En este 2025, las organizaciones han aumentado el riesgo de sufrir fallos agudos en la cadena de suministro como resultado de las crecientes tensiones geopolíticas globales y las estrategias comerciales proteccionistas, según un nuevo informe publicado por Marsh Según indica su análisis, además de los riesgos asociados con la reconfiguración del comercio global y la geopolítica, el informe concluye que las dinámicas de mercado y políticas cambiantes presentan tanto desafíos como oportunidades para las organizaciones en la transición energética, especialmente en relación con los mercados de créditos de carbono (CCMs) y los intercambios de deuda por naturaleza (DFNSs).
Una de las conclusiones que arroja el informe es que las organizaciones que comercian con países conectores para eludir controles comerciales existentes o anticipados, o que tienen proveedores que hacen lo mismo, pueden estar más expuestas a interrupciones inducidas por políticas comerciales en los meses y años venideros. «Como resultado del deterioro de las relaciones entre los principales socios comerciales, los gobiernos también pueden imponer barreras comerciales a los bienes provenientes de países conectores, especialmente aquellos que incluyen componentes del país originalmente objetivo, lo que podría crear una volatilidad significativa en la cadena de suministro global», matizan.
¿Qué pueden hacer las empresas?
Para mejorar su resiliencia ante los choques en la cadena de suministro derivados del actual panorama geopolítico, el informe recomienda que las organizaciones revisen el compromiso de China con su estrategia comercial y los objetivos subyacentes de la política comercial de EE. UU., y consideren hasta qué punto se mantendrá el modelo de conector actual, en relación con sus modelos de negocio.
El Informe de Riesgo Político afirma que las dinámicas de mercado y políticas cambiantes presentan tanto desafíos como oportunidades en la transición energética, resonando con los hallazgos del Informe de Riesgos Globales 2025 del Foro Económico Mundial, en el que los riesgos ambientales dominan el horizonte de 10 años.
Si bien los CCMs globales dieron un gran paso adelante en la COP29 y los DFNSs también han ganado impulso, persisten desafíos en ambos, respecto al riesgo político y la posibilidad de incumplimiento. Además, las crecientes obligaciones de cumplimiento climático, especialmente aquellas que provienen de nuevas regulaciones de la Unión Europea, pueden presentar desafíos de riesgo operativo para las organizaciones.
“Los riesgos aumentados en torno a la economía, la geopolítica y el cambio climático están creando un entorno operativo increíblemente complejo, diferente a cualquier otro que las organizaciones hayan experimentado en décadas. Aquellos que desarrollen su capacidad para comprender, evaluar y mitigar los riesgos que enfrentan sus operaciones probablemente estarán mejor posicionados para identificar oportunidades donde otros solo pueden ver ambigüedad y obtener una ventaja competitiva en estos tiempos inciertos”, señala Robert Perry, líder global de Riesgos Políticos y Crédito Estructurado de Marsh Specialty, a la luz de estas conclusiones.
Durante décadas, la famosa cartera 60/40, que reparte la inversión entre 60% en acciones y 40% en bonos, fue considerada el modelo estándar de diversificación para inversionistas conservadores y moderados. Pero los tiempos han cambiado, y con ellos, los fundamentos que sostenían esta estrategia. Un reciente informe publicado por Candriam pone en duda la eficacia actual de este modelo tradicional frente a un panorama económico marcado por una inflación volátil, tasas de interés persistentemente elevadas y crecientes tensiones geopolíticas. Además, apuntan la relevancia de incluir en las carteras activos alternativos.
Aunque las acciones tuvieron un buen desempeño en 2023 y 2024 impulsadas por la moderación de la inflación, las expectativas a futuro son más modestas. Las tasas de interés siguen siendo un freno para las valoraciones bursátiles, mientras que los bonos continúan ofreciendo rendimientos reducidos y menor capacidad de protección. La consecuencia: la ruptura del equilibrio que hacía del 60/40 un modelo confiable para enfrentar escenarios adversos.
El estudio subraya que, a pesar de sus buenos resultados históricos en las últimas dos décadas y media, el perfil de riesgo del 60/40 ha generado serias preocupaciones. Una cartera asignada de manera nominal con esta proporción ha mostrado una correlación cercana a 1 con el mercado accionario, lo que la convierte, en la práctica, en un reflejo del comportamiento de las acciones. Esto implica que en momentos de crisis, como en 2008 o durante el desplome de los mercados por la pandemia en 2020, el 60/40 no ofreció la protección que muchos esperaban. Para la mayoría de los inversionistas, pérdidas superiores al 30% no son aceptables, lo que plantea la urgencia de revisar el modelo y buscar fuentes adicionales y más resilientes de diversificación.
El documento, firmado por Johann Mauchand, Pieter-Jan Inghelbrecht y Steeve Brument, propone una nueva fórmula para restaurar la diversificación y mejorar el perfil riesgo-retorno de las carteras: la estrategia 40/30/30, que incluye activos alternativos como tercer componente clave.
Aumentando la Resiliencia de la Cartera: El Enfoque 40/30/30
Para Candriam, la respuesta está en diversificar más allá de los instrumentos tradicionales. La propuesta: sustituir el 30% de una cartera 60/40 por activos alternativos, utilizando como referencia el índice Credit Suisse Hedge Fund Index. El resultado, según el análisis histórico, es contundente: mayores retornos, menor volatilidad y mejor protección ante caídas.
La nueva cartera 40/30/30, compuesta por 40% acciones, 30% bonos y 30% alternativos, mostró una mejora del 40% en su ratio de Sharpe, métrica que evalúa el rendimiento ajustado por riesgo. Incluso usando una asignación pasiva basada en índices, los beneficios fueron significativos.
Trazando una Nueva Dirección
El estudio de Candriam advierte sobre un aspecto crucial que muchos inversionistas pasan por alto: no todos los activos alternativos son iguales, ni funcionan del mismo modo ante distintas condiciones de mercado.
El uso de índices amplios como referencia resulta útil como punto de partida, pero también evidencia un desafío estructural: el universo de fondos de cobertura y estrategias alternativas es inmensamente diverso, y su rendimiento puede variar significativamente. La diferencia entre elegir adecuadamente o no qué tipo de alternativo incluir en una cartera puede tener un impacto decisivo en el resultado final.
Para abordar este problema, Candriam propone un marco de asignación funcional, diseñado para ir más allá del simple agrupamiento de activos bajo la etiqueta de “alternativos”. En lugar de tratar estas estrategias como un bloque homogéneo, la firma sugiere clasificarlas según el rol funcional que desempeñan dentro de una cartera, dividiéndolas en tres grandes categorías:protección ante caídas, generación de retornos no correlacionados o captura de potencial alcista.
Esta segmentación permite construir carteras más resilientes y eficientes, ajustándolas dinámicamente según el entorno económico. La clave, según Candriam, está en una asignación activa y centralizada que responda a los cambios del mercado en tiempo real.
Implicaciones para la asignación de activos
Candriam concluye que adoptar este enfoque más flexible y funcional puede mejorar los resultados en tres dimensiones esenciales: mayores retornos, menor riesgo y caídas más controladas. Para lograrlo, recomienda dos acciones simples pero potentes: seleccionar activos alternativos que cumplan uno de los tres roles definidos y rebalancear dinámicamente la cartera según el contexto macroeconómico.
La conclusión del informe es clara: el modelo 60/40 no está muerto, pero sí necesita una revisión profunda. En un entorno cada vez más incierto, la inclusión estratégica de activos alternativos podría ser la clave para construir carteras verdaderamente diversificadas y preparadas para el futuro.
En lo que va de año, el oro ha subido un 25%, el dólar ha caído un 10% y la renta variable estadounidense cotiza plana, mientras que la renta variable emergente ha avanzado un 10%, en un contexto de fuerte volatilidad y baja correlación entre activos. Para Matthew Beesley, CEO de Jupiter AM, estos números son una gran evidencia de las oportunidades que están brindando los mercados para los gestores activos, oportunidades que Jupiter está dispuesta a capturar de muchas maneras posibles.
Funds Society ha conversado con Beesley en el marco del evento celebrado recientemente por la firma en Lisboa para festejar su 40 aniversario, pero también para sentar las bases de cómo será el futuro de la compañía: “El rol de la gestión activa ha cambiado significativamente durante los últimos 40 años. Ser un negocio que ha sobrevivido este tiempo es un gran logro, no todos los negocios lo hacen”, reflexiona Beesley. El CEO afirma, en varios momentos de la conversación, que la industria se está dirigiendo hacia “la era dorada de la gestión activa”. “Y después de 40 años de historia”, remacha, “estamos realmente bien posicionados para capturarla”.
Jupiter debutó en bolsa en 2010, por lo que este año también celebra su 15º aniversario como compañía cotizada. “Lo bueno de ser una compañía que cotiza en bolsa es que las cuentas son públicas. Y lo que se puede ver es que hoy nuestro negocio es muy rentable, tenemos un balance muy fuerte. Generamos mucho efectivo”, asegura Beesley. “Los clientes deben confiar en que seguiremos existiendo otros 40 años gracias a la solidez de nuestro modelo de negocio”, añade.
¿Están los clientes dispuestos a volver a pagar por el valor añadido de la gestión activa?
Necesitamos como industria reconocer que no hemos hecho un buen trabajo en explicar por qué la gestión activa tiene un papel que jugar en las carteras de los clientes. Francamente, la gestión de activos es una industria competitiva, con un exceso de oferta. Además, existen productos sustitutivos en la forma de gestión pasiva con un precio inferior. Por tanto, lo que necesitamos hacer como industria es asegurarnos de que ofrecemos un precio atractivo en relación con ese producto sustitutivo. Eso implica comisiones más bajas, pero también hacer visible el valor que añadimos como gestores activos.
Sin embargo, el desafío puede venir de los clientes que prefieran mantenerse a la espera, porque hasta ahora mantenerse en la gestión pasiva ha sido lo correcto. Creo que podría llevar tiempo a algunos clientes hacer esa rotación de pasivo a activa. El riesgo que implica es que podrían perderse una era dorada de retornos generados por la industria de gestión activa. Además, los clientes que hoy están comprando estrategias pasivas están comprando carteras muy concentradas. Asimismo, no tiene sentido invertir de forma pasiva en algunas clases de activo por su propia naturaleza, como en la renta fija o la renta variable emergente.
¿Cómo se posiciona Jupiter AM en este contexto desafiante?
Nuestra marca, nuestro negocio, es conocido por ser activos y estar diferenciados. No hacemos de todo. No hacemos gestión pasiva, sólo activa. Y, en la gestión activa, no cubrimos todas las clases de activo. Por ejemplo, no invertimos en small caps japonesas, pero sí en large caps, y lo hacemos de una forma distinta a la de nuestros competidores, porque tenemos una estrategia que combina crecimiento y rentas y que genera una cartera de renta variable nipona muy diferente a la de nuestros comparables. Por tanto, quiero que los clientes sepan que somos activos y diferenciados.
¿Dónde está el reto en la construcción de carteras más diversificadas en el entorno actual?
Vivimos en un mundo en el que una sola declaración del presidente de los EE.UU. en X puede cambiar la dirección de las bolsas o los bonos. No es un lugar muy cómodo para muchos inversores hoy en día. En este contexto, vemos dos tendencias claras en los mercados. La primera es que los clientes están rotando sus activos desde EE.UU. o pensando en hacerlo. La segunda, que los clientes están cuestionando tener solo asignaciones a acciones y bonos, es decir, la cartera 60/40. En uno de cada cinco años, esa asignación no ha funcionado; tiene sentido entonces pensar en añadir estrategias alternativas al mix de cartera.
Nuestro foco es sobre las estrategias alternativas líquidas. Tenemos tres estrategias que han jugado esta oportunidad realmente bien: un fondo de renta variable global de retorno absoluto, un fondo de renta fija de retorno absoluto, y una estrategia que invierte en oro y plata. Estos alternativos líquidos están captando cada vez más la atención de nuestros clientes.
¿Cómo está innovando Jupiter con sus estrategias?
Nuestro trabajo consiste en pensar qué quieren los clientes de nosotros. La innovación no es simplemente reaccionar a las necesidades de los clientes. Hay dos maneras de innovar: o con nuevas estrategias – y aquí mantenemos la mente muy abierta-, o con nuevas estructuras. En los comienzos de Jupiter, solo había dos maneras de obtener acceso a la gestión: o con un fondo, o con un mandato. Hoy hay muchas más maneras de acceder a las ideas de inversión de nuestros equipos: cuentas separadas, gestión delegada de carteras modelo, gestión como marca blanca… También hemos lanzado un ETF activo este año, y pensamos que en los próximos años la tokenización también será relevante.
¿En qué áreas quiere crecer Jupiter geográficamente?
Reino Unido sigue siendo el 67% de nuestro negocio actualmente. Estamos en el top 10 británico. Fuera, nuestro negocio está mucho menos reconocido, por lo que tenemos una oportunidad mucho mayor partiendo de una base más pequeña. Reino Unido sigue siendo muy importante para nosotros, pero hay tres partes del mundo en las que estamos muy enfocados: Europa, donde tenemos una presencia significativa en Italia, Suiza, Alemania, Suecia y España. También tenemos una presencia fuerte en Latinoamérica, donde trabajamos con una serie de socios reconocidos y respetados; actualmente tenemos más de 2.000 millones de dólares en dinero de nuestros clientes latinoamericanos. Y, en Asia, tenemos presencia física en Hong Kong y Singapur; este año obtuvimos una licencia para acceder al mercado retail en este último. Donde no estamos presentes es en EE.UU. No es un área “core” para nosotros.
¿Qué fuentes de crecimiento va a perseguir su firma?
Tenemos muchas oportunidades de crecimiento orgánico. Todo lo que hacemos puede seguir creciendo desde el momento actual, y tenemos plena capacidad disponible para lograrlo. Dicho esto, puede que aparezcan oportunidades inorgánicas para complementar ese crecimiento orgánico. Tenemos un balance fuerte y exceso de capital, y estoy muy abierto a la idea de incorporar nuevo talento inversor por la vía inorgánica. Pero es muy difícil anticipar cuándo puede suceder. Estoy siendo muy reflexivo y cuidadoso con esto, estoy muy enfocado en la escala.
Como compañía cotizada, la escala es muy importante, pero no tiene que ver tanto con el tamaño como con cuántos ingresos generas en relación con tus costes. Creo que hemos hecho un buen trabajo en la gestión apropiada de nuestra base de costes y, al hacerlo, hemos invertido también en nuestro negocio. Por tanto, no se trata solo de gastar dinero, sino de reasignarlo para ayudarnos a invertir y crecer.
Lleva tres años de CEO. ¿Qué cambios ha impulsado durante su mandato?
He estado muy enfocado en modernizar y hacer relevantes nuestras capacidades de inversión. Hemos reducido la gama de productos, asegurándonos de que todo lo que hacemos es activo y diferenciado. También he dedicado estos tres años a pensar en la innovación, para llevar esas estrategias a las manos de nuestros clientes. Es por eso, por ejemplo, que hemos lanzado un ETF activo este año y estamos valorando lanzar otro en un futuro cercano.
Por tanto, he estado muy enfocado en preparar al negocio para los próximos 40 años, en un entorno desafiante para la industria dadas las presiones sobre los costes. Así, la otra gran medida que he tomado es asegurarnos de que gestionamos adecuadamente nuestra base de costes. Esto nos ha permitido ser muy agresivos en la inversión en nuestra propuesta al cliente: no solo en las estrategias de inversión sino en la experiencia de cliente. Queremos ser digitales y utilizar la tecnología, pero con una estructura que dé la respuesta a las necesidades individuales de los clientes.
Por otra parte, Jupiter siempre ha sido una organización muy inversión-céntrica. Nuestro talento de inversión está en el corazón de la organización. Estamos abiertos a incorporar nuevos equipos a nuestro negocio para ayudarnos a crecer. Pero estoy muy orgulloso no solo del talento que hemos atraído a la firma, sino también en el que hemos retenido. Queremos que los gestores quieran trabajar para Jupiter por el entorno de trabajo que proporcionamos. Estamos atrayendo al mejor talento de Reino Unido e internacional no solo del lado gestor, sino para toda la compañía.
Banorte Wealth Management, el brazo de gestión patrimonial del mexicano Grupo Financiero Banorte, celebra la reciente llegada de María Hernández como Director of Growth Strategy, seguro de que dicha incorporación será clave para la ejecución de su plan estratégico.
María Hernández viene de Insigneo, donde ocupó el puesto de Market Head basada en Houston. Con anterioridad, ejerció como VP Regional Sales Manager en PNC Investments, fue SVP International Investment Sales Manager de BBVA y fue en ese mismo banco VP Product Manager, entre otros antecedentes profesionales. Es egresada de la Universidad Autónoma de Coahuila, México.
«Nos hemos unido con reconocidos proveedores y expertos en diseño de las estrategias patrimoniales, que le ayudarán a proteger y planear el legado intergeneracional (familiar) y empresarial», explica Banorte Wealth Management en su sitio de internet.
Banorte Wealth Management, parte de Grupo Financiero Banorte. La utilidad neta de Grupo Financiero Banorte fue de 52,418 millones de pesos (2.621 millones de dólares), un 15% más que en 2022. Además, la cartera de crédito de Grupo Financiero Banorte superó el billón de pesos en 2023 (alrededor de 50.000 millones de dólares), impulsada por el consumo privado, el mercado laboral y las inversiones en nearshoring.
Banorte es el segundo grupo financiero más grande de México en cartera de crédito, el segundo proveedor de créditos a gobiernos del país y el segundo banco más importante en créditos hipotecario, solo detrás del gigante español BBVA.
Banorte Wealth Management actúa como la marca corporativa de Banorte Securities International Ltd., Banorte Asset Management, Inc., Banorte Enterprises Ltd., Banorte Ventures Ltd., y Banorte Securities Holdings International Inc., todas las cuales son afiliadas y subsidiarias últimas del Grupo Financiero Banorte S.A.B. de C.V
La Asociación Brasileña de Entidades de Previsión Complementaria Cerradas (Abrapp) celebrará el 46.º Congreso Brasileño de Pensiones Privadas (CBPP) los días 22, 23 y 24 de octubre. El encuentro se realizará en formato híbrido, presencialmente en el Transamerica Expo Center de Sao Paulo, con transmisión en línea a través de una plataforma cerrada.
Con un promedio anual de más de 4.000 participantes, el CBPP es el punto de encuentro de los principales líderes y tomadores de decisiones del sector, consolidándose como el mayor evento de pensiones privadas de América Latina. En esta edición de 2025, el tema central será “Pensión de Impacto: Inclusión y Protección Social”.
Esta edición ofrecerá debates que anticipan las tendencias de longevidad para las nuevas generaciones, además de experiencias inmersivas y diversas presentaciones. Habrá paneles simultáneos, conferencias técnicas, una gran sesión, sesiones de análisis, sesiones plenarias y charlas.
El evento abordará temas como políticas públicas para la universalización de las pensiones privadas, envejecimiento activo y el mercado de la longevidad, Inteligencia Artificial (IA) y la revolución de los procesos de trabajo tradicionales, autonomía financiera a través de la tecnología digital, cómo acercar las pensiones a todos, comunicación estratégica, liderazgo, la narrativa del nuevo sistema de pensiones, soluciones de pensiones inclusivas, eficiencia y escala, entre otros.
Durante los tres días del programa, los participantes tendrán la oportunidad de seguir debates que conectan el mercado, los fondos de pensiones y el gobierno. Estos debates ofrecerán una visión integral de los principales desafíos y oportunidades del sistema de pensiones privado en Brasil.
LinkedInPilar Quintas, Head of Real Estate de Toesca Asset Management
Trayendo consigo una amplia trayectoria ligada a los activos alternativos, Pilar Quintas tiene una nueva casa de inversión: Toesca Asset Management. La gestora boutique reclutó a la ejecutiva para liderar sus inversiones inmobiliarias, luego de que un cambio interno dejara a Augusto Rodríguez enfocado en el frente de inversiones agrícolas.
Rodríguez informó a su red profesional de LinkedIn de la llegada de Quintas a la gestora, anunciándola como su reemplazo. Así, la ejecutiva pasaría a ocupar el cargo de Head of Real Estate.
Según detalló el medio local Diario Financiero, la profesional llegó a la firma como portfolio manager, haciéndose cargo de los seis fondos inmobiliarios de Toesca, que invierten en activos residenciales y comerciales en Chile, España y Estados Unidos.
Este cambio marca un nuevo capítulo en la carrera de Quintas, que se ha extendido a lo largo de las últimas dos décadas. Este año, en mayo, fue elegida para el directorio de LVM Casa de Valores, el joint venture de las chilenas LarrainVial y AMM Capital en Panamá, para aportar su experticia en desarrollo de negocios.
Durante los últimos años, la profesional ha estado dedicada a los negocios de activos alternativos en distintas casas de inversión, ocupando una variedad de cargos. Entre ellos destacan haber trabajado como vicepresidenta de Deuda Privada y Head de Estructuración Regional para Chile, Perú y Colombia en SURA Investment Management; gerenta de Deuda Privada en Venturance Alternative Assets; y Head de Deuda Privada y portfolio manager de los fondos inmobiliarios en la AGF de Grupo Security.
Además de un par de años dedicada a la asesoría independiente, Quintas también tuvo una trayectoria en la banca, en el área de riesgos, también asociada al mundo inmobiliario. En 2003 llegó a Banco de Chile, donde trabajó como subgerente de Riesgo de Empresas Inmobiliarias y Constructoras hasta su salida, en 2014.
Liderazgo en negocios forestales
“Después de casi 20 años dedicado a inversiones inmobiliarias, primero en Celfin, luego BTG y ahora en Toesca, y los últimos 4 años con dos sombreros (inmobiliario y agrícola), a partir de ahora voy a dedicarme full-time a las inversiones agrícolas”, escribió Rodríguez a su red profesional.
Así, el ejecutivo queda a cargo de los negocios agrícolas de Toesca, concentrados en la estrategia Farmland. Esta arista de negocios, según consigna la web institucional de la gestora, consiste en invertir en proyectos de agricultura regenerativa “que aprovechen las ventajas competitivas de Chile y la región en el mercado mundial de exportación de fruta”.
A la fecha, señalan desde Toesca, la estrategia Farmland ha recaudado más de 55 millones de dólares. De momento, la cartera se concentra en el Fundo Los Monos, un predio de 350 hectáreas ubicado en la Región del Maule y enfocado en la producción de cerezos, duraznos, ciruelos y nectarines.
Ahora, el objetivo de Rodríguez, según describió, es convertir a la gestora boutique en “un referente en Chile y Latinoamérica en esta estrategia”, trabajando en conjunto con su aliada Astarte Capital Partners, una gestora basada en suelo británico que dedicada a la inversión en activos reales y capital natural.
Antes de llegar a Toesca, en enero de 2017, el profesional trabajó en BTG Pactual Chile, donde alcanzó el cargo de Head of Real Estate. Ahí, llegó con la compra de Celfin Capital por parte del banco de inversiones brasileño. Anteriormente, se desempeñó como FR&R (Financial Restructuring & Recovery) Relationship Bank en ABN AMRO, según consigna su perfil de LinkedIn.
El 2 de abril último, un Donald Trump eufórico anunció que Estados Unidos imponía aranceles aduaneros a todo el planeta. En ese mismo mes, los bonos del Tesoro experimentaron semanas de volatilidad histórica, y los inversores extranjeros vendieron un total neto de 40.800 millones de dólares en bonos y pagarés de EE.UU. con vencimiento a más de un año, la mayor cantidad vendida desde diciembre. Los datos se desprenden del último informe del Tesoro.
Una parte de esa liquidación fue compensada con la compra de 6.042 mil millones por parte de bancos centrales internacionales extranjeros, según un reporte de Barron’s. De esta manera, las tenencias extranjeras totalizaron más de 9 billones de dólares en el mes, en la segunda cifra más alta registrada.
Los bonos del Tesoro experimentaron una ola de ventas histórica en abril, con el rendimiento a 30 años registrando su mayor ganancia semanal desde 1987, mientras que la ganancia semanal del rendimiento a 10 años fue la mayor desde el final de la recesión de 2001, según Dow Jones Market Data.
Las estimaciones recientes indican que los extranjeros poseen alrededor del 30% de la deuda del Tesoro en manos del público, frente a casi el 50% en 2008. El mercado de deuda pública estadounidense tiene un valor de 28,6 billones de dólares. Las tenencias extranjeras han experimentado un aumento casi constante desde 2022. Japón y el Reino Unido son los mayores tenedores, seguidos por China. Los dos primeros países aumentaron sus tenencias en abril, mientras que China las redujo.
“El estatus de refugio de estos activos se cuestiona cada vez más, y nuestros datos reflejan claramente esta tendencia”, dijo John Velis, estratega macroeconómico para América de BNY, según un artículo de Market Watch.
Según datos de BNY, en ocho de los últimos once días de negociación desde el 4 de abril se registraron ventas extranjeras. El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años casi alcanzó el 4,5 % el 11 de abril, cuando los extranjeros se retiraron del mercado, de acuerdo a la misma fuente.
A la política comercial de Trump se unen otros factores que explican estos movimientos en el mercado de bonos estadounidense. Para el director de tasas globales de J.P. Morgan, Jay Barry, los fondos de cobertura realizaron grandes apuestas apalancadas a principios de la primavera que se vieron obligados a deshacer, lo que podría ser una razón para la ola de ventas. Los inversores también podrían estar simplemente reajustando sus carteras, ya que la confianza del mercado en activos internacionales, como los bonos del gobierno alemán, ha mejorado.
Foto cedidaCarlos San Basilio, presidente de la CNMV, en el curso de la APIE y la UIMP en Santander.
El pasado 12 de junio se cumplieron 40 años de la adhesión de España a la UE y, actualmente, se están produciendo otros movimientos integradores, dirigidos a la potenciación de los mercados de valores y al impulso de la inversión minorista a nivel europeo. En el marco del 42º seminario de la APIE, que se está celebrando esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, la CNMV defendió el potencial de la SIU (la propuesta sobre la unión de ahorro e inversiones a nivel europeo).
«Tenemos buenas expectativas con el nuevo proyecto de la SIU: se trata de darle otra vuelta a la unión bancaria, y creemos que hay algún elemento que puede ayudar a obtener ahora resultados más positivos que en estos últimos años, como el nuevo objetivo de simplificación que, si se aplica en el área bancaria y de los mercados de valores, podría tener recorrido para favorecer la armonización regulatoria y una mayor integración de los mercados», defendió su presidente, Carlos San Basilio.
El presidente habló de dos planos: por un lado, el de los sectores que ya están integrados, como el de la inversión colectiva, aunque hay margen para ir más allá. Por otro lado, explicó que donde hay mayor reto es en los mercados bursátiles, donde «existen polos de concentración -en España con SIX, en Suiza con acuerdos con Reino Unido, los países nórdicos por su lado…». Tenemos que ver cómo se avanza en una mayor interoperabilidad y más realista más que en pensar en soluciones corporativas», dijo.
El presidente recordó, en este sentido, el contraste existente entre la consolidación de la inversión colectiva y los mercados privados, y los retos en los mercados bursátiles. «La gestión colectiva está muy consolidada en Europa: en España el volumen de las IICs supera los 415.000 millones de euros en manos de las gestoras nacionales, que suponen el 60% de la inversión colectiva, mientras el otro 40% está en manos de entidades extranjeras, lo que muestra que el nivel de integración es considerable. En private equity también hemos visto un considerable dinamismo en Europa, con un buen nivel de crecimiento en España, de en torno al 20% anual, de forma que el patrimonio gestionado está cerca de 50.000 millones de euros, una buena noticia. Por eso cuando se habla de falta de integración de los mercados en Europa, hay que diferenciar: es clara en el sistema bancario y en las bolsas pero no tanto en otros segmentos como la inversión colectiva o el capital privado», explicó, añadiendo el peso descendente que tienen las bolsas nacionales en la economía.
Sobre la posible cuenta individual que recoge la SIU, afirmó que puede ser un elemento que puede reforzar los mercados en los países donde no existe y, en este sentido, reconoció que «un elemento fundamental para el éxito y extensión para millones de personas son los incentivos fiscales. Tenemos que ver cómo se gestionan para que no supongan una merma de recaudación, sino un aumento al atraer inversiones a productos donde no están hasta ahora. Se puede ser creativo y ver cómo se generan estos incentivos sin que haya una pérdida de recaudación para los sectores públicos en una Europa que afronta esfuerzos fiscales», dijo.
Pasado y futuro
San Basilio hizo balance de los últimos 40 años en los mercados, desde la ley que potenció su expansión, facilitada también por la inversión extranjera, hasta los retos actuales, pasando por el desarrollo de la presencia de los los inversores minoristas españoles, la intensificación de la liquidez en los mercados, su consolidación hasta la década de los 2000 y las crisis posteriores, derivadas de los excesos de un crecimiento insostenible de innovaciones financieras y las malas prácticas de comercialización, reflejadas en las crisis de 2007-2008 y posteriores, que afectaron a los mercados pero también a las entidades y a la economía real. «En estos 40 años hemos comprobado el lado bueno (cómo unos mercados financiero dinámicos facilitan el crecimiento de la economía) pero también el malo (cómo los excesos pueden costar mucho al conjunto del sistema). Las consecuencias de los excesos fueron en términos de rentabilidad, crecimiento y empleo pero también regulatoria: el tsunami regulatorio, con su epicentro en Bruselas, llegó más tarde», recordó el presidente.
A la hora de valorar la situación actual destacó tres elementos clave: la resiliencia de los mercados, el exceso regulatorio, y el dinamismo en algunos segmentos de los mercados, como la inversión colectiva y el capital privado, en contraste con otros, como las bolsas. «Desde la superación de la crisis de 2011-12, entramos en un periodo en el que los mercados financieros -incluyendo el sistema bancario- han tenido un comportamiento sólido y mostrado la capacidad de hacer frente a diferentes coyunturas, con una volatilidad creciente ante tensiones geopolíticas como las actuales, pero mostrando que los mercados pueden digerir estas situaciones, que ofrecen resiliencia en situaciones de extrema tensión».
Pero también reconoció una situación «de rigidez» regulatoria, en la que las cargas para los participantes son altas, «un entorno más seguro pero excesivamente rígido. Viene reclamándose en Europa un esfuerzo de simplificación para un marco regulatorio que, sin perder objetivos, favorezca un mayor dinamismo y menores cargas y una mayor competitividad».
Sobre el futuro, habló de su plan estratégico con nueve prioridades, entre las que destacó la protección del inversor, pero en áreas como los criptoactivos. «Los productos regulados por UCITS cuentan con un nivel protección elevado y hasta de sobreprotección, que desincentiva que el minorista tome esas decisiones a veces. Por eso no nos preocupan los productos tradicionales, sino los nuevos productos, basados en criptoactivos y criptomonedas. Es complicado control del fraude financiero, cuentan con una regulación reciente -MiCA- y poco detallada en sus obligaciones».
Otra prioridad destacada, el impulso de las bolsas, para pasar a una estructura de mercado más basada en bilateralidad: «Para que crezcan hay que actuar sobre la oferta, y es fundamental potenciar el papel del minorista en renta variable», dijo. Una tercera prioridad, la simplificación marco supervisor: «Estamos intentando influir en el poder legislativo y actuar por nuestra parte en lo que esté en nuestra mano». Y, por último destacó el reto tecnológico, con la llegada de la inteligencia artificial que se une a la dinámica de digitalización.
Preguntado por los finfluencers, y las advertencias de la CNMV en este sentido, aseguró que trabajan en una colaboración internacional, en distintos países y afirmó que «se necesitan herramientas para la identificación de compañías que emiten recomendaciones de inversión fraudulentas. En el marco de IOSCO hemos conseguido ir más allá de la UE pero estamos en etapas muy preliminares y eso requiere también un refuerzo de la capacidad tecnológica».
En resumen, dibujó un momento de cambios: «Cuatro décadas nos han llevado a un nuevo punto transformacional: los mercados de valores van a cambiar mucho en los próximos años y el reto es estar a la altura para el beneficio de los mercados, de la economía y la sociedad», apostilló.
Los últimos años han marcado el inicio de una nueva era macroeconómica caracterizada por ciclos más cortos y volátiles, una mayor inestabilidad geopolítica y una aceleración del cambio tecnológico. Entre las principales narrativas que han surgido en los últimos años destacan los «Siete Magníficos» y el excepcionalismo estadounidense. Sin embargo, los últimos movimientos del mercado están empezando a cuestionar esta narrativa, al mostrar que existen otras formas de abordar la renta variable growth que permiten descubrir oportunidades aún poco aprovechadas en el actual entorno de volatilidad. Un enfoque diversificado a escala global, que combine de manera dinámica un marco cualitativo para el crecimiento con un análisis profundo de las tendencias estructurales que están transformando economías, sectores y empresas, podría ayudar a los inversores a replantearse su visión sobre la renta variable de crecimiento. A continuación, presentamos cuatro consideraciones clave para aquellos inversores que deseen aprovechar las oportunidades que podría ofrecer esta perspectiva diferente.
1. Fomentar la diversificación a escala global
Las acciones están cada vez más correlacionadas con el sector o la temática a la que pertenecen, en lugar de con la región donde tienen su sede, debido a los avances tecnológicos que permiten a las empresas operar y generar ingresos a nivel global. Al mismo tiempo, la creciente rivalidadgeopolítica ha llevado a los gobiernos a implementar medidas proteccionistas para sus sectores estratégicos, lo que ha generado una mayor divergencia regional en el entorno operativo de las empresas. Gestionar este complejo panorama requiere, en nuestra opinión, un marco de inversión diversificado a nivel global que equilibre las amplias oportunidades aún disponibles en Estados Unidos con exposiciones significativas a otros mercados, especialmente Europa. En este último caso, hemos identificado numerosas empresas de calidad que podrían sorprender positivamente en un contexto de pesimismo extremo.
Asimismo, diversificar globalmente puede mitigar los riesgos asociados a una excesiva dependencia de un reducido grupo de valores estadounidenses y a una visión demasiado simplista del desarrollo de la inteligencia artificial (IA). A medida que aumenta la competencia en el ámbito de la IA, es probable que este modelo sea objeto de mayor escrutinio, lo que podría tener implicaciones negativas para carteras menos diversificadas.
2. Comprender las tendencias estructurales emergentes
Durante gran parte del periodo posterior a la pandemia, los mercados bursátiles han estado dominados por el excepcionalismo estadounidense y el liderazgo de la IA. Sin embargo, esta narrativa simplista oculta una realidad más compleja: un panorama cambiante de tendencias estructurales con un impacto creciente en empresas, sectores y mercados a nivel global. En un momento en que los mercados están poniendo a prueba esta visión, consideramos oportuno analizar qué nos indican estas tendencias estructurales.
Desde principios de año, el discurso dominante ha pasado de centrarse en la resiliencia económica a reflejar una mayor incertidumbre, ante el retroceso del gasto de los consumidores, la debilidad de la confianza en el ámbito industrial y del consumo, y la posibilidad de que la inflación se mantenga en niveles elevados durante más tiempo.
El abanico de posibles escenarios vuelve a ampliarse, en gran medida debido al impacto de las políticas estadounidenses. En este contexto, las empresas europeas parecen bien posicionadas para beneficiarse de unas tasas de ahorro personal elevadas, una política fiscal acomodaticia y unos tipos de interés reducidos que respaldan el crecimiento interno.
Además, vemos cómo la revolución de la IA comienza a ampliarse, con los facilitadores tecnológicos desempeñando un papel clave en la transformación digital.
Por otro lado, la volatilidad derivada de los aranceles impuestos por EE.UU. y de las posibles represalias comerciales, aunque todavía en fase de desarrollo, pone de nuevo de relieve, en nuestra opinión, la importancia de evaluar los impactos potenciales desde una perspectiva sectorial dinámica, y no únicamente en función de la ubicación geográfica de las empresas.
3. Reforzar la confianza en los fundamentales
En nuestra experiencia, estos análisis sobre tendencias estructurales adquieren mayor valor cuando se combinan con un marco sólido y repetible para el estudio de los fundamentales. Por ejemplo, en nuestro enfoque, tratamos de responder de forma sistemática a las siguientes preguntas, con la calidad como temática subyacente, para identificar empresas del segmento growth que sean interesantes para nuestra cartera:
¿Es sostenible el crecimiento de los beneficios?
¿Puede traducirse en márgenes elevados y crecientes de flujo de caja libre y alta rentabilidad del capital?
¿Qué tan atractivo es el potencial de la rentabilidad del capital, ya sea en forma de dividendos o recompra de acciones?
¿Reflejan las valoraciones actuales los fundamentales según nuestro modelo? ¿Existe potencial alcista?
¿Están mejorando los fundamentales? ¿Podrían superarse las expectativas del consenso?
4. Alinearse de forma dinámica con áreas de oportunidad dentro del segmento Quality
Un marco sólido respaldado por análisis de tendencias globales puede ofrecer el alcance y la flexibilidad necesarios para enfrentarse a un entorno más complejo y volátil como el actual. En este contexto, dar peso específico al segmento Qualitypuede actuar como estabilizador.
Identificamos áreas atractivas seleccionando valores con combinaciones óptimas entre calidad (quality), crecimiento (growth), retornos del capital (capital returns) y potencial alcista (valuation upside). Y estamos convencidos de que un enfoque activo a la hora de construir la cartera permite identificar de forma continua estas oportunidades en todos los sectores y regiones.
El mercado todavía ofrece oportunidades a compañías de crecimiento de calidad, como, por ejemplo, en Europa, donde las bajas valoraciones de partida y la elevada tasa de ahorro personal constituyen un entorno atractivo para que los comercios minoristas con marcas consolidadas consigan aumentar el gasto de sus clientes. A nivel global, todo indica que la digitalización, respaldada por la IA, impulsará una transformación tecnológica generacional, aunque los beneficiarios serán muchos más allá de los actuales ganadores. El suministro y la distribución de energía deberán ampliarse para satisfacer la creciente demanda de centros de datos con mayor capacidad. La disponibilidad y eficiencia de los datos y la analítica también favorecerán el crecimiento de las empresas del segmento de pagos y servicios de datos de mercado. Estos son solo algunos ejemplos en los que una combinación dinámica de un marco de estudio de los fundamentales con análisis de tendencias permite optimizar la exposición a oportunidades en el segmento Quality.
Cómo poner en práctica este enfoque: dos casos prácticos
Compañía alemana del sector defensa
La compañía ha experimentado una rápida expansión de su cartera de pedidos y flujo de caja libre desde 2022, tras la decisión de Alemania de aumentar el gasto en defensa por encima del 2% del PIB, después de décadas de inversión mínima. A pesar del reciente repunte en su cotización, creemos que su valoración sigue siendo atractiva debido a las características de calidad del contratista de defensa, que incluyen un sólido crecimiento orgánico de los ingresos respaldado por factores tanto coyunturales como seculares. Creemos que la inestabilidad geopolítica podría potenciar el aumento del gasto militar en Europa.
Empresa británica de bienes de consumo
A nuestro juicio, el nuevo equipo directivo abre la puerta a una mejora de la rentabilidad del capital para los accionistas. La compañía ha dejado atrás las operaciones de fusiones y adquisiciones que destruían valor para centrarse en un crecimiento orgánico de los beneficios en torno a un dígito medio, lo que puede impulsar la expansión de los márgenes y de los flujos de caja libre a medio y largo plazo. Creemos que una posición dominante en el mercado, respaldada por marcas de consumo consolidadas, contribuye a la estabilidad. Además, el crecimiento impulsado por el poder de fijación de precios, el aumento del volumen y el incremento de las recompras de acciones ofrece un mayor potencial de revalorización.
Perspectivas de futuro
A pesar del rápido aumento de la volatilidad, consideramos que los mercados de renta variable ofrecen oportunidades para los inversores activos orientados al crecimiento que sepan sortear el ruido y la complejidad crecientes. No obstante, para encontrar esas oportunidades deberán adoptar un enfoque distinto. En nuestra opinión, la clave reside tanto en un sólido marco de estudio de los fundamentales como en la capacidad de combinar de manera dinámica la diversificación global con el análisis de cómo los cambios estructurales están transformando las economías, los sectores y las empresas.
Descubre las soluciones que propone Wellington para hacer frente a la nueva era económica en su página web.
Artículo escrito por Steve Angeli y Álvaro Llavero, gestores de Carteras de Renta Variable y Casey Vale, especialista en Inversiones de Wellington Management.
El Instituto Español de Analistas presenta tres eventos en julio en España, en Valencia, Sevilla y Pontevedra.
En Valencia, la Delegación de Valencia del Instituto Español de Analistas presenta el próximo jueves 3 de julio, a las 11:30 , el estudio Financiación Alternativa de la Empresa Española en el Hub Empresa Banco Sabadell (C/ Justicià, 2–4, Valencia). El estudio ha sido elaborado por la Fundación del Instituto Español de Analistas junto a Finalbion y analiza cómo la financiación alternativa amplía y diversifica las soluciones financieras, complementando la oferta bancaria y contribuyendo al desarrollo económico.
Tras la presentación, se celebrarán dos mesas de debate con un panel de expertos.
El evento tendrá lugar el jueves 3 de julio, a las 11:30 en el Hub Empresa Banco Sabadell (C/ Justicià, 2–4, Valencia). En este enlace hay más información del evento por si la necesitaras y también el formulario para inscribirse.
Sobre el evento de Sevilla, la Delegación de Andalucía del Instituto Español de Analistas y la Cámara de Comercio de Sevilla presentan el próximo miércoles 9 de julio, a las 11:00, el estudio La Transformación de la Industria de Defensa en la Torre de la Cámara de Sevilla (Plaza Alcalde Sánchez Monteseirín, 2). El estudio ha sido elaborado por la Fundación del Instituto Español de Analistas. La jornada será inaugurada por Luis Cordero, gerente del Club Cámara Antares, y Carlos Bocanegra, presidente de la Delegación en Andalucía del Instituto. Tras la presentación del informe, tendrá lugar una mesa de debate.
El evento tendrá lugar el miércoles 9 de julio, a las 11:00 en la Torre de la Cámara de Sevilla (Plaza Alcalde Sánchez Monteseirín, 2).
En este enlace hay más información del evento por si la necesitaras y también el formulario para inscribirse.
Sobre el evento de Pontevedra, la Delegación de Galicia del Instituto Español de Analistas colabora en la jornada Galicia Encuentro Economía Abierta, que tendrá lugar los días 10 y 11 de julio en el Pabellón de Congresos y Exposiciones de A Toxa (Rúa Vilagarcía, 160, O Grove, Pontevedra). Se trata de un evento exclusivo que profundiza en la interacción del ecosistema empresarial y emprendedor gallego. Lola Solana, presidenta del Instituto Español de Analistas y miembro de la Junta Directiva de la Delegación en Galicia, participarán en este espacio de debate.
El evento tendrá lugar los días 10 y 11 de julio (jueves 10 de julio de 12:30h a 13:15h y el viernes 11 de julio de 11:15h a 12:15h) en el Pabellón de Congresos y Exposiciones de A Toxa (Rúa Vilagarcía, 160, O Grove, Pontevedra).
En este enlace hay más información del evento por si la necesitaras y también el formulario para inscribirse.