Los mercados han reflejado la sorprendente victoria de Takaichi Sanae como primera ministra de Japón, con subidas en las bolsas, un impulso en los rendimientos y un yen a la baja. En concreto, los rendimientos de los bonos JGB han seguido subiendo incluso mientras el Nikkei alcanzaba un récord antes de la victoria de Takaichi, debido al llamado de la oposición a recortes de impuestos y a la especulación sobre subidas de tipos del Banco de Japón (BoJ).
Según los expertos,con la llegada de Takaichi al poder podríamos asistir a más movimientos en los mercados financieros, dada su postura más intervencionista y sus promesas para aumentar el estímulo fiscal. “Sin embargo, un gran gasto público en un país donde la deuda ya representa el 260% del PIB es algo que puede asustar a los mercados de bonos, y es posible que así sea. No obstante, cabe señalar que la mayor parte de la deuda japonesa está en manos de inversores nacionales, lo que significa que es menos vulnerable que, por ejemplo, la deuda del Reino Unido”, advierte Anthony Willis, Senior Economist en Columbia Threadneedle Investments.
A Willis le llama la atención las palabras de Takaichi sobre el BoJ, al cual llamó “estúpido” por subir los tipos de interés. “Con la inflación arraigada en Japón y estancada en torno al 3%, es probable que el Banco de Japón suba los tipos aún más desde lo que actualmente ha sido su máximo en 18 años. Sin embargo, con un 0,5%, siguen siendo relativamente bajos”, comenta sobre la política monetaria del país.
Tras su victoria
Sobre qué esperar ahora, los expertos ven probable que las acciones continúen repuntando mientras el yen japonés se debilita, dado el plan de expansión fiscal y el alivio de la política monetaria propuestos por Takaichi. “La subida de tipos del BoJ en octubre parece descartada por ahora, ya que los swaps ahora reflejan solo un 20% de probabilidad de una subida frente a más del 60% la semana pasada. Sin embargo, la debilidad del yen podría ser limitada debido al estrechamiento de los diferenciales de tipos de interés entre Japón y Estados Unidos. De manera realista, ella aún podría enfrentar desafíos para impulsar sus políticas, dado que el Partido Liberal Democrático (PLD) ya no tiene mayoría en las cámaras alta y baja del Parlamento. En general, la victoria de Takaichi es positiva para las acciones, excepto los bancos, y vemos un entorno más favorable al crecimiento para la renta variable”, apuntan Magdalene Teo y Louis Chua, analistas de Renta Fija y Renta Variable, respectivamente, de Julius Baer en Asia.
En opinión de John Butler, estratega macro de Wellington Management, la nueva presidenta busca que el gobierno dirija la política fiscal y que el BoJ simplemente ejecute. “Japón necesita tipos de interés más elevados: tiene que gestionar un crecimiento nominal del 5%, que está por encima de su tendencia de largo plazo, y el desempleo está en mínimos históricos. El yen se está viendo afectado porque ahora los tipos reales están muy bajos y el gobierno nuevo quiere aplicar una política fiscal expansiva. Pienso que la de Japón es una gran historia inflacionaria y esto es bueno para los activos de riesgo, particularmente para las acciones japonesas. Sin embargo, ahora todo el riesgo está sobre el BoJ: podría subir tipos si el yen se va a 1,5 pero sería una reacción defensiva. Podría subir los tipos en octubre, aunque veo más probable que lo haga en diciembre”, explica.
Los expertos de Julius Baer reconocen que la victoria de Takaichi ha puesto sobre la mesa las políticas propuestas en su campaña, que se componen de tres pilares: la gestión de crisis nacionales y el crecimiento económico, la política fiscal expansiva y su opinión de que el gobierno es responsable de la política monetaria mientras que el Banco de Japón (BoJ) elige de manera autónoma las mejores herramientas. “Con su victoria en el liderazgo, la postura política de Takaichi es ciertamente alcista para las acciones, pero pesa sobre el yen y los bonos, dado el posible retraso en las subidas de tipos”, insisten.