J.P. Morgan Private Bank anunció la incorporación a su equipo de América Latina de Antonio López Doddoli como vicepresidente y banquero en sus oficinas de Houston.
Caterina Gomez, VP de JP Morgan Private Bank & Head of Market Business Management for Latin America Regions (ex Brazil), dio la bienvenida al profesional en Linkedin, donde aseguró que López Doddoli se une a la oficina del banco en Houston.
“Antonio aporta más de 10 años de experiencia en gestión patrimonial a su nuevo cargo, en el que atenderá las necesidades de nuestros clientes de patrimonio neto ultra alto”, señaló Gomez en su posteo en la red social.
Antes de un breve periodo como director adjunto en Kapital Bank, López Doddoli se desempeñó durante más de una década en Intercam Banco, donde el último puesto que ocupó fue el de director adjunto. Con anterioridad, fue consultor y analista en London Consulting Group y socio consultor en Manage & Growth Consulting. A nivel académico obtuvo una Licenciatura en Financial Planning and Services en el Tecnológico de Monterrey y realizó una Maestía en Alta Dirección, Executive MBA (MEDEX) en IPADE Business School.
Pixabay CC0 Public Domain. La operativa en previsión de políticas reflacionarias cobra impulso tras las elecciones
¿Qué explica este fenómeno?
No existe una única respuesta, sino la confluencia de varios factores. Uno de ellos proviene del frente comercial. Al menos al momento de escribir este artículo, la mayoría de los países ha aceptado aranceles en un rango de 15% a 20%, una mejora sustancial frente a los niveles de 30% a 50% que en su momento había impulsado Donald Trump. Esta mayor previsibilidad reduce la incertidumbre y despeja parte del ruido que afectaba la confianza de los hogares.
En segundo lugar, la dinámica de tasas de interés está jugando un rol de contención. La inflación anualizada se mantiene en 2,7%, un nivel que muchos economistas califican de obstinado, pero que no ha escalado tras la aplicación de aranceles. Esta estabilidad relativa otorga a la Reserva Federal cierto margen de maniobra para evaluar recortes de tasas en un futuro cercano.
A su vez, las compañías parecen estar absorbiendo gran parte del costo de los aranceles. Mientras que el IPC se mantuvo estable, el índice de precios al productor (IPP) saltó 0,9% en julio, el mayor aumento mensual desde 2022. Con utilidades en máximos históricos, las corporaciones han demostrado capacidad para amortiguar el golpe inicial, manteniendo sus márgenes en niveles elevados. Esta fortaleza no solo refuerza la narrativa de un “aterrizaje suave” sino que además sostiene el dinamismo de los mercados de renta variable. La continuidad en la expansión de beneficios corporativos es, en buena medida, lo que ha impulsado las cotizaciones bursátiles, aun en un contexto global cargado de incertidumbre.
Lejos de reflejar una pausa, los números confirman la persistente resiliencia del consumidor norteamericano
Entre la resilencia y la complacencia
El cuadro general refleja una economía en la que conviven tensiones y apoyos. El mercado laboral mantiene un delicado equilibrio, la inflación no cede tan rápido como quisiera la Fed, y el consumidor sigue siendo la gran incógnita. Sin embargo, los márgenes empresariales, junto con la posibilidad de una política monetaria más laxa, conforman un colchón que suaviza los riesgos inmediatos.
Para los inversores, este entorno resulta particularmente interesante: el mercado de bonos continúa ofreciendo tasas atractivas, mientras que los activos de crédito —incluido el crédito privado— se consolidan como piezas estratégicas en la búsqueda de un spread en el retorno total. Y en paralelo, la solidez de las utilidades corporativas mantiene viva la confianza en los mercados de renta variable.
En definitiva, la resiliencia del consumidor estadounidense no es solo un rasgo de fortaleza individual, sino el reflejo de un ecosistema corporativo y financiero que lo acompaña y le da confianza para proyectar su gasto a largo plazo. A diferencia de lo que ocurre en otros mercados, donde el consumo se frena con rapidez ante los vaivenes del crédito o las políticas fiscales, en Estados Unidos el impulso viene de compañías con márgenes robustos, capacidad de innovar y un mercado laboral que, pese a las señales de enfriamiento, continúa generando ingresos.
Pero hay algo más: el consumidor en Estados Unidos mira de reojo al mercado accionario. Su bienestar está mucho más vinculado al rumbo de Wall Street que el de sus pares en Europa o Asia. En estos mercados, el ahorro que se canaliza mediante inversión directa en la bolsa tiene un peso menor y la riqueza financiera de los hogares depende más de la propiedad de la vivienda o del ahorro bancario. En cambio, en EE.UU., mientras las utilidades empresariales crezcan y los índices bursátiles se mantengan en niveles elevados, el efecto riqueza se filtra en la vida cotidiana: más confianza, más predisposición al gasto, más consumo.
Es esa combinación de ingresos, empresas sólidas y patrimonio financiero lo que distingue al consumidor estadounidense y lo convierte, en gran medida, en el motor de la economía global.
Con la temporada de resultados del segundo trimestre avanzada, la gran mayoría de las compañías del S&P 500 ha presentado sus balances. Lo más destacado es que una amplia proporción de ellas —alrededor del 81%— superó las expectativas de beneficios, ubicándose entre los niveles más elevados de sorpresas positivas observados en los últimos años.
Para los inversores, este entorno resulta particularmente interesante: el mercado de bonos continúa ofreciendo tasas atractivas, mientras que los activos de crédito – incluido el crédito privado – se consolidan como piezas estratégicas en la búsqueda de un spread en el retorno total
Por otra parte, destacamos que las ventas han demostrado un aumento del 5,94% en comparación al 2T24 y los beneficios lo han hecho en un destacado 11,28%.
La pregunta es si esta resistencia constituye un signo de salud estructural o, por el contrario, la antesala de un agotamiento inevitable. ¿Estamos frente a un consumidor que seguirá siendo el motor de la economía global, apalancado en un sector corporativo robusto, o ante un espejismo sostenido por márgenes extraordinarios y políticas monetarias aún flexibles?
El tiempo —y los próximos balances empresariales— dirán si la historia de resiliencia se consolida como un nuevo capítulo de fortaleza, o si revela las primeras fisuras de un ciclo que comienza a agotarse.
La resiliencia del consumidor estadounidense no es solo un rasgo de fortaleza individual, sino el reflejo de un ecosistema corporativo y financiero que lo acompaña y le da confianza para proyectar su gasto a largo plazo
Nuevo récord en la industria europea de ETFs. El patrimonio en esta clase de vehículos ha superado la barrera de los 3,01 billones de dólares en septiembre, gracias a unos flujos de entradas de 49.930 millones de dólares a lo largo del mes. Según los datos que recopila y publica ETFGI, estas cifras supone romper el máximo alcanzado en agosto de este mismo año, cuando los activos en ETFs europeos se situó en los 2,87 billones de dólares.
Lo más relevante de las cifras publicadas por ETFGI es que el patrimonio acumulado en lo que va de año experimentó un crecimiento del 32,6%, pasando de 2,27 billones de dólares a finales de 2024 a los 3,01 billones de setiembre. Además de la revalorización que ha presentado el mercado, la realidad es que los flujos a este tipo de vehículo siguen siendo sustanciales. Según explican desde ETFGI, «las entradas netas en lo que va de año, que ascienden a 290.920 millones de dólares, son las más altas jamás registradas, superando los máximos anteriores de 176.240 millones de dólares en 2024 y 154.020 millones de dólares en 2021″. De hecho, septiembre es el 36º mes consecutivo de entradas netas en los ETF europeos.
El movimiento de los flujos
Durante el mes de septiembre, los ETFs en Europa registraron entradas netas por valor de 49.930 millones de dólares. Sobre cómo se distribuyeron estos flujos, desde ETFGI apuntan que los vehículos de renta variable lideraron el camino con 33.180 millones en entradas netas durante el mes, lo que elevó las entradas en lo que va de año a 196.330 millones, muy por encima de los 122 270 millones de dólares recaudados durante el mismo periodo en 2024. En el caso de los ETFs de renta fija, estos atrajeron 4.440 millones de dólares en septiembre, lo que elevó las entradas en lo que va de año a 48.510 millones, ligeramente por encima de los 48.200 millones registrados a finales de septiembre de 2024.
También fueron significativos los flujos a ETFs de materias primas, que registraron entradas netas por valor de 5,340 millones de dólares durante el mes, lo que elevó las entradas en lo que va de año a 15.810 millones, «un cambio significativo con respecto a las salidas netas de 4900 millones de dólares registradas durante el mismo periodo de 2024», apuntan desde ETFGI. Por último, los ETFs activos recaudaron 5.820 millones de dólares en septiembre, con entradas acumuladas en lo que va de año que alcanzaron los 27.030 millones de dólares, más del doble de los 10.710 millones de dólares recaudados en este mismo periodo de 2024.
Las entradas sustanciales pueden atribuirse a los 20 principales ETF por activos netos nuevos, que en conjunto recaudaron 22 520 millones de dólares en septiembre. El SPDR Bloomberg 1-5 Year U.S. Corporate Bond UCITS ETF (Acc) (SPP5 GY) recaudó 4980 millones de dólares, la mayor entrada neta individual.
A la hora de hablar de las gestoras que lideran esta tendencia, destaca que iShares sigue siendo el proveedor líder en Europa, con activos bajo gestión por un total de 1,23 billones de dólares, lo que representa una cuota de mercado del 40,8%. Por su parte, Amundi ETF ocupa el segundo lugar con 368.490 millones de dólares (12,2% de cuota de mercado), seguido de Xtrackers con 317.270 millones de dólares (10,5 % de cuota de mercado). En conjunto, los tres principales proveedores de entre 133 representan el 63,5% del total de activos del sector de los ETF en Europa, mientras que cada uno de los 130 proveedores restantes tiene una cuota de mercado inferior al 8%.
A finales de septiembre, el sector de los ETFs en Europa contaba con 3413 productos, con 14.341 cotizaciones, de 133 proveedores que cotizan en 29 bolsas de 24 países.
Foto cedidaMichael Trihy, CFA, como Head of Portfolio Management de Wellington Management
Wellington Management busca ampliar sus capacidades de inversión privada en el mercado de los fondos evergreen, para lo cual ha fichado a Michael Trihy como Head of Portfolio Management, Venture Growth Evergreen, Private Investments. Desde este cargo, dirigirá la expansión de las capacidades de inversión privada permanente de Wellington para clientes de patrimonio privado y gestionará la construcción de carteras y la asignación de capital en inversiones directas, venture, secundarios y en fondos seleccionados.
Trihy se une a Wellington tras 15 años de experiencia en private equity y gestión de activos. Recientemente, ha sido director y gestor de carteras en Bow River Capital, donde contribuyó a ampliar su plataforma de mercados privados evergreen, al tiempo que supervisaba la gestión del fondo en coinversiones, secundarios e inversiones en fondos primarios. Anteriormente, trabajó como gestor de carteras en Partners Group, donde supervisaba la construcción de carteras y la asignación de activos para productos evergreen y cuentas separadas personalizadas. También ha trabajado en Red Rocks Capital y FirstBank.
“Michael aporta una sólida trayectoria en la gestión de carteras y un profundo conocimiento de los canales de patrimonio privado, lo que lo convierte en una valiosa incorporación a nuestro equipo de inversiones privadas. A medida que crece la demanda de acceso a los mercados privados y surgen fondos perpetuos como alternativas flexibles a las estructuras tradicionales, su experiencia será fundamental para ampliar nuestras capacidades de inversión y ofrecer soluciones innovadoras a nuestros clientes”, ha destacado Michelle L. Hunter, directora de Inversiones Privadas de Wellington Management.
Por sup arte, Michael Trihy, director de gestión de carteras, Venture Growth Evergreen, Private Investments, Wellington Management, ha declarado: “Los inversores privados siguen sin asignar una parte significativa de sus activos a los mercados privados, especialmente en segmentos como el venture capital y el growth equity. Estoy muy ilusionado por incorporarme a Wellington para contribuir a su misión de ofrecer soluciones de inversión diferenciadas a los clientes. Me atrajo no solo la plataforma de inversión privada de Wellington, sino también la profunda experiencia de la empresa en los mercados públicos y privados, su red global y su capacidad de investigación, un entorno ideal para la colaboración y la innovación”.
La plataforma de inversión privada de Wellington Management gestiona más de 9.700 millones de dólares en activos bajo gestión e invierte en todo el mundo en venture capital, crédito privado, real estate privado y en múltiples fases, habiendo realizado 302 inversiones en nueve áreas sectoriales específicas.
LinkedInJuan Carlos Tassara, socio fundador de Core Capital.
Miami ofrece “oportunidades significativas en el segmento de condominios para la venta” a inversores latinoamericanos que buscan preservación de capital y rentas en dólares, y no pesa sobre la ciudad una amenaza de burbuja inmobiliaria, tal como señalan algunos informes, sino que los precios suben porque “la oferta no logra satisfacer la demanda estructural de vivienda”, le dijo en una entrevista a Funds Society Juan Carlos Tassara, oriundo de Perú y socio fundador de Core Capital, sociedad administradora de fondos de inversión inmobiliaria.
El capital peruano continúa consolidando su presencia en el mercado real estate de Estados Unidos, sobre todo en el Sur de Florida, impulsado por la búsqueda de estabilidad y diversificación en medio de la incertidumbre política que sacude al país andino. Tassara aseguró que más del 60% del capital de Perú gestionado por su fondo ya está invertido en Estados Unidos y que la proporción “sigue aumentando año tras año”.
Desde 2005, el ejecutivo es también socio fundador y director de Grupo Edifica, empresa de desarrollos de vivienda en Perú que se expandió luego a Estados Unidos. A nivel internacional, es socio de North Development, compañía dedicada al desarrollo de proyectos inmobiliarios en Miami.
Esta última firma anunció a mediados de septiembre de 2025 que se aseguró un financiamiento combinado de 220 millones de dólares en C-PACE (Commercial Property Clean Assessed Energy) y un préstamo hipotecario para la construcción del proyecto Domus Brickell Center. Core Capital aportó 40 millones de dólares adicionales.
Este financiamiento constituye el mayor préstamo de construcción C-PACE desde cero en el sur de Florida hasta la fecha, y permitirá al equipo implementar características energéticamente eficientes y resilientes que establecerán un nuevo estándar para el desarrollo residencial de lujo en Brickell, según un comunicado de la empresa.
En la entrevista, Tassara desglosó que Core Capital administra distintos fondos con expectativas de rentabilidad variables según el perfil y la región del proyecto. Por ejemplo, el Fondo Edifica Global (FEG) invierte en proyectos inmobiliarios en Miami (Brickell) y apunta a rendimientos anualizados entre 13% y 17% en dólares (netos de comisiones) para inversionistas Clase E.
Core Capital mantiene un fuerte enfoque en deuda privada inmobiliaria, aunque también gestiona fondos diversificados que combinan deuda, private equity y otras clases de activos. Su modelo busca generar rendimientos atractivos mediante préstamos estructurados a desarrollos inmobiliarios respaldados por la experiencia del grupo.
Crisis política permanente e inversiones offshore
“Nuestra base de inversionistas entiende que, en un entorno de incertidumbre, diversificar en dólares y en mercados sólidos es una decisión estratégica, no coyuntural”, explicó el ejecutivo.
Tras la destitución del presidente de Perú Pedro Castillo a fines de 2022, el país inició una crisis política que algunos analistas consideran hoy “permanente”. Esta situación derivó en una salida de capitales superior a los 22.000 millones de dólares entre 2021 y 2024, equivalente al 9% de su PIB. “Una parte importante de esos fondos migró hacia Estados Unidos -continuó Tassara-, donde los inversionistas encontraron seguridad jurídica, estabilidad macroeconómica y oportunidades competitivas en el sector inmobiliario”.
“A través de Core Capital hemos canalizado directamente esta tendencia: más de 1.000 inversionistas peruanos participan en nuestros fondos, y más del 60% del capital peruano que gestionamos está invertido en proyectos estadounidenses, principalmente en el sur de Florida. Este interés se profundiza año tras año, con inversionistas que buscan preservar su capital y generar ingresos en dólares”, describió.
A juzgar por Tassara, el apetito del inversor peruano en activos offshore se mantiene en expansión y Estados Unidos sigue siendo el principal destino. “Aunque algunos consideran alternativas en Europa o Centroamérica, la mayoría continúa viendo a Estados Unidos como un ‘puerto seguro’ frente a la volatilidad regional gracias a su combinación de seguridad, liquidez y accesibilidad”, indicó.
Miami, epicentro de oportunidades
Florida, y en particular Miami, sigue siendo el eje principal de inversión para North Development y Core Capital. Actualmente, la firma tiene dos nuevos proyectos en desarrollo y evalúa oportunidades residenciales orientadas tanto al alquiler a corto como a largo plazo.
Lejos de temer una sobreoferta, Tassara sostiene que el mercado continúa sólido: Florida recibe anualmente más de 250.000 nuevos residentes, además de un crecimiento poblacional natural de 120.000 personas, mientras los desarrollos tardan entre 4 y 5 años en completarse, lo que dificulta que los desarrolladores mantengan el ritmo del crecimiento poblacional. En su opinión, esta dinámica mantiene la demanda estructural insatisfecha y sostiene los precios al alza.
Tassara identifica oportunidades especialmente en el segmento de condominios orientados a inversionistas latinoamericanos que buscan preservación de capital y rentas en dólares. El ejecutivo hace frente a esta demanda mediante la integración vertical de sus tres unidades clave: North Development: desarrollo y ejecución de proyectos; Core Capital: estructuración y fondeo; y North Management: gestión operativa y hotelera.
Foto cedidaPhilippe Lopategui, director ejecutivo de Lumyna
MidOcean Credit Partners, una gestora de crédito estadounidense con casi dos décadas de experiencia, y Lumyna Investments, parte de Generali Investments, han anunciado el lanzamiento del fondo Lumyna – MidOcean Absolute Return Credit UCITS Fund, una estrategia de alto rendimiento a cortoplazo y de gestiónactiva. Esta estrategia está diseñada para proporcionar una revalorización del capital a lo largo de los ciclos del mercado.
El fondo UCITS, con sede en Luxemburgo, combina la experiencia de MidOcean en investigacióncrediticia con las capacidades líderes de Lumyna en estructuración y distribución de fondos alternativos. La estrategia tiene como objetivo obtener rentabilidades ajustadas al riesgo atractivos, centrándose en bonos de alto rendimiento a corto plazo, complementados con oportunidades de valor relativo y coberturas tácticas. Con una duración neta típica de 0 a 1,5 años y negociación diaria, el Fondo ofrece a los inversores una solución diferenciada que captura ingresos al tiempo que reduce la dependencia de las exposiciones beta tradicionales.
«Creemos que el segmento de corta duración del mercado de alto rendimiento representa una de las áreas más atractivas de la inversión crediticia en la actualidad, ya que ofrece una combinación poco habitual de rendimientos atractivos y características defensivas que equilibran el riesgo y la rentabilidad. Nuestro enfoque busca aprovechar las ineficiencias persistentes en este ámbito, equilibrando la selección de bonos de alta convicción con operaciones de valor relativo y una gestión activa del riesgo. El resultado es una estrategia que tiene como objetivo ofrecer rentabilidades robustas y estables en cualquier coyuntura dentro de las carteras institucionales», afirma Ryan Dean, director general y codirector de crédito líquido de MidOcean.
Por su parte, Philippe Lopategui, director ejecutivo de Lumyna, añadió: «Esta asociación con MidOcean refleja nuestro compromiso de ampliar la plataforma UCITS de Lumyna con nuevas estrategias atractivas. MARC ofrece a los inversores una estrategia crediticia de alta convicción diseñada para los mercados actuales, más volátiles y fragmentados, que combina liquidez diaria, gestión disciplinada del riesgo y la dilatada experiencia de MidOcean».
Paul Holmes, director de distribución de Lumyna, comentó: «Los inversores buscan cada vez más soluciones que puedan generar ingresos sin depender excesivamente de la duración o del beta general del mercado. El fondo Lumyna – MidOcean Absolute Return Credit UCITS Fund responde a esta demanda ofreciendo una estrategia centrada y de calidad institucional que puede servir para diversificar la cartera».
El rendimiento de un fondo, o el rendimiento del fondo en comparación con un índice de referencia, suele ser el factor más común que los inversionistas utilizan para evaluar el desempeño de un fondo. Sin embargo, los inversionistas más sofisticados emplean un conjunto de métricas que revelan lo que realmente ocurre bajo la superficie del rendimiento del fondo.
Active share: midiendo la gestión activa
La ratio de active share mide el porcentaje de la cartera de un fondo que difiere de su índice de referencia. Un fondo con una participación activa baja se parece mucho a un fondo índice o ETF, y los inversionistas podrían replicar fácilmente una gran parte del fondo utilizando uno de estos vehículos a un coste mucho menor. El active share revela si un gestor está realmente implementando su estrategia declarada o simplemente siguiendo de cerca el índice de referencia.
FirstRate Data, un proveedor de datos financieros, señala que los fondos con estrategias de renta variable activas suelen tener ratios de active share del 70-90%. Los fondos que dicen gestionar activamente pero tienen una participación activa inferior al 60% suelen cobrar comisiones de gestión activa por un rendimiento similar al del índice de referencia. Por el contrario, una participación activa extremadamente alta (superior al 95%) puede indicar un riesgo de concentración excesivo.
Volatilidad del tracking error: comprender el perfil de riesgo de un fondo
El tracking error es la desviación estándar del rendimiento de un fondo en relación con el rendimiento de su índice de referencia. A diferencia de la participación activa, que muestra la diferencia de rentabilidad del fondo, el error de seguimiento refleja la desviación en términos de volatilidad. La volatilidad es un indicador común del riesgo de la cartera, por lo que, ceteris paribus, un fondo con menor volatilidad es preferible.
Los fondos de renta variable activos suelen operar con un error de seguimiento entre el 4% y el 8%. Niveles más bajos suelen indicar una gestión cercana a un índice, mientras que niveles más altos pueden señalar una toma de riesgos excesiva.
La volatilidad a menudo se combina con la rentabilidad del fondo para calcular la ratio de Sharpe, que mide las unidades de rentabilidad por unidad de volatilidad. Así, un fondo que obtiene un 20% de rentabilidad con una volatilidad del 15% tendría un ratio de Sharpe de 1,33 (20/15). Esto haría que los rendimientos ajustados al riesgo del fondo fueran superiores a los de un fondo con un 22% de rentabilidad y una volatilidad del 18%, cuyo ratio de Sharpe sería 1,22. Quantquoteseñala que los fondos de mejor categoría tienen una ratio de Sharpe superior a 2, mientras que un Sharpe por debajo de 1 suele ser indicativo de un rendimiento pobre del fondo.
Impulso de flujos de activos: interpretando las señales del mercado
El flujo de activos representa la dirección, magnitud y consistencia de los movimientos de capital hacia o desde un fondo. Los flujos de activos reflejan el juicio colectivo del mercado de inversiones. En general, un flujo lento y persistente hacia o desde un fondo puede indicar la popularidad de la estrategia del fondo; por ejemplo, los fondos centrados en el valor han experimentado, como grupo, un flujo constante de salida desde 2010. Sin embargo, una aceleración repentina o drástica de los flujos de salida puede señalar un problema inminente en el fondo. Por el contrario, una entrada repentina de capital puede predecir un descenso en los rendimientos, ya que el fondo podría tener dificultades para ampliar el tamaño de sus inversiones.
Eficiencia de la ratio de gastos: valor más allá de la cifra principal
Aunque las ratios de gastos se informan ampliamente, lo que importa no es tanto la ratio absoluta, sino si esos gastos se traducen en creación de valor. Una ratio de gastos del 1,5 % puede ser razonable para una estrategia especializada en mercados emergentes, con un buen rendimiento y baja correlación con el mercado general, mientras que un ratio del 1,0 % podría ser excesivo para un fondo de crecimiento de gran capitalización que sigue de cerca al índice de referencia.
Las comisiones son un lastre persistente para el rendimiento a largo plazo y se acumulan con el tiempo. Sin embargo, elegir ciegamente la opción más barata suele conducir a resultados subóptimos. La clave está en entender si las comisiones más altas financian actividades que realmente añaden valor, como un análisis mejor, gestión de riesgos o acceso a oportunidades únicas.
Es importante considerar el coste total de la propiedad del fondo, que incluye los costes de transacción y la eficiencia fiscal, y no solo la ratio de gastos principal. Los fondos deberían mantener ratios de gastos estables a lo largo del tiempo, que normalmente deberían disminuir a medida que aumentan los activos bajo gestión y el gestor del fondo puede trasladar parte de los beneficios de escala a los inversionistas.
Desviación de estilo: manteniéndose fiel a la estrategia de inversión
La desviación de estilo ocurre cuando un fondo se aleja de su mandato de inversión declarado, generalmente como respuesta a estar en una categoría de inversión poco popular. Por ejemplo, un fondo de valor puede desplazarse gradualmente hacia una estrategia centrada en crecimiento para aumentar los rendimientos y atraer más capital. Normalmente, el fondo señalará esto reformulando su tesis de inversión al redefinir algunas de las definiciones centrales de sus inversiones objetivo, de modo que lo que constituye una acción de valor o una gran capitalización puede cambiar.
La desviación de estilo puede socavar la construcción de la cartera y la gestión del riesgo, ya que un inversionista suele tener varias estrategias de fondos dentro de una misma cartera. Cuando los fondos cambian sus características sin previo aviso, los inversionistas pueden asumir, sin saberlo, exposiciones no deseadas o aumentar su riesgo de concentración a medida que más fondos se agrupan en temáticas de inversión populares.
Para protegerse contra esto, es importante monitorizar las características clave del estilo a lo largo del tiempo, como la capitalización bursátil media, la ponderación por sectores, las ratios fundamentales (PER, valor en libros, ROE) y la exposición geográfica de cada fondo. Además, el seguimiento de estos factores de manera agregada a nivel de fondo puede proporcionar información sobre las concentraciones generales de la cartera y un posible desplazamiento gradual en las estrategias de los fondos componentes.
Tribuna de opinión de Ryan Maxwell, director de análisis en FirstRate Data
Foto cedidaBruno Patain, jefe de España y Portugal en Eurizon.
La inversión pasiva, especialmente a través de ETFs y fondos indexados, ha transformado la forma en que los inversores acceden a los mercados financieros en la última década. Según Bruno Patain, jefe de España y Portugal en Eurizon, el volumen global gestionado en estos instrumentos ha consolidado su papel como herramientas clave para construir carteras diversificadas, líquidas y eficientes en costes.
Su capacidad para replicar índices con transparencia y precisión ha convertido a los ETFs y fondos indexados en pilares tanto para inversores institucionales como minoristas, representando, según dice Patain, la columna vertebral de la asignación de activos moderna.
No obstante, a medida que los mercados evolucionan, también lo hacen las necesidades de los inversores. En un entorno marcado por inflación, divergencia de políticas monetarias, tensiones geopolíticas y creciente concentración de los índices, cada vez más gestores buscan complementar posiciones pasivas con decisiones activas, sin renunciar a las ventajas fundamentales de la indexación. Para Patain, no se trata de elegir entre gestión pasiva o activa, sino de capturar los beneficios de ambos enfoques cuando se aplican de manera conjunta.
Eficiencia versus interpretación
Un ETF o fondo indexado replica un índice con precisión, pero no interpreta las condiciones económicas ni discrimina entre compañías según sus fundamentales. Según Patain, “los ETFs y fondos indexados son esenciales por su eficiencia y transparencia. Pero en determinadas fases, contar con capacidad de análisis e interpretación ayuda a detectar riesgos o matices que el índice aún no refleja. Ahí es donde la visión activa añade una capa extra”.
Concentración de los índices y necesidad de reequilibrio
Hoy, un pequeño grupo de compañías domina los principales índices globales. Según Bloomberg, en junio de 2025, las siete mayores empresas del S&P 500 representaban más del 34% del índice. Patain afirma que esta concentración, aunque impulsora de rentabilidad, amplifica el riesgo de exposición simultánea, por lo que muchos inversores aplican ajustes activos sobre un núcleo pasivo para diversificar más allá de las mega-caps y reducir correlaciones excesivas.
Pasividad no significa inacción
La inversión pasiva no responde de inmediato a shocks económicos o geopolíticos. Según el responsable de la gestora, muchas estrategias combinan un núcleo indexado con coberturas activas y flexibles, como rotaciones geográficas, cambios en la duración o sesgos defensivos, manteniendo la resiliencia de la cartera sin alterar su estructura central.
El coste importa, pero no lo es todo
Según un estudio de Morningstar citado por Eurizon AM, los fondos pasivos captaron más de 1,1 billones de dólares en entradas netas en los últimos dos años, mientras que los fondos activos registraron salidas cercanas a 1,4 billones. El 20% más barato de los fondos pasivos absorbió el 90% de todos los flujos. Sin embargo, según dice Eurizon AM, el coste es solo una parte de la ecuación; la eficacia de una estrategia también depende del perfil del inversor, su horizonte temporal y la necesidad de flexibilidad, combinando núcleos indexados con soluciones activas selectivas.
No todos los objetivos encajan en un índice amplio
Los índices reflejan el mercado, pero no siempre se alinean con los objetivos individuales de los inversores. Según Patain, quienes buscan rentas, aplican filtros ASG o se centran en temáticas específicas requieren soluciones más a medida. El auge de ETFs activos, fondos indexados con filtros ASG y estrategias híbridas refleja el interés por enfoques que combinan eficiencia de costes con objetivos personales.
En conclusión, Patain defiende que los ETFs y fondos indexados siguen siendo pilares fundamentales de la construcción de carteras modernas. Sin embargo, el entorno fragmentado actual impulsa a los inversores a complementar la disciplina pasiva con visión activa, añadiendo agilidad, control y contexto. La tendencia apunta a un modelo complementario, donde eficiencia e interpretación no se excluyen, sino que funcionan mejor juntas.
Antes de que una recesión aparezca en los informes económicos se manifiesta en las decisiones de consumo diarias. Se cancelan con más frecuencia las citas en la peluquería, los almuerzos preparados en casa sustituyen a los pedidos en restaurantes, los deseos de bolsos de diseño se reemplazan por un pintalabios de 30 dólares. La teoría del índice del pintalabios, acuñada por Leonard Lauder, presidente de Estée Lauder, durante la crisis financiera de 2008, sugiere que en tiempos difíciles los consumidores recurren a pequeños lujos asequibles, como los cosméticos, para obtener consuelo emocional sin un gran compromiso económico.
Las pruebas históricas sobre las ventas de cosméticos parecían validar este patrón, desde la Gran Depresión hasta recesiones más recientes. Sin embargo, los últimos resultados empresariales sugieren que este indicador, antes fiable, podría haber dejado de funcionar. ¿Por qué pintalabios? Durante las recesiones económicas, los economistas analizan los patrones de gasto de los consumidores en busca de indicadores tempranos. Entre estas señales, la industria de la belleza ofrece un indicador curioso que podría anticipar la dirección de la economía en el próximo año. Este cambio en el comportamiento del consumidor también se ha observado más allá de la cosmética.
Tras la crisis financiera de 2008, el llamado “recession hair” se convirtió en un indicador reconocido, ya que los clientes posponían los cortes y peinados habituales para ahorrar dinero. Un patrón comparable está surgiendo hoy en día, con peluqueros de todo Estados Unidos señalando un aumento en la demanda de estilos de bajo mantenimiento,
La teoría del índice del pintalabios, acuñada por Leonard Lauder, presidente de Estée Lauder, durante la crisis financiera de 2008, sugiere que en tiempos difíciles los consumidores recurren a pequeños lujos asequibles
como las mechas conocidas como “recession blonde”, que reducen la frecuencia y el coste de las visitas al salón. Aunque los economistas todavía debaten la validez de la teoría, JP Morgan Wealth Management sostiene que la idea de Lauder tiene algo de cierto: con la inflación haciendo que los grandes gastos, como viviendas y coches, sean más difíciles de afrontar, muchos consumidores recurren a pequeños artículos de lujo, como un volumen de labios Dior de 30 dólares, para satisfacer su impulso consumista. JP Morgan también señala que, durante periodos de inflación, los aumentos de precio en los lujos de bajo coste resultan más aceptables que los de productos de mayor valor. La idea detrás del índice del pintalabios surgió justo cuando la economía estadounidense se encaminaba hacia una recesión.
Google Trends mostró que las búsquedas de “pintalabios” alcanzaron su punto máximo en septiembre de 2008. Tendencias similares se han observado en varias crisis económicas. A principios de los años 20 y durante la Gran Depresión, los minoristas de productos de belleza experimentaron incrementos inesperados en sus ventas. El periodo posterior a la pandemia introdujo una dinámica diferente, pero el concepto subyacente permaneció. Forbes informó que las ventas de productos labiales cayeron un 15 % en 2020, un desvío de lo que el índice del pintalabios habría predicho. Los analistas atribuyeron esta caída a un efecto de sustitución, ya que los consumidores priorizaron los productos de cuidado de la piel frente a los cosméticos tradicionales.
El sector de la belleza en general experimentó una expansión notable durante este periodo. El cuidado de la piel registró un crecimiento sin precedentes, y el capital de inversión fluyó con fuerza hacia las empresas de belleza. En 2021, las inversiones en compañías de belleza alcanzaron los 1.500 millones de dólares, 600 millones más que en 2019. Las empresas rara vez divulgan datos detallados de ventas trimestrales de pintalabios. Sin embargo, los datos recientes sugieren que los productos de belleza podrían haber dejado de ser el indicador económico que una vez fueron. El primer trimestre de 2025 presentó una serie de resultados contundentes en toda la industria de la belleza. Coty experimentó una caída de ventas del 6 %, Estée Lauder, hogar de Clinique y MAC, registró un descenso del 10 % en ventas netas, y L’Oréal logró solo un modesto crecimiento del 3,5 %, un retroceso frente a sus habituales ganancias de dos dígitos. La división de perfumes y cosmética de LVMH se mantuvo estable, y su filial Sephora no logró crecer.
En todos los casos, las empresas anunciaron despidos y redujeron sus previsiones. Los directivos atribuyeron la desaceleración a la reducción de inventarios por parte de los minoristas, la incertidumbre económica y posibles impactos arancelarios durante las llamadas de resultados.
La evolución del mercado de la belleza
El mercado de la belleza se puede dividir en cuatro segmentos principales: cuidado de la piel, cuidado del cabello, cosmética y fragancias. Se estima que el mercado mundial de belleza y cuidado personal generará 677.000 millones de dólares en ingresos en 2025. El cuidado de la piel domina con un 42 % de la cuota de mercado, superando la combinación de cuidado del cabello (22 %) y maquillaje (17 %).
Pero para recargas y compras habituales, los consumidores suelen recurrir a los mercados en línea, atraídos por descuentos agresivos y envíos rápidos. Estas estrategias pueden impulsar las ventas, pero pueden dañar la imagen de la marca y reducir los márgenes tanto para las marcas como para los minoristas. En lugar de competir únicamente en velocidad de entrega o precios promocionales, los directivos del sector de la belleza deberían priorizar la creación de experiencias de compra que aborden de manera genuina las necesidades y preferencias de sus clientes.
Las soluciones tecnológicas avanzadas, incluidos asistentes de compra personales impulsados por IA, ofrecen oportunidades para mejorar la experiencia digital. La belleza es una categoría profundamente emocional, especialmente para marcas que tratan preocupaciones específicas como el acné o la caída del cabello, o aquellas con una identidad visual clara y formulaciones distintivas.
Las excepciones
En medio de este malestar generalizado en la industria, algunos segmentos y empresas están desafiando la tendencia general. La belleza coreana representa uno de los segmentos de mayor crecimiento de la industria, con un mercado global de K-beauty que se espera crezca a una tasa compuesta anual (CAGR) del 11,3 % entre 2025 y 2033, alcanzando los 38.290 millones de dólares en 2033 desde los 16.260 millones de dólares en 2025. Este éxito se refleja especialmente en Estados Unidos, donde Corea del Sur se convirtió en el principal exportador de cosméticos en 2024, superando a Francia.
Este triunfo se debe en gran medida al énfasis de las marcas coreanas en ingredientes naturales, rutinas de múltiples pasos y formulaciones innovadoras que han captado la imaginación de los consumidores a nivel mundial, especialmente entre los públicos jóvenes que buscan alternativas efectivas y asequibles a los productos de belleza occidentales tradicionales. Los propios consumidores coreanos son muy conocedores y exigentes, demandando productos de alta calidad a precios bajos. Una característica distintiva del segmento es su packaging llamativo y divertido, que a menudo incluye colores vibrantes, personajes animales y un tono menos científico. Este elemento de “skin-tertainment”, como lo denominan los investigadores de mercado de Mintel, aporta un sentido de diversión y novedad que atrae a las audiencias de la Generación Z y los millennials.
Algunos segmentos y empresas están desafiando la tendencia general. La belleza coreana representa uno de los segmentos de mayor crecimiento de la industria
Los principales actores están viendo resultados sólidos gracias a este impulso global. Amorepacific, propietario de marcas como Laneige, Aestura y Sulwhasoo, se expandió agresivamente por América del Norte y Europa. En el primer trimestre de 2025, el grupo reportó un aumento del 15,7 % en ingresos y un salto del 55,2 % en beneficio operativo interanual, impulsado en gran medida por un aumento del 40 % en ventas en el extranjero. Las acciones de la compañía han registrado un rendimiento del 31 % en lo que va de año. Otro referente destacado en el sector de la belleza es e.l.f. Beauty, que causó sensación en mayo con la adquisición histórica de 1.000 millones de dólares de la marca de cuidado de la piel Rhode de Hailey Bieber.
Rhode, lanzada en 2022, ya había alcanzado 212 millones de dólares en ventas netas el año pasado y fue la marca de cuidado de la piel con mayor valor en medios ganados en 2024, con un crecimiento interanual del 367 %. e.l.f. había enfrentado dificultades a principios de año, con caídas en el precio de sus acciones y en los volúmenes de negociación debido a resultados más débiles y previsiones reducidas. La situación cambió rápidamente: tras la operación con Rhode y un sólido informe del cuarto trimestre, las acciones se dispararon un 24 % en un día y subieron casi un 70 % en el mes.
La adquisición de Rhode ejemplifica cómo apostar por las marcas correctas, con historias auténticas, innovación genuina y propuestas de valor claras, puede todavía capturar una participación de mercado significativa incluso en condiciones difíciles.
La autenticidad e innovación están superando a las condiciones económicas
El mercado de la belleza actual revela una verdad sencilla: autenticidad más innovación más atractivo dirigido equivale a crecimiento, independientemente de las condiciones económicas generales. El ascenso meteórico de la K-beauty y el rápido crecimiento de Rhode demuestran que, en un mercado sobresaturado, las marcas que triunfarán serán aquellas que ofrezcan propuestas de valor claras, en lugar de limitarse a ser alternativas asequibles.
Tribuna de Charles-Henry Monchau, Chief Investment Officer de Syz Bank.
Estamos viviendo una “nueva dinámica” macroeconómica y geopolítica, con unos niveles de volatilidad no vistos desde la IIGM debido a las decisiones “impredecibles” del presidente Donald Trump, según describió Ralph Elder, director general de BNY Investments para Iberia & América Latina. La compañía, que se precia de tener en palabras de Elder “una visión privilegiada” en términos de flujos, dado que el experto apuntó a que 1 de cada 5 dólares invertidos a nivel mundial pasa de alguna manera por BNY, celebró recientemente en sus oficinas de Madrid un foro de inversión en el que participaron varios de sus especialistas en macroeconomía, renta fija y renta variable para dibujar el escenario con el que están trabajando en la firma de cara a los próximos meses. De ellos, Sebastian Vismara, director de Análisis Económico en el BNY Institute, abordó el entorno macroeconómico desde tres ángulos: crecimiento, inflación y políticamonetaria.
El rompecabezas del crecimiento
El análisis de Vismara se enfocó en primer lugar en la trayectoria del crecimiento, que calificó como “un puzzle”. Empezando por EE.UU., explicó que la economía se ha visto sometida a un “shock masivo” provocado por los aranceles, aunque explicó que el impacto de los mismos aún no ha sido totalmente recogido, por lo que podríamos esperar más por ver. Además, explicó que la economía norteamericana todavía presentaba cierta inercia positiva del buen momento vivido en 2024 que también estaba influyendo sobre los datos macro.
De aquí en adelante, para el experto resulta clave vigilar la evolución de varios indicadores para obtener una idea más precisa de hacia dónde se dirige EE.UU.: primero, en términos de capex: “Hay mucha inversión en IA que está ayudando a la economía a mantener el ritmo”, indicó.
El segundo dato a tener en cuenta es el de las nóminas: en un entorno de recesión, recuerda el experto, deberíamos ver una reducción de las nóminas, un incremento del desempleo y una caída de los beneficios. En cambio, si bien constata un crecimiento negativo de las nóminas, “debido a la cautela que han tenido las compañías, no solo no están despidiendo, sino que sus beneficios están mejorando”.
De cara a 2026, el experto anticipa más bajadas de los tipos de interés y estímulos fiscales, cuya combinación podría tener un impacto positivo sobre el crecimiento del PIB estadounidense “aunque el corto plazo seguirá siendo desafiante por la incertidumbre”.
Más altibajos en la inflación
En lo referente a la evolución de los precios, el punto de vista de Vismara es que las economías llevan sufriendo una serie de secuencias de shocks inflacionarios muy seguidos desde el Covid, y que esta tendencia de “cambios de humor” se mantendrá en el futuro, con el 2% como referencia de dónde la inflación debería tocar suelo.
Dicho esto, el experto se fija en el componente de servicios dentro de la inflación subyacente, por considerar que supone “el mejor predictor de las tendencias inflacionarias a largo plazo”. Lo que constata es que este componente sigue manteniéndose de forma consistente por encima del 2% en EE.UU., ReinoUnido y la UniónEuropea, y que además “no apunta a la baja de forma convincente”, por lo que anticipa “más sorpresas negativas de la inflación” de aquí en adelante, particularmente en EE.UU. A la larga, el experto anticipa que eventualmente convergerán la oferta (medida por el Supply Shock Index) y los precios (medidos por el Inflation Surprise Index).
Otra de las tendencias inflacionarias donde Vismara constata cambios desde la pandemia es en la fijación de precios, dado que observa que ahora las compañías han optado por modificar sus precios al alza “con más frecuencia” y que, de hecho, en EE.UU. incluso las compañías cuyos negocios no se ven afectados por los aranceles están aprovechando este entorno para elevar sus precios al consumo igualmente.
Divergencia monetaria
¿Cómo pueden actuar los bancos centrales en este entorno desafiante? En primer lugar, el director de Análisis Económico explica que hasta ahora la Fed “no ha estado haciendo nada, que es lo lógico durante un shock de oferta”. Además, constata que se han corregido las expectativas del consenso, que previamente anticipaban recortes hasta por debajo del nivel del 3% en los tipos de interés. “Es demasiada relajación”, según Vismara, que explica que los rendimientos de los bonos estadounidenses se encuentran “muy por debajo de sus fundamentales”, lo que implicará en su opinión “riesgos al alza”.
Al otro lado del charco, el experto considera que el BCE “no está lejos de su fair value”, mientras que en Reino Unido las tires están por debajo de la media histórica.
En conjunto, y por todo lo ya expuesto, el experto estima que “las partes cíclicas de la economía mundial deberían tener mejor aspecto en 2026”, un año en el que cree que la inflación seguirá siendo resistente y que podría producirse una reaceleración del crecimiento.
¿Cómo se traduce este entorno para la renta fija? El pronóstico de Vismara es positivo: “Finalmente, el cupón está de vuelta”, resume. El experto anticipa que el rendimiento de los treasuries “no están lejos” de la tasa de crecimiento del PIB del país, por lo que predice que se mantendrán tipos reales positivos y que estos serán elevados, un factor positivo para los inversores en renta fija. Al mismo tiempo, espera más volatilidad procedente de la inflación y del lado fiscal, por lo que “los tipos mantendrán un comportamiento diferente al de los últimos ciclos”. En definitiva, concluye Vismara, “este es un buen entorno para los gestores activos”.