CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Nick Harris
. El transporte se vuelve en Asia un punto clave para mejorar el crecimiento
Si pasa algún tiempo en Yakarta –una de las pocas ciudades importantes del mundo que carece de un sistema de transporte rápido– podrá ver los enormes atascos que hay en cada calle. Cualquier día de la semana, hay más de 10 millones de vehículos que transitan lentamente por las carreteras y autopistas de Yakarta, que suponene un porcentaje pequeño de la superficie total de la capital.
Los atascos también afectan a otras partes del sudeste asiático, y puede tener un impacto económico negativo significativo. Por ejemplo, en Filipinas, el Presidente Rodrigo Duterte ha pedido al Congreso poderes de emergencia para hacer frente a la situación del tráfico. Un estudio estima que si el gobierno no interviene rápidamente para remediar los atascos, este fenómeno podría causar pérdidas económicas de más de 100 millones de dólares al día. Desde hace unos cuantos años, se estima que Kuala Lumpur está perdiendo 1.300 millones de dólares diarios en productividad debido al tráfico.
Afortunadamente, hay muchas medidas en marcha para mejorar las infraestructuras y el transporte. Bajo el mandato del presidente indonesio Jokowi, el desarrollo de infraestructuras tanto en la ciudad como en toda la isla se ha acelerado, prestando especial atención a las medidas destinadas a aliviar los problemas de congestión del tráfico de la capital. Un punto clave fue la aprobación de la ley de expropiación de tierras en 2015, y esto junto con el apoyo del alcalde Ahok, sucesor de Jokowi como alcalde de Yakarta, está comenzando a acelerar la actividad.
El gobierno está construyendo varias vías de peaje en toda su capital, y esta impulsando un proyecto de transporte masivo para la ciudad. Aunque el gobierno ha retrasado la fecha operativa prevista para 2019, la obra avanza bien y se espera que haya otra estación de tren más y una línea que conecte el centro de Yakarta al Aeropuerto Internacional (Soekarno-Hatta) terminada dentro de meses. También se están llevando a cabo nuevos esfuerzos en transporte sostenible en partes del sudeste asiático, incluyendo algunas iniciativas sin automóviles y la reciente iniciativa de Bangkok de priorizar la creación de carriles para bicicletas.
Sriyan Pietersz es estratega de inversiones y especialista en países ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático) de Matthews Asia.
CC-BY-SA-2.0, FlickrPhoto: Joao Caram. Too Much, Too Little, Too Late?
Los ciclos económicos normalmente no mueren de viejos. La mayor parte de las veces, una fuerza externa, como los tipos de interés más altos, apagan la expansión. Seguramente la intención de la Reserva Federal de Estados Unidos no es poner fin al ciclo económico, pero a menudo este es el resultado final de tratar de eliminar del sistema riesgos como el excesivo apalancamiento financiero o la inflación desbocada. A veces la Fed tiene un cómplice o dos, como un shock de petróleo o de alguna divisa. Cualquiera que sea la causa, las recesiones no son bienvenidas. Traen consigo crecientes pérdidas de puestos de trabajo, caída de los mercados financieros e incluso quiebras.
El final de un ciclo económico puede ser difícil para los inversores. Por lo general, las carteras de renta variable y deuda high yield se desploman. El descenso medio del índice S&P 500 durante una recesión es del 26%, y durante la crisis financiera mundial, el índice retrocedió casi un 50%. Las recesiones pueden ser particularmente perjudiciales para el común de los inversores, ya que suelen salir de los mercados cuando ya se ha hecho la mayor parte del daño y, a menudo, no vuelven a entrar hasta bien entrada la expansión, cuando abunda la confianza. Los puntos de salida y entrada mal programados significan que el inversor medio no alcanza nada similar a la rentabilidad de los principales índices. Por ejemplo, sólo ahora que los mercados suben un 230% desde sus mínimos de marzo de 2009, es cuando los inversores comunes están de nuevo en el mercado. Esto plantea la pregunta, ¿han llegado demasiado tarde otra vez?
Sanos y a salvo por ahora
Estamos en medio del tercer ciclo económico más largo de la era posterior a la Segunda Guerra Mundial. Por el momento, a pesar de que el ciclo está mostrando signos de desgaste, no hay amenazas evidentes para que continúe su buena forma. Sin embargo, hay que tener cuidado de entrar en el mercado en esta fase tardía, ya que el ratio riesgo/rentabilidad tienden a volverse desfavorable a finales de un ciclo.
Teniendo esto en cuenta, echemos un vistazo a nuestra lista de los elementos característico de un ciclo tardío.
Los inversores deberían tener en cuenta las cada vez más preocupantes señales indicadas en el gráfico. Sin embargo, estas deberían ser vistas como señales de advertencia, no una llamada a retirarse del mercado. También hay algunas señales positivas en marcha. Por ejemplo, la inflación ha llegado tarde a este ciclo, lo que debería permitir a la Fed endurecer su política monetaria mucho más gradualmente de lo que normalmente lo haría. Además, el mercado de trabajo de Estados Unidos sigue mejorando lentamente, lo que sugiere que este ciclo económico se prolongará. Sin embargo, existe el riesgo de que el ciclo sufra un lento desvanecimiento.
Mientras que los ingresos individuales de los estadounidenses están aumentando, los costes de atención de la salud están subiendo más rápido, eliminado parte del poder adquisitivo, lo que está afectando al sector de consumo como restaurantes y minoristas. El gasto empresarial de Estados Unidos sigue siendo muy débil, y las condiciones crediticias ya se están endureciendo para ciertos prestatarios. Varios sectores del mercado están experimentando una erosión de los beneficios, lo que contrasta con los primeros seis años de este ciclo económico, cuando los márgenes y los beneficios aumentaron al mismo tiempo. La productividad de los trabajadores estadounidenses está disminuyendo, al igual que los costes unitarios de mano de obra.
Un ciclo que dura 8 años
Aunque todavía no estamos en el territorio de burbuja, advertiría a los inversores que los mercados estadounidenses y europeos están históricamente caros, tanto en términos de precio-beneficio como de precio-venta. Por ejemplo, el índice Russell 2000® tiene ahora un PER de 27. Sin embargo, no preveo un final rápido o violento a este ciclo, como vimos en el 2008. Pero me preocupa que los recién llegados al ciclo tardío de las acciones o la deuda high yield están haciendo un acto de fe en un momento en que hay menos espacio para una subida de los mercados y de que los crecientes riesgos retrocedan. Yo preveo que este ciclo llegará a su fin, pero no tan repentina o brutalmente como en episodios anteriores.
Esta larga expansión, en su octavo año ahora, debilitada por los vacilantes beneficios, se está volviendo más vulnerable debido al lento aumento de los tipos de interés, al lento gasto de los consumidores, a la reducción de los márgenes de beneficios y al rebote de los costes energéticos. Atrás han quedado sus días juveniles de fortaleza de medio ciclo.
A raíz de las elecciones de Estados Unidos, el inversor minorista ha vuelto a la vida. Pero la historia nos dice que los cambios en los regímenes políticos tienen impactos relativamente modestos sobre la economía real, que sólo obedece a las leyes de la oferta y la demanda. Las señales enviadas por la economía real son mucho más serias que las señales enviadas por un mercado eufórico. En mi opinión, las probabilidades de una reaceleración del crecimiento económico son mínimas en esta última etapa del ciclo. Eliminar lentamente del riesgo es una manera de manejar el ambiente de éxtasis de hoy, tal vez aligerando los activos históricamente caros y cambiando con el tiempo a bonos corporativos de alta calidad o a vehículos de renta fija a más corto plazo.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: ahundt. Nueva York es la ciudad más atractiva de Estados Unidos para los turistas chinos
El turismo chino en Estados Unidos creció un 14,7% en los tres primeros meses de 2016 y según el informe recientemente realizado por la consultora RTG y publicado por Jing Daily, Nueva York es el destino «más relevante» para los turistas chinos, que acuden atraídos por sus opciones de diversión y razones prácticas.
Tras Nueva York, aparecen Maui, Los Ángeles, Las Vegas y San Francisco, ocupando -en ese orden- hasta la quinta posición, y Seattle, Washington, DC, Chicago, Boston y Miami, que completan el Top 10.
Para realizar el informe “City Relevance”, la consultora entrevistó a 1.000 viajeros chinos de clase media y alta sobre sus destinos favoritos en Estados Unidos analizando 10 atributos considerados clave, como restauración, compras, entretenimiento y cultura, y se utilizaron para determinar la importancia de cada destino para los turistas chinos.
Con su amplia oferta de museos, boutiques, restaurantes y lugares emblemáticos, Nueva York encabeza la lista destacando en las categorías que valoran infraestructura e instalaciones, alimentos y bebidas, alojamiento y servicio, cultura, arte y patrimonio, compras y atracciones y monumentos.
Mientras que un viaje para visitar el Metropolitan Museum of Art o recorrer la Quinta Avenida disfrutando de una tarde de shopping son enormemente atractivos para los turistas chinos, sus principales preocupaciones en lo relativo a los viajes son algo más prácticas: entre los atributos considerados los más atractivos de la ciudad, sus infraestructuras fueron el más mencionado, con hasta el 86% de los encuestados mencionándolo, seguido de cerca por la gastronomía y el alojamiento, que en ambos casos fueron mencionados por el 85% de los encuestados. En contraste con la gran cantidad de atributos de Nueva York que resultan atractivos para los viajeros chinos, las demás ciudades solo destacan en uno o dos de los atributos clave.
Así, el mayor atractivo de la ciudad de Los Ángeles -que aparece en tercera posición- fueron las compras, mientras que Las Vegas es considerada mejor ciudad para el ocio. Incluso Maui alcanzó su segunda plaza destacando solo en dos categorías: paisaje natural (que estaba muy lejos en la lista de Nueva York), y relación calidad-precio.
«Cuando los viajeros planean un viaje futuro, el proceso de selección del destino tiene muchas similitudes con el proceso de selección y compra de una marca de consumo», decía Angelito Tan Jr, CEO de RTG Consulting Group, en relación a las conclusiones de la encuesta.
Pixabay CC0 Public DomainPhoto: Zephylwer0. Allfunds Bank Starts its Asian Expansion
Allfunds Bank sigue inmerso en una estrategia de expansión internacional. Según ha comunicado hoy, la entidad se encuentra en proceso de lanzamiento de un centro operacional en Singapur con el objetivo de dar servicio a los negocios locales así como a aquellos de Hong Kong y Taiwán. Y con la idea de llegar a alcanzar más centros de negocio en el continente con el tiempo.
La plataforma institucional de fondos ya había asignado a David Pérez de Albéniz la tarea de investigar el mercado asiático en el año 2014, momento desde el que la firma ha estado estableciendo su infraestructura de negocio en la región. Hoy, ha anunciado que la plataforma de Singapur empezará a operar a principios del año próximo, pues ya ha conseguido construir una potente infraestructura local, así como pedido todas las autorizaciones pertinentes.
Según el comunicado, el consejero delegado de Allfunds Bank, Juan Alcaraz, se muestra confiado de que ha llegado el momento de proseguir con la expansión internacional. Según el experto, numerosos distribuidores de la industria de wealth management buscan mejorar su eficiencia operativa, externalizando áreas como los servicios de gestión y de análisis de datos y de fondos. Además, la expansión a Asia proporciona a los socios gestores de la plataforma una mejora con respecto al potencial de distribución de sus fondos.
“Hemos identificado las principales diferencias entre los distintos países y territorios de Asia -como en Europa, son diferentes y con diferentes requisitos-. Después de profundizar en las necesidades de la industria de fondos de la región, quedó claro que nuestro modelo de arquitectura abierta encajaría en la mayoría de los mercados asiáticos, así que no vemos ninguna razón para limitar nuestras ambiciones en el área”, comenta Alcaraz. “Asia contribuirá en gran medida a la definición futura de la industria mundial de gestión de activos debido a su importancia económica y demográfica, así como a su acelerado ritmo de digitalización. China contribuirá significativamente, y lo hará en el futuro, a estas tendencias debido a su relevancia y magnitud en la economía global. Queremos ser globales y entrar en los mercados asiáticos es un paso natural para nosotros«, añade.
Los distribuidores asiáticos se interesan cada vez más por Allfunds Bank por tres motivos, dice Pérez de Albéniz: en primer lugar, “debido a la experiencia adquirida al estar en el centro de la industria de fondos con un modelo de arquitectura abierta sin conflictos”. En segundo lugar, porque la propuesta de la entidad comprende una amplia gama de procesamiento de fondos, provisión de información y análisis de fondos. Y por último, dice Pérez de Albéniz, porque todo se ofrece a través de un proveedor de alta calidad a un precio competitivo. «Los bancos, las compañías de seguros, las gestoras de activos y los wealth managers en Asia están estudiando muy detenidamente sus negocios”, y tratan de mejorar su eficiencia.
Creada en 2000 y en manos a partes iguales de los grupos Santander e Intesa Sanpaolo, Allfunds cuenta en la actualidad con 249.000 millones de euros en activos bajo administración y ofrece unos 50.000 fondos de 550 gestoras. Tiene presencia local en Italia, España, Reino Unido, Suiza, Chile, Colombia, EAU, Luxemburgo y, ahora, Singapur y cuenta con clientes institucionales y firmas especializadas de 38 países.
Foto: jbachman01, Flickr, Creative Commons. BNY Mellon IM lanza un fondo que invierte en acciones de compañías líderes globales gestionado por Walter Scott & Partners
BNY Mellon Investment Management, la gestora multiboutique más grande del mundo con 1,52 billones de euros en activos bajo gestión, ha hecho público el lanzamiento del BNY Mellon Global Leaders Fund.
Gestionado por la firma especializada en renta variable global Walter Scott & Partners Limited (parte de BNY Mellon), este fondo concentrado de renta variable global persigue generar crecimiento del capital mediante un enfoque de inversión bottom-up fundamental.
El BNY Mellon Global Leaders Fund se centrará en empresas internacionales con modelos de negocio dominantes, fuerte potencial de crecimiento y una robusta generación de caja. Este fondo concentrado de alta convicción invertirá típicamente en 25 o 30 de las multinacionales más innovadoras e influyentes del mundo, con un sesgo hacia las empresas de mayor capitalización, con el fin de garantizar la liquidez.
Con más de treinta años de experiencia en gestión de renta variable global, Walter Scott cuenta con un equipo de diecinueve profesionales de la inversión que se encargan de analizar y seleccionar valores.
“Walter Scott es conocida por su riguroso proceso de inversión en renta variable global y destaca por su track record. En un entorno que previsiblemente se tornará más difícil, los expertos de Walter Scott creen que los mercados serán más selectivos y que la calidad se verá recompensada”, señala Sasha Evers, director general de BNY Mellon IM en Iberia. “Nos complace ofrecer a los inversores una estrategia concentrada y orientada a resultados que no está referenciada a ningún índice y que se propone explotar el potencial y la estabilidad de las empresas internacionales más grandes y mejor gestionadas”.
El fondo está registrado en todos los países europeos en los que BNY Mellon Global Funds, plc (MGF) tiene presencia, incluidos Dinamarca, Francia, Alemania, Italia, Suiza, Países Bajos y España.
La inversión mínima en el fondo es de 5.000 euros, dólares o libras, según la clase de participación.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Kreg Steppe. La industria de los fondos UCITS alternativos crecerá entre un 20% y un 30% en los próximos dos o tres años
Desde las elecciones, la rentabilidad de los bonos a 10 años del Tesoro estadounidense ha aumentado más de 100 puntos básicos desde el mínimo de 2016, y hemos visto el movimiento más violento en los bonos desde el ‘Taper Tantrum’ de 2013. El índice MOVE, que mide la volatilidad de los bonos, ha vuelto al extremo superior de su reciente rango. Con estos datos en la mano, para Eaton Vance es evidente que la volatilidad está volviendo a los mercados de renta fija.
“Pero con las expectativas de inflación subiendo y un creciente foco en las futuras políticas fiscales y la reforma tributaria, está claro que los inversionistas de bonos deben estar preparados para mucha más volatilidad”, explica Kathleen C. Gaffney, co-directora de renta fija diversificada de la firma con sede en Boston.
A los mercados, por supuesto, no les gusta la incertidumbre. Así que mientras el presidente electo Donald Trump y su nueva administración empiezan a poner en marcha los cambios que el electorado estadounidense quería, apunta Gaffney, en realidad este cambio es poco ortodoxo y hace que sea difícil determinar las primas de riesgo, sobre todo porque la expansión cuantitativa y las consecuencias que éste ha tenido para los rendimientos han socavado casi todo el valor del mercado. Todavía no conocemos los detalles de ningún programa político.
Pero este fenómeno no está ocurriendo solo en Estados Unidos. Es realmente un cambio global, tal y como demuestra por ejemplo el resultado del referéndum de Italia. La falta de crecimiento ha llevado a un aumento del populismo en todo el mundo, y estas dos tendencias van a perdurar en los mercados desarrollados.
Entonces, ¿cómo pueden los inversores prepararse ahora para una mayor volatilidad?, se pregunta la gestora. «El sentido común haría que los inversores movieran su dinero a sectores y valores que históricamente mostraron una baja volatilidad, como la deuda de Estados Unidos y los bonos corporativos de alta calidad. Desde la victoria de Trump (una tiempo corto, por cierto), este tipo de activos han caído casi un 3%. Ocultarse en las clases de activos de renta fija tradicionalmente «seguras» o «de baja volatilidad» ha provocado dolor en los portafolios», recuerda la gestora en el blog de Eaton Vance.
“En Eaton Vance hemos estado esperando y estamos posicionados para una transición desde la política monetaria hacia la política fiscal. Creo que se requiere un enfoque flexible, que pueda evitar áreas potencialmente volátiles de los mercados de bonos. Eso significa permanecer diversificado y selectivo a medida que surgen oportunidades de valor”, afirma Gaffney.
“Creo que nos dirigimos hacia un ambiente de mayor crecimiento de la inflación. Pero la incertidumbre debida a un entorno político cambiante continuará fomentando la volatilidad. Los inversores harían bien en usar esta volatilidad a su favor, manteniendo un foco en el largo plazo y siendo pacientes, mientras esperan que lleguen las oportunidades. Creo que nunca ha habido un mejor momento para centrarse en estrategias activas en renta fija”, concluye.
Foto Johnhain. Los índices bursátiles latinoamericanos sufrieron fuertes pérdidas en noviembre impactados por las elecciones en EE.UU.
La incertidumbre del mercado impulsada por el resultado de la elección presidencial en EE.UU. y los impactos desfavorables en las divisas debido a un dólar más fuerte, causó caídas significativas en los índices bursátiles latinoamericanos durante el mes de noviembre.
Según el S&P Dow Jones Indices Latin America Index Dashboard, el S&P Latin America BMI cayó un 10,4% mientras que el S&P MILA Pacific Alliance Select declinó el 8,2% durante el mes. Individualmente, México fue el país que registró la mayor pérdida, declinando un 13%, mientras que, Perú fue el único mercado de la región que registró un alza modesta. Con la excepción del sector de commodities, que subió un 4,2%, todos los otros sectores terminaron el mes en rojo.
En general, los índices bursátiles globales también exhibieron un bajo desempeño, especialmente ante las fuertes tendencias de alza del dólar. El S&P Developed Ex-U.S. BMI declinó en un 1,8% mientras que el S&P Emerging BMI bajó del 4,7%. En contraste, los índices bursátiles de EE.UU. cerraron noviembre con resultados positivos. El S&P 500 ganó 3,7% mientras que el incremento del DJIA fue más significativo, subiendo un 5,9%.
Los commodities también tuvieron un mes positivo con el S&P GSCI y el Dow Jones Commodity Index subiendo un 2,5% y un 2,3%, respectivamente. El declive de metales preciosos en comparación a la ganancia del 10,4% del S&P GSCI Industrial Metals Total Return, fue el mayor rendimiento de los metales industriales en comparación al desempeño de los metales preciosos en más de 26 años, desde marzo del 1990.
Puede descargar el dashboard en el archivo adjunto.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: Hans. Mediano versus largo plazo: ¿a qué fondos les fue mejor?
La tasa de interés del indicador mexicano de largo plazo de referencia, el bono gubernamental de 10 años (M10) subió 23 puntos básicos en un año al 31 de octubre de 2016. La tasa se había incrementado 54 puntos básicos vertiginosamente entre el 19 de octubre y el 12 de noviembre de 2015, del 5,86% al 6,41%; a partir de ahí, oscilaría entre un 6,31% y un 5,79% hasta agosto de 2016, cuando parecía consolidarse por fin a la baja.
El sesgo positivo de la curva culminó el pasado septiembre, cuando el rebote de 38 puntos básicos, seguido por otro de 14 puntos básicos en octubre, fue el preámbulo del alza vertical de 120 puntos básicos que se vería en noviembre. Poco antes de esta última aceleración alcista podría haberse anticipado que el comportamiento anual de los fondos de mediano y largo plazos, a octubre de 2016, habría sido negativo. ¿Cómo resultó el desempeño de estos fondos en ese entorno?
Impacto de vaivenes y reducción de diferenciales
Para evaluar su desempeño, Fitch Ratings consideró que 116 fondos de deuda mexicanos podrían ser catalogados de mediano y largos plazos con base en su duración, fueran de tasa nominal o real, sin tomar en cuenta los que solo tienen capital fijo. Los de duración de entre 1 y 3 años fueron 74 fondos; los de 3 a 5 años de duración, 29 fondos; los de más de 5 años de duración, 13 fondos.
Al corte de octubre de 2016, en tanto que el desempeño del indicador genérico M10 fue del −4,55%, el total de los fondos observados produjo el rendimiento promedio simple del 3,18%. Al separar por grupos de duración, se observa que el de 5 años o más generó un rendimiento promedio simple del 7,89%; el de 3 a 5 años, del 3,90%, y el de 1 a 3 años, del 1,61%.
Los fondos de largo plazo en ese primer corte fueron los más productivos en vista de que la evolución de las tasas de más largo plazo, de 20 y 30 años (M20 y M30), tuvo un marcado rumbo bajista a pesar de los vaivenes: el M20 subió apenas 5 puntos básicos, en tanto que el M30 bajó 8 puntos básicos. El diferencial o spread entre el M30 y el M10 se redujo en un año de 83 puntos básicos a 51 puntos básicos; al cierre de noviembre de 2016, a pesar del alza inusitada, el diferencial se había reducido aún más, a 35 puntos básicos.
Cierto: en los 12 meses terminados en noviembre, la rentabilidad de los fondos de mayor plazo disminuyó a la mitad de lo generado al corte de octubre; en cambio, la de los de duración 1 a 3 años mantuvo el porcentaje de rendimiento. Esto quiere decir que, hasta octubre, los fondos de plazos más largos resintieron menos la volatilidad general y los aumentos de hasta 175 puntos básicos que el banco central hizo a la tasa objetivo aunque, a noviembre, resultaron más dañados con la agudización de la volatilidad y un aumento adicional de 50 puntos básicos a la tasa objetivo.
Fitch considera positivo que haya al menos 42 alternativas de mediano y largo plazo (más de 3 años de duración) en un mercado en el que los fondos de corto plazo son preponderantes. Asimismo, estima que es importante observar su desempeño con regularidad, para evaluar también su consistencia ante las condiciones cambiantes del mercado.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Federal Reserve
. Nuevas exigencias de capital para operaciones estadounidenses de entidades extranjeras
La Reserva Federal aprobó el jueves pasado una regla que obligará a las instituciones financieras que operan en el país, sean estas nacionales o extranjeras, a cumplir con un nuevo requisito de deuda a largo plazo y otro de «capacidad total de absorción de pérdidas» o TLAC, por sus siglas en inglés. La regla será de aplicación para las firmas nacionales identificadas por el regulador como bancos globales de importancia sistémica –en inglés, global systemically important banks o GSIBs, según sus siglas- y a las operaciones en Estados Unidos de los GSIB extranjeros.
Para reducir el impacto sistémico del fracaso de un GSIB, un proceso de quiebra o resolución ordenada legal, la norma impone las pérdidas del GSIB fallido a los inversores en lugar de a los contribuyentes, mientras las operaciones críticas de la empresa siguen funcionando. El requerimiento a un GSIB de mantener cantidades suficientes de deuda a largo plazo, que puede convertirse en capital en caso de resolución, ayudaría a lograr ese objetivo al proporcionar una fuente de capital privado que soportaría las operaciones críticas de la empresa durante su resolución.
«La regla se basa en el sentido común: los accionistas e inversores en la deuda de un banco deben arriesgar su propio dinero para que los depositantes y contribuyentes estén bien protegidos y los bancos más grandes deben soportar los costes asociados a su tamaño», declara Janet L. Yellen en la nota de la Fed.
Al igual que la propuesta emitida en octubre de 2015, la regla final establecerá un nivel mínimo de deuda a largo plazo para los GSIB domésticos y operaciones en Estados Unidos de GSIBs extranjeros, que podría utilizarse para recapitalizar las operaciones críticas de las empresas en caso de fracaso.
El requisito complementario de TLAC establecerá un nuevo nivel mínimo de capacidad total de absorción de pérdidas, a satisfacer con capital regulatorio y deuda a largo plazo. Estos requisitos mejorarán las perspectivas de resolución ordenada de GSIBs fallidos y reforzarán la resistencia de todos los GSIB.
En respuesta a los comentarios recibidos, la Reserva Federal realizó varios cambios sobre la propuesta, entre los que destacamos que mientras a las operaciones estadounidenses de empresas extranjeras generalmente se les requerirá la emisión de deuda a largo plazo a su matriz extranjera, las operaciones en Estados Unidos de ciertas firmas extranjeras podrán emitir deuda a largo plazo a terceros, y no sólo a sus compañías matrices; y que los requerimientos de deuda a largo plazo para las empresas extranjeras se han reducido ligeramente para ser consistentes con el tratamiento que reciben las empresas nacionales.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: skeeze. Natixis: Los managed futures ya suponen un tercio de las asignaciones a alternativos en Estados Unidos
Los investment advisors continúan diversificando sus carteras y aumentando las asignaciones a estrategias con menor correlación con las clases de activos tradicionales, al preparar los activos de sus clientes para condiciones potencialmente volátiles en un futuro, según el último informe trimestral Natixis Portfolio Clarity U.S. Trends Report, recientemente publicado por Natixis Global Asset Management.
La revisión trimestral de las carteras modelo de la gestora para un perfil de riesgo moderado muestra asignaciones a estrategias de inversión más diversas, incluyendo el mayor uso de estrategias con menor correlación con los benchmarks de la industria y un giro hacia inversiones alternativas que priorizan la falta de riesgo sobre la mejora del retorno. Al aumentar las asignaciones a activos menos correlacionados, el beneficio de diversificación para las carteras -que mide el porcentaje de riesgo diversificado por correlaciones más bajas- aumentó a un promedio de 19,2% en el tercer trimestre.
Otra tendencia de diversificación vista en el trimestre ha sido que el uso de estrategias beta estratégicas, índices basados en factores distintos a la capitalización bursátil, se ha duplicado desde 2013, con hasta el 52% de los asesores utilizándolos en sus carteras de riesgo moderado. Al final del tercer trimestre, la cartera promedio tenía un 9,8% de sus activos en estrategias beta estratégicas, representando el 45% de las asignaciones pasivas de cartera en el tercer trimestre, en la búsqueda de los asesores de fuentes diferenciadas de beneficios de los productos impulsados por factores.
Además, los managed futures fueron la estrategia de inversión alternativa más popular, y representaron más de un tercio de las asignaciones a alternativas, mientras las estrategias option-writing también aumentaron y la exposición a multi alternativas y estrategias de renta variable long/short declinaron, mostrando una tendencia hacia alternativas para beneficiarse de la reducción del riesgo.
Las carteras con un 10% o más asignado a alternativas continuaron ofreciendo mejores retornos ajustados al riesgo la mayor parte del tiempo que aquellas sin alternativas. «Los asesores financieros e instituciones tienen hoy en día una amplia gama de opciones que les ayudan a aumentar la diversificación, y es importante aprovechar estas herramientas para adaptar la cartera de cada inversor a sus objetivos y tolerancia al riesgo individuales «, declara John Hailer, CEO de Natixis Global Asset Management para Américas y Asia y director de Distribución Global.