Un nuevo mes, un nuevo récord. La industria europea de ETFs no pierda fuerza y cierra julio con un patrimonio de 2,76 billones de dólares, según los datos publicados por ETGI. Durante ese mes, se produjeron entradas netas por 31.180 millones de dólares, lo que llevó las entradas netas acumuladas hasta la fecha a un total récord de 207.280 millones de dólares.
«En el último año, los ETFs en Europa han atraído entradas netas por 350.520 millones de dólares. Julio marcó el 34º mes consecutivo de entradas netas en los ETFs listados en Europa, lo que refleja un crecimiento constante. Los ETFs de renta variable han sido los más destacados, con entradas netas de 23.650 millones de dólares en julio, llevando las entradas acumuladas en lo que va del año a 144.30 mil millones de dólares, significativamente superiores a los 89.450 millones de dólares registrados a finales de julio de 2024″, indican desde ETFGI.
Los ETFs de renta fija vieron entradas netas de 3.230 millones de dólares en julio, con un total acumulado de 35.920 millones de dólares en lo que va del año, ligeramente por debajo de los 36.440 millones de dólares registrados en el mismo periodo de 2024. Por su parte, los ETFs de commodities reportaron entradas netas de 911.67 millones de dólares en julio, lo que elevó las entradas acumuladas a 7.960 millones de dólares, en comparación con los 4.890 millones de dólares en salidas netas del año anterior.
Los ETFs activos también han continuado ganando terreno, atrayendo 3.420 millones de dólares en julio, lo que eleva las entradas netas acumuladas a 16.780 millones, más del doble de los 6.740 millones de dólares registrados a finales de julio de 2024.
Estas cifras se deben en parte a los 20 principales ETFs por nuevos activos netos, que colectivamente reunieron 15.19 mil millones de dólares en julio. El ETF iShares Core MSCI World UCITS (IWDA LN) lideró la lista, con la mayor entrada neta individual de 2.06 mil millones de dólares. Los 10 principales ETPs por activos netos nuevos también acumularon 1.99 mil millones de dólares en julio, destacando el Invesco Physical Gold ETC – Acc (SGLD LN), que reunió 594.23 millones de dólares, siendo la mayor entrada individual neta.
BBVA Global Wealth Advisors(GWA) anunció la incorporación a Augusto Tricotti a su equipo comercial como Financial Advisor en Miami, según un posteo realizado por la firma en la red de profesionales Linkedin.
“Augusto se une a nuestro equipo Comercial como Asesor Financiero. Se centrará en atender a clientes de Uruguay y Colombia”, dijo la empresa en su publicación.
Con más de 14 años de experiencia en el sector de servicios financieros globales, Tricotti “aporta una perspectiva única moldeada por su tiempo en BBVA en Uruguay, BBVA Alemania, PiHub Private Investments y Banco Itaú”, agregó. En BBVA Uruguay trabajó cerca de ocho años, donde el último puesto que ocupó fue el de Private Wealth Manager. Es Licenciado en Economía por la Universidad ORT de Uruguay, y cuenta con un Máster en Finanzas de la Frankfurt School of Finance & Management y con otro en Ciencia de Datos de la Universidad Autral de Argentina.
La nueva incorporación de BBVA GWA ha estado trabajando en estrecha colaboración con clientes latinoamericanos y europeos, buscando soluciones internacionales de gestión de patrimonio.
“Estamos entusiasmados de tener a Augusto a bordo a medida que continuamos aumentando nuestra presencia global y brindando orientación financiera”, concluyó la firma en Linkedin en su posteo de bienvenida.
Las estimaciones del sector apuntan a que los mercados privados pasarán de los 13 billones de dólares actuales a más de 20 billones en 2030. Pero antes de llegar a esa fecha, los inversores deberán afrontar un segundo semestre de 2025 cargado de incertidumbre. Sobre esta visión más a corto plazo, las principales firmas de inversión se han pronunciado en sus outlooks de mitad de año, que coinciden en que los activos alternativos seguirán teniendo sentido en las carteras de los inversores.
Por ejemplo, en opinión de Goldman Sachs AM, los mercados privados, los hedge funds y las estrategias de cobertura ante riesgos extremos pueden ofrecer rutas alternativas hacia la resiliencia, además de brindar exposición a temas de crecimiento persistente y acelerado. “En los mercados privados, seguimos esperando una fuerte demanda por parte de los inversores hacia el crédito privado, impulsada por sus históricamente atractivos rendimientos ajustados al riesgo y sus beneficios de diversificación”, reconocen.
Además, añaden que, para los inversores que necesitan liquidez o buscan reequilibrar sus carteras, las innovaciones continuas en los mercados secundarios están ofreciendo nuevas opciones. “También creemos que el entorno actual seguirá favoreciendo la generación de alfa por parte de los hedge funds, al mismo tiempo que refuerza el valor de diversificación que estas inversiones han proporcionado históricamente”, afirman.
Desde la óptica de M&G, consideran que la reciente recuperación de los mercados privados probablemente no se verá desviada por los eventos recientes, ya que “los impulsores de crecimiento estructural siguen vigentes y continuarán”, señalan. Y añaden: “Las perspectivas para el crédito privado son más positivas que antes, con márgenes y demanda que probablemente mejorarán. El capital privado podría verse afectado por mayores costos de financiación y un entorno operativo más complicado para las inversiones. La naturaleza no cotizada de los mercados privados probablemente esté protegiendo a los inversores de lo peor de la volatilidad del mercado a corto plazo, al tiempo que preserva los atractivos a largo plazo de esta clase de activos”, insisten.
Peter Branner, CIO de de Aberdeen Investments, y Paul Diggle, Chief Economist de Aberdeen Investments, consideran que los mercados privados son una oportunidad estructural dado que se encuentran una situación “idónea” gracias a un entorno de tipos de interés a la baja, a un crecimiento económico que se ralentiza, pero no se contrae, y a un historial de oferta insuficiente de activos de calidad en áreas como el inmobiliario, las infraestructuras y el crédito privado.
Ideas de inversión
A la hora de hablar de ideas concretas, desde Goldman Sachs AM señalan que las soluciones de financiación flexibles, como el capital híbrido, pueden ayudar a las empresas con fundamentos sólidos a optimizar sus estructuras de capital. “En un entorno macroeconómico impredecible, vemos oportunidades para invertir en temas de crecimiento persistente y acelerado. El aumento del gasto en defensa e infraestructuras en los mercados desarrollados refuerza la solidez de la seguridad económica, a pesar de la reciente volatilidad a corto plazo en los mercados bursátiles. La inteligencia artificial, la transición hacia energías limpias y el retorno de la producción industrial están impulsando una fuerte demanda de energía y electricidad. Creemos que será necesario un mayor crédito privado orientado a la transición climática para ampliar las soluciones energéticas a través de distintos países y casos de uso”, argumentan desde la gestora.
Según las gestoras, el crédito privado ha sido uno de los activos alternativos más atractivos durante los primeros seis meses del año y lo seguirá siendo los próximos seis restantes. “En los mercados privados, el aumento de los costes de financiación podría representar un desafío para las empresas más arriesgadas, poco convencionales y/o aquellas con flujos de caja a largo plazo expuestos a la incertidumbre. No obstante, a pesar de los desafíos, podrían surgir oportunidades para inversores especializados en deuda, así como un mayor incentivo para que las empresas se financien a través de partes más dispuestas a evaluar sus condiciones específicas”, argumentan desde M&G.
Para la gestora esta no es la única idea de inversión para el segundo semestre, también consideran que el real estate puede verse poco afectado por la incertidumbre. “Si bien es posible, parece poco probable que un entorno económico o corporativo más débil perjudique notablemente la actual y sólida demanda de ocupación. De hecho, la oferta limitada y la evidencia constante de aumento en los niveles de alquiler sugieren que la recuperación inmobiliaria actual está bien fundamentada”, explican.
En ese sentido, los dos expertos de Aberdeen Investments añaden: “El mercado inmobiliario directo global parece atractivo, con una mejora de los mercados de ocupación y de crédito, pero con una oferta limitada. La diversificación de la cartera es importante en un mundo impredecible. Con señales cada vez más frecuentes de correlación positiva entre la renta variable y la renta fija —ambas suben y bajan al unísono—, las carteras estándar de renta fija y renta variable no proporcionarán suficiente diversificación”.
En cambio desde M&G advierten de que no todas las áreas del universo de los mercados privados serían inmunes a una caída de la confianza del mercado, y para private equity, la situación podría volverse más complicada: “Si el mundo se resigna a unos niveles arancelarios más altos que los actuales, esto podría tener un efecto inflacionario, dificultando la capacidad de los bancos centrales para reducir los tipos de interés tanto o tan rápidamente como se esperaba. Esto incrementaría los costes de financiación para el capital privado. El entorno operativo para las empresas también se vería afectado, lo que posiblemente prolongaría los períodos de tenencia de activos y dificultaría las salidas (exits)”.
Los ricos no son ajenos al momento de volatilidad e incertidumbre que marca el contexto global. Muestra de ello es que la última encuesta sobre estilo de vida de Julius Baer, que se encuentra en su cuarto año, revela profundos cambios en las actitudes y comportamientos de los individuos con un alto poder adquisitivo (HNWI) en todo el mundo.
En concreto, en medio de las crecientes tensiones geopolíticas y la incertidumbre económica, las personas adineradas buscan cada vez más un equilibrio entre el deseo de disfrutar de la vida presente y la planificación a largo plazo para el futuro.
Un hallazgo clave de este año es el enfoque casi universal en la longevidad. Entre el 87% (Norteamérica) y el 100 % (Asia-Pacífico) de los encuestados afirman tomar medidas activas para prolongar su vida, desde adoptar estilos de vida más saludables hasta explorar intervenciones de vanguardia como la terapia génica y los tratamientos criogénicos. Simultáneamente, la longevidad financiera se ha convertido en una preocupación igualmente crítica, y la mayoría de los encuestados indica que ajustaría sus estrategias patrimoniales si se enfrentaran a una mayor esperanza de vida.
Además, la creación de riqueza sigue siendo la principal prioridad a nivel mundial, pero la preservación del patrimonio ha cobrado importancia, especialmente en Europa y Norteamérica, donde prevalece un enfoque de inversión más conservador. Por el contrario, los HNWI de Asia-Pacífico, Oriente Medio y Latinoamérica continúan asumiendo mayores niveles de riesgo y diversificando sus carteras en consonancia con sus valores personales y las nuevas tendencias globales.
Por último, a la hora de analizar su estilo de vida, la encuesta confirma la transición continua del consumo material hacia las experiencias. “Si bien el gasto en bienes de lujo se ha moderado, la demanda de restaurantes de alta cocina, viajes exclusivos y experiencias de lujo se mantiene sólida. Esto refleja una evolución más amplia en cómo los HNWIs definen el lujo, centrándose cada vez más en el estilo de vida, el bienestar y las experiencias significativas por sobre las posesiones”, concluyen desde Julius Baer.
En pleno proceso de negociaciones arancelarias, la política comercial de Estados Unidos continúa siendo una de las mayores fuentes de incertidumbre para muchos países. En Asia, destaca el acuerdo arancelario entre EE.UU. y Japón, mientras los mercados y los inversores esperan que China cierre el suyo. Ahora bien, ¿qué supone lo pactado por el gobierno nipón?
Para abordar esta cuestión, Natixis CIB ha elaborado el informe ‘Previsión del Banco de Japón: avances positivos en las negociaciones arancelarias, pero aún es prematuro subir los tipos en julio’. En él, la entidad destaca la importancia del acuerdo comercial en curso, recordando que Estados Unidos es el principal socio comercial de Japón, lo que hace especialmente relevante cualquier avance en este ámbito.
Según el análisis, las posiciones especulativas en torno al yen han ido reduciéndose, lo que podría haber contribuido a la reciente debilidad de la moneda japonesa. Una subida de los tipos de interés por parte del Banco de Japón podría reforzar el valor del yen, ayudando así a contener la inflación provocada por el encarecimiento de las importaciones, que ha afectado negativamente a los salarios reales. Sin embargo, Natixis CIB también señala que es probable que el Banco de Japón opte por no subir los tipos en su reunión del 31 de julio, ya que querrá esperar a evaluar con mayor claridad el impacto económico de los aranceles antes de tomar una decisión.
Foto cedidaApertura del XXI seminario de Moneda Patria
Un evento imperdible para la industria financiera chilena, con una variedad de actores de peso de la economía local, tuvo lugar esta semana en el salón principal del hotel W de Santiago. La instancia: la vigésimo primera versión del seminario de Moneda Patria Investments, articulado bajo la premisa “Latam: embracing opportunities”.
En sus palabras de apertura, Alexandre Saigh, CEO de Patria Investments, destacó que el entorno global –incluyendo la marcada caída del dólar multilateral– ha empujado a los inversionistas a buscar oportunidades en distintos mercados, abriendo oportunidades para América Latina. “Los países que tienen fundamentos más sólidos tienen potencial de atraer capital”, indicó.
Al tomar el podio, Pablo Echeverría, socio fundador y presidente de Moneda Patria, recalcó el punto: “Que esta región y nuestro país ofrece grandes oportunidades es innegable”, dijo.
El ejecutivo también se refirió al ciclo electoral local, que a fines de este año determinará el próximo presidente del país. “La elección de un nuevo gobierno nos da una oportunidad para enmendar el rumbo”, dijo, tras una década de un ritmo alicaído en la economía y con una serie de desafíos –recuperación del mercado de capitales, déficit habitacional, largas listas de espera en la salud pública, entre otros– por delante.
Este fue precisamente el plato fuerte del seminario, con presentaciones de los tres principales candidatos presidenciales, que lideran las encuestas. José Antonio Kast, Evelyn Matthei y Jeannette Jara dieron luces de los programas con los que compiten por La Moneda, a sólo 98 días de la primera vuelta de los comicios.
La visión de José Antonio Kast
El primer abanderado, representante del ultraconservador Partido Republicano, fue Kast, quien criticó duramente a la actual administración –de Gabriel Boric, y en la que Jara trabajó como ministra del Trabajo y Previsión Social– y aseguró que es necesario establecer un “gobierno de emergencia”. Haciendo hincapié en que la gente está “preocupada” por una serie de temas –migración, delincuencia, salud pública, etc–, incluyendo “el peor crecimiento en décadas”, el candidato describe su programa como un cambio radical.
En materia económica, Kast propone recortar regulaciones, integrar el sistema tributario, rebajar los impuestos a las empresas –de 27% a 20% para las grandes compañías, manteniendo el tributo de 12,5% del régimen pro-pyme actual– y recortar el gasto fiscal. “La mejor política pública y social es el pleno empleo”, señaló.
El representante de extrema derecha también enfatizó en el tema migratorio, indicando que hay una conexión entre el aumento de asesinatos y la mayor percepción de delincuencia y el aumento en los ingresos clandestinos al país. “Los primero que vamos a hacer es cerrar las fronteras”, prometió.
Los planes de Evelyn Matthei
Más adelante, fue el turno de Matthei, la carta de la centro-derecha, perteneciente a la Unión Demócrata Independiente (UDI). La candidata describió un complejo contexto para el país andino, incluyendo un crecimiento “bajísimo” de la economía. Eso sí, además de recalcar la importancia de mejorar la competitividad del país y aprovechar sus recursos y alianzas, también enfatizó en la necesidad de “lograr un país más equitativo, más cohesionado”.
Sobre sus planes, la política se puso la meta de crecer un 4% y recaudar 8.000 millones de dólares al año. Para esto, planteó hacer ahorros en materia fiscal. Específicamente, espera recortar 700 millones de dólares en licencias médicas –tras un escándalo que encendió las alarmas en Chile este año–, 600 millones de dólares en compras públicas, 400 millones de dólares en burocracia (incluyendo horas extra y cargos de confianza). En total, asegura que pueden recortar el gasto fiscal en 2.000 millones de dólares al año.
Además, Matthei planteó una baja del impuesto corporativo, a 23% para grandes empresas y a 10% para pymes; integrar el sistema tributario; crear una oficina presidencial de seguimiento para los proyectos de inversión estancados; permitir a los fondos de pensiones invertir en fondos de venture capital nacionales; y eliminar el impuesto a la ganancia de capital por transacciones bursátiles.
El desafío de Jeannette Jara
Al otro lado del espectro político está la única abanderada del oficialismo y elegida del Partido Comunista. Al iniciar su presentación, dejó claro un mensaje: “La convergencia fiscal se va a cumplir”. Y el rallado de cancha no quedó ahí, ya que inmediatamente señaló que no planea reducir impuestos corporativos, dado que eso aumentaría el déficit fiscal y la deuda pública.
Además del llamado a “ejecutar la cartera de inversiones que ya tenemos” –que cifró en 80.000 millones de dólares–, la exministra delineó tres líneas que dirigen su programa. Por un lado, está el crecimiento económico sustentable y con sueldos decentes. Además, sugirió complementar el combate contra la delincuencia atacando las fuentes económicas del crimen organizado, siguiendo “la ruta del dinero”. Esto incluye la idea de fortalecer la Unidad de Análisis Financiero (UAF). Finalmente, en materia social, destacó la necesidad de acelerar la oferta de vivienda social y la entrega de créditos preferenciales para que jóvenes accedan al mercado inmobiliario.
“Yo no hago política desde lo aspiracional, sino desde lo pragmático”, dijo Jara en su presentación, recordando su rol clave en la aprobación de la reforma de pensiones en Chile. En esa línea, en materia previsional, aseguró que va a priorizar la implementación de la reforma.
El trasfondo de las tarifas
Pero Chile no fue el único foco del evento de Moneda Patria. El mundo, con sus vericuetos, y los desafíos y oportunidades que estos traen para América Latina, también estuvieron presentes.
En la visión de Richard Baldwin, profesor de economía internacional de IMD Business School, el momento en que estamos viviendo es un paso de una era en la que EE.UU. lideraba el comercio exterior a un período nuevo, con un panorama económico global más variado. En ese sentido, el académico destacó que “las políticas de Donald Trump son económicamente incoherentes, pero emocionalmente coherentes”.
La clave, explicó, es la “doctrina del agravio”, una visión que se ha expandido entre los estadounidenses de que los otros países y las elites internacionales se aprovecharon del país, afectando su posición global.
Eso sí, por el otro lado, Wall Street no se ha visto impactado de forma relevante por las tarifas de la Casa Blanca. Esto se debe, según explicó el profesor, a que los mercados ven a Trump como lo suficientemente pragmático para sacudir el bote con sus anuncios pero sin permitir que tengan un impacto limitado en la economía.
“No sabemos a dónde va”, indicó Baldwin, señalando que hay algunos que proponen que la próxima etapa –más que una guerra fría– es un mundo “G-0”, sin un polo claro que protagonice el comercio global. Y este cambio, aseguró, traerá consigo problema y oportunidades, las que podrían ser interesantes para América Latina. En ese sentido, para navegar la dinámica actual, el economista destacó la importancia de mantener una buena relación con EE.UU. y China, sin tensionar lazos comerciales.
El seminario también contó con las clásicas presentaciones de los economistas Sebastián Edwards y José Luis Daza. El primero entregó su propia visión sobre la situación en EE.UU., advirtiendo sobre la posibilidad –especulativa, de momento– de que Trump esté tratando de mellar la independencia de la Reserva Federal.
Daza, por su parte, hizo gala de su rol como viceministro de Economía de Argentina y delineó los avances que ha tenido el gobierno del presidente Javier Milei en el país. El economista celebró que consiguieron el equilibrio fiscal en el primer mes de gobierno y dijo que lograron realizar un ajuste fiscal de 20.000 millones de dólares. “Los resultados son extraordinarios y van a pasar a los libros”, vaticinó.
La renta variable ha repuntado con fuerza en lo que va de año, apoyada por unas condiciones financieras ampliamente acomodaticias. Para los inversores, el gran reto es diversificar su exposición sin olvidarse de los activos norteamericanos, pero buscando oportunidades en Europa y en mercados emergentes.
“La temporada de resultados del segundo trimestre está dejando sorpresas razonablemente positivas frente a las expectativas de los analistas, tras los importantes recortes previos a su inicio. Los indicadores de confianza, como el Sentix, el IFO y los PMIs, siguen mostrando resistencia, y se espera que las políticas de China continúen apoyando la economía. De forma similar, la UE se está beneficiando del plan de defensa y del bazuca aleman. La prórroga de los recortes fiscales en EE.UU. debería seguir reforzando la confianza empresarial y, por último, las valoraciones fuera de EE.UU. respaldan unas rentabilidades razonables a futuro”, señala Michele Morganti, estratega senior de renta variable en Generali AM (parte de Generali Investments), haciendo balance.
Europa mantiene su atractivo
En opinión de Raphaël Thuin, jefe de Estrategias de Mercados de Capitales de Tikehau Capital y Nina Majstorovic, especialista en Inversiones, estrategias de Mercados de Capitales de Tikehau Capital, aunque las elevadas valoraciones, sobre todo en la renta variable estadounidense, dejan poco margen de error, el aumento de la dispersión abre oportunidades de inversión en segmentos específicos.
Según su visión, Europa presenta una oportunidad clara. “El descuento histórico frente a EE.UU., la infraexposición de los inversores y el nuevo impulso a conceptos como soberanía, autonomía y resiliencia sustentan sectores estratégicos como defensa, tecnología, infraestructuras, energía y salud”, destacan. Dentro de este contexto, los expertos de Tikehau Capital muestran preferencia por la exposición a bancos periféricos (España, Portugal, Grecia), ya que han reforzado significativamente sus balances.
Una visión que también comparten desde BlackRock. “A pesar de los recortes de tipos del BCE, los bancos europeos han mantenido una sólida rentabilidad. Con los tipos estabilizándose en torno al 2 %, seguimos apostando por los bancos capaces de retribuir a sus accionistas con dividendos y recompras de acciones. Estas entidades siguen bien posicionadas para obtener buenos resultados en un entorno de tipos bajos”, argumenta la gestora en su informe de perspectivas para el tercer trimestre del año.
Además del sector financiero, BlackRock cree que la calidad es clave para el rendimiento de Europa en la segunda mitad del año y posteriormente. “Vemos oportunidades para que los gestores activos encuentren empresas de calidad en sectores de alta calidad. Por ejemplo, los fabricantes de semiconductores europeos y sus proveedores están preparados para crecer, beneficiándose de la inversión global en inteligencia artificial y del aumento de las inversiones. También el sector del lujo está bien posicionado para ofrecer un crecimiento de los beneficios superior al del mercado. Nos decantamos por marcas selectas de alta gama con un fuerte poder de fijación de precios que ayude a compensar el impacto de los aranceles”, afirma la gestora.
También mercados emergentes
Según la visión de algunas gestoras, los mercados emergentes ofrecen algunas de las mejores oportunidades. “Esperamos que estas economías crezcan 4% este año y el próximo, en comparación con alrededor de 1,2% del mundo desarrollado, y esperamos se mantenga el próximo año hasta máximo de dos décadas, con mejora de la dinámica de producción industrial, sobre todo en China, relajación de los bancos centrales y divisas baratas. Esta ventaja ha impulsado la apreciación de estas monedas, que siguen infravaloradas más de 10%. También somos optimistas sobre acciones chinas. El Banco Popular de China ha adoptado una postura acomodaticia por primera vez desde la gran crisis financiera mundial, con hincapié en una aplicación más eficiente y de impacto de las políticas de estímulo. Pekín está dispuesto a apoyar la economía con mayor flexibilización y planea eliminar gradualmente a los jugadores más débiles para abordar el exceso de capacidad en las industrias, que genera deflación”, sostiene Luca Paolini, estratega jefe de Pictet AM.
Matt Williams, Senior Investment Director de Aberdeen Investments, pone el foco en las oportunidades de Asia. “Dentro de China, seguimos dando prioridad al consumo interno y a los sectores de servicios, que cuentan con flujos de caja saneados y mejores perspectivas de crecimiento y rentabilidad que los sectores financiero, inmobiliario, exportador y de infraestructuras. En general, seguimos prefiriendo los países con balances sólidos y flujos de caja robustos, cuyos valores cumplen nuestros criterios bottom-up y reflejan un enfoque centrado en la solidez del balance, el flujo de caja y la rentabilidad para los accionistas”, apunta Williams.
EE.UU.: oportunidades selectivas
Ahora bien, los inversores no quieren quedarse fuera del buen momento de mercado que viven. En este sentido, los expertos de Tikehau Capital consideran que el tener exposición al sector tecnológico sigue siendo crucial. “A pesar de la corrección en las valoraciones de los llamados 7 Magníficos, el crecimiento de beneficios continúa especialmente en áreas como inteligencia artificial, publicidad online y servicios en la nube”, reconocen.
Por ello apuesta por una selección rigurosa de valores. “Además, el entorno actual podría favorecer a los valores defensivos, destacando el potencial del sector sanitario, en particular segmentos como tecnología médica y veterinaria. Aunque persisten las incertidumbres, seguir invertidos sigue siendo esencial. El crecimiento sigue siendo positivo, el ciclo de desinflación es más visible y la reasignación de flujos favorece a Europa. Sin embargo, es clave mantener liquidez y priorizar la selección de activos mediante análisis fundamental”, concluyen los expertos de la gestora.
Recientemente, tuve la suerte de compartir cena y conversación con dos destacados expertos en defensa de la UE y en el panorama general de la seguridad en Europa, en un evento organizado por Janus Henderson para sus clientes con el fin de debatir este tema tan importante para los mercados actuales.
La cumbre de la OTAN fue importante, no solo por las cuestiones estratégicas relacionadas con la defensa, sino también por los reajustes geopolíticos, los riesgos para los activos europeos y la alteración de los mercados en todos los sectores. Todo ello podría generar oportunidades para los inversores ágiles, lo que se ajusta al enfoque activo de Janus Henderson.
En los días anteriores al evento, se prestó gran atención a la cumbre de la OTAN celebrada los días 24 y 25 de junio, en un contexto marcado por los cambios en la doctrina de defensa de EE. UU. y la creciente incertidumbre sobre el compromiso de este país con la Alianza y con Europa. Los recientes discursos del secretario de Defensa estadounidense, Hegseth, y del presidente Trump reiteraron la urgencia de que Europa vuelva a enfocarse en el gasto en defensa, lo que lo convierte en un tema clave para los inversores de todo el espectro, desde la renta variable hasta la renta fija.
Perspectivas de expertos
Los principales destacados de la cena fueron el general Sir Nicholas Carter, consumado experto en estrategia con décadas de experiencia militar, que ha sido asesor militar principal del primer ministro del Reino Unido y jefe del Estado Mayor, máximo responsable del Ejército británico, y el general Sir John Carter, exjefe de la Inteligencia Militar y actual director de Inteligencia de la Defensa. El general Carter estuvo acompañado por la baronesa Catherine Ashton, distinguida diplomática británica y candidata al Premio Nobel de la Paz, quien, entre otros cargos destacados, fue la primera Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, de 2009 a 2014.
Fue una oportunidad de las que tanto nos gustan, para poner a prueba nuestras hipótesis con la opinión directa de personas que han participado en la toma de decisiones de alto nivel en ámbitos que tienen enormes repercusiones para todos nosotros. No solo en términos de perspectivas y retos de mercado, sino también por lo que respecta a los cambios en la dinámica geopolítica que subyace a nuestras vidas.
Tras el evento, resultó útil reflexionar sobre este cambio histórico en la estrategia hacia las necesidades de seguridad de Europa, dado que tiene consecuencias potencialmente importantes para los inversores, ya que los países (y las regiones) buscan dar prioridad a sus propios intereses.
La defensa es ahora una prioridad en Europa
La positiva cumbre de la OTAN parece haber resuelto buena parte de las tensiones a largo plazo entre EE. UU. y otros países de la OTAN que han quedado al descubierto en las últimas semanas. Tras el compromiso de los miembros europeos de la OTAN de destinar el 5% del PIB anual a defensa, repartido entre un 3,5% para «defensa básica» y un 1,5% para «seguridad ampliada», EE. UU. parece sentirse más cómodo dentro del marco actual de la OTAN. Esto acelera la tendencia al incremento del gasto en defensa de los miembros de la OTAN que hemos observado durante la última década (gráfico 1):
La cumbre adoptó nuevas vías para lo que se exigirá a Europa en materia de seguridad y defensa, así como su necesidad de alcanzar la autonomía estratégica. También aportó cierta claridad sobre lo que EE. UU. está dispuesto a comprometer, en consonancia con sus intereses creados, en un momento en que dicho país está apuntando a un cambio de enfoque de Europa hacia la región indopacífica.
Lo que quedó claro es que Europa sigue dependiendo en gran medida de la inteligencia, la tecnología de reconocimiento y las capacidades de defensa de EE. UU., algo que llevará años desarrollar de forma independiente. El aumento del gasto debe ir de la mano de una mayor cohesión, superando los problemas de interoperabilidad entre las capacidades militares de los miembros de la OTAN.
También se reconoce que los Estados miembros de Europa deben mejorar sus procesos de contratación pública para garantizar un uso más óptimo del dinero. La complejidad de las cadenas de suministro europeas en materia de defensa hace que la reconstrucción de la capacidad probablemente será lenta y difícil, y que deba centrarse en avances significativos a gran escala, en lugar de en pequeños volúmenes de equipos costosos.
Consecuencias para los inversores
La necesidad imperiosa de los Estados de «comprar europeo» en seguridad y defensa ha cobrado un gran impulso, gracias a una confluencia de presiones geopolíticas, la atención prestada a la resiliencia de las cadenas de suministro y los cambios políticos internos en Europa. La presión para los inversores consiste en identificar aquellas empresas que están mejor posicionadas para satisfacer esas necesidades actuales y futuras, no solo en el mercado de la seguridad, sino en todos los sectores e industrias, como el transporte, la energía y los suministros públicos, la tecnología, las comunicaciones, la vigilancia, etc.
También se reconoce que las infraestructuras físicas y digitales críticas requieren protección frente a amenazas «híbridas», que incluyen los sistemas cibernéticos y de comunicaciones, las redes energéticas, las redes de transporte y los cables y tuberías submarinos, lo que está generando una serie de oportunidades para los inversores en todas las clases de activos.
Los retos de seguridad que afronta Europa han obligado a cambiar radicalmente la actitud hacia las capacidades de defensa, pero también tienen repercusiones en la economía en general. El aumento del gasto en defensa suscita un debate sobre las normas fiscales (a nivel nacional y supranacional). Esperamos importantes concesiones políticas y fiscales, a medida que cobren relevancia los debates sobre «bienestar frente a guerra», pero también presiones positivas para que la UE lleve a cabo reformas que impulsen el crecimiento.
Hemos visto cómo la UE ha respondido a esta presión, como demuestran las reformas bancarias del Banco Central Europeo (BCE), las actualizaciones normativas sobre las titulizaciones en la UE y la relajación de las normas sobre la deuda por parte de Alemania, entre otras medidas, con una gran asignación adicional prevista para el gasto en defensa (gráfico 2). Cambios como este pueden contribuir a mejorar la competitividad, impulsando el crecimiento y atrayendo inversiones.
La desglobalización refleja las tensiones globales
En el pasado, la influencia de la globalización y el desarrollo de cadenas de suministro muy integradas facilitaron el crecimiento del comercio con países de menor coste, lo que dio lugar a importaciones más baratas. Estamos asistiendo al fin de la globalización como factor limitador de la inflación, a medida que volvemos a un mundo más multipolar.
Aunque la globalización dista mucho de ser el único factor determinante de la evolución de la inflación, es probable que las renovadas tensiones geopolíticas, desencadenadas por el proteccionismo comercial impulsado por EE. UU. (incluidos los aranceles), alteren el comercio y el suministro mundiales, con el consiguiente impacto en los precios. Las empresas y los gobiernos están reaccionando ante este cambio para intentar mitigar los riesgos, lo que se refleja en la tendencia hacia la relocalización, la internalización o el acercamiento, con un impacto potencial en las cadenas de suministro que varía entre países. Esto se aplica no solo al comercio de bienes físicos, ya que las diferentes jurisdicciones dan prioridad a sus propias necesidades económicas y políticas, sino también a los servicios.
Este entorno en rápida evolución aumenta el riesgo de shocksimprevistos y cambios repentinos, tanto en el comercio como en las divergencias normativas. Aunque esperamos que persista una mayor volatilidad, las reformas que se están llevando a cabo en Europa podrían ser positivas a largo plazo tanto para las perspectivas de crecimiento europeas como para los mercados bursátiles.
Miedo a perderse algo (FOMO)
El inicio de 2025 ha traído consigo un cierto reajuste en los mercados financieros, pues la incertidumbre en EE. UU. ha abierto la puerta a un período de relativa fortaleza para la renta variable europea sumamente esperado. El aumento de la asignación de capital a Europa por parte de los inversores llega en un momento en el que la UE está asumiendo importantes compromisos de gasto en respuesta a la evolución de los riesgos mundiales. Pero lo que también queda claro es que Europa sigue ofreciendo una mayor diversificación en sus mercados que EE. UU. y sigue presentando unos precios muy atractivos en comparación con el pasado (gráfico 3).
El ciclo más reciente de rentabilidad superior del mercado bursátil estadounidense se originó en el período posterior a la crisis financiera. La duración de este dominio del mercado ha generado una reticencia natural entre los inversores, que temen que un cambio estratégico significativo que les aleje del mayor mercado del mundo pueda dejarles en una situación vulnerable y les impida aprovechar las oportunidades si EE. UU. reafirma su liderazgo en el mercado.
Aunque esta vacilación parece comprensible, la posibilidad de ampliar y diversificar el foco del mercado nos parece positiva. Sin embargo, la naturaleza de la estructura actual del mercado sugiere que es más probable que las asignaciones cambien de forma lenta, en lugar de vivir una transformación radical.
Bajo nuestro punto de vista, el auge de la inversión pasiva ha hecho que las tendencias de inversión tradicionales se mantengan más «estables». Esto se refleja en la enorme importancia que se da a la inversión en «clústeres» de innovación muy específicos en la economía estadounidense, donde gigantes tecnológicos de rápido crecimiento como Alphabet, Microsoft y NVIDIA han acaparado gran parte de la atención de los inversores.
Estas ventajas pueden ser difíciles de romper e inevitablemente generan un riesgo de «sobrevaloración» (burbujas de activos). Cuando un pequeño número de empresas domina un mercado hasta tal punto, la rentabilidad general del mercado puede llegar a depender en gran medida de la suerte de unas pocas acciones. Nos animaría ver una mayor expansión del mercado, lo que abriría la puerta a un nuevo descubrimiento de precios, una mejor dispersión de los mismos y mayores oportunidades para que los inversores activos se diferencien del resto.
Artículo escrito por Robert Schramm-Fuchs, gestor de Carteras en Janus Henderson Investors.
Ninety One ha incorporado a Virginia Gabilondo como Sales Associate, con sede en Miami, según confirmó la gestora a Funds Society. Gabilondo reportará a Mayra Cruz, directora de ventas de fondos mutuos Américas, agregó la firma.
Desde su puesto, la nueva integrante de Ninety One prestará apoyo al equipo de clientes de fondos de inversión de América, y será responsable de promocionar fondos offshore y SMA entre los asesores financieros offshore de Miami.
“Ninety One sigue ampliando su negocio offshore en Miami, y el nombramiento de Virginia refleja nuestro compromiso de seguir reforzando nuestra presencia y profundizando nuestras relaciones en este importante mercado”, señaló Richard Garland, Managing Director & Head of Global Advisor de la gestora.
Antes de incorporarse a Ninety One, Gabilondo fue Business Manager de AMCS Group entre 2018 y 2025; y previamente, fue International Relationship Manager de SupraInvest, después de ser durante dos años Sales Relationship Manager de S&S Advisors. A nivel académico, es Licenciada en Administración de Empresas por Tecnológico de Monterrey, y cuenta con las licencias FINRA Series 63 y 7.
HSBC México anunció que acaba de ampliar el abanico de divisas latinoamericanas que pone a disposición de las empresas interesadas en acceder a operaciones de compra-venta y a transferencias internacionales, a tipos de cambio competitivos y en tiempo real, según informaron a través de un comunicado.
La institución estaba considerada al cierre de 2024 como el quinto banco más grande del país, con un total de 936.410 millones de pesos en activos, equivalente al 6,16% del sistema y a 46.820.5 millones de dólares. La compañía presentó sus nuevos Non-Deliverable Forward (NDFs) en soles peruanos (PEN), pesos chilenos (CLP), pesos argentinos (ARS) y pesos colombianos (COP), los cuales podrán ser comprados desde pesos mexicanos y dólares estadounidenses.
Estas monedas se suman a la disponibilidad que ya ofrecían en reales brasileños (BRL) en la región, y se integran a la canasta de 124 monedas del mundo que pueden operarse desde México.
“En HSBC queremos ofrecer a nuestros clientes empresariales con necesidades internacionales acceso a diferentes monedas del mundo de manera más ágil, competitiva y transparente. Con ello podremos atender la creciente demanda de diferentes empresas que operan en Latinoamérica y necesitan monedas de la región para usos diversos”, dijo Luis Alvarado, director general adjunto de Mercados Globales de HSBC México.
De acuerdo con la institución, algunos de los usos que las empresas pueden dar a los NDFs en monedas de Latinoamérica son:
Pagar desde México pasivos contratados en otras monedas de la región, si la empresa tiene negocios allá.
Liquidar a proveedores locales en sus monedas locales para así acceder a mejores precios, respecto a los costos que tendrían si lo hicieran en dólares o pesos mexicanos.
En todos los casos, al utilizar NDFs, las empresas podrán tener un manejo más eficiente de riesgo, según señaló la firma. Estas operaciones pueden ser realizadas a través de la plataforma electrónica de HSBC Evolve o mediante el soporte de ejecutivos especializados.
Jorge Riquelme, director de Ventas Corporativas de Mercados Globales de HSBC México, comentó en la nota de prensa: “Al proveer a las empresas nuevas divisas con las que pueden operar también se genera una mejor dinámica de liquidez, la cual se traslada a precios más competitivos y un mercado más eficiente”.
«Con los diferentes NDFs en Latinoamérica, Europa y Asia, HSBC avanza en su estrategia de ofrecer a sus clientes en México los beneficios de su alcance internacional», concluyó el banco.