CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Kecko. Midcaps suizas y tecnología disruptiva marcan la diferencia en renta variable
MFS ha anunciado el nombramiento de Anton Commissaris como managing director y responsable de ventas en Suiza y Austria.
Commissaris trabajará en la oficina de Zúrich y reportará directamente a Matthew Weisser, managing director y responsable de Distribución Mayorista de MFS en Europa.
Se une a la firma desde Credit Suisse Asset Management, donde estaba a cargo de la distribución de fondos para bancos, aseguradoras, firmas externas de asset management y family offices de la región de EMEA.
«El nombramiento de Anton refuerza nuestro compromiso de expandir nuestra red de distribución en los mercados de Suiza y Austria. Es un director de ventas altamente experimentado que acumula más de 24 años de experiencia cubriendo el mercado mayorista suizo. Estoy seguro de que su conocimiento profundo no sólo de los bancos mundiales, sino también de los mercados locales será de gran valor a medida para MFS», afirmó Weisser.
Neil Dwane - Allianz GI - Foto cedida. Allianz GI: cerraremos 2016 con un semestre de tipos bajos y volatilidad alta
Una vez superado el shock inicial del Brexit, la mayoría de los mercados de riesgo han estado casi ignorando los resultados del referéndum, opina Neil Dwane. Sin embargo, mirando al futuro, el estratega global de Allianz GI advierte a los inversores de que deben esperar que el Brexit ralentice la economía global, lo que significa que globalmente, las políticas monetarias seguirán en la banda baja o bajarán más. Por el contrario, la volatilidad seguirá alta siguiendo los movimientos de los sentimientos políticos.
Según el experto, serán los valores de gran capitalización británicos los que se beneficien claramente de la caída de la libra esterlina a corto y medio plazo. La renta variable local podría seguir débil, al tiempo que la economía británica se ralentiza y aumenta la incertidumbre, pero muchos de activos del país –propiedades y corporativos- serán más atractivos en terceras monedas.
Por lo que respecta a Europa, “ésta podría ser quien más perdiera pues sus activos son ahora más vulnerables a los riegos políticos”, dice Dwane, quien piensa que los Bancos Centrales sostendrán la renta fija a lo largo de 2017, mientras que la renta variable seguirá débil a causa de la incertidumbre relacionada con el Brexit, especialmente el sector financiero al que hay que sumar los temores sobre la salud del sector bancario.
Los activos estadounidenses y asiáticos se verán menos afectados por el Brexit, según Dwane. Con la Fed tomando una senda diferente a la de los Bancos Centrales europeos, el mercado de renta variable estadounidense debería continuar divergiendo, aunque el experto también espera ver volatilidad adicional al acercarse el mes de noviembre y las elecciones presidenciales.
La mejora de los indicadores económicos en el comienzo del año, el compromiso del Banco Central Europeo de seguir aprobando medidas que sirvan de apoyo a la economía, la subida de las bolsas en el mes de mayo… ¿y ahora? Parece que el Brexit ha cambiado las reglas del juego para los mercados europeos. ¿Es motivo suficiente para dejarse llevar por el pesimismo y perder la confianza en los mercados europeos?
La victoria del Brexit ha provocado una reacción inmediata muy negativa en los mercados por lo inesperado del resultado. En parte, la decepción procedió de la importancia que se dio a las encuestas telefónicas y online sobre la votación, utilizándolas para calibrar las probabilidades de Brexit. Pasado este primer momento de confusión, las reacciones a partir de ahora dependerán más de qué camino siga el proceso para abandonar la UE: a medio plazo, la clave será cómo de amables u hostiles sean las negociaciones, mientras que en el largo plazo el factor crítico es si este acontecimiento servirá como toque de atención a los Estados miembros y los impulsará a buscar una mayor cohesión.
A pesar de este revés, que ha ensombrecido el optimismo después del buen comienzo de año que tuvo la economía del viejo continente, seguimos confiando en la renta variable de la zona euro. Las valoraciones son más atractivas en esta región que en Estados Unidos y el ciclo de ganancias de las compañías de la eurozona está menos maduro que al otro lado del Atlántico, donde los márgenes han alcanzado niveles máximos. En ausencia de condicionantes fiscales y monetarios visibles, seguimos prefiriendo las compañías que presentan un crecimiento estructural sobre aquellas que presentan un crecimiento cíclico. Así, valoramos las compañías capaces de mantener un crecimiento ‘auto-financiado’.
Además, el Banco Central Europeo seguirá sirviendo de apoyo a la economía. Tras la victoria del Brexit, el organismo monetario aseguró que está preparado para inyectar más liquidez si fuera necesario, para apuntalar la confianza de los inversores. De momento, el programa de flexibilización cuantitativa (QE) continuará hasta 2017. En contraste con la determinación de Mario Draghi, la Fed parece haber perdido el sentido de la orientación, manteniendo la incertidumbre en torno a las subidas de tipos de interés que pretende llevar a cabo este año. Durante el último año, la Reserva Federal que preside Janet Yellen se ha vuelto muy sensible a los cambios a corto plazo en los indicadores económicos.
Columna de Guy Lerminiaux, CIO Fundamental Equity y gestor del fondo Petercam Equities Euroland
Foto: Carlesc79, Flickr, Creative Commons. Empresas financieras y gestoras británicas se replantean su estrategia geográfica y comercial: todo dependerá del pasaporte
La nueva primera ministra de Reino Unido, Theresa May, ha dejado bien claro que el Brexit, decidido por los británicos en las urnas en el referéndum del pasado 23 de junio, no tiene marcha atrás. Se abre ahora un largo proceso de negociaciones en el que el país tendrá que establecer los nuevos términos de sus relaciones con la Unión Europea en muchos ámbitos… entre ellos, el de los servicios financieros. Aún es muy pronto para sacar conclusiones pero ya parece claro que el nuevo panorama obligará a las empresas financieras con sede central en Reino Unido, gestoras de activos incluidas, a replantearse su estrategia, tanto geográfica como comercial.
Todo depende de cómo quede ese nuevo régimen de relaciones: de perderse el pasaporte, algunas entidades podrían buscar alternativas a Londres para impulsar su negocio europeo pero, de no perderse, las empresas podrían incluso aprovechar la devaluación de la libra y la caída de los alquileres para ampliar el espacio contratado y trasladar a sus equipos a Londres, dicen los expertos. Los políticos británicos han señalado la importancia de mantener el pasaporte y minimizar los efectos del Brexit en la industria financiera. Y es que, según la CISI (Chartered Institute for Securities and Investments), un millón de puestos de trabajo en el sector financiero británico podrían estar en peligro.
“La cuestión fundamental es el acuerdo al que se llegue con la Unión Europea en lo que respecta al logro o no de un pasaporte comunitario para el sistema financiero británico, tanto para la prestación de servicios como para la comercialización de productos de inversión (entre ellos, los fondos)”, explica Salvador Ruiz Bachs, socio de bancario y financiero de Allen & Overy, que habla hasta de cuatro posibles modelos de relación. Algunos de esos modelos contemplan que el país se quedaría sin pasaporte europeo, mientras otros contemplarían su mantenimiento, de forma que todo seguiría igual.
“Todavía no sabemos resultado final de negociaciones y todo dependerá de las condiciones”, explica el experto, que dibuja las diferentes fórmulas posibles como círculos concéntricos en los que los más alejados suponen una mayor ruptura (un control de fronteras por parte de Reino Unido podría equivaler a una negativa del pasaporte financiero por parte de la Unión Europea, por ejemplo), mientras los más céntricos darían lugar a otras fórmulas más cercanas de relación.
Aunque pocos se aventuran a adivinar el futuro, son muchas las voces que piden, o al menos verían lógico, que la UE aplicara mano dura a la hora de negociar ese pasaporte. “Creo que en esta materia se les debería dar el mismo tratamiento que se les da a las empresas de inversión de EE.UU.: apertura pero no la misma que para las empresas de servicios financieros de países de la UE”, opina Guillermo Santos, fundador de la EAFI iCapital. “Es muy improbable que se logre mantener el pasaporte, dado que la Unión Europea debe asegurar un trato severo con Reino Unido para no facilitar nuevas fugas”, añade Jaume Puig, director general de GVC Gaesco Gestión.
“Habrá que seguir cómo se posicionan finalmente las partes (Reino Unido versus Europa), y si se alcanza un consenso tipo Noruega. Será difícil, pero sea cual sea el desenlace, siempre cabe la posibilidad de que los británicos, sin la armonización o, incluso, sin el consenso de los de la UE, traten de establecer un régimen especial para mantener (o atraer) operadores financieros a la City”, comenta Jesús Mardomingo, socio director del departamento bancario y financiero de Dentons en España.
Para el experto, la pregunta a formular sería: ¿cómo una salida, tanto de la UE como del Espacio Económico Europeo, afectaría a la industria financiera de Reino Unido? ¿Buscaría tener un régimen “equivalente” a la legislación comunitaria en relación al suministro de ciertos servicios, y qué significa esto? “Considerando las diferentes alternativas, en principio, si el Reino Unido abandona el Espacio Económico Europeo ninguno de los “pasaportes” existentes que las empresas británicas tienen podrán seguir siendo operativos. La mayoría de los bancos, aseguradoras y empresas de inversión y gestión de fondos de Reino Unido se apoyan en dichos pasaportes (que pueden ser más de uno) para desarrollar sus actividades con clientes en todas las jurisdicciones dentro de la UE”, explica.
¿Qué pasará si no hay pasaporte?
Entonces, ¿qué pasaría si Reino Unido pierde el pasaporte europeo para la prestación de servicios y la comercialización de productos financieros? Lo que ocurriría, según Allen & Overy, es que las entidades financieras británicas deberían conseguir autorización para prestar servicios financieros en cada país en el que quisieran operar, y deberían acomodarse a los requisitos impuestos por cada mercado concreto de la Unión Europea. Eso, o establecer sociedades en otros mercados que sí puedan acceder al pasaporte europeo.
Y esto mismo puede aplicarse a las gestoras de fondos. En el caso de las gestoras de fondos británicas, las gestoras alternativas quedarían confinadas como entidades domiciliadas fuera de la UE, con productos también de fuera, y tendrían que comercializarlos también siguiendo los requisitos de cada país concreto, al igual que ahora ocurre con las gestoras alternativas de fuera de la UE, mientras no se establezca un régimen de pasaportes que, no obstante, está en fase de estudio.
El caso de las gestoras con productos UCITS, por ejemplo en Luxemburgo, sería diferente, puesto que esta normativa afecta a los fondos, no a la gestora en sí: así, las estructuras UCITS podrían seguir funcionando y comercializándose en Europa, pero a través de una entidad de la Unión Europea. En este caso, la clave para las gestoras británicas sería establecer una gestora paralela en Luxemburgo, Irlanda u otro país europeo que sí tuviera pasaporte, para poder prestar servicios financieros y comercializar sus productos en el espacio económico europeo, explica Ruiz Bachs.
En cualquier caso, el impacto sería para las gestoras británicas, las domiciliadas en Londres y con residencia en el centro financiero, puesto que las gestoras internacionales con presencia en Londres normalmente operan mediante una sucursal, es decir, no cuentan con el pasaporte comunitario.
¿Qué podrían hacer las entidades financieras?
En el caso de quedarse sin pasaporte europeo, y sin acceso al mercado, las gestoras tendrán que tomar decisiones: podrían optar por pedir autorización en todos los países en los que quieren operar, algo que los expertos ven más difícil; o podrían montar sociedades dentro de la Unión Europea.
En el caso de decidirse por la segunda opción, los expertos apuntan a Dublín, por su cercanía con Londres, pero también a Luxemburgo, París o Fráncfort como centros financieros ganadores. Para que Madrid fuera una verdadera alternativa tendría que tener un gancho fiscal mucho más potente… sin olvidar la mayor seguridad jurídica necesaria y una mayor claridad sobre el escenario político. “Es evidente que habrá un traslado de muchas actividades que hoy hacen empresas financieras en la City pero no creo que sea simultáneo y estimo variará por actividades (forex, derivados, etc.). París, Fráncfort y, por supuesto, Luxemburgo se lo repartirán”, comenta Santos.
“Suponiendo que finalmente suceda el Brexit probablemente los efectos para la City sean menores a los pronosticados. Por supuesto a la City le faltaría una pata, unas estructuras con sede en algún país de la Unión Europea, para la realización de sus actividades en la Unión Europea. No faltan candidatos: Fráncfort, París, Dublín,… De todas formas hay que tener en cuenta qué tipo de estructuras son las que se movilizarían desde la City. Probablemente se trataría de personal de back office, compliance, etc, y del mínimo necesario para mantener actividad en la UE. La cuestión más dudosa es que se trasladaran los analistas, gestores, etc, que muy probablemente seguirían en la City, dado que forman un conjunto muy homogéneo no tan fácil de repartir”, dice Puig.
Las entidades también podrían empezar a pensar en crear fondos clones a los británicos con ISIN de Irlanda o Luxemburgo, para su más fácil comercialización en Europa. “Pese a las incertidumbres que rodean a todo el proceso, es previsible que las entidades financieras que prestan servicios desde la City a toda Europa estén agilizando su actividad tanto para conocer el alcance de las negociaciones como para ir desarrollando algún plan de contingencia como pudiera ser la creación de centros de negocio espejo fuera de Reino Unido o, tal y como ya nos han comentado algunas entidades, trabajar, sin prisa, pero sin pausa, en la creación de fondos clones con ISIN irlandés o luxemburgués, por si finalmente no hubiera pasaporte comunitario para los fondos con ISIN británico”, añade Mar Barrero desde la EAFI Profim. La experta insiste, no obstante, en que nos encontramos en un terreno totalmente inexplorado hasta ahora y que de aquí a que se cierre la negociación pueden darse muchos escenarios, “por lo que no nos queda más remedio que esperar a que se vayan concretando para saber los efectos reales en la industria de la gestión de activos”.
¿Y el BoE?
Ante este panorama, los gestores están aún tranquilos. Chris Bowie, socio y gestor de carteras en TwentyFour Asset Management, boutique propiedad de Vontobel AM, valora los cambios hechos en el gobierno de Reino Unido y, a día de hoy, ve atractivo en los bancos británicos, que sobrepondera en su cartera. “Entre las entidades que nos gustan, destacan Nationwide o Barclays. Se trata de compañías con sólidos balances y que disfrutan de altos niveles de credibilidad en el mercado”, explica.
Y es que también se confía en el apoyo del Banco Central británico, a pesar de que en su última reunión decidió no bajar tipos. Pero en agosto podría mover ficha: “El BoE bajará tipos en agosto y es probable que amplíe su QE. Esto es importante para los mercados y éstos son importantes para los políticos, para su credibilidad y popularidad”, dice Santos. “Ha anunciado medidas para apoyar a la economía del Reino Unido, incluyendo una reducción en los requisitos de capital para los bancos. En principio esto podría proporcionar un crédito adicional de unos 150.000 millones de libras a los hogares y negocios de Reino Unido”, añade Barrero.
“El BoE bajará los tipos en su reunión de agosto, cuando tenga también en su poder el informe de inflación trimestral, en el que se incluirán unas previsiones de crecimiento e inflación revisadas para el Reino Unido. Contar con estos datos permitirá al Banco de Inglaterra una mejor comunicación y argumentación de las razones detrás de su decisión”, comenta Anthony Doyle, director de inversiones del área de renta fija minorista en M&G.
“Tanto el Banco de Inglaterra como el Gobierno actuarán de forma coordinada y se reservaran para el momento que sea necesario. El momento especial será cuando “aprieten el botón” del artículo 50. De todas forma, a día de hoy hay incertidumbre, no sólo en el cuándo, sino incluso en si finalmente van a hacerlo. No se sabrá hasta dentro de unos meses”, añade Puig, que ve signos positivos en el tiempo de espera. “Una preocupación para el BoE era la fortaleza del mercado inmobiliario en Londres. Frenarlo se podía haber logrado con una subida de tipos de interés, pero a costa de fortalecer la libra esterlina. El resultado del referéndum está consiguiendo frenar el avance de los precios inmobiliarios y tener a la vez una libra débil. Es un objetivo que no habría podido lograrse ni con política monetaria ni con política fiscal. De todas formas su efecto será temporal”, añade.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Mike Vondran. La recuperación de Brasil será a cámara lenta
En contra de lo esperado a principios de año, la deuda de mercados emergentes está ofreciendo rentabilidades sólidas y el mercado se pregunta si merece la pena tener en cuenta esta clase de activo. Más allá de si la Fed subirá o no los tipos otra vez, en un mundo post-Brexit la cuestión radica en que, frente a los países desarrollados, la deuda de los emergentes sí ofrece rentabilidades positivas.
Richard Turnill, director mundial de Estrategia de Inversión en BlackRock, cree que es hora de volver a este activo y de hecho la firma estima que es una fuente atractiva de ingresos.
Para el gestor de BlackRock, mientras la rentabilidad de los mercados desarrollados ha bajado hasta terrenos negativos, la deuda emergente ha seguido siendo elevada. “Ha ofrecido durante un largo periodo de tiempo ingresos atractivos, pero sus fundamentales débiles la convertían en una apuesta algo arriesgada”, explica.
Sin embargo, dice Turnill, “esta clase de activo está preparada para beneficiarse de la constante búsqueda de rentabilidad por parte de los inversores, debido a que los tres contratiempos clave para este tipo de deuda se han convertido en impulsos para la misma”.
L. Bryan Carter, jefe de deuda de mercados emergentes de BNP Paribas IP, coincide en que después de una reacción negativa inicial al resultado Brexit, la aversión al riesgo disminuyó y la mayoría de los países emergentes han recuperado sus pérdidas.
“Los activos se vieron afectadas inicialmente por el miedo, sin embargo, muchos inversores vieron una oportunidad de reasignar activos a la deuda de los mercados emergentes y la mayoría de los índices ahora se encuentran significativamente más fuerte que antes de la consulta popular”, afirma.
El caso de Brasil
La semana pasada el Banco Central de Brasil decidía dejar los tipos de interés sin cambios en el 14,25%, en línea con las expectativas del mercado. Para los inversores de bonos, sobre todo en el espacio de moneda local, el nombramiento de Ilan Goldfajn, como nuevo gobernador del banco centralha sido beneficioso, dados los efectos positivos de sus duros comentarios sobre el real brasileño, estima Alejandro Hardziej, analista de renta fija de Julius Baer.
“El atractivo de los bonos en moneda local ha disminuido desde luego después de su impresionante rendimiento este año –un 48% de rendimiento total en dólares-, pero aún así los consideran valiosa fuente de rendimiento en un entorno de bajo rendimiento”.
El equipo de The Tang Art Advisory Team ha anunciado la publicación del libro “Art: the New Asset Class» (Arte: la nueva clase de activo), escrito por su COO y asesora senior Annelien Bruins, pensando en coleccionistas de arte y sus asesores.
Durante las últimas décadas, el exponencial incremento de los precios de las obras de arte, unido a la inestabilidad de los mercados financieros han animado a muchos coleccionistas a pensar en el arte como un vehículo e inversión, y en ellos mismos como en «inversores-coleccionista».
Ahora ya, el arte se ha convertido en una clase de activo por derecho propio – dice la autora- si no por su valor como inversión, al menos por su potencial influencia en temas impositivos y por las consecuencias legales derivadas de la tenencia de obras de arte valiosas.
Dadas las dificultades de triunfar en este campo para compradores o vendedores sin experiencia, Bruins clarifica en este libro algunos malentendidos mientras comparte su experiencia como asesor de arte. El libro puede descargarse en Amazon por menos de 3 dólares.
Maria Cure vuelve a Citi como private banker, en Miami - foto LinkedIn. Maria Cure vuelve a Citi como private banker, en Miami
Después de 2 años como VP asesora de inversiones en el equipo de HSBC en Miami, Maria Cure acaba de volver a Citi –también como VP- para ocupar el cargo de private bankeren la región de Chile y Perú, según ha podido confirmar Funds Society con la banquera.
Cure, que cuenta con 15 años de experiencia en la industria local, salió de Citi después de cuatro años en los que fue asesora de inversiones en Citigold Private Client y, previamente, asesora de inversiones y analista para los segmentos affluent y high net worth.
Antes de unirse a Citi, había trabajado más de 7 años en Guggenheim Partners, y casi tres en Freishman Hillard.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Thomas Leuthardc. ¿Cómo evolucionan los mercados de bonos tras el Brexit?
En sus perspectivas para 2016, Investec identificó cinco razones por las que el equipo de la gestora pensaba que los mercados estaban cada vez más respaldados por un enfoque bottom-up a la hora de invertir en renta variable. En su último informe de mercado, la firma repasa esos temas y actualiza algunos puntos de vista:
1.- El riesgo propio de cada acción
A finales de 2015, Investec esperaba que el riesgo especificamente relacionado con la renta variable aumentara. Un informe de Deutsche Bank demostraban entonces que los factores específicos de cada acción representaron el 74% de la rentabilidad global en las bolsas de Japón y del 57% de las acciones de EE.UU. en un periodo de tiempo de 12 meses.
“Ahora nos encontramos con que el riesgo propio de cada acción ha caído en Japón, y representan un 62% de la rentabilidad global del mercado de valores. En EE.UU., sin embargo, la proporción de riesgo de la renta variable que se explica por factores específicos de cada acción se ha mantenido igual. Por lo tanto, creemos que el contexto de hoy respalda menos un enfoque bottom-up enla selección de valores que lo que preveíamos a finales de 2015”, explica Investec.
2.- Correlaciones
En su anterior informe de perspectivas, los expertos de Investec esperaban que las correlaciones entre las acciones cayeran desde unos niveles más altos de lo normal y proporcionaran un mejor entorno para los inversores bottom-up. Aunque las correlaciones por pares han caído en ciertas bolsas, incluida la de EE.UU. esto no ha sido un factor generalizado.
3.- Tipos de interés
En sus previsiones de 2016, Investec citaba un estudio del Center for Research in Security Prices (CRSP) que mostraba que un entorno de caída de los tipos de interés tiende a ser menos propicio para la rentabilidad de los fondos de inversión. En los últimos meses, las expectativas del mercado de una subida de tipos en Estados Unidos se han desvanecido.”Creemos que esto lo convierte en un entorno más exigente para la evolución de la renta variable”, dice la firma.
4.- Flujos de capital pasivos
De acuerdo con las cifras de Bank of America Merrill Lynch, los fondos long only de renta variable han registrado salidas del 2,6% del capital en lo que va de año (hasta el 29 de junio de 2016), mientras que los fondos negociados en bolsa han visto entradas del 0,2%. En última instancia, Investec estima que esto crea una base para las estrategias de inversión bottom-up empleadas por los managers activos para obtener mejores resultados a largo plazo, ya que los enfoques basados en reglas puede crear ineficiencias. Sin embargo, dicen sus gestores, “reconocemos que esto no es positivo para la inversión bottom-up a corto plazo”
5.- Eliminado el ruido macro
“Seguimos creyendo que un enfoque bottom-up puede ayudar a los inversores a eliminar el ruido macro a corto plazo. Vale la pena señalar que las acciones de los mercados emergentes y las relacionadas con las materias primas han hecho subir las bolsas mundiales desde mediados de enero, en un momento en que los datos chinos siguen siento negativos y muchos analistas pronosticaban una recesión en EE.UU. Todavía consideramos que este entorno respalda un enfoque bottom-upa la inversión, a pesar de que los otros cuatro motivos tienen, aunque sea temporalmente, han restado apoyo al stock-picking”, concluye Investec en su análisis.
Pero finalmente, y tras 20 meses de negociaciones, UniCredit ha hecho hoy oficial la ruptura de las negociaciones para integrar su gestora de activos con la de Santander, una operación que hubiera dado como resultado un gigante mundial de la gestión de activos. Según han confirmado ambas entidades, la fusión no saldrá adelante.
El mayor banco italiano aseguró que las conversaciones con Santander y los fondos de private equity Warburg Pincus y General Atlantic para combinar Pioneer Investments con Santander AM se han roto y la firma explorará otras opciones, que incluyen una salida a bolsa de su gestora Pioneer, como parte de sus planes estratégicos para recaudar más capital, hasta 5.000 millones de euros, en una nueva ampliación que refuerce su solvencia. También se plantea vender su participación en el banco polaco Pekao.
“Las partes han estado inmersas en negociaciones con el objetivo de identificar soluciones viables para cumplir todos los requisitos regulatorios para completar la transacción, pero en ausencia de ninguna solución factible en un horizonte razonable de tiempo, han decidido concluir que finalizar las conversaciones es la decisión más apropiada”, aseguraba UniCredit en un comunicado.
La ruptura de la operación también era confirmada desde Santander. En una reunión previa a la presentación de resultados empresariales de analistas con el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, y respondiendo a la pregunta de un analista, el CEO aseguraba que «vamos a cancelar la transacción. Hemos tratado de lograr respuestas de los reguladoras pero no hemos podido hacerlo y finalmente lo hemos cancelado. Vamos a desarrollar Santander AM con nuestros socios y a intentar construir un negocio de gestión de activos que sirva bien los intereses de nuestros clientes», afirmaba.
Nuevo plan de negocio para UniCredit
El CEO de la entidad, Mustier, un francés de 55 años que tomó las riendas de la entidad a principios de mes, está trabajando en un nuevo plan de negocio que presentará en el cuarto trimestre del año, con el objetivo de reducir los costes, impulsar el capital y la rentabilidad herida por una serie de préstamos non-performing y tipos de interés en mínimos. Así lo dijo en declaraciones a la Bolsa este miércoles.
El banco se disponía a obtener cerca de 5.300 millones de euros con la operación de fusión de su gestora con la de Santander, en un acuerdo firmado el pasado 11 de noviembre que implicaba también a los fondos de private equity Warburg Pincus y General Atlantic. En abril del año pasado, Santander informaba de que la sociedad resultante se llamaría «Pioneer Investments» e integraría las gestoras de activos locales de Santander AM y Pioneer, aunque dejando fuera los negocios de esta última en Estados Unidos. Ahora, tras la ruptura del acuerdo, UniCredit buscará capital por otras vías.
El grupo ha colocado a Pioneer en los planes de «revisión estratégica» del grupo y se explorarán alternativas para «garantizar a Pioneer los recursos adecuados para acelerar su crecimiento y continuar desarrollando soluciones y productos ‘best-in-class’ para ofrecer a sus propios clientes y socios», dice el comunicado de UniCredit.
Santander AM tiene presencia en 11 países, cuenta con un patrimonio de 172.500 millones de euros y más de 755 empleados en todo el mundo, mientras que Pionner Investments está en 28 países, con más de 2.000 empleados y gestiona 225.000 millones.
. James Swanson: “La subida de las bolsas estadounidenses se debe a la expectativas, no a los fundamentales”
El nivel de las bolsas de Estados Unidos por lo general está en consonancia con la dirección de los beneficios empresariales y los flujos de caja de las empresas cotizadas. Últimamente, sin embargo, no ha sido el caso.
En este ciclo económico que ya dura casi siete años, la subida de los mercados no se ha visto acompañada de un incremento de los beneficios, tal y como hemos podido ver tras la última temporada de resultados en Estados Unidos.
Para James Swanson, estratega jefe de MFS, este hecho tiene que ver con 3 factores que han dado un giro recientemente. “En los últimos 6 meses hemos visto un debilitamiento en el crecimiento de la generación de cash flow, de los margenes operativos e incluso de los beneficios. ¿Qué es lo que está pasando?”, se pregunta el gestor.
Primero de todo, los costes laborales unitarios están subiendo y hay una corelación directa entre esto y la caída de los margenes operativos. “Las compañías no ganan tanto dinero cuando los costes laborales subiendo más rápido que los ingresos”, explica Swanson en su vídeo semanal.
La segunda es que los gastos de venta, generales y administrativos de la empresa están aumentando también y este es otro factor que lastra los beneficios de una empresa.
La tercera cosa que ha cambiado, y que para el experto de MFS es más alarmante, es que tipicamente en este punto del ciclo, solemos ver una aceleración de los ingresos conforme ls consumidores y la demana final repuntan en todo el mundo. Pero los ingresos se han aplanado en casi todos los sectores del S&P 500.
“No quiero ver un mercado que sube movido por expectativas, confianza o euforia. Y puede que eso sea lo que hemos empezado a ver aquí. Esta semana los estrategas en Wall Street afirmaron que el mercado no puede sostener un PER de 25x. De cara al futuro las previsiones son de un PER de 16x, pero los ingresos y la generación de cash flow tendrá que crecer para justificar esos múltiples”, afirma Swan.
Y es aún más contundente: “No quiero que los inversores que me siguen en este blog, sigan a un mercado que se mueve por esperanza en lugar de por los fundamentales. Voy a estar muy atento a tres factores en los próximos meses: costes, margenes, y las ventajas operativas, además del crecimiento y los beneficios de las multinacionales para justificar dónde vamos con este mercado”.
Mientras tanto, el estratega jefe de MFS, reitera su consejo: mantener la cautela.