Foto cedidaBjoern Jesch, Chief Product Officer en AllianzGI
Allianz Global Investors (AllianzGI) ha anunciado la incorporación de Bjoern Jesch a la firma como director de Productos (Chief Product Officer). En su nuevo cargo, Jesch dirigirá el departamento de Soluciones de Productos y Marketing de AllianzGI, con la responsabilidad ejecutiva de garantizar que la oferta de productos y el posicionamiento estratégico de la gestora responden eficazmente a las necesidades de los clientes.
Con sede en Fráncfort, Bjoern se unirá a la compañía el próximo 1 de septiembre, pasando a formar parte del Comité Ejecutivo de AllianzGI y reportará a Tobias Pross, CEO de Allianz Global Investors.
Bjoern aporta más de tres décadas de experiencia en diversos sectores de la industria a AllianzGI. Ha ocupado puestos de alta dirección en gestión de carteras, gestión de productos y soluciones a lo largo de su carrera.
Anteriormente trabajó en DWS Group, donde su último cargo fue el de director global de Inversiones y director ejecutivo de DWS Suiza. Previamente, fue director global de Multi Asset & Solutions y director de Inversiones para EMEA en DWS Group.
Antes de su etapa en DWS, Bjoern fue director global de Soluciones y Productos de Inversión en Credit Suisse (2018-2020) y director de Inversiones y de Gestión de Carteras en Union Investment (2012-2018). Al inicio de su carrera trabajó en Deutsche Bank, primero como adjunto y luego como director de Soluciones de Inversión Globales en Alemania, así como director de Inversiones y director de Gestión de Carteras.
“El nombramiento de un profesional del calibre de Bjoern pone de relieve la importancia que otorgamos a la nueva función de Soluciones de Productos y Marketing y reafirma que AllianzGI es el hogar natural de algunos de los mejores talentos del sector de la inversión. Gracias a su amplia experiencia en inversiones, su profundo conocimiento de las necesidades en constante evolución de los clientes y a su trayectoria en innovación, esperamos con entusiasmo la incorporación de Bjoern al equipo directivo, confiando en que desempeñará un papel clave en el crecimiento estratégico de la firma”, comentó Tobias Pross, CEO de AllianzGI.
Por su parte, Bjoern admitió estar «muy ilusionado» por unirse a AllianzGI, «una compañía que ya conozco y que comparte mi compromiso con el rendimiento y mi pasión por el enfoque al cliente». El directivo añadió que «trabajando en estrecha colaboración con mis nuevos compañeros de Inversiones y Distribución, así como con los expertos que forman parte del equipo de Product Solutions & Marketing, estoy convencido de que juntos construiremos una función de alto rendimiento que impulsará el crecimiento de AllianzGI y atenderá de manera óptima las necesidades de nuestros clientes”.
Los inversores se preparan para la cita más importante del verano: el simposio de banqueros centrales que se celebra cada año en Jackson Hole (Wyoming). El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ejerce de anfitrión de un cónclave que se celebra desde 1982. “El simposio económico de Jackson Hole es el Woodstock de los banqueros centrales, salvo que con presentaciones en PowerPoint, sombreros de cowboy y bailes en línea”. Así describe Vincent Reinhart, economista jefe de BNY Investments, el encuentro de este fin de semana.
La reunión se celebra bajo el lema “Mercados laborales en transición: demografía, productividad y política macroeconómica”. Reinhart -que trabajó 24 años en la Fed con cargos como director de la División de Asuntos Monetarios y Secretario y Economista del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC)- ve este encuentro como una oportunidad para debatir sobre la inteligencia artificial, el crecimiento de la productividad y la conducción de la política monetaria. Eso sí, la cita “llega en un momento de gran relevancia, dadas las dinámicas cambiantes del mercado laboral y el impacto económico de las políticas fronterizas”.
El experto recuerda que en la reunión de julio, la Reserva Federal guardó silencio en su comunicado sobre el futuro de la política monetaria del organismo, con la intención de que Powell usara Jackson Hole para zanjar cuestiones. Desde entonces a hoy, los datos sobre empleo resultaron decepcionantes y los de precios, mixtos. “Es probable que a los responsables de la Fed les preocupe que el crecimiento del empleo esté cerca de velocidad de estancamiento, además, el repunte de la inflación de precios al consumo borró los avances de la primera mitad del año, aunque la incidencia de los aranceles fue limitada”, explica.
En consecuencia, Reinhart espera que Powell señale que la Fed tiene la intención de recortar su tipo de interés oficial en 25 puntos básicos en septiembre y que enmarque esta decisión “ya sea como un bache en el camino dentro del plan a largo plazo de la Fed de renormalizar los tipos, o como un giro hacia un modo enteramente reactivo”. Es más, no descarta que, teniendo en cuenta que esta será la última aparición de Powell en Jackson Hole como presidente, “puede que reflexione sobre su legado y, potencialmente, sobre la importancia de la independencia de los bancos centrales”.
Para Kevin Thozet, miembro del comité de inversión de Carmignac, los participantes en los mercados estarán pendientes de cada palabra de Jerome Powell en la cita de Jackson Hole en busca de indicios sobre si la Fed se sumará al resto del mundo en la ola de recortes de tipos.
“El tira y afloja entre un informe de empleo inferior a lo esperado y una inflación superior a lo previsto ha dejado al presidente de la Fed con señales contradictorias”, argumenta el experto, que considera que Powell no cuenta con “la situación más cómoda para la que -probablemente- será su última intervención en el simposio de Wyoming, sobre todo teniendo en cuenta las críticas que ha recibido del presidente Trump y su entorno”.
Entre la presión de Trump y las expectativas del mercado, Thozet espera que Powell ceda y dé a entender que se reanudará el ciclo de recortes de tipos. “Esta postura es ampliamente anticipada, y los participantes en el mercado esperan que la Fed recorte más de lo que indica actualmente el gráfico de puntos”, argumenta el experto.
Mabrouk Chetouane, director de estrategia de mercados globales de Natixis IM Solutions, destaca el mercado laboral como centro de atención del simposio de Jackson Hole. Y, en este contexto, cree que Powell “deberá demostrar todas sus habilidades como equilibrista para justificar por qué ahora la atención se ha desplazado hacia el objetivo del empleo, relegando al segundo plano el de la inflación, a pesar del retorno de las presiones inflacionistas, como muestran las cifras del IPC y el IPP subyacentes de la semana pasada”.
El experto considera que el impacto probable, “aunque aún incierto”, de la guerra comercial sobre la inflación y el ciclo económico estadounidense debería animar a Powell a “ser paciente”. Pero Chetouane también es consciente de que la presión sobre el presidente de la Fed está aumentando: el presidente Trump le está pidiendo que recorte los tipos; los mercados descuentan tres recortes antes de finales de año y la creación de empleo disminuye de forma constante.
Como resultado, Chetouane espera que Powell “prepare a los inversores para un nuevo ciclo de recortes de tipos a partir de septiembre” y recuerda que en la firma llevan varios meses pensando que la Fed tendría que recortar los tipos en 75 puntos básicos antes de finales de 2025 para combatir la desaceleración económica.
Razones para ser escéptico
Sin embargo, hay expertos que no ven tan clara una postura dovish de Powell. Uno de ellos es Benoit Anne, Senior Managing Director and Head of Market Insights Group, MFS Investment Management, que no ve claro que Powell ofrezca una orientación firme en el simposio de Jackson Hole. Y señala varias razones para ello. Primeramente, recuerda que la Fed transmitió un mensaje de paciencia, incertidumbre y prudencia en julio. Desde entonces, han cambiado los datos -una lectura mediocre del dato de empleo no agrícola- y se ha intensificado el ruido político y la presión sobre la Fed.
El experto de MFS Investment Management recuerda que la Fed depende precisamente de ellos, “pero eso no significa que una sola publicación de datos pueda cambiar necesariamente toda la perspectiva política”. Esto se debe, según Anne, a que es necesario observar “una señal más fuerte más allá de un solo dato”.
Aquí, subraya que es difícil argumentar que las débiles cifras de empleo, así como las marcadas revisiones a la baja de los meses anteriores, sean coherentes con las relativamente benignas solicitudes iniciales de subsidio por desempleo, los datos JOLTS, las cifras salariales, la generación de ingresos, las ventas minoristas, los ingresos por impuestos sobre la renta y las valoraciones de activos. “Hay algo que no cuadra y la Fed querrá investigar un poco más antes de tomar medidas”, asegura para concluir que las pruebas de que el mercado laboral se está deteriorando rápidamente “siguen siendo insuficientes”.
En cuanto a la presión política, es probable que la Fed se mantenga firme en su postura de defensa de su independencia y solo recortará los tipos cuando el FOMC alcance una mayoría de votos que considere que es lo correcto. “Más allá del empleo, sigue existiendo la incertidumbre persistente sobre el impacto de los aranceles en la inflación, lo que justifica cierta prudencia, especialmente dado que la inflación sigue pareciendo persistente”, sentencia Anne.
En un tono similar se expresan los autores del último informe de Liquid Insight de Bank of America: “Sospechamos que Powell no se mostrará tan dovish como está descontando el mercado. Es probable que los comentarios de Powell sean más equilibrados que los de la reunión del FOMC de julio, dado que el informe laboral de julio recuerda los riesgos al alza de la tasa de desempleo”, aseguran.
Hay signos que dan pie a pensar en ello, según los expertos de la firma estadounidense. Primeramente, el hecho de que en el título del discurso de Powell se mencione «Perspectivas económicas» antes que «Revisión del marco» indica que el presidente de la Fed “quiere enviar un mensaje a los mercados sobre las perspectivas de la política monetaria. Los mercados están descontando una rebaja de casi 25 puntos básicos en septiembre, pero creemos que la decisión dependerá de la reacción de Powell al flujo de datos estanflacionarios que haya”.
En definitiva, creen que si Powell quiere inclinarse en contra de un recorte en septiembre, podría decir que la postura política sigue siendo adecuada dados los datos disponibles. Esta formulación le permitiría mantener la opción de recortar si el informe de empleo de agosto es muy débil.
Otros bancos centrales
Para Andrew Jackson, director de inversiones de Vontobel, la reunión de Jackson Hole se celebra en un contexto marcado por retos “muy diferentes y únicos” en cada región. Así, el experto resalta que mientras que ediciones anteriores se centraron en los retos comunes a los que se enfrentan los bancos centrales -como la flexibilización cuantitativa y el apoyo económico relacionado con la pandemia- la edición de este año se desarrolla en un contexto muy diferente: “los bancos centrales se encuentran ahora navegando por una nueva era, en la que las políticas monetarias desempeñarán un papel aún más crítico en los próximos meses”, según afirma Jackson.
En definitiva, cree que los diversos retos a los que se enfrenta cada institución demuestran “la complejidad del panorama económico mundial actual” y que “quizás más que nunca este año, las decisiones que se tomen en los próximos meses serán fundamentales para configurar la trayectoria de las respectivas economías”.
El experto resalta que esta dinámica es especialmente evidente en el caso de la Fed, el BCE, el Banco de Inglaterra (BoE), el Banco Nacional Suizo (SNB) y el Banco de Japón (BoJ). “Cada institución se enfrenta a presiones económicas distintas, lo que complica especialmente sus tareas”.
Jackson apunta que el BCE “parece estar en la posición más favorable, ya que ha logrado avances significativos en todos sus objetivos, incluido el de alcanzar la tasa neutral”, pero esta situación, según el experto, “contrasta con otros bancos centrales, que siguen mostrándose reticentes a hablar de su tasa neutral”.
Mientras tanto, el experto de Vontobel detalla que la Reserva Federal se enfrenta a un camino “particularmente difícil”, ya que las presiones políticas “están aumentando, con la Casa Blanca abogando por recortes de tipos y el posible nombramiento de un nuevo presidente más alineado con la agenda económica de Trump”.
El SNB se enfrenta a sus propios retos, “ya que se prevé que los aranceles estadounidenses del 39% sobre la mayoría de los productos afecten a la economía suiza, lo que podría provocar una nueva contracción del crecimiento el próximo año y aumentar la presión sobre el empleo”, según Jackson, que considera que el organismo “tiene un margen de maniobra limitado y podría considerar una bajada del 0,25% hasta territorio negativo a finales de este año o principios del próximo”.
Por su parte, el Banco de Japón afronta, según Jackson, “la delicada tarea de evitar una reversión del carry trade, un reto que requiere una gestión cuidadosa”.
Sin embargo, opina que es el Banco de Inglaterra el que posiblemente “se enfrenta al mayor reto entre los bancos centrales analizados”, ya que la entidad monetaria está profundamente preocupada por la fragilidad de la dinámica subyacente del mercado británico. Jackson explica que el gobernador Andrew Bailey y su equipo temen que no reducir los tipos con la suficiente rapidez pueda frenar el crecimiento económico. Por otro lado, siguen siendo cautelosos con las presiones inflacionistas, que en Reino Unido están lejos de haber desaparecido.
El perfil del inversor está cambiando, y con él, el flujo del capital. Los grandes fondos de inversión están reconfigurando sus carteras: lo que antes se dirigía a inmuebles, petróleo o bonos tradicionales, ahora fluye cada vez más hacia activos vinculados a la transición energética.
Según la Agencia Internacional de la Energía (IEA), en 2025 el 66% de la inversión global en energía se destinará a tecnologías limpias como la solar, la eólica o las redes eléctricas inteligentes.
En paralelo, el inversor minorista busca cada vez más opciones que combinen rentabilidad con impacto. Y ahí es donde entra Crowmie, la green fintech española especializada en proyectos de inversión en infraestructura energética, tanto generación fotovoltaica como almacenamiento en baterías , que abre el acceso a activos antes reservados a fondos institucionales.
«Estamos viendo cómo los grandes fondos entran con fuerza en el sector energético, pero el pequeño inversor seguía fuera del juego. Nuestro modelo lo cambia todo», afirma Pablo Valverde, CMO de Crowmie.
Fondos que ya están liderando el cambio
Algunos de los principales fondos europeos están acelerando su apuesta por las renovables: Alantra lanzó en España su Energy Transition Fund, con un objetivo de 210 millones de euros, centrado en renovables, hidrógeno y eficiencia energética. Azora Capital, también española, cerró un fondo de 270 millones para energías limpias, principalmente solar, en la península ibérica.
Amundi, el mayor gestor de activos de Europa, ha comprometido más de 10.000 millones para transición energética a través de sus fondos temáticos. BlackRock, a nivel europeo, canaliza más de 43.000 millones de euros hacia activos verdes, incluyendo vehículos como el Climate Infrastructure Fund. El fondo Next Generation EU canaliza miles de millones hacia proyectos energéticos sostenibles, muchos de ellos en colaboración con actores privados como bancos o gestoras locales.
Acceso, impacto y sentido
Mientras los grandes fondos manejan tickets de decenas de millones, Crowmie permite acceder al mismo tipo de activos, infraestructura energética renovable, desde 5.000euros, con un modelo basado en contratos PPA de hasta 25 años, retornos del 9,5% anual, liquidez mensual y total transparencia.
Pero su propuesta va más allá de la rentabilidad. Apuesta por una nueva forma de entender la inversión: invertir con propósito para vivir mejor.
“La fórmula LET (Libertad – Elección – Tiempo) da nombre a una filosofía que transforma el enfoque tradicional de acumulación de capital”, explica Valverde. “Lo que realmente cambia la vida no es cuánto tienes, sino qué haces con ello. En Crowmie ayudamos a multiplicar patrimonio, sí, pero sobre todo a ponerlo al servicio de una vida con más sentido”.
Este enfoque ha calado especialmente en una nueva generación de inversores que exige propósito, impacto y retorno. Y Crowmie lo articula con un mensaje claro: “Invertimos en energía con el propósito de vivir mejor”.
Cada proyecto que lanza la plataforma está estructurado bajo estrictos criterios de seguridad y transparencia: contratos PPA con empresas de consumo real, aval bancario que cubre hasta 6 meses de ingresos, planes de contingencia para mitigar impagos, retorno mensual a través de préstamo participativo, acceso a un entorno privado de intercambio para garantizar liquidez, opción de reinversión para activar el interés compuesto. Gracias a este modelo, más del 90% de los inversores reinvierte en nuevos proyectos, creando un ecosistema sostenible, rentable y escalable.
Un cambio de paradigma financiero
Los datos lo confirman: el 66% de la inversión global en energía irá a tecnologías limpias en 2025 (IEA). El private equity internacional destinó más de 25.900 millones de dólares a renovables en 2024 (Reuters). Por cada 1 dólar invertido en combustibles fósiles, los fondos públicos ya destinan 0,48 dólares a energías limpias; y los privados, 1,2, según BloombergNEF. Más de 600 inversores activos en 35 países y más de 7 millones de euros financiados en Crowmie en proyectos reales y operativos.
«Las energías limpias ya no son solo una apuesta ética: son la nueva gran tesis financiera», concluye Valverde. «Y queremos que cualquier persona pueda formar parte del cambio, no solo los grandes capitales».
Los sectores de infraestructuras desempeñan un papel fundamental en la mitigación del cambio climático, dado su potencial para apoyar la descarbonización de la economía a través de las energías renovables, las soluciones de movilidad ecológica y la economía circular.
Las fuentes de energía renovables, como la hidráulica, la solar y la eólica, son elementos fundamentales de la transición climática, junto con las infraestructuras de apoyo a la movilidad ecológica, como las estaciones de recarga de vehículos eléctricos y las infraestructuras ferroviarias. El sector de los residuos y el agua es clave para apoyar una economía circular, que a su vez impulsa la reducción de emisiones y la mitigación del cambio climático. Otras tecnologías más incipientes también están entrando en juego para los inversores en infraestructuras, como el hidrógeno, los combustibles sostenibles para la aviación o la captura y el almacenamiento de carbono, pero su potencial y escalabilidad aún debe demostrarse, y los modelos de negocio deben ser desprotegidos.
El Acuerdo de París subraya el imperativo de alinear los flujos financieros con los objetivos climáticos mundiales. Para los gestores de activos, esta responsabilidad es doble: mitigar los riesgos de transición, como los activos bloqueados o los riesgos físicos a largo plazo que ponen en peligro la cartera de los inversores institucionales; y desbloquear el valor de transición capitalizando las oportunidades de las inversiones sostenibles.
Por otro lado, como espejo de los riesgos de transición están las oportunidades de transición. Allí donde los Estados y las organizaciones supranacionales quieran organizar la economía para cumplir los objetivos climáticos, habrá incentivos para que los inversores canalicen el capital hacia donde sea necesario para la transición. Estar al tanto de esas estrategias es clave para que los inversores se anticipen y busquen aquellas oportunidades en las que puedan generar rentabilidad financiera al tiempo que contribuyen a crear una economía baja en carbono, desbloqueando así el valor de la transición.
Lograr el objetivo
Para lograrlo, debemos seleccionar los activos adecuados que se alineen con los objetivos climáticos, evitando aquellos que no puedan realizar la transición. Los denominados activos «verdes» o «soluciones climáticas» son una elección directa para una estrategia climática. Dentro de ellos, se pueden encontrar tecnologías y modelos de negocio probados, como la energía solar fotovoltaica, la eólica, la biomasa… así como nuevos tipos de infraestructuras que están surgiendo, como el almacenamiento en baterías, el biogás, la carga de vehículos eléctricos, los combustibles sostenibles para la aviación, entre otros.
Más allá de las soluciones climáticas, la opción más sofisticada es invertir en activos que necesitan descarbonizar sus actividades. Esto requiere más experiencia por parte de los gestores de activos, así como herramientas y metodologías para apoyar el análisis.
Los activos deben evaluarse meticulosamente en función de su plan de negocio, su estrategia climática, su voluntad de asumir el reto (que también depende de la visión de la dirección) y un plan de acción concreto respaldado por un sólido capex. Sólo se debe invertir en los activos que tengan un claro potencial para descarbonizarse al ritmo adecuado, y los gestores de activos deben hacer todo lo posible para apoyarlos en su camino.
Esto también significa que los inversores deben identificar los activos que no sean capaces de llevar a cabo la transición, en particular aquellos que conlleven un bloqueo de las emisiones, y evitarlos.
Así, podemos construir carteras que apoyen un futuro sostenible. También debemos supervisar y comprometernos con las empresas de la cartera durante el periodo de tenencia para garantizar la alineación con las ambiciones de mitigación del cambio climático. Este enfoque no sólo mitiga los riesgos, sino que también desbloquea el valor de la transición, impulsando la descarbonización de la economía y contribuyendo a los objetivos climáticos mundiales al generar un impacto en la vida real.
Los gestores de activos que se embarquen en este viaje deben asumir un compromiso firme, respalda do por metodologías sólidas, marcos integrales y conocimientos especializados.
Tribuna de Jeanne Michon-Savarit, responsable de sostenibilidad de Infranity (parte de Generali Investments)
La tokenización está sacudiendo el sector de la gestión de activos, según el último informe publicado por la Asociación Europea de Fondos y Gestión de Activos (Efama, por sus siglas en inglés). Su principal conclusión es que el contexto global se está moviendo hacia la digitalización y los inversores buscan aquellas jurisdicciones más desarrolladas para explorar esta clase de activos.
Según explica, varios países europeos se han consolidado como centros para los activos basados en tecnología de registro distribuido (DLT), impulsados por marcos legales nacionales sobre la custodia y transferencia de valores digitales, así como por el marco europeo más amplio sobre criptoactivos no tradicionales (MiCA) y el comercio y liquidación (Régimen Piloto DLT). El nivel de actividad entre las empresas demuestra la importancia de contar con una estrategia digital para adaptarse a la futura economía tokenizada. Al mismo tiempo, existen preocupaciones de que Europa pueda perder su ventaja inicial si la regulación no avanza al ritmo del mercado.
En este contexto, Efama pide un aumento inmediato de los límites de umbral impuestos por el Régimen Piloto DLT para aumentar la liquidez disponible en las plataformas DLT y mejorar los volúmenes de negociación en el mercado secundario. También solicita la convergencia reglamentaria entre normas nacionales divergentes sobre activos digitales en los Estados miembros. Una mayor convergencia evitaría el arbitraje regulatorio y ayudaría a promover la escala de los fondos de inversión basados en DLT.
Según su análisis, otro punto relevante es la necesidad de alinear los marcos regulatorios que rigen los activos tradicionales (MiFID, AIFMD, EMIR y CSDR) y los activos digitales (Régimen Piloto DLT, MiCA). A medida que crezca la DeFi, no debería haber distinción entre el ecosistema tradicional y el ecosistema basado en DLT, sino más bien un ecosistema financiero único e integrado. Además, en su documento, subraya la importancia de establecer un marco equitativo para las soluciones de dinero en cadena. Un panorama competitivo que incluya un euro digital, stablecoins reguladas por la MiCA y CBMT (fichas monetarias de bancos comerciales) es el resultado óptimo que indica que Europa está abierta a la innovación y a las fuerzas impulsadas por el mercado.
Finalmente, Efama llama a una mayor claridad regulatoria que favorezca el uso de fondos del mercado monetario tokenizados (t-MMFs) como garantía en operaciones de derivados y repos. Al tratarse de uno de los primeros casos de uso con alto potencial, la organización insta a reguladores, bancos centrales y actores del sector a trabajar de forma conjunta para que estos instrumentos puedan desplegarse de manera plena y efectiva.
«Este oportuno informe ofrece una perspectiva crítica y muy necesaria de la parte compradora europea sobre las oportunidades que presenta la tecnología de libro mayor distribuido (DLT). También hace hincapié en la importancia y la urgencia de desarrollar una estrategia a largo plazo para la tokenización tanto a nivel de empresa individual como dentro del ecosistema financiero más amplio”, ha declarado Tanguy van de Werve, director general de EFAMA.
Por su parte, Christoph Hock, presidente del Grupo de Trabajo de Tokenización de EFAMA y jefe de Tokenización y Activos Digitales de Union Investment, ha dicho: “La tokenización de activos y efectivo faculta a la industria de gestión de activos para proporcionar los mejores servicios de su clase a sus clientes dentro de un ecosistema financiero impulsado por DLT”.
La diferencia entre el riesgo que un inversor está dispuesto a asumir y el que debería asumir no es académica, sino que es la diferencia entre marcar las casillas y ofrecer soluciones realmente adecuadas. Según la experiencia de Oxford Risk, durante muchos años, los asesores y las empresas han confiado en alguna versión de lo que a menudo se denomina actitud ante el riesgo (ATR) como principal, y en muchos casos único, criterio para la selección de carteras. Sin embargo, consideran que la ATR nunca fue realmente adecuada para su propósito. «Proporcionaba una cifra fácil de anclar, pero no una imagen completa. Sólo capta una parte de lo que necesitamos saber sobre un inversor y, a menudo, ni siquiera eso de forma particularmente adecuada», argumentan desde la firma.
El enfoque de Oxford Risk parte de una premisa sencilla: la cantidad de riesgo de inversión que debe asumir un inversor -su nivel de riesgo adecuado (NAR)- debe basarse en una comprensión más completa de quién es y cómo se relaciona con sus inversiones. Esto implica ir más allá de un enfoque limitado en una sola actitud y, en cambio, considerar una combinación de factores clave: la tolerancia al riesgo, entendida como un rasgo psicológico de largo plazo que refleja cuánto riesgo está dispuesto a asumir un inversionista en relación con su riqueza total; la capacidad de riesgo, que representa su habilidad financiera para asumir riesgos, teniendo en cuenta el horizonte temporal, la dependencia de los activos, la estabilidad de ingresos y las necesidades de liquidez; la capacidad conductual, que alude a su fortaleza emocional para tolerar la volatilidad del mercado, expresada en rasgos como la compostura; y, finalmente, el conocimiento y la experiencia, que permiten evaluar de forma más objetiva el grado de familiaridad del inversionista con el mundo de las inversiones, lo cual puede limitar su exposición al riesgo de manera temporal. Cada uno de estos componentes desempeña un papel distinto y complementario en la construcción del NRA del inversor.
Los límites de la «actitud» frente al riesgo
El término «actitud ante el riesgo» esconde una gran complejidad. Cada inversor tiene múltiples actitudes ante el riesgo: a largo y a corto plazo; racionales y emocionales; específicas de un ámbito y generales. Lo que importa no es cómo se siente una persona ante el riesgo hoy o en respuesta a acontecimientos recientes, sino su disposición estable a largo plazo a compensar el riesgo y la rentabilidad de su patrimonio total a lo largo del tiempo.
Esto es precisamente lo que debería medir una evaluación de la tolerancia al riesgo bien diseñada. Pero las herramientas de RTA del mercado a menudo se quedan cortas, ya que confunden la tolerancia al riesgo con el optimismo, la confianza o el conocimiento; no logran aislar el rasgo central; y producen resultados inestables que pueden cambiar drásticamente con los mercados.
Además, el ATR (incluso cuando se mide bien) es sólo una parte de la historia. La mayoría de las herramientas que utilizan el ATR ignoran por completo la capacidad de riesgo y, con ella, el contexto vital y dinámico de la situación financiera del inversor. Según su visión, la tolerancia al riesgo nos dice cuánto riesgo están dispuestos a asumir; la capacidad de riesgo, cuánto pueden permitirse. «Ignorar esto último puede costar décadas de crecimiento compuesto y dar lugar a resultados muy inadecuados a largo plazo. El riesgo adecuado no es lo que parece seguro hoy, sino lo que respalda la seguridad financiera a lo largo del tiempo», señalan.
Del inversor a la cartera
Desde Oxford Risk consideran que comprender al inversor es sólo la mitad de la ecuación. «Asignarles la cartera adecuada también exige conocer el nivel de riesgo a largo plazo de esa cartera. Aquí es donde suele surgir otro desajuste. Con demasiada frecuencia, el riesgo de la cartera se evalúa utilizando la volatilidad histórica a corto plazo, una medida muy inestable y dependiente del contexto. Esto conduce a etiquetas de riesgo inadecuadas y a una mala adecuación a largo plazo«, indican.
En su opinión, lo que hace falta es estabilidad por ambas partes: una medida estable de la SRL del inversor, basada en rasgos y modelos probados a lo largo del tiempo; y una medida estable del riesgo de la cartera, basada en las expectativas de incertidumbre de los resultados a largo plazo. «Solo si se cumplen estas dos condiciones podremos garantizar que la combinación de riesgos sea precisa en el momento de la recomendación y siga siendo adecuada a medida que evolucionan tanto los mercados como las circunstancias personales», afirman.
Su principal conclusión es que la actitud ante el riesgo fue un peldaño útil, pero ya no es suficiente (de hecho, nunca lo fue realmente). «Un nivel de riesgo realmente adecuado debe combinar: una medida precisa y psicométrica de la tolerancia al riesgo; una medida prospectiva y consciente de la situación de la capacidad de riesgo; una comprensión conductual de la compostura y su efecto en el comportamiento; y una apreciación del conocimiento y la experiencia y su papel en la toma de decisiones informada», argumentan.
Según su visión, solo así podremos ofrecer soluciones de inversión que se ajusten no sólo a lo que un inversor dice o siente, sino a quién es, en qué momento de su vida se encuentra y cuál es la mejor manera de respaldar sus objetivos a largo plazo. «La idoneidad no es un número. Es una relación (entre inversor e inversión) basada en la comprensión, adaptada a lo largo del tiempo y potenciada por una tecnología que incorpora la ciencia en cada recomendación», concluyen.
Un equipo de gestores de fondos y analistas de investigación de Janus Henderson Investors nos reunimos recientemente en Taipei para sumergirnos en todo lo relacionado con la tecnología en la conferencia anual del sector, Computex.
Mientras cenábamos algunos de los típicos buñuelos del país, notamos un hecho que no se podía eludir: la revolución de la IA no ocurre sin los extraordinarios avances tecnológicos que ocurren en Taiwán.
En cada frase, los expertos de la industria pronunciaban los nombres de Nvidia, Taiwan Semiconductor y Foxconn, casi uniformemente en ese orden. Y aunque Nvidia y sus unidades avanzadas de procesamiento gráfico (GPU) se han convertido en los abanderados de todo lo relacionado con la IA, el ecosistema completo de Taiwán se constituye como el arquitecto y constructor que hace posible esta gran revolución tecnológica. Tal vez no sea de extrañar que el icónico Taiwan 101 estuviese iluminado en el color verde de Nvidia durante la conferencia.
Construir un ecosistema
Hace años, Computex era sinónimo de ordenadores personales (PC). Desde entonces, la movilidad ha pasado a ser el eje central. Hoy en día, es casi un escaparate de todo lo relacionado con la IA. Como es lógico, gran parte del espacio de exposición se dedicó a los equipos y componentes que hacen posible la IA. Solo después de ver los kilómetros de cable, sistemas de refrigeración líquida altamente complejos, intercambiadores de calor, racks y unidades de distribución de enfriamiento se puede apreciar todo lo que hace falta para dar vida a la IA.
Como era de esperar, uno de los momentos más destacados de la semana fue el discurso de apertura del fundador y CEO de Nvidia, Jensen Huang, en el monumental Taipei Music Center.
Fue impresionante darse cuenta de lo consistente que ha sido la estrategia de Jensen en las últimas dos décadas. En conversaciones con él hace años, defendía la visión de construir una base gratuita de estaciones de trabajo en las principales universidades de ingeniería para crear un timón virtual de programadores con talento y bien versados en la plataforma de programación propia de Nvidia. Jensen creía que la informática acelerada pondría en marcha un mundo en el que las GPU cumplirían un papel mucho más importante que el de simplemente mejorar los gráficos de los videojuegos. Quería construir un ecosistema en torno a las GPU avanzadas y a su empresa. Ese ecosistema es Taiwán.
Para gran parte del mundo, incluida una gran parte de la comunidad inversora, el lanzamiento de ChatGPT en 2022 fue el momento más impactante. Esto pone en contradicho la cantidad de años que lleva fraguándose esta revolución.
El espíritu de colaboración que presentó con éxito la IA al mundo sigue presente. Un ejemplo de esto es la nueva sede de Nvidia, que pretende acercar aún más la empresa a sus socios del ecosistema. De mayor relevancia es el lanzamiento de NVLink Fusion, la arquitectura de red patentada de Nvidia que permite a los clientes utilizar sus propios chips aceleradores de IA junto con la infraestructura de Nvidia.
Como dijo Jensen: «Me encantaría que me lo compraras todo, pero por favor, cómprame algo».
Esta filosofía, en nuestra opinión, debería dar lugar a una atmósfera que promueva la innovación de la IA, así como su adopción por parte de los clientes. No es coincidencia que los aceleradores de IA que no son de Nvidia (Trainium de Amazon, por ejemplo) estén siempre diseñados y ensamblados en distintas empresas taiwanesas.
¿Hay agujeros en la historia de la IA? No encontramos ninguno
Muchos de los asistentes al evento buscaban alguna señal de desaceleración en la demanda de IA. Hasta ahora, no lo han conseguido. Incluso a medida que aumenta la producción de los servidores más modernos, las carteras de pedidos tanto de la generación actual como de la próxima siguen llenas. Curiosamente, los clientes parecen estar escalonando sus compras para no depender demasiado de ninguna generación de chips en particular. Esto no solo debería garantizar una nueva capacidad informática para los clientes, sino proporcionar también coherencia para los proveedores de IA.
Se prestó mayor atención al apetito de los hiperescaladores. Esto también sigue siendo sólido. Y la IA soberana es otra fuente de demanda que apenas empieza a cuantificarse.
A principios de este año, la industria se paralizó brevemente por los temores relacionados con la noticia de que los modelos de IA de la startup china DeepSeek estaban ofreciendo una rentabilidad impresionante a una fracción del coste de los modelos occidentales. Dada la cantidad en gasto de capital que ya se había destinado tanto a la capacitación como a la inferencia, este acontecimiento podría haber resultado preocupante para los inversores y los responsables de asignación del capital. Incluso si reconocemos que gran parte de la proeza de DeepSeek se erigió sobre plataformas consolidadas, las soluciones creativas y de menor coste deberían actuar simplemente como catalizadores de la adopción de la IA en lugar de canibalizar la demanda existente.
Al igual que con otras innovaciones tecnológicas, reducir la curva de costes debería servir para crear enormes oportunidades para expandir la base de clientes y conducir a una gama más amplia de aplicaciones potenciales de IA.
Si no eres el primero, eres el último
Dada la solidez del tema, y el volumen de los flujos de inversión, todos los participantes tecnológicos están tratando de idear un caso de IA. Los fabricantes de PC y teléfonos inteligentes tradicionales están vendiendo el tema de una IA de borde incorporada al dispositivo, pero nadie se lo compra (literalmente). Estos participantes están atrapados en el dilema del huevo y la gallina: no hay aplicaciones porque no hay dispositivos, pero no hay dispositivos porque no hay aplicaciones. Una vez más, esto ilustra la genialidad de la incipiente industria de las GPU, con su jugada a largo plazo de hace 20 años de asociarse con universidades de ingeniería.
Compartir la riqueza
Siguiendo la senda de los PC y la movilidad, la IA tiene el potencial de remodelar muchos aspectos de la sociedad y la manera de hacer negocios del mundo, puede que incluso más. Al igual que sus antecesoras, las ganancias de productividad de la IA serán muy dispersas.
Vale la pena reiterar que nada de esto es posible sin el papel fundamental desempeñado por Taiwán, un mercado emergente. El ecosistema de Taiwán es el timón de la IA, y esto se puso de manifiesto en dos anuncios fundamentales. En primer lugar, Nvidia y Foxconn se han asociado con el gobierno de Taiwán para construir una fábrica de IA con 10.000 GPU para acelerar la investigación nacional en IA. En segundo lugar, Nvidia se ha comprometido a construir un enorme centro de investigación y desarrollo similar a una nave espacial llamado Constellation en los suburbios de Taipei.
Durante el transcurso de Computex, se debatió si Taiwán mantendría su posición predominante, dada la preponderancia de los aranceles y la posible reconfiguración del comercio mundial. Creemos que, con toda seguridad, lo hará. Sin embargo, es probable que las empresas traten de crear resiliencia en sus cadenas de suministro de IA mediante la dispersión geográfica de parte de su capacidad de producción. Se señaló más de una vez que México podría ser el beneficiario de este cambio.
De cara al futuro, los mercados emergentes no solo se unirán a las economías avanzadas en la entrega de estas innovaciones, sino que también implementarán cada vez más soluciones basadas en IA para resolver roces específicos como el comercio electrónico y el acceso a la financiación y la salud.
Independientemente de la jurisdicción, la IA está remodelando la forma en que funciona el mundo, y las empresas situadas en el lado correcto de la innovación se beneficiarán enormemente.
1El concepto de la informática de borde consiste en acercar la capacidad informática al usuario final, por ejemplo, en dispositivos móviles.
Artículo escrito por Matthew Culley, gestor de Carteras y analista financiero y Shaon Baqui, analista de inversión en Janus Henderson Investors.
DWS Group suma en Miami a Marwin Martinez como Senior Xtrackers Sales Specialist para el mercado US Offshore & Non-Resident Clients, según un posteo del interesado en su perfil de la red profesional Linkedin. Según pudo saber Funds Society, se encargará de las relaciones con los intermediarios financieros que atienden a clientes latinoamericanos.
“Me complace compartir que estoy comenzando un nuevo puesto como Vicepresidente, Especialista Senior en Ventas de Xtrackers – U.S. Offshore & NRC Business en DWS Group”, escribió Martinez, profesional con experiencia en gestión de relaciones comerciales con un historial de trabajo en la industria.
El profesional trabajó seis años en la gestora Vanguard, en dos periodos diferentes. Su último puesto en Vanguard era similar al actual en DWS. Previamente, se desempeñó durante 11 años en AllianceBernstein, donde ocupó distintos cargos y terminó siendo Assitant VP – Senior Relationship Manager Latin America Institutional, US & Canada Offshore.
Licenciado en Negocios Internacionales y Finanzas por la Temple University – Fox School of Business and Management, Martinez posee también las licencias FINRA Series 7, 6 y 63.
La incertidumbre económica y los cambios en las políticas, incluidos el posible aumento de los impuestos a los fondos patrimoniales (endowments) y los recortes en la financiación federal, han llevado a estas instituciones a reevaluar sus estrategias de inversión para mantener tanto el crecimiento a largo plazo como la liquidez a corto plazo. A medida que aumentan las preocupaciones sobre la liquidez, los proveedores externos pueden encontrar nuevas oportunidades para apoyar a los endowments, advierte la consultora internacional Cerulli en la última edición del Cerulli Edge—U.S. Institutional Edition.
La liquidez se ha convertido en una preocupación central para instituciones de educación superior de todos los tamaños, ante la amenaza del impuesto propuesto a los endowments y la congelación de la financiación federal.
Mientras que un impuesto directo sobre los patrimonios impone una presión inmediata al exigir gasto, la reducción en los fondos federales genera una tensión indirecta, ya que las instituciones patrocinadoras probablemente tendrán que recurrir a una mayor parte de sus endowments para cubrir el déficit de financiación, señala el informe.
“En un panorama cambiante, las universidades pueden adoptar estrategias de gestión de liquidez más cautelosas, como aumentar las reservas de efectivo, reducir gastos, reposicionar sus activos patrimoniales o participar en el mercado secundario”, afirmó Agnes Ugoji, analista de Cerulli.
“Si bien las instituciones grandes pueden resistir la tormenta, los endowments medianos y pequeños, que carecen de escala y recursos internos, podrían quedarse atrás”, añadió.
La consultora basada en Boston predice que las instituciones más pequeñas dependerán cada vez más de CIOs externalizados (OCIOs, por sus siglas en inglés) para gestionar la complejidad y reforzar sus objetivos de inversión.
El uso de OCIO entre endowments es mayor en los segmentos pequeños y medianos (100 a 500 millones de dólares en activos bajo gestión), y la mayoría de los proveedores de OCIO esperan que los clientes patrimoniales impulsen gran parte del crecimiento de la industria OCIO en los próximos dos años.
A medida que los impuestos potenciales sobre los endowments se convierten en una realidad inminente, los proveedores de OCIO con experiencia en situaciones fiscales complejas podrían obtener una ventaja competitiva. Otros servicios -como por ejemplo, mejorar el acceso de las carteras a vehículos líquidos, crear sistemas más eficientes de gestión de flujos de efectivo, aumentar el potencial de rentabilidad mientras se mitigan riesgos y apoyar la capacitación de los consejos directivo- serán cada vez más importantes.
“Las firmas que estén bien preparadas para ayudar frente a los desafíos actuales del entorno regulatorio y de inversión deben enfatizar y resaltar claramente estos servicios para atraer nuevos clientes”, señala Ugoji. “Los gestores de activos que busquen ingresar al sector de los endowments deberían enfocarse en establecer relaciones con proveedores de OCIO, especialmente en tiempos de cambios financieros y regulatorios”, concluye.
Clear Trail Advisors anunció oficialmente su transición a la independencia mediante una alianza estratégica con Dynasty Financial Partners. El acuerdo proporcionará soporte operativo y administrativo, reforzará sus capacidades de inversión, incorporará herramientas avanzadas de planificación e informes y posicionará la firma para el crecimiento a largo plazo, según un comunicado difundido por Dinasty.
Clear Trail Advisors antes formaba parte de Steward Partners, basada en Houston, y con 850 millones de dólares en activos de clientes bajo gestión, la firma está liderada por su chairman, Randy Price , el CEO Matt Price y Matthew Kerns como presidente.
“Dynasty nos permite mantener la independencia fiduciaria y, al mismo tiempo, acceder a investigación, tecnología y soporte operativo de primer nivel,” dijo Randy Price.
La decisión de independizarse refleja el compromiso del equipo con un asesoramiento objetivo y un servicio más sólido, señala el comunicado.
Como parte de su nueva etapa, Clear Trail está incorporando mejoras en planificación, informes de rendimiento más ágiles y una relación más proactiva con los clientes. La firma eligió a Charles Schwab como custodio, destacando su escala, estabilidad y fuerte presencia en Texas.
“Clear Trail Advisors atienden a una base de clientes claramente definida, cuentan con un liderazgo sólido y están profundamente comprometidos con el asesoramiento independiente y centrado en el cliente,” dijo Shirl Penney, Fundador y CEO de Dynasty Financial Partners.
La nueva RIA planea ampliar su modelo de servicio en los próximos dos años con la contratación de un Director de Planificación Financiera y la incorporación de expertos fiscales internos, según se anunció.