. Los inversores europeos de alto patrimonio creen que el mercado sigue teniendo margen para crecer, pero los clientes españoles discrepan
Casi dos tercios (59%) de los clientes europeos siguen siendo optimistas con respecto a las valoraciones del mercado de renta variable y creen que las condiciones actuales indican que el mercado sigue teniendo margen para crecer, según la encuesta a clientes de banca privada realizada por la división de banca privada de JP Morgan. Sin embargo, los clientes españoles mantienen una postura prudente y más de la mitad (53%) considera que las valoraciones actuales indican que la bolsa ya está en territorio de burbuja y que en breve retrocederá.
A lo largo de 2018, las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han continuado agudizándose y muchos clientes del resto de Europa (40%) creen que la posible guerra comercial global es el mayor riesgo para los mercados emergentes. Otras inquietudes entre los inversores son la fortaleza del dólar estadounidense (25%), la desaceleración económica de China (18%) y el endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal estadounidense (17%).
Al explorar las expectativas de los clientes españoles para averiguar qué les preocupa de los mercados emergentes, la encuesta concluyó que el 35% coincidía con otros clientes europeos en que una guerra comercial con China era el mayor riesgo para los mercados emergentes. A continuación, se situó la fortaleza del dólar estadounidense (31%), el endurecimiento de la política monetaria de la Fed (19%) y una desaceleración de la economía china (15%).
Aunque muchos clientes han perdido confianza en los mercados globales de renta variable desde la anterior encuesta en primavera, muchos siguen viendo oportunidades de fin de ciclo. El 51% de los clientes españoles sigue pensando que las acciones serán la clase de activo más rentable a lo largo de los próximos 12 meses, seguidas de las inversiones alternativas (33%) y las materias primas (8%). Por sectores, el 37% de los encuestados percibe más oportunidades en el de salud que en ningún otro segmento, y muchos predicen que este sector, tradicionalmente defensivo, ofrecerá una rentabilidad relativa positiva al madurar el ciclo y persistir las tendencias demográficas (como el crecimiento y el envejecimiento de la población). Los clientes del resto de Europa tenían una mejor opinión sobre la renta variable que los inversores españoles, y más de la mitad (58%) mantenía un posicionamiento considerable en esta clase de activos.
“Desde los aranceles comerciales y las subidas de tipos de interés hasta las corrientes políticas populistas, la incertidumbre ha estado omnipresente en 2018”, indicó Borja Astarloa, responsable de JP Morgan Banca Privada en España. “El recrudecimiento de las tensiones comerciales sigue representando el mayor riesgo en nuestra opinión, y también constituye la mayor preocupación entre nuestros clientes, ya que una deriva hacia una guerra comercial en toda regla probablemente sería negativa para los mercados bursátiles de todo el mundo”.
“Consideramos que nos encontramos en una fase avanzada del ciclo”, señaló Astarloa. “Sin embargo, una fase tardía del ciclo no significa el final del mismo. Puesto que las condiciones del mercado probablemente se vean sometidas a más volatilidad, los inversores a largo plazo deberían ser pacientes y mantener la diversificación en sus carteras”.
Pixabay CC0 Public Domain. Citi celebra la 14º edición del Día Mundial de la Comunidad en España con la ayuda de 200 voluntarios locales
Citi celebra su 14º Día Mundial de la Comunidad con 200 voluntarios en España que participan en diferentes actividades de servicio en sus comunidades locales. En los días previos e incluyendo el Día Mundial de la Comunidad, colegas de Citi, ex-alumnos, socios, clientes, familiares y amigos en más de 400 ciudades de 90 países y territorios se ofrecen como voluntarios en 1.500 proyectos de servicio para ayudar a abordar una serie necesidades de la comunidad; desde asesorar a jóvenes con bajos ingresos hasta conservar parques y educar a las personas sobre el valor de conservar ecosistemas saludables y sostenibles.
Este día anual de servicio a la comunidad ofrece una amplia gama de oportunidades de voluntariado para trabajar junto a socios comunitarios en actividades sin ánimo de lucro con el fin de mejorar ciudades y vecindarios.
“Todos los días nos enorgullecemos de tener un modelo de negocio que ayude a la sociedad a obtener crecimiento y al progreso económico. Ahora, en su 14º edición, el Día Mundial de la Comunidad ofrece a nuestros colegas de Citi en todo el mundo la oportunidad de llevar a cabo esta misión a través del voluntariado», afirmó Mike Corbat, director ejecutivo de Citi. «La enorme participación que vemos cada año es una gran ejemplo de reflexión sobre nuestra gente y muestra su sincero compromiso con las comunidades a las que servimos», añadió Corbat.
Desde que se inauguró el Día de la Comunidad Global en 2006, los voluntarios de Citi han contribuido con más de cuatro millones de horas de servicio a los proyectos del Día de la Comunidad Global en cientos de ciudades. Este año, la iniciativa continúa haciendo un seguimiento de cómo estos proyectos ayudan a avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Las actividades que se muestran a continuación reflejan cómo los proyectos de este año contribuyen a desempeñar los ODS: hambre cero (ODS 2), buena salud y bienestar (ODS 3), educación de calidad (ODS 4), trabajo decente y crecimiento económico (ODS 8), ciudades y comunidades sostenibles (ODS 11) y acción por el clima (ODS 13).
Asia-Pacífico
En China, los voluntarios de Citi están haciendo paquetes de primeros cuidados y zapatos para pintar a mano dirigidos a niños desatendidos en la provincia de Yunnan. Al alinear sus esfuerzos con Pathways to Progress, los voluntarios de Citi en Sydney planearán una serie de talleres para ayudar a los jóvenes a desarrollar aspiraciones profesionales, mejorar sus habilidades de empleo y tener éxito en un mercado laboral competitivo. En Filipinas, los voluntarios de Citi están abordando problemas ambientales y sociales al crear “ladrillos ecológicos” de botellas plásticas recicladas, los cuales se utilizarán en proyectos de construcción de escuelas públicas. Además de promover la igualdad y la inclusión al caminar junto a los atletas paralímpicos.
Europa, Medio-Oeste y África
En Londres, los voluntarios de Citi celebran el Día del Festival Deportivo para aprovechar el poder del deporte como una herramienta de desarrollo para que los jóvenes promuevan hábitos activos a largo plazo, mejora del bienestar y desarrollo de habilidades de empleabilidad. Por otra parte, en un esfuerzo por mejorar la calidad del aire en Varsovia, sobre todo en comunidades vulnerables y de bajos ingresos, los voluntarios de Citi estarán plantando plantas anti-smog y mini huertos de hierbas. En alineación con Pathways to Progress, los voluntarios de Citi en Kuwait utilizarán sus habilidades para formar a los jóvenes en comunidades de bajos ingresos en la redacción de una carta de presentación ganadora y la formación para realizar una entrevista laboral con éxito.
Latinoamérica
Los voluntarios de Citi en El Salvador están colaborando con Glasswing International para ayudar a los jóvenes a aumentar su conocimiento en educación financiera y habilidades de empleabilidad. Asimismo, centrando sus esfuerzos en la revitalización del vecindario, los voluntarios de Citi en Bogotá estarán pintando coloridos murales en una comunidad local. El más grande de los murales, una mariposa, será un símbolo para los nuevos comienzos. Por otra parte, los voluntarios de Citibanamex en México están participando en una serie de actividades con el fin de ayudar a las poblaciones desfavorecidas, incluyendo la realización de una campaña nacional de alimentos y la asistencia a los atletas paralímpicos.
Norteamérica
El director ejecutivo de Citi, Mike Corbat, se unió a los voluntarios de Toronto para ayudar a preservar un parque de conservación hecho por el hombre a través de actividades de plantación. En la ciudad de Nueva York, los voluntarios de Citi participan en una variedad de actividades en los cinco condados, que incluyen la limpieza de escombros y la preparación de camas de plantas, la tutoría de jóvenes, el empaque de alimentos y la construcción de bicicletas para niños de comunidades marginadas.
Luis de Blas y Jesús Domínguez, gestores del fondo. Foto: valentum.es. Valentum reduce su exposición a Burford Capital pero confirma que el valor no está quebrado ni es un fraude
El miércoles pasado, el fondo de inversión Valentum, de la gestora homónima –Valentum Asset Management, creada a finales de junio del año pasado-, vio caer su valor liquidativo cerca de un 4% debido a la debacle en bolsa de uno de los valores de su cartera, Burford Capital, precipitado –se dejó aproximadamente un 60% el pasado 7 de agosto- por el informe de Muddy Waters (inversor a corto) en el que realizaba diversas acusaciones a la compañía. Tras una reacción positiva de Burford defendiéndose de esas acusaciones, los gestores del fondo han decidido reducir su posición en la firma -en los últimos dos días, el valor liquidativo de Valentum ha logrado recuperarse ligeramente-, aunque dicen estar tranquilos porque se ha demostrado que las acusaciones sobre la quiebra e insolvencia de la compañía afectada son falsas.
Así lo cuentan en un comunicado informativo para sus inversores emitido el pasado viernes, en el que explican la situación, y su decisión de recortar su posición en el valor, que representaba un 8% de la cartera de Valentum antes de la caída. “Hemos decidido reducir algo nuestra posición (a precios por encima de 800 peniques, caída del 41% contra el cierre del lunes, subida del 113% frente a mínimos del martes) para llevarla a un peso acorde con la situación actual (estaremos muy pendientes a cómo trata la compañía en el corto plazo las demandas de recompra, listing y corporate governance), pero nos sentimos cómodos con la posición a estos precios, a pesar de la volatilidad elevadísima de los últimos días”, explican.
Los gestores indican que están tranquilos porque “la compañía no es un fraude ni insolvente”, aunque dicen haberse quedado fríos “con una reacción poco agresiva de la compañía”, a las acusaciones. “Han respondido bien a todos los asuntos contables (excepto una duda que nos asalta sobre el potencial pasivo de un caso en Arizona), pero queríamos una respuesta mucho más contundente en cuanto a recompra de acciones, listar el valor en EE.UU. (cotiza en el mercado alternativo inglés, equivalente al MAB español), cambios en el Consejo y sustitución de la directora financiera para eliminar cualquier duda. Siguen diciendo que estudiarán todos los temas, pero nos hubiera gustado que se hubieran puesto ya manos a la obra”, explican en Valentum.
Burford contestó a los puntos del informe acusatorio, añadiendo que los directivos comprarán acciones y que considerarán una recompra de acciones por parte de la propia compañía. También informó de la compra por parte de los fundadores de acciones por valor de 4 millones de dólares, algo insuficiente para los gestores de Valentum, que también critican que la firma ha sido vaga a la hora de determinar si la compañía comprará realmente acciones propias. De ahí su decisión de recortar su posición en el valor.
Un error… el peso de la posición
En este contexto, los gestores dicen que volverían a invertir en Burford, pero creen que han cometido un error en su peso: “El error, pensamos, ha sido el peso que le hemos dado a la compañía, teniendo en cuenta que había inversores con ganas de atacar el valor y que era sencillo hacerlo al tener una contabilidad complicada y con la directora financiera casada con el consejero delegado (le debimos dar más importancia, la mujer del César…). No hemos calibrado bien las posibilidades de que se produjese una reacción tan agresiva como la que se ha producido”, reconocen.
“Algunos partícipes se preguntarán por qué Burford tenía un peso tan elevado en nuestra cartera. Somos de la opinión de que tenemos que invertir porcentajes relevantes en compañías que vemos interesantes. En Burford fuimos subiendo el peso con la consecución de ciertas noticias positivas que no se vieron reflejadas en la cotización (acuerdo con fondo soberano y aumentos de rentabilidad), además de noticias negativas que sí afectaron negativamente pero que pensábamos que ofrecían una oportunidad al no afectar al valor del negocio. Las noticias que afectaron negativamente fueron un informe de un bróker negativo sin ninguna consistencia en nuestra opinión y el hecho de que los fondos de la gestora inglesa Woodford (que ha tenido que congelar sus fondos y probablemente tenga que vender sus posiciones) tenían una posición muy relevante en la compañía y podría crear presión vendedora en el valor. Decidimos aumentar la posición con intención de reducirla a precios superiores, pero fuimos poco ágiles a la hora de volver a reducir”, reconocen en su comunicado informativo de la semana pasada.
De ahora en adelante, ven múltiplos más bajos de cotización pero no descartan noticias positivas: “Lo cierto es que el múltiplo que el mercado aplicará ahora, muy posiblemente, sea significativamente inferior al que cotizaba anteriormente (mayor coste de capital) y se mirará con escepticismo el valor en libros de la compañía. Posiblemente los resultados a corto plazo no serán excelentes, ya que muchas inversiones darán sus frutos más hacia 2020”, advierten. Pero también creen en la posibilidad de buenas noticias a final de año sobre el caso Petersen.
La actuación
En la carta, la gestora explica que decidió invertir en esta compañía por tener un negocio muy interesante que considera acíclico, con unos crecimientos muy fuertes, un management experimentado e invertido en la compañía y una valoración interesante. “No es un fraude y no está quebrada”, insisten. “Lo que más nos puede preocupar son las potenciales demandas contra ellos de las que no han hablado, y que dicen están dormidas y con muy pocas posibilidades de prosperar”, reconocen y explican por qué no vendieron todas las posiciones ni las aumentaron con el fuerte recorte de precios sufrido.
En la gestora indican que, pese a lo ocurrido, están cómodos con su cartera: “En un entorno económico y de mercado muy cambiante, pensamos que tenemos compañías sólidas cuyos negocios siguen sanos y que son buenas candidatas para seguir aportando valor y componiendo resultados en el tiempo. Agradecemos las muestras de cariño de muchos partícipes estos días y comprendemos la frustración de tantos otros”, añaden en el comunicado. De hecho, los partícipes están reaccionando bien ante una caída nunca vista antes en el fondo, con muestras de agradecimiento por la transparencia y explicaciones ofrecidas por Valentum.
El fondo Valentum, antes en manos de Gesiuris, está gestionado por Jesús Domínguez y Luis de Blas, que montaron su propia gestora hace algo más de un año. La gestión, independiente, se basa en el análisis fundamental de las compañías cotizadas, con una perspectiva con una doble vertiente: value y momentum. El fondo tiene un patrimonio de 113,7 millones de euros (con datos del pasado jueves).
Quién es Burford
Burford Capital es una compañía que se dedica a financiar litigios. Es un sector relativamente joven, donde Burford es el mayor operador con una cuota por ellos estimada del 50%. “Funciona de forma similar a un fondo y un banco. Cuando una compañía quiere litigar, pero no tiene los fondos o no quiere hacer una inversión así con su propio capital, puede acudir a compañías como Burford que, o bien financian los costes (a un tipo elevado o una mezcla entre tipo de interés y derecho aparte de la conclusión del caso), o pueden directamente vender el caso a estas compañías que pagan por el activo y asumen la responsabilidad de llevar el caso a buen puerto. Burford utiliza su propio balance, pero también gestiona fondos con dinero de terceros”, explican los gestores del fondo en el comunicado. “Estas estrategias generan unos retornos muy elevados, pero tienen un elevado grado de riesgo, especialmente cuando la compañía (o fondo) que financia es pequeño y tiene pocos casos en cartera. Al ser Burford la más grande, es la que más diversificación tiene y la más exitosa por haber conseguido llegar a este tamaño”, indican.
El origen del problema estuvo en que Muddy Waters emitió un documento acusando a la compañía de diversas cuestiones. En resumen, alude a una contabilización agresiva del valor de ciertos casos en cartera, determinadas actuaciones dudosas, potenciales pasivos fuera de balance y de ser insolvente. Adicionalmente, cuestiona el Consejo de Administración y la relación entre el consejero delegado y la directora financiera (son matrimonio, algo no ideal pero conocido). “Algunas de las acusaciones que hace este informe nos parecen erróneas, otras son críticas que se han comentado ampliamente en mercado y se han discutido públicamente con los directivos de la compañía en los últimos tiempos, y el cálculo que se utiliza para aludir a la supuesta insolvencia de la compañía está mal hecho (resta la deuda, que además considera que vence ya, pero no cuenta con la caja que la compañía tiene y la que recibirá por litigios en curso). La duda que nos queda son los posibles pasivos por una demanda pasada a las que Burford no da importancia. Hemos investigado el estado de la demanda y, pese a que hay posibilidades de que el juez desestime el caso, por la documentación a la que hemos podido acceder, pensamos que todavía no está claro”, indican desde el fondo de inversión.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: Krysiek. Finizens: en España, el crecimiento de la gestión pasiva ha sido 10 veces superior al de la activa en la última década
La firma de inversiones y gestión de patrimonios especializada en gestión pasiva indexada Finizens presenta el primer Observatorio de Gestión Pasiva en España, en el que recogen datos reales e independientes de volumen de captación, rentabilidad, tendencia y perspectivas de un estilo de inversión que está experimentando un fuerte crecimiento a nivel mundial y representa una gran oportunidad de maximizar la rentabilidad para los inversores españoles. Para realizar este estudio, la firma se ha basado en datos objetivos de mercado procedentes de fuentes como Morningstar, Standard & Poor’s e Inverco. Una de las primeras conclusiones es que el crecimiento de la gestión pasiva en España ha sido 10 veces superior al de la gestión activa en el periodo 2008-2018.
“Gracias a una rentabilidad consistentemente superior a la gestión activa, la gestión pasiva indexada ha explosionado a nivel mundial y su crecimiento está siendo imparable, así lo demuestran los resultados de este primer Observatorio de Gestión Pasiva en España que acabamos de publicar desde Finizens”, destaca el CEO de la compañía, Giorgio Semenzato.
El objetivo principal del Observatorio es proporcionar una perspectiva global e independiente sobre la evolución de la inversión pasiva que muestre un panorama integral de su estado actual y su proyección futura, tanto en España como a nivel mundial. La gestión pasiva indexada se basa en replicar índices bursátiles de referencia en lugar de optar por una apuesta específica desarrollada por un gestor humano, que es en lo que consisten básicamente las estrategias de gestión activa. El informe presentado por Finizens refleja que, a nivel global, los índices de mercado presentan rentabilidades históricas superiores a los gestores activos en hasta un 98,47% de los casos.
Según los datos del Observatorio, la gestión pasiva ha atraído en los último 10 años un total de 5,2 billones de dólares de flujos netos en todo el mundo (descontando de las contribuciones las retiradas de capital), un volumen equivalente a cuatro veces el PIB de España. Además, se pone de manifiesto el rápido crecimiento de este tipo de estrategia de inversión, cuyos volúmenes de activos han crecido a un ritmo 4,7 veces superior al de la gestión activa, elevando su cuota global de mercado del 10% al 27% en tan solo 10 años.
“Como demuestran los resultados del primer Observatorio de Gestión Pasiva 2019, su imbatible rentabilidad a largo plazo la ha llevado a alcanzar un crecimiento inigualable a nivel mundial, ya que millones de inversores de todo tipo de perfil han ido optando por abandonar la gestión activa y pasarse a la gestión pasiva para la inversión de su patrimonio”, explica Kevin Koh Maier, Head of Asset Allocation de Finizens.
Una rentabilidad acumulada del 76% por encima de la gestión activa
Según los datos analizados por Finizens, la rentabilidad neta ajustada por coste de los índices de mercado ha sido considerablemente superior, en media, a la rentabilidad alcanzada por los fondos de gestión activa en todos los mercados de referencia: desde un diferencial mínimo del 18,1% para la categoría de inversión de renta variable zona Euro (Eurozone equity) hasta un diferencial máximo de rentabilidad de un 76,1% para la categoría de inversión de renta variable americana (US Equity).
En este sentido, para un horizonte de inversión de 10 años, la gestión pasiva ha arrojado una rentabilidad de hasta un 76,1% por encima de la gestión activa.
El mercado de EE.UU. representa el 74% de los activos bajo gestión pasiva
El Observatorio, además, incluye datos desglosados por regiones a nivel mundial, de los que se extrae el liderazgo incuestionable del mercado estadounidense, que acapara el 74,2% de los activos bajo gestión para la gestión pasiva.
Las gestoras líderes a nivel mundial son las estadounidenses Vanguard, con un 40% del total, seguida de BlackRock, con una cuota del 21%.
Una clara muestra del avance que esta estrategia de inversión alcanza en Europa es que ya representa el 19% (de término medio) del total de mercado, recortando distancias con el 33% de cuota de mercado que registra en EE.UU.
Según el análisis de Finizens, este tipo de gestión ha experimentado en Europa un crecimiento exponencial, del 295% en comparación con el 29% que ha aumentado la gestión activa en la última década (2008-2018).
Oportunidad de crecimiento en España
En lo que se refiere a España, la gestión pasiva por ahora cuenta con una cuota de mercado de tan solo el 2% todavía, lo que evidencia su enorme potencial de crecimiento para alinearse con la media europea y mundial.
Así, el 57% de los activos financieros de los hogares españoles está destinado a instrumentos de inversión, lo que pone de manifiesto el gran recorrido y el considerable impacto que la gestión pasiva va a generar de aquí en adelante en el mercado, presentándose como una estrategia considerablemente más rentable y efectiva que la gestión tradicional.
A este respecto, el estudio de Finizens ha analizado la rentabilidad real en los últimos 20 años alcanzada por los inversores españoles, llegando a demostrar que, comparando dos carteras equivalentes en riesgo, la rentabilidad acumulada de una cartera de gestión activa fue del 57,1%, mientras que la rentabilidad de una cartera de gestión pasiva habría alcanzado una rentabilidad del 156,7%, es decir una rentabilidad de 2,7 veces superior.
Andreas Iannelli, director de inversiones de renta fija en Fidelity International. Bonos investment grade europeos: ¿el regreso de “lo que sea necesario”?
El segundo trimestre de 2019 fue cualquier cosa menos tranquilo y los movimientos de los precios obedecieron a una serie de sorpresas y titulares protagonizados por los bancos centrales y los políticos. Tras el fuerte rebote del sentimiento en el primer trimestre, se vio una continuación de la racha alcista con el cambio de trimestre. Sin embargo, según apunta Andreas Iannelli, director de inversiones de renta fija en Fidelity International, no hizo falta que pasara mucho tiempo para que los riesgos se materializaran; así, el Brexit, Italia y el fantasma de la guerra comercial volvieron al primer plano en mayo.
No obstante, las pérdidas de valor duraron poco por cortesía de los bancos centrales, una vez más. Si a comienzos de año le tocó a la Fed adoptar una postura más expansiva, en el segundo trimestre el BCE tomó el relevo. En el foro anual de bancos centrales de Sintra, el Sr. Draghi volvió a enviar un mensaje claro al mercado: el BCE está listo para actuar y hacer más en caso necesario, y la entidad sigue luchando contra la baja inflación y la difícil coyuntura de crecimiento en la zona euro.
Las declaraciones del Sr. Draghi tal vez no estén a la altura de aquel discurso de 2012 en el que se pronunció el famoso “Lo que sea necesario”, pero sus efectos han sido igual de significativos hasta ahora. Al poner de nuevo sobre la mesa las perspectivas de más medidas de estímulo, incluidos recortes de tipos y una nueva ronda de relajación cuantitativa y CSPP, el presidente saliente del BCE alimentó las alzas tanto de la deuda pública como de los activos de riesgo.
En Fidelity International llevan mucho tiempo abogando por una política monetaria más expansiva por parte del BCE y se han posicionado en consecuencia sus fondos de bonos investment grade europeos; así, la sobreponderación en deuda corporativa se benefició considerablemente de la caída de los rendimientos de la deuda pública y el estrechamiento de los diferenciales. A pesar de los picos de volatilidad de mayo, las carteras han batido a sus respectivos índices de referencia por más de 70 puntos básicos durante el trimestre y por más de 150 puntos básicos en el año (antes de comisiones).
La reunión del BCE el pasado 25 de julio dejó claro que en septiembre Draghi tomará medidas (recorte de tipos y una nueva ronda de QE, aunque de menor cuantía que las anteriores) que afectarán a la evolución de los mercados europeos de deuda pública y bonos corporativos, tal y como esperaban los inversores, reforzando el mensaje de tipos bajos durante (mucho, mucho) más tiempo. Draghi nunca ha decepcionado a la hora de flexibilizar la política monetaria.
Así las cosas, en Fidelity International consideran que el segmento de vencimientos a cinco años sigue siendo muy atractivo tanto en la renta fija pública como privada. Ante la imposibilidad de que suban los tipos a corto plazo, el extremo corto tiene margen para reducirse sustancialmente desde el nivel actual.
Sin embargo, albergan dudas sobre el efecto de este “QE 2.0”. Siguen sin estar claros el alcance, la magnitud y la duración de este nuevo programa de compra de activos, que podría defraudar las expectativas. Por último, como los precios de mercado ya descuentan una gran cantidad de expectativas de QE, muchos bonos admisibles por el BCE cotizan cerca de sus mínimos de febrero.
Italia y el Brexit: más allá de la QE
Italia y el Brexit siguen siendo dos preocupaciones de primer orden para los inversores. Después de mantener en líneas generales una postura neutral en los BTP durante el trimestre, Fidelity adopta una posición corta estructural a finales de junio, expresada sobre todo en los BTP a 5 y 10 años. A toro pasado, pueden decir que su cambio se produjo demasiado pronto, ya que Italia se benefició mucho del buen tono provocado por la QE y los rendimientos de los BTP cayeron con fuerza después del discurso de Draghi.
En conjunto, el impacto en los resultados de los fondos fue mínimo y se mitigó en gran parte con las considerables sobreponderaciones en otros mercados de la periferia, como España y Portugal, y con la participación táctica en nuevas emisiones italianas con vencimientos más largos.
Sin embargo, en Fidelity no se atreverían a cambiar su postura de cautela sobre Italia únicamente por las expectativas de QE. El principal barómetro de los activos italianos sigue siendo la postura del gobierno en relación con las cuentas públicas, con unas negociaciones presupuestarias que acechan en otoño. Si las autoridades italianas se muestran dispuestas a llegar a un acuerdo con la Comisión que se fije como objetivo un déficit claramente inferior al 3%, por ejemplo aplicando subidas del IVA e introduciendo gradualmente las rebajas de impuestos, los BTP podrían volver a ser atractivos.
Por otro lado, un gobierno italiano más expansivo en el gasto que se enfrente a sus socios europeos durante las negociaciones no será bienvenido por los mercados, aun en el supuesto de una QE 2.0. Conviene recordar que durante el año 2018, cuando el diferencial entre el BTP y el Bund superó los 300 puntos básicos, el BCE todavía estaba comprando deuda italiana en el marco de su primer programa cuantitativo.
En cuanto al Brexit, sigue sin haber certezas en relación con el desenlace. En Fidelity han reducido la mayor parte de su riesgo británico durante el segundo trimestre. Si las valoraciones sufren un ajuste significativo, posiblemente a raíz de noticias sobre un Brexit a las bravas, estarían dispuestos a elevar de nuevo nuestra exposición al Reino Unido. Por ahora, sin embargo, parece apropiado mantenerse al margen y ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Mucho optimismo descontado, pero pocas alternativas disponibles.
A comienzos de año, su visión positiva sobre el riesgo se alejaba bastante del consenso, ya que la mayoría de los actores del mercado recelaban todavía de la oleada de ventas de finales de 2018. Hoy en día, el consenso de mercado es eminentemente de tolerancia al riesgo y los inversores debaten si asumir riesgo a largo plazo o a muy largo plazo. Lo anterior cabe aplicarlo tanto a los mercados de bonos corporativos, donde los inversores esperan que una nueva ronda de CSPP comprima aún más los diferenciales, como a los de deuda pública, donde el posicionamiento en duración del mercado parece muy forzado.
Por lo tanto, conviene mantener cierta precaución en estos niveles. La renta fija europea ha vivido una racha fantástica hasta ahora. Si bien esta podría continuar si los bancos centrales mantienen el sesgo expansivo, no deben pasarse por alto el posicionamiento y la liquidez. La sacudida de comienzos de julio demostró lo rápido que pueden deshacerse posiciones, ya que los rendimientos de los países semi-core y periféricos ampliaron entre 30 y 45 puntos básicos en apenas unos días después del dato mejor de lo previsto en la estadística de empleo no agrícola de julio.
El sesgo de Fidelity International hacia duraciones más cortas en los mercados de deuda pública del núcleo europeo a comienzos de año lastró la rentabilidad durante el trimestre; así, el rebote previsto de los datos europeos no se produjo y los bancos centrales tiraron a la baja de los rendimientos. No obstante, el efecto sobre sus carteras fue mínimo y se compensó con las sólidas rentabilidades obtenidas con las posiciones a favor del aplanamiento de la curva que la gestora mantenía en los segmentos de 10 a 30 años.
Sin embargo, a la vista de la magnitud de los movimientos hasta ahora y de lo que está descontado, piensan que el extremo largo de la curva podría sufrir una reversión y, por lo tanto, en fechas más recientes redujeron la exposición a los bonos con vencimientos más largos. Si continúa la racha alcista en los bonos corporativos o la deuda pública, tras la reunión del BCE, o en el caso de que se anuncie una QE, reducirían aún más el riesgo aprovechando la fortaleza del mercado.
Aunque las valoraciones tal vez no sean tan interesantes como hace seis meses, en Fidelity International siguen pensando que los bonos investment grade europeos son muy atractivos para los inversores, ya que las empresas europeas están en mejor forma que sus homólogas estadounidenses. Además, el hecho de que el BCE haya mencionado un nuevo programa cuantitativo debería significar una mejor protección frente al riesgo bajista en la renta fija europea que en otros mercados y esperan que esta clase de activos siga ofreciendo rentabilidades ajustadas al riesgo interesantes a los inversores.
Foto cedidaJoachim Fels, asesor económico global PIMCO.. PIMCO defiende que existe una relación entre la política monetaria de los bancos centrales y el cambio climático
El cambio climático es uno de los principales temas en la agenda global. Pese a los esfuerzos e iniciativas que ya existen, desde PIMCO señalan que tanto los bancos centrales como la mayoría de los inversores solo han dado los primeros pasos para ayudar a frenar este fenómeno. En opinión de la gestora, el sector financiero ha abordado este problema centrándose en las implicaciones que tiene en su negocio.
En opinión de Joachim Fels, asesor económico global PIMCO, es el momento de dar nuevos pasos con decisión. Pasos que ya se están viendo en la industria. “El tema del cambio climática se hizo más relevante cuando William Nordhaus, junto con Paul Romer, recibió el Premio Nobel de Ciencias Económicas 2018 por su trabajo de integrar el cambio climático en el análisis macroeconómico a largo plazo”, explica Fels.
Otro ejemplo significativo es que a finales de enero de este año, unos 45 economistas del mundo (incluidos 27 Premio Nobel y los ex presidentes de la Reserva Federal de Estados Unidos, Paul Volcker, Alan Greenspan, Ben Bernanke y Janet Yellen) hicieron público una declaración apoyando un impuesto a las emisiones de carbono en las empresas. “El impuesto reemplazaría la necesidad de una regulación del carbono menos eficiente y alentaría la innovación tecnológica y la inversión en infraestructura a gran escala, según los economistas”, matiza Fels.
Para este asesor de PIMCO, estos ejemplos permiten establecer una relación entre el cambio climático y la política monetaria. Según explica Fles se debe a dos motivos: “el primer motivo es porque los bancos centrales, como reguladores, comenzaron a enfocarse en las implicaciones de estabilidad financiera del cambio climático hace ya varios años. Mark Carney, gobernador del Banco de Inglaterra y presidente de la Junta de Estabilidad Financiera (FSB), pronunció un discurso seminal sobre el tema en 2015, destacando tres tipos de riesgos derivados del cambio climático: los riesgos físicos derivados del impacto actual de eventos relacionados con el clima y el clima sobre los seguros y el valor de los activos financieros; los riesgos de responsabilidad que podrían surgir en el futuro para los extractores y emisores de carbono; y los riesgos de transición que resultan del proceso de ajuste a un entorno con bajas emisiones de carbono, lo que podría perjudicar significativamente el valor de una amplia gama de activos en los sectores intensivos en carbono. Y, en segundo lugar, porque el cambio climático podría afectar a la capacidad del banco central para mantener a la economía en equilibrio”.
Teniendo esto en cuenta y desde 2015, el FSB, los bancos centrales y los supervisores han estado trabajando en la integración de los riesgos relacionados con el clima en su análisis más amplio de riesgos financieros y en publicar el primer informe de progreso y estado de varias de estas instituciones. De cara al futuro, la tendencia es que los riesgos de estabilidad financiera relacionados con el clima se conviertan en un componente estándar de las pruebas de estrés que los reguladores realizan a las instituciones financieras.
La tesis de Fels es que si no se toman medidas, las economías y los bancos centrales pueden enfrentarse a choques más frecuentes o severos (huracanes, períodos de temperaturas excesivamente altas o bajas, inundaciones causadas por el aumento del nivel del mar, etc.) que podrían complicar enormemente las tareas del banco central de varias formas.
“Primero, puede ser más difícil identificar los eventos que afectan a la economía y separar el ruido de las señales. Los eventos relacionados con el clima pueden fácilmente causar estragos en la actividad económica y la inflación, y desenmarañar la variación en los datos no es una tarea fácil. Esto aumenta el riesgo de errores de política debido a la incertidumbre de los datos. En segundo lugar, el cambio climático puede cambiar la distribución de los eventos y sus consecuencias catastróficas”, concluye Fels.
Pixabay CC0 Public Domain. El sector financiero evoluciona hacia un nuevo paradigma: de la banca abierta al modelo Open X
El Informe Mundial de Fintech 2019, publicado por Capgemini y Efma, señala que, aunque el movimiento banca abierta no ha alcanzado todavía su madurez, el sector de los servicios financieros está entrando en una nueva fase de innovación denominada Open X. Este modelo requerirá un mayor esfuerzo de colaboración y especialización. El informe defiende que los bancos y otros actores del ecosistema de los servicios financieros deben comenzar a elaborar planes en esta dirección y modificar sus modelos de negocio.
A su vez, el informe identifica un doble reto: por un lado, las fintech están trabajando para escalar sus operaciones y, por otro, los bancos están atascados en sus iniciativas de colaboración con las nuevas empresas tecnológicas. Como resultado de ello, los participantes del sector están pensando en saltarse el modelo de banca abierta y entrar directamente al Open X, una forma más eficaz y mejor estructurada tanto de colaboración como de compartir la información surgida del análisis de datos de clientes. La era del Open X creará un mercado integrado, con roles especializados para los diferentes actores, que permitirá un intercambio fluido de datos y servicios, lo que mejorará la experiencia de cliente e impulsará la innovación de productos.
Open X transformará las normas y los conceptos básicos del sector mediante cuatro cambios fundamentales:
Desterrar la orientación al producto para volcarse en la experiencia del cliente.
Concebir y tratar los datos como «activo crítico».
Priorizar modelos de acceso compartido frente a los modelos tradicionales de propiedad.
Innovar de manera colaborativa frente a comprar o crear soluciones en solitario.
Las API, que permiten a terceros acceder a sistemas y datos de los bancos en un entorno controlado, serán los catalizadores de la creación del mercado Open X. A pesar de que ya se comparten y aprovechan extensamente los datos de los clientes en el sector, estos sistemas aún no se han estandarizado. Aunque el marco normativo y regulatorio es complejo, el establecimiento de un estándar ayudará a reducir el fraude, a mejorar la interoperabilidad, dar más velocidad a la salida al mercado y aumentar la escalabilidad.
El estudio también concluye que los participantes del sector están estudiando dos posibles modelos de monetización para las API: un modelo de reparto de ingresos (que el 60% de los bancos y el 70% de las fintech consideran viable) y un sistema de derechos de acceso a las API (que respaldan el 46% de los bancos y el 55% de las fintech). Sin embargo, solo cerca de un tercio de los directivos de banca considera que actualmente están bien preparados para monetizar API.
Privacidad, seguridad y colaboración
Aunque bancos y fintech afirman que entienden la importancia de la colaboración, la privacidad y la seguridad siguen siendo las principales causas de inquietud. Cuando se les preguntó qué les preocupa de la banca abierta, la inmensa mayoría de la banca señala la seguridad de los datos (76%), la privacidad del cliente (76%) y la pérdida de control de los datos de los clientes (63%). Las fintech se muestran más optimistas acerca del modelo de banca abierta, aunque el 50% expresa su temor por las cuestiones de seguridad y privacidad y el 38% por la pérdida de control de los datos de los clientes.
En cuanto a los obstáculos para lograr una colaboración efectiva, el 66% de los bancos y el 70% de las fintech señalan la diferencia de la cultura o la mentalidad organizativa, el 52% de los bancos y el 70% de las tecnológicas mencionan barreras en procesos, y la falta de visión y objetivos a largo plazo son señalados por un 54% y un 60%, respectivamente. Solo el 26% de los directivos de bancos y el 43% de los responsables de fintech consideran haber encontrado al socio de colaboración adecuado para la aplicación de la banca abierta. Estas respuestas indican que numerosas entidades tradicionales y tecnológicas siguen sin estar preparadas para el modelo de banca abierta, y menos aún para la creciente demanda de intercambio de datos e integración que requerirá el nuevo modelo de Open X.
Dentro de este modelo, los bancos deberán mejorar primero su modelo integrado (tradicional) y, después, centrarse en áreas de fortaleza especializada. El estudio identifica tres funciones estratégicas que se prevé que evolucionen como parte de Open X:
Proveedores, que desarrollarán productos y servicios.
Agregadores, que agruparán productos y servicios ofrecidos en el mercado y los distribuirán a través de canales internos, manteniendo las relaciones con los clientes.
Orquestadores, que actuarán como conectores y coordinadores del mercado, facilitando las interacciones entre los socios colaboradores.
Pixabay CC0 Public Domain. Cinco motivos por los que hay volatilidad
Desde Deutsche Bank Wealth Management consideran que las causas de la volatilidad son numerosas. Muchas están interconectadas, pero con frecuencia de distintas maneras, por factores diversos y siguiendo ciclos diferentes.
Para la entidad, las causas que han provocado la volatilidad reciente han sido sobre todo las preocupaciones por el conflicto comercial, pero aún así existen otras cinco que hay que tener en cuenta:
La fuerte caída del mercado a finales de mayo respondió a un giro imprevisto en las negociaciones comerciales entre EE.UU. y China; dado que no es probable que se llegue pronto a un acuerdo comercial de amplio alcance entre ambos países, la situación se mantendrá.
Los temores sobre el comercio repercutirán en preocupaciones sobre el crecimiento, que a su vez desestabilizarán las expectativas sobre las políticas monetarias.
También sucede lo contrario: las crecientes expectativas de una relajación de las políticas de los bancos centrales alentaron a los mercados en junio.
Las variaciones de los beneficios empresariales también podrían impulsar la volatilidad: la temporada de anuncios de resultados del segundo trimestre de EE.UU. mostrará hasta qué punto el pesimismo actual refleja la realidad.
No hay que ignorar los riesgos geopolíticos, incluso si parecen estar en otro plano. Las crecientes tensiones con Irán de junio muestran cómo pueden reactivarse los antiguos conflictos. Otros problemas políticos, por ejemplo, relativos al Brexit o a Italia, también podrían tener una dinámica no económica.
Al igual que las causas de la volatilidad son numerosas, también lo son las consecuencias para los mercados. «Las medidas individuales de volatilidad no reflejan plenamente la situación. Últimamente, por ejemplo, las crecientes esperanzas de una relajación de las políticas monetarias han hecho bajar la volatilidad según la medida más utilizada, el índice VIX. No obstante, este dato debe contemplarse con cautela. La medición del VIX, que es la volatilidad implícita de las opciones sobre el índice S&P, solamente refleja un aspecto de la volatilidad, y unos valores relativamente bajos no significan necesariamente que haya calma; esto quedó de manifiesto hace poco, a finales de 2018, antes de los retrocesos del mercado de renta variable», explica la firma.
Otro motivo para permanecer vigilantes con la volatilidad es que las expectativas no son más que eso, y vivimos en un entorno muy incierto en que podrían cambiar rápida y profundamente. Los mercados financieros tendrán numerosas razones por las que preocuparse en la segunda mitad de este año, muchas de ellas contradictorias: el impacto de las disputas comerciales o la política europea, entre otras, podrían muy bien poner a prueba la confianza de los inversores en la capacidad de la futura política de la Fed para resolver las cosas. «En consecuencia, la volatilidad podría repuntar durante este segundo semestre de 2019», concluyen.
Pixabay CC0 Public Domain. Union Bancaire Privée mejora su nota en el informe de evaluación de los principios ODS de Naciones Unidas de 2019
Union Bancaire Privée (UBP) ha obtenido en 2019 una mejor nota en el informe de evaluación de los principios ODS de Naciones Unidas, con un comportamiento equiparable o superior al de sus homólogos en cada módulo evaluado. Ha logrado así la nota más alta, A+, en la sección estrategia y gobernanza.
Los principios para la inversión responsable de las Naciones Unidas (ODS), iniciativa lanzada en 2006, son la principal referencia mundial en materia de fomento de la inversión responsable y sostenible. Esta iniciativa tiene por objetivo establecer los vínculos existentes entre la inversión y las cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) y apoyar a la red internacional de signatarios en la tarea de incorporar estos factores en sus decisiones de inversión y propiedad. La iniciativa colabora con su red internacional de signatarios con el fin de poner en práctica los seis principios de inversión responsable.
UBP es signatario de los principios desde 2012. Desde entonces, el banco ha puesto en marcha y reforzado su política en este ámbito y ha integrado paulatinamente los criterios ASG en su oferta de banca privada y de gestión de activos.
Karine Jesiolowski, al frente de la inversión responsable de la división de gestión de activos de UBP, señaló: “El informe de evaluación de los principios para la inversión responsable de este año reconoce los pasos dados por UBP con el fin de reforzar el enfoque ASG en todo el grupo. Demuestra que contamos con una sólida base sobre la que apoyarnos para seguir fomentando la inversión sostenible”.
Pixabay CC0 Public Domain. El patrimonio mundial de las grandes fortunas disminuye un 3% en 2018 tras siete años consecutivos de crecimiento
El Informe Mundial de la Riqueza 2019 elaborado por Capgemini señala que el patrimonio mundial de las grandes fortunas disminuye en 2 billones de dólares tras siete años consecutivos de crecimiento, pero el nivel de satisfacción y confianza en los gestores y las firmas de gestión de patrimonios sigue siendo alto.
Según revela el informe, tras siete años de crecimiento continuado, el patrimonio de las grandes fortunas disminuyó un 3% en 2018 a nivel mundial. Consecuencia en gran parte por un retroceso de la riqueza de la región de Asia-Pacífico, en especial en China. Esta reducción equivale a la pérdida de 2 billones de dólares en todo el mundo.
Pese a ello, las firmas de gestión de patrimonios mantuvieron estables los niveles de satisfacción y confianza de sus clientes, aunque la mejora de las relaciones personales sigue siendo clave para estas entidades, algo que pueden conseguir por medio de un uso eficaz de las tecnologías de próxima generación.
Entre las conclusiones del informe destaca que Asia-Pacífico ha registrado la mayor disminución de riqueza y en cambio, crece en Oriente Medio. El número de millonarios en todo el mundo (HNWI) y su riqueza han disminuido, respectivamente, un 0,3% y un 3%. Asia-Pacífico representa 1 billón de dólares de la caída global, tras reducir su población de millonarios un 2% y la riqueza que concentran, un 5%. Únicamente China ha sido responsable de más de la mitad (53%) de la pérdida de riqueza de Asia-Pacífico y de más del 25% en todo el mundo.
El patrimonio de las grandes fortunas también retrocede en casi todas las demás regiones. En Latinoamérica cayó un 4%; en Europa, un 3% y en América del Norte, un 1%. Sin embargo, en Oriente Medio se invirtió la tendencia: la riqueza de las grandes fortunas creció un 4% y su población HNWI, un 6%, impulsadas por el sólido crecimiento del PIB y la evolución de los mercados financieros. En línea con el año anterior, los mercados con más volumen de millonarios —Estados Unidos, Japón, Alemania y China— representan el 61% del total de la población mundial de grandes fortunas.
Ultramillonarios: pérdida económica En 2018, la población de ultrarricos (fortunas superiores a 30 millones de dólares) se redujo en un 4% y su riqueza descendió alrededor del 6%. Estas pérdidas representan el 75% de la disminución total de la riqueza a escala mundial.
El segmento de millonarios de nivel medio (fortunas de entre 5 y 30 millones de dólares) representa el 20% de la pérdida total global —redujo su patrimonio un 2,6%—, mientras que el segmento inferior de millonarios (entre 1 y 5 millones de dólares y que representa casi el 90% de la población HNWI) es el que se vio menos afectado, ya que su riqueza menguó menos del 0,5%. Esto significa que la mayoría de la reducción tanto del número de millonarios como de la riqueza que concentran se dio en los segmentos más altos (ultramillonarios y millonarios de nivel medio).
El efectivo sustituye a la renta variable como inversión Según arroja el informe, la composición de las carteras de inversión ha cambiado de manera significativa: el efectivo ha sustituido a la renta variable como clase de activo más utilizado como inversión en el primer trimestre de 2019 y representa el 28% del patrimonio financiero de las grandes fortunas, mientras que las acciones han pasado a una segunda posición, con cerca del 26% (5 puntos porcentuales menos que el año anterior). La volatilidad en los mercados bursátiles dio lugar a un ligero incremento de las inversiones alternativas, que llegaron al 13%, 4 puntos porcentuales más que doce meses antes.
Por último, pese a la disminución de la riqueza, el nivel de satisfacción y confianza en las firmas de gestión de patrimonios se incrementó en tres puntos porcentuales, hasta el 81,8%. Sin embargo, el informe pone de manifiesto una oportunidad clara para estas firmas ante las expectativas crecientes de las grandes fortunas: en 2018, la razón principal por la que los ricos cambiaron de gestora fue una experiencia de servicio insatisfactoria.
Se espera que las BigTechs sean uno de los mayores factores de disrupción del sector debido a sus capacidades digitales, pues menos del 50% de millonarios afirma que se encuentra satisfecho con las actuales plataformas móviles y online y el 85% demanda una mayor interacción digital a la hora de acceder a información sobre sus inversiones. Al mismo tiempo, solo el 62% de las grandes fortunas señala que se sienten cómodas con las comisiones de su principal gestora de patrimonios, y muchas demandan soluciones más personalizadas centradas en una mayor creación de valor.
Según el informe de Capgemini, la inversión en tecnologías de próxima generación será clave para mejorar la experiencia del cliente. A pesar del consenso existente entre directivos de empresa y gestoras de patrimonios en cuanto a la importancia de la inteligencia artificial como factor disruptor en el sector, solo el 5% de las firmas consultadas han implantado estrategias de inteligencia artificial de forma transversal en las principales áreas de su organización. Para lograr un crecimiento sostenido dentro de este entorno disruptivo, las empresas deben aplicar tres estrategias clave: salvar la brecha de valor entre gestoras de patrimonios y clientes, redefinir la estrategia tecnológica y aprovechar un ecosistema integrado.
“Aunque la volatilidad del entorno económico de 2018 ha provocado la disminución de la riqueza de las grandes fortunas a escala mundial, las gestoras de patrimonios han tenido un éxito extraordinario a la hora de mantener unos fuertes niveles de confianza por parte de sus clientes. Sin embargo, en el futuro el éxito dependerá de la agilidad de las firmas de gestión patrimonial para mejorar la experiencia del cliente y encontrar nuevas formas de añadir valor con la oferta de servicios más personalizados. La tecnología de próxima generación y la mejora del cumplimiento de sus expectativas ayudará a ello, aunque el entorno cambia tan rápido que las empresas no deben temer revisar a conciencia sus estrategias y sus modelos de negocio siempre que sea necesario”, explica Anirban Bose, consejero delegado de Servicios Financieros de Capgemini y miembro del Comité Ejecutivo del Grupo.