Las gestoras latinoamericanas CMB Activa –ligada a la chilena LarrainVial– y Newfoundland Capital Management anunciaron un nuevo fondo en Uruguay, donde marcaron un hito en el mercado de capitales. Y es que el lanzamiento de su última estrategia, dedicada a la renta variable ligada a infraestructura y energía, fue el primer fondo de su tipo en el país rioplatense, según informaron en un comunicado.
El vehículo, llamado Fideicomiso Financiero Infraestructura Renta Variable CMB-NewF I y administrado por el joint venture INFRAM, permitirá a los inversionistas institucionales uruguayos invertir en proyectos de este tipo en el país, a través de acciones, activos convertibles y deuda subordinada. El plazo del fondo es de 15 años.
La colocación de los certificado de participación –denominados en unidades indexadas (UI)– se realizó en la Bolsa Electrónica de Valores (BEVSA) y la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM) y consiguió compromisos por 100 millones de dólares.
El mercado recogió la operación con una demanda de 2,69 veces lo ofrecido, con órdenes por 1.690 millones de UI (equivalente a 269 millones de dólares).
Según detallaron, la estrategia está dedicada a proyectos que estarán volcados en sectores como transporte vial, portuario, ferroviario, aeroportuario, fluvial y urbano; transmisión y generación de energía; acueductos, agua potable y saneamiento; telecomunicaciones y logística; infraestructura social, entre otros.
Santiago Cat, CEO de INFRAM, indicó en la nota de prensa que “el fideicomiso representa un punto de inflexión para Uruguay, ya que por primera vez los inversionistas institucionales podrán invertir en infraestructura uruguaya de forma diversificada, impulsando el crecimiento, empleo y desarrollo sostenible, con una propuesta que permite aportar liquidez para la rotación y movilización del capital privado hacia nuevos proyectos de infraestructura en el país. Esta estrategia financiera también se alinea con los objetivos del gobierno y políticas públicas de potenciar la inversión en capital físico para acelerar el crecimiento económico”.
“La emisión de este fideicomiso permitirá canalizar fondos hacia proyectos de infraestructura estratégicos para el país, generando empleo y dinamismo económico. Al mismo tiempo, contribuirá a fortalecer y profundizar la diversidad del mercado de capitales uruguayo, innovando en la participación de los inversores”, agregó Agustín Gattás, gerente de Mercados de BEVSA.
La IA lo está revolucionando todo. Y a juzgar por un nuevo informe de la división de análisis y corretaje de renta variable de Evercore, podría provocar un alza del 20% en el índice estadounidense S&P hacia finales de 2026.
El Senior Managing Director de la firma y estratega jefe de renta variable y cuantitativo, Julian Emanuel, hizo la predicción alcista para el mercado de valores de Estados Unidos, por el impulso de la creciente tendencia de la inteligencia artificial (IA).
Según Emanuel, ésta elevará las valoraciones bursátiles y los estándares sociales a niveles sin precedentes. Se espera que el S&P 500 alcance los 7.750 puntos a finales de 2026. El analista destacó que el impacto de la IA ya es evidente en el mercado: hay “una revolución tecnológica que elevará las acciones, los múltiplos y la sociedad a nuevas cotas”, escribió en una nota, según la agencia Bloomberg.
Según Evercore ISI, el impacto de la inteligencia artificial ya ha ayudado a que las ganancias superen las expectativas, incluso en medio de incertidumbres en torno a las tarifas y la política. La firma destacó que el segundo trimestre tuvo un “crecimiento de dos dígitos y amplias sorpresas al alza”, lo que sugiere que las ganancias relacionadas con la IA se están convirtiendo en una característica definitoria del desempeño corporativo.
El mercado de valores de EE.UU. acumula una racha de cuatro meses consecutivos al alza, impulsado por sólidos resultados corporativos y la posibilidad de recortes en las tasas de interés. El repunte fue liderado principalmente por el sector tecnológico, con compañías como NVIDIA, Meta y Microsoft viendo cómo el precio de sus acciones sube al menos un 20% en lo que va del año.
Los estrategas de Evercore ISI reconocieron una amplia gama de resultados para el próximo año, con un escenario alcista en el que el índice alcanzaría los 9.000 puntos y un escenario bajista en el que el indicador caería hasta los 5.000 puntos. Destacaron, además, que la influencia de la IA es más profunda que la de Internet, ya que sus efectos ya se están filtrando en diversos aspectos de la sociedad y la industria, aunque sus aplicaciones aún se encuentran en una fase inicial de aceleración.
Junto con el pronóstico a largo plazo, Evercore ISI también actualizó sus expectativas a corto plazo. Emanuel ahora ve que el S&P 500 terminará este año en 6.250 puntos, que es más bajo que el cierre del último viernes de agosto, de 6.460. La estimación de fin de año está ligeramente por debajo del objetivo promedio de 6.370 entre los estrategas seguidos por Bloomberg.
En general, los objetivos revisados reflejan tanto el optimismo sobre el potencial a largo plazo de la IA como la cautela sobre los riesgos económicos a corto plazo.
El financiamiento venture está pasando por un ajuste, con una leve caída en los montos, una desaceleración en las nuevas inversiones y un contexto de gestores más selectivos. Pero eso no significa que no haya actividad. Es más, según un análisis de la firma estadounidense Carta, el segmento de Software as a Service (SaaS) está brillando en particular, captando el entusiasmo por la inteligencia artificial (IA) que permea los mercados internacionales.
Cifras agregadas de la red de startups de la consultora especializada –alrededor de 4.500 compañías– muestran un levantamiento de capital total de 46.900 millones de dólares en nuevo capital de riesgo durante la primera mitad del año. Esto provino de un total de 2.248 instancias de financiamiento.
Extrapolando esto, indicó la firma, el ritmo de inversiones está un poco más lento que en 2024. Proyectando el dato del período enero-junio para el resto del año, Carta estima que 2025 cerraría con unos 93.800 millones de dólares. Esto se ubica por debajo de los 97.000 millones de dólares que marcaron el año pasado.
Esto sí, esta desaceleración no se ha vivido de la misma forma en todos los rubros que componen el universo de venture capital. SaaS, en particular, ha atraído el interés de los inversionistas.
Los datos de la consultora muestran que las startups con modelo SaaS de su red levantaron 9.700 millones de dólares en nuevo financiamiento durante el segundo trimestre de 2025, superando con creces a las demás industrias. Es más, los últimos dos años, el financiamiento en este rubro ha aumentado un 91%.
Esto, explicó Carta en un reporte, refleja “la explosión de interés en la IA como herramienta, con un potencial transformador para muchas compañías que crean y venden software”.
El único rubro que supera el crecimiento de financiamiento entre junio de 2023 y junio de 2025 es hardware. En ese período, el capital levantado por este tipo de startups saltó un 110%. Esto, agregan, también tendría que ver con la IA: “Probablemente está influenciado por la llegada plena de la IA y los poderosos nuevos chips que se necesitan para entrenar y aplicar los nuevos modelos”.
En contraste, recalca Carta, otros sectores del espacio de startups han experimentado marcadas caídas en su recaudamiento de venture capital en los últimos dos años. Las más dramáticas que han visto en educación (una caída de 88,5% en dos años), energía (84,8%) y consumidor (25%).
Un entorno desafiante
Los buenos resultados de las compañías de software y hardware llegan en un momento donde la liquidez está menos disponible y en que los managers están siendo cada vez más selectivos.
Además de menos capital invertido que el año pasado –de momento–, Carta también destacó que el ritmo de las nuevas inversiones se ha ralentizado “más sustancialmente” desde 2024. El número de negocios en la primera mitad del año, recalcaron, cayó un 10% interanual.
Las cifras de las rondas de capitalización también muestran cierta mella, con un 13% menos rondas de venture en el segundo trimestre. “Esto marca el cuarto segundo trimestre consecutivo en que el número de nuevas inversiones ha caído de forma interanual”, comentó la consultora en su informe.
Eso sí, desde la consultora destaca que, pese a la desaceleración, el total de rondas de financiamiento y el capital total levantado se ha mantenido más o menos consistentemente en los últimos 10 trimestre. Desde el cuarto trimestre de 2022, la mayoría de los trimestres han tenido entre 1.100 y 1.400 nuevas inversiones y han levantado entre 20.000 y 25.000 millones de dólares.
Además, la consultora resalta que las valorizaciones siguen elevándose, al menos en las primeras etapas de desarrollo de las compañías. “En las rondas semilla y A, la valorización mediana fue más alta en el segundo trimestre de lo que ha sido antes. En el último año, la malorización mediana en las rondas primarias de serie A ha aumentado 20%”, comentan.
Para Carta, la combinación de estas dinámicas de financiamiento apunta en una dirección: que la industria del capital de riesgo está cambiando, en los albores de la IA. “Los inversionistas se han vuelto más selectivos en sus inversiones, generando menos deals. Apoyadas por la IA, muchas compañías pueden hacer tanto (o más) con menos financiamiento, reduciendo la necesidad de cheques enormes”, indicaron. Además, agregaron, las valorizaciones al alza sugieren que “los VC creen que muchas de estas startups jóvenes y livianas están perfiladas para un crecimiento explosivo y lucrativo en los próximos años”.
“El cliente offshore es más sofisticado hoy que años atrás; busca reportes a nivel institucional y quiere estructuras más transparentes, pero todavía sigue requeriendo tener acceso a oportunidades únicas en Estados Unidos”, le dijo a Funds Society, en una entrevista exclusiva, Jerry García, co-fundador junto a Chris Gatsch, de Alta Vera Global Capital Advisors, una nueva firma independiente de wealth management con base en Estados Unidos que apunta a perfiles UHNW.
García trabajó cerca de dos décadas en J.P. Morgan, donde conoció a su actual socio, que en ese momento ya acumulaba 10 años de experiencia en Merrill Lynch.
En la charla, también reflexionó sobre una tendencia que se ve con claridad en el mercado: “Estamos en un punto de inflexión interesante. Estoy convencido de que hay un cambio estructural hacia la independencia en la comunidad de asesores”.
Y esbozó, como en un manifiesto, cómo se siente respecto a su propio emprendimiento. “Siempre envidié a quienes amaban lo que hacían y no lo veían como un trabajo. Hoy ya no lo veo como un empleo, sino como una pasión. Apoyar a nuestros clientes es una ambición de vida y disfruto plenamente mi día a día”, señaló.
Más que una RIA
Alta Vera “no es simplemente una RIA”, describió el entrevistado, nacido en Puerto Rico. La empresa ofrece servicios de gestión patrimonial, obtención de capital y asesoramiento estratégico, y fue creada bajo el lema de ofrecer capacidad institucional con una ejecución personalizada, para ayudar a sus clientes a “tomar decisiones complejas en materia de capital y patrimonio, ya sea gestionando el patrimonio generacional, recaudando capital para una nueva empresa o cubriendo riesgos estratégicos, con claridad, coherencia y confianza”, según escribió García en su perfil de Linkedin.
La nueva compañía se asoció con OneSeven para aprovechar su plataforma de marketing, cumplimiento normativo y operaciones, y es parte del ecosistema de Merchant Investment Management. Alta Vera trabaja con familias de alto y ultra alto patrimonio, a menudo con activos en múltiples países; también con emprendedores y dueños de empresas; y con instituciones y family offices que buscan transacciones privadas únicas, estrategias sofisticadas de cobertura u oportunidades de co-inversión. Tiene clientes tanto onshore como offshore.
“Las grandes firmas siguen consolidándose y haciéndose más grandes. Al mismo tiempo, los clientes quieren más independencia y un acceso global flexible. Pero al final del día, lo que más importa siguen siendo la confianza y las relaciones. Las firmas que logren combinar independencia, innovación y escala serán las que prosperen, y esperamos estar a la vanguardia de eso”, vaticinó García.
La idea de fundar una compañía independiente comenzó en sus días en J.P. Morgan, donde lideró equipos tanto en Estados Unidos como en América Latina y fue testigo de la demanda del mercado por soluciones globales, sofisticadas y adaptadas a las necesidades de esas familias. “Dado los conflictos de interés que observaba en el negocio -continuó-, quise crear un entorno en el que esto se hiciera de una manera mucho más independiente y personalizada, estando realmente del mismo lado de la mesa que nuestros clientes”.
“Mi firma y nuestros asesores no representan una marca: representamos al cliente y a sus intereses. No tenemos ninguna presión para empujar un producto o encajar en una caja ajena. Podemos mirar todo el mercado, desde los grandes bancos y custodios, hasta oportunidades de private equity y hedge funds de nicho, y elegir lo que realmente sea mejor para el cliente, no lo que sea mejor para una marca”, reflexionó. “Esa libertad hace que el asesoramiento sea mucho más objetivo y, honestamente, también más personal”, añadió.
La nueva firma fue lanzada en este verano. García aseguró estar en “conversaciones con múltiples asesores y equipos que están sumando miles de millones de dólares en AUMs, estando apenas en una etapa temprana”.
El cliente offshore, cada vez más sofisticado
“En América Latina, la demanda de mover capital offshore sigue creciendo”, indicó García. “Chile, después de la inestabilidad política de los últimos años, es un ejemplo claro. Pero en general, el capital siempre fluye hacia donde están las oportunidades, y Estados Unidos sigue siendo un gran destino para los latinoamericanos”.
Respecto al perfil de los clientes offshore, éstos “suelen ser más sofisticados que hace años -aseguró-. Buscan reportes a nivel institucional, estructuras más transparentes, pero todavía quieren tener acceso a oportunidades únicas en Estados Unidos”.
Según Jerry García, los clientes buscan hoy diversificación real (no solo acciones y bonos, sino también crédito privado, hedge funds, transacciones únicas); un manejo de riesgos más sólido (estrategias de cobertura ante la volatilidad); y tener acceso a oportunidades exclusivas y curadas que no se sientan genéricas.
En cuanto a inversiones alternativas, ve que hay “gran demanda”, especialmente de real estate en EE.UU., aunque también analizan sectores como “data centers, inteligencia artificial, tecnología y energía, buscando transacciones privadas interesantes para nuestros clientes”.
En octubre de 2007, García ingresó a J.P. Morgan como financial advisor de individuos y familias UHNW, y permaneció en el banco durante casi 16 años, en los que fue Managing Director & Market Manager, liderando distintos equipos que trabajaban para el mismo perfil de clientes, primero de Estados Unidos, luego América Central, el Caribe y Sudamérica.
De 2023 a 2025, fue Partner & Head of Latin America Wealth Management en Azura, basado en Miami. Chris Gatsch, su actual socio en Alta Vera, comenzó su carrera en 2009 en Merrill Lynch, sitio en el que trabajó 10 años, prestando servicios a los clientes de alto patrimonio neto mediante la estructuración y aprobación de préstamos garantizados. A finales de 2019, tomó la decisión de pasarse a J.P. Morgan, donde continuó desarrollando su negocio, hasta que en 2022, inició su propio negocio de gestión patrimonial: Lake House Private Wealth Management.
Tabula ha informado de que a partir de ahora retirará el nombre Tabula de la nomenclatura de sus fondos cotizados. Tras recordar que «ahora formamos parte plenamente de Janus Henderson», toda su gama de ETFs cotizados en Europa llevará «con orgullo» la marca Janus Henderson.
El año pasado, Tabula se unió a Janus Henderson, en una operación que combina su innovación en el mercado europeo de ETFs con la escala y los conocimientos de inversión de una gestora de activos líder a nivel mundial con más de 450.000 millones de dólares en activos.
Desde entonces, Tabula ha lanzado siete ETFs gestionados de forma activa, que ofrecen a los inversores exposiciones a CLOs con calificación AAA*, MBS, EUR de corta duración y renta variable de alta convicción. Janus Henderson es el número uno mundial en ETFs de CLOs; el número dos mundial en ETFs de renta fija activa y el número siete mundial en todos los ETFs activos. Gestiona más de 35.000 millones de dólares en activos de ETFs (a 31 de julio de 2025).
Federated Hermes ha anunciado el lanzamiento del fondo Federated Hermes MDT US Equity Fund, una versión UCITS de su fondo de 5 estrellas domiciliado en Estados Unidos Federated Hermes MDT All Cap Core (40 ACT).
El vehículo hará uso del enfoque cuantitativo ascendente de MDT, la unidad de Federated Hermes especializada en la gestión activa cuantitativa de renta variable, y seguirá un planteamiento «all-cap» y «all-style», seleccionando valores del índice Russell 3000. Gestionado activamente y domiciliado en Dublín, pretende ofrecer a los inversores un crecimiento del capital a largo plazo utilizando sofisticadas técnicas de modelización que aprovechan el aprendizajeautomáticopara identificar oportunidades. Las previsiones de valores y las posiciones de la cartera se actualizan diariamente, lo que permite a la estrategia adaptarse a los mercados, tras una revisión por parte del equipo de gestión de la cartera.
Con una calificación de 5 estrellas Morningstar para el fondo de inversión domiciliado en Estados Unidos, el fondo UCITS se beneficia del historial de MDT de gestionar la estrategia con éxito en Estados Unidos durante más de 30 años, a través de diversos ciclos de mercado, ya que el equipo de MDT evalúa y evoluciona continuamente cada elemento de su proceso de inversión.
El fondo, gestionado por Daniel Mahr, director de MDT, y con el apoyo de Frederick Konopka, John Paul Lewicke y Damien Zhang, toma como referencia el índice Russell 3000, que representa aproximadamente el 98% del mercado de renta variable nacional estadounidense.
Este universo ampliado permite una mayor variedad de oportunidades de mejora de alfa en todo el espectro de capitalización bursátil. La estrategia All Cap Core de MDT ha superado tanto al Russell 3000 como al S&P 500 en lo que va de año y también en plazos de 1 año, 3 años, 5 años y 10 años, incluso, manteniendo una infraponderación en el conjunto de los principales constituyentes del índice comúnmente conocidos como los «Siete Magníficos» en los últimos años.
Este hito marca la 16ª estrategia lanzada desde la adquisición del negocio de Hermes por parte de Federated en 2018, a medida que continúa mejorando sus capacidades trayendo los mejores productos de su clase a los inversores europeos e internacionales, de su gama de productos estadounidenses.
En relación con el lanzamiento, Daniel Mahr, responsable de MDT Group en Federated Hermes, afirmó que el vehículo MDT US Equity es un fondo «para cualquier condición de mercado» y añadió que los rendimientos a largo plazo «demuestran que lo importante no es la dirección del índice de referencia, ya que la estrategia ha demostrado su solidez en distintos entornos bursátiles. Nuestras estrategias invierten en muchas empresas y en diferentes tipos de compañías, lo que ayuda a diversificar sus fuentes de alfa y a proporcionar diversificación adicional a lo largo del ciclo cuando un factor o tipo de empresa en particular no goza del favor de los mercados”.
Por su parte, Clive Selman, jefe de Ventas Internacionales de Federated Hermes Limited, aseguró que las estrategias MDT «adoptan un enfoque supervisado, pero disciplinado, con el que nuestra base de clientes se siente identificada. MDT cuenta con un largo historial en el despliegue de un modelo de aprendizaje automático diferenciado, que ha sido capaz de ofrecer un proceso repetible en beneficio financiero de nuestros clientes» y concluyó que le «complace» ofrecer a los inversores internacionales exposición a los mercados de renta variable estadounidenses a través de estas estrategias galardonadas.
Melanie Lange, responsable de desarrollo de negocio de Federated Hermes Iberia, explicó que el MDT US Equity Fund «exhibe un excelente track record de más de 30 años, demostrando su capacidad para adaptarse a cualquier circunstancia de mercado; una virtud esencial para navegar en los momentos actuales, caracterizados por una elevada volatilidad».
El Federated Hermes MDT US Equity Fund está domiciliado en Dublín y registrado para la venta en el Reino Unido, Singapur, Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Grecia, Holanda, Italia, Luxemburgo, Noruega, Portugal y Suecia. Otros registros internacionales, como Suiza, se llevarán a cabo próximamente.
Foto cedidaMo Elmi, gestor senior de carteras de deuda de mercados emergentes en Federated Hermes.
Mo Elmi, gestor senior de carteras de deuda de mercados emergentes en Federated Hermes, se mantiene constructivo respecto a la deuda de mercados emergentes, principalmente gracias a sus atractivas rentabilidades. En su opinión, los diversos focos de tensión geopolítica que se han producido este año, como el Día de la Liberación, las tensiones en Oriente Medio, Rusia-Ucrania y el breve conflicto entre India y Pakistán, no han provocado episodios prolongados de volatilidad en esta clase de activo. En esta entrevista, el gestor nos ha explicado dónde están las principales oportunidades de inversión y cómo capturarlas.
En el último año, la deuda emergente ha resultado muy atractiva para los inversores que buscan diversificar sus carteras de renta fija. ¿Sigue siendo este un activo atractivo? ¿Qué ha pasado con todos estos flujos?
A pesar de las ajustadas valoraciones de los diferenciales en el crédito emergente en divisa fuerte, la respuesta corta es sí: la deuda de mercados emergentes es un buen diversificador y una clase de activo atractiva por sí misma. En los últimos años, muchos inversores se han adherido a la tesis del “excepcionalismo estadounidense” y han acabado con una exposición desproporcionadamente alta a EE.UU., tanto en renta variable como en renta fija. Desde la perspectiva de la renta fija, la deuda emergente permite a los inversores acceder a una clase de activos con rentabilidades relativamente altas y menor correlación con los mercados de riesgo estadounidenses. Estos flujos, procedentes tanto de asignadores principales como de inversores “crossover”, han impulsado una mayor emisión por parte de emisores soberanos, cuasi soberanos y corporativos que buscan acceder a los mercados de capitales de deuda, así como una mejor liquidez y comportamiento en el mercado secundario.
En el entorno actual, ¿qué atractivo ofrece para las carteras de los inversores? ¿Qué papel desempeña en sus carteras?
Los diferenciales de crédito se han reducido hasta mínimos históricos y algunos inversores consideran que la deuda emergente es una estrategia orientada a la generación de ingresos dentro de la cartera global de renta fija del cliente. Sin embargo, creemos que una cartera gestionada activamente y construida mediante una rigurosa selección de valores, con cierta exposición a mercados frontera o high yield emergente, ofrece a los clientes una propuesta de rentabilidad total con oportunidades de apreciación de capital y un componente de ingresos elevado.
Dentro del universo de mercados emergentes, ¿qué regiones encuentran actualmente más atractivas y por qué?
Como se ha mencionado, nos gustan varios créditos soberanos de frontera que están en una trayectoria de mejora: países como Sri Lanka, Zambia y Nigeria. En el segmento de beta media, nos gustan los créditos soberanos que ofrecen valor desde una perspectiva interregional y de calificación. En este segmento, los créditos con rating BBB-/BB+, como Colombia y Rumanía, ofrecen un valor convincente.
¿Qué tipo de estrategia considera más adecuada para aprovechar estas oportunidades?
Una cartera que combine un número selecto de nombres emergentes principales de beta media con emisores de frontera puede ofrecer a los inversores oportunidades de rentabilidad total en la clase de activos de mercados emergentes.
La volatilidad del dólar ha sido un factor clave en los flujos hacia los mercados emergentes. ¿Cómo influye este factor en su estrategia de asignación de activos?
En lo que va de año, el dólar ha perdido un 10 % de su valor, lo que ha sido positivo para los mercados emergentes. Esta debilidad no solo ha facilitado las entradas en los mercados locales emergentes, sino que un dólar más débil reduce los costes de servicio de la deuda para los emisores soberanos y corporativos en divisa fuerte, lo que ha animado a que aumenten las emisiones tanto corporativas como soberanas.
¿Qué les diría a los inversores que siguen siendo reacios a aumentar su exposición a la renta fija de mercados emergentes? ¿Qué mitos o percepciones cree que deberían revisarse?
Uno de los mitos más persistentes es que la deuda emergente es una clase de activo arriesgada y muy volátil. Aunque reconocemos que los mercados emergentes están expuestos a episodios de volatilidad y a riesgos derivados de titulares, la visión a largo plazo es mucho más benigna. Las tasas históricas de impago y los valores de recuperación en los mercados emergentes son comparables a los de sus homólogos de mercados desarrollados. Por ello, creemos que el riesgo en mercados emergentes está mal valorado, lo que crea una oportunidad para que los inversores aprovechen esta dislocación.
Los gestores de patrimonios, los family offices, los fondos de pensiones y los gestores de activos en las aseguradoras están aumentando su asignación a empresas y sectores que más se van a beneficiar de la robótica (también conocida como IA física). Así lo revela el nuevo estudio realizado por Robocap, una de las gestoras que más invierten en robótica, automatización y valores cotizados de IA.
La encuesta reveló que, de los inversores profesionales encuestados -cuyos activos bajo gestión (AUM) combinados ascienden a 1,183 billones de dólares- todos confirmaron haber aumentado sus asignaciones a inversiones en robótica o IA física, y esperan que esta tendencia continúe. En los próximos tres años, el 95% de los inversores profesionales afirmaron que las asignaciones aumentarán, y el 15% dijo que este aumento será significativo.
La inteligencia artificial es uno de los principales objetivos de estos inversores y, según casi nueve de cada diez (89%), su asignación en este sector aumentará en los próximos tres años. Más de dos tercios (69%) afirmaron que se producirá un ligero aumento, pero una quinta parte (20%) señaló que estos aumentos serán drásticos.
«La investigación ofrece pruebas de que la robótica y la IA no son mera ciencia ficción, sino una solución del mundo real para los problemas a los que se enfrenta la humanidad. Nuestra encuesta muestra que los inversores profesionales reconocen el papel que la robótica y la IA desempeñarán en el desarrollo de la sociedad en el futuro y ven el potencial de ofrecer rendimientos sólidos y coherentes para las carteras de sus clientes” declaró Jonathan Cohen, fundador y CIO de Robocap.
El último informe de Colliers relativo a la serie Global Capital Flows revela que Europa está cobrando protagonismo en la inversión inmobiliaria global, acaparando siete de los diez principales destinos mundiales para el capital extranjero que invierte en commercial real estate.
Ante la creciente incertidumbre geopolítica, los inversores están reevaluando sus estrategias de inversión eligiendo destinos con mayor seguridad. Así, EMEA se ha consolidado como la región predilecta a nivel mundial superando a Norteamérica y Asia Pacífico. Durante el primer trimestre de 2025, Colliers identifica un cambio en las intenciones de los inversores globales, alejándose del mercado de inversión norteamericano, que corre el riesgo de perder su estatus de refugio seguro global. Esta posición inversora se está desplazando hacia Europa, al mismo tiempo que numerosos inversores europeos aumentan su inversión en el mercado de Asia-Pacífico.
El capital para invertir en real estate se recupera
Durante el primer trimestre de 2025, se observó un fuerte impulso en el levantamiento de fondos para el sector inmobiliario comercial a nivel mundial. A fecha de emisión del informe, en mayo 2025, se estima que se ya han levantado 58 mil millones de dólares en nuevos fondos, lo que representa casi la mitad (44%) del total de 2024 y confirma una fuerte recuperación de la inversión.
“Estamos presenciando una recalibración estructural del capital global. Los mercados de la Región EMEA, entre los que destaca España, ofrecen una atractiva combinación de transparencia, liquidez y estabilidad de precios. Dado que la tolerancia al riesgo se mantiene baja en un clima geopolítico volátil, los inversores se están orientando hacia regiones donde los fundamentos son más claros y el entorno de tipos es más favorable”, comenta Luke Dawson, director de Mercados de Capital Globales y EMEA de Colliers.
En opinión de Alberto Díaz, Managing Director de Capital Markets en Colliers Spain, “el avance de España en el ránking de destinos preferidos por el capital internacional no es casual. La estabilidad macroeconómica de nuestro país, junto con una corrección de precios en determinados segmentos del mercado, ha generado oportunidades atractivas para inversores institucionales y privados. El incremento significativo en el fundrising augura mayores niveles de inversión inmobiliaria en el medio plazo, con España como destino estratégico en el nuevo mapa de flujos de capital global”.
En el actual entorno de mercado, desde MFS IM consideran que hay un ingrediente crucial, pero insuficientemente valorado, si se quiere alcanzar los objetivos a largo plazo de los inversores: la resiliencia en las carteras. Según su visión, se trata de un concepto que ayuda a gestionar el riesgo e impulsar las rentabilidades a lo largo del ciclo económico.
“Por lo general, la resiliencia se define como la capacidad de recuperarse con rapidez de periodos complicados, lesiones o adversidades. En el ámbito de la inversión, definimos la resiliencia en las carteras como la construcción deliberada de una cartera utilizando una combinación de técnicas que se traducen en unas sólidas características fundamentales. A nuestro parecer, este enfoque contribuirá a que la cartera sortee eventos de riesgo y coseche rentabilidades compuestas que concuerden con los objetivos a largo plazo de nuestros clientes”, explica Ross Cartwright, estratega jefe Grupo de estrategias e información de MFS IM.
En el entorno actual de mercado, el estratega considera que el énfasis en la resiliencia y una construcción paciente del patrimonio parece que ha quedado totalmente fuera de la agenda. “La resiliencia se torna crítica cuando los verdaderos riesgos acaban aflorando y se manifiestan los errores de asignación que habían quedado ocultos por unos prolongados auges en el mercado. Suele ocurrir que lo que destruye el capital no es una crisis, sino las malas inversiones que traen consigo esa crisis”, destaca.
En ese sentido, reconoce que habitualmente se cree que entender e integrar la resiliencia en las estrategias de inversión no solo resulta prudente, es de vital importancia a la hora de gestionar las complejidades del actual entorno de inversión.
Siete principios clave
Según su visión hay siete principios clave para la construcción de carteras resilientes:
Ir más allá de los modelos financieros para saber lo que posee: Aunque los datos y los modelos financieros resultan herramientas útiles, según su visión deberían respaldar más que dictar las decisiones de inversión. “El desarrollo de carteras resilientes implica ir más allá de los datos y los modelos con el fin de entender la realidad económica de las empresas y aplicar racionalidad y la experiencia colectiva a la hora de adoptar decisiones de inversión”, argumenta.
Comprender la resiliencia a través de la redundancia: Nassim Taleb, en su libro Antifragile, subraya que la resiliencia implica incorporar cierto nivel de redundancia, de forma muy parecida a los múltiples órganos del cuerpo humano que cumplen funciones similares. Este concepto de redundancia es vital para aquellas compañías que aspiran al éxito a largo plazo en lugar de a la optimización de sus parámetros de crecimiento a corto plazo. Según Cartwright, suele ocurrir que el momento en el que se pone a prueba de verdad dicha resiliencia no es en el contexto de una operativa normal, sino durante acontecimientos en los que lo que parecía redundante se vuelve esencial. “La pandemia de COVID-19 puso de manifiesto las vulnerabilidades de las cadenas de suministro del tipo ‘justo a tiempo’, optimizadas en exceso y dependientes de componentes o proveedores específicos”, pone como ejemplo.
Apreciar el papel de la innovación: Para Cartwright, en ocasiones, la inversión en innovación y desarrollo (I+D) puede considerarse como algo no demasiado prioritario, en especial porque muchos proyectos podrían no dar resultados inmediatos, sobre todo en periodos económicos duros. Sin embargo, considera que en un mundo en el que surgen riesgos y oportunidades a un ritmo más acelerado, la falta de innovación puede amenazar la sostenibilidad de una empresa.
Abrazar la orientación a largo plazo y una cultura proyectada al futuro: “En MFS® , nuestro proceso de inversión se fundamenta en una perspectiva a largo plazo. Ponemos el foco en empresas que exhiben unos sólidos fundamentales, lo que incluye unos saneados balances, modelos de negocio sostenibles, ventajas competitivas, equipos directivos de alta calidad y estructuras de gobierno robustas. Al invertir en dichas empresas, creemos que nuestras carteras se hallan en buena posición para lograr buenos resultados con el tiempo, incluso en periodos de tensión en los mercados”, añade. Según su experiencia, las empresas resilientes suelen distinguirse por utilizar los tiempos difíciles para realizar inversiones anticíclicas, aprovechando las condiciones de mercado, como la flaqueza de la competencia o la adquisición de recursos a precios favorables, con el fin de mejorar su posición a largo plazo. Este enfoque proactivo ayuda a mantener la continuidad, al tiempo que se saca partido de oportunidades que emergen en periodos de corrección. “Las empresas resilientes también demuestran una asignación prudente del capital y una diversificación entre productos y zonas geográficas”, matiza.
Sacar partido de las rentabilidades compuestas: La inversión resiliente es un viaje, que se adapta a la evolución de los mercados. Suele necesitar que se mire más allá de los beneficios inmediatos, hacia el potencial de una empresa a lo largo de un ciclo de mercado completo. “Creemos que los beneficios impulsan las cotizaciones, y tratamos de reforzar la resiliencia mediante la inversión en empresas capaces de generar rentabilidades compuestas con el tiempo. Por lo tanto, no ponemos la mirada en las expectativas sobre los resultados trimestrales, sino en la cuestión fundamental de si una compañía prosperará en los próximos tres, cinco o diez años”, explica.
Ver la valoración como una piedra angular de la resiliencia: El experto recuerda que cuanto mayor sea la valoración (el precio que un inversor paga hoy a cambio de los beneficios futuros), mayor es el riesgo, dado que, cuanto más paga un inversor por adelantado, más depende de los resultados futuros de la empresa para justificar ese coste. “Nuestro enfoque implica disciplina en materia de valoración y cautela a la hora de dimensionar las posiciones de la cartera para gestionar los riesgos de forma eficaz. Al conocer a fondo los flujos de caja de una empresa, su ritmo de crecimiento y los riesgos para ese crecimiento, tratamos de evitar activos sobrevalorados que podrían socavar la resiliencia de la cartera. Este enfoque disciplinado se centra en el valor y no en el precio, y garantiza que cada inversión se lleva a cabo con un claro entendimiento de su rentabilidad potencial en relación con su riesgo, lo cual se traduce en una cartera más resiliente”, argumenta.
Objetivo de preservar y recuperar el capital: Por último, Cartwright una cartera resiliente también tiene por objetivo preservar el capital, algo de vital relevancia para mitigar las pérdidas y permitir una recuperación más rápida tras las crisis. “Nuestra filosofía de evitar la pérdida permanente de capital mitigando las depreciaciones resulta fundamental, ya que recuperarse de las pérdidas exige rentabilidades mucho más elevadas. La capacidad de gestionar el riesgo a la baja permite a las carteras resilientes mantener el ritmo a lo largo de los ciclos del mercado. Este sencillo ejemplo matemático permite explicar cómo una estrategia que pone el foco en la gestión del riesgo bajista puede mantener el ritmo a lo largo de un ciclo de mercado, aun cuando no capture toda la trayectoria alcista en periodos de fuertes repuntes en el mercado”, concluye.