Foto cedidaPhilippe Couvrecelle, consejero delegado y fundador de iM Global Partner. IK Investment Partners y Luxempart se incorporan como socios a iM Global Partner
iM Global Partner ha anunciado hoy la adquisición de una participación del 40% en Scharf Investments, empresa de capital independiente controlada por sus empleados, con 3.400 millones de dólares bajo gestión –dato de finales de marzo de 2019–.
Según ha explicado la gestora, con esta adquisición en Estados Unidos, iM Global Partner pretende reforzar su oferta con una gama más amplia de productos de elevado alfa. De esta forma, continúa dando forma a su proyecto enfocado en la adquisición de inversiones estratégicas en las mejores firmas de inversión tradicionales y alternativas en Estados Unidos, Europa y Asia.
Scharf Investments es una empresa con sede en California fundada en 1983. Dirigida y presidida por Brian Krawez, quien también lidera el Comité de Inversiones. Scharf Investment ha crecido en estos años, pasando de tener cinco empleados y menos de 700 millones de dólares de activos bajo gestión en 2007 a 24 trabajadores y 3.400 millones de dólares en activos bajo gestión en la actualidad.
La gestora ha explicado que todas las estrategias se gestionan con el mismo valor fundamental bottom up y con un enfoque concentrado. Buscan valores con importantes descuentos en su valoración como margen de seguridad, alta predictibilidad de beneficios y sólido crecimiento. En la actualidad, Scharf Investments gestiona cuatro estrategias distintas: estrategia en renta variable de EE.UU. a largo plazo (principal estrategia de renta variable en la que se basan las otras tres), estrategia de multi activo a largo plazo, estrategia de cobertura de renta variable de EE.UU. a largo y corto plazo, y estrategia de renta variable global a largo plazo.
«Scharf Investments es una gestora excepcional con un sólido historial de gestión a largo plazo. En distintos escenarios económicos, han demostrado su capacidad para soportar condiciones adversas del mercado gracias a un proceso de inversión sostenible. Nuestras dos plataformas de distribución en EE.UU. y Europa les ayudarán a crecer tanto el mercado americano, como en los internacionales. Este nuevo acuerdo es la quinta inversión que hemos realizado en EE.UU. con nuestro objetivo constante de proporcionar acceso a boutiques de gestión de activos únicas en todo el mundo», ha explicado Philippe Couvrecelle, fundador y consejero delegado de iM Global Partner, a raíz este anuncio.
Por su parte, Brian Krawez, presidente de Scharf Investments, apunta que «en los últimos 10 años, hemos visto un crecimiento en nuestros activos bajo gestión gracias a nuestra capacidad para superar condiciones adversas del mercado. Esta asociación es una oportunidad fantástica para acelerar nuestro desarrollo. iM Global Partner cuenta con una sólida experiencia en el sector de la gestión de activos en EE.UU. y en el resto del mundo, y el encaje cultural que tenemos con ellos es para nosotros un verdadero indicador de solidez y asociación a largo plazo».
Por último, José Castellano, vice consejero delegado y responsable de distribución internacional de iM Global Partner, añade que «Scharf Investment es una gestora de renta variable value de experiencia probada con resultados en su estrategia principal en el top 1% de su categoría desde su creación. Estoy seguro de que las habilidades, los procesos, la filosofía, la cultura y el desempeño sobresaliente de Scharf Investments serán muy bien recibidos por los inversores en todo el mundo».
Pixabay CC0 Public DomainFree-photos. BMO propone a los inversores españoles un fondo mixto con sesgo al Reino Unido para proteger el capital en un entorno volátil
Desde el inicio del año, los inversores españoles han asistido a numerosos lanzamiento de fondos, tanto registrado solo en España como UCITs. La mayoría de ellos han estado relacionados con megatendencias, inversiones sostenibles o tenían un fuerte sesgo a criterios ESG. Pero BMO propone algo diferente; una estrategia mixta, Pyrford Global Total Return, con un fuerte sesgo al Reino Unido, que es capaz de preservar el capital en entornos complejos.
“En 2008, este fondo logró una rentabilidad del 12%, eso se puede decir de pocos vehículos de inversión”, destaca Lars Nielsen, especialista senior de producto de Pyrford International, boutique 100% propiedad de BMO y gestora del fondo mixto Pyrford Global Total Return, para ejemplificar la resistencia de este fondo.
La estrategia pretende ofrecer una protección del capital para un entorno volátil, batir la inflación y obtener una baja volatilidad. Es un vehículo UCITs que cuenta con un patrimonio de 3.000 millones de euros y que se gestiona con la misma estrategia gestionada por Pyrford desde el año 1994. Centra toda su cartera en tres tipos de activos: renta fija, deuda pública de gran calidad y cash. “Es una estrategia sencilla, sin apalancamiento ni uso de derivados, y que tiene un horizonte de inversión a largo plazo. La liquidez, el bajo coste transacción, la cotización continua y la transparencia y el yield positivo son las cuatro ventajas clave que ofrece frente a otros productos”, apunta Lars y justifica con ello que la firma haya decidido sacar una clase europea, con cobertura en euros, y que ahora presenta en España.
Según defienden desde BMO, el histórico de este fondo justifica su éxito: ha logrado resultados positivos 22 años de un historial de 24. En este sentido, sus peores rentabilidades fueron en 2002 y 2008, con un -1,8%. En cambio en 2008, justo en lo peor de la crisis financiera global, logró un 12,8%, además ha superado el índice de inflación en cerca del 5% anualizado desde 1994.
Para Lars, la clave está en sus fuentes de rendimiento: “El asset allocation, la duración, la divisa y el stock picking. La estrategia trata de ofrecer un flujo estable de rentabilidades totales reales en el largo plazo con una volatilidad absoluta baja y una importante protección frente a las pérdidas”. En este sentido, la cartera está puramente compuesta por acciones globales de calidad a valoraciones atractivas, deuda soberana AA ó superior y liquidez, apostando por la renta variable, duración y divisas.
“Construimos la cartera con bonos de muy alta calidad a muy largo plazo, aunque en los últimos años hemos usado algo más la corta duración, y evitamos cualquier riesgo de crédito. También nos enfocamos en empresas de alta calidad en renta variable, pero intentamos comprar en momentos caída del mercado, es decir, cuando el precio es atractivo. La divisa principal es la libra, que consideramos está ofreciendo una buena oportunidad: subió antes del Brexit y ahora que cae, beneficie a las empresas inglesas que tenemos en cartera porque son principalmente exportadoras”, explica Nielsen.
Una de las características que más llama la atención a los inversores españoles es el fuerte sesgo al Reino Unido que tiene este fondo y si en un contexto de Brexit, esto puede suponer un problema o un motivo para registrar pérdidas. Nielsen sostiene que se trata de todo lo contrario: “La deuda pública inglesa es un activo seguro y de calidad, igual que lo podría ser cualquier otro bono con una calificación alta, que cubre nuestra exposición en renta variable, que es de un 10% en compañías británicas con un fuerte actividad de exportación”, argumenta el responsable de Pyrford.
En este sentido, y según la visión de mercado que tiene la firma, considera que “en el Reino Unido, el Brexit continúa dividiendo al partido conservador, actualmente en el poder, debido a que el acuerdo propuesto enfurece tanto a quienes lo apoyan como a quienes no. Creemos que un futuro a largo plazo fuera de la Unión Europea será favorable para Gran Bretaña, pero las luchas políticas internas en ambos lados del Canal complicarán las cosas a corto plazo”.
Foto: CGIAR, FLickr, Creative Commons. El BCE apunta a posibles tensiones de liquidez en los fondos como riesgo para la estabilidad financiera de la eurozona
Los fondos, y las posibles tensiones de liquidez derivadas de potenciales reembolsos, pueden suponer un riesgo para la estabilidad financiera de la zona euro en los próximos dos años. Así lo cree que el Banco Central Europeo que, en su último informe semestral sobre Financial Stability Review, identifica cuatro riesgos principales: además de la liquidez de los fondos, señala el riesgo de acusadas caídas de los precios de los activos, la inquietud en torno a la insostenibilidad de la deuda y los impedimentos a la capacidad de intermediación de las entidades de crédito.
En definitiva, en BCE explica que los cuatro riesgos están claramente interrelacionados y, si llegaran a materializarse, podrían reforzarse mutuamente.
El riesgo de liquidez en los fondos
Es el cuarto riesgo, y enumerado en último lugar, que señala el BCE en su informe, que habla de posibles tensiones de liquidez. En primer lugar, el BCE comenta la importancia del sector y advierte de su asunción de riesgo: “En la zona del euro, los activos totales de este sector se han duplicado con creces en los diez últimos años, pasando de 5,7 billones de euros a finales de 2008 a 13,8 billones de euros en junio de 2018. El sector de fondos de inversión representa actualmente casi el 20% de los activos totales del sector financiero de la zona del euro y sus tenencias de activos de riesgo siguieron creciendo en 2018”, explica la autoridad.
Además de asumir riesgo, dice el BCE, los fondos tienen menos colchones de liquidez, aumentando la vulnerabilidad del sector ante posibles perturbaciones en los mercados financieros mundiales. “Por consiguiente, en caso de que se produzcan reembolsos significativos por parte de los inversores, es posible que los fondos necesiten liquidar partes relativamente considerables de sus carteras, lo que podría comprimir los precios de mercado”, advierte el organismo.
Aunque considera que la legislación actual de la UE proporciona un marco sólido para abordar la protección de los inversores y las vulnerabilidades propias de los fondos, asegura que “crece la preocupación por los riesgos cíclicos asociados a una mayor asunción de riesgos de liquidez y a una presencia cada vez mayor del conjunto del sector en el mercado”.
Riesgo de acusadas caídas de los precios de los activos
El primer riesgo importante para la estabilidad financiera que señala el BCE para los próximos años es el relativo a la posibilidad de un aumento desordenado de las primas de riesgo a escala mundial. “Los principales detonantes de dicho aumento estarían relacionados con factores tanto internos como externos. Entre ellos se incluyen reacciones desordenadas de los mercados ante la incertidumbre política o de política económica, un incremento de las tensiones en las economías emergentes con posibles efectos de contagio a las economías avanzadas y un giro brusco de las perspectivas macrofinancieras en Estados Unidos”, dice el informe.
Los focos de altas valoraciones de los precios de los activos y las elevadas correlaciones entre los precios de los activos financieros a escala mundial pueden amplificar un posible repunte de las primas de riesgo a nivel global, advierte.
Inquietud en torno a la sostenibilidad de la deuda
El segundo riesgo principal estaría relacionado con la inquietud en torno a la sostenibilidad de la deuda: “Los indicadores de tensiones en los mercados de deuda soberana de la zona del euro repuntaron ligeramente a mediados de 2018, como consecuencia de los acontecimientos políticos en Italia. Con todo, los repuntes fueron relativamente moderados, lo que indicó que la propagación de las tensiones a otros países de la zona había sido limitada. El endeudamiento de los estados soberanos de la zona del euro se mantuvo en niveles elevados y la ratio de deuda ha seguido aumentando en varios países altamente endeudados en los últimos años. Además, en algunos países, los niveles de deuda del sector privado siguieron siendo altos, tanto en términos históricos como internacionales, y se situaron por encima de los umbrales normalmente asociados con el sobreendeudamiento, aunque la dinámica de la deuda continuó beneficiándose del fuerte impulso cíclico de la economía de la zona del euro, al que se sumaron unas condiciones financieras muy favorables”, advierte el BCE, que también señala la fuerte recuperación de los mercados inmobiliarios en la zona euro.
Impedimentos a la capacidad de intermediación de las entidades de crédito
El tercer riesgo principal que señala el BCE está relacionado con las perspectivas de rentabilidad reducida de las entidades de crédito de la zona del euro y los posibles impedimentos a su capacidad de intermediación: “La rentabilidad de los bancos de la zona se estabilizó, situándose la rentabilidad agregada de los recursos propios en el 6,9% en el tercer trimestre de 2018. El nivel de solvencia de las entidades de crédito se mantuvo bastante estable y la ratio de capital de nivel 1 ordinario (CET1) agregada de las entidades significativas alcanzó el 14,2 % al final del tercer trimestre de 2018, frente al 14,3% un año antes. Las cotizaciones de las entidades de crédito de la zona del euro cayeron alrededor de un 30% en 2018, como consecuencia de la mayor incertidumbre política y de la inquietud en torno a las perspectivas del entorno exterior. Esta caída contribuyó a la disminución de las ratios de cotización, con la ratio de cotización sobre valor en libros agregada de los bancos cotizados de mayor tamaño situándose en 0,6 al final de 2018”.
En su informe, el BCE explica que los préstamos dudosos (NPL) de las entidades de crédito de la zona del euro siguieron disminuyendo de forma continuada: “Su volumen se redujo en 94 millones de euros en los tres primeros trimestres de 2018 y la ratio agregada de préstamos dudosos de las entidades significativas de la zona del euro se situó en el 4,2%, frente al 5,2% registrado un año antes. El proceso de reducción de estos préstamos se aceleró o prosiguió a buen ritmo en la mayoría de los países que tenían niveles elevados. El detalle de las variaciones de las ratios de préstamos dudosos en este período muestra que la mayoría de las reducciones de estas ratios se debieron a curas, liquidaciones y saneamientos. Al mismo tiempo, la mayor actividad del mercado secundario de activos deteriorados también contribuyó significativamente a reducir el nivel de estos préstamos. Por países, las ventas continuaron siendo más intensas en Italia y España. Pese al incremento de las operaciones, la liquidez de los mercados secundarios de préstamos dudosos siguió viéndose afectada por varios tipos de fallos de mercado. Las plataformas de transacciones para préstamos dudosos podrían ayudar a solventar fallos de mercado ofreciendo perspectivas de mayor transparencia en los mercados de préstamos dudosos, fomentando una participación más amplia de los inversores y dando respuesta a cuestiones de coordinación”, dice el informe.
Foto cedidaSol Hurtado de Mendoza. Sol Hurtado de Mendoza: “Los fondos medioambientales hacen frente a riesgos emergentes y tendencias sociales de largo plazo”
La calidad de lo que comemos, la forma en la que nos trasladamos o los residuos que generamos no son solo preocupaciones de la ciudadanía de a pie; desde hace unos años, han pasado a formar parte de las estrategias de inversión de las gestoras. Es el caso de BNP Paribas Asset Management, pionera en la aplicación de criterios ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno), que ofrece una serie de fondos temáticos centrados en asuntos medioambientales, como el agua, la alimentación o el cambio climático.
“Sin lugar a dudas, más que un tema del futuro, es del presente: buscar solución a los problemas medioambientales es una preocupación general que ya se ha convertido en una tendencia a largo plazo”, declara Sol Hurtado de Mendoza, directora general de BNP Paribas AM para Iberia, en una entrevista con Funds Society. A su juicio, en la actualidad, existe una mayor concienciación desde el mundo financiero sobre estas problemáticas, a lo que se une que son temas que pueden ofrecer “mucha rentabilidad”.
BNP Paribas AM cuenta con 400.000 millones de euros en activos bajo gestión y, de ellos, 222.000 millones son manejados con criterios ASG. Solo en fondos temáticos medioambientales (Parvest Aqua, Parvest SMaRT Food, Parvest Climate Impact, Parvest Global Environmnt y Parvest Green Tigers) la cifra es de 6.600 millones de euros.
“Son asuntos muy fáciles de entender, como comer y beber, y con factores de crecimiento clarísimos: el aumento exponencial de la población mundial está buscando conseguir una mejora en el nivel de vida y se dirige hacia las ciudades, lo que a su vez exige una mayor urbanización”, afirma Hurtado de Mendoza.
Asimismo, apunta que, en estos momentos, existe un déficit de infraestructuras hídricas en todo el mundo: “en los países desarrollados, la mayoría se construyeron a principios del siglo XX y necesitan ser mejoradas; y, en los países en vías de desarrollo, no las tienen”. En ese sentido, destaca que se prevé un gasto mundial de 7,5 trillones de dólares durante los próximos 15 años en este ámbito.
A esto se une que la misma regulación se está endureciendo para estos temas, lo que potencia aún más las inversiones de este tipo. Hurtado de Mendoza identifica cuatro grandes bloques a los que es necesario prestar atención: la eficiencia energética, el agua, los residuos (también los peligrosos) y la alimentación (que incluye la salud). Los fondos temáticos medioambientales de BNP Paribas AM buscan dar respuesta a estos “grandes retos” y, por ese motivo, incluyen a empresas en las que al menos el 60% de su facturación proviene de estrategias de este tipo.
Todos ellos son 100% de renta variable global y se aconseja un horizonte de inversión a largo plazo, ya que son tendencias que se van a mantener en el tiempo y la presión tanto de reguladores como de la sociedad “va a ser cada vez mayor”, puntualiza la directora general de la gestora. En cuanto a los riesgos que puedan afrontar estos fondos, señala que el mayor es el de la volatilidad en las bolsas o los sectoriales.
Alimentación sostenible
En este contexto, el Parvest Smart Food debe hacer frente a una serie de riesgos emergentes producto del cambio climático, como las sequías o las inundaciones, o la degradación medioambiental resultado de la elevada contaminación, la deforestación o los fertilizantes. En el ámbito de la alimentación, la regulación es cada vez más estricta y también lo es la demanda de los consumidores, que cada vez buscan más comida orgánica y natural.
Por ese motivo, la cartera de este fondo incluye a empresas que cubren toda la cadena de alimentación: “desde las que se encargan de plantar y del ganado, pasando por la logística y la seguridad alimentaria, hasta el empaquetado y la distribución”, señala Hurtado de Mendoza.
Además revela que, en el caso de este fondo concreto, hay una mayor exposición a Europa porque “el tema de la seguridad alimentaria, la concienciación de los consumidores y la preocupación por la salud es mayor”. Hasta marzo, su rentabilidad ha sido del 17% y, a tres años, es de un 5,43 %.
Apuesta por Asia
Otro de los fondos medioambientales clave de BNP Paribas AM es el Parvest Aqua, lanzado en 2015 y centrado en la inversión en agua, algo que, para la gestora, va “mucho más allá” de los servicios públicos y engloba a un amplio abanico de negocios, como proveedores de infraestructuras hídricas, empresas de depuración de aguas, sistemas de filtración y tecnología de reutilización del agua. El fondo ha registrado un rendimiento del 14,6% hasta marzo y un 9,44% a 3 años.
Por otro lado, recientemente ha lanzado otro fondo centrado exclusivamente en Asia: el Parvest Green Tigers. El motivo es que, según Hurtado de Mendoza, “muchas de esas tendencias de mediano y largo plazo se están desarrollando en Asia de forma clarísima: el crecimiento de la población ha sido brutal y afronta problemas serios de contaminación del aire y de la tierra”.
Pixabay CC0 Public DomainFree-Photos. AXA IM amplía su gama de inversión de impacto con un nuevo fondo especializado en tecnologías limpias
Con motivo del Día Mundial de la Tierra, AXA IM ha lanzado para el mercado español AXA World Funds Framlington Clean Economy, un fondo especializado en tecnologías limpias y que permite a los inversores una exposición muy especializada dentro de este campo que, en su opinión, tiene un importante potencial crecimiento a largo plazo.
Según ha explicado la gestora, el fondo estará gestionado por Amanda O’Toole y se trata de un compartimento de la SIVAV luxemburguesa de la gestora, que tiene como objetivo la revalorización del capital a largo plazo invirtiendo en el universo de las empresas de tecnologías limpias cuyas actividades mejoran la sostenibilidad de los recursos, apoyan la transición energética (desde los combustibles fósiles hasta la producción y el almacenamiento de energía libre de emisiones de carbono) y abordan el problema de la escasez de agua.
El enfoque de inversión del fondo mira más allá de las clasificaciones sectoriales tradicionales e identifica empresas con actividades que se benefician de tendencias de crecimiento de largo recorrido. El fondo también forma parte de la creciente gama de fondos de inversión de impacto de AXA IM.
Según la gestora, en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas (ODS), “el marco de impacto de AXA IM ayuda a definir en toda la gama de fondos los objetivos y resultados en materia de impacto en la sociedad”. Los ODS de ONU en los que se centra el fondo Clean Economy están en consonancia con cada una de las cuatro subtemáticas de la estrategia del fondo.
Las cuatro subtemáticas de la estrategia abordan y tratan de resolver los problemas a los que nos enfrentamos a causa de los recursos limitados.
Transporte sostenible: adopción del vehículo eléctrico, avances significativos en tecnología de baterías y desarrollo de sistemas de reducción de emisiones.
Energía inteligente: costes de producción de energías renovables, hogares y edificios más ecológicos con redes eléctricas digitalizadas y soluciones de almacenamiento de energía, así como fábricas más eficientes que reducen el consumo de energía.
Nutrición responsable: agricultura de precisión, reducción de la demanda de productos de origen animal, innovación en biociencias y empresas cuya tecnología mejora la calidad del agua potable y reducen el consumo de agua.
Reciclaje y reducción de residuos: empresas que mitigan los daños al medio ambiente, reduciendo los residuos, facilitando el reciclaje y controlando y resolviendo problemas de contaminación.
“Existe una necesidad urgente de gestionar las emisiones de carbono y limitar el calentamiento global. Los recursos naturales finitos del planeta se ven sometidos constantemente a nuevas presiones: 200.000 personas más pueblan la Tierra cada día. En la sociedad interconectada de hoy, las personas están cada vez más concienciadas sobre estos problemas y presionan para que haya cambios. En AXA IM hemos tomado nota de estos cambios y de las oportunidades que brindan a las empresas cuyas actividades facilitan la transición hacia una economía más sostenible. Gracias a una estrategia sin restricciones en diferentes segmentos de capitalización, el fondo Clean Economy invierte en empresas cotizadas que encierran un gran potencial de crecimiento mientras apoyan la transición del mundo hacia las energías renovables y los esfuerzos por optimizar el uso de los recursos, así como la reducción de los residuos y de la contaminación”, explica Amanda O’Toole, la gestora del fondo.
Por su parte, Beatriz Barros de Lis, directora general en España de AXA Investment Managers, destaca que “desde AXA IM queremos ofrecer a nuestros clientes las soluciones de inversión que necesitan hoy para construir juntos un futuro mejor. Como gestores activos, creemos que a través de la inversión se pueden conseguir cambios positivos para la sociedad. Esta estrategia cumple con creces este objetivo, permitiendo al inversor la posibilidad de apoyar el desarrollo de la transición energética, además de abordar el problema de la escasez del agua. Al mismo tiempo, se trata de una propuesta que puede aportar valor a aquellos inversores que están interesados en buscar alternativas de inversión a la renta variable tradicional y beneficiarse del potencial de crecimiento a largo plazo que ofrece la temática de las tecnologías limpias”.
El fondo está registrado en el Reino Unido, Austria, Bélgica, Alemania, Dinamarca, España, Portugal, Finlandia, Francia, Italia, Países Bajos, Noruega, Suecia y Liechtenstein.
Foto cedidaBrice Prunas. Brice Prunas: “El motivo principal para invertir en inteligencia artificial es su ritmo de crecimiento”
Las búsquedas de Google, los consejos de Siri y Alexa, nuestros gustos musicales en Spotify, lo que vemos en Netflix y hasta los tratamientos sanitarios a los que nos sometemos: la inteligencia artificial está presente en nuestro día a día sin que apenas nos percatemos de ella. ODDO BHF AM tiene la convicción de que en los próximos años va a crecer a un ritmo exponencial, motivo por el que el pasado diciembre lanzó un fondo de renta variable global de esta temática.
“El motivo principal para invertir en ella es el crecimiento: va a crecer un 23% anual entre 2018 y 2015, frente al 7% de los fondos de otro sector clave como es el de la ciberseguridad”, asegura Brice Prunas, gestor del ODDO BHF Artificial Intelligence, en un encuentro con periodistas en Madrid. Para él, la AI es “mucho más”: también va a aportar un gran valor a la economía. “Se trata de una revolución silenciosa que va a impulsar todos los sectores, cada uno de una forma distinta”, asegura.
La inteligencia artificial, señala, es la habilidad de un programa o un algoritmo de pensar como un ser humano. A esto se une que funciona como “semiconductor” para procesar los trillones de datos que se generan en la economía cada día. “También es un acelerador del internet de las cosas y de la computación en la nube”, apunta.
Según un estudio del Bank of America Merrill Lynch de noviembre de 2018, un 44% de los inversores considera que va a ser la temática más disruptiva e influyente de los próximos 5 años, por delante de la ciberseguridad (29,8%) y el cambio climático (16,7%).
Con ello en mente, el pasado diciembre la gestora lanzó el ODDO BHF Artificial Intelligence, un fondo temático de renta variable global que utiliza la AI en su mismo proceso de inversión, gracias a su alianza con la compañía de procesamiento de datos Nvidia Corporation.
A través de un algoritmo que procesa cuatro millones de datos al día, ODDO BHF AM identifica las 300 empresas, de un universo de 3.500, que están más expuestas a esta temática y que generan valor económico a través de ella, es decir, beneficios, crecimiento y efectivo. “El valor económico va a estar reflejado en el valor de las acciones”, apunta Prunas.
Con 33 millones de dólares en activos bajo gestión, el 55% del fondo está compuesto por empresas tecnológicas globales (semiconductores, software, internet…) y el 45% por otros sectores, como el sanitario o el manufacturero, que obtengan beneficios económicos gracias a la inteligencia artificial. “Por ejemplo, podemos tener una empresa de robots que realizan cirugías o un laboratorio farmacéutico que utilice la AI para encontrar un genoma”, señala Prunas.
Por regiones, un 60% de las firmas proceden de Estados Unidos, un 10% de Japón, un 10% de emergentes y “solo un 20% de Europa” porque “desafortunadamente, no está liderando el camino de la Inteligencia Artificial”.
Prunas destaca que el fondo es “una innovación en la industria de la gestión de activos”, ya que ellos mismos utilizan el big data y la inteligencia artificial a través de un análisis “semántico” y “del sentimiento”. El primero consiste en acumular información de las empresas del sector a través de 170 subtemáticas como la automatización, machine learning o el big data. “Cuando una empresa se queda fuera del algoritmo, vendemos”, asegura.
Al mismo tiempo, Nvidia procesa los contenidos que se publican en los medios de comunicación sobre firmas relacionadas en el sector, tanto pequeñas como grandes, para supervisar el alpha que generan las que se hallan en el fondo y encontrar nuevas en las que poder invertir.
Con todo, entre un 30% y un 50% del fondo está formado por pequeñas y medianas empresas, con una capitalización menor de 7.000 millones de dólares. Las más grandes (Amazon, Google o Facebook) representan menos del 15%.
A largo plazo (la gestora recomienda un horizonte de inversión de 5 años), la expectativa de rentabilidad es del 15% anual, frente al 8% de la renta variable tradicional. En cuanto a los riesgos, el más importante es “la exposición a los aranceles”, algo que se hace más notable en determinadas empresas, como, por ejemplo, las fabricantes de robots.
Pixabay CC0 Public Domain. ¿Sabe qué impuestos paga por sus inversiones?
Pese a que la fiscalidad no debería ser el motivo principal para decantarse por un determinado producto de inversión, saber cómo tributa cada producto financiero ayuda en gran medida a planificar mejor las finanzas personales, explican en Abante.
A partir del próximo 2 de abril todos los contribuyentes podrán presentar su declaración de la renta correspondiente al ejercicio 2018. Se acerca el momento de saldar cuentas con Hacienda y de poner en perspectiva todas las finanzas y las rentas o pérdidas que se hayan obtenido en 2018.
Los impuestos que la gente paga por sus inversiones afectan directamente a la rentabilidad que se obtienen por estas. Por ello, para evitar que el dinero mengüe, es necesario realizar un ejercicio de planificación financiera que no sólo tenga en cuenta las metas personales, el patrimonio y el nivel de gasto y ahorro, sino también la parte fiscal de cada inversión.
La fiscalidad de los productos financieros
Los vehículos de inversión tributan en el IRPF en la base del ahorro-a un tipo marginal que oscila entre el 19% y el 23% como rendimientos de capital mobiliario o como ganancias o pérdidas patrimoniales. Los únicos que tributan en la base general, como si fueran rentas del trabajo, son los que están relacionados con la jubilación, como los planes de pensiones, los planes de previsión asegurados (PPA), seguros de dependencia y algunos seguros colectivos.
Los rendimientos del capital mobiliario (RCM) son las rentas procedentes de elementos patrimoniales, bienes o derechos de naturaleza mobiliaria de los que el contribuyente es titular y que no están afectos a actividades económicas y se calcula según el tipo de rendimiento. Los obtenidos por la participación en fondos propios e intereses, cupones y otras remuneraciones por cesión a terceros de capital (RCM= importe bruto de la contraprestación -dinero recibido + retención si existe-), los obtenidos por la transmisión, reembolso, amortización, canje o conversión de activos representativos de la utilización de capitales ajenos (RCM= precio venta – precio de compra – gastos asociados a la venta y la compra).
Respecto a los procedentes de seguro de vida o invalidez, su cálculo es diferente según la forma y el momento en el que se reciba la prestación. Si es en forma de capital, el RCM se obtiene restando las primas aportadas a la prestación recibida; mientras que si es en forma de renta el RCM resulta del porcentaje de la renta. Finalmente, las ganancias o pérdidas patrimoniales (GPP) son las variaciones en el valor del patrimonio del contribuyente cuando se cambia la composición de este, si la renta no está sujeta a impuesto por otro concepto el GPP viene dado por la diferencia ente el precio de venta y el precio de compra junto con los gastos asociados a la venta y la compra.
¿Tienen retención los productos financieros?
Las retenciones son los anticipos que se le hacen a Hacienda por las rentas obtenidas en el ejercicio. De esta forma, cuando se reealiza la declaración -entre abril y junio del año siguiente- puede decucirse, del total, las retenciones que se hayan aplicado. Así, si el importe de la retención es mayor que lo que se debe pagar, Hacienda devolverá el exceso y viceversa.
No todas las rentas tienen retención. Hay productos financieros como las letras del tesoro, ETFs, derivados y divisas que no están sujetas a retención, mientras que hay otros productos que tienen dos fuentes de renta -rendimientos explícitos e implícitos-, en los que solo la renta explícita está sujeta a retención. Es el caso, por ejemplo, de las acciones, en las que el dividendo tiene retención, pero la venta no. Lo mismo sucede con los intereses de las cuentas y depósitos o los cupones de los bonos.
Por otro lado, los productos que solo tienen una fuente de renta, como los fondos de inversión, los seguros de vida, los pagarés de empresa, los bonos cupón cero y los planes de pensiones, siempre tienen retención.
En las retenciones se aplica el tipo impositivo del 19%, a excepción de los planes de pensiones, en los que la retención se calcula en función de la escala marginal del contribuyente y del importe que se haya rescatado.
Reglas de integración y compensación de las rentas de la base del ahorro
En el IRPF se recogen todas las rentas obtenidas por un contribuyente. La base imponible es la valoración monetaria del hecho imponible y comprende la base general, en la que tributan, por ejemplo, los rendimientos del trabajo, y la base del ahorro, donde se encuentran la mayoría de los productos financieros (además, tiene un tipo impositivo más bajo). Saber en dónde y cómo tributa cada producto es fundamental cuando se quiere compensar las rentas.
¿Cómo se compensan las rentas de la base del ahorro?
Primero se compensan entre sí los saldos positivos y negativos de los rendimientosdel capital mobiliario que hemos tenido durante el año fiscal. Si tras esa operación continúa habiendo saldo negativo en el capital mobiliario, se puede compensar con el saldo positivo de las ganancias y pérdidas patrimoniales, con un límite del 25%. Finalmente, si todavía queda saldo negativo, tenemos los cuatro ejercicios siguientes para compensarlo, siguiendo el mismo orden descrito anteriormente.
Por su parte, las pérdidas patrimonialesse pueden compensar con las ganancias patrimoniales de dicho año. Si el resultado es negativo, se podría compensar con el saldo positivo de las rentas del cuadro uno, con un límite de dicho saldo positivo del 25%. Como en el caso de los rendimientos del capital mobiliario, si el saldo continúa siendo negativo, podemos compensarlo en los cuatro ejercicios siguientes, siguiendo el mismo orden.
Los fondos de inversión en el IRPF
Los fondos de inversión sólo tributan cuando se produce el reembolso, es decir, cuando se saca el dinero propio, pero nunca mientras se sigue siendo partícipe ni cuando se traspasa el dinero a otro fondo.
La ganancia o pérdida patrimonial que se haya percibido tributa en la base del ahorro, entre el 19% y el 23%, según la cantidad. El 19% hasta 6.000 euros; el 21% entre 6.000 y 5.000 euros y, por último, el 23% a partir de 50.000 euros.
¿Cómo se valora la renta?
Al calcular la ganancia patrimonial, es importante recordar que se utiliza el sistema FIFO (First in, first out), lo que significa que se venden primero las participaciones más antiguas. El resultado que se ha de incluir en la declaración es el siguiente: precio de venta – precio de compra – gastos venta/compra (comisión de suscripción y reembolso).
Pixabay CC0 Public Domain. La selección de bonos emergentes corporativos de calidad de Aberdeen
La deuda emergente ha pasado de ser una elección marginal en las carteras a tener una mayor importancia. Se ha convertido incluso en parte del núcleo central, reflejando el tamaño de mercado de este tipo de activo. Si consideramos todos los tipos de activos dentro de la deuda emergente, incluyendo las emisiones en divisa fuerte o local y las corporativas, el mercado se ha duplicado desde 2010, pasando de los 9,3 billones de dólares hasta los 18,9 billones en 2018.
En el caso de la deuda corporativa emergente, es un tipo de activo diversificado, en el que la mayoría de las emisiones tienen la calificación de grado de inversión. Presenta valoraciones atractivas y una baja correlación con los bonos del Tesoro de Estados Unidos, además de una menor sensibilidad a las materias primas en etapas de cotización a la baja.
Una de las mayores dificultades para gestionar una cartera de deuda corporativa emergente es tener un conocimiento local de las compañías emisoras y los mercados en que operan, para poder identificar y seleccionar las emisiones de mayor calidad. Una tarea que sólo puede abordar con eficiencia una gestora con una extensa presencia global, con un equipo multidisciplinar, como es el caso de Aberdeen Asset Management.
Puesto que uno de las preocupaciones de los inversores en este tipo de activo es su posible elevada volatilidad, la clase I en dólares del fondo Aberdeen Standard Sicav I-Emerging Markets Corporate Bond se posiciona como uno de los que registra un dato más reducido en el último año, dentro del grupo de fondos de mayor calificación de la categoría VDOS de renta fija internacional emergentes, en que se encuadra el fondo. En el año gana un 6,80% por rentabilidad.
Tomando como referencia de gestión el índice JPM Corporate EMBI Broad Diversified, invierte al menos dos terceras partes de sus activos en emisiones de deuda de compañías emergentes denominadas en divisa fuerte, incluyendo las sociedades estatales. Su estilo de inversión puede definirse en términos generales como activo, fundamental y bottom-up, seleccionándose por la calidad de cada emisión individual (bond picking), aunque la valoración de las perspectivas del país (top-down) también se toman en consideración. El objetivo del equipo gestor es explotar las oportunidades que descubren a través de una cartera bien diversificada, sin ceñirse a la composición de los índices.
Analizar la capacidad financiera y la valoración relativa de cada emisión resulta crítico a la hora de invertir en un bono, por lo que analizan todas y cada una de las nuevas emisiones, invirtiendo sólo en aquellos emisores con los que se han reunido. Compran valores que creen que están infravalorados en relación con sus fundamentales y en los que, en base a su análisis de escenarios, el equipo gestor confía en que batirán al índice.
Puede incluir mercados más pequeños e incluso mercados frontera, pero siempre en divisa fuerte, cuando la valoración y expectativas de la empresa lo aconsejen. Su enfoque ASG (criterios ambientales, sociales y de gobernanza) añade un nivel adicional de análisis de riesgo. Tratan así de influir en las compañías para que estas sean mejores, lo que se verá reflejado en sus valoraciones. Aunque la cartera del fondo tiene un sesgo ‘high yield’, se puede catalogar al fondo como de riesgo inferior. La calidad de balance y su menor apalancamiento, hace que las compañías sean de mejor calidad media que el índice.
Los gestores del fondo son Brett Diment y Siddharth Dahiya. Brett es el director de Deuda Emergente, incorporado a Aberdeen Standard Investments como resultado de la fusión entre Aberdeen Asset Management y Standard Life en agosto de 2017. Su incorporación inicial a Aberdeen fue consecuencia de la adquisición del negocio de renta fija de Deutsche Asset Management en Londres y Filadelfia. Brett es lincenciado en Económicas por la London School of Economics.
Siddharth se incorporó a Aberdeen en 2010, inicialmente como analista de crédito dentro del equipo de Riesgo de Contrapartida. Con anterioridad formó parte del equipo de Inversión en Renta Fija Soberana en el banco ICICI Bank UK Plc en Londres, focalizado en el mercado indio. Siddharth se licenció con honores en Ingeniería eléctrica y Electrónica por la Escuela de Ingeniería de Punjab, en la India, y ha completado un postgrado en Administración de Empresas en el Instituto Hindú de Dirección, en Lunknow. Cuenta también con la certificación CFA.
El equipo sigue un proceso de inversión disciplinado que se aplica tanto al análisis, como a la construcción de la cartera y a la gestión de riesgos. Es un proceso diseñado para resaltar las oportunidades de rendimiento relativo en todos los mercados de deuda emergente. La piedra angular del proceso de análisis son las notas de las compañías, que incluyen un análisis del sector en el que opera la compañía, un análisis detallado de sus operaciones y modelo de negocio, análisis financiero y ganancias proyectadas, estructura de emisión y convenios y, finalmente, análisis sobre los factores ASG que afectan a la empresa.
Para invertir con éxito en bonos emergentes se requiere un análisis fundamental intensivo, que constituye la base de su proceso de inversión. Esto les permite obtener una comprensión profunda de los riesgos inherentes asociados a los países y las empresas en las que invierten. La toma de decisiones en equipo añade valor a un proceso de selección que se enfoca en el largo plazo, al objeto de evitar la distracción de la volatilidad a corto plazo. Respecto al estilo de inversión bottom-up frente a top-down, no resulta tan relevante para el equipo gestor como la capacidad de las compañías de pagar sus bonos al vencimiento.
En cuanto a la gestión de riesgos, el equipo gestor se asegura de tener un conocimiento profundo de todos los riesgos inherentes antes de la inversión. Nunca invierten sin antes haberse reunido con su equipo macroeconómico, para estimar el riesgo país, y con la dirección de la compañía para calibrar cualquier problema corporativo. Se aseguran también de estar cómodos con la estructura del bono, contando con un abogado dedicado exclusivamente a asesorar al equipo respecto a las cláusulas de los bonos, en caso de reestructuración y/o quiebra.
El gran conocimiento de las compañías les permite invertir con convicción, para formar una cartera con más de 130 posiciones, diversificada tanto por país y sector como por calificación crediticia. Las mayores posiciones incluyen emisiones de GNL Quintero (1,50%), Teva Pharmaceuticals (1,30%), ICD Sukuk (1%) VM Holdings (1%) y Cementos Progresso (1%). Por país, México (3,10%), Guatemala (2,90%), Emiratos Árabes (2,80%), Turquía (1,50%) y China (0,80%) representan los mayores pesos. Con respecto a su índice de referencia, el fondo sobrepondera en los sectores inmobiliario (4,29%), salud (1,22%) e industrial (0,04%); infraponderando el financiero (-6,04%), consumo (-2,86%) y energía (-2,19%).
La evolución por rentabilidad del fondo lo sitúa en el primer quintil durante 2015, 2016 y 2018, batiendo al índice de su categoría durante el actual 2019. A tres años, registra un dato de volatilidad del 6,85%, reduciéndose hasta el 4,83% en el último año, lo que sitúa a este fondo entre los mejores de su categoría por este concepto, en el quintil cinco. En este último periodo anual, su Sharpe es de 2,07, siendo su tracking error, respecto al índice de su categoría, del 5,06%. La suscripción de la clase I en dólares de Aberdeen Standard Sicav I-Emerging Markets Corporate Bond, dirigida al inversor institucional, requiere una aportación mínima inicial de un millón de dólares (aproximadamente 888.410 euros), aplicando a sus partícipes un 0,75% de comisión fija. El fondo tiene también una clase para el inversor minorista en dólares y otra en euros, con una aportación mínima de 1.500 dólares (apróximadamente 1.332 euros).
Dados los fuertes rendimientos de los mercados en los primeros dos meses del año, el equipo gestor estima que sería natural que el mercado tome un pequeño respiro y consolide sus ganancias a medida que el ritmo de emisiones se acelere. Flujos y vencimientos en marzo y abril siguen siendo fuertes en los mercados emergentes, lo que debería respaldar a los mercados. Continúan posicionando el fondo de manera defensiva, disfrutando del carry mientras se mantienen cautelosos en algunas de las historias más especulativas. Se espera que las tasas de impago sigan siendo bajas y, descontando eventos políticos idiosincrásicos en el horizonte, los fundamentales del mercado siguen siendo sólidos, lo que les lleva a una perspectiva favorable para el resto del año.
Durante el último periodo de tres años, el fondo muestra una positiva evolución por rentabilidad, respecto a su volatilidad, obteniendo la calificación cinco estrellas de VDOS.
Artículo de opinión de Paula Mercado, directora de Análisis de VDOS y quefondos.com
Pixabay CC0 Public Domainalfcermed. Los gestores de Merian Global Investors apuestan por los bonos estadounidenses y la renta variable emergente
Los principales gestores de Merian Global Investors coinciden en tres cosas: gestión activa, diversificación y poner la vista en los fundamentales. Ya se trate de renta fija o de renta variable, todos consideran que hay que tener un enfoque de gestión flexible y prepararse para una volatilidad que irá aumentando.
En su opinión, las decisiones que tomen los bancos centrales marcarán gran parte de los designios de este año y se reafirman en recordar que los ciclos no se agotan por sí solos, sino que generalmente ha sido la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) la que ha propiciado el fin de un ciclo al equivocarse con su política monetaria. “La Fed sabe que si sube los tipos dañará la economía, por eso se ha vuelto tan dovish. En general, los bancos centrales han frenado la normalización de su política monetaria, lo cual genera algunas dinámicas positivas para la economía, pero también supone un riesgo y sostener una situación de mercado que no es la normal”, señala Mark Nash, gestor de renta fija en Merian Global Investors y del fondo Merian Strategic Bond Fund desde junio de 2016.
En opinión de Nash, parte de lo que está ocurriendo en el mercado de renta variable es consecuencia de las decisiones que los bancos centrales han tomado. “Creo que éstos siguen siendo el principal soporte de las economías globales y eso ha provocado algunos fenómenos, como una excesiva situación de endeudamiento. En particular, nos preocupa el mercado de crédito estadounidense, donde no todos los activos son de calidad respecto al riesgo y al precio que se paga por ellos”, señala.
En cambio, este gestor de renta fija parece más cómodo en el mercado de bonos estadounidense y en la deuda de emergentes. Según Nash, entre las opciones más atractivas que identifica están los activos vinculados con la inflación, deuda periférica europea (Italia, Grecia y Chipre), CoCos o deuda subordinada europea a largo plazo y buscan oportunidades en zonas como Australia.
Renta variable y mercado emergentes
Respecto a la renta variable, Ian Heslop, responsable de renta variable global de Merian Global Investors, reconoce que la posición de los bancos centrales y la liquidez que han inyectado durante tanto tiempo han distorsionado parte de la valoración de los activos. “El reto va a ser gestionar el entorno una vez que se hayan retirado del mercado”, apunta.
Mientras, sus gestores muestran una gran convicción por la renta variable emergente. “Creo que hay valoraciones atractivas, que los beneficios empresariales van a aumentar y que han hecho los deberes respecto a las reformas fundamentales que tenían pendientes”, argumenta Nick Payne, responsable de renta variable emergente en Merian Global Investors.
En opinión de Payne, este tipo de activo tiene que estar presente en la cartera de los inversores si quieren ver algo más de rentabilidad por sus inversiones. Reconoce que 2018 fue un año “peligro” para estos mercados por tres motivos: la Fed y el impacto de su subidas de tipos, las consecuencias de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, y el menor crecimiento registrado en China.
“La gran oportunidad que tienen los mercados emergentes es que ofrecen una gran variedad de clases de activos, en cuanto a riesgo y rentabilidad. Debemos de buscar más allá de China y ser muy selectivos con los activos, siendo muy cuidados con la calidad. India o Brasil son grandes opciones, pero siempre apostando por empresas sólidas, que se apoyen en los vastos mercados locales y que sea sostenible en el tiempo. Creo de verdad que en los mercados emergentes se puede comprar calidad a un buen precio, y que con la gestión activa se le puede sacar un gran partido”, concluye Payne.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Paris Sharing . La importante relación entre la diversidad de género y el rendimiento financiero
Cada vez más, la insuficiente representación de las mujeres en los cargos directivos de alto nivel en el sector privado está siendo percibido como un problema, no solo desde una perspectiva de equidad e igualdad, sino también porque puede impedir un buen desempeño.
Así, Mirova, la gestora líder en inversión de impacto y afiliada de Natixis IM, lanzó a principios de abril el fondo Mirova Women Leaders Equity, una nueva estrategia temática que centrará su inversión en empresas que están comprometidas con la promoción de la igualdad de género y el incremento de la representación de las mujeres en los altos niveles de la gestión y dirección corporativa.
Mujeres en una posición de liderazgo y la rentabilidad de las empresas
Los efectos de un mayor número de mujeres en posiciones directivas ha sido el tema de estudio de una amplia investigación por parte de académicos, organizaciones internacionales, agencias y empresas de análisis e investigación como McKinsey y The Boston Consulting Group.
Estos estudios sirven de soporte a la idea de que una mayor diversidad de género puede llevar a un mejor desempeño operativo y organizacional. Entre los diversos beneficios que resultan de una política proactiva de diversidad de género, las empresas pueden esperar:
Un canal de talento asegurado: en la actualidad, las mujeres superan a sus contrapartes masculinas en términos de inscripción en programas de educación superior y representan un gran porcentaje de la fuerza laboral y del grupo de contratación en muchas industrias. Considerando la lucha actual en términos de talento, las empresas deben atraer y retener tanto a las empleadas como a los empleados si desean tener una fuerza de trabajo capacitada. Las prácticas de diversidad proactivas son una forma de asegurar el flujo de talento tan necesario, especialmente en países que enfrentan escasez de una mano de obra debido al envejecimiento de la población.
Una mayor innovación, más creatividad y una mejor toma de decisiones: los entornos inclusivos y diversos proporcionan diferentes perspectivas que fomentan la innovación y conducen a mejoras en las decisiones de los equipos directivos. La empresa de consultoría The Boston Consulting Group (BCG) y la Universidad Técnica de Múnich realizaron un estudio empírico sobre la relación entre diversidad en los equipos directivos y la innovación. Encontraron que empresas con la mayor diversidad de género podía gestionar cerca de un 10% adicional de ingresos a partir de productos y servicios innovadores en comparación con empresas que tenían una diversidad por debajo de la media en su equipo directivo. La evidencia también sugiere que la posibilidad de tener una alto porcentaje de mujeres directivas está correlacionado positivamente con la innovación disruptiva, definida por BCG como una situación en la que un nuevo producto, servicio o modelo de negocio reemplaza completamente la versión existente anterior.
Un mejor conocimiento del cliente que resulta en un incremento de las ventas: al contribuir con diferentes perspectivas, las mujeres en los equipos directivos ayudan notablemente a comprender la base de clientes, especialmente en un mercado de consumidores que está cada vez más liderado por mujeres. De hecho, las mujeres realizan la gran mayoría de las decisiones de gasto en los hogares, y por lo tanto representan una proporción creciente de los consumidores, clientes y socios de muchos negocios. De nuevo aquí, los estudios muestran que el crecimiento medio de las ventas para empresas con una representación mayor al 50% en su equipo directivo fue del 8% entre 2008 y 2016, frente a un -0,2% del índice MSCI ACWI.
Fortalecimiento de la motivación y el compromiso de los empleados que conducen a unas mayores tasas de retención junto con una mayor productividad: existe una extensa investigación en la literatura sobre gestión y dirección de empresas que subraya los beneficios en la percepción de por parte de los empleados de un trato de equidad, inclusión y apoyo en el avance de su carrera. Los principales beneficios para estas empresas son unas mayores tasas de retención, una motivación fortalecida y un incremento en la productividad.
Una mejora en la reputación corporativa: en un momento en el que todos los actores participantes en la empresa, desde los consumidores hasta los inversores, están prestando una mayor atención a las prácticas desarrolladas por las empresas con relación a la igualdad en oportunidades y la inclusión, las empresas que abrazan la diversidad de género se benefician de una mejora en la reputación corporativa. En ese sentido, casi un 70% de las empresas encuestadas por la Comunidad Europea que han implementado políticas de diversidad han experimentado una mejora en su imagen de marca.
Una menor probabilidad de incurrir en problemas éticos y legales: según los investigadores de la Universidad de North Carolina y Wake Forest, las mujeres que dirigen las divisiones financieras son menos proclives a utilizar medidas de evasión fiscal más riesgosas y tienen una mayor probabilidad de incrementar su rentabilidad.
Por lo tanto, invertir en empresas que defienden la diversidad de género puede llevar a unas mejores decisiones de inversión porque la excelencia organizacional es un factor clave en el rendimiento de la totalidad de la empresa. Aunque es difícil probar la causalidad, la amplia investigación realizada hasta ahora encontró una sólida correlación entre la ventaja competitiva resultado de un enfoque proactivo en la diversidad de género y el desempeño financiero de una empresa. Esto se ve reflejado en un incremento de la rentabilidad y unos mayores rendimientos.