El inicio del año sigue siendo positivo para aquellas compañías relacionadas con los semiconductores, software industrial, servicios informáticos y la automatización, tras un buen desempeño operativo y una demanda bien orientada. Las publicaciones del cuarto trimestre de 2022 arrojaron buenos resultados, mejores de lo esperado para algunas empresas, y llevaron a varias de ellas a revisar al alza sus objetivos, que se mantienen cautelosamente optimistas para el inicio del año.
En este sentido, la reapertura de la economía china post confinamiento por el Covid podría permitir un retorno a mejor fortuna para la actividad de empresas vinculadas al mercado chino, como Rational, Besi, QT Group o Carl Zeiss Meditec, penalizadas el año pasado. Este rebote ya es visible en las cifras de Hexagon y Rational, que recientemente informaron sobre un efecto de recuperación. Carl Zeiss Meditec, que genera el 25% de sus ventas en China, también espera una recuperación en el número de procedimientos de cirugía ocular refractiva y, en consecuencia, de la venta de sus consumibles.
De manera adicional, la gran satisfacción de este inicio de año viene de la mano de QT Group (software para el diseño de interfaces digitales de usuario), que finalizó el año con una fuerte recuperación de las ventas en el cuarto trimestre (+31,5% de crecimiento orgánico) y un crecimiento del EBIT del +107%. El equipo directivo mostró un renovado optimismo con un crecimiento esperado en 2023 de +20% a +30%. De hecho, la compañía podría beneficiarse de la mejora de la situación en Asia, que fue la principal fuente de la reducción de sus previsiones en el segundo trimestre de 2022.
En esta línea, destacamos a modo de principales conclusiones como la normalización de las tensiones en las cadenas de suministro habrían generado una escasez de componentes, de personal y de aumentos salariales. Si bien aún pueden producirse algunas tensiones particulares, estamos viendo un regreso a la normalidad. Por otro lado, observamos también una normalización de la actividad de las empresas de tecnología médica y comercio electrónico, cuya actividad se había beneficiado como consecuencia de la pandemia global del COVID.
De cualquier modo, la más que significativa normalización de los ratios de valoración debería permitir volver a los mecanismos estándar de formación de precios. Con este fin, los inversores podrán abstraerse de los elementos macroeconómicos, que son por naturaleza impredecibles, para centrarse en los modelos económicos y la trayectoria de crecimiento a largo plazo de las empresas.
Desde principios de 2023, asistimos a un aumento de la discriminación entre sectores y valores tras el retorno de los fundamentales y los resultados operativos actuales como factores determinantes del desempeño bursátil. Si bien la volatilidad y el nivel de los tipos de interés continúan jugando su papel, son significativamente menos decisivos que en 2022.
Tribuna de Tribuna de Iván Díez y Francisco Rodríguez d’Achille, socios y directores de Lonvia Capital
Mientras que, en el último semestre de 2022, el precio de la energía y la inflación situaron la confianza de los inversores españoles en las bolsas en valores negativos, el inicio de 2023 les ha devuelto la confianza, animados por la percepción de una mejora en la situación económica y financiera general.
Después de los máximos de 2021, el índice de confianza del inversor español que elabora la gestora internacional JP Morgan Asset Management inició un descenso continuado que tocó mínimos en verano de 2022, y desde entonces ha iniciado una tendencia alcista que ahora parece confirmarse. Así, la confianza del inversor español en la marcha de los mercados durante los próximos seis meses lleva al Índice de Confianza a un + 1,91, un nivel similar al del inicio de 2022, y tres puntos más que al cierre del pasado año, en el que el índice se situaba en – 0,99.
Según indican desde la gestora, la subida de tres puntos del Índice se debe al aumento de los ahorradores e inversores que se declaran optimistas ante la evolución de las bolsas durante el próximo semestre. Así, un 41,5 % declara que las bolsas experimentarán subidas en los próximos seis meses, frente al 27 % que piensa que bajarán. Un 31,5 % de los encuestados cree que seguirán a los mismos niveles.
El mercado europeo recupera la confianza
El 31,7 % de los encuestados confían en la buena marcha de los mercados del viejo continente y desciende la preferencia por los mercados americano y español (26,5 % y 21, 6 %, respectivamente), que se sitúan como segunda y tercera opción. Asimismo, se produce una leve recuperación de la confianza en el mercado asiático entre los inversores particulares, después de su drástica pérdida de confianza en el último año. Los mercados emergentes, en cambio, no parecen recuperar esa confianza.
Mayor interés por la renta fija
En el primer trimestre de 2023, se produce una clara la subida de la intención de compra de productos de renta fija. Según muestran los datos, durante el último trimestre, un 11,7 % declaraba que invertirá en letras, bonos y productos similares en los próximos meses, frente al 5,7 % de los inversores que afirmaba lo mismo a finales del pasado año.
En cuanto a las diferencias entre optimistas y pesimistas a la hora de adquirir productos financieros, las mayores diferencias se producen en los productos de renta variable. Así, mientras un 21,3 % de los optimistas tienen la intención de invertir en productos de renta variable, solo un 6,5 % declara lo mismo.
Otro dato relevante fue que los fondos de inversión, tras depósitos y libretas de ahorro (sobre todo entre los pesimistas), son los productos con mayor intención de compra: el 16 % declara tener la intención de invertir en ellos (prácticamente igual que a finales de 2022). Esta cifra aumenta hasta el 23 % entre los optimistas.
Foto cedidaPedro Tamarit, nuevo banquero miembro del equipo de Mirabaud en Valencia.
Banco Mirabaud anuncia un paso más en su estrategia de expansión en España con el fichaje de Pedro Tamarit Córdoba, que se incorpora al equipo de banqueros de la entidad en Valencia liderado por Luis Capilla. Según indican desde la entidad, desde enero de este año, ha sumado seis banqueros de primer nivel a su equipo de gestión patrimonial en España, que alcanza una plantilla de 35 profesionales.
Con este nuevo nombramiento, la entidad sigue recorriendo la hoja de ruta de un ambicioso plan de fichajes diseñado con el objetivo de consolidar y reforzar su equipo, altamente especializado en gestión de grandes patrimonios y liderado desde el pasado mes de abril por Pedro Dañobeitia, director general el Banco Mirabaud en España, para quien “la llegada de Pedro Tamarit es una muestra más del buen momento por el que pasa el banco en España, con una importante apuesta por el talento y dando continuidad a la ya anunciada estrategia de expansión en nuestro país, que es estratégico para el Grupo Mirabaud y en que planeamos seguir creciendo en los próximos meses.”
Por su parte, Luis Capilla, máximo responsable de la oficina del Banco Mirabaud en Valencia, ha señalado: “La inclusión en nuestro equipo de un profesional con la trayectoria y el prestigio de Pedro Tamarit en el sector de la gestión patrimonial es un gran valor añadido para dar continuidad al servicio exclusivo y totalmente personalizado que reciben nuestros clientes de banca privada en Valencia, donde ha desarrollado gran parte de su carrera profesional y es altamente reconocido. Nos sentimos muy honrados de contar con él en nuestras filas”.
Con casi tres décadas de experiencia en el sector financiero, Tamarit se incorpora a Mirabaud desde las filas de Citi Banca Privada UHNW, entidad en la que ha ejercido como banquero privado durante los últimos 17 años ubicado en Madrid. Previamente, formó parte de los equipos de banca privada y gestión patrimonial de Banco Urquijo HNW y Safei Inversiones en Valencia. Otras entidades en las que el banquero ha desarrollado su carrera profesional han sido DextroMédica, Seguros Vitalicio o Banco Sabadell.
Pedro Tamarit, por su parte, asegura que es un honor formar parte del Banco Mirabaud. “Como banquero, comparto absolutamente los valores de independencia y excelencia que defiende y me siento muy cómodo con el enfoque integral, de convicción, personalizado y a medida del patrimonio y las necesidades de cada uno de los clientes que siempre ha abanderado el banco”.
Semana relevante en materia de política monetaria con la reunión de hoy de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) y mañana del Banco Central Europeo (BCE). Según los análisis previos, la institución estadounidense podría estar cerca de acabar con el ciclo de subidas de tipos, mientras a la europea aún le quedaría recorrido.
En opinión de Franck Dixmier, director de inversiones global de Renta Fija de Allianz Global Investors, tras más de un año de subidas de los tipos de interés, el actual ciclo de subidas de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) está llegando a su fin. El experto, al igual que el consenso de mercado, prevé una subida de tipos de 25 puntos básicos, pero matiza que podría ir acompañada de una pausa en el endurecimiento que debería servir de punto de inflexión.
“Tras 475 puntos básicos (pb) de subidas en este ciclo que comenzó en marzo de 2022, esperamos una subida adicional de 25 pb en la reunión del 3 de mayo. Los mercados anticipan esta subida. Pero lo que venga después es menos seguro.Creemos que la pausa debería ser el pivote de la Fed, aunque no se anuncie como tal, con un tipo terminal del 5,25%. El reconocimiento por parte de los inversores del final del ciclo de endurecimiento monetario es alcista y debería favorecer las estrategias de inclinación de la curva de tipos estadounidense”, señala Dixmier.
Una visión que coincide con la de Tiffany Wilding, economista de PIMCO, aunque recuerda que esta pausa solo será posible si los datos lo permiten: “Creemos que lo más probable es que la Fed pueda hacer esto cambiando la orientación futura de algún endurecimiento adicional de la política a algo así como endurecimiento adicional de la política, lo que les permitiría señalar una pausa, manteniendo un sesgo hacia el endurecimiento. Creemos que el Presidente Powell va a tener un difícil acto de equilibrio durante la conferencia de prensa, pero en última instancia esperamos que esto suene como una pausa de halcones”.
Según matiza Dixmier, la cuestión principal para los mercados es si se trata de una pausa temporal o del verdadero giro de la política monetaria estadounidense. Para Wilding sería algo temporal ya que el efecto total de las repercusiones de las tensiones en el sector bancario es incierto, mientras que la inflación y los salarios parecen obstinados desde la reunión de marzo del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC). “Esto ha dado lugar a un comité más dividido sobre el próximo movimiento de la Fed de lo que lo ha estado en varios trimestres. Por tanto, creemos que el compromiso más probable es establecer una pausa que dé tiempo a evaluar el impacto, pero que esté condicionada a los nuevos datos y mantenga una tendencia al alza”, matiza la experta de PIMCO.
Una pausa no tan clara
Lo cierto es que, según los expertos, los últimos datos económicos estadounidenses no facilitan la tarea de la Fed: la actividad se está desacelerando sustancialmente, como muestra la cifra de crecimiento del PIB del primer trimestre, que se situó por debajo de las expectativas en una tasa anual del 1,1% intertrimestral, pero la inflación subyacente sorprendió al seguir subiendo.
“Hay tres factores importantes que suponen un reto para la Fed este mes. En primer lugar, me parece que la actividad económica se está ralentizando. Hay signos de debilitamiento en los datos duros. En segundo lugar, los temas relacionados con la inflación parecen más complicados. Lo vimos en el Índice de Coste del Empleo del viernes de la semana pasada, en la revisión de la inflación subyacente del PCE para el primer trimestre de este año, y luego en las expectativas de inflación de la Universidad de Michigan. Y, en tercer lugar, First Republic ha sido declarado en suspensión de pagos. Estas tres condiciones contrapuestas exigirán un delicado y tenso equilibrio por parte de la Reserva Federal. Si sólo se tratara del tambaleo de la First Republic y de la desaceleración de la actividad económica, la Reserva Federal aplicaría recortes. Pero, con la inflación claramente declarada como prioridad número uno, la Reserva Federal no puede ni siquiera insinuar que la flexibilización está cerca. Por lo tanto, la Fed subirá el tipo de interés oficial hoy miércoles”, añade Erik Weisman, economista jefe y gestor de carteras de MFS Investment Management.
Para Weisman estos argumentos son de peso y reconoce que le cuesta ver cómo los mercados podrían pensar que la Fed ha terminado definitivamente con su ciclo de subidas. “La falta de señales claras es el problema que tengo con Powell. Curiosamente, Greenspan, Bernanke y Yellen eran todos economistas, pero no se equivocaban ni de lejos tanto como Powell, un abogado. En general, cuando a sus predecesores se les hacía una pregunta, a diferencia de Powell, te daban la respuesta que querían que tuvieras. El mensaje que quiero transmitir a Powell es que ahora no es el momento de andarse con rodeos. La Fed quiere basarse en los datos y anticiparse al mismo tiempo. No estamos seguros de que pueda hacerlo, sobre todo teniendo en cuenta la velocidad a la que ha evolucionado este ciclo económico. En cualquier caso, habría que suspender la incredulidad para creer que este ciclo no va a dar lugar a más turbulencias”, comenta.
Según Blerina Uruci, economista jefe para EE.UU. de T. Rowe Price, la idea de que ésta es la última subida y que pronto seguirán los recortes es demasiado optimista. «Justo después del fracaso del SVB en marzo, siete participantes en el FOMC esperaban que se justificara una subida más tras la reunión de mayo. La nueva información que hemos recibido desde marzo sugiere que la inflación sigue siendo persistente en la medida subyacente, aunque los efectos basados en la energía muestren un avance significativo en la inflación general; el empleo se ha mantenido fuerte y el estrés bancario y la volatilidad del mercado han disminuido frente a su elevado nivel de marzo. Además, se espera un mayor endurecimiento de las condiciones crediticias y el FOMC ya lo habrá debatido en la reunión de esta semana y Powell probablemente dará pistas sobre el resultado durante la conferencia de prensa», argumenta Uruci.
En opinión de Raphael Olszyna-Marzys, economista internacional en J. Safra Sarasin Sustainable AM, los avances en los datos macro (IPC y empleo) no han sido suficientes para invalidar la declaración del mes pasado de que «podría ser apropiado un endurecimiento adicional de la política monetaria con el fin de que ésta alcance una orientación lo suficientemente restrictiva como para devolver la inflación al 2% con el tiempo». Según el economista, a la vista de los datos disponibles, la Fed decidirá continuar con su estrategia actual. «Esto es, utilizar su liquidez, prestamista de último recurso, así como sus herramientas prudenciales, reguladoras y supervisoras para mitigar futuros problemas de estabilidad financiera, y el tipo de interés oficial y el endurecimiento cuantitativo para reducir la inflación. Coincidimos con las previsiones de los miembros de la Fed y de los inversores, que indican que la subida de la próxima semana será probablemente la última de este ciclo», explica.
Olszyna-Marzys matiza que, no obstante, sus perspectivas para 2024 son considerablemente diferentes: «La Fed ve sólo 80 pb de recortes, el mercado en torno a 175 pb, mientras que nosotros esperamos 325 pb. Las condiciones crediticias se endurecerán aún más y aumentarán los impagos, lo que refuerza nuestra opinión de que la economía estadounidense entrará en recesión en algún momento del segundo semestre. Aunque el personal de la Fed también prevé ahora una para 2023 -algo poco frecuente-, los funcionarios sólo proyectan un aumento de la tasa de desempleo de 1 punto porcentual, lo que no tendría precedentes. La historia demuestra que, si el desempleo sube 0,5 puntos, acaba subiendo 2 puntos o más, lo que obliga a la Fed a recortar los tipos de forma agresiva y por debajo del tipo neutral».
Aunque Luke Bartholomew, economista senior de abrdn, también coincide en que estamos en el punto máximo del ciclo de endurecimiento de los tipos, matiza que la Fed necesitará algún tiempo para evaluar el impacto de su rápido endurecimiento de los últimos 18 meses antes de decidir qué hacer a continuación. “Existe ciertamente el riesgo de que decida que es necesario un mayor ajuste a finales de este año, especialmente si el crecimiento del empleo sigue siendo extremadamente fuerte, pero creemos que lo más probable es que empiece a bajar los tipos a finales de año. Seguimos esperando que la economía se vuelque hacia una recesión este año a medida que las condiciones crediticias sigan deteriorándose y los sectores de la economía con tipos de interés experimenten más tensiones. Es difícil ver cómo la Fed evita una política de relajación en este entorno”, afirma Bartholomew.
La Comisión Europea publicará el próximo 24 de mayo su Estrategia de Inversión Minorista, que se enmarca en el plan de acción de la Unión del Mercado de Capitales de la Unión Europea. Sobre qué puede esperar la industria de fondos de esta Estrategia, la comisaria Mairead McGuinness, jefa de Servicios Financieros de la UE, ha dado algunas pistas en su conferencia en Eurofi.
En concreto, el pasado jueves, durante su intervención en este acto de alto nivel en Estocolmo, McGuinness indicó que la Comisión Europea no introducirá la prohibición de los incentivos en la próxima Estrategia de Inversión Minorista. Según recogen desde la agencia Reuters, esto significa que el Ejecutivo comunitario suavizará las restricciones de la Comisión a los productos financieros, ya que propondrá sólo una prohibición parcial de que los bancos ofrezcan incentivos en metálico a los asesores financieros que hayan vendido sus productos, “tras la feroz oposición del sector y de Estados clave de la UE como Alemania”, indican.
McGuinness tendría previsto incluir algunas restricciones en un proyecto legislativo para animar a más inversores minoristas a comprar y vender acciones. “Ya se ha aplazado al 24 de mayo, debido a las intensas presiones de los grupos de presión”, apuntan desde Reuters.
Aunque la comisaria declaró que la prohibición total de los incentivos no formará parte de la próxima Estrategia de Inversión Minorista, aclaró en su discurso que esto no significará dar “carta blanca” a la industria, ya que los agentes del sector financiero tendrán que replantearse algunos de sus modelos y prácticas empresariales para que los consumidores obtengan un trato más justo.
En concreto, se están estudiando otras medidas, como las obligaciones de transparencia, y el aumento de la transparencia por sí solo no es suficiente. Por ello, la Comisión está estudiando endurecer las condiciones en las que se permiten los incentivos y cómo garantizar una mejor relación calidad-precio en los productos de inversión. Además, McGuinness declaró que los asesores financieros suelen tener un interés financiero personal directo o en especie en vender estos productos inducidos a un cliente. En cuanto a los consumidores, explicó que a los inversores minoristas rara vez se les ofrecen los productos menos caros y no se dan cuenta de cuánto están pagando por los productos financieros.
Además, según comentan algunas organizaciones del sector, la Comisión Europea está estudiando normas más estrictas, como una «prohibición selectiva» de las transacciones exclusivamente de ejecución, medidas para garantizar la «relación calidad-precio» y el acceso a un asesoramiento «a precios razonables», así como una mayor transparencia de los costes. Aunque la prohibición no está sobre la mesa por ahora, el Comisario McGuinness dijo que una cláusula de revisión permitiría introducirla «en una fase posterior, si fuera necesario». En este sentido, desde la industria se considera que debería haber una prohibición específica de los incentivos en las operaciones de ejecución, porque no está bien que se paguen incentivos incluso cuando no hay ninguna relación de asesoramiento con un cliente. También deberían reforzarse las salvaguardias sobre cuándo pueden pagarse incentivos y cuándo no.
Desde la FECIF (European Federation of Financial Advisers), de la que EFPA España es uno de los cuatro mayores miembros, consideran que uno de los puntos principales de la próxima Estrategia de Inversión Minorista será que examinará las diferentes normas y prácticas de la UE, sobre productos de inversión para inversores minoristas, y los diferentes modelos de asesoramiento.
En los próximos meses, la Comisaria McGuinness quiere organizar una mesa redonda con todas las partes interesadas, incluidos el sector y las asociaciones de consumidores, en la que quiere entender las prácticas a los problemas mencionados y cómo abordarlos. La estrategia de inversión minorista tendrá una cláusula de revisión, que permitirá a la Comisión presentar una prohibición de los incentivos en caso necesario.
La recesión parece una posibilidad cada vez más cierta en los mercados desarrollados para los próximos doce meses a ojos de los analistas de Fidelity International. La firma presentó el pasado diciembre unas perspectivas de inversión para 2023 que giraban en torno a capear la denominada “policrisis”, “una confluencia de presiones que pensábamos que podría obligar a los bancos centrales a endurecer en exceso las condiciones monetarias y desencadenar recesiones profundas”. Según los expertos de la gestora, “esta policrisis ha entrado en una nueva fase”.
Los expertos de Fidelity insisten en que, a pesar de que las economías habían empezado el nuevo año emitiendo señales de resistencia, “el episodio de subidas de tipos más rápidas de la historia está empezando a pasar factura”. En esta actualización de perspectivas para el segundo trimestre, desde Fidelity han identificado tres temáticas que vigilarán atentamente, y que exponen a continuación.
Tres temáticas para el 2º trimestre
La primera temática se denomina “aterrizaje forzoso frente a aterrizaje suave”. Durante las últimas semanas, los inversores han seguido descontando fuertes recortes de los tipos de interés a finales de este año, pero hasta ahora la Reserva Federal no ha variado un ápice su postura, llevada por el convencimiento de que debe mantener los tipos altos durante más tiempo a la vista de la persistencia de la inflación y las tensiones de los mercados laborales. Desde la gestora observan que “mantener los tipos altos durante más tiempo intensificará la presión que sufren los sistemas financieros y ya están empezando a aparecer fisuras”. “No creemos que el hundimiento de Silicon Valley Bank, al que siguió el de Credit Suisse, sea un síntoma de riesgo sistémico en el sistema bancario, pero podría ser la antesala de nuevas turbulencias”, matizan.
Los analistas de Fidelity vaticinan que “aparecerán nuevas tensiones si no se relaja la política monetaria, lo que dará a la Fed razones para revisar su postura”. Por tanto, según la gestora, el desenlace más probable es una recesión cíclica durante los próximos doce meses en la que calculan que el paro aumente entre un 1% y un 3%, pero advierten que “podría producirse una recesión más grave si la Fed mantuviera su postura restrictiva a lo largo de 2023”.
La segunda temática se titula “riesgos y oportunidades para las empresas”. En este entorno de tipos más altos durante más tiempo, los equipos de inversión de Fidelity están centrados en utilizar sus recursos de análisis ascendente para identificar valores con perfiles resistentes. En concreto, están buscando sectores y regiones con ventajas estructurales y rasgos defensivos, junto con valoraciones atractivas, que ofrezcan la mejor relación riesgo-recompensa. A más largo plazo, en Fidelity consideran que “las temáticas de la sostenibilidad, los cambios demográficos y la relocalización/deslocalización cercana siguen ofreciendo buenas oportunidades para obtener rentabilidades superiores”.
La tercera temática gira en torno a la reapertura de China y los “vientos del Este” que provoca. “Si las autoridades occidentales están preparándose para un aterrizaje forzoso, lo que está ocurriendo en China podría suponer un verdadero bálsamo”, anticipan desde la firma. Para empezar, esperan que en 2023 su inflación se mantenga por debajo del objetivo oficial del 3%, lo que permitirá a las autoridades mantener una política relativamente expansiva.
“A diferencia del consenso, a nosotros el Congreso del Partido Comunista del pasado mes de octubre nos pareció un punto de inflexión positivo. Desde entonces, los líderes chinos han insistido en el crecimiento de calidad, redirigiendo la economía desde un modelo de inversión basado en las exportaciones hacia otro basado en el consumo y la industria nacional”, explican. Los expertos de la gestora añaden que “las autoridades podrían poner en marcha estímulos muy específicos para sostener la economía, dando más prioridad a la calidad que al ritmo de la recuperación”.
Otra tendencia clave para Fidelity es la importancia que concede China a la autosuficiencia en áreas como la ciencia y la tecnología, evidenciada en el compromiso para impulsar la fabricación de alto valor añadido. “Esto podría ayudar a las empresas chinas a competir en todo el mundo en tecnologías de última generación y acelerar el desarrollo del sector digital”, explican desde la gestora.
Asimismo, recuerdan que el gasto de consumo y los precios de la vivienda habían empezado a emitir señales de rebote ya en el último trimestre del año pasado, alimentadas por la demanda contenida después de tres años de restricciones por el COVID, por lo que concluyen que “la recuperación completa podría no estar lejos”.
Todo esto provoca que, siempre según la gestora, en el sureste asiático, los “vientos” de China aclaren las perspectivas económicas, aunque puntualizan que las economías más orientadas a las exportaciones, como Malasia, “podrían sufrir dificultades a causa de la desaceleración de la demanda en Occidente”. Los analistas de Fidelity explican que, debido a sus estrechos lazos con la segunda mayor economía del mundo, los países de la región han recibido un gran impulso en el comercio, la industria y el turismo durante los últimos meses.
El otro gigante asiático, la India, está emitiendo señales de desaceleración, aunque se perfila para encabezar el crecimiento del PIB de la región este año. “En los mercados financieros del país todavía estamos viendo presión vendedora por la inquietud de los inversores institucionales extranjeros ante las elevadas valoraciones. El aumento de los costes de financiación y los riesgos de recesión mundial podrían estar pesando sobre su consumo e industria, donde la correlación económica con EE.UU. -su socio comercial más importante- es mayor que la de la mayoría de los países del sureste asiático”, concluyen desde Fidelity.
Pensemos por un momento que la inflación es un fenómeno monetario. Es decir, que está meramente vinculada a la evolución de los tipos de interés, de modo que a medida que los bancos centrales sigan subiendo los tipos de interés, la inflación debería bajar matemáticamente. Pero esta tesis hace aguas, o así lo ve Richard Woolnough, gestor del M&G Optimal Income: “Los bancos centrales han comunicado que van a seguir destruyendo dinero, que van a provocar una recesión porque es la única manera de controlar a la inflación. Pero si dejan de imprimir dinero, no sería necesario provocar una recesión”.
Woolnough, extraordinariamente crítico con la política monetaria que han conducido los principales bancos centrales del mundo desarrollado, afirma que éstos “han comprado la narrativa de que la inflación ha subido por la falta de mano de obra, la subida de los precios de la energía y los efectos de la guerra”. Una vez más, señala los defectos de esta tesis: “Si crees esto, deberías creer que, si se aumenta la oferta de dinero, deberían caer los precios. Pero los bancos centrales siguen imprimiendo dinero, y la inflación sigue al alza. Los países con mayor inflación son los que han impreso más dinero, como Turquía o Argentina”, declara.
La visión del gestor de M&G Investments, que explicó en un evento con clientes de la gestora en Madrid, es mucho más optimista que el panorama que pintan muchos actores del mercado. “Creemos que la inflación será inferior a la actual a finales de año y no que tendremos recesión, pero el mercado no está centrado en las noticias positivas”. Según el cálculo del gestor, la tasa neutral de la inflación debería situarse en línea con la tasa del PIB real, es decir, entre el 1% y el 3% dependiendo de la región (EE. UU., Reino Unido y Europa).
Además, el experto considera que “es menos probable ahora que los bancos centrales empiecen a recortar los tipos de interés porque la economía está fuerte; hay pleno empleo y la inflación remitirá de forma natural dado que están cayendo los precios de las materias primas y se está reduciendo la oferta monetaria”. Por esta razón, más allá de soft landing o hard landing (aterrizaje suave o brusco), Woolnough prefiere utilizar el concepto de “perfect landing”, es decir, un aterrizaje perfecto de la economía… e inesperado por muchos, visto cómo fue 2022 y cómo ha empezado 2023.
¿Cómo está reflejando el gestor esta visión macro sobre la cartera del M&G Optimal Income? “El posicionamiento del fondo es lo más neutral que estado en mucho tiempo”, resume. Dicho llanamente, un tercio de la cartera está asignada actualmente a deuda soberana, otro tercio a deuda corporativa con grado de inversión y el tercio restante, a deuda high yield; en esta ocasión, el gestor ha reducido a cero su asignación a acciones por considerar que “ahora sí existen alternativas”, en referencia al famoso acrónimo TINA (“There is no alternative”).
Yendo más al detalle, el gestor indica que está comprando más activos europeos, tanto en deuda soberana – encuentra particularmente atractivos los bunds a cinco años- como en crédito, donde considera que “la combinación de duración y fuente de rentas a niveles actuales suponen un interesante punto de partida para la clase de activo por primera vez en años”. Prefiere activos europeos y británicos a los estadounidenses, que ahora ve más caros.
En cualquier caso, Woolnough destaca que tanto la deuda soberana como la corporativa “sí están ofreciendo compensación por asumir el riesgo”. De hecho, el experto considera que los activos de renta fija ofrecen tanta compensación por el riesgo asumido, con una prima de riesgo tan grande, que puede permitirse incluso tener algún impago, que es lo que le ha sucedido el pasado mes de marzo, pues el fondo era uno de los expuestos a los bonos AT1 de Credit Suisse, donde tenía una pequeña exposición desde hacía un par de años.
La cartera del fondo también está neutral en duración, que se sitúa en torno a los 6 años, en línea con el índice de referencia. “En 2007 fue la última vez que estuvimos largos en duración; volvimos a estarlo en septiembre por unos días, y ahora estamos neutrales”, zanja Woolnough. Cabe recordar que este fondo mixto, lanzado en 2007, ha generado un rendimiento anualizado del 6% en los últimos 15 ejercicios y en lo que va de año está rindiendo en torno al 3%.
Positivo con la periferia
Una de las apuestas del fondo que ha querido destacar el gestor ha sido la exposición a deuda de países mediterráneos, tanto de España como de Italia, pero también algunos títulos incluso de Grecia. “Estoy alcista con el sur de Europa, porque veo una mejora estructural de sus economías: ha mejorado la calidad de los gobiernos, hay más control tras la crisis, se ha reducido el endeudamiento de las familias, que tienen mucho de su patrimonio en depósitos, por lo que con la subida de los tipos de interés ganarán poder adquisitivo”, explica.
Aegon Asset Management (Aegon AM) ha anunciado la adquisición del negocio europeo de gestión de obligaciones garantizadas por préstamos (Collateralized Loan Obligations, CLO) de North Westerly, parte de NIBC Bank, por una suma no revelada.
Según ha explicado la entidad, como parte de la operación, Aegon AM incorporará al equipo de North Westerly ubicado en Reino Unido, así como la plataforma de CLO, que cuenta con tres CLO con activos gestionados por un valor cercano a los 1200 millones de euros.
La gestora indica que esta adquisición refuerza aún más sus capacidades de inversión alternativa de Aegon AM, que abarcan hipotecas holandesas, colocaciones privadas, préstamos directos, financiación apalancada (CLO), financiación estructurada y activos reales.
Desde Aegon AM destacan que ya cuenta con una exitosa gama de CLO en Estados Unidos compuesta por 12 CLO que gestionan 5400 millones de dólares en activos. Esta operación contribuye a acelerar la ambición de Aegon AM de ampliar su gama de CLO en Europa con el objetivo de convertirse en una gestora líder dentro del mercado europeo de CLO.
El equipo de North Westerly, que pasará a trabajar en la sede londinense de Aegon AM, es uno de los equipos de gestión de CLO europeas con más años en activo y aporta a Aegon AM una sólida trayectoria de 20 años gestionando este tipo de instrumentos.
En relación con la operación, el consejero delegado (CEO) de Aegon AM, Bas NieuweWeme, ha declarado: “La compra de North Westerly nos permitirá acelerar los planes de crecimiento de nuestro negocio de renta fija alternativa mediante la ampliación del negocio europeo de CLO tras el éxito obtenido en el mercado estadounidense. El equipo cuenta con una vasta experiencia, un excelente track record y una robusta plataforma de CLO. Además, son pioneros en aplicar los principios ESG al ámbito de las CLO, lo que encaja bien con la posición de liderazgo en inversión responsable de Aegon AM. Estoy deseando acoger en Aegon AM al equipo de North Westerly y trabajar con ellos en la expansión de nuestra robusta gama de inversiones alternativas, así como en otras propuestas para nuestra creciente base mundial de clientes”.
Según matizan desde la firma, está previsto que la operación se cierre en junio de 2023.
El entorno de inversión ha cambiado marcadamente a lo largo del año pasado, pero la necesidad de los inversores de encontrar un equilibrio óptimo para sus carteras no lo ha hecho. Creemos que los dividendos son un ingrediente clave en la gestión de esta dinámica, con independencia del contexto macro. Sin embargo, dada la fuerte subida de los tipos de interés, y el hecho de que ahora los fondos monetarios están ofreciendo rendimientos en torno al 4%, los inversores necesitan mirar más allá de las empresas de baja calidad que remuneran con altos rendimientos, y fijarse en las empresas con balances sólidos que pueden hacer crecer sus dividendos de forma sostenible.
Para nosotros, los flujos de caja son lo más importante. Los dividendos son lo que queda una vez que se satisfacen todos los requisitos de capital, y no se pueden incrementar sin hacer crecer los flujos de caja libres. Por tanto, creemos que la capacidad para identificar empresas que pueden asignar y reinvertir sus flujos efectivamente son fundamentales para que los inversores activos puedan generar retornos totales atractivos.
Las compañías de alta calidad, como las definimos en Ninety One, tienen ventajas competitivas duraderas que están derivadas de activos intangibles, como las marcas, propiedad intelectual, contenido único, redes o cadenas de suministro fuertes. Estas fortalezas proporcionan a las compañías de calidad barreras de entrada y poder de fijación de precio, que a su vez les permiten generar crecimiento estructural en el largo plazo y resiliencia, así como generar flujos de caja a niveles de rentabilidad sostenidamente elevados.
A menudo, estas empresas tienen modelos de negocio innovadores. En nuestra opinión, las empresas de calidad que se preparan para el futuro invirtiendo en I+D están mejor equipadas para impulsar la innovación de sus productos y, de hecho, crear su propia demanda. Esto no sólo contribuye a un crecimiento futuro autofinanciado, sino que también sirve para reforzar la posición competitiva de una empresa.
Pongamos a Microsoft por ejemplo. No solo ha transformado su modelo de negocio en la última década e innovado a lo largo de todo el arco tecnológico, también es uno de los pagadores de dividendos más consistentes del mundo, con su línea de productos financiando remuneraciones sanas y con frecuencia crecientes desde 2003. Se pueden encontrar más ejemplos en todo el mundo. Siemens Healthineers, un pionero innovador en salud – con sede en Alemania- se ha convertido en imagen para el diagnóstico médico y en radioterapia guiada por imágenes (IGT por sus siglas en inglés), impulsando la mejora en la calidad de los cuidados para todos los pacientes al tiempo que reduce los costes médicos a través de la innovación. A pesar de la disrupción económica causada por el Covid-19, la compañía ha sido capaz de incrementar sus dividendos a una tasa anual compuesta del 9% en los últimos cuatro años.
En cambio, en periodos de estrés – como el que estamos viviendo actualmente-, las empresas con balances endeudados afrontan costes más elevados, que se comerán el capital que, de otra manera, sería invertido en el negocio o distribuido a los accionistas. De la misma manera, las empresas con muchos activos ahora afrontan unas infladas necesidades de capex que dificultarán el crecimiento futuro. Con frecuencia, los inversores tendrán que afrontar un recorte en el payout – combinada con un comportamiento mediocre de la acción- que genera un perfil de retorno total por debajo de lo óptimo.
Los inversores también tienen que ser conscientes de las valoraciones, y asegurarse de que no están pagando de más por el crecimiento futuro de la empresa, como sucede con muchas inversiones ‘growth’. En nuestra opinión, un acercamiento basado en dividendos crecientes de calidad ofrece la mejor combinación de valoraciones y crecimiento, a través de un enfoque riguroso sobre compañías innovadoras que pagan dividendos y que son capaces de hacer crecer sus flujos de caja. Estas empresas no tendrán necesariamente un rendimiento inicial elevado. La clave es que estén bien posicionadas para crecer con el paso del tiempo. Por ejemplo, el líder en salud Johnson & Johnson ha incrementado su dividendo anual durante 60 años consecutivos, navegado todo tipo de entornos de mercado.
Creemos que es prudente adoptar un acercamiento basado en el crecimiento de dividendos de calidad en este contexto de tipos de interés elevados mediante la inversión en empresas poco endeudadas, que tienen menos obstáculos de obtener ingresos debido al pago de intereses más altos, y que puedan seguir haciendo crecer su base de capital y sus dividendos. Con el tiempo, una cartera con ese tipo de compañías – como la de nuestro fondo Ninety One Global Quality Dividend Growth Fund– puede generar rendimientos compuestos y un perfil de rentabilidad ajustada al riesgo superior al ‘growth’ y al ‘value’, proporcionando alfa duradera a través de diferentes ciclos de mercado. Finalmente, ese tipo de estrategia puede ayudar a proporcionar mayor certidumbre en un mundo incierto.
Tribuna de Abrie Pretorius, gestor y analista de Ninety One Asset Management.
La compañía global de ciberseguridad y privacidad digital Kaspersky ha analizado las tendencias en el mundo de las criptomonedas para saber más sobre el conocimiento y opinión de los españoles sobre esta clase de activo. Los datos revelan que el 31% de los usuarios españoles de monedas virtuales cree que son demasiado volátiles y el 75% de quienes invierten en criptomonedas no están informados sobre los riesgos relacionados con la ciberseguridad.
El retroceso de los mercados en 2022 y la actividad maliciosa han conducido a una crisis de liquidez que ha generado mucha inseguridad en las inversiones de los propietarios de criptomonedas. Por ello, algunos de ellos han decidido abandonar este mercado.
Además, la volatilidad se convierte en una de las principales barreras para la adopción de criptomonedas. Si nos centramos en España, el 31% de los españoles que posee monedas virtuales piensa que son demasiado inestables, según una encuesta global elaborada por Kaspersky. De hecho, el 8% de los participantes en la encuesta ya ha sufrido pérdidas por la caída de su valor. Asimismo, el 61% de los españoles que no tienen criptomonedas reconocen no entender cómo funcionan. Otras dificultades para su adopción son la falta de activos tangibles que las respalden, según señalan el 14% de los encuestados.
Cuando se habla del cumplimiento de las expectativas, la foto es heterogénea. En España, el 22% de los encuestados manifiesta que se cumplieron, mientras que casi la mitad (49%) aseguró que apenas lo habían hecho. Solo el 17% afirmó que sí se cumplieron.
La ciberseguridad es otro de los aspectos relacionados con las criptomonedas del que los usuarios de nuestro país tienen poca o ninguna información, y es que muchos no conocen las principales amenazas a las que se enfrentan. Tanto es así que el 75% de los españoles que invierten en criptomonedas asegura no estar bien informado sobre los riesgos relacionados con la ciberseguridad, siendo los menores de 35 años quienes mejor se informan.
Las amenazas cibernéticas, como los robos virtuales y las estafas, se encuentran entre los aspectos negativos más citados del uso de criptomonedas: queda patente en las respuestas del 24% y el 30% de los encuestados en España, respectivamente.
Consejos
“A pesar de los desafíos a los que se enfrenta en la actualidad el sector de las criptomonedas, es importante recordar que se trata de algo nuevo e innovador, con un enorme potencial por delante. Como sucede con cualquier tecnología emergente, habrá contratiempos, pero es muy posible que en el largo plazo las monedas virtuales brillen con luz propia. Los amantes de las criptomonedas pueden minimizar los riesgos relativos a la pérdida de datos e inversiones si dan prioridad a la seguridad. Protegerse contra las amenazas depende de ellos”, explica Marc Rivero, analista senior de seguridad de Kaspersky.
En este sentido, los expertos de Kaspersky recuerdan que cualquier persona puede ser víctima de los criptomineros, programas maliciosos utilizados para robar criptomonedas, y como consejos, apuntan a usar contraseñas fuertes y únicas para cada cuenta crypto con la que prevenir el descifrado; evitar los ataques de suplantación de identidad (phishing) a través de la cautela ante correos y links sospechosos; no compartir las claves; mantenerse informado sobre las últimas ciberamenazas y buscar soluciones de seguridad.