La gestora Oddo BHF AM organiza el próximo 29 de abril un webinar acerca del fondo ODDO BHF Avenir Europe, un producto de renta variable europea de pequeña y mediana capitalización que invierte en sociedades que tienen su domicilio social en la Unión Europea o en un país europeo perteneciente a la OCDE.
El evento dará comienzo a las 10:00 horas y tendrá una duración de media hora. Para poder tener acceso habrá que enviar un correo a la dirección pablo.portillo-martinez@oddo-bhf.com.
Pascal Riégis, gestor principal del Oddo Avenir Europe, será el encargado de liderar la charla, en la que se tratarán los siguientes temas: ¿cómo se ha comportado el fondo desde principios de año?, ¿qué posicionamiento han aplicado los gestores del fondo?, ¿cómo reacciona el fondo a las rotaciones del mercado? o ¿cuáles son las perspectivas en el contexto actual?
Pixabay CC0 Public DomainSusana Criado presenta a Fernando Fernández-Bravo (Invesco), Lorenzo González (Nordea), Leonardo López (Oddo BHF) y Alicia García Santos (M&G).. Comercio electrónico, inteligencia artificial, infraestructuras, cambio social y reactivación económica: las temáticas de la década, según las gestoras
El comercio electrónico, las empresas que se beneficiarán de la reactivación económica, la lucha por una sociedad más equitativa, la inteligencia artificial y las infraestructuras son las principales temáticas que marcarán las inversiones en los próximos años. Así lo plantearon Invesco, ODDO BHF AM, Nordea AM y M&G Investments durante el webinar «Temáticos para la próxima década», organizado por Funds Society y moderado por Susana Criado.
Fernando Fernández-Bravo, director de ventas de Invesco, cree que la pandemia ha provocado un cambio en las pautas de consumo de la ciudadanía, impulsando la penetración de la tecnología es total, lo que ha acelerado de forma exponencial el comercio electrónico. Esto se suma a que, en los últimos meses, la aceleración del proceso de vacunación ha hecho que algunos sectores puedan verse beneficiados por un «boom» del regreso del consumidor, como es el sector de los viajes o restaurantes.
En el caso de estos últimos, apuesta por mantenerse invertido en los negocios de cercanía, como los restaurantes locales o los campings, hasta que la reapertura permita regresar a los cruceros, las aerolíneas, los conciertos o los viajes a largo plazo. Asimismo, en esa búsqueda de «ser tácticos y buscar oportunidades», desde Invesco han identificado que el confinamiento ha llevado a muchas personas a cambiar de casa o reformar la suya, lo que ha supuesto un auge para compañías como Leroy Merlin.
Teniendo esto en cuenta, la cartera del Invesco Global Consumer Trends está compuesta en un 70% por empresas de consumo electrónico y en un 30% por aquellas que se beneficiarán de la «reapertura» de la economía global.
Las infraestructuras como motor de desarrollo
Para la responsable de M&G para Iberia, Alicia García Santos, la temática de la próxima década serán las infraestructuras, entre las que incluye las tecnológicas o las sociales, entre otras. «Es la columna vertebral del desarrollo y el bienestar de cualquier economía», aseguró al apuntar que, en los próximos años, la inversión en ellas va a crecer exponencialmente porque son imprescindibles para «reactivar el crecimiento».
En ese sentido, advirtió de que hay que saber «gestionar y elegir muy bien» las empresas en las que invierten, inclinándose por aquellas capaces de pagar dividendos. También de que se trata de un sector fuertemente regulado porque es «crítico para la sociedad y el bienestar de cualquier ciudadano». Por ello, se centran sobre todo en los países desarrollados, donde identifican una mayor seguridad jurídica.
Por último, subrayó que las compañías dueñas de estos activos de infraestructuras se encuentran muy bien posicionadas para beneficiarse de un incremento de la inflación. «Está demostrado que los activos físicos no sufren cuando hay inflación, como lo hacen el equity o la renta fija. Estamos invirtiendo en compañías que son dueñas de esos activos críticos, cuyo valor no se ve afectado cuando hay subidas de precios o incluso aumenta, como, por ejemplo, el inmobiliario», destacó García Santos.
Una «revolución silenciosa»
Leonardo López, director regional para Iberia y Latam en ODDO BHF Asset Management, no tiene dudas: «A largo plazo, la inteligencia artificial es la clara ganadora». En su opinión, cualquier empresa, independientemente de su sector, que no la incorpore en sus procesos de valor (como las estrategias de marketing o de producto) va a estar fuera de juego en los próximos años. «La inteligencia artificial va a permitirle superar a su competencia y dar una mejor experiencia de usuario«, aseguró.
Prueba de ello es que herramientas como los algoritmos de búsqueda o los reconocimientos faciales y de voz están muy presentes en nuestro día a día, pero, destaca, las posibilidades futuras son enormes, ya que se espera que el sector crezca alrededor de un 25% anual hasta 2025. «Es una revolución silenciosa que va a afectar a cualquier industria y generar mucha creación de valor», afirmó al insistir en que «queda mucho por hacer», por lo que no es tarde para aquellas empresas que aún se encuentren rezagadas.
Al ser consultado por empresas que destaquen en inteligencia artificial, hace hincapié en que, aparte de las más populares, como Netflix y Spotify, hay que apostar por el sector de los videojuegos y compañías como la norteamericana Activision, productora de Call of Duty. Esta forma parte de la cartera del ODDO BHF Artificial Intelligence, un fondo «único en su concepción» porque utiliza la propia inteligencia artificial para invertir en ella, comentó López.
«La IA en videojuegos permite ofrecer experiencias mejoradas y más activas a los jugadores, que se adapten al movimiento y que permitan la interacción con jugadores de todo el mundo», reveló. A esto se unen los últimos avances en el sector, como la posibilidad de jugar desde el móvil o el modelo de gratuidad, responsables de esa «explosión de audiencia».
La inclusión social como temática
Mientras, Lorenzo González, del equipo de ventas de Nordea AM, consideró que la que marcará la próxima década será la temática social. En 2015, todas las naciones se unieron bajo los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para abarcar tres frentes: el crecimiento económico, la protección del medioambiente y la inclusión social. Sin embargo, advirtió de que se está invirtiendo la mitad de lo que haría falta para lograr esta última y que, aunque el 64% de los objetivos se centren en alcanzarla, la mayoría de la inversión global está dirigiéndose a la lucha contra el cambio climático. «Hay potencial social», aseveró.
En su opinión, todos partimos de una idea preconcebida de las desigualdades sociales, pero el COVID-19 ha servido para poner de manifiesto cuáles son los desequilibrios que viven todas las sociedades del planeta. «El acceso a la sanidad es diferente entre países y ciudades, los empleos no son lo suficientemente flexibles y productivos, la educación no está preparada para que nuestros hijos tengan la capacidad de seguir formándose desde casa… Cada vez somos más conscientes después de la pandemia de que estas desigualdades deben atenderse«, añadió.
Por ese motivo, en la cartera del Global Social Empowerment de Nordea se encuentran empresas como Ping An Good Doctor, una plataforma que proporciona atención médica online en China. Actualmente, presta servicio a unos 300 millones de usuarios que viven en las zonas rurales del país y que no tienen un acceso sencillo a una consulta médica. Este tipo de soluciones, según González, son las que permiten dar «un mejor futuro» a la ciudadanía.
Por su parte, García Santos reveló que una de las compañías que resaltan en el M&G Global Listed Infrastructure Fund es Ferrovial, ya que se trata de uno de los principales operadores mundiales de transporte y presume de una extensa cartera de aeropuertos, además de apostar por las autopistas de peaje. «Esta red supone una fuerte barrera de entrada para otros competidores y son activos que tienen una vida útil casi de por vida, con concesiones de hasta 100 años. Esto genera flujos de caja estables que van a ir subiendo en línea con los precios, por lo que los activos subyacentes tienen potencial de crecimiento», destacó.
Las subtemáticas que se hacen fuertes
¿Y qué subtemáticas pueden identificarse dentro del sector de las infraestructuras? A su juicio, ofrece un «gran abanico» de posibilidades que abarca las energías renovables (tanto la producción como la gestión), el desarrollo de ciudades eficientes, transportes menos contaminantes, gestión del agua y de los desperdicios, conectividad, infraestructuras de pago tecnológico e infraestructuras sociales, como los hospitales o las residencias de estudiantes.
En el sector del comercio electrónico, Fernández-Bravo (Invesco), cree que las subtemáticas varían desde las plataformas de compras online como Ali Baba o Amazon hasta el sector de videojuegos o la música. «Empresas como Sony, que son los dueños de los derechos de autor, son esenciales para que cualquiera de las plataformas de reproducción de música en streaming pueda reproducir canciones», apuntó. En cuanto a la reactivación económica, señaló que abarca el sector de la hostelería de proximidad, la restauración takeaway o, poco a poco, empresas como Disney, por su perfil tanto de proveedor de contenidos como de parques de atracciones.
En el ámbito social, González (Nordea AM) estableció tres principales temáticas que engloban a otras 12 subtemáticas: necesidades básicas, inclusión y empoderamiento. La primera de ellas abarca el acceso a los servicios mínimos para una vida digna, como son hogares asequibles o agua potable, mientras que la segunda gira en torno a la incorporación a la sociedad, a tratar de tener las mismas oportunidades, por lo que incluye a proveedores de internet o infraestructuras. Por último, el empoderamiento busca mejorar algún tipo de temática concreta, como la sanidad, la educación o el acceso a servicios financieros.
Finalmente, desde ODDO BHF AM, López afirmó que, para ganar una verdadera exposición a la inteligencia artificial, es importante invertir en las compañías mas innovadoras del planeta, independientemente del sector en el que esté. Por ello, identificó como subtemáticas el transporte inteligente y autónomo, la transformación de la educación en las aulas, los avances en software gracias al aprendizaje automático, o la ciberseguridad. Todo ello es prueba de la gran «transversalidad» que caracteriza a esta temática.
Desde LONVIA Capital, basándose en estudios académicos, están convencidos de que las gestoras boutique pueden ofrecer una prima de rentabilidad a largo plazo gracias, entre otros factores, a la alineación de intereses de los empleados/socios con los inversores, un pensamiento independiente y por el hecho de que los equipos más pequeños generan una mayor responsabilidad individual.
Los análisis realizados al respecto apuntan en dirección de esta “prima de rendimiento”, es decir que las rentabilidades ajustadas al riesgo tienden a ser más altas en comparación con las generadas por los gestores de mayor tamaño, tal como muestra un análisis realizado por Andrew Clare, profesor de la Cass Business School de la Universidad de Londres.
En el documento, en el que analiza datos de fondos de inversión europeos entre enero de 2000 y julio de 2019, Clare destaca que si bien los fondos de inversión gestionados por grandes grupos, con «familias de fondos», se benefician de una economía de escala en términos de marketing, distribución y recursos que se derivan del mayor tamaño de la organización, las boutiques obtienen mayor rentabilidad en particular en los fondos de renta variable europeos de pequeña y mediana capitalización y en los mercados emergentes globales.
Como boutiques, Clare define a las gestoras pequeñas, que tienden a ofrecer una gama de fondos más centrada, con un estilo identificable y cuyos gestores son también propietarios únicos o mayoritarios de la empresa. En el estudio, contrapone sus resultados a los que define como “megafondos”, es decir fondos de renta variable denominados en euros, long-only, cuya matriz gestora se cuenta entre las más importantes de Europa.
Utilizando los datos mensuales de rentabilidad bruta y neta de Morningstar de los mega y boutique, concluye que estos últimos superan a los megafondos entre un 0,82% y un 0,52% en base bruta anual dependiendo del modelo utilizado para calcular el alfa, y entre un 0,56% y un 0,23% neta de comisiones. En un contexto de rentabilidades tan ajustadas como el actual, incluso esta pequeña ventaja puede marcar una diferencia, indica.
Para realizar el análisis, el experto identificó a los megafondos en base al ranking anual de los 120 mayores gestores europeos publicado por la revista Investment & Pensions Europe y a los boutique en base a la lista proporcionada en un estudio anterior realizado para el mercado estadounidense por AMG Group en 2015, que comparó y completó con las que le facilitaron tres consultoras líderes -que asesoran a fondos de pensiones y compañías de seguros europeos-, así como el Group of Boutique Asset Managers (GBAM).
Desde LONVIA Capital, Francisco Rodríguez d’Achille, socio y co-fundador de la gestora, comenta: “Existe una serie de características empíricas que permiten a las boutiques generar este premium de rentabilidad en el largo plazo. Podríamos resumirlas en cuatro puntos: 1) el pensamiento independiente de empleados y socios; 2) la total alineación de intereses entre los socios y los inversores; 3) menores volúmenes representan invertir siempre en las mejores ideas y esto repercute evidentemente en la rentabilidad futura y 4) equipos más pequeños comportan una mayor responsabilidad individual de empleados y socios, con lo cual mayor autonomía, sentido de pertenencia y altos niveles de motivación».
Las conclusiones finales del informe de Clare destacan que mientras que en el análisis anterior de AMG se detectó una prima de boutique de 141 puntos básicos anuales frente a los índices comparables del mercado financiero, en su estudio enfocado en Europa esta mayor rentabilidad oscila entre los 82 y 52 puntos básicos sobre una base bruta de comisiones, dependiendo del modelo condicional de riesgo empleado. En términos netos, esta cifra se reduce a entre 56 y 23 puntos básicos.
Los sectores de fondos cubiertos por estos dos tipos de gestores no coinciden exactamente. Los grandes fondos captan a menudo una importante cantidad de recursos, lo que limita sus posibilidades de tomar posiciones significativas en compañías pequeñas, una restricción que no tienen los fondos especializados. A causa de ello la “prima de rendimiento” se hace más visible en los fondos de renta variable europea de pequeña y mediana capitalización y en los fondos de renta variable de mercados emergentes. En el caso de que un inversor tenga interés en estos mercados, por tanto, “debería considerar seriamente la posibilidad de invertir en un gestor de fondos boutique”, escribe Clare.
. Aterrizar en España en el año de la pandemia: la experiencia y los retos de las gestoras internacionales (Funds Society)
Es innegable que todos recordaremos el 2020 como el año del coronavirus, pero esto no ha impedido a varias gestoras internacionales traer sus fondos al mercado español con el objetivo de comercializarlos entre los inversores nacionales. Hablamos con algunas de ellas para que nos cuenten cómo ha sido aterrizar en el país en plena pandemia, los retos que han tenido que afrontar y, por supuesto, las oportunidades que ofrecen sus productos de cara al futuro. Desde mercados emergentes en su conjunto hasta China o India en particular, pasando por Estados Unidos y por Europa… Aunque cada gestora apuesta por una región distinta, el foco de las entidades que llegaron en 2020 está en la renta variable, China y los criterios ESG.
Puede acceder al artículo completo, publicado en la revista de Funds Society, a través de este enlace.
Banco Sabadell, aliado con Amundi en su negocio de gestión de activos, ha presentado sus cifras del primer trimestre, en las que confirma un comienzo récord de año, el mejor de los últimos cuatro, explican desde la entidad. En concreto, de enero a marzo ha alcanzado un récord histórico de patrimonio en fondos de inversión, con 20.066 millones de euros tras registrar un incremento de 1.063 millones en ese periodo.
Y confirman también un nombramiento: el de Conchita Álvarez como responsable del área de Productos de Ahorro e Inversión del banco. En la firma anteriormente ha ocupado otras funciones, como directora de Recursos Humanos o de las áreas de Desarrollo Corporativo.
El banco reestructuró recientemente su organigrama, estableciendo tres grandes unidades de negocio en España con características muy diferentes: Particulares, Empresas y Corporativa. En concreto, la dirección de Banca de Particulares se estructurar en unidades de producto, con el fin de asegurar una mayor cercanía al cliente. Además de Financiación, Financiera, Marketing, y Cuentas y Seguros, y Banca Privada, está la de Ahorro e Inversión, liderada por Álvarez.
Crecimiento no visto en 4 años y nuevos lanzamientos
En conjunto, los fondos de Sabadell AM y Amundi han crecido en 736 millones de euros en patrimonio, según datos facilitados por la entidad. En estas cifras, además del patrimonio, destaca un incremento de la producción basada en el lanzamiento de nuevos productos, en la estrategia de comunicación a gestores y clientes tras el acuerdo estratégico con Amundi y en el desempeño de la red comercial.
En productos, destaca Amundi Funds Protect 90, un producto que ofrece una garantía parcial del capital y que acumula 793 millones de euros desde su lanzamiento. También, fondos de rentabilidad absoluta, que aprovechan las oportunidades en los mercados de renta fija. También, las iniciativas de la casa en fondos sostenibles, con Sabadell Acumula Sostenible y Sabadell Crece Sostenible, dos fondos ESG con un patrimonio superior a los 200 millones de euros.
En la entidad destacan asimismo soluciones de liquidez para empresas, que acumulan cerca de 250 millones, y fondos temáticos, como Economía Digital (con 250 millones de patrimonio) y Economía Verde (con 164 millones de patrimonio).
Los fondos Sabadell Urquijo Crecimiento y Acumula también son lanzamientos destacados y que suman 150 millones de euros en activos se trata de fondos de fondos domiciliados en Irlanda destinados a clientes de banca privada.
En los próximos meses están previstos nuevos lanzamientos, explican en la entidad, “que buscarán complementar la oferta con alternativas de inversión que permitan tener acceso a la rentabilidad de los mercados con un alto nivel de protección, completar las ideas de inversión temáticas para ofrecer alternativas de inversión a las tradicionales donde pensamos que se van a concentrar importantes flujos de inversión en el futuro”.
En rentabilidad objetivo, su meta es continuar ofreciendo alternativas de inversión con un vencimiento definido. Su construcción dependerá de la evolución de los tipos de interés, explican en la entidad.
Acompañamiento en fondos
La entidad presenta estos datos y destaca el notable incremento de la actividad de acompañamiento de los inversores en fondos de inversión. “Utilizando formatos atractivos y directos, ya sea a través de notas o vídeos, queremos mantener informados a nuestros clientes de la evolución de sus inversiones, de cuales han sido las decisiones que han tomado nuestros expertos y que perspectivas tenemos para los próximos meses. Esta información se complementa con perspectivas sobre los mercados y temas de formación en materia de ahorro inversión, se envía por email y está siempre disponible en BanSabadell Online y BanSabadell Móvil”, añaden en la firma.
Foto cedidaPaul Griffiths, director global de negocio institucional de HSBC AM. . HSBC AM nombra a Paul Griffiths director global de negocio institucional
HSBC Global Asset Management ha nombrado a Paul Griffiths para el cargo de director global de negocio institucional. Ubicado en las oficinas de Londres, Griffiths se incorporará a principios de mayo y reportará a Nicolas Moreau, CEO de la entidad.
Con más de 30 años de experiencia en el sector, Griffiths será responsable del desarrollo comercial del negocio institucional de la firma y de dirigir sus equipos de ventas institucionales y de gestión de clientes. Según explican desde la gestora, sustituye en el cargo a Brian Heyworth, que dejó el banco el año pasado.
Paul Griffiths se incorpora desde First Sentier Investments, donde era director de inversiones de renta fija y soluciones multiactivos. Anteriormente, ocupó puestos de responsabilidad en empresas como Aberdeen Asset Management, Credit Suisse, Axa y lnvestec. Paul es también el inversor fundador de la primera cartera de inversión dirigida por estudiantes del Reino Unido, con sede en la Universidad de York.
“La amplia experiencia de Paul en la gestión de inversiones y su profundo conocimiento de las necesidades de los clientes institucionales serán de gran valor para el banco a medida que sigamos desarrollando nuestra propuesta y diferenciando nuestra oferta en el mercado. Estoy deseando dar la bienvenida a Paul al equipo”, ha señalado Nicolas Moreau, CEO de la entidad.
Por su parte, Paul Griffiths para el cargo de director global de negocio institucional, ha añadido: “HSBC Global AM ha experimentado un importante crecimiento en su negocio institucional durante el pasado año. Esto ha sido impulsado por la introducción de un sólido conjunto de productos innovadores en el mercado y estoy encantado de formar parte de su desarrollo futuro”.
En 2020, HSBC Global AM estableció su estrategia de reposicionar el negocio como gestora de activos centrada en soluciones esenciales, en mercados emergentes, principalmente Asia, y productos alternativos, con enfoque en el cliente, la excelencia en la inversión y la inversión sostenible como elementos fundamentales. La empresa reestructuró su negocio para establecer un modelo operativo más competitivo en el mercado y centrado en el cliente. Como parte de esto, cambió su modelo de distribución para operar con un enfoque global con la creación de negocios de clientes institucionales y mayoristas.
Desde que se iniciara la pandemia se han aprobado 3 billones de dólares en ayudas financieras para familias, trabajadores desempleados y empresas en dificultades en EE.UU. A ello hay que sumarle 1,9 billones de dólares adicionales impulsados por la administración Biden. Sin duda, son cifras impactantes. Además, existe una importante demanda reprimida por las restricciones y confinamientos que podría desatarse a medida que las campañas de vacunación se afiancen y la economía vuelva a abrirse.
El confinamiento ha propiciado que las tasas de ahorro personal hayan aumentado; por ejemplo, en EE.UU., alcanzaron el 33,7% en abril de 2020, antes de asentarse en el 13,6% en febrero de 2021*. En cambio, entre 2010 y 2018, el ahorro creció anualmente, en promedio, un 6,3%, y alcanzó el 8,1% en junio de 2019**. En definitiva, el ahorro se ha recuperado significativamente durante la pandemia.
Por ello, no es de extrañar que el término «inflación» comience a resonar en los mercados. En febrero, por ejemplo, el índice de precios al consumo en EE.UU. subió un 0,4% hasta alcanzar el 1,7%, la tasa más alta registrada desde febrero de 2020. Alimentación y energía lideraron las mayores subidas. A pesar de la creciente preocupación en el mercado por las presiones inflacionistas, hay distintas fórmulas para afrontarlo. Una de ellas es adquirir bonos ligados a la inflación, como los TIP (Valores Protegidos contra la Inflación del Tesoro), en los que tenemos una asignación considerable. Otra es apostar por instrumentos de tipo variable, que se reajustan cuando los tipos de interés suben. Hay más alternativas como la renta fija de corta duración o el oro.
¿Nos amenaza un incremento de la inflación?
En nuestra opinión, en los próximos meses se seguirán registrando cifras de inflación más altas. Este incremento se verá impulsado por una serie de circunstancias: las cadenas de suministro se encuentran bajo presión, como hemos visto con la actual escasez de microchips; se elevará la demanda y el crecimiento económico a medida que las economías se reabran y aumente la actividad de los consumidores; y las comparaciones interanuales. Si a esto le añadimos el aumento de los precios de las materias primas, que se está trasladando a los costes de los materiales básicos, lo más probable es que veamos cifras de inflación mucho más elevadas en los próximos meses. La gran pregunta que debemos plantearnos es si se trata de un efecto transitorio que se disipará a medida que la actividad vuelva a la tendencia habitual o si es un fenómeno más arraigado. Hay dos opiniones diferentes al respecto.
Por un lado, la Reserva Federal de EE.UU., junto con otros bancos centrales, considera que, a pesar de la gran cantidad de estímulos, tanto fiscales como monetarios, seguimos operando en un entorno económico deteriorado. El desempleo es alto, y es probable que lo siga siendo durante un tiempo, a pesar de las mejoras que se esperan con la reapertura de las economías, especialmente en el sector de la hostelería; sin embargo, los salarios deberían, en general, permanecer relativamente contenidos. Hay sectores en los que la inflación salarial ya está aumentando, como el de la construcción, una tendencia que venimos observando desde hace tiempo. Además, el comportamiento de los consumidores será inicialmente favorable a la mejora económica, dado que las tasas de ahorro son muy elevadas, pero es poco probable que los consumidores se vayan de vacaciones continuamente o compren regularmente artículos de gran valor después de un tiempo. La continua incertidumbre en torno a la seguridad del empleo y la COVID puede dar lugar a mayores tasas de ahorro con el tiempo, lo que también limitará el efecto de la renta disponible de los consumidores.
Por otro lado, hay un enfoque que sugiere que el estímulo fiscal acaba directamente en los bolsillos de los ciudadanos y, por tanto, afecta a su potencial de gasto. Además, en el segundo semestre de 2021 está previsto un nuevo proyecto de ley de infraestructuras. Una economía activa puede dar lugar a una inflación muy elevada. Por eso hemos visto tanta volatilidad en los bonos del Tesoro estadounidense en las últimas cuatro o seis semanas. Las expectativas de subida de los tipos de interés se han adelantado de 2024 a principios de 2023 en EE.UU., aunque no en Europa, y crece el consenso de que el impacto fiscal será demasiado grande para evitar que la inflación nos afecte.
Sin embargo, la inflación no es necesariamente mala. Se puede considerar que una «buena inflación» ligada a una recuperación económica y al impulso de los medios de subsistencia puede ser algo positivo. Desde nuestro punto de vista, seguimos viendo que la presión sobre las curvas tiende al alza. Pero si la inflación es transitoria o permanente, no se sabrá hasta dentro de unos meses, si no más. De hecho, incluso el efecto del actual plan de estímulo no será palpable en la economía durante los próximos tres a seis meses. Por lo tanto, hasta la segunda mitad del año, como muy pronto, no podremos determinar la dirección tanto del crecimiento como de la inflación. No obstante, las expectativas del mercado seguirán aumentando a medida que se vayan conociendo mejores datos económicos, y las curvas deberían ampliarse en consecuencia. Asimismo, creemos que es poco probable que los tipos de interés reales suban en los próximos años, lo que significa que los activos como los préstamos o los instrumentos de tipo variable no se beneficiarán de ello.
No olvidemos que también es importante centrarse en hasta dónde permitirán los bancos centrales que suban las curvas, ya que un endurecimiento financiero excesivo pondría en peligro la recuperación económica.
Por último, cabe señalar que en EE.UU. el mercado de la vivienda es un importante indicador de la confianza del consumidor. A diferencia del Reino Unido y Europa continental, los estadounidenses contratan hipotecas a 30 años. En consecuencia, el tipo de interés del Tesoro a 30 años es increíblemente importante. Si sube demasiado -por ejemplo, entre el 3 y el 3,5%-, tendrá un impacto importante en la confianza de los consumidores, en la asequibilidad de las hipotecas y en la renta disponible, lo que producirá un efecto circular: creará vientos en contra del crecimiento económico y ejercerá cierta presión a la baja sobre la inflación.
La clave del éxito, ser activo y ágil
No cabe duda de que las expectativas de inflación aumentarán en los próximos meses y de que las curvas seguirán ampliándose y elevándose. Es una reacción a la mejora de las condiciones económicas. Sólo cuando los rendimientos se mueven significativamente en períodos cortos de tiempo, vemos que los mercados se vuelven más volátiles y surge el riesgo de un taper tantrum. En cualquier caso, la Reserva Federal ha dejado muy claro que no retirará el apoyo, pero los mercados seguirán poniendo a prueba este compromiso, a medida que vayan apareciendo mejores datos.
En este entorno, ser activo y tener alta convicción es clave. Hay muchos mini-ciclos dentro del ciclo económico y esto es algo que siempre hemos seguido activamente e identificado en nuestro enfoque de cartera. Por ello, seguimos muy de cerca las señales inflacionistas para poder evaluar y adaptar rápidamente nuestras inversiones si las expectativas inflacionistas a largo plazo cambian.
Tribuna de Andrew Lake, director de Renta Fija de Mirabaud Asset Management
*US Bureau of Economic Analysis, April 2021.
** Deloitte, A look at how Americans are saving, 2019
VIS con NZS Capital, socio estratégico de Jupiter AM. VIS con NZS Capital, socio estratégico de Jupiter AM
En un nuevo Virtual Investment Summit, Funds Society contó con la presencia de Santiago Queirolo, socio y director ejecutivo de DAVINCI Trusted Partner, como moderador del evento online, con Pablo Sciarra, director y jefe de Inversiones de Advise Wealth Management, y Alejandro Lara, Product Manager- Advisory en Insigneo Financial Services, como panelistas del debate, y con Brinton Johns, cofundador y gestor de inversiones en NZS Capital (socio estratégico de Jupiter Asset Management), quién presentó la filosofía de inversión de la estrategia NZS Global Growth, que próximamente estará disponible para los inversores en formato UCITS.
NZS Capital nace a finales de 2019. Antes de lanzar la firma, Brad Slingerlend y Brinton Johns ya habían trabajado juntos durante casi dos décadas como cogestores de la estrategia Global Technology and Innovation de Janus Henderson Investors. A lo largo de 2020, se incorporan al equipo Jon Bathgate y Joe Furmanski, como gestores de inversiones, Jim Goff, como asesor sénior y Adam Schor, como presidente y director de riesgos. Todos ellos formaban parte de su anterior equipo, por lo que la integración al nuevo equipo fue rápida.
Desde los comienzos establecieron una asociación estratégica con Jupiter Asset Management. La gestora de origen británico se hará cargo de la distribución de sus estrategias a nivel global, facilitando que los gestores se enfoquen en lo que mejor saben hacer: construir carteras basadas en la idea de la inversión en complejidad y desarrollar una cultura de inversión que elimine los posibles sesgos de los gestores e incluya nuevas ideas en la cartera.
Lejos de centrarse en las métricas económicas tradicionales, sus carteras se centran en sistemas complejos de adaptación. En la naturaleza es frecuente observar estos sistemas que no se preocupan por predecir el futuro, sino que se centran en adaptarse al cambio. Esa lección aprendida se traslada al proceso de construcción de las carteras de NZS Capital con un enfoque en la resiliencia y la opcionalidad.
En sus carteras, aproximadamente la mitad de sus activos están asignados a una cesta de acciones resilientes, con unos 15 nombres. En la que cada acción suele tener una ponderación del 3% o superior en la estrategia. En las acciones resilientes el foco reside en limitar el riesgo a la baja a partir de la adaptabilidad de estas empresas al cambio o a eventos imprevisibles, como la irrupción del COVID-19 el año pasado. Ejemplos de acciones resiliente serían Amphenol o Texas Instruments. Se espera que conforme la electrónica tome un mayor peso en la sociedad estas acciones se vean beneficiadas.
La otra mitad de la cartera está dedicada a las acciones con opcionalidad. Unos 40 nombres en los que la máxima ponderación asignada a cada una de las acciones de esta parte de la cartera será un 1,5%. Un ejemplo de la cartera dedicada a la opcionalidad es Tesla, con un perfil de riesgo muy asimétrico, en el que la posibilidad de que se convierta en el líder dentro del mercado de vehículos eléctricos es una predicción mucho más estrecha. Durante 2020, Tesla tuvo un desempeño espectacular, pero nunca dejaron que la posición aumentara más de un 1,5%.
La cartera reduce o incrementa aquellas posiciones que se encuentren entre el 1,5% y el 3%. Después de décadas gestionando carteras, en NZS Capital se dieron cuenta que estos nombres que se encontraban entre los dos polos de la cartera (resiliencia y opcionalidad) solían tener un rendimiento similar al del mercado. En consecuencia, al eliminar estas posiciones intermedias solían conseguir incrementar el rendimiento total de la cartera.
En el entorno actual estamos atravesando de la era industrial a la era de la información, y todavía estamos en las primeras etapas. Por eso, en NZS Capital consideran que es importante que los inversores tengan un marco para invertir en el cambio y ese marco es el proceso de “inversión en la complejidad”. Un proceso de inversión para el cambio implica analizar qué partes de la economía pueden verse afectadas por la disrupción, y qué movimientos pueden darse entre las acciones resilientes que pueden llegar a convertirse en trampas de valor, o nuevas ideas que pueden llegar a ser parte de la cartera de opcionalidad y finalmente ser acciones resilientes.
El panel de discusión
Alejandro Lara comenzó el panel de discusión preguntando sobre el proceso de selección de las acciones en la cesta de la opcionalidad de la cartera, que tiene un estilo de gestión similar al modelo de negocio de las firmas de Venture Capital, en el que una entre 16 acciones tiene éxito dentro de la cartera. A lo que Brinton contestó que su enfoque se centra más en acciones que ya han conseguido salir a bolsa, por lo que su tasa de supervivencia es más elevada. Brinton mencionó el error que muchos gestores suelen realizar es incrementar la posición de algunas de estas acciones que pertenecen a la cesta de opcionalidad hasta un 5%, a pesar de que la predicción sobre su éxito potencial sea muy difícil de determinar. Si al analizar una empresa perciben que su acción deja de pertenecer a la cesta de la opcionalidad para pasar a ser parte de la cesta resiliente, entonces añadirán capital a esa acción, moviendo su ponderación de la parte final de la cartera a los primeros puestos.
Pablo Sciarra indagó sobre los criterios de calidad que aplican a las empresas dentro de la cesta de opcionalidad, teniendo en cuenta que en NZS Capital dan prioridad a los criterios de adaptabilidad en el largo plazo. En NZS Capital se centran en conocer a los equipos directivos, incluso antes de que la empresa esté cotizando públicamente, pues los consideran uno de los factores más importantes a la hora de obtener una visión a largo plazo de la empresa. Por eso, prefieren los negocios que están dirigidos por sus socios fundadores. En los inicios de una empresa, los gestores tienen que ser extremadamente buenos a la hora de ser capaces de responder al cambio para poder sobrevivir. Aquellos equipos que tienen una visión a largo plazo tienen más posibilidades, y demuestran una mayor calidad en la gestión. Esta calidad es un concepto intangible y difícil de definir, pero que es más fácil de reconocer cuando se examina el ecosistema de la empresa y las personas que la gestionan.
De nuevo Alejandro Lara, preguntó sobre la orientación hacia el sector tecnológico de la cartera y el foco en las acciones estadounidenses de la cartera. Mientras que Brinton respondió que, si bien sus orígenes son tecnológicos y una gran parte de la cartera tiene sus raíces en Estados Unidos, la expansión que se ha producido del sector tecnológico hacia otros muchos ámbitos les ha hecho ampliar sus horizontes. Cada vez encuentran más empresas innovadoras que abrazan el cambio fuera del ámbito de la tecnología. Por ejemplo, recientemente han incluido en la cartera acciones de Ball Aluminum, un fabricante de aluminio de origen estadounidense. La inclusión de este acción en la cartera se debe al alto índice de reciclaje que ostenta el aluminio, con una tasa del 75% frente al 10% del plástico. En NZS Capital perciben que esta empresa crea más valor del que toma de la sociedad y además está introducción un elemento de disrupción en el mercado con la fabricación de vasos de aluminio que son altamente reciclables.
Cuando Santiago Queirolo preguntó al gestor sobre la incorporación de factores ESG en su proceso de inversión. Brinton respondió que en NZS Capital creen que la inclusión de métricas ESG no es suficiente. En su opinión, es mejor considerar el ecosistema alrededor de la empresa y examinar si está creando más valor del que toma de la sociedad: para sus accionistas, para sus empleados, para sus consumidores, para el medioambiente. Esto implica un mayor esfuerzo en research, pero es algo que es muy importante para la firma. Por eso suelen acudir a ferias comerciales y hablar con los competidores, para ser participantes activos de estos ecosistemas.
Puede acceder a la grabación del evento en el siguiente link(contraseña: NZSCapital_2004)
Pixabay CC0 Public Domain. La inversión ESG alcanza su masa crítica: el impulso actual depende dónde poca el foco la demanda
Según los resultados de la última encuesta de Natixis Investment Managers, la inversión ESG ha alcanzado su masa crítica. Es decir, cada vez hay más entidades que están implementando una gama más amplia de estrategias ESG y, a la par, el 75% de los inversores profesionales están aplicando criterios ESG en la actualidad, así como el 77% de los responsables de seleccionar los fondos para la plataforma de asesoramiento en inversiones de sus empresas. Claramente, la oferta y la demanda se encuentran, reforzando la inversión ESG.
“El ritmo de crecimiento se aceleró en 2020 entre el récord de entradas de capital en los fondos ESG y un número sin precedentes de lanzamientos de productos ESG”, apuntan desde Natixis IM. Según los datos que arroja su encuesta, este año, el 68 % de los selectores de fondos profesionales tiene previsto seguir ampliando la oferta ESG de sus empresas. La razón principal por la que lo hacen es la demanda de los inversores, que los selectores de fondos creen que se debe a la mayor conciencia social de los inversores (75%) y al hecho de que la inversión ESG ha alcanzado ahora su masa crítica entre los inversores convencionales (50%). Otros factores que dicen que está impulsando la demanda de inversiones ESG incluyen el deseo de los inversores de formar parte de la economía verde (42%) y la preocupación por el cambio climático (36%).
Según explica Harald Walkate, director de asuntos ESG de Natixis IM, “la rápida adopción global de los criterios ESG ha planteado dudas sobre si el impulso que se está creando en torno a ellos continuará o si se está formando una burbuja. La respuesta está en una mayor claridad en relación con lo que los inversores desean conseguir en última instancia, y no solo para implementar estrategias ESG que se alineen con sus valores, sino también para fijar expectativas realistas tanto para los resultados financieros como para el impacto en la sociedad”.
Natixis analizó previamente los resultados inéditos de una serie de encuestas globales a inversores institucionales, selectores de fondos profesionales y asesores financieros sobre cómo están implementando los criterios ESG. Visto a través del prisma de la última encuesta entre inversores individuales publicada por Natixis, la gestora apunta que surgen preguntas importantes sobre la inversión ESG y sobre si los inversores profesionales, los inversores individuales y sus asesores piensan lo mismo.
Resultados financieros
En este sentido, Natixis detectó que el 77% de los selectores de fondos profesionales y el 75% de los inversores institucionales ahora creen que los factores ESG son esenciales para invertir bien. Los asesores financieros están de acuerdo: el 59% de ellos espera que la inversión ESG sea una práctica habitual en todo el sector dentro de cinco años.
Aunque la falta de consenso en la medición ESG ha supuesto un reto para los inversores, el 83% de los selectores de fondos y el 79% de los inversores institucionales afirma que se ha vuelto más fácil evaluar el rendimiento comparativamente. Como ya se tiene acceso a datos mejores en materia ESG y la elaboración de informes está estandarizada, Natixis cree que está surgiendo una narrativa más sólida sobre las ventajas financieras de la inversión ESG, y así lo avalan los datos: más de la mitad de los inversores profesionales encuestados por Natixis (incluidos el 53 % de los inversores institucionales y el 55% de los selectores de fondos) reconoce ahora que las empresas con mejores trayectorias ESG generan mejores rendimientos de las inversiones.
Además, siete de cada diez selectores de fondos y el 62% de los inversores institucionales cree que se puede encontrar alfa incorporando factores ESG en el análisis de las inversiones, y el 63% de los asesores también está de acuerdo en que las estrategias ESG pueden tener posibilidades de ofrecer rentabilidades superiores a las de los mercados.
“Cuando se trata de evaluar una empresa o un sector, el 48% de los selectores de fondos profesionales consideran que los factores ESG no financieros son tan importantes como los factores financieros fundamentales. Aun así, el 67% de los selectores de fondos y el 74% de los inversores institucionales afirman que sigue siendo difícil saber qué medidas no financieras son esenciales para el análisis de las inversiones”, destaca la gestora en sus conclusiones.
Todos los caminos que llevan hacia la ESG
La encuesta señala también que la principal motivación de los inversores financieros para aplicar la ESG es garantizar que los activos representen mejor los valores de la organización. “Esta ha sido su principal motivación desde 2017, pero alinear los activos y los valores también es uno de los principales motivos para los selectores de fondos, superada solo por la demanda de los clientes”, apuntan desde Natixis IM.
En este sentido, el 77% de los encuestados previamente por Natixis afirman que es importante que sus inversiones vayan en consonancia con sus valores. Además, lo que los inversores dicen que es lo que más quieren de una relación con un asesor profesional es que identifique inversiones que se ajusten a sus valores personales. Es importante que las empresas financieras entiendan lo que quieren decir exactamente con eso a medida que van ampliando su oferta ESG y adaptando sus estrategias para cumplir los objetivos de sus clientes, tanto los financieros como los no financieros.
“Los asesores no siempre tienen claro qué entienden los clientes por valores personales o si a los inversores ESG les mueve principalmente el deseo de hacer un mundo mejor, el de obtener mejores resultados financieros, o ambos. En última instancia, se necesitan pruebas más concretas de los resultados financieros y no financieros, pero las preguntas y las conversaciones sobre los motivos de los clientes podrían contribuir en gran medida a ayudar a los asesores a adaptar las mejores estrategias ESG para cumplir los objetivos de sus clientes”, afirma Dave Goodsell, director ejecutivo del Center for Investor Insight de Natixis.
En este sentido, Sophie del Campo, directora general de Natixis IM Iberia, Latam y US Offshore, añade: “La encuesta detalla que, en el caso de España, el 82% de los particulares asegura que quiere que sus inversiones se alineen con sus valores personales. En todo caso, la pandemia ha acabado con los debates sobre la ESG. Ahora la convicción sobre que es necesaria es generalizada y desde Natixis IM vemos que el futuro de la ESG es el impacto: es decir, al mismo tiempo que se obtiene un retorno financiero, la inversión genera un resultado positivo social o medioambiental que es medible y demostrable”.
Por último, la investigación de Natixis no encontró ni un solo criterio consensuado para la inversión ESG, sino que las empresas están aplicando múltiples enfoques con características de riesgo y rentabilidad distintas que les permiten adaptar las estrategias y abordar distintos objetivos financieros y no financieros.
La encuesta presenta los enfoques que los inversores profesionales están adoptando, que incluyen:
Integración: Es el enfoque más extendido, ya que lo adoptan el 54% de los selectores de fondos y el 48% de los inversores institucionales, y consiste en integrar el análisis de factores ESG en el proceso global de inversión, teniendo en cuenta cuestiones que podrían afectar sustancialmente a los resultados de la empresa.
Criba negativa: Cuatro de cada diez selectores de fondos (el 42%) e inversores institucionales (el 40%) se basan en la criba negativa. La exclusión de empresas o sectores que se consideran poco éticos o dañinos es un criterio que aplicaban los primeros adeptos a la inversión socialmente responsable en los años setenta, y que muchos inversores dejaron de adoptar por falta de pruebas convincentes de que generara beneficios financieros o sociales. Según los datos, el número de selectores de fondos que utiliza la criba negativa se redujo un 14 % de 2019 a 2020.
Titularidad activa: Más de un tercio de los inversores profesionales (incluidos el 35% de los selectores de fondos y el 34% de los inversores institucionales) están abordando las cuestiones ESG ejerciendo sus derechos y su voz como titulares para promover el cambio, lo cual supone un aumento del 45% y el 51%, respectivamente, de 2019 a 2020. Entretanto, el 35% de los inversores institucionales afirma que una de las principales razones por las que implementan estrategias ESG es influir en la conducta empresarial.
Inversión de impacto: El 42% de los selectores de fondos y solo el 34 % de los inversores institucionales se dedican a la inversión de impacto con el propósito de generar y medir los beneficios sociales y medioambientales junto con la rentabilidad financiera.
Inversión temática: El 43% de los selectores de fondos y el 28% de los inversores institucionales se centran en la inversión temática, que busca oportunidades en tendencias emergentes como las impulsadas por los cambios demográficos, la innovación y las prioridades sociales o políticas.
Pixabay CC0 Public Domain. La inacción: el mayor riesgo para el cambio climático y las economías mundiales
Un total de 40 líderes mundiales se reúnen en el marco del Día de la Tierra en una cumbre virtual convocada por Joe Biden, presidente de los EE.UU., para discutir la acción climática global. No solo los grandes líderes políticos tienen mucho que pensar en este día internacional, también los inversores.
“Numerosos sectores dependen de la naturaleza, pero el farmacéutico en concreto, está muy expuesto a la pérdida de la biodiversidad”, advierten desde DWS. En este sentido, la gestora destaca que, según estima la iniciativa Business & Sustainable Development Commission, la pérdida de biodiversidad genera cada año cargas para la sociedad equivalentes al 3% del PIB mundial. Incluso, establece una relación entre los conflictos y la violencia armada ya que, según un estudio publicado por Nature en 2019, el clima ha influido entre un 3% y un 20% de los conflictos armados del último siglo.
Según recuerdan desde DWS, hay cálculos que sugieren que los costes indirectos podrían ser aún más altos: más de la mitad del PIB mundial depende de la naturaleza y todo lo que nos proporciona. “Los sectores de alimentación y bebidas, agricultura, pesca y construcción son los que más dependen de la naturaleza. Pero la industria farmacéutica también. Hasta el 50% de los medicamentos recetados emplean moléculas que se encuentran de forma natural en una planta. En el caso de los tratamientos oncológicos, el 70% de los fármacos son de origen natural o productos sintetizados inspirados en la naturaleza. Además, se estima que, hasta la fecha, solo se ha evaluado el 15% de las 300.000 especies vegetales del mundo para determinar su potencial farmacológico”, apuntan en su análisis con motivo del Día de la Tierra.
En opinión de Lucian Peppelenbos, especialista en clima de Robeco, el desafío que nos deja este marco es “convertir el compromiso a largo plazo en una acción inmediata”. Según denuncia Peppelenbos, durante el último año y hasta ahora, ha habido una verdadera ola de compromisos sobre las emisiones “net zero”, no solo de los gobiernos, sino también de las empresas, los inversores, las universidades, las ciudades y las regiones. Los expertos estiman que entre el 60% y 70% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero están ahora sujetas a un compromiso de “net zero” para 2050.
Un dato relevante en este contexto es que la inversión en petróleo y gas ha seguido cayendo, en relación con los activos de la industria a nivel mundial, mientras que la fijación de precios del carbono en el mercado clave del Sistema de Comercio de Emisiones de la Unión Europea (ETS), así como las subastas más pequeñas de la Iniciativa Regional de Gases de Efecto Invernadero de Estados Unidos, siguen aumentando.
En opinión de Andy Howard, director global de inversiones sostenibles de Schroders, aún se necesitarán precios más altos del carbono para impulsar el cambio en la escala y amplitud necesarias para cumplir los objetivos climáticos. “El aumento sostenido de los precios en los últimos años, pese a la caída de la producción industrial, ha demostrado la solidez de la tendencia y los beneficios de la acción política. Esperamos con optimismo lo que queda de 2021 y los meses previos a la COP26. Los responsables políticos de la mayoría de las principales economías ya han expresado su compromiso de actuar, preparando el terreno para una acción global coordinada. Esto podría apuntalar las reducciones sostenidas de las emisiones de gases de efecto invernadero, que serán necesarias para encaminar la economía mundial hacia la descarbonización. Ya hemos visto a gobiernos que representan alrededor del 70% de las emisiones mundiales o del PIB comprometerse a descarbonizar completamente sus economías. El número de empresas que han asumido compromisos similares a los de París, a través de la iniciativa Science Based Targets, ha crecido alrededor de un 50% en el último año y el enfoque corporativo en la fijación de objetivos sigue cobrando fuerza», explica Howard.
Para lograr reducir las emisiones, la industria de inversión está trabajando en ofrecer productos que impulsen otras energías. Por ejemplo, Mikael Jafs, cogestor de Pictet Timber en Pictet AM, presentaba recientemente la conferencia “Madera: la alternativa sostenible a materiales y energía basados en petróleo”, en la que destacó que los precios de las tierras de bosques de madera de primera calidad se ha mantenido fuertes y los de productos de madera están de vuelta a niveles récord, con demanda de construcción residencial, reparación y remodelación.
Según Jafs, desde que pusieron en marcha este fondo, esta inversión se ha visto favorecida por el crecimiento de las mayores economías del mundo. “De hecho, tiende a comportarse bien en tres de cuatro posibles regímenes básicos de crecimiento/inflación, especialmente con crecimiento económico al alza y aumento de inflación, que favorece al sector inmobiliario y los materiales. Además, en los bosques, el valor se va añadiendo con el tiempo, a medida que cada árbol crece, pudiendo elegirse el momento de la cosecha según los precios de los materiales y los productos finales”, añade.
Mirando a los inversores
En opinión de Gerrit Ledderhof, gestor de inversión responsable en Aegon Asset Management, todo este entorno plantea importantes preguntas a los inversores. En concreto, considera que los inversores pueden desempeñar una función crucial en este cambio, al respaldar de forma positiva y proactiva una transición energética que se acelerará en los próximos años. “Ahora que el mundo va recuperando poco a poco la normalidad gracias a las campañas de vacunación, resulta más importante que nunca ser conscientes de esta oportunidad y redirigir capital para apoyar la transición hacia una economía neutra en carbono y el cumplimiento de los objetivos mundiales de reducción de emisiones”, apunta Ledderhof.
Según su experiencia, para los inversores, el paso a una economía neutra en carbono subraya la necesidad de blindar sus carteras ante los riesgos y alinearlas con la transición energética. En este sentido añade: “La crisis climática también ofrece oportunidades para generar alfa explotando las tendencias de crecimiento. Si desean aprovechar estos cambios, los inversores tendrán que hacerse algunas preguntas difíciles sobre la función que desempeñan los factores ESG (medioambientales, sociales y de gobierno corporativo) en sus decisiones de inversión, si el mercado está siendo lo suficientemente transparente a la hora de valorar el riesgo climático y si están aplicando un proceso estructurado para identificar las oportunidades de crecimiento y los riesgos ligados al clima”.
“Los inversores están preparados para que los gobiernos conviertan el compromiso en acción. Según una encuesta de Robeco a grandes inversores, el 90% indicó que el cambio climático es o será central en sus políticas de inversión en los próximos dos años. La mayoría se compromete o se comprometerá a cero emisiones, y alrededor de una cuarta parte está descarbonizando activamente sus carteras. Las decisivas iniciativas públicas acelerarán las acciones futuras de los inversores y la industria. De esa manera, la brecha entre la ambición y la acción se puede salvar rápidamente. El mayor riesgo del cambio climático es la inacción, así que aprovechemos todas las oportunidades para actuar ahora”, afirma Peppelenbos.
En este mismo sentido, desde DWS recuerdan que mientras el mundo continúa luchando contra la pandemia, no está de más recordar que el descubrimiento de tratamientos podría ser una víctima directa de nuestra incapacidad para frenar el colapso de los ecosistemas terrestres. “Y todo eso en un momento en el que los científicos alertan de que la resistencia antimicrobiana va en aumento. En resumen, hay mucho sobre lo que pensar en el aniversario del Día de la Tierra”, concluyen.