Biología sintética: invirtiendo en la ciencia de la sostenibilidad

  |   Por  |  0 Comentarios

Cadenas de ADN
Pixabay CC0 Public Domain. Biología sintética: invirtiendo en la ciencia de la sostenibilidad

La revolucionaria tecnología de la biología sintética está llamada a tener un profundo impacto en la forma de fabricar una amplia gama de productos, desde carne cultivada en laboratorio hasta cosméticos y envases biodegradables. Sin embargo, los inversores prestan relativamente poca atención a su enorme potencial comercial. El pasado 13 de enero la especialista en productos de carteras de renta variable temática sostenible de AB Sarah Tunnell tuvo la oportunidad de entrevistar al analista de investigación senior Edward Bryan, con quien debatió sobre esta tecnología y las interesantes oportunidades que creará para los inversores de capital. 

Sarah Tunnell: Ed, muchas gracias por dedicarnos tu tiempo hoy. Sé que recientemente ha publicado un artículo muy detallado sobre el tema de la biología sintética, pero ¿podría darnos una breve descripción de lo que realmente es?

Ed Bryan: Durante milenios, la gente ha aprovechado la biología sintética, ha aprovechado la naturaleza, por ejemplo elaborando cerveza, utilizando la naturaleza para producir cosas. La biología sintética está acelerando eso. Se basa en estos procesos de la naturaleza que hemos utilizado durante miles de años. La naturaleza también nos ha dado un lenguaje de programación muy eficiente y poderoso: el ADN. El ADN es como el software de la vida. Y así, se pueden hacer cambios en el ADN para programar las células y hacerlas producir casi cualquier cosa. En un estudio publicado el año pasado McKinsey estimó que más del 60% de los insumos físicos de nuestra economía podrían producirse utilizando la biología sintética.

ST: ¿Dónde lo vemos? ¿Es algo que ya existe hoy en día?

EB: La biología sintética no es ciencia ficción. Está a nuestro alrededor. Está en muchas de las cosas que usamos hoy en día a diario. Por ejemplo, los cosméticos. Uno de los ingredientes clave de los cosméticos es un compuesto llamado escualeno. El escualeno se obtenía tradicionalmente de los hígados de los tiburones de aguas profundas. Una empresa encontró una manera de alterar el genoma de una célula de levadura, para que produjera escualeno que pudiera ser luego utilizado en los cosméticos. Hay una empresa con sede en California que, hoy en día, puede tomar el CO2 y el metano del aire, y utilizando un tipo de célula, que encontraron en el océano, producir una resina que se utiliza para confeccionar tenedores y cuchillos.

ST: La biología sintética, realmente, no es algo de lo que hayamos oído hablar mucho en el pasado. ¿Por qué es algo de lo que se habla hoy?

EB: El precio de la secuenciación de un genoma se ha reducido un millón de veces, de cientos de millones de dólares a sólo cientos de dólares. Este descenso de precio ha permitido a los investigadores secuenciar genomas y comprender mucho más sobre la genética. También hay otras tecnologías. La creación de nuevo ADN desde cero ha permitido una explosión de diferentes tipos de experimentos para entender lo que significa la genómica. Y luego, otro desarrollo muy significativo recientemente ha sido el de la inteligencia artificial y las tecnologías de aprendizaje automático. Es necesario tener estas tecnologías de procesamiento de datos para dar sentido a la genómica. Así pues, esta confluencia de tecnologías ha acelerado los descubrimientos en este ámbito.

ST: Desde el punto de vista del inversor. ¿Cuáles son las consideraciones a tener en cuenta?

EB: Creo que desde la perspectiva del inversor, una de las consideraciones clave es tener un enfoque intersectorial. Muchas de las aplicaciones iniciales de la biología sintética empezaron en el sector sanitario, pero debido al rápido descenso de los costes de la biología sintética, la tecnología se está trasladando a otros sectores. Habrá oportunidades para los proveedores de servicios externos que ayuden a algunas de estas empresas a crecer y madurar y a mejorar su rentabilidad.

ST: ¿Qué riesgos deberían considerar los inversores, si están interesados en este sector?

EB: En lo que respecta a la adopción por parte de los consumidores, existe el riesgo de que éstos se sientan desanimados por la perspectiva de la biología sintética. Las grandes empresas de bienes de consumo empaquetados están empezando a adoptar la biología sintética para fabricar sus productos. Y esas empresas son expertas en educar a los consumidores, en comercializar este tipo de productos nuevos. Así que su adopción es, para nosotros, una señal positiva. El segundo riesgo clave es la regulación. Y lo que encontramos es que los países de todo el mundo están adoptando un enfoque proactivo en áreas que están conectadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Los países están adoptando un enfoque proactivo para fomentar el crecimiento de la industria de la biología sintética.

ST: ¿Qué oportunidades ofrece la biología sintética para los inversores centrados específicamente en la sostenibilidad?

EB: Tanto los consumidores como las empresas y los gobiernos quieren soluciones ahora mismo para abordar la sostenibilidad, y la biología sintética puede ayudarles a conseguirlo.

ST: ¿Hasta dónde puede llegar esta tecnología? ¿Cuáles son algunas de las aplicaciones futuristas de la biología sintética en las que aún no hemos pensado?

EB: No sé si has visto la película «El marciano». Matt Damon intentaba cultivar plantas en la superficie de Marte. Si hubiera tenido un laboratorio de biología sintética, podría diseñar literalmente la planta para que se adaptara y prosperara en el microambiente de Marte. Ahí ya estaríamos hablando de ‘terraformar’ la superficie de Marte: se podría diseñar una planta que liberara oxígeno en el entorno y lo hiciera habitable para los humanos. La conclusión es que la biología sintética no es ciencia ficción. Está en muchos de los productos que consumimos ahora mismo.

Puede leer el artículo ‘The syntetic biology revolution’ de Edward Bryan al completo en este enlace

Santander AM refuerza su posición en Luxemburgo y supera los 11.000 millones gestionados

  |   Por  |  0 Comentarios

luxemburgo
Pixabay CC0 Public Domain. luxemburgo

Santander Asset Management ha cerrado un año histórico con captaciones netas en fondos de inversión de más de 4.160 millones de euros, según los datos de cierre de diciembre publicados por Inverco. La gestora del Banco Santander ha registrado entradas de dinero récord de 3.708 millones en productos de inversión domiciliados en España, mientras que en Luxemburgo ha atraído un total de 459 millones de euros. Con ello, refuerza su liderazgo en la plataforma del Gran Ducado con cerca de 2.275 millones.

Santander Asset Management ha potenciado la plataforma en Luxemburgo en los últimos tres años con el objetivo de convertirla en uno de los principales hub a nivel internacional y comercializar desde allí las estrategias globales en todos los países en los que está presente.

De esta manera, el volumen gestionado en Luxemburgo ha pasado desde los 3.000 millones a finales de 2018 hasta alcanzar los 11.500 millones el pasado mes de diciembre.

A nivel global, gestiona ya un volumen de 194.000 millones de euros tras captar entre todas las geografías en las que está presente 5.677 millones entre enero y diciembre del pasado ejercicio.

“Queremos agradecer a nuestros clientes la confianza depositada en nosotros, que nos ha llevado a liderar la captación neta de fondos de inversión en el pasado ejercicio”, señala Miguel Ángel Sánchez Lozano, consejero delegado de Santander AM en España.

Por su parte, Martin Chocron, director comercial de la gestora, destaca que “desde Santander ayudamos a los clientes a dar su paso de ahorradores a inversores con una gama de soluciones sencilla y adecuada a sus necesidades”.

En los últimos doce meses, los productos más demandados han sido los fondos perfilados (Gama Santander PB Portfolio y Santander Gestión Global), los fondos de inversión que aplican criterios ASG (Gama Santander Sostenible) y el fondo de renta variable que invierte en megatendencias, Santander Future Wealth. Otras de las gamas estrella en 2021 han sido Mi Cartera Santander, un servicio de gestión discrecional de carteras que invierte en los mejores fondos de la gestora, y la iniciativa global Santander GO, fondos mandatados a gestoras internacionales.

Banca March y Allianz GI refuerzan su compromiso por la sostenibilidad y lanzan un fondo de bonos que abogan por la transición verde

  |   Por  |  0 Comentarios

verde_0
Pixabay CC0 Public Domain. verde

Banca March y Allianz Global Investors refuerzan su compromiso con la inversión sostenible con el lanzamiento de una solución de renta fija cuyo objetivo primordial es la financiación de proyectos comprometidos con la descarbonización y el medio ambiente que contribuyan a una transición verde de la economía global.

Se trata del fondo March Green Transition Bond, que invierte en una cartera multisectorial diversificada en bonos corporativos emitidos bajo la SBTi (Science Based Target initiative), bonos verdes y deuda emitida por países emergentes con compromisos climáticos y ambientales sólidos. La duración del fondo será elevada, ya que la vocación es ayudar a las compañías y países a lograr sus objetivos en transición hacia un mundo más verde adquiriendo estos bonos emitidos a plazos largos.

Mediante la inversión en bonos verdes, los clientes de la entidad podrán contribuir a la financiación de proyectos verdes, elegibles siguiendo una taxonomía interna –basada en el Climate Bond Initiative– y que ofrecen un elevado nivel de transparencia en cuanto a la trazabilidad de su impacto. Algunos ejemplos de esta categoría abarcan proyectos de energías renovables, prevención de la polución, transporte limpio, gestión de residuos o edificios ecológicos.

Por otro lado, la inversión en deuda de compañías que están implementando planes de descarbonización según la Science Based Target initiative (SBTi por sus siglas) –una iniciativa global que se apoya en los últimos avances de la ciencia climática para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París guiando a las empresas en su transformación– contribuye a la consecución de los objetivos de descarbonización –acordes a su modelo de negocio y sector en el que operen– fijados por dichas empresas, situándolas como ganadoras en la lucha contra el cambio climático.

Por último, la cartera incorpora deuda pública de mercados emergentes que se encuentren en proceso de transformación e implementación de un modelo de crecimiento económico sostenible. Para su incorporación a la cartera, ha sido necesario un riguroso análisis que tiene en cuenta la situación actual del país, sus planes de transformación y capacidad para ejecutarlos.

Se trata de una estrategia definida entre Banca March y Allianz Global Investors, una de las mayores firmas de gestión activa del mundo, especialista en la gestión sostenible y de transición energética. El acuerdo se enmarca en la estrategia de alianzas con gestoras internacionales líderes iniciada en  2018 por Banca March, y se suma a los productos lanzados de la mano de especialistas en transición energética, inversión de impacto y sostenibilidad como Amundi-CPR, Tikehau o Robeco.

Transición hacia una economía verde

El compromiso de Banca March con la sostenibilidad se refleja en todos sus ámbitos de actuación. Así, la entidad, junto al resto del Grupo, forma parte de Pacto Mundial de la ONU, la iniciativa por la sostenibilidad corporativa más ambiciosa que existe, como socio-Signatory. Junto con 690 entidades españolas y 1.590 en todo el mundo, busca alinear sus objetivos con las políticas y los planes que fomentan alianzas con Gobiernos, sociedad civil y sector privado para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 impulsada por Naciones Unidas.

Más allá del uso sostenible de los recursos propios de la entidad, Banca March tiene como objetivo fomentar la inversión en sectores que desarrollen una gestión ambiental eficiente. Desde hace más de 90 años y fiel a su filosofía de buscar un crecimiento conjunto de clientes, empleados, accionistas y la sociedad en general, Banca March aprovecha la transformación en oportunidades de crecimiento y en nuevas formas de invertir y ahorrar de manera responsable. Esta apuesta por inversiones responsables y sostenibles se enmarca en la visión de un nuevo ciclo marcado por la tecnología, la digitalización y la sostenibilidad.

De esta manera, en los últimos años Banca March ha presentado soluciones innovadoras y alternativas de inversión y financiación que buscan conjugar de la mejor manera sostenibilidad y rentabilidad como Next Generation, estrategia de inversión en megatendencias, Mediterranean Fund, un fondo temático medioambiental que destina el 10% de la comisión de gestión a proyectos de conservación y recuperación de los ecosistemas marinos, o la  inversión de más de 420 millones de euros en financiación sostenible para el desarrollo de proyectos de eficiencia energética en compañías hoteleras.

El grupo J. Safra Sarasin abre oficina en Madrid con Francisco Gómez-Trenor al frente

  |   Por  |  0 Comentarios

trenor
. trenor

El banco privado de origen suizo J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA ha anunciado hoy la apertura de una nueva sucursal en Madrid, España. La apertura de oficinas en España forma parte de la estrategia actual del Grupo para desarrollar sus actividades en los principales mercados europeos.

Esta nueva oficina, ubicada en el Paseo de la Castellana 13 de la capital, se centrará en clientes con residencia en España, tanto en el ámbito de la banca privada como en el de la gestión de clientes institucionales.

La sucursal, registrada en el Banco de España y en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y operativa desde el 1 de enero de 2022 como Banque J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA, Sucursal en España, está dirigida por Francisco Gómez-Trenor, que depende de Jules Moor, CEO de Banque J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA. Todos los servicios de inversión que ofrecen están regulados por la directiva MiFID.

La sucursal en España del Banco J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA, ofrecerá una alternativa atractiva a las personas, familias e instituciones españolas de alto poder adquisitivo que requieran servicios a medida con un enfoque personalizado, así como soluciones de inversión sostenibles y distintivas basadas en una probada trayectoria y una larga experiencia.

«Esta es una clara confirmación de nuestro compromiso de servir a los clientes residentes en España. Francisco tiene una excelente reputación en el mercado español y contribuirá al éxito continuado del Banco con su profesionalidad y experiencia. Con esta nueva presencia local, que se beneficia de su plataforma de vanguardia en Luxemburgo, el banco está bien posicionado para atender a los clientes en este mercado de gran importancia estratégica», señala Jules Moor, CEO de Banque J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA.

«Estoy encantado de haberme unido a una reconocida y sólida marca global de banca privada y de desarrollar su negocio en España. La solidez de Banque J. Safra Sarasin, su propiedad familiar y su objetivo estratégico a largo plazo centrándose en los clientes privados e institucionales, junto con su papel pionero en inversiones sostenibles durante más de 30 años, serán sin duda la clave del éxito», añade Francisco Gómez-Trenor, director general de Banque J. Safra Sarasin (Luxembourg) SA, Sucursal en España.

Recientemente, el grupo contrató a Belén Ríos, ex Amundi, para dirigir las actividades de la gestora JSS Sustainable Asset Management en Iberia.

Las emisiones de bonos y préstamos sostenibles alcanzarán los 4,5 billones de dólares en 2025

  |   Por  |  0 Comentarios

daisies-gca36497bd_1920
Pixabay CC0 Public Domain. Las emisiones de bonos y préstamos sostenibles alcanzarán los 4,5 billones de dólares en 2025

Hasta el tercer trimestre de 2021 se emitieron 1,1 billones de dólares en bonos y préstamos sostenibles, frente a menos de 15.000 millones de 2010; aunque la estimación para todo 2021 es de 1,4 billones. Según un estudio conjunto de Pictet AM y el Instituto de Finanzas Internacionales, este tipo de emisiones puede alcanzar 4,5 billones de dólares anuales para 2025. 

El documento explica que hasta ahora la inversión con criterios ESG se ha centrado principalmente en renta variable, pero para hacer frente a los restos climáticos y medioambientales, de aquí a final de la década, se necesitan anualmente inversiones de 4 billones de dólares, por lo que es inevitable acudir a la deuda. Por ello, defiende que, en los próximos cinco a diez años, se producirá una revolución en los mercados de renta fija.

“Hay que tener en cuenta que la deuda relacionada con cuestiones ESG parte de una base limitada, pero ha crecido con rapidez los últimos años y la variedad de instrumentos y actividades con orientación medioambiental que financian ha aumentado a ritmo vertiginoso.  Los ejemplos de estructuras innovadoras que pueden convertirse en habituales en pocos años, incluyen: la deuda verde (requisitos respecto a uso); bonos sostenibles (objetivos sostenibles o combinación de verde y sociales); vinculada a sostenibilidad (cupones ligados a resultado medioambiental de un Estados o empresa); bonos de transición (financia empresas con altas emisiones de gases de efecto invernadero en transición a actividades más ecológicas o menores emisiones de carbono); y bonos sociales (destinados a proyectos de impacto social positivo)”, identifica el informe. 

Para el inversor, estos cambios implican nuevos desafíos. Según las conclusiones, hoy día es posible crear carteras de renta fija que, además de objetivos financieros, facilitan satisfacer objetivos no financieros, como atenuación del cambio climático, protección de biodiversidad o lucha contra la desigualdad.  No obstante, hay que estudiar los riesgos, advierten: “Los bonos con criterios ESG, pueden, por complejidad, ser caros de analizar y deben ser examinados con mucho más detalle. A menudo no se ajustan fácilmente a la construcción de carteras que el inversor emplea”.

bonos ss totales

El crecimiento de la deuda sostenible emergente

En este sentido, el informe argumenta que la deuda soberana sostenible y empresarial de mercados emergentes será la clase de activo que cobre mayor importancia. El estudio de Pictet AM e IIF estima que las emisiones de bonos ESG en emergentes crecerá de 50.000 millones de dólares en 2020 a 360.000 millones para 2023 y más de 700.000 millones para 2025. Y, en el mejor  escenario, pueden alcanzar 2 billones de dólares.

Ahora bien, las conclusiones del informe tamizan que hay que tener en cuenta que “en 2020, solo 83.000 millones de dólares de inversiones transfronterizas a países en desarrollo estaban relacionados con el clima, menos de 8 % del total”, y la diferencia entre inversiones necesarias y recibidas para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas 2030 en países en desarrollo y emergentes se estima en 2,5 billones de dólares anuales. Por eso concluye que la expansión de bonos ESG y un verdadero mercado de deuda sostenible puede poner a disposición de estos gobiernos y empresas el capital que necesitan.

“El desarrollo de bonos sello ESG es un segmento al que llevamos prestando gran atención desde hace cierto tiempo. El estudio de IIF y Pictet Asset Management corrobora nuestra convicción de que se va a producir una revolución silenciosa en los mercados de renta fija, que beneficiará tanto al inversor y la sociedad en su conjunto, como al medioambiente”, destaca Raymond Sagayam, director de inversiones de renta fija de Pictet AM.

Por su parte, Sonja Gibbs, directora ejecutiva y responsable de finanzas sostenibles de IIF, estima que, en 2025, habrá muy pocos inversores a nivel mundial que no cuenten con una importante asignación a inversiones verdes o con sello ESG. “Si miramos más allá, hacia 2050, cuando estados y empresas en todo el mundo estén a punto de alcanzar objetivos de emisiones netas cero de CO2, habremos realmente logrado un mercado de renta fija mundial más verde, al tiempo que mejorado nuestro entorno”, afirma Gibbs.

bono ss países

El liderazgo de las economías desarrolladas

Pese a que las mayores expectativas están puestas en el potencial que tienen los mercados emergentes, la realidad es que las economías desarrolladas dominan el mercado de bonos verdes. En concreto, el 50% de los bonos verdes en circulación están denominados en euros: desde finales de 2015 la expansión ha sido más rápida en Alemania, Francia y EEUU, que juntos representan más de un tercio del total del mercado.

En cambio, en mercados en desarrollo y emergentes China, India, Chile y Brasil representan 80% de la emisión de este tipo de deuda desde finales de 2015. Según destacan desde Pictet AM, como emisores, también destacan las empresas financieras, que representan 35% de los bonos verdes emitidos desde 2019, y las de servicios públicos e industriales 17% y 4%. En empresas no financieras, matizan, la emisión está dominada por calificaciones grado de inversión, 80% del total desde 2015.

En el futuro y crecimiento de este mercado la estandarización de taxonomías y metodologías de calificación ESG serán relevantes. En este sentido, varias regiones y países desarrollan estándares propios para bonos verdes y productos financieros sostenibles, como los Estándares de Bonos Verdes de la UE o el Catálogo de Apoyo a Bonos Verdes de China, además de esfuerzos liderados del sector privado, como la Iniciativa de Bonos Climáticos para bonos alineados con el clima (sin etiqueta ASG, emitidos por empresas que contribuyen a la transición a la energía limpia).

Según la gestora, el progreso en la estandarización de taxonomías debe fomentar un desarrollo más rápido de este mercado. “Un marco global es el de la Asociación Internacional del Mercado de Capitales (ICMA), con directrices de transparencia y divulgación para Bonos Verdes, Bonos Sociales, Bonos de Sostenibilidad y Bonos Vinculados a la Sostenibilidad. Por su parte las agencias de calificaciones bonos y emisores ASG utilizan diferentes metodologías, a menudo en conflicto entre sí y no totalmente transparentes. Una mayor transparencia sobre cómo recopilan, analizan y calculan métricas ASG puede impulsar la demanda y oferta de deuda ASG”, explican.

Greenium y rentabilidades

Los bonos verdes son el segmento más dinámico, aunque aún supone menos de 1% del total del universo de renta fija en circulación. Es relativamente pequeño y no especialmente diversificado. Tiene su origen hace 15 años y aún no ha adquirido el peso que permita a los inversores transacciones grandes y rápidas sin oscilaciones adversas de precio. Los bonos verdes se han colocado con rentabilidades a vencimiento persistentemente menores que los convencionales, a pesar de ser menos líquidos y negociarse con menos frecuencia. Puede atribuirse a que los compradores tienden a ser instituciones de comprar y mantener, como fondos de pensiones, seguros y soberanos, a fin de ecologizar sus carteras en línea con sus compromisos de cero emisiones netas”, explican desde la gestora.

Y añaden: “La demanda por bonos verdes ha sido evidente en mercados primarios y secundarios y parece haberse traducido en menores costes de endeudamiento para algunos emisores, con una pequeña prima (greenium) respecto a los bonos convencionales. Esta prima parece mayor en bonos de peor calificación y ciertos sectores como servicios públicos y bonos soberanos. Es el caso de los bonos verdes alemanes, que cotizan con prima respecto a los convencionales para vencimientos similares”.

En este sentido, los bonos verdes han proporcionado una rentabilidad similar o mejor que sus pares no verdes los últimos años. “En concreto, los bonos verdes soberanos han superado a los convencionales desde finales de 2017 en 0,1% mensual promedio. Los índices de renta fija verde han sido ligeramente superiores a los de bonos convencionales, aunque variando considerablemente a nivel de valores individuales. Sin embargo, los índices de bonos verdes han sido más volátiles que los convencionales los últimos años, con diferencias significativas entre sectores. Los índices de bonos verdes de deuda soberana han sido más volátiles que los convencionales, con menor rentabilidad ajustada a volatilidad.  Pero la volatilidad de los bonos verdes empresariales es inferior a la de los convencionales, en particular en denominaciones en dólares. Puede ser consecuencia del efecto de la divulgación adicional y verificación de estas emisiones por parte de terceros”, comentan desde la gestora.

Jupiter lanza una versión de su fondo insignia de bonos sostenibles bajo el artículo 8 del SFDR

  |   Por  |  0 Comentarios

paper-plane-g9b0340f0f_1920
Pixabay CC0 Public Domain. lanzamiento

Jupiter ha anunciado el lanzamiento del fondo Jupiter Dynamic Bond ESG (sicav), una versión adaptada de su fondo insignia Jupiter Dynamic Bond (sicav) centrada fundamentalmente en la sostenibilidad. Según ha matizado la gestora, el nuevo fondo, que promueve de forma activa características medioambientales y sociales, quedará clasificado con arreglo al artículo 8 del Reglamento de divulgación sobre sostenibilidad (SFDR) de la UE.

El Jupiter Dynamic Bond ESG Fund estará gestionado por el mismo equipo líder en el sector del Jupiter Dynamic Bond, que cuenta con un patrimonio de 9.960 millones de euros: Ariel Bezalel, director de estrategia de renta fija en Jupiter, y Harry Richards, gestor de fondos de renta fija. 

Según explica la firma, mientras que el fondo Jupiter Dynamic Bond existente integra plenamente los criterios ESG en el marco de su consolidado proceso de inversión, el Jupiter Dynamic Bond ESG promoverá de forma activa características medioambientales y sociales, incluida la transición hacia una economía baja en carbono y el fomento de unos intereses positivos de todas las partes implicadas. Este nuevo fondo va dirigido a inversores que buscan una solución conforme al Artículo 8 para sus necesidades en materia de renta fija a escala mundial.

Está previsto que tanto el alto proceso de asignación de valores como las principales características de riesgo se mantengan uniformes en los dos fondos. En este sentido, el fondo Jupiter Dynamic Bond ESG aplicará unos estrictos criterios ESG, que incluyen ciertas exclusiones por sectores y países, análisis de datos e interacción constante con las empresas, junto con exhaustivos análisis cualitativos, para determinar si los valores resultan aptos para ser incluidos en la cartera. “Los requisitos de medición asociados a los fondos englobados por el Artículo 8 permitirán establecer objetivos de sostenibilidad a largo plazo para las empresas y países participados por el fondo, respecto a los que se evaluará, seguirá y compartirá su progreso”, señalan desde la gestora.  

El fondo Jupiter Dynamic Bond continuará clasificado por el momento según el Artículo 6 del SFDR, y seguirá ofreciendo su riguroso enfoque establecido sobre las cuestiones ESG tanto en el marco de su selección bottom-up  de títulos de deuda corporativa como de su asignación de activos top-down. Según añaden desde la gestora, al igual que todas las demás carteras de inversión de la sociedad, el fondo Jupiter Dynamic Bond ESG hará suyo el compromiso declarado de Jupiter de conseguir la neutralidad en sus emisiones netas de carbono procedentes tanto de sus propias operaciones como de los fondos que gestiona en representación de sus clientes no más tarde de 2050. 

“La dilatada experiencia en mercados de deuda corporativa que el equipo de renta fija de Jupiter atesora nos ha enseñado lo fácil que resulta que una gestión deficiente de los riesgos de gobierno corporativo, medioambientales y sociales puede echar por tierra oportunidades en títulos de deuda corporativa aparentemente atractivas o en vías de mejora. Nuestra capacidad para gestionar los riesgos a la baja se fundamenta en un estudio riguroso de los posibles riesgos ESG en paralelo al análisis financiero tradicional. Así, estamos encantados de formalizar y promover este proceso dentro de este nuevo fondo”, ha destacado Ariel Bezalel, director de estrategia de renta fija de Jupiter

Último nombramiento

En consonancia con el lanzamiento del fondo Jupiter Dynamic Bond ESG, Jupiter ha anunciado el nombramiento de Anna Karim para el cargo de directora ESG de renta fija. Según explican, Anna se incorporó a Jupiter en octubre procedente de Federated Hermes, donde estaba al cargo de la innovación de producto y del crecimiento de los activos gestionados por los fondos centrados en criterios ESG de la empresa. Anteriormente, trabajó 20 años en banca de inversión en empresas como Bank of America Merrill Lynch y Citi Group.

En su nuevo puesto, Anna se ocupará de la amplia gama de fondos de renta fija de Jupiter, con especial atención al Dynamic Bond ESG, para promover unas sólidas prácticas de inversión responsable en el marco del enfoque aplicado por el equipo en toda esta gama de fondos.

Para Warren Tonkinson, responsable global adjunto de distribución de Jupiter: “En nuestra calidad de gestora activa y basada en high conviction, consideramos que ofrecemos un mejor servicio a nuestros clientes mediante inversiones que generan un impacto positivo con su dinero en materia ambiental, social y financiera. Esto sucede no solo en los productos que integran nuestra gama de sostenibilidad, sino en toda nuestra familia de fondos”. 

En opinión de Tomkinson, el Ramento SFDR, unido a la cada vez mayor concienciación existente entre los inversores sobre la urgencia de abordar los retos ambientales que están afectando a nuestro mundo, ha acelerado enormemente la demanda de inversiones que contribuyen a generar este impacto positivo. “Por ello, estamos encantados de ofrecer este nuevo fondo a los clientes que buscan acceder a nuestra exitosa y consolidada estrategia con los objetivos ESG en mente», concluye.

Groupama AM crea un fondo que invierte en bonos de corta duración ligados a la inflación

  |   Por  |  0 Comentarios

rope-g54f060e55_1920
Pixabay CC0 Public Domain. Groupama AM lanza un fondo de bonos corto plazo ligado a la inflación

Groupama AM lanza el G Fund – Global Inflation Short Duration como respuesta a un contexto reflacionista y de tipos reales bajos. La entidad prevé que los niveles de inflación podrían estabilizarse en niveles superiores a los previstos, en un contexto de tendencias estructuralmente reflacionistas. Unas perspectivas que, según explican, abogan por soluciones de inversión protectoras capaces de beneficiarse de un aumento de la inflación. 

El G Fund-Global Inflation Short Duration invierte principalmente en bonos de corta duración (1-5 años) ligados a la inflación y emitidos en países de la OCDE con un horizonte de inversión a medio plazo. El fondo tiene como objetivo obtener una rentabilidad superior a la del índice de referencia Bloomberg World Government Inflation-Linked Bond 1-5 años (con cobertura en euros), cupones netos reinvertidos.

Para lograrlo, el equipo de gestión aplica una estrategia de bonos flexible basada en varios motores de rendimiento, como la gestión de la duración, el posicionamiento sobre la curva de tipos, las elecciones de distribución geográfica, los breakeven de inflación, la selección de valores y, en menor medida, las divisas.

En general, esta estrategia ofrece al inversor una importante exposición a la inflación a corto plazo gracias al mecanismo de indexación y una menor sensibilidad a las evoluciones de los tipos reales.

Combinar rendimiento e inversión responsable para sus clientes es un compromiso importante para Groupama AM, por lo que el equipo de gestión efectúa un análisis completo de las características ESG de los emisores utilizando una metodología de calificación propia. El G Fund – Global Inflation Short Duration está clasificado como «Artículo 8» según la normativa SFDR.

«Pensamos que era el momento adecuado para lanzar un fondo de bonos ligados a la inflación a corto plazo. De hecho, la combinación de un contexto reflacionista y unos tipos reales históricamente bajos, ofrece según nuestra opinión, un punto de entrada atractivo para esta estrategia. El uso de bonos indexados permite proteger las carteras frente a un aumento de la inflación mayor de lo previsto. Favorecemos las duraciones cortas, ya que la parte corta de la curva se beneficia más de las sorpresas de la inflación, al tiempo que limita el riesgo de sensibilidad a los tipos reales», explica Xavier Hoche, director de Gestión.

Según destaca la gestora, el equipo de renta fija y crédito es el encargado de la gestión del fondo, compuesto de nueve especialistas y cuyos activos gestionados ascienden a 12.500 millones de euros.  

El 46% de los inversores profesionales europeos usa las materias primas para protegerse de la inflación

  |   Por  |  0 Comentarios

umbrellas-geaf9424b8_1920
Pixabay CC0 Public Domain. El 46% de los inversores profesionales europeos apuesta por las materias primas para protegerse de la inflación

¿Desaprovechan  los inversores profesionales los beneficios de cobertura contra la inflación que pueden ofrecer las materias primas? Según argumenta WisdomTree en su última encuesta, en parte, sí estarían perdiendo esta oportunidad. En cambio, los resultados revelan que el que casi el 50% de los inversores profesionales europeos se está preparando para una inflación elevada y ante el riesgo de una política monetaria inefectiva.

La encuesta*, realizada a inversores profesionales en toda Europa, muestra una falta de confianza en la capacidad de los bancos centrales para mantener a raya la alta inflación, siendo esta última (un 52%) y los errores de política de los bancos centrales (un 51%) los riesgos que más preocupan a los inversores. Según explican desde WisdomTree, con la inflación en Europa situándose significativamente por encima de los niveles objetivo del 2%, el 72% de los inversores profesionales encuestados ha comenzado a prepararse para un escenario de alta inflación según el sondeo

En este sentido, cuando se preguntó a los inversores cómo se están preparando para mitigar el entorno inflacionista, el 46% indicó que mediante una asignación a materias primas en sus carteras. Asimismo, otro 28% está considerando posicionarse en esta clase de activo para reducir el impacto de la inflación en sus carteras.

“Una de las características más comentadas de la inversión en materias primas es su capacidad para ejercer de cobertura contra la inflación. Los académicos han estudiado durante mucho tiempo la relación entre las materias primas y la inflación y concluyen que, a largo plazo, y en la mayoría de los períodos históricos, las materias primas están correlacionadas positivamente con la inflación. La rentabilidad media mensual de las cestas de materias primas tiende a incrementarse cuando el índice de precios al consumo (IPC) aumenta, lo que no siempre es el caso para otros activos como los bonos ligados a la inflación o los bienes inmuebles”, explica Nitesh Shah, responsable de Análisis Macroeconómico y Materias Primas en WisdomTree Europa.

Desde la gestora reconocen que, a pesar de que las materias primas son bien conocidas por sus propiedades de cobertura contra la inflación, el modo preferido para la mayoría de los inversores europeos (para el 55%) de acceder a esta clase de activo es a través de las acciones relacionadas con las materias primas. Sin embargo, apuntan, las acciones relacionadas con las materias primas y las materias primas por sí mismas no tienen características similares, lo cual podría sorprender a aquellos que construyen sus carteras de este modo. 

De acuerdo con la encuesta, solo el 37% de los inversores europeos profesionales eligen, o elegirían, invertir a través de exposiciones sintéticas, mientras que un 24% lo haría a través de exposiciones con respaldo físico, típicamente los métodos más eficientes para acceder a las materias primas y realizar una cobertura contra la inflación.

Por su parte, Pierre Debru, responsable de Análisis Cuantitativo y Soluciones Multiactivo para WisdomTree Europa, añade: “Las acciones relacionadas con las materias primas son generalmente utilizadas como una alternativa de acceso fácil a este tipo de activo. Sin embargo, el análisis ha mostrado que una inversión en valores relacionados con las materias primas proporciona una exposición a la gestión, las líneas de negocio y las prácticas de estas compañías principalmente. En muchos casos, estas compañías cubren parte o toda su exposición a las materias primas, es decir, pagan la prima de riesgo de las materias primas a los titulares de contratos de futuros. Las acciones relacionadas con las materias primas se comportan significativamente más como las acciones o renta variable en general que como las materias primas, y como resultado, no son una cobertura muy efectiva contra la inflación”.

De acuerdo con la encuesta, los activos más comunes para los inversores profesionales europeos al configurar sus carteras con propósitos de cobertura contra la inflación son: las acciones (78%), los bonos ligados a la inflación (58%) y las infraestructuras (47%). Las cestas de materias primas (46%) y el oro (28%), ambas históricamente buenas coberturas inflacionarias, no se situaron entre las tres clases de activo mayoritarias, a pesar de que el 33% de los inversores profesionales europeos espera incrementar sus asignaciones a las materias primas de energía y un 29% a las materias primas agrícolas durante los próximos doce meses.

  

*La encuesta, realizada por la agencia de investigación independiente CoreData Research, consultó a 600 inversores profesionales de toda Europa, abarcando desde asesores financieros hasta gestores de patrimonio y family offices. Los inversores encuestados son responsables de aproximadamente 400 mil millones de euros en activos bajo gestión.

Efama se incorpora como miembro del European Financial Reporting Advisory Group

  |   Por  |  0 Comentarios

belgium-g1aa26796f_1920
Pixabay CC0 Public Domain. Efama se incorpora como miembro del European Financial Reporting Advisory Group

La industria de fondos europeo ha dado un nuevo paso en su compromiso con la inversión sostenible. La Asamblea General de EFRAG (European Financial Reporting Advisory Group) ha aprobado la adhesión de la Asociación Europea de Fondos de Inversión y Gestión de Activos (Efama, por sus siglas en inglés) a esta iniciativa. 

“Efama se complace en ser nombrada miembro del EFRAG. Según explica, la organización tiene un papel relevante en el desarrollo de normas fiables, comparables y coherentes para la elaboración de informes de sostenibilidad en la UE, así como en la integración del informe de doble materialidad. El EFRAG también influirá en el desarrollo de la información internacional sobre sostenibilidad”, ha destacado Naïm Abou-Jaoudé, presidente de Efama.

EFRAG es una asociación privada creada en 2001 con el impulso de la Comisión Europea para servir al interés público. Sus organizaciones miembros son partes interesadas europeas y organizaciones nacionales que tienen conocimiento e interés en el desarrollo de las normas NIIF y en cómo contribuyen a la eficiencia de los mercados de capitales. 

Destaca que la asociación está formada por un grupo de expertos encargado de realizar los pronunciamientos técnicos (EFRAG TEG), constituido por 12 miembros independientes de experiencia renombrada, y un consejo supervisor (EFRAG SB), que agrupa a representantes de distintos organismos privados relacionados con la contabilidad. La función de este consejo supervisor es realizar un seguimiento del desempeño del EFRAG TEG, así como aprobar su presupuesto, obtener financiación y nombrar a los miembros y al presidente del EFRAG TEG. En este sentido, el EFRAG trata de dar una gran difusión de los documentos elaborados a través de su página Web, ya que solicita recepción de comentarios a los mismos.

La representación de Efama en el pilar de información sobre sostenibilidad de EFRAG garantizará que la información sobre sostenibilidad satisfaga las necesidades de los inversores en relación con los perfiles de sostenibilidad de las empresas y los productos. Nuestro sector se enfrenta a importantes retos en materia de datos debido a la falta de información armonizada y disponible públicamente sobre las empresas en materia de ESG. Aunque el sector de la gestión de inversiones está trabajando para mejorar la información sobre ESG de los productos financieros, todavía no disponemos de los datos necesarios de las empresas en las que se invierte. Creemos que las futuras normas de información sobre sostenibilidad ayudarán a cerrar la brecha de datos y a liberar todo el potencial de la agenda de las finanzas sostenibles”, ha señalado Abou-Jaoudé.

Jim Cielinski (Janus Henderson): “Los bancos centrales estarán en los titulares el resto del año”

  |   Por  |  0 Comentarios

Nos encontramos en mitad de un cambio de régimen, según apunta Jim Cielinski, director global de Renta Fija en Janus Henderson Investors. Esto no significa que estemos en la cúspide de un apocalipsis o algo así. Un cambio de régimen puede materializarse de muchas formas diferentes, a menudo con un movimiento brusco, pero aún más frecuentemente con una sucesión de diferentes etapas que comienzan y encajan. Por lo general, estos cambios de régimen llevan acarreado una mayor volatilidad, algo para lo que los inversores deberían prepararse conforme nos adentramos en el nuevo año.

El riesgo de que los bancos centrales cometan un error en política económica en los próximos meses ha aumentado. Irónicamente, después de que la economía haya estado sobrecalentada durante casi dos años y los bancos centrales estén tomando posturas menos acomodaticias, ahora tenemos un panorama económico que parece estar desacelerándose. Y, sin embargo, los bancos centrales siguen manteniendo un discurso con respecto a la retirada de su programa de compras. La desaceleración económica es real y los bancos centrales mantienen su postura de endurecimiento, una situación sin precedentes.

Los bancos centrales creyeron que la inflación que se ha visto en el mercado sería transitoria, pero la realidad les ha demostrado que estaban equivocados. Así, muchos agentes del mercado creen que una buena parte de la inflación que se está viendo en el mercado es más permanente, conforme los salarios continúan incrementando y creando presiones inflacionarias.

Por otro lado, los activos de riesgo muestran unas valoraciones extendidas, pero eso no significa que no puedan seguir subiendo. Es importante tener en cuenta que nos encontramos en una etapa tardía del ciclo y que, si se produce un movimiento en la tasa de interés federal, eso no significa necesariamente que los mercados tengan que caer. De hecho, a menudo, los activos de riesgo siguen experimentando subidas, aunque no necesariamente vayan a continuar el rally infinitamente.

Según Cielinski, este es un ciclo diferente. Históricamente, los bancos centrales no habían tardado tanto en normalizar su política monetaria. La liquidez se ha convertido así en el principal factor de impulso para los mercados. Los fundamentales son buenos, pero el ingente volumen de liquidez en los mercados se va a volver en contra de los inversores.

El nivel de las rentabilidades

La rentabilidad (TIR) de los bonos ha continuado aumentando. Esto ha creado la narrativa en el mercado de que seguirán aumentando, pero Cielinski no cree que eso sea cierto. En su opinión, el grupo de países cuyos bonos ofrecen rentabilidades negativas ha continuado subiendo. Conforme más emisiones han incrementado la oferta de deuda en el mercado, el volumen de bonos que ofrecen una rentabilidad negativa ha aumentado por encima de la mayoría de los ciclos anteriores.

Sin embargo, esto no significa que las rentabilidades estén a punto de repuntar. A juicio del experto, si no lo han hecho ya, es muy difícil que lo hagan a partir de ahora. La inflación se ha situado muy por encima del objetivo y el crecimiento ha sido hasta ahora muy fuerte. Para aquellos inversores que esperan que la rentabilidad del bono del Tesoro a 10 años se sitúe entre un 3% o un 3,5%, Cielinski les recuerda que nos encontramos en un mundo con exceso de ahorro, en el que probablemente se vea una mayor desaceleración de la economía y la inflación toque techo durante los meses de marzo y abril. En su opinión, es más probable que estos rendimientos se mantengan en el rango del 2%, o incluso por debajo.  

Los tipos de interés reales

Los tipos de interés, aquellos que han sido ajustados por la inflación, se han mantenido sorprendentemente bajos, aunque podrían subir un poco más conforme la inflación sigue aumentando. La buena noticia es que a este nivel permite a los prestatarios acceder al capital a unos niveles de tipos razonables. Las tasas de impago se mantendrán bajas mientras que los tipos de interés reales se mantengan bajos.

Muchos inversores creyeron que los bancos centrales distorsionarían los mercados hasta tal punto que tan pronto como abandonen sus políticas expansivas se vería un incremento en los tipos de interés reales, pero parece que los tipos de interés reales han experimentado una tendencia a la baja durante un número de años.

Por otro lado, la economía estadounidense se encuentra cerca del pleno empleo, aunque sea difícil definir qué es el pleno empleo incluso para los bancos centrales. Con una tasa de desempleo por debajo del 4% en Estados Unidos, estamos en un nivel inferior al nivel anterior a la pandemia. Si se evalúa la repercusión del empleo en los beneficios se puede ver que, hay determinados empleos que requieren ciertas habilidades que se encuentran en demanda y están viendo como la presión sobre los salarios está incrementando, pero la inflación está aumentando a un ritmo superior que las subidas salariales. De hecho, ajustados por la inflación, los salarios reales han bajado. Por ejemplo, en Reino Unido, la inflación va a tocar su máximo cerca del 7%. Esto va a suponer un ajuste en los salarios reales, en un momento en el que parte del ímpetu fiscal que soporta el crecimiento está comenzando a disminuir.

El exceso de ahorro

En respuesta a la pandemia, el estímulo fiscal regó la economía a nivel mundial en los últimos dos años. El cierre de las economías durante los meses de confinamiento cerró las economías, haciendo que los consumidores gastarán mucho menos y que, gracias a los estímulos fiscales, se incrementará el ahorro de las familias. Una gran parte de estos estímulos ya se ha retirado y el gasto ha continuado creciendo, por lo que se podría anticipar una reversión a la media con un menor gasto, unos menores salarios reales y cierta presión inflacionaria.

En el lado más industrial de la economía, los índices de gestores de compras muestran que sigue habiendo crecimiento en la economía. Aunque éste se ha desacelerado, todavía es pronto para estar preocupados en términos de una recesión.

La liquidez en el mercado

Como se mencionó anteriormente, la liquidez es uno de los factores fundamentales del mercado. Es lo que tiende a liderar en los mercados y en la economía. Si la cantidad de liquidez en los mercados es tan elevada como en 2020 y no puede ser absorbida por la economía real lo suficientemente rápido, entonces termina afectando a los mercados financieros, elevando sus precios.

Ahora, nos vemos ante el escenario contrario. Los mercados no están preparados para una rápida retirada de la liquidez, si sucediera, podría representar el final del ciclo. Lo que está claro es que la calma en los mercados ha terminado y se verá una mayor volatilidad con una economía más débil. Los activos de riesgo no seguirán al alza como en los últimos dos años. Por lo que habrá que estar pendiente de las señales del mercado.

Los fundamentales siguen siendo fuertes, especialmente en el crédito corporativo, con unos ratios EBITDA/deuda y de cobertura sorprendentemente favorables, anticipando que todavía no habrá impagos. En ese sentido, según Cielinski nos encontramos al principio del final del ciclo, pero la tasa de impagos se mantendrá al menos durante un año más.

¿Dónde están las oportunidades?

Existen varios segmentos del mercado en los que parece que se está valorando el riesgo de una forma más adecuada, o que al menos, se ha valorado en su totalidad. Por ejemplo, en los mercados emergentes, en China se han visto correcciones importantes y un rendimiento inferior, con muchos de sus mercados mostrando unos precios por debajo de su valor intrínseco.

Por otro lado, en los mercados de valores titulizados (ABS/MBS/CLO) no se ha construido apalancamiento en los últimos 10 años, por lo que siguen ofreciendo valor. El crédito corporativo también sigue teniendo valor gracias a que las tasas de impago se mantendrán bajas al menos un año más.

En resumen, la volatilidad persistirá y los inversores estarán bailando en el filo de la navaja. Los mercados quieren ver crecimiento, pero no hasta el punto de que se produzca un sobrecalentamiento en la economía, para no forzar un error en política monetaria, ni tan leve que pueda dañar severamente la recuperación. Los mercados tendrán que tratar de navegar las reacciones de los bancos centrales y sus ajustes en materia de política monetaria según lleguen nuevos datos económicos. Los bancos centrales estarán al frente de los titulares por el resto del año.