevancia en el cálculo del PCE y del IPC (costes asociados con la vivienda, que ya comentamos en el pasado en esta nota) irá disminuyendo su presión sobre los índices de precios por efecto base y por su correlación con la inercia en crecimiento económico y en creación de empleo.
La vuelta al trabajo de más de ocho millones de norteamericanos que se mantuvieron fuera del mercado laboral, al verse afectados directa o indirectamente por Ómicron, restará empuje a los incrementos salariales y la transición de la demanda desde el consumo de bienes hacia el consumo de experiencias y servicios quitará ímpetu al que probablemente ha sido el factor mas relevante para explicar el fuerte encarecimiento en el coste de la vida experimentado desde mediados de 2020: el exceso de demanda en un contexto de oferta constreñida. Como ejemplos, la corrección en el subíndice de precios pagados y los tiempos de entrega del ISM o el indicador Manheim de precio de coches de segunda mano.
Aunque las incógnitas de la guerra en Ucrania y el repunte en contagios por COVID en China, que tensiona temporalmente las cadenas de suministros, podrían mantener la firmeza en los indicadores de inflación, una leve disminución en las tasas de incremento mensual tendría un efecto muy relevante a 10–12 meses vista. Un IPC por debajo del 5% permitiría a la Fed ser menos agresiva y no alcanzar el nivel de 2,8% en fed funds que maneja el «dot plot».
La prevalencia del «impuesto sobre el crecimiento» que suponen un dólar estadounidense caro y un coste cada vez más oneroso de la energía y de la financiación restará capacidad de poder adquisitivo y arrastrará a la baja los índices de PIB e IPC. Esto es lo que parece estar descontando la curva de tipos, que ya daba por hecho la subida del 0,25% que comunicó el miércoles Jay Powell, y cuya pendiente amenaza con romper a la baja el nivel de 0,2%.
Es muy pronto para cantar victoria, pero la publicación del PPI y del crecimiento en salarios (BLS) no sorprendió negativamente, los índices de precios de importación y exportación quedaron por debajo de lo proyectado y el IPC no fue peor al esperado. La esperanza respecto a un inminente acuerdo de alto el fuego (que allanaría el camino al levantamiento de las sanciones a Irán) vuelve a poner presión en el precio del Brent.
Los miembros del Comité de Mercado Abierto han rebajado sus expectativas respecto a la tasa terminal (a 2,4% desde 2,5%) que mantendría el equilibrio entre ahorro e inversión. En este contexto, y teniendo en cuenta el efecto diferido de la primera subida y la consolidación de la nueva hoja de ruta para 2022 tras la revisión del mapa de puntos –que indica que los tipos estarán en el 1,9% a cierre de ejercicio cuando en diciembre apuntaban al 0,9%, y con sesgo alcista al mostrarse 7/11 puntos por encima de la mediana–, lo más razonable es apostar por una desaceleración en el ritmo de crecimiento como factor más relevante en la fotografía macro de aquí a los próximos meses. La Fed pretende colocar los tipos nominales temporalmente por encima de la tasa de equilibrio de largo plazo. La última vez que esto sucedió fue en 2018 y principios del 2019 y ya sabemos cómo acabó la película.
Esta desaceleración arroja dudas, como hemos venido explicando, sobre la proyección de consenso para incrementos en beneficios por acción. El barómetro de actividad económica de Chicago, muy correlacionado con el crecimiento en BPA a doce meses, sigue cayendo y apunta a incrementos de dígito simple (frente al 10% que anticipan los estrategas). En este sentido, llama también la atención que, a pesar del repunte en riesgos, el inicio de un nuevo ciclo alcista de tipos y la consolidación en el ciclo económico, la prima de riesgo en el mercado de renta variable prácticamente no se ha movido.
Los índices de participación en el ámbito de la renta variable han acelerado su proceso de deterioro. De acuerdo con el análisis de TopDown Charts, más de un 70% de los mercados de acciones a nivel mundial cotizan por debajo de su media móvil de 200 sesiones y casi la mitad acumulan rentabilidades negativas a doce meses. Esta tendencia se ha agudizado las últimas dos semanas.
En este río tan revuelto brilla en relativo la opción de mercados emergentes, en particular latinoamericanos (como productores de materias primas). Aunque las bolsas EM históricamente han sufrido en entornos de corrección de índices desarrollados, sus economías están mucho más avanzadas en el ciclo de endurecimiento de política monetaria y se benefician de los crecientes esfuerzos reflacionarios desde China. Las declaraciones de Liu He, que apuntan a un compromiso por dinamizar la economía, estabilizar los mercados financieros, relajar la presión regulatoria y resolver la disputa con la SEC (que diluiría los riesgos de de-listing) pueden estar marcando un punto de inflexión para el comportamiento relativo de las bolsas emergentes. El lunes sabremos si el banco central chino (PBOC) decide ser más agresivo al publicarse las tasas preferenciales de préstamo a 1 y 5 años.
Las acciones LatAm muestran atractivo fundamental incluso después de haberse apreciado cerca del 20% (siguen estando más baratas que en 2008) y losgrandes inversores se mantienen infraponderados en la clase de activo. También se vislumbra valor en el ámbito de la renta fija EM: el diferencial en YTMs entre soberanos emergentes y desarrollados está en máximos de los últimos 20 años.
Pixabay CC0 Public Domain. La oportunidad de invertir en Blockchain ya está aquí
El blockchain es una tecnología clave que está revolucionando la forma de trabajar en múltiples industrias e impulsando la creación del metaverso. Su aplicación en cualquier negocio facilita nuevos modos de reducir costes, eliminar ineficiencias y reducir el fraude. Su capacidad disruptiva no tiene límites, y se estima que el universo inversor alcanzará un valor de 3 billones de dólares en 2030.
Con el objetivo de analizar todas las oportunidades de inversión que supone esta tecnología, BNY Mellon IM organiza un desayuno en Madrid (calle José Abascal 45, 4ª planta) con el equipo del fondo BNY Mellon Blockchain Innovation, su fondo de gestión activa centrado en el ecosistema de blockchain.
Durante el encuentro presencial, que se desarrollará en inglés y tendrá lugar el próximo 29 de marzo de 2022 a las 09:00 horas CET, se profundizará sobre qué es la tecnología de cadena de bloques, sus segmentos de aplicación más allá de las criptodivisas y se explicará cómo acceder a esta emergente oportunidad de inversión.
Para asistir al evento es necesario confirmar asistencia poniéndose en contacto a través del siguiente email:contact.iberia@bnymellon.com
Pixabay CC0 Public Domain. Perspectivas e ideas de inversión: Qué podemos esperar y cómo nos posicionamos en el actual escenario
Tikehau Capital Iberia celebra una sesión de actualización de mercadoque tendrá lugar el martes 22 de marzo a las 09:30, en donde compartirán la visión de Tikehau IM del actual entorno complejo.
Por parte de Tikehau IM, contarán con Raphael Thuin, director de las estrategias líquidas de Renta Fija y Renta Variable, que repasará las perspectivas de Tikehau IM, así como el posicionamiento de las distintas estrategias en los mercados de crédito y renta variable.
En cuanto a la estructura y agenda, la sesión durará entorno a una hora y estará moderada por Christian Rouquerol, director de Ventas para Tikehau IM Iberia y Álvaro Jiménez, analista de Ventas para Tikehau IM Iberia.
Durante la sesión se hará especial hincapié en mantener un formato que permita preguntas e interrupciones por parte de los participantes y una discusión abierta con los ponentes.
Para participar en el evento deberá enviar un email a la siguiente dirección: events-tikehau-spain@tikehaucapital.com