Frente a un mercado de renta fija que prevén volátil en 2024, Groupama AM ha optado por favorecer la aplicación de una solución de retorno absoluto a corto plazo con una direccionalidad muy limitada. “Nuestra filosofía, cuyo objetivo es generar alfa mediante la aplicación de diversas estrategias de arbitraje, nos permite mostrar un perfil más defensivo, sin poner en peligro una rentabilidad potencial atractiva”, destacan desde la gestora.
Como muestra de ello, los activos gestionados por el fondo de retorno absoluto no direccional G Fund – Alpha Fixed Income Plus (GAFI Plus) han aumentado en los últimos tres meses hasta casi 300 millones de euros, un nuevo hito para este fondo y que eleva a más de 1.000 millones de euros el patrimonio de la estrategia de Groupama AM, que incluye también al G Fund – Alpha Fixed Income (GAFI).
Mantener un enfoque neutral con respecto al mercado, con una gestión de la pérdida máxima de capital, diversificación de los motores de rendimiento y la optimización de la liquidez de las inversiones son los elementos clave del G Fund Alpha Fixed Income Plus, que le han permitido mantener “su objetivo de rentabilidad de Ester +2,5% neto, es decir, un 6,4%1 neto global en las condiciones actuales, proporcionando así una solución de cartera básica que es competitiva con los fondos del mercado monetario o de renta fija a corto plazo, a pesar de la actual caída de las primas de riesgo y, por tanto, de los rendimientos del mercado de renta fija”.
Este enfoque protege al fondo frente a la volatilidad actual y futura, en un año en el que se producirán ajustes de las expectativas de recortes de los tipos de interés, posible resistencia de la inflación, riesgos geopolíticos o innumerables procesos electorales, añaden desde la gestora, con una volatilidad a un año del 0,53% (a 29/02/2024) y estrategias de arbitraje que han arrojado rendimientos positivos en el 80% de las operaciones de este tipo en los tres últimos años2.
Desde Groupama explican que tanto G Fund Alpha Fixed Income como G Fund Alpha Fixed Income Plus se basan en la gestión de dos carteras separadas:
La cartera core, compuesta por bonos principalmente de buena calidad crediticia, con vencimientos cortos, para optimizar el perfil de riesgo/rentabilidad y garantizar la liquidez.
Una cartera alfa, cuyo objetivo es obtener un rendimiento absoluto mediante estrategias de arbitraje en los mercados de renta fija y de renta variable (a través de índices), detectando y explotando los riesgos técnicos y de liquidez.
“G Fund Alpha Fixed Income Plus se ha lanzado como respuesta al interés de los clientes por una solución de inversión de retorno absoluto más dinámica –añaden- en un contexto de mayor volatilidad de la renta fija, fuente de oportunidades de arbitraje. G Fund Alpha Fixed Income Plus tiene, por tanto, un objetivo de rentabilidad más ambicioso de Ester + 2,5%, frente al objetivo de G Fund Alpha Fixed Incomede Ester + 1,5%”.
“En conjunto, G Fund Alpha Fixed Income Plus pretende, por tanto, ofrecer un exceso de rentabilidad adicional en comparación con G Fund Alpha Fixed Income, a cambio de un perfil de riesgo más elevado pero cuidadosamente gestionado”, indican desde el equipo gestor.
Y añaden que como motores de la estrategia utilizan:
– La optimización de la gestión de la cartera principal del fondo.
– Mayor diversificación de las estrategias alfa, incluyendo: 1) estrategias que implican posiciones largas y cortas en dos activos altamente correlacionados. 2) estrategias de base negativa que implican la compra o venta de bonos y sus CDS. 3) arbitraje de primas de emisión para aprovechar desajustes en el mercado primario.
– Mayor flexibilidad en la gestión de la duración modificada por los tipos de interés y el crédito, con direccionalidad limitada en el componente de crédito.
– Gestión diversificada de las inversiones sin limitaciones de índices.
Para aprovechar al máximo las oportunidades del mercado, el fondo se gestiona utilizando las sinergias creadas por cuatro cogestores en el equipo Total Return que interactúan y se benefician de interacciones regulares con los equipos especializados en las distintas clases de activos de renta fija, así como un equipo de analistas organizado por sectores con una doble especialización financiera y ESG y los equipos de ingeniería financiera y la mesa de trading, que prestan apoyo en la detección de inconsistencias del mercado.
Ibercaja lanza una campaña para potenciar el ahorro en planes de pensiones de empleo para autónomos bajo el lema “Por fin un plan pensado para tu futuro”. Las ventajas fiscales que ofrecen estos vehículos, la necesidad de constituir un ahorro futuro que complemente la pensión de jubilación y la especialización de la entidad en planes de pensiones de empleo constituyen el mensaje principal de la nueva campaña.
El funcionamiento de estos planes de empleo para autónomos es similar a uno individual: las aportaciones son voluntarias, pueden ser únicas o periódicas a lo largo del año, y se pueden realizar en oficinas de Ibercaja y a través de banca digital o app de banca móvil, al igual que la contratación.
Además de constituir un ahorro complementario para la jubilación, estos productos incluyen cobertura para otras situaciones como el desempleo, incapacidad, dependencia, enfermedad grave y fallecimiento. Las aportaciones que se realicen reducen la base imponible del trabajador autónomo, con el límite de 5.750 euros, y las prestaciones tributan como rendimientos del trabajo, de igual manera que un plan del sistema individual.
El próximo 11 de abril se inicia un ciclo de jornadas dirigidas a autónomos, gestorías y asesorías en las que se ofrecerá información sobre esta tipología de planes de pensiones y sus ventajas fiscales. El primer evento se realizará en Zaragoza, en el Espacio Xplora Ibercaja, una jornada que próximamente también se realizará en otras localidades. Además, la entidad dispone de un simulador mediante el cual el autónomo puede calcular la desgravación fiscal según la aportación que desee realizar.
El director general de Ibercaja Pensión, José Carlos Vizárraga, destaca que “la finalidad de esta campaña es dar una mayor divulgación a estos productos destinados a los autónomos y poner de manifiesto la necesidad de realizar una adecuada planificación financiera y de constituir un ahorro para la jubilación, y hacerlo a través de un vehículo que ofrece interesantes ventajas fiscales”.
Vizárraga añade que “este producto mantiene para el autónomo la flexibilidad de un plan individual ya que es él quien toma las decisiones sobre si quiere o no aportar, la cantidad y la periodicidad, pero añadiendo una mayor ventaja fiscal y unas comisiones de gestión muy competitivas”.
Además, bajo el mensaje “Por fin un plan de futuro para las personas de tu empresa”, comienza también una campaña de concienciación e impulso de los planes de empleo para empresas que la entidad va a intensificar en las próximas semanas con nuevas soluciones de ahorro y un potente impulso comercial.
Ibercaja dispone de una gama de planes de empleo dirigida a los más de tres millones de trabajadores autónomos en España, el Plan Autónomos Ibercaja Crecimiento, con perfil inversor moderado, y el Plan Autónomos Ibercaja Equilibrado, de perfil conservador. Ambos productos permiten a este colectivo de trabajadores acceder a las mayores ventajas fiscales que ofrecen los planes de empleo, ya que pueden incrementar sus aportaciones anuales, así como su desgravación hasta los 5.750 euros, frente a los 1.500 euros de límite establecido para los planes de pensiones individuales.
Ibercaja Pensión administraba a 31 de diciembre 4.400 millones de euros en planes de pensiones de empleo de 71.000 partícipes, lo que supone una cuota en el mercado superior al 12% y ocupa la tercera posición del ranking sectorial por volumen gestionado.
La Asociación Española de Fintech e Insurtech (AEFI), afronta 2024 con el objetivo de seguir trabajando para fomentar el óptimo desarrollo del ecosistema fintech e insurtech en España. Para ello ha elaborado un informe donde recoge los principales deseos y peticiones para este nuevo año, en el que la asociación considera clave apostar por la colaboración entre instituciones e industria, mejorar el acceso a la financiación y reducir las trabas burocráticas al emprendimiento, para propiciar un escenario que permita crecer significativamente a la industria fintech española. Esta ya ha demostrado su capacidad para innovar y lograr desarrollos tecnológicos al máximo nivel mundial, la asignatura pendiente es demostrar la capacidad de adquirir tamaño crítico sin tener que dejar España.
Reforzar la colaboración con las instituciones
«La AEFI ha manifestado en numerosas ocasiones su continuo compromiso al servicio a las empresas y profesionales del ecosistema fintech, demostrando ser una representación veraz de la industria financiera en España y desempeñando un papel activo para facilitar la acción de los agentes públicos, lo que adquiere especial relevancia en un momento crucial para impulsar el emprendimiento y la innovación financiera. Sin duda, uno de los hitos más claros de este compromiso ha sido la labor desarrollada por la asociación en la definición y puesta en marcha del sandbox financiero», explica el informe.
La consolidación de alianzas con diversos interlocutores, incluyendo a las administraciones públicas, constituirá uno de los pilares de la estrategia de la AEFI en los próximos meses. La asociación ya ha enviado un comunicado al nuevo ministro de Economía, Carlos Cuerpo, poniendo al servicio del nuevo ejecutivo toda su experiencia y conocimiento y recordando la necesidad de que todas las administraciones impulsen la innovación y el progreso, siguiendo el ejemplo de países como Francia, donde el apoyo público ha permitido posicionar al país como un referente fintech a nivel internacional.
«Los espacios de colaboración público-privada son fundamentales para el impulso de la industria. En este sentido, el futuro Foro Nacional de Empresas Emergentes constituye una gran oportunidad y AEFI se compromete a trabajar por trasladarle el conocimiento y la visión del ecosistema fintech, desde la doble perspectiva de su carácter innovador y del desarrollo de soluciones de financiación alternativa», añaden desde la entidad.
Trabajar para la mejora y armonización del entorno regulatorio
En los últimos años en España se han desarrollado diferentes normativas que afectan directamente a verticales concretas de negocio del ecosistema fintech, o al conjunto de ellas, muy positivas para el desempeño de su actividad, como el Sandbox financiero, la ley ‘Crea y Crece’, la ley de Startups, entre otras.
«Resulta prioritario apostar por la actualización de normativas que permitan armonizar el entorno regulatorio con el resto de los países de nuestro entorno. Aunque actualmente ya se negocia en la UE el nuevo paquete de pagos (PSD3 y PSR), España tiene pendiente garantizar el cumplimiento integral de PSD2, concretamente en materia de open banking, para lo que es necesario un esfuerzo coordinado del supervisor y el conjunto del ecosistema. Respecto a nueva normativa son muchos los retos: el Reglamento MiCAR, ante el que España debe definir el régimen transitorio para los proveedores de servicios de criptoactivos hasta diciembre de 2025 y facilitar una adaptación fluida al nuevo marco; la Directiva de Crédito al Consumo, que es una oportunidad para crear un marco normativo competitivo, combinando todas las garantías de protección y el impulso al desarrollo del mercado; o la Directiva sobre información corporativa en materia de sostenibilidad, conocida como Directiva CSRD, que será clave en el desarrollo de las finanzas sostenibles y cuya transposición debe culminarse con prontitud, dado que el plazo acaba en julio de 2024 y agilizar el acceso de las Entidades de Dinero Electrónico y Entidades de Pago a los pagos instantáneos», comentan.
Una reducción de las trabas burocráticas
AEFI cree que, aunque ha habido mejoras, todavía existe un exceso de trabas burocráticas en España, un país con una estructura del mercado laboral muy rígida y con un coste unitario alto, a lo que se suma una estructura fiscal no muy incentivadora para desarrollar proyectos fintech, al menos en comparación con países de nuestro entorno.
«En un entorno mundial inestable, las empresas fintech se están adaptando estratégicamente para enfrentar este desafío, pero a las condiciones económicas propias, se suman obstáculos burocráticos, legales y fiscales que complican su desarrollo en España. A diferencia de países europeos que han establecido marcos regulatorios más propicios, el entorno regulatorio en España puede convertirse en un impedimento que ralentiza las operaciones de las empresas, pese a contar con un mercado confiable y seguro, con numerosas garantías para los usuarios financieros, pero al que le penalizan numerosas barreras para el emprendimiento», agrega la entidad.
Incentivar la atracción de inversión extranjera
Según el informe, España debe mirar ejemplos de otros países que se han convertido en referencia a la hora de atraer inversión extranjera en el ámbito de la innovación financiera, como Irlanda, al que golpeó profundamente la crisis financiera de 2008, pero que desarrolló cambios que le han situado a la vanguardia de la innovación financiera.
«Para ello, hay que crear polos de innovación basados en la reducción de las trabas burocráticas y en contar con entornos fiscales amables que permitan dar el impulso definitivo a muchas empresas con interés por establecerse en España, y aprovechar las condiciones que ofrece nuestro país, pero que todavía prefieren mantenerse en otros mercados por razones fiscales. Además, España cuenta con elementos propicios para convertirse en el destino de proyectos internacionales que vean el sur de Europa como alternativa prioritaria para asentar sus nuevos proyectos», puntualizan .
Mayor fiscalización y equidad en el reparto de ayudas
Como explica el comunicado, la asignación de los fondos Next Generation ha puesto de manifiesto algunos problemas a la hora de lograr una eficiencia en el reparto del dinero público. Los últimos fondos han ido dirigidos de forma predominante al sector público, y de la fracción que ha llegado al sector privado, la mayor parte a grandes compañías, en algún caso centenarias, y a inversiones dirigidas hacia la transición verde y la movilidad sostenible. Sin menosprecia la relevancia de estas áreas, el impacto en la industria financiera, las pymes y otros actores comprometidos con la innovación financiera que aporta verdadero valor añadido a la economía española ha sido prácticamente nulo. Por lo que conviene fomentar programas de préstamos bancarios para este tipo de compañías, avalados por el ICO, la creación de herramientas como fondos de coinversión público-privado para préstamos, siguiendo como ejemplo el Reino Unido, o abrir líneas de financiación específicas para proyectos fintech.
Trabajar para retener el talento en España
«En España hay talento sobrado para liderar iniciativas de innovación financiera, pero falta acompañarlo de un marco más estable. El sector fintech necesita de profesionales cualificados en muchas áreas: economía, ingeniería informática, derecho, comunicación…para consolidar su posición como un espacio idóneo para desarrollarse en la industria financiera. La AEFI le pide a 2024 que sea el momento de impulsar el uso de herramientas regulatorias que fomenten la inversión en España y fortalezcan la confianza en la industria financiera de nuestro país. AEFI cree que es un fracaso desaprovechar el potencial emprendedor e innovador y el talento de los profesionales locales, así como el tiempo y el dinero invertido en su formación, por lo que considera fundamental que la regulación acompañe el ritmo de la innovación y contribuya a posicionar a las empresas españolas en el mercado y que los propios profesionales puedan desarrollar su carrera en España», reflexionan desde la AEFI.
Fomentar la educación financiera en España
Hay una falta de cultura financiera general en España, que requiere de un esfuerzo general para que la ciudadanía sepa acceder a productos y servicios financieros que realmente le ayuden y ahí es donde AEFI cree que el ecosistema fintech y sus empresas, por su facilidad para llegar a un perfil heterogéneo de clientes, tienen que jugar un papel relevante. AEFI apuesta por la educación financiera, incluso desde etapas educativas tempranas, y también por fomentar la figura del empresario, por lo que apuesta por hacer pedagogía para ver el papel del emprendedor como alguien que arriesga su dinero para poner en marcha un negocio que, si tiene éxito, propicia creación de empleo y riqueza.
«AEFI espera tener una fructífera colaboración con la Autoridad Administrativa Independiente de Defensa del Cliente Financiero en materia de educación financiera, al ser este uno de los retos estratégicos del nuevo organismo», concluyen.
Un esfuerzo en conjunto para que el FinTech alcance una nueva dimensión
Según AEFI, 2024 será un año importante para la asociación en su faceta creadora de literatura diseñada para mejorar el ecosistema, puesto que se encuentra inmersa ya en la elaboración de una segunda edición del Libro Blanco de FinTech en España, que aspira a convertirse en una actualización y extensión del documento creado en 2017, con el propósito de construir un marco que recoja ideas y propuestas de cambios normativos que impulsen la actividad empresarial de los operadores fintech en el escenario actual. Este proyecto se posiciona como uno de los más ambiciosos para la asociación de cara a los próximos meses, a la hora de impulsar un marco de ideas y proponer cambios normativos que favorezcan la actividad empresarial de operadores fintech en España.
Newton Investment Management Limited (Newton), parte de BNY Mellon Investment Management, ha anunciado el nombramiento de Tjeerd (TJ) Voskamp como Global Head of Distribution, un puesto de nueva creación.
Reportará a Euan Munro, consejero delegado de Newton, y se unirá al comité de dirección ejecutiva de la firma. Será responsable de impulsar las estrategias de distribución institucional, así como de colaborar estrechamente con BNY Mellon Investment Management para aprovechar sus canales de distribución. El nombramiento apoya la expansión de Newton como gestor de activos global, con 83.900 millones de libras esterlinas de activos actualmente bajo gestión (a 31 de diciembre de 2023).
Voskamp aporta más de dos décadas de experiencia en la dirección de grandes equipos de distribución mundial. Procede de J O Hambro Capital Management, donde fue director de Distribución para el Reino Unido, Europa y Asia y se encargó de identificar oportunidades de crecimiento internacional y supervisar la expansión de la distribución europea de la empresa. Anteriormente, Voskamp dirigió equipos de ventas globales que cubrían los canales de clientes institucionales y mayoristas en Aviva Investors, Schroders y Columbia Threadneedle.
«TJ cuenta con una consolidada red de relaciones y aporta su experiencia en la gestión de ventas y en el uso de herramientas de datos para mejorar la eficiencia y la experiencia de los clientes», afirmó Munro. «Estoy encantado de trabajar estrechamente con él mientras buscamos mejorar la huella de distribución global de Newton y continuar trabajando con nuestros clientes para ofrecer sus resultados de inversión deseados».
Foto cedidaTommaso Corcos, nuevo responsable de la función de Wealth Managment Divisions del Grupo Intesa Sanpaolo.
Intesa Sanpaolo revitaliza su organización. Según ha anunciado la firma, a propuesta de su actual consejero delegado, Carlo Messina, ha apostado por una nueva estructura organizativa que aprovecha sus puntos fuertes y que se centra en la innovación. “La renovada organización prepara al Grupo para afrontar los retos del sector bancario europeo, aprovechando los mejores nuevos talentos directivos y valorando los recursos internos, todo ello con una perspectiva a largo plazo”, explican.
Su nueva organización, que entraró en vigor el 2 de abril, incluye una única unidad de supervisión que consolida las actividades de gestión de patrimonios del Grupo, con el objetivo de acelerar el crecimiento y aumentar la integración de fábricas de productos. Según indican, esta nueva estructura de Divisiones de Gestión Patrimonial, dirigida por Tommaso Corcos, proporcionará una supervisión unificada de los negocios de gestión patrimonial. Esta estructura incluye la división de Seguros, dirigida por Virginia Borla; gestión de activos, dirigida por Maria Luisa Gota; y banca privada, dirigida por Lino Mainolfi.
Eso significa que las tres empresas de esta parte del negocio -Eurizon para la gestión de activos, Fideuram – Intesa Sanpaolo Private Banking para el asesoramiento financiero y la banca privada; Intesa Sanpaolo Vita Group para las actividades de seguros- seguirán siendo empresas separadas, con sus propios consejos de administración, presidentes y consejeros delegados, que seguirán centrándose en sus actividades específicas. La nueva función Wealth Management Divisions, dirigida por Tommaso Corcos, coordinará las estrategias de las tres empresas, con el objetivo de acelerar su crecimiento y fomentar una mayor integración de las fábricas de productos y las redes minoristas, de asesores financieros y de banqueros privados.
Por otro lado, Saverio Perissinotto, que ha dirigido con éxito el crecimiento de la división de Gestión de Activos en los últimos años, logrando importantes resultados, será Presidente de Eurizon Capital SGR.
Además, han anunciado que un Comité Directivo de «Comisiones y Honorarios», presidido directamente por el consejero delegado, se centrará en el seguimiento, la supervisión y la coordinación de las estrategias destinadas a aumentar los ingresos por comisiones en todas las divisiones del Grupo.
La entidad también ha decidido apostar por la sostenibilidad. En este sentido, se ha creado un área de gobierno de director de Sostenibilidad encargada de la dirección estratégica de las cuestiones de sostenibilidad, la planificación de actividades y el seguimiento. Este área, dirigida por Paola Angeletti, incorporará actividades actualmente distribuidas por diversas unidades organizativas del Grupo, e incluye la creación del área de gobierno de Responsable de Impacto Social, dirigida por Paolo Bonassi. El área de gobierno de Responsable de Impacto Social también incorporará la estructura de Arte, Cultura y Patrimonio Histórico, el Centro de Innovación y Neva SGR, junto con una nueva unidad de «ESG Steering» dedicada a la dirección estratégica y el seguimiento de las cuestiones ESG.
“Estamos revitalizando Intesa Sanpaolo con una organización que reúne a personas jóvenes en puestos clave y a directivos con gran experiencia. Nuestra capacidad para generar nuevos talentos directivos garantiza que el Banco siga siendo un líder europeo duradero. Mi más sincero agradecimiento a Fabrizio Dabbene, Stefano Del Punta, Paolo Grandi y Saverio Perissinotto. Deseo mucho éxito a quienes asumen nuevas funciones y a todo el personal de Intesa Sanpaolo. Estoy seguro de que tanto el Banco como las comunidades a las que servimos pueden confiar en ellos. Al igual que pueden confiar en mi propio compromiso personal en los próximos años. Somos líderes en Europa por nuestra solidez financiera, nuestra rentabilidad sostenible, la singularidad de nuestro modelo de negocio, nuestra capacidad de innovación tecnológica y nuestra sensibilidad hacia las cuestiones de ESG. Hoy hemos dado otro paso importante en el crecimiento de nuestro Grupo, pilar de la economía real y social de Italia. Todo esto es posible gracias a la calidad de nuestra gente”, ha indicado Carlo Messina, consejero delegado de la entidad.
La singularidad de Japón ha llegado a su fin. En marzo, el Banco de Japón (BoJ) endureció su política monetaria por primera vez en 17 años y aumentó su confianza en cumplir el objetivo de inflación del 2% a medio plazo, confirmando el círculo virtuoso entre salarios e inflación, durante la negociación salarial de primavera. Según los expertos de las firmas de inversión, más allá de las consecuencias de esta decisión para el mercado de renta fija, Japón ha ganado atractivo para los inversores también en el mercado de renta variable.
Desde Scope Rating, que ha confirmado el rating soberano del país como A y revisado la perspectiva a estable de su deuda, explica que la mejora de las perspectivas de inflación gracias a los recientes niveles elevados de inflación, que refuerzan estructuralmente las expectativas de inflación, contrarresta un historial moderno de deflación de precios y favorecen el crecimiento económico nominal; y el apoyo de una mayor inflación a las difíciles perspectivas de sostenibilidad de la deuda a largo plazo. “Además, se reconoce que la sostenibilidad de la deuda sigue contando con el apoyo de los tipos de interés ultrabajos y las compras de activos, incluso cuando el Banco de Japón abandona adecuadamente algunos aspectos de su política no convencional de la última década”, explican.
Los expertos apuntan que el BoJ aún tiene tarea por hacer como, por ejemplo, reducir su balance. Se espera que el volumen de bonos JGB aumente en 75 billones de yenes entre 2023 y 2027, lo que supone menos crecimiento respecto a años anteriores, en un contexto de reducción de los déficits fiscales. Esto aliviará parte de la presión de la oferta. Dado el predominio de los JGB en el balance del BoJ y la necesidad de acomodar el crecimiento nominal, el BoJ seguirá interviniendo en el mercado de JGB.
“Esperamos que el banco central aumente el volumen de sus tenencias de JGB, suponiendo que siga ampliando anualmente su balance en consonancia con el crecimiento potencial y la tasa de inflación objetivo. Por tanto, seguirá absorbiendo casi 2 billones de yenes al mes de media (además de reinvertir los bonos que venzan). En consecuencia, creemos que no se mantendrá la tendencia a la baja de las compras netas que ha surgido en los últimos meses”, explican Christoph Siepmann, economista senior, y Florian Späte, estratega senior de bonos de Generali AM (parte de Generali Investments).
Bonos japoneses
Para estos expertos de Generali AM, el nuevo aumento de la participación del BoJ dejará su huella en los bonos JGB a 10 años en particular. Además, otro factor crucial que impulsa el rendimiento de los JGB es el nivel del tipo de interés oficial. “Las expectativas al respecto han aumentado desde principios de año. Concretamente, los participantes en el mercado están valorando ahora un tipo de alrededor del 0,25% para finales de 2024, de aproximadamente el 0,5% para finales de 2025 y de casi el 0,7% para finales de 2027. Esto significa que han aumentado moderadamente, entre otras cosas debido al entorno internacional”, advierten Siepmann y Späte.
En su opinión, estas subidas significativas de los tipos de interés oficiales son excesivas dada la tasa de inflación, que se espera que vuelva a caer por debajo del objetivo del 2%; y creen que en este entorno, no parece apropiado un endurecimiento de las condiciones monetarias. “La ausencia de subidas de los tipos de interés oficiales se dejará notar especialmente en el tramo corto de la curva. En la actualidad, los mercados financieros esperan rendimientos a 2 años del 0,25% a un año y del 0,6% a tres años, pero vemos poco recorrido al alza desde el nivel actual del 0,15%”, añaden.
Renta variable
Para los expertos de las firmas de inversión, los cambios en la economía generados por el alza de la inflación impulsan la renta variable japonesa. Además, algo tan sencillo como un gobierno estable, el estado de derecho y relaciones diplomáticas amistosas con los EE.UU. han hecho que Japón emerja como un destino atractivo.
Jean Francois Chambon, gestor de renta variable japonesa de Ofi Invest AM, opina que el momento actual es especialmente favorable para la renta variable japonesa, debido a una serie de factores, entre ellos los cambios estructurales en la economía desde el regreso de la inflación. Estos cambios pueden suponer nuevas oportunidades de inversión, y mayor crecimiento para diferentes sectores; y el levado atractivo de los precios.
Otros factores que señala Chambon son: “La reforma del Tokio Stock Exchange (TSE), que busca promover el conocimiento entre los inversiones de las acciones infravaloradas con vistas a incrementar su atractivo potencial; los cambios en la NISA (Nippon Individual Savings Account), que promueven la inversión en renta variable de los particulares y el mayor interés de los inversores extranjeros impulsado por el aumento de los beneficios empresariales, gracias a la subida de la inflación”.
Por su parte, Dan Carter, gestor de inversiones, renta variable japonesa de Jupiter AM, coincide con algunos de estos factores como catalizadores del interés por la renta variable japonesa y matiza algunos. “El crecimiento de las ganancias de las empresas japonesas continúa siendo impresionante, con unos resultados empresariales del último trimestre de 2023, anunciados recientemente, superando las expectativas. Las previsiones para el año completo han sido revisadas y han aumentado. Esto debe verse como una continuación de una tendencia multianual de mejora de la rentabilidad entre las empresas japonesas. El progreso silencioso de Japón ha comenzado a ser apreciado por los inversores recientemente”, afirma Carter.
Otra razón fundamental para la fortaleza del mercado japonés señala a la creciente esperanza de una reforma corporativa: “A pesar de las recientes mejoras en la rentabilidad, las empresas japonesas aún ganan menos dinero del que deberían y atan demasiado capital para hacerlo. Durante años, desde el stablishment japonés se ha instado a que el sector corporativo preste más atención al rendimiento; la tentativa más reciente, por parte de la Bolsa de Tokio, ha tenido más éxito que la mayoría”.
Por otro lado, considera los factores técnicos también han estado a favor de Japón. “Los inversores globales están generalmente infraponderados en el mercado, lo que significa que no se saca partido a su sobrerendimiento. Parte de este infraponderamiento está siendo cubierto. Una salida de accionistas del mercado chino, que una vez fue un destino favorito para los inversores globales, ha visto cómo el capital busca un nuevo hogar”, añade el gestor de Jupiter AM.
Desde Saxo Bank destacan que la macroeconomía se une al momentum, ya que sus empresas han protagonizado grandes operaciones globales y de innovación tecnológica, y cuenta con un entorno normativo estable. “Otros vientos de cola han contribuido a que la Bolsa nipona alcance nuevos máximos: la debilidad del yen; los tipos de interés negativos/bajos; las reformas del gobierno corporativo; el retorno de la inflación; el descuento de valoración; los riesgos geopolíticos; la innovación tecnológica; la confianza de Warren Buffet en las perspectivas a largo plazo de la renta variable japonesa; la baja sensibilidad a los tipos de interés; y los argumentos a favor de la diversificación” ,destaca la entidad financiero en su último análisis.
Qué esperar del yen
Dentro de este panorama favorable para la renta variable japonesa, la gestora Ofi Invest AM identifica dos riesgos: la apreciación del yen, sobre todo frente al dólar, en un escenario probable de desaceleración económica global, y las fluctuaciones monetarias (posibles bajadas de tipos de interés) para mitigar este escenario.
Sobre el yen, Claudio Wewel, estratega de divisas en J. Safra Sarasin Sustainable AM, apunta que los datos estadounidenses sean clave para el yen. En concreto, advierte de que unos datos decepcionantes del mercado laboral podrían impulsar la divisa al alza de forma significativa.
“Hasta ahora, los retrocesos del riesgo indican que el mercado está posicionado para un fortalecimiento moderado del yen, aunque el sesgo de las expectativas se ha vuelto algo menos pronunciado. Por el momento, la baja volatilidad de las divisas sugiere que el yen seguirá siendo una moneda de financiación para las operaciones de carry trade. De cara al futuro, nuestra atención se centra en la evolución de los tipos de interés mundiales. En nuestra opinión, las expectativas del mercado sobre la trayectoria de los tipos de interés de la Reserva Federal deberían ser clave. Con un tipo de los fondos federales por encima del 5%, el margen para recortar los tipos es significativo una vez que el impulso macroeconómico se suavice de forma más significativa en EE.UU. Y, si la historia sirve de guía, los tipos se reducirán en los próximos años y, las expectativas de tipos probablemente reaccionen a unos datos más débiles del mercado laboral de forma no lineal, lo que debería empujar al yen significativamente al alza”, concluye Wewel.
2023 fue un año en que la mayoría de los inversores tuvo que recalibrar sus posiciones y buscar estrategias que les aportaran rendimientos atractivos, huyendo de la correlación entre la renta fija y la renta variable, y volviendo a mirar las oportunidades en el segmento de renta fija. Según los datos de Morningstar, PIMCO GIS Income, iShares Core MSCI World ETF y AB American Income Portfolio fueron los tres fondos más vendidos en 2023.
Según explica Jonathan Miller, director de Análisis de Gestoras de Morningstar, a la publicación especializada en fondos Ignites Europe, “las gestoras de fondos con un gran pedigree en el segmento de renta fija” se ha visto beneficiado por la decidida vuelta de los inversores a buscar “oportunidades” en este universo.
De hecho, la estrategia de PIMCO, el PIMCO GIS Income, que lidera este ranking cuenta con 64.000 millones bajo gestión, ya fue una de las más vendidas el año pasado. Este año, el fondo atrajo 10.000 millones de euros, lo que permitió que los activos bajo gestión del fondo crecieran un 17%. Según explica la gestora en su web, el fondo invierte principalmente en una gama de valores de renta fija emitidos por sociedades o gobiernos de todo el mundo que proporcionan un nivel de ingresos constante y en aumento.
Respecto al fondo de AllianceBernstein, el AB American Income Portfolio, usa un enfoque multisectorial de bonos denominados en dólares estadounidenses. “Equilibra dinámicamente el crédito y la duración invirtiendo en sectores de alto rendimiento y los mercados emergentes para mejorar el ingreso y reducir el riesgo de tasa de interés, y en bonos gubernamentales de alta calidad para aliviar al riesgo crediticio cuando los mercados sufren tensiones”, señala la gestora en su web.
El liderazgo de los ETFs
No es casualidad que entre las tres primeras posiciones de este ranking haya un ETF. Los vehículos de inversión pasiva han vivido un 2023 exitosos. Según recogen en Ignites Europe, los grandes gestores de fondos registraron flujos por valor de 13.600 millones de euros, mientras que las firmas de gestión pasiva cosecharon 32.500 millones de euros en entradas. En este sentido, llama la atención que de los nueve primeros puestos de esta tabla, seis de las estrategias sean de vehículos de ETFS. El liderazgo es para BlackRock, cuya estrategia iShare Core MSCI World ETF, que replica la rentabilidad de un índice compuesto por compañías de países desarrollados, fue la segunda más vendida en toda Europa.
“El crecimiento de la industria de los ETFs está claramente reflejada en el ranking de los fondos más vendidos, con tres productos de iShares, así como fondos de Invesco y Vanguard, entre los diez productos más populares”, indican desde Ignites Europe. Según la publicación, otro dato relevante es que cada vez más vehículos pasivos han alcanzado el hito de los 10.000 millones de euros bajo gestión en 2023. “A finales del año pasado, había 34 productos en Europa que cumplen este récord, recortando cada vez más la distancia con los fondos activos, donde nos encontramos con 37 productos con este patrimonio”, añaden.
Generali ha completado la adquisición de Conning Holdings Limited (CHL) y sus filiales a Cathay Life, filial de Cathay Financial Holdings, tal y como se anunció el 6 de julio de 2023. Según explica la firma, como resultado de la transacción, todas las acciones de CHL han sido aportadas a Generali Investments Holding S.p.A. (GIH), a cambio de acciones de nueva emisión, y Cathay Life se ha convertido en accionista minoritario de GIH, con una participación del 16,751%, estableciendo una colaboración a largo plazo con Generali en el negocio de gestión de activos.
Además, la adquisición incluye Conning, especializada en seguros y renta fija institucional, y sus filiales Octagon Credit Investors (préstamos bancarios, CLO y crédito especializado), Global Evolution (deuda de mercados emergentes) y Pearlmark (deuda y renta variable inmobiliaria). Según indica, como resultado de esta operación, el total de activos bajo gestión del Grupo aumenta a 887.000 millones de dólares (803.000 millones de euros).
En línea con el plan estratégico de Generali «Lifetime Partner 24: Impulsar el crecimiento», la combinación mejora el negocio global de gestión de activos del Grupo reforzando sus capacidades de inversión, haciendo crecer su negocio de clientes terceros y ampliando su presencia en EE.UU. y Asia. Desde la firma insisten en esto último y apuntan que con esta operación refuerzan sus capacidades en estas dos regiones (EE.UU. y Asia) no solo en el segmento asegurador, sino de cara a la oferta que pueden presentarles al conjunto de los inversores institucionales.
Además, de ampliar sus capacidades geográficas, su oferta se amplía y refuerza su visión sobre la relevancia de especializarse. En concreto, mejoran su oferta en renta fija emergente, en renta variable real estate estadounidense. renta fija investment grade y crédito alternativo. «Aunque a nivel de estructura nada cambia, en nuestro día a día supone disponer de más oferta de producto. Esta operación, sobre todo, viene a reafirmar nuestro enfoque de especializarnos en activos que no teníamos y ampliar las capacidades en aquellos que ya ofrecíamos», indican desde la compañía.
Por su parte, Carlo Trabattoni, consejero delegado de Generali Asset & Wealth Management, destaca: «La adquisición de Conning y sus filiales nos permite continuar el exitoso desarrollo de un ecosistema de gestión de activos global y diversificado. Hemos reforzado nuestras capacidades con importantes competencias de inversión de alta calidad en renta fija estadounidense y de mercados emergentes, crédito alternativo e inmobiliario estadounidense. Generali está estableciendo una firma de gestión de activos global de primer orden, ahora una de las 10 mayores gestoras de activos de Europa, reconocida por ofrecer rentabilidades de inversión consistentes y establecer relaciones duraderas y de confianza con nuestros clientes».
Jeremiah Buckley, gestor de renta variable estadounidense estilo income y growth en Janus Henderson Investors. Jeremiah Buckley, gestor de renta variable estadounidense estilo income y growth en Janus Henderson Investors
El año 2023 estuvo marcado por tantas incertidumbres que, para muchas estrategias de inversión, no fue hasta el cuarto trimestre cuando llegó la oportunidad de generar retornos. Tal fue el caso de la estrategia Balanced de Janus Henderson Investors; en un webinar celebrado recientemente por la firma, los gestores Jeremiah Buckley y Michael Keough, responsables respectivamente de las asignaciones a renta variable y renta fija, aportaron claves sobre el comportamiento de la estrategia en el último trimestre de 2024 y dieron claves sobre el posicionamiento en esta primera parte de 2024.
Ambos gestores explicaron que la razón del cambio de régimen en los mercados a vino dada por el cambio de discurso de la Reserva Federal en diciembre, hacia una posición más dovish al avanzar la posibilidad de que sí podría conducir a la economía estadounidense hacia un soft landing. Esto provocó una fuerte caída en las tires a lo largo de la curva de tipos de interés y un estrechamiento en los diferenciales de la deuda corporativa de los que se benefició la estrategia en la parte de renta fija.
Keough puso en valor la capacidad para generar rendimientos positivos de la estrategia: “Una de las razones para invertir en una estrategia equilibrada es que puedes mantenerte invertido a lo largo de diferentes ciclos de mercado y puedes generar buenos retornos con menos volatilidad”.
La estrategia Balanced, activa desde 1992, ha invertido históricamente entre el 35% y el 65% de su cartera en renta variable, dependiendo del grado de convicción de los gestores en cada momento del ciclo económico. Jeremiah Buckley comenzó 2023 con una asignación del 56%, pero muy pronto el equipo incrementó rápidamente la asignación, “dada nuestra confianza en el crecimiento de los beneficios y en nuestro convencimiento de que la Fed se estaba acercando al final de su ciclo de subidas de tipos”. Así, para finales del primer trimestre ya estaban en el 60% de renta variable y esta posición se mantuvo estable el resto del año, terminando 2023 en el 61%.
De esta forma, la asignación a renta variable terminó 2023 con su mayor exposición por sectores a tecnologías de la información (18,7%), consumo discrecional (8,8%), ciencias de la salud (8,7%), finanzas (8,6%) y servicios de comunicación (5,7%), mientras que mantuvo una exposición mínima a sectores como energía (1,8%) o materiales básicos (0,5%). “En este periodo, favorecimos a compañías más cíclicas en cartera, dado el rápido cambio en las expectativas sobre los tipos de interés, aunque nos seguimos centrando en compañías capaces de crecer a tasas de interés compuesto multi anuales que son menos dependientes del entorno macro”, aclaró Buckley.
Perspectivas optimistas para 2024
De cara a este año, ambos gestores muestran su optimismo en sus respectivas clases de activo. Se apoyan en la estimación de que la Reserva Federal iniciará un nuevo ciclo de bajadas de tipos – anticipan un recorte de 75 puntos básicos en 2024- en un contexto de relativa fortaleza de la economía estadounidense. Michael Keough destaca por un lado que el mercado laboral estadounidense sigue encontrándose en mínimos, lo que significa que los consumidores estadounidenses tienen empleo y eso les permite seguir gastando y así apoyan a la economía. Por otro lado, observa que el mercado laboral está volviéndose más equilibrado, al haberse reducido la tasa de nuevas vacantes de empleo, que interpreta como un indicio de se está aliviando la tirantez del mercado laboral. “Esto es un avance importante no solo para la economía, también para la renta fija y la renta variable, porque es el inicio de un cambio de régimen”, afirma. Keough añade que, con un mercado laboral menos tenso y la inflación en trayectoria descendente, los inversores están adentrando ahora “en un entorno diferente para asumir riesgos”.
“Pensamos que los rendimientos de la renta fija son atractivos y que las perspectivas de crecimiento de los beneficios corporativos son favorables en 2024”, corrobora Buckley. Éste avanza que, dadas estas previsiones más optimistas, la estrategia Balanced ha empezado 2024 optimista con el gasto en consumo discrecional, sobreponderando los sectores de servicios de consumo, software y servicios y entretenimiento.
Las otras dos grandes temáticas a las que han buscado exposición en cartera son la innovación en el sector de las ciencias de la salud, con inversión en compañías del segmento, y una exposición a semiconductores por su previsión de que las empresas seguirán adoptando progresivamente la IA generativa, lo que llevará a una mejora en las ganancias por productividad y el avance hacia una economía más digital. Esto explica que el top 5 de posiciones esté ocupado en la actualidad por Microsoft, Apple, Alphabet, NVIDIA y Mastercard. Buckley explica que buscan compañías “con un fuerte crecimiento secular que coticen a valoraciones comprensibles”, al tiempo que busca una exposición equilibrada por sectores “por si la economía se debilita de forma inesperada”.
En cambio, en la asignación a renta variable el equipo ha optado por infraponderar la exposición a bancos, energía y telecos, así como a sectores con bajos retornos sobre el capital (REITs, utilities, materiales) y a sectores que puedan verse afectados por la combinación de tipos más elevados y caída del ahorro acumulado durante la pandemia, como hardware o automóviles.
En la parte de renta fija, Keough detalla que la estrategia presenta actualmente una duración efectiva de 6,3 años, con una apuesta clara por la calidad (un 48,5% de la asignación está en bonos con rating AA y otro 12,8% en rating AAA). Los otros dos grandes temas que refleja la asignación de renta variable son la selección de bonos, con una asignación dinámica a grandes bancos sistémicos y en bonos de compañías tecnológicas que presentan fuertes tasas de crecimiento por su exposición a semiconductores e IA, así como una posición larga en riesgo de MBS de agencia (28,8%), un posicionamiento en ABS y CMBS que sean AAA y exposición a infraestructuras ligadas a la digitalización, como centros de datos de gran escala. La deuda IG supone un 25% de la asignación a renta fija y los MBS no respaldados por agencias, un 8,4%. En cambio, la estrategia infrapondera los treasuries respecto a su índice, con un peso del 17,7%.
Fuente: Janus Henderson webcast de Balanced – realizado el 21 de marzo de 2024.
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Foto cedidaAndrea Giannotta, director del equipo de Renta Fija de Eurizon Capital SA.
Andrea Giannotta, director del equipo de Renta Fija de Eurizon Capital SA, prioriza dos ideas fundamentales de inversión de cara a este año: la deuda pública a corto plazo y el yen. En una reciente visita a España, el experto señaló que la FED y el BCE están en vías de empezar a relajar sus políticas monetarias este año, lo que traerá oportunidades en los bonos soberanos.
El entorno macroeconómico es favorable para que los bancos centrales empiecen a normalizar sus respectivas políticas monetarias. Giannotta recuerda que en su última reunión, el BCE decidió mantener el nivel de los tipos de interés sin cambios, una decisión esperada por los mercados, que vino acompañada “de una nueva ronda de proyecciones económicas” por parte del organismo. En ellas, el experto resalta la revisión a la baja de las estimaciones de inflación -sobre todo las de 2024- por las menores presiones energéticas. A día de hoy, según Giannotta, los mercados esperan que el BCE empiece a bajar los tipos de interés en su reunión de junio y alcanzar una reducción acumulada de 100 puntos básicos a finales de año.
Pero el experto también recuerda que, desde inicios de 2024, el mercado ha reevaluado significativamente sus expectativas de futuras medidas de política monetaria como respuesta a los datos más sólidos de lo esperado. En este sentido, se muestra conforme con el timing del primer recorte y con el sesgo acomodaticio general del precio de la política monetaria prevista para este año. “Los datos de crecimiento son débiles, aunque han tocado fondo recientemente; la inflación sigue una senda descendente y las anteriores subidas de los tipos de interés siguen perjudicando la actividad económica, lo que en última instancia debería ayudar a empujar la inflación hacia el objetivo del 2% del BCE y hacer que éste confíe más en empezar a normalizar su política monetaria”, explica Giannotta.
Según Giannotta, dadas las perspectivas para la política monetaria del BCE en 2024, “los inversores que actualmente mantienen productos del mercado monetario deberían considerar tácticamente la posibilidad de ampliar la duración de sus carteras” y así poder aprovechar que los tipos de interés bajen y aumenten el perfil general de riesgo/rentabilidad de sus inversiones.
No en vano, la opinión de Giannotta apunta a que los monetarios permiten a los inversores aprovechar el componente «carry» del mercado, de tal manera que mantienen al mismo tiempo una posición defensiva en términos de duración. “Estos productos funcionaron bien el año pasado, cuando los bancos centrales seguían mostrándose restrictivos y la volatilidad de los mercados se acentuó como respuesta a unas perspectivas macroeconómicas inciertas”, señala el experto, pero matiza que a día de hoy, el escenario ha cambiado sustancialmente. La razón es que los tres principales bancos centrales ya no tienen un approach restrictivo, sino que están a punto de empezar a normalizar su política monetaria a medida que prosigue el proceso de desinflación y las anteriores subidas de los tipos de interés pasan factura a la actividad económica.
Como consecuencia de la gradual disminución de la incertidumbre de las perspectivas macroeconómicas en los últimos meses, la volatilidad en el mercado de bonos ha evolucionado a la baja, por lo que, a juicio del experto, los inversores deberían aprovechar tácticamente el componente de «duración» del mercado y desplazar sus participaciones de los fondos del mercado monetario a productos con un perfil de duración más elevado. Su preferencia se centra en la parte a corto plazo de las curvas de rendimiento, “que ofrecen un mejor perfil de riesgo/rentabilidad y deberían superar a los vencimientos más largos en un escenario en el que los tipos de interés oficiales se reduzcan gradualmente y las curvas de rendimiento se espera que tengan una pendiente menos negativa”.
La estrategia de Giannotta es clara: una vez que los bancos centrales empiecen a recortar los tipos de interés oficiales y los rendimientos disminuyen, habrá menos valor en el componente de «duración» y, por lo tanto, ese podría ser el momento adecuado para que los inversores reevalúen su asignación de activos y estén preparados para explotar nuevas oportunidades de inversión que podrían surgir en el mercado mientras explotan el componente de «carry».
Desde el repunte de fin de año, las curvas de rendimiento han mostrado un moderado movimiento al alza en respuesta, según los expertos, a unos datos económicos más sólidos de lo esperado, especialmente en el frente de la inflación. Por lo tanto, los mercados han reevaluado “significativamente” sus expectativas sobre el calendario y el importe acumulado de la política monetaria acomodaticia en 2024. A día de hoy, los mercados de deuda pública son ciertamente más atractivos que a principios de año, a juicio de Giannotta, y, en su opinión, ofrecen oportunidades “interesantes” a los inversores dispuestos a diversificar sus carteras y a beneficiarse de la revalorización potencial del capital derivada de una bajada a medio plazo de los tipos de interés.
Más concretamente, Giannotta se fija en la parte a corto y medio plazo de las curvas de rendimiento del euro y de Estados Unidos, que “ofrecen los mejores perfiles de riesgo/rentabilidad”. Su tesis es que, a medida que avance el proceso de desinflación y los principales bancos centrales se acerquen al inicio de la normalización de su política monetaria, “las curvas de rendimiento podrían experimentar un proceso de desinversión que se traduciría en un diferencial de rendimiento menos negativo entre los vencimientos a corto/ medio pplazo y los más largos”. Los bonos a corto plazo también están mejor protegidos en caso de una nueva subida de los rendimientos, debido al alto nivel de carry. Con todo, el experto admite que este no es su escenario base. Por otra parte, los vencimientos más largos podrían mostrar un mayor grado de volatilidad en un contexto de aluvión de oferta llegado al mercado y de menor apoyo (QT) por parte de los bancos centrales.
Divisas
Además de la deuda de corto plazo, Giannotta muestra interés por Japón. Recuerda que, tras la primera subida de tipos por parte del Banco de Japón en 17 años, los mercados anticipan ahora que el endurecimiento acumulado por el BoJ alcanzará los 25 puntos básicos en 2024. Y Giannota está de acuerdo con lo que descuenta el mercado. Por eso, mantiene posiciones con duraciones cortas en el mercado de bonos japonés, en relación con el índice de referencia, así como una visión positiva para el yen japonés.
Esta positiva opinión respecto a la divisa nipona responde a que, a juicio de Giannotta, en los últimos meses ha registrado un rendimiento muy inferior al de las divisas homólogas debido al aumento de los diferenciales de rendimiento entre los bonos nominales a 10 años de Estados Unidos y Japón. El experto explica que a medida que la Reserva Federal y el BCE endurecían sus políticas monetarias mientras que el Banco de Japón mantenía los tipos de interés constantes, “el yen japonés se vendió ya que los inversores lo utilizaron como moneda de carry trade para financiar sus inversiones en divisas de mayor rentabilidad”. Pero es de prever, según el experto, que a finales de este año, cuando la Reserva Federal y el BCE empiecen a normalizar sus políticas monetarias, “el diferencial de rentabilidad entre los bonos nominales a 10 años de Estados Unidos y Japón podría reducirse, lo que se podría traducir en un rendimiento superior del yen frente al dólar y el euro”.
Por lo que respecta a las demás divisas, no espera una tendencia clara en el par euro/dólar, una vez que la Reserva Federal y el BCE arranquen el proceso de recorte de tipos. Por un lado, el dólar podría sufrir debido a los desequilibrios fiscales y a los retos a largo plazo relacionados con la cantidad de deuda que hay que refinanciar, según Giannotta, mientras que, por otro lado, podría servir de cobertura natural para quienes invierten en el mercado de deuda pública estadounidense teniendo el euro como divisa base.
Largo plazo
Los escenarios de corto plazo parecen algo claros. Todo lo contrario que a un horizonte más amplio. “Por supuesto, en estos momentos es muy difícil predecir hacia dónde nos dirigiremos a largo plazo en lo que respecta a las perspectivas macroeconómicas y las futuras actuaciones de los bancos centrales, asegura Giannotta, que admite que a día de hoy, “los mercados no prevén un escenario dominado por tipos bajos y baja inflación, similar al que teníamos hace una década”.
A día de hoy, los mercados esperan que el BCE siga relajando su política monetaria también en 2025. Se prevé que el tipo terminal del BCE para el próximo ciclo de relajación sea algo superior al de los últimos años. De hecho, el experto sospecha que, en comparación con hace una década, y tras la pandemia, “la estructura macroeconómica del mercado podría haber cambiado y que podrían entrar en juego algunas fuerzas estructurales que mantendrán las tasas de inflación por encima de lo que solían ser en el pasado reciente”. Así pues, al menos por ahora, ve difícil prever una vuelta a las políticas de tipos de interés cero aplicadas en el pasado para estimular la economía y mantener las tasas de inflación de forma sostenible cerca del objetivo del BCE.
Como resumen, Giannotta cree que en un escenario en rápida evolución, “en el que no deben descartarse los efectos a largo plazo de las tensiones geopolíticas”, los inversores deberían mantener “un enfoque flexible a la hora de diseñar su asignación global de activos y su exposición a los bonos soberanos”. También ve conveniente, teniendo en cuenta lo estrechos que han sido recientemente los diferenciales corporativos, seguir sobreponderando los bonos soberanos en relación con el índice de referencia, “con el objetivo de beneficiarse de los atractivos rendimientos que se ofrecen actualmente, del elevado nivel de liquidez y de la revalorización del capital derivada de un descenso a medio plazo de los tipos de interés”.