El mercado de renta fija se encuentra en un contexto caracterizado por la volatilidad derivada de las decisiones de los bancos centrales, las recientes elecciones en Estados Unidos y las tensiones geopolíticas. En este entorno de mercado, persisten oportunidades interesantes para la gestión activa y la selección de emisores.
Los fundamentales de las empresas se encuentran en niveles sólidos y, en muchos casos, muestran signos de estabilización o mejora. Actualmente, las valoraciones de los diferenciales a largo plazo se sitúan en torno al percentil 30.
Desde nuestra perspectiva, en el escenario actual el vencimiento fijo se presenta como una solución que combina previsibilidad y rentabilidad. Las estrategias de renta fija con vencimiento fijo permiten a los inversores obtener rendimientos atractivos, beneficiándose además de un entorno de tipos de interés en descenso.
La diversificación también juega un papel clave, ya que permite mitigar riesgos y aprovechar las oportunidades ofrecidas por emisores que priorizan el impacto social y medioambiental. Esta tendencia destaca la importancia de un enfoque metódico en la selección de activos para lograr resultados consistentes incluso en tiempos turbulentos.
La apuesta de DPAM 2028: vencimiento fijo e impacto
En este 2024, DPAM ha lanzado el fondo DPAM L Bonds EUR Impact Corporate 2028, una propuesta de gestión activa que ofrece en primer término rentabilidad previsible por el hecho de invertir con una estrategia de vencimiento fijo. Asimismo, una oportunidad de mercado, asegurando una rentabilidad atractiva hasta el vencimiento, frente al contexto actual de los bancos centrales de recortes de los tipos de interés. Finalmente, diversificación: una cartera diversificada de emisores con impacto social y/o medioambiental.
Esta estrategia se centra en bonos corporativos denominados en euros con vencimiento el 29 de diciembre de 2028, apostando por emisores que cumplen con un marco de impacto propio. DPAM ha adoptado la definición de impacto de la Global Impact Investing Network (GIIN) y realiza inversiones con la intención de generar un impacto social y medioambiental positivo y medible junto con un rendimiento financiero. Para más información sobre los aspectos sostenibles de esta estrategia puede visitar este enlace.
La cartera está compuesta principalmente por bonos de grado de inversión, con un máximo del 10% en bonos de alto rendimiento. Además, se establecen límites estrictos, como un máximo del 30% en bonos emitidos por entidades financieras (bancos y aseguradoras) y un máximo del 60% en bonos con calificación BBB y del 10% máximo en high yield.
Los riesgos asociados a esta estrategia son riesgo de capital, riesgo de concentración, riesgo de crédito, riesgo de inflación, riesgo de liquidez, riesgo de mercado y riesgo de derivados.
Áreas de inversión prioritarias
La cartera destina más del 75% de sus inversiones a temas relacionados con Energía Sostenible y Ciudades/Vida Sostenible. Estas áreas abarcan subtemas como ciudades sostenibles, edificios ecológicos, viviendas sociales, acceso a la energía y energía limpia. Al concentrarse en bonos senior, la estrategia refuerza su carácter defensivo, ofreciendo seguridad y confianza a los bonistas frente a la volatilidad del mercado.
Un enfoque diferenciado y con propósito
DPAM aporta su amplia experiencia en estrategias de vencimiento fijo, siendo la séptima cartera de este tipo, combinándola con un enfoque innovador de impacto. Esta propuesta se posiciona más allá de los estándares tradicionales del artículo 9 del SFDR, con el objetivo de generar beneficios sociales y ambientales medibles en lugar de simplemente alinearse con los objetivos ASG más amplos y difíciles de medir.
En el actual entorno de volatilidad global, la estrategia de DPAM, con una duración limitada y vencimiento el 29 de diciembre de 2028, busca rendimientos atractivos a través de bonos infravalorados y una sólida diversificación, combinando sostenibilidad y propósito.
Tribuna de Anahí Machado, gestora de renta fija de DPAM.
La mayor parte de los bancos centrales han iniciado ciclos de recortes de los tipos de interés en un momento en el que las tasas de inflación parecen moderarse en dirección al objetivo. Para los inversores, eso significa que los rendimientos a corto plazo están descendiendo y que el mero hecho de tener liquidez en cartera tiene pocas probabilidades de generar las rentas de los últimos dos o tres años. Los inversores deben ahora adoptar un enfoque más proactivo a la hora de invertir en busca de rentas. Destacamos tres estrategias que abarcan las diferentes clases de activos y que podrían constituir soluciones atractivas para obtener rentas en este ciclo de recortes de los tipos de interés.
La liquidez podría dejar de reinar
Finalmente, ha comenzado. La Fed puso en marcha su ciclo de relajación monetaria en septiembre con una fuerte rebaja de 50 puntos básicos de su tipo objetivo. Los mercados esperan otros 125 puntos básicos de recortes de tipos hasta mediados de 2025, lo que significa que los tipos de interés de Estados Unidos pronto estarán más bajos de lo que han estado durante buena parte de los últimos dos años. Los inversores apenas han tenido tiempo de acostumbrarse a unos niveles aceptables de rentas en los activos más seguros después de los años de vacas flacas tras las crisis financiera de los tipos cercanos al cero y la “búsqueda de rendimientos”. Ahora deben prepararse para las nuevas condiciones.
En los años posteriores a la crisis financiera, los inversores se vieron empujados hacia los activos de mayor riesgo para poder conseguir algún tipo de rentas, pero desde el ciclo de subidas de tipos que se puso en marcha para sofocar la inflación derivada de la pandemia, los rendimientos más elevados hicieron que los inversores que buscan rentas hayan tenido mucho donde elegir.
Antes de los recientes recortes de tipos de los bancos centrales, los inversores podían obtener rentabilidades atractivas incluso con la liquidez. Por ejemplo, la rentabilidad de las letras del Tesoro de Estados Unidos a seis meses rondaba el 5,4% hace siete meses. Sin embargo, estos niveles están cambiando rápidamente. Actualmente, el rendimiento del mismo instrumento es, con un 4,5%, casi 100 puntos básicos más bajo. En 2021, para generar un rendimiento del 5,4% los inversores habrían tenido que bucear por el espectro de calidad crediticia hasta los bonos high yield estadounidenses. A la vista del ritmo previsto de recortes de tipos de la Fed, los rendimientos probablemente desciendan con rapidez durante los próximos meses, lo que plantea riesgos de reinversión.
Los rendimientos de los bonos de EE.UU. han descendido considerablemente en los distintos vencimientos
Ante la caída de los tipos de interés, el panorama de las rentas está cambiando. Recurrir a la liquidez tiene pocas probabilidades de ser una estrategia ganadora durante los próximos años. Afortunadamente, existen muchas soluciones alternativas para obtener rentas. Presentamos tres ideas de inversión orientadas a la obtención de rentas en diferentes clases de activos ahora que los bancos centrales han arrancado ciclos de recortes de los tipos de interés.
1.- FF Global Income: flexibilidad y agilidad
Una estrategia de renta fija flexible y ágil podría ser una buena solución para los inversores que buscan alternativas a la liquidez con el fin de obtener rentas. Aunque estamos haciendo la transición hacia los ciclos de recortes de tipos, los bancos centrales están moviéndose a velocidades diferentes y existen divergencias entre los mercados en lo que respecta a las condiciones fiscales, fundamentales, técnicas y de política monetaria. Eso significa que las clases de activos y las regiones están respondiendo de forma diferente, lo que crea riesgos y oportunidades para que los precios sufran desajustes. Una estrategia de renta fija con la flexibilidad necesaria para aprovechar estas dinámicas podría tener sentido en un mercado en estado de cambio.
El FF Global Income es una estrategia de renta fija sin restricciones que puede invertir en una amplia gama de activos, desde duraciones cortas hasta largas, desde bonos investment grade hasta high yield, desde los mercados desarrollados hasta los emergentes, desde los híbridos hasta los derivados, desde los activos titulizados hasta la deuda subordinada, y más. Este enfoque permite a esta estrategia ser muy activa en su búsqueda de oportunidades en los mercados mundiales de deuda corporativa.
Por ejemplo, a pesar de unos tipos de interés relativamente altos, la economía estadounidense está emitiendo señales de fortaleza. A consecuencia de ello, el mercado de deuda corporativa estadounidense está cotizando con diferenciales en mínimos históricos en todo el espectro de calidades crediticias, lo que ofrece a los inversores rendimientos menos atrayentes. A la vista del contexto fundamental favorable, los inversores podrían querer seguir exponiéndose a este país.
Una estrategia flexible podría mirar más allá del mercado tradicional de deuda corporativa y apostar por los activos titulizados estadounidenses. Por ejemplo, los bonos de titulización de préstamos (CLO) ofrecen exposición a las empresas estadounidenses y, al mismo tiempo, presentan diferenciales más atractivos; el diferencial de un CLO estadounidense con calificación AAA ronda actualmente los 133 puntos básicos, es decir, más de 100 puntos básicos por encima de los bonos corporativos con calificación similar. Para los inversores que buscan rentas, eso puede marcar una diferencia significativa en los rendimientos de una cartera.
Los CLOs ofrecen rendimientos más elevados en todo el espectro de calificaciones
También existen ejemplos de disparidades regionales en los mercados de bonos corporativos. Los percentiles de diferenciales históricos muestran que los diferenciales de los bonos investment grade europeos son más atractivos que los estadounidenses. Desde 2010, los bonos IG en euros se mueven en el percentil 25, mientras que sus homólogos estadounidenses están en el cero. La búsqueda de rendimientos dentro de la estructura de capital también puede descubrir oportunidades.
Tras las tensiones y la posterior venta del banco europeo Credit Suisse el año pasado, los bonos subordinados “Additional Tier 1” (AT1) siguen presentando una prima atractiva -especialmente los emitidos por los bancos con calificaciones elevadas- y sus perspectivas técnicas son buenas. Tácticamente, incorporar exposición a derivados usando índices de CDS para ponernos largos en riesgo eleva las rentas, sobre todo después de los picos de volatilidad que provocan ampliaciones de los diferenciales, como el que vivimos en agosto.
La gama y el atractivo relativo de los diferentes títulos y clases de activos en el mundo de la renta fija brindan un mercado amplio y fluido para que aprovechen los desajustes en los precios los inversores que puedan ser flexibles y ágiles.
2.- FF Sustainable Global Dividend Plus / FIF Global Enhanced Income: rendimientos adicionales con carácter defensivo
Los inversores en busca de rentas más elevadas en un mundo en el que resulta más difícil encontrar rendimientos de bajo riesgo pueden acceder a niveles de rentas atractivos, junto con exposición a la revalorización del capital, combinando en una cartera de alta calidad un conjunto de empresas de alta rentabilidad por dividendo de todo el mundo y un componente de opciones de compra cubiertas.
Los inversores en busca de rendimientos más elevados en la renta variable generalmente se ven obligados a asumir riesgos adicionales, a limitarse a un conjunto más pequeño del mercado o a centrarse en empresas más cíclicas. Todas estas alternativas pueden inyectar más volatilidad en una cartera de renta variable con reparto de dividendo. Sin embargo, los inversores pueden considerar estrategias que incorporan un componente de opciones que, cuando se gestiona activamente, puede dar lugar a un rendimiento adicional sin poner en peligro las características defensivas de la cartera.
Por ejemplo, las estrategias FF Sustainable Global Dividend Plus y FIF Global Enhanced Income emplean un componente de opciones por el que venden opciones de compra cubiertas sobre acciones individuales para aproximadamente el 50% de la cartera, lo que permite a los gestores crear una cartera diversificada con una calidad relativamente más alta que genera una rentabilidad por dividendo en torno al 3% y una renta derivada de las opciones en torno al 2%-3% anual.
El componente de opciones aporta sistemáticamente un plus de rendimiento del 2-3%
Dado que algunas opciones vendidas podrían ejercerse, el componente aumenta las rentas mermando el potencial de revalorización del capital. Sin embargo, mediante la gestión activa de la venta de opciones de compra sobre valores individuales e integrando una visión fundamental de los precios objetivo, los inversores pueden adaptar la cartera para tener el nivel adecuado de recorrido alcista, dependiendo de dónde aprecien una oportunidad para un aumento de la valoración a corto plazo.
Este enfoque dinámico de la venta de opciones de compra cubiertas permite a la cartera seleccionar valores con la combinación adecuada de rendimiento y rasgos de crecimiento, al tiempo que se genera sistemáticamente una renta adicional a través de este componente. La cartera de renta variable subyacente es defensiva y se caracteriza por unos beneficios sostenibles que deberían ser resistentes, incluso si las perspectivas económicas se debilitan.
Un aspecto importante es que este sesgo defensivo puede proteger a los inversores de la inflación. Aunque la inflación está moderándose en muchos mercados desarrollados, sigue estando por encima del objetivo y erosionando el poder adquisitivo de los flujos de rentas. También es probable que no vuelva a darse el régimen de inflación en mínimos que vimos durante la década anterior al COVID y que estemos en un mundo con más inflación. Los inversores podrían mantener unos flujos de rentas reales gracias a una cartera de renta variable defensiva formada por negocios que generan tesorería, con ventajas competitivas a largo plazo y con dividendos al alza.
3.- FF Global Multi Asset Income: rentas y revalorización del capital a lo largo de los ciclos de mercado
La asignación dinámica de activos que emplea el fondo Global Multi Asset Income puede ayudar a los inversores a conseguir rentas y rentabilidades atractivas a medida que cambien las condiciones con el paso del tiempo. La estrategia trata de ofrecer rentas atractivas con cierta revalorización del capital mediante una exposición diversificada a los mercados mundiales en cuatro áreas clave: activos básicos que generan rendimientos, como la deuda pública y la renta fija privada; activos que incrementan los rendimientos, como las acciones y los activos alternativos -por ejemplo, REITs-; y activos flexibles, como las divisas y las coberturas.
Ahora que los bancos centrales de los mercados desarrollados están rebajando los tipos, esta estrategia ha aumentado las inversiones en deuda pública de los mercados emergentes en moneda nacional. Los tipos de interés reales disponibles en muchos mercados emergentes son atractivos comparados con los de los mercados desarrollados.
Además, el dólar debería tener un recorrido al alza limitado desde los niveles actuales y podría incluso depreciarse debido a la ralentización de la economía estadounidense y el arranque del ciclo de recortes de tipos de la Fed, que debería dar apoyo a los activos denominados en las monedas emergentes.
La reciente caída de la correlación entre las acciones y los bonos en respuesta al hecho de que los bancos centrales hacen menos hincapié en la inflación y más en el crecimiento, como ha quedado de manifiesto con los recortes de tipos, debería permitir a los bonos ofrecer más diversificación para el riesgo de renta variable y, por lo tanto, desempeñar un papel clave en las carteras multiactivos durante los próximos meses.
Se pueden encontrar tipos reales atractivos en los mercados emergentes
El elemento de revalorización del capital que incorpora el enfoque del Global Multi Asset Income resulta especialmente importante en el entorno actual. Aunque la inflación está descendiendo en los mercados desarrollados, probablemente sea más alta y más volátil durante los próximos años que en el periodo comprendido entre la crisis financiera y la pandemia de COVID.
La inflación más alta mermará las rentabilidades de los inversores y hace que sea crucial configurar una cartera que comprenda activos con potencial de revalorización del capital y con capacidad para generar un rendimiento aceptable.
Ahí es donde las acciones de alta calidad y buenas rentabilidades por dividendo pueden ayudar a los inversores en busca de rentas en las condiciones actuales. La economía estadounidense podría estar desacelerándose, pero sigue siendo relativamente sólida y tiene pocas probabilidades de experimentar una contracción acusada a corto plazo.
Así pues, a la renta variable podría quedarle fuelle en este ciclo. Asignar activos a las acciones de alta calidad y buenas rentabilidades por dividendo da exposición al posible recorrido alcista de la renta variable y, debido a sus características defensivas, ofrece cierta protección si el sentimiento empeora. Además, esta área del mercado presenta actualmente valoraciones atractivas y ha quedado rezagada frente a la racha alcista protagonizada por la tecnología, lo que debería proporcionar un colchón extra en escenarios adversos.
El Global Multi Asset Income invierte en el sector energético estadounidense, atención sanitaria y renta variable japonesa y europea. El sector energético estadounidense ofrece unas rentas atractivas con potencial alcista y, pese a que los fundamentales del petróleo son débiles, esta área debería actuar como cobertura en caso de que la inflación repunte o la situación geopolítica se deteriore. El sector sanitario es defensivo por naturaleza y posee unas buenas perspectivas de beneficios, mientras que la tendencia estructural positiva se mantiene intacta en Japón, a pesar de la volatilidad reciente.
Los préstamos directos han pasado de ser un nicho de mercado a convertirse en un importante canal de financiación para las pymes, para las que la financiación bancaria tradicional ha sido sustituida constantemente por fondos de deuda. En consecuencia, en opinión de Sebastian Zank, responsable de Producción de Crédito Corporativo de Scope Ratings, el uso de los préstamos directos para pymes con grandes perspectivas de crecimiento, bien reforzadas a través de fusiones y adquisiciones o mediante la exposición a segmentos de alto crecimiento.
En su último análisis, este experto de Scope Rating concluye que el crecimiento de los activos de los prestamistas directos centrados en las empresas europeas se va ralentizar en medio de las limitaciones del crecimiento y la inversión y reconoce que aunque el perfil crediticio de los prestatarios se ha deteriorado en los dos últimos años, el panorama está mejorando.
“El debilitamiento de los perfiles crediticios se ha debido principalmente al impacto de los tipos de interés variables y sin cobertura, a unos resultados operativos más débiles de lo previsto, a la escasa rentabilidad de las reducidas inversiones y al retraso en el desapalancamiento. Pero creemos que la erosión de la calidad crediticia ha tocado fondo a la luz de la reducción de los tipos de interés, aliviando las preocupaciones sobre el crecimiento económico y la adaptación a un entorno más difícil. Mientras, el mayor riesgo de impago puede mitigarse mediante una serie de medidas proporcionadas por las firmas de capital privado y los prestamistas directos”, explica Zank.
Estas medidas, en su opinión, incluyen una mayor flexibilidad entre los prestamistas directos y los prestatarios sobre las condiciones de pago en comparación con la financiación más tradicional; compromisos de las firmas de capital privado para inyecciones de capital o préstamos de accionistas que pueden convertirse en capital o facilidades PIK (payment in kind, interés de una financiación que es satisfecho mediante la emisión de nueva deuda a favor de los prestatarios); además de un importante dry poder (recursos financieros líquidos que están disponibles para ser invertidos) que puede utilizarse para proporcionar financiación puente a empresas que probablemente atraviesen dificultades.
En este contexto Scope ha asignado ya 70 calificaciones privadas y 24 estimaciones de crédito puntuales a diferentes prestatarios que recurren al crédito directo con una exposición crediticia agregada calificada de más de 5.600 millones de euros. Las calificaciones de los emisores se concentran, según Sebastian, en gran medida en la categoría B.
“Lo más sorprendente es la migración de las calificaciones. Mientras que alrededor de la mitad de las calificaciones de nuestra cobertura podrían haberse mantenido o reflejar una subida de las calificaciones, la otra mitad muestra una erosión de las calificaciones, ya sea a través de bajadas reales/bajadas de las calificaciones puntuales o debilitamiento de las perspectivas. Pero esto no apunta a una erosión generalizada y permanente del crédito. Cuando se observan las distribuciones de perspectivas, una gran parte de la migración negativa del crédito ya se ha reflejado y es probable que la erosión del crédito se ralentice”, explican desde Scope.
Los activos bajo gestión de los gestores de fondos de deuda centrados en la concesión de préstamos directos a empresas europeas han alcanzado los 400.000 millones de dólares, aunque desde Scope esperan que el crecimiento continúe a un ritmo más lento que la TCAC (tasa de crecimiento anual compuesto) del 17% de los últimos 10 años, al menos hasta que las actuales limitaciones del crecimiento económico y la inversión (como unos tipos de interés más altos a largo plazo) se vean superadas por factores de apoyo.
“Aunque el fuerte crecimiento de los préstamos directos (direct lending) en la última década se ha visto apoyado por una amplia gama de factores, no creemos que los vientos en contra que han surgido recientemente sean lo suficientemente fuertes como para detener el crecimiento de la captación de fondos y la asignación de operaciones. Esperamos que las actividades de préstamo directo en Europa sigan creciendo, aunque a un ritmo más lento que la media anual de captación de fondos de deuda de unos 40.000 millones de dólares en los últimos cinco años”, añade el experto.
Desde Scope establecen que aunque esto indique una trayectoria de crecimiento pronunciado (CAGR a 10 años: 17%), los activos gestionados en Europa siguen siendo significativamente inferiores a los volúmenes en los EE.UU., donde el préstamo directo despegó mucho antes de la crisis financiera mundial y se ha convertido en una estrategia de financiación ampliamente utilizada, si no mercantilizada.
El desarrollo más lento de los préstamos directos en Europa se asocia principalmente con varias razones, explica Zank: «Los sectores bancarios regionales y locales aún significativos en la mayoría de los mercados europeos, donde la financiación bancaria es el canal de financiación más común para las empresas del mercado medio el entorno no armonizado en todos los mercados europeos, donde el conocimiento local sobre la legislación de insolvencia y las condiciones de préstamo es crucial para los gestores de fondos de deuda».
A lo cual añade: “No obstante, los préstamos directos han pasado de ser un nicho de mercado a convertirse en un importante canal de financiación para las pymes para las que la financiación bancaria tradicional ha sido sustituida constantemente por fondos de deuda. En particular, observamos el uso de los préstamos directos para pymes con grandes perspectivas de crecimiento, bien reforzadas a través de fusiones y adquisiciones o mediante la exposición a segmentos de alto crecimiento. Además, se recurre con frecuencia a este canal de financiación en el caso de sucesiones y recapitalizaciones de empresas”, concluye.
El panorama macroeconómico a finales de 2024 parece positivo, la inflación está disminuyendo y los tipos de interés están bajando. A pesar de ello, las valoraciones -para el 47% de los inversores institucionales- y los tipos de interés -para el 43%- siguen siendo las principales preocupaciones de las carteras para 2025, según los resultados de la nueva encuesta* de Natixis Investment Managers (Natixis IM).
Según explica la gestora, tras un mercado alcista de dos años en el que gran parte de las ganancias se han concentrado en los valores tecnológicos y hasta el 67% cree que las valoraciones de la renta variable no reflejan actualmente los fundamentales. Sin embargo, los encuestados se muestran optimistas, ya que un 75% afirma que 2025 será el año en que los mercados se den cuenta de que las valoraciones importan, aunque el 72% comenta que la sostenibilidad del actual repunte del mercado vendrá determinada por la política de los bancos centrales.
Una de las conclusiones que deja esta encuesta es que el sentimiento ha mejorado drásticamente a lo largo de este año. Por ejemplo, la visión es más positiva respecto a la inflación, ya que más de tres cuartas partes de los encuestados a nivel global afirman que la inflación disminuirá o se mantendrá en los niveles actuales (38%) en 2025. En general, el 68% confía en que la inflación alcance los niveles previstos para el año próximo, mientras que el 32% sigue preocupados por la posibilidad de que la economía mundial experimente picos de inflación en 2025.
Amenazas económicas
A pesar de este optimismo, los inversores institucionales siguen viendo una amplia gama de amenazas económicas para el próximo año, siendo sus mayores preocupaciones la expansión de las guerras actuales -para el 32%- y las relaciones entre EE.UU. y China -el 34%-. Si bien sus perspectivas de mercado pueden ser optimistas, los inversores institucionales son realistas: a pesar de la evolución relativamente tranquila de las principales clases de activos durante 2024, muchas instituciones de los encuestados a nivel global prevén un aumento de la volatilidad de las acciones (62%), los bonos (42%) y las divisas (49%) en 2025.
Por otra parte, aunque la confianza en las criptomonedas se ha más que duplicado (38% frente al 17% en 2024), dada la naturaleza especulativa de esta inversión y la volatilidad que la suele acompañar, el 72% afirma que las criptomonedas no son apropiadas para la mayoría de los inversores y otro 65% cree que no son una opción de inversión legítima para las instituciones.
Sin embargo, los planes de cartera muestran un alto nivel de confianza, con un 48% de los encuestados dice que están activamente de-risking sus carteras. “Es más, cuatro de cada diez inversores institucionales españoles afirman que están asumiendo activamente más riesgo en 2025”, indican desde la gestora.
¿Boom del mercado privado?
Otra de las conclusiones que arroja esta encuesta es que los institucionales tienen previsto seguir aumentando sus inversiones en activos alternativos en 2025, ya que el 61% de los encuestados prevé que una cartera 60:20:20 diversificada con inversiones alternativas superará a la tradicional combinación 60:40 de acciones y bonos. En cuanto a dónde invertirán esa asignación del 20%, las instituciones tienen claro que quieren añadir más activos privados a las carteras.
De todas sus opciones, el 73% es más optimistas respecto a private equity en 2025, lo que supone un notable aumento respecto al 60% que opinaba lo mismo hace un año. “Es probable que esto cambie a lo largo del próximo año, ya que un 78% cree que los recortes de tipos mejorarán el flujo de operaciones en los mercados privados y el 73% de los encuestados afirma que se emitirá más deuda privada en 2025 para satisfacer la creciente demanda de prestatarios”, explican desde Natixis IM.
En cuanto a su enfoque de las inversiones privadas, el 54% afirma haber aumentado sus asignaciones a los mercados privados, mientras que un 65% reconoce que está estudiando nuevas áreas de interés, como las oportunidades relacionadas con la inteligencia artificial.
Los mercados favorecerán la gestión activa
Por último, un dato relevante es que el 70% de los inversores institucionales afirman que los mercados favorecerán la gestión activa en 2025, mientras que un 67% dijo que sus inversiones gestionadas activamente superaron a sus índices de referencia en los últimos 12 meses. “Dado el cambiante entorno de los tipos de interés y el crédito, es probable que las instituciones se beneficien de la inversión activa. En general, el 70% de los encuestados afirmó que la gestión activa es esencial para la inversión en renta fija”, concluyen desde la gestora.
*Natixis IM entrevistó a 500 inversores institucionales que gestionan en conjunto 28,3 billones de dólares en activos de pensiones públicas y privadas, aseguradoras, fundaciones, dotaciones y fondos soberanos de todo el mundo.
Ya les advertimos de que 2024 iba a ser un año donde los procesos electorales y la política tendrían un peso muy relevante, y así será hasta el último momento. Las dos principales economías de la zona euro, Francia y Alemania, mantienen una situación política compleja. A ambos lados del río Rin, la clase política se enreda por el gasto presupuestario y el control del déficit. Un problema doméstico que, en opinión de los expertos, impacta en el atractivo de los activos europeos.
“En el lado francés, el gobierno de Barnier está rodeado por la incertidumbre de si será capaz de mantener el poder, una situación casi sin precedentes bajo la V República, ya que hoy se votará una primera moción de censura. Y en Alemania, el 23 de febrero de 2025 se celebrarán elecciones anticipadas, y se está estudiando la posibilidad de modificar la norma del freno de la deuda, que limita el déficit federal al 0,35%. Lamentablemente, la modificación de esta norma requiere una mayoría parlamentaria de dos tercios, un objetivo difícil dada la fragilidad actual de los partidos tradicionales», resume François Rimeu, estratega senior de Crédit Mutuel Asset Management, sobre la situación de ambos países.
En su opinión, la situación de estos dos motores de la economía de la zona euro pone el foco en los retos a los que se enfrenta la región. “Estos retos son importantes: la integración fiscal para evitar la optimización dentro de la propia zona (Irlanda, Países Bajos, Luxemburgo), una política de defensa común para hacer frente a los riesgos geopolíticos actuales y futuros, una estrategia energética compartida, una política migratoria unificada, y mucho más”, señala Rimeu. Estos retos tropiezan ahora con la compleja situación política de Francia y Alemana, ¿qué implicaciones tendrá para la inversión? Los expertos analizan y apuntan a dos ideas: los diferenciales de los bonos y renta variable europea. Pero vayamos por partes.
Déficit, mon ami
Benoit Anne, Managing Director del Grupo de Estrategia e Insights de MFS Investment Management, resume la situación de Francia usando un paralelismo: “Atrapado en el centro de París. Cualquiera que haya intentado conducir por París sabe que quedarse atascado en le Peripherique, la frecuentemente congestionada circunvalación, es una experiencia traumática. Curiosamente, los diferenciales franceses también están ahora atascados en la vía periférica de la eurozona, con pocas esperanzas de que el trauma termine pronto”.
Según su compañero Peter Goves, responsable de Análisis Soberano de Mercados Desarrollados, aún no se vislumbra ningún resquicio de esperanza en lo que respecta a los apuros de la deuda soberana francesa. De hecho, ambos consideran que el panorama político parece bastante sombrío, con opciones de resultados futuros que van desde la catástrofe total a simplemente mediocres.
“Esto es importante, ya que inevitablemente seguirá afectando a la confianza tanto de las empresas como de los consumidores. En cualquiera de los escenarios políticos futuros -es decir, si el gobierno actual sobrevive o es derrocado-, es demasiado pedir en cualquier caso expresar una opinión constructiva sobre la deuda soberana francesa”, señala Anne.
A la hora de hablar del impacto que tendrá esta situación, desde MFS IM destacan que los diferenciales a 10 años frente a Alemania se sitúan actualmente en torno a los 85 puntos básicos, ahora al nivel de los de Grecia, pero el territorio de los tres dígitos puede ser sólo cuestión de semanas. “También puede haber algunas repercusiones para el crédito europeo, al tener Francia un peso tan grande como país de riesgo en el índice. Por ello, el equipo de renta fija adopta una postura cautelosa hacia el sector financiero francés, dada su posible vulnerabilidad en este entorno incierto”, afirma la experta de la gestora.
Para Dario Messi, Head of Fixed Income Analyst en Julius Baer, lo más relevante es justamente el aumento en el diferencial de los bonos gubernamentales. “Consideramos que esto se debe a una prima de riesgo político que probablemente no desaparecerá en el corto plazo, más que a preocupaciones reales sobre la sostenibilidad de la deuda en esta etapa.La fragilidad política de Francia ha aumentado significativamente desde las elecciones anticipadas del verano. El intenso debate presupuestario del país es solo otro ejemplo de ello”, explica Messi.
Sobre el déficit del país, Enguerrand Artaz, gestor de fondos de La Financière de l’Échiquier (LFDE), explica que aunque se aprobaran los presupuestos, solo se reduciría el déficit hasta el 5% del PIB, lo que sigue siendo muy elevado en términos absolutos. “Francia es el país que más veces ha superado el umbral de déficit excesivo (3% del PIB) desde la creación de la zona euro: 20 años de 26. Además, Francia es actualmente el país de la Unión Monetaria con peor ratio déficit/deuda pública: Italia y Grecia, dos países cuya relación deuda/PIB es superior a la de Francia, han conseguido prácticamente el equilibrio presupuestario en 2024 en el caso del primero y un superávit neto en el caso del segundo”, recuerda Artaz.
Renta fija y renta variable
En cualquier caso, el experto de Julius Baer apunta que hay varias consideraciones para los inversores en renta fija en esta etapa. Primero, señala que la inestabilidad política en Francia no desaparecerá en el corto plazo y probablemente mantendrá los diferenciales soberanos volátiles y elevados en comparación con los bonos gubernamentales alemanes según los estándares históricos. En otras palabras, habrá una prima de riesgo político para la deuda gubernamental francesa.
“Sin embargo, esto no se trata aún de preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda. El ensanchamiento del diferencial sigue siendo modesto en términos absolutos. Los déficits presupuestarios primarios actuales son demasiado altos y deberán reducirse en algún momento, especialmente porque se prevé que la relación deuda/PIB aumente en los próximos años. Sin embargo, las tasas de interés reales de la deuda siguen siendo bajas, están subiendo muy lentamente y no se espera que superen significativamente el crecimiento nominal a mediano plazo. Esto debería limitar las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda”, matiza Messi.
Este experto también advierte de que los análisis de estos días están pasando por alto el mejor desempeño económico y las perspectivas fiscales en mejora de estos países. “De hecho, mantenemos nuestra preferencia por la deuda soberana de la periferia de la eurozona sobre la deuda central alemana, pero no vemos razón para que los diferenciales de los bonos gubernamentales franceses se reduzcan significativamente”, añade.
Artaz considera que una posible crisis de deuda en Francia es uno de los principales riesgos de la eurozona de cara a los próximos trimestres: “Aunque el bono francés a 10 años ha superado recientemente a su homólogo griego, Francia sigue endeudándose a tipos moderados. Sin embargo, ahora existe el riesgo real de que una mala gestión presupuestaria continuada, unida a la inestabilidad política, acaben creando un clima de desconfianza tal que los tipos de interés se disparen en los mercados y Francia sufra una especie de crisis de deuda. Este es, sin duda, el principal riesgo para la zona del euro en los próximos trimestres”.
Si miramos el impacto de la situación de Francia en la renta variable, Axel Botte, responsable de Estrategia de Mercado de Ostrum AM (Natixis IM), recuerda que el CAC 40 va camino de tener su peor año desde 2010 en comparación con las bolsas europeas. Además, el índice CAC 40 ha obtenido peores resultados que el índice alemán DAX 30 desde la primavera pasada, a pesar de que Alemania aún no ha salido de la recesión debido a un entorno económico difícil, y a importantes problemas estructurales, en particular su fuerte dependencia de la energía rusa en el pasado y su crónica falta de inversión. En opinión de Botte, los valores bancarios, en particular, han lastrado el índice francés.
Sin olvidar a Alemania
Aunque el foco de atención esta semana está en Francia, no hay que olvidar que estuvieron en Alemania hace un mes. El pasado 6 de noviembre, se rompió la coalición tripartita formada por socialistas (SPD), verdes y liberales (FDP). “Uno de los principales detonantes para que el Canciller Scholz destituyera a su Ministro de Finanzas liberal fue el desacuerdo sobre cómo fijar el presupuesto suplementario de 2024. Los liberales querían financiarlo mediante ahorros, mientras que el Canciller quería declarar circunstancias excepcionales para anular temporalmente el freno de la deuda. El camino hacia unas elecciones anticipadas está ahora despejado: el 16 de diciembre, el Canciller se someterá a un voto de confianza en el Parlamento que está dispuesto a perder, y entonces el Presidente convocará formalmente elecciones el 23 de febrero”, explica Martin Wolburg, economista senior en Generali AM (parte de Generali Investments).
Para el economista, la ruptura del Gobierno se produce en un momento delicado del año, cuando hay que aprobar un presupuesto suplementario para 2024 y otro para 2025. Según el Gobierno, se necesitan 11.800 millones de euros para 2024. Sin embargo, aunque no se aprobaran no sería necesario congelar el presupuesto.
En su opinión, más problemático es el presupuesto de 2025: “En la situación actual no habrá acuerdo parlamentario sobre el presupuesto del próximo año. En este caso, habría un presupuesto provisional basado en los gastos de 2024 (cada mes el Gobierno puede gastar una doceava parte del presupuesto del año anterior) y el próximo Gobierno tendría que aprobarlo. Esto podría alargarse hasta el verano o incluso más, dependiendo de la rapidez del nuevo gobierno para encontrar un consenso”.
Con la vista puesta en el futuro, Artaz destaca que cualquiera que sea el color de la próxima coalición, parece seguro que Alemania, que dispone de un amplio margen de maniobra con un ratio deuda/PIB de tan solo el 59% y sin déficit primario, modificará por fin su ortodoxia presupuestaria. “Cabe plantear tres vías creíbles. En primer lugar, suavizar las condiciones y activar con mayor frecuencia la cláusula de salvaguardia que permite al Bundestag suspender el freno al endeudamiento «en caso de catástrofe natural u otra emergencia excepcional ajena al control del Estado». En segundo lugar, prorrogar el fondo especial de 100.000 millones de euros creado en 2022 para apoyar el presupuesto de defensa, o crear uno nuevo. Por último, revisar el límite de déficit presupuestario incluido en el mecanismo de freno al endeudamiento. Fijado actualmente en el 0,35 % del PIB, podría aumentar hasta el 0,5 % o incluso el 0,75 %”, añade.
En lo que respecta a la percepción del riesgo por parte de los inversores, Artaz concluye que todo esto podría traer un soplo de aire fresco, ya que la primera economía de la zona del euro por fin hace balance de un modelo económico en declive desde hace casi una década y se muestra capaz de aportar un poco de flexibilidad a su ordoliberalismo, a veces radical. “Eso también podría dar un impulso a ciertos sectores cíclicos que han sido dados de lado por los mercados, como la industria automovilística y la química”, añade.
Pese a este contexto político, desde DWS consideran que el DAX tiene un gran potencial de cara a 2025. De hecho, ayer el índice superó la marca de los 20.000 puntos, alcanzando un máximo histórico, sellando así una tendencia al alza que mantiene desde octubre.
Según señala Sabrina Reeh, Senior Portfolio Manager de DWS, en noviembre, las empresas de los sectores industrial, tecnológico y de telecomunicaciones fueron las principales impulsoras del índice. “Los valores del sector automotriz y de salud mostraron un desarrollo más débil en este contexto. Por otro lado, las elecciones anticipadas en Alemania ofrecieron un poco más de confianza al mercado, ya que las expectativas de reformas estructurales y mayores gastos fueron vistas como una oportunidad”, destaca.
Hace algunos años el director ejecutivo de Berkshire Hathaway, el legendario Warren Buffett, decidió adquirir el ETF S&P 500 (VOO) de Vanguard, su decisión extrañó en ese momento al mercado.
Sin embargo, a partir de entonces este fondo cotizado en bolsa se ha convertido poco a poco en el favorito de los inversores minoristas, al grado de haber superado por primera vez en este año los 100.000 millones de dólares en flujo de caja neto.
Berkshire Hathaway ha explicado recientemente que el ETF, que refleja el índice S&P 500, es más apropiado para objetivos a largo plazo en los que el crecimiento de su dinero es esencial. El S&P 500 ha avanzado un 27% este año, cruzando el nivel de 6.000 puntos por primera vez.
«La estructura de propiedad de Vanguard es única en la industria: somos propiedad de nuestros fondos, que a su vez son propiedad de los accionistas de los fondos. Por lo tanto, no tenemos lealtades divididas; nos centramos únicamente en ayudar a los inversores a alcanzar sus objetivos», dijo un portavoz de Vanguard a FOX Business.
«Vanguard simplemente tiene esta reputación; cuenta con una base de inversionistas muy comprometida, que simplemente compran fondos de Vanguard. Y generalmente están orientados al largo plazo. Invierten dinero en esos fondos de Vanguard, día tras día, semana tras semana. «Así que se beneficia de eso», dijo Sumit Roy, analista senior de ETF en ETF.com.
De acuerdo con fuentes de la industria, VOO inició operaciones en el año 2010 y actualmente cuenta con 588.000 millones de dólares en activos.
Sumit Roy, el especialista de ETF en ETF.com explicó que la base de inversores del fondo es mucho más diversa ya que existen tanto inversores a largo plazo como muchos operadores, fondos de cobertura, gente que entra y sale tratando de cronometrar el mercado, lo que genera un patrón de flujos un poco diferente, pero que no reduce su atractivo.
Snowden Lane Partners nombró a Alex Bryer miembro del equipo directivo de la firma, donde asumirá un papel clave en el desarrollo del negocio y reclutamiento a nivel nacional en EE.UU., dice el comunicado de la empresa.
Si bien Bryer mantendrá su posición como socio senior y director general al frente de la oficina de la firma en Bethesda, también trabajará con la junta de Snowden Lane en un papel de reclutamiento nacional, colaborando con los asesores de la firma y coordinando con reclutadores externos para identificar y reclutar equipos de asesoramiento financiero de alto calibre para la firma.
«Alex es un líder experimentado y de alto nivel en Snowden Lane que ya ha demostrado su capacidad para reclutar asesores de calidad y hacer crecer sustancialmente su propia práctica», dijo Greg Franks, socio director, presidente y COO de Snowden Lane.
El nuevo nombramiento de Bryer se produce después que la firma ha agregado 13 asesores financieros desde septiembre de 2023, lo que representa 1.800 millones de dólares en activos de nuevos clientes, agrega la firma.
Snowden Lane ha registrado un crecimiento interanual de los ingresos del 20% y ha añadido oficinas en Boca Ratón, FL, Golden, CO, y Filadelfia, PA, agrega el comunicado.
Bryer se unió a Snowden Lane Partners en 2015 y desde entonces ha hecho crecer una práctica altamente exitosa, que incluye seis asesores que actualmente supervisan más de 1.000 millones de dólares en activos de clientes.
Antes de unirse a Snowden Lane, trabajó durante 21 años en Merrill Lynch, donde fue director residente senior y supervisó múltiples oficinas en el área de Washington.
En México desde el año 2021 se lleva a cabo un cambio estratégico consistente en la incorporación al mercado de dinero local de futuros de TIIE de Fondeo, con vencimientos mensuales de hasta un año, diseñados para generar índices a diferentes plazos basados en esta tasa de referencia.
La TIIE de Fondeo calculada con base en transacciones reales del mercado de dinero, ofrece mayor precisión y transparencia en comparación con la TIIE 28, la cual se basa en cotizaciones estimadas por los principales bancos.
A finales de noviembre, Asigna, la Contraparte Central de Derivados, subsidiaria del Grupo Bolsa Mexicana de Valores, completó con éxito la conversión de contratos de Swaps referenciados a la TIIE 28, hacia la TIIE de Fondeo.
Este proceso incluyó más de 7.000 registros por un total de 1,1 billones de pesos (55.000 millones de dólares), los cuáles se reemplazaron por 1,1 billones en Swaps de corto plazo sobre TIIE de 28 días con vencimiento en diciembre de 2025 y 1,1 billones en Forward Starting Swaps sobre la TIIE de Fondeo, sumando un total de 2,22 billones de pesos (110.000 millones de dólares).
«La conversión fue resultado de un esfuerzo coordinado durante casi un año de pruebas, que involucró un estrecho trabajo conjunto con autoridades financieras, principalmente con el Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, así como con los Socios Liquidadores del Mercado Mexicano de Derivados, Bancos, Casas de Bolsa, Afores, Fondos de Inversión y otros clientes», explicó la Bolsa Mexicana de Valores en un comunicado a la comunidad inversionista.
Al estar alineada la TIIE de Fondeo con las mejores prácticas internacionales, brinda mayor confianza a los inversionistas, empresas y entidades financieras, convirtiéndola en un pilar del sistema financiero mexicano. Su adopción contribuye a fomentar un mercado más robusto y líquido, particularmente en la gestión de riesgos a través de derivados, como Swaps y Futuros.
En febrero de 2024 se listaron los Swaps de TIIE de Fondeo y los Forward Starting Swaps de TIIE de Fondeo, fortaleciendo la oferta de instrumentos financieros necesarios para la transición.
El plan estratégico sigue su marcha sin alteración hasta ahora, eso incluye a otros actores financieros de México; por ejemplo, el Banco de México ha anunciado que, a partir del 31 de diciembre de 2025, prácticamente dentro de un año, cesará la aceptación de nuevas operaciones referenciadas a la TIIE de 28 días, resaltando la importancia de la transición hacia la TIIE de Fondeo.
También a mediados de este año el banco central mexicano explicó que la transición global de tasas de referencia basadas en encuestas hacia aquellas fundamentadas en transacciones reales ha llevado al Banco de México a adoptar la TIIE de Fondeo, en línea con los estándares internacionales.
Este tipo de swap permite a una parte comprometerse a pagos periódicos basados en una tasa de interés fija, mientras la contraparte realiza pagos basados en la tasa variable de la TIIE de Fondeo.
La relevancia del anuncio consiste además en la cifra que se logró convertir mediante swaps, miles de millones de dólares cuyas operaciones serán además de más transparentes tendrán más certeza en el tiempo, algo que seguramente proporcionará certidumbre al mercado mexicano de dinero.
Después de la última reunión en la Comisión Clasificadora de Riesgo (CCR), la entidad a cargo de aprobar los instrumentos en los que pueden invertir los fondos de pensiones en Chile, dio luz verde a cinco gestoras especializadas en activos alternativos.
Este visto bueno permite a las AFP invertir en vehículos y operaciones de coinversión con las firmas especializadas Antares Capital, Bain Capital, Intermediate Capital Group, K1 Investment Management y Oakley Capital, según informó la entidad en un comunicado.
Las aprobaciones de la CCR para las casa de alternativos están limitadas por clase de activo. En el caso de estas cinco gestoras, Antares obtuvo autorización para sus inversiones en deuda privada, mientras que las de las demás involucran inversiones de capital privado.
La CCR también informó de dos firmas de alternativos que fueron retirada de la nómina de inversiones permitidas, en ambos casos por no renovar su solicitud de aprobación. Se trata de LaSalle Investment Management, que estaba autorizada para activos inmobiliarios, y TowerBrook Capital Partners, para capital privado.
Otros instrumentos
Además de gestoras de alternativos, la CCR también se pronunció respecto a una serie de fondos mutuos y ETFs, que también ingresaron al universo invertible de las AFP chilenas.
En el caso de los fondos mutuos, la entidad aprobó las estrategias Barings Latin America Fund, de Barings Emerging Markets Umbrella Fund; BlackRock Sustainable Advantage World Equity Fund, de BlackRock Funds I ICAV; Franklin Japan Fund, de Franklin Templeton Investment Funds; y Mirae Asset ESG India Sector Leader Equity Fund, de Mirae Asset Global Discovery Fund.
Además, tres fondos índice de Franklin Templeton consiguieron el visto bueno. Se trata de los vehículos Franklin FTSE Brazil, Franklin FTSE India y Franklin U.S. Mid Cap Multifactor Index.
Los inversores que buscan exposición a las tendencias de inteligencia artificial podrán acudir a la estrategia de ETF titulada VistaShares Artificial Intelligence Supercycle ETF.
El fondo se gestiona activamente y se construye en torno al enfoque de la empresa en Supercycles™: tendencias impulsadas por la tecnología que están estimulando la disrupción en toda una serie de industrias, y que están cambiando todo, desde los viajes, trabajos «e incluso cómo pensamos», dice el comunicado de la gestora al que accedió Funds Society.
El fondo se ha diseñado con la ayuda de destacados líderes del pensamiento tecnológico para ofrecer a los inversores una sólida exposición a todo el Supercycle™, es decir, a las empresas que son las «joyas ocultas», que impulsan la innovación y los beneficios dentro de sus respectivas cadenas de suministro, agrega la firma.
“Los argumentos a favor de la inversión temática son obvios, pero hasta ahora los inversores no han sido bien atendidos por el típico ETF temático, que con demasiada frecuencia se caracteriza por una concentración excesiva en los ‘grandes nombres’ vinculados a una tendencia concreta y una exposición insuficiente. A veces, los inversores no tienen exposición a las empresas que están fomentando la innovación real, y que serán la fuerza motriz de una temática en las próximas décadas”, dijo Adam Patti, CEO de VistaShares.
La estrategia sigue una metodología basada en reglas y pendiente de patente que sustenta el núcleo de la cartera. Mientras tanto, el Comité de Inversión de VistaShares se encarga de supervisar los componentes de la cartera, añadiendo o eliminando empresas activamente para garantizar que el ETF refleje el ecosistema mundial más actualizado, agrega el texto.