Joaquín López-Chicheri, presidente y consejero delegado de Vitruvio Real Estate Socimi. Foto cedida. El MAB contará el viernes con 19 socimis, tras el debut mañana de Vitruvio Real Estate
El mercado alternativo bursátil contará, a partir de mañana, con 19 socimis cotizadas, tras la esperada incorporación deVitruvio Real Estate Socimi.
Según explica Joaquín López-Chicheri, presidente y consejero delegado de la socimi, la filosofía de inversión es la de un vehículo de ahorro a largo plazo en el sector inmobiliario, muy similar a la de un fondo de inversión. Prueba de ello es que el vehículo, fundado y promovido originalmente por clientes de 360 CorA EAFI, ha crecido y cuenta ya con 121 accionistas, sin que ninguno de ellos ejerza el control de la sociedad y sin grupos de control.
Vitruvio Real Estate Socimi cuenta con una cartera valorada, con datos de mayo, en 50,4 millones de euros: es propietaria de cuatro edificios residenciales, cinco activos de uso oficinas, cuatro locales comerciales y dos trasteros, todos ubicados en Madrid y un activo residencial en Ibiza. La idea, según López-Chicheri, es tener una cartera diversificada, tanto por usos (tiene oficinas, activos comerciales y residenciales) como por pagadores de renta (de forma que ningún pagador suponga un alto porcentaje del total de las rentas para asegurar la recurrencia en la generación de ingresos).
«Dos tercios de la cartera son activos en alquiler mientras el otro tercio son activos que requieren de transformación o reposicionamiento de forma que puedan alquilarse a un precio superior, generando valor para los accionistas», comenta el experto a Funds Society. «Nuestro objetivo es hacer crecer el número de accionistas, ampliando capital para continuar invirtiendo con esta filosofía», añade.
La política de inversión de Vitruvio impone como límite de endeudamiento un 33% del valor de sus activos. Por tanto, tomando en consideración el informe de valoración del experto independiente Grant Thornton, el Consejo de Administración de la sociedad ha fijado un valor de referencia para cada una de sus acciones de 12,63 euros, lo que supone un valor total del equity de la compañía de 38,53 millones de euros.
Esta socimi llegará tras el debut, el pasado 1 de julio, de Asturias Retail and Leisure Socimi. Asturias Retail and Leisure Socimi, a través de dos filiales, posee tres propiedades ubicadas en Oviedo: el centro comercial conocido como ‘Intu Asturias’ y siete locales comerciales, un hipermercado arrendado a Eroski y una estación de servicio.
Tomando en consideración el informe de valoración del experto independiente Ernst & Young Servicios Corporativos, el consejo de administración de la sociedad fijaba entonces un valor de referencia para cada una de sus acciones de 19,15 euros, lo que supone un valor total de la compañía de 95,8 millones de euros.
Foto cedida. Premios al capital privado en España: ¿qué entidades han destacado?
Caixa Capital Risc, Nauta Capital VC Partners, Axon Partners Group, Miura Private Equity, Talde Gestión, N+1 Private Equity, Sepides e Ysios Capital Partners son las entidades de capital privado que han resultado premiadas en la novena edición de los premios al capital privado en España, organizada por Ascri, Deloitte e IESE Business School. Estos galardones confirman la recuperación del sector de venture capital & private equity y su contribución al arranque y desarrollo de las pymes españolas.
El Fondo Europeo de Inversiones (FEI) ha recibido el Premio de Honor “Impulso al Capital Privado” por su papel dinamizador del sector de venture capital & private equity en España.
Los galardones se entregaron en un evento celebrado el 4 de julio en el Casino de Madrid y conducido por la actriz y presentadora Marta Márquez, al que acudieron más de 160 personalidades de la industria del venture capital & private equity, del sector bancario y académico. Fernando Ruiz, presidente de Deloitte, Javier Ulecia, presidente de Ascri y Juan Roure, profesor de IESE Business School, dieron la bienvenida a los asistentes antes de la ceremonia de entrega de los galardones.
El jurado responsable de seleccionar a los galardonados está compuesto por un prestigioso panel de expertos: Juan Roure (profesor y fundador de la Red de Inversores Privados y Family Offices de IESE Business School e inversor privado), María José Osuna (responsable de Private Equity de Casa Grande de Cartagena), José Martí Pellón (profesor de Economía Financiera de la Universidad Complutense de Madrid y fundador de Webcapitalriesgo), Miguel Zurita (partner de Altamar Private Equity), Craig Williamson (adviser y former partner, SL Capital Partners LLP) y José Antonio Morales (director de Inversiones en Mutua Madrileña).
Se premia en distintas categorías a aquellas entidades de capital privado, radicadas en España y miembros de Ascri, que hayan desinvertido alguna de sus participaciones en empresas entre el 1 de abril de 2015 y el 31 de marzo de 2016, cuando dichas operaciones han tenido éxito por la rentabilidad financiera para los inversores o por los retos alcanzados (crecimiento de las ventas, del empleo, salida hacia nuevos mercados, mayor innovación, etc).
Foto: VIctorCamilo, Flickr, Creative Commons. La oportunidad en el segmento de residencias para jóvenes, tanto estudiantes como profesionales
La inversión inmobiliaria está en auge en España. Tanto por la reciente creación de la figura de las socimis como por el atractivo del binomio rentabilidad/riesgo en comparación con otras inversiones. Uno de los nichos del mercado inmobiliaria es el segmento de residencias para jóvenes, tanto estudiantes como profesionales.
Hay varios factores que explican el interés en este nicho. Las grandes ciudades atraen cada vez más a los jóvenes. El número de estudiantes universitarios, sobre todo internacionales va en aumento. Además, muchos jóvenes profesionales tienden cada vez más a compartir la vivienda no solo por razones económicas. Para atender esta demanda, existen hostales, residencias universitarias, viviendas compartidas gestionadas por empresas profesionales y pisos en alquiler destinados a tal fin, de inversores particulares.
Aunque es un mercado con muchas diferencias locales, encontramos en los segmentos de residencias universitarias y viviendas compartidas las siguientes características comunes:
En primer lugar, y de forma sorprendente para muchos inversores, la desocupación es normalmente muy baja. En mercados donde existen estadísticas fiables, la desocupación es menor que el 2%.
En segundo lugar, la morosidad en este tipo de ocupaciones es muy reducida.
En tercer lugar, la rentabilidad de este activo es mayor que la de viviendas individuales u oficinas.
Con estas características, uno puede preguntarse por qué no hay empresas o fondos que se dedican a la gestión de residencias universitarias y/o al alquiler de viviendas compartidas. Existen algunas compañías cotizadas y fondos que se dedican a residencias universitarias, principalmente en los Estados Unidos y el Reino Unido.
Hay aún menos oportunidades de inversión en empresas dedicadas a la vivienda compartida. La razón principal es que es una actividad que demanda numerosa mano de obra.
La gestión de inquilinos en diferentes ubicaciones, sobre todo si son jóvenes, requiere una amplia supervisión, no solamente por la gestión del alquiler, ya que normalmente existen mecanismos que reducen los problemas de pago al mínimo, sino por el mayor número de incidencias de carácter doméstico que genera esta práctica. También es más laborioso comprar, reformar y vender viviendas sueltas, que edificios. En consecuencia los gastos de gestión suelen ser superiores.
Los jóvenes, tanto universitarios como profesionales, prefieren generalmente vivir cerca o dentro del centro, donde hay menos hostales o residencias. Los pisos de inversores individuales suelen estar peor gestionados. Por tanto, hay una demanda creciente para viviendas compartidas gestionadas profesionalmente.
En Orienta Capital, este nicho de mercado nos gusta, porque combina un riesgo limitado con una rentabilidad atractiva. Sin embargo, como hemos comentado, no es un mercado de fácil acceso para el inversor particular.
En los Estados Unidos y Reino Unido, existen varias empresas cotizadas y sobre todo fondos que se dedican a residencias para jóvenes, pero son menos interesantes para el inversor español por el riesgo de divisa.
En la zona euro, hay pocas posibilidades de inversión. Conocemos solamente la existencia de una empresa cotizada en la zona euro, la belga Xior. Existen pocos, fondos que se dediquen a residencias y menos aún dedicados a viviendas compartidas.
La salida de estos fondos es normalmente la venta de la actividad o de su cartera de viviendas o residencias a uno o varios inversores institucionales, que buscan una rentabilidad relativamente segura.
Las viviendas compartidas tienen una cierta ventaja, porque es un mercado que también como alternativa de salida, se ve beneficiado de una subida de los precios de la vivienda.
Recientemente hemos realizado para algunos inversores una inversión en un fondo de viviendas compartidas en Ámsterdam y estamos explorando algunas alternativas en otros países.
Foto: AlexSegre, Flickr, Creative Commons. El Brexit devuelve a terreno negativo el balance de la industria española de fondos en el año
El resultado del referéndum británico del pasado 23 de junio, favorable al Brexit, ha dejado huella en la evolución de la industria de fondos española en las últimas semanas. Sobre todo debido al efecto mercado (recordemos que el Ibex 35 sufrió la mayor caída de su historia, al perder un 12,3% el día de la consulta), los fondos de inversión sufrieron una reducción de su volumen patrimonial en junio de 3.640 millones de euros, hasta los 219.280 millones, según los datos de Imantia (Inverco calcula 3.118 millones de caída, hasta los 216.817 millones). El efecto mercado explica un 65% de esa cifra (la rentabilidad el mes fue del -1,01%), mientras los inversores retiraron 1.280 millones de euros en términos netos y son responsables de un 35% del retroceso del sector. Sin embargo, las cifras de Inverco muestran solo 8 millones de euros de reembolsos netos en junio.
Lo ocurrido hace que el balance del primer semestre del año sea negativo para los fondos: de enero a junio, la caída es de 2.940 millones de euros, de un 1,3%, debido al efecto mercado (los fondos pierden un 1,22% en rentabilidad, mientras las suscripciones se mantienen positivas, en 60 millones, según Imantia. Para Inverco, las suscripciones de enero a junio son de 1.565 millones de euros). Según Imantia, el patrimonio de los fondos se encuentra encallado, desde marzo del año pasado, en un rango entre los 215.000 y los 225.000 millones de euros del que no logra escapar.
El triunfo de los conservadores
En este contexto, los fondos más conservadores lo hacen mejor: en el semestre, los fondos de renta fija ven crecer su patrimonio en 5.130 millones de euros frente a las caídas de 8.720 millones en productos con componente de riesgo, según los datos de Imantia. Y lo mismo pasa con junio, debido al efecto del Brexit: los fondos de renta variable sufren caídas de más de 2.000 millones de euros en el mes, frente a los 220 millones de los fondos de renta fija, que cuentan además con el soporte del programa de compras del BCE.
Toda esta situación también afecta al apetito de los inversores hacia el riesgo: en junio, los partícipes solo entraron en fondos garantizados (850 millones), de rentabilidad objetivo (320 millones) y monetarios (120 millones) y salieron con fuerza de fondos de bolsa (retiraron 620 millones), y mixtos (920 millones). Fondos que han actuado como refugio en este contexto son dos fondos de renta variable (AZValor Internacional y Kutxabank Bolsa EE.UU.) y un fondo de fondos mixto de renta fija, Caixabank Cartera Renta Activa, poniendo una nota de color al conservadurismo inversor.
En lo que va de año, el apetito por los fondos más conservadores es una dinámica que se mantiene: de enero a junio, los inversores han invertido su capital en fondos de renta fija a corto plazo (3.160 millones), monetarios (910 millones), de renta fija duración (840 millones), garantizados (740 millones) y de rentabilidad objetivo (220 millones), y han retirado dinero de fondos de renta variable (1.620 millones) y mixtos (3.830 millones).
Pérdidas entre las grandes gestoras
Las grandes gestoras también han sufrido el desconcierto de los mercados tras el anuncio del “sí” de Gran Bretaña al Brexit. Las diez mayores entidades pierden en junio 3.080 millones de euros, un 84% del retroceso total de la industria, frente al 77,8% de cuota de mercado que representan. Las gestoras más afectadas en términos porcentuales han sido la de Banco Sabadell, con un retroceso del 7,7%; seguida por la de Allianz Popular, que pierde un 2,8% y BBVA AM, con un 2,6%.
La nota positiva en el top 10 está en la gestora de Ibercaja, que logra sumar 50 millones de euros en el mes frente a la caída media del top ten de 310 millones de euros. La gestora de Zaragoza consigue crecer en fondos de renta fija, lo que permite compensar las leves caídas en garantizados y riesgo. En esta línea, La Caixa, a pesar de perder 620 millones de euros en productos de riesgo (consecuencia de las caídas de los mercados), logra compensarlo al crecer otros 620 millones de euros entre fondos de rentabilidad objetivo y monetarios.
Así, 20 de las más de 80 gestoras nacionales registradas cierran junio en positivo, siendo la mitad de ellas pequeñas entidades con menos de 100 millones de euros bajo gestión.
Según los datos de Inverco, en junio también disminuyó el número de partícipes, en 3.563.
Foto: RonKiluchi, Flickr, Creative Commons. AXA IM lanza el primer fondo de bonos ligados a la inflación de corta duración en España
AXA IM ha anunciado el lanzamiento del fondo AXA World Funds Global Inflation Short Duration Bonds, un producto que pretende atenuar el efecto de la inflación y el riesgo de tipos de interés a través de una estrategia diversificada y líquida y que a partir de ahora estará disponible también para los inversores en España. Se trata de la primera estrategia con estas características que se lanza en nuestro país.
El gestor adopta un enfoque similar al del fondo estrella de la compañía en esta clase de activo, el AXA WF Global Inflation Bonds, pero con una duración corta (entre 0 y 5 años). Históricamente, la rentabilidad de los bonos globales ligados a la inflación de corta duración ha sido similar a la de la inflación, por lo que el gestor aplicará un enfoque de duración más corta para intentar mantener una elevada correlación entre el retorno total y la inflación efectiva en un entorno de tipos de interés bajos. Los bonos de corta duración también son menos sensibles a las variaciones de los tipos de interés, lo que podría traducirse en menos volatilidad que el conjunto del mercado.
“Los bonos ligados a la inflación de corta duración pueden ayudar a los inversores a afrontar la inflación con menos riesgo de tipos de interés que los bonos con mayor duración, ya que suelen seguir muy de cerca la evolución de la inflación”, señala Jonathan Baltora, gestor del AXA WF Global Inflation Short Duration Bonds. Este experto añade que “un rasgo del mercado de bonos ligados a la inflación es que la inflación que se paga a los inversores es la misma para todos los bonos en la curva; así pues, los inversores que buscan una protección explícita contra la inflación no necesitan estar expuestos a todos los vencimientos”.
El primer fondo ligado a la inflación de corta duración en España
En cuanto a cómo encaja esta estrategia en las carteras españolas, Beatriz Barros de Lis, directora general de AXA IM para España comenta: “Desde hace tiempo venimos notando un creciente apetito por parte del inversor español por este tipo de activo. Este vehículo tiene todo el sentido ya que permite acceder a un activo clave que cubre una necesidad básica de las carteras en el largo plazo: protegerlas ante la inflación”.
Por tanto, este fondo, continúa explicando Barros de Lis, “puede ayudar a los inversores españoles a cubrirse ante los efectos de las políticas expansivas de los bancos centrales y al mismo tiempo, protegerse del riesgo de subidas de tipos, riesgo especialmente relevante en los bonos ligados a la inflación dada la alta duración de los índices. Al no existir productos similares en nuestro mercado, se trata de una estrategia única en su categoría y esperamos que despierte el interés de los inversores”.
Según Jonathan Baltora, los bonos de corta duración “también pueden ser más baratos que los bonos ligados a la inflación de mayor duración. En estos tiempos inciertos, los inversores que compren bonos ligados a la inflación de corta duración estarán renunciando a un porcentaje menor de rendimiento gracias al aplanamiento de la curva de los rendimientos reales, que fue especialmente evidente después del reciente referéndum británico sobre la UE”.
“Las expectativas de inflación a largo plazo suelen asentarlas los bancos centrales, de ahí que las fluctuaciones a corto plazo puedan crear oportunidades de compra. Del mismo modo, el extremo largo del mercado podría considerarse como un segmento más masificado debido a la demanda de los fondos de pensiones que buscan bonos indexados con vencimientos largos para cubrir pasivos, lo que de nuevo crea oportunidades de compra en los bonos indexados a la inflación de corta duración”, añade.
El AXA WF Global Inflation Short Duration Bonds es un fondo de inversión domiciliado en Luxemburgo (sicav). Jonathan contará con el apoyo de Marion Le Mordhedec, gestora del fondo AXA WF Universal Inflation Bonds. El fondo cuenta con clases de acciones para inversores particulares e institucionales y está registrado para su distribución en Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Finlandia, Italia, Noruega, Países Bajos, Reino Unido y Suecia. También estará disponible próximamente en Suiza.
AXA IM posee quince años de experiencia gestionando estrategias de corta duración y cuenta con más de 24 000 millones de euros gestionados en activos de corta duración de todo el mundo. El equipo de inflación está avalado por 25 años de experiencia gestionando estrategias internacionales de inflación y cuenta con más de 17.900 millones de euros gestionados en activos ligados a la inflación de todo el mundo.
. UBP refuerza su equipo de convertibles con Cristina Jarrin
Union Bancaire Privée (UBP) ha anunciado la incorporación de Cristina Jarrin como gestora de cartera senior del equipo de bonos convertibles dirigido por Jean-Edouard Reymond desde París, donde se encuentra el equipo experto de UBP dedicado a esta clase de activos.
Cristina Jarrin, que cuenta con un MBA cursado en HEC París, comenzó su carrera en Citigroup en 1998 como analista de riesgo y más tarde ocupó el puesto de analista financiera senior. En 2005 se incorporó a BNP Paribas Investment Partners (Fortis Investments) como especialista de producto en bonos convertibles y posteriormente fue gestora del fondo de bonos convertibles a nivel global. Cinco años más tarde, en 2010, aceptó el puesto de responsable de carteras convertibles mundiales en Edmond de Rothschild Asset Management (EDRAM).
En el marco de sus funciones en UBP, Cristina Jarrin se centrará concretamente en las carteras de bonos convertibles mundiales. Su incorporación se produce tras la llegada al equipo de Benjamin-François Barretaud, gestor junior, y de Rui Lopes, desarrollador de software.
Jean-Edouard Reymond, responsable de la gestión de bonos convertibles de UBP declaró: «Desde hace ya tiempo, los bonos convertibles han demostrado que son capaces de mejorar sustancialmente el perfil de rendimiento ajustado al riesgo de las clases de activos tradicionales. En un entorno de mercado en el que reina la incertidumbre y que se caracteriza por una elevada volatilidad, la convexidad de los convertibles constituye en nuestra opinión una baza nada desdeñable. La incorporación de Cristina Jarrin es un reflejo de la voluntad del banco de seguir invirtiendo en esta clase de activos con el fin de mantener la posición líder de UBP a escala europea».
CC-BY-SA-2.0, Flickr. Vontobel estrecha su colaboración con Raiffeisen y adquiere su filial de gestión de activos Vescore Ltd
Raiffeisen y Vontobel han redifinido su asociación en el área de gestión de activos y reforzado su colaboración. Raiffeisen se centrará en el servicio y asesoramiento de clientes en el negocio de la inversión y continuará con su expansión en esta materia. En el marco de esta colaboración, Vontobel se concentrará en el desarrollo y gestión los activos seleccionados por el Grupo Raiffeisen.
Como parte del acuerdo, Vontobel adquirirá la filial de gestión de activos Vescore Ltd, que complementará el modelo de boutique internacional de Vontobel Asset Management. El acuerdo permitirá expandir las capacidades de inversión ya existentes, sobre todo, en áreas de inversión sostenible e inversión cuantitativa.
Asimismo, Vontobel Asset Management fortalecerá su presencia integral en el mercado local suizo, asi como en el negocio institucional centrado en el mercado alemán.
Está sólida asociación en el área de gestión de activos se basa en la continua colaboración entre Raiffeisen y Vontobel, que alcanzaron un acuerdo el 9 de febrero de 2016, que estará vigente hasta finales de 2020, e incluso puede extenderse más allá de esta fecha.
“El modelo de colaboración orientado al cliente representa un importante paso estratégico para nosotros y apoya la intención de Raiffeisen de que ofrezcamos a nuestros clientes asesoramiento, servicios y oferta de productos de primer nivel. Al introducir nuevos conceptos de distribución y tecnologías digitales, estamos creando la base de nuestro futuro crecimiento en el negocio de la inversión. Con Vontobel como nuestro socio, estamos muy bien posicionados en gestión de activos y podemos dar una respuesta óptima a las necesidades de nuestros clientes. La colaboración abarca una parte importante de la estrategia de diversificación que estamos impulsando”, declaró Patrick Gisel, CEO de Raiffeisen Switzerland.
Por su parte, Zeno Staub, CEO de Vontobel, añadió: “La solidez de nuestra colaboración en el negocio de gestión de activos de ambas compañías, con una clara división de los roles, es el paso correcto hacia delante. Esta fuerte asociación proporcionará beneficios adicionales para los clientes de Raiffeisen y Vontobel. Estamos encantados de tener la oportunidad de dar a Raiffeisen un apoyo aún mayor en el crecimiento planificado de este negocio de inversión a través de nuestra oferta y servicios de gestión de activos. Con la adquisición de Vescore Ltd, estamos impulsando nuestra estrategia de crecimiento cuidadosamente diseñada en nuestros mercados objetivo”.
CC-BY-SA-2.0, Flickr. Europa en la encrucijada: la inversión después del Brexit
Varios días después del Brexit, que nos pilló por sorpresa a la mayoría, creemos que hay dos preguntas fundamentales para los inversores:
¿Serán capaces los responsables políticos de estabilizar a corto plazo la violenta y negativa reacción que han tenido los mercados?
¿Qué va a ocurrir con la integración europea y con la Unión Europea, tal y como la conocemos hoy en día, a medio y largo plazo?
No cabe duda de que el Brexit abre un nuevo periodo de incertidumbre en torno al futuro de la Unión Europea en su concepción inicial, pero aún resulta extremadamente difícil predecir cuál va a ser el camino que los líderes europeos van a seguir para reparar el daño que ya se le ha hecho a la UE (y que se materializa en la nueva posibilidad de que el proyecto de la integración europea pueda resultar reversible).
En lo que respecta a la primera de las preguntas, la opinión más generalizada es que un largo proceso de salida del Reino Unido podría desencadenar un difícil periodo de dos o más años de negociaciones entre Bruselas y el próximo dirigente del gobierno británico. Este escenario podría aumentar la posibilidad de recesión tanto en Europa como en el Reino Unido. De hecho, la incertidumbre que rodea a las futuras relaciones comerciales del Reino Unido podría afectar a la actividad económica, reducir la inversión y dañar la confianza de los consumidores. La devaluación de la libra podría continuar, ya que la incertidumbre podría provocar una interrupción del flujo de capitales y, en última instancia, una ralentización del crecimiento
La pregunta es: ¿estamos ante una situación de envergadura similar a la quiebra de Lehman Brothers? No pensamos que sea el caso, por una simple razón: el nivel de apalancamiento. En el año 2008, el sector privado había acumulado un nivel ingente de apalancamiento, basándose en la premisa (que más tarde resultó ser falsa) de diversificación de riesgos entre innumerables productos estructurados. Después de la quiebra de Lehman Brothers, se produjo una caótica liquidación de posiciones que provocó la caída del sistema financiero global. En el proyecto de integración europea no ha ocurrido nunca nada así; en todo caso, la exposición a los activos europeos se ha basado en el supuesto de que el euro, en su calidad de divisa común, va a contar siempre con el respaldo del BCE, sobre todo tras el famoso discurso de Mario Draghi, en el que se comprometió a hacer todo lo necesario para salvar la divisa.
Así que la verdadera cuestión es si los mercados financieros, en un entorno de aversión al riesgo como el actual, seguirán contando con el respaldo de los bancos centrales y si los inversores van a seguir confiando en ello. En nuestra opinión, los bancos centrales que han puesto en marcha programas de expansión cuantitativa, como es el caso del BCE, podrían introducir ajustes en dichos programas, mientras que los que han comenzado a normalizar su política monetaria, como es el caso de la Reserva Federal, podrían retrasar sus próximas subidas de tipos de interés.
En otras palabras, es posible que se sigan manteniendo unos tipos de interés negativos o cercanos al cero y que se continúen realizando inyecciones masivas de efectivo a través de la compra de activos financieros.
No obstante, también es posible que los mercados comiencen a cuestionar la eficacia de nuevas medidas de política monetaria, lo que pondría en entredicho la credibilidad de los bancos centrales. Por otro lado, la situación de estancamiento político podría obstaculizar la articulación y aplicación de políticas fiscales eficaces y de los estímulos que necesita la inversión privada en el sector de la economía «real».
Es importante señalar que las políticas que se pusieron en marcha en los años posteriores a la crisis financiera global, aunque resultaron absolutamente necesarias para garantizar el funcionamiento del sistema financiero en el momento inmediatamente posterior a la crisis, han terminado por contribuir a la actual distorsión de la liquidez y las valoraciones en los principales segmentos de los mercados financieros (deuda pública, crédito). Además, han generado nuevas fisuras en las tendencias a largo plazo relativas a la desigualdad en la distribución de la riqueza y a la debilidad del crecimiento económico, que presenta unos datos decepcionantes en materia de empleo; algo que dura ya muchos años y ante lo que empiezan a rebelarse los ciudadanos, no solo en el Reino Unido, sino también en el resto de Europa y Estados Unidos.
El voto a favor del Brexit es más bien un voto contra la exclusión (de las ventajas de la globalización, la financiarización1 de la economía, etc.) que un voto en contra de Europa propiamente dicha.
Desde este punto de vista, la segunda pregunta, que cuestiona el futuro a largo plazo del proyecto de integración europea, no se refiere a los mecanismos institucionales de entrada y salida de Europa. Nos enfrentamos más bien a una cuestión de carácter más existencial sobre las ventajas, en términos económicos y de bienestar social, que obtienen los ciudadanos europeos de una Europa más (o menos, depende de las circunstancias) unida. Esta es la pregunta a la que van a tener que responder en los próximos años los líderes y los ciudadanos europeos, que deberán replantearse cuál es la «razón de ser» de la integración europea, y qué políticas deberán aplicarse en el ámbito económico, sociales y de seguridad (tanto interna como externamente).
No es nuestra intención responder a esta pregunta en estas páginas. Simplemente nos limitamos a señalar que Europa se encuentra actualmente en un punto de inflexión histórico y que, en nuestra opinión, son dos los posibles, aunque opuestos, resultados.
El primero llevaría a una mayor fragmentación de la UE, que acabaría con el mercado de libre comercio y también con el proyecto a largo plazo de unión política. El segundo apuntaría a la aplicación de nuevas medidas destinadas a una mayor integración política, más allá de la integración puramente económica y monetaria. Hasta que no pasen unos meses no sabremos cuál de los dos caminos va a tomar Europa.
En lo que respecta a las consecuencias del Brexit en el sector de la inversión, a corto plazo los líderes políticos (no solo en Europa) han de hacer frente al creciente descontento de su electorado, en el que encuentran sus raíces no solo el aumento del sentimiento antieuropeísta, sino también el auge del populismo, del sentimiento de rechazo ante la inmigración, etc.
Giordano Lombardo es consejero delegado y director de inversiones de Pioneer Investments
Alfonso de Gregorio es el director de Gestión de Gesconsult.. Gesconsult: "En renta variable española, nos mantenemos fuera de valores con negocios en Reino Unido"
Gesconsult, gestora de fondos española especializada en gestión activa flexible del mercado español y europeo, ha dado a conocer esta mañana sus perspectivas económicas y de inversión para la segunda mitad del año. Según la entidad, la volatilidad continuará amenazando los mercados en el segundo semestre del año. En este sentido, la firma, que destaca por su flexibilidad en la gestión, apuesta por la gestión activa como respuesta para proteger las inversiones sin perder oportunidades. Además, afirma que el enfoque a largo plazo, la flexibilidad y un adecuado control de los riesgos serán los elementos clave que podrían ayudar a los inversores a conseguir buenos resultados en los próximos meses.
Según Alfonso de Gregorio, director de gestión de Gesconsult, que comenta su posicionamiento en bolsa española, “ya que cuantificar el impacto del Brexit en la economía es bastante difícil, nos mantenemos fuera de valores con negocios en Reino Unido (Santander, Telefónica, Ferrovial, Vidrala, IAG, etc.). Seguiremos con una gestión muy activa de la exposición a renta variable y estamos aprovechando las caídas indiscriminadas para buscar oportunidades para el medio plazo”.
Por su parte, David Ardura, subdirector de gestión, desveló que “el mercado de renta fija en Europa va a estar muy condicionado por la actuación del BCE, lo que nos ha llevado a unos tipos artificialmente bajos. En Estados Unidos, el Brexit y un mal dato de empleo retrasan las subidas de tipos. La Fed puede seguir manteniendo una política monetaria laxa como consecuencia del clima de inestabilidad internacional, pero los datos de crecimiento (con excepción del último dato de paro), siguen mostrando un repunte de la actividad, que se está traduciendo en un incremento de la inflación. Vemos así que los riesgos cada vez más se encuentran en la subida de tipos de interés”.
Lola Jaquotot, gestora de renta variable europea, destacó que a pesar del Brexit, el crecimiento económico en la Zona Euro seguirá estando impulsado por el consumo, siendo España y Francia los que más contribuyen a ello. “Por ello, estamos positivos en consumo (Essilor, Amplifon, Publicis, TFI, Telecinco), en compañías industriales generadoras de caja y con endeudamiento bajo (Europac, Ence, Altri, Miquel y Costas, Covestro, etc.) y en compañías de alta rentabilidad por dividendo con alta generación de caja que aseguran que la rentabilidad por dividendo sea sostenible (KPN, Ren, Enel, entre otras)”.
Como principal conclusión, los expertos aseguraron que seguirán de cerca los próximos eventos que causarán volatilidad en los mercados, la formación de gobierno en España, las próximas elecciones en EE.UU., el referéndum de reforma constitucional de Italia, las negociaciones de salida del Reino Unido y el riesgo de contagio en el resto de la UE, o las próximas subidas de tipos de interés, entre otros factores.
A pesar de todo, aseguran que existen oportunidades de inversión que intentarán aprovechar. Lo harán desde la tranquilidad y aislándose de la volatilidad que esperan vivan los mercados en los próximos meses. Además, recomiendan la gestión activa y flexible para identificar las oportunidades de inversión.
Acabamos de atravesar unos cuantos años pésimos para la relación entre los datos económicos y los mercados financieros. Ya fueran datos fuertes o débiles, los mercados prácticamente los han ignorado. Toda la preocupación del mercado parece centrarse en lo que van a hacer los bancos centrales. Pero, al menos, los datos económicos ya tienen con quien compartir sus miserias: el mercado también ha empezado a ignorar los eventos geopolíticos.
El voto del Reino Unido para salir de la UE fue visto como una mala noticia para el mercado, y al igual que con otros acontecimientos negativos, el mercado espera que los bancos centrales intervengan con más estímulos monetarios para hacer que todo el mundo se sientan mejor. Por lo tanto, la tesis empieza a ser que si el resultado de un evento geopolítico es positivo, entonces los activos de riesgo repuntan, y si el resultado es negativo, los bancos centrales compensarán cualquier desventaja para los activos de riesgo. Cara, ganan. Cruz, no pierden.
Hacia el final del año pasado el mercado había estado esperando que el Banco de Inglaterra (BOE) subiera los tipos de interés al menos en 2016, y que luego procediera con alrededor de un alza anual. Cuando las preocupaciones sobre la economía mundial empeoraron a principios del año, se redujeron las probabilidades de que hubiera subidas de los tipos. Pero en febrero, cuando se anunció la fecha del referéndum, el mercado decidió que muy probablemente la política monetaria permanecería sin cambios al menos hasta dentro de tres años. Tras la sorpresa del resultado, el mercado está valorando en serio que se produzca este año un recorte de los tipos de interés por parte del BoE. Probablemente la única razón por la que el mercado no está valorando más recortes se debe a que el Banco de Inglaterra es reacio a imponer las tasas a cero o negativas. Pero aún podría haber una ampliación de los programas de flexibilización cuantitativa.
Y es que este es un shock específico de Reino Unido y en ausencia de una política fiscal, se entiende que es el BOE el que tiene que lidiar con el. Pero el mercado también ha decidido que la Reserva Federal va a frenar el ritmo durante un par de años también. La Fed ha estado adoptando un tono más pesimista en los últimos tiempos, pero aún hay una caída sustancial en las expectativas de tipos tras el resultado del referéndum Reino Unido.
Este impacto sobre la Reserva Federal parece un poco sorprendente. Los flujos comerciales entre el Reino Unido y EE.UU. es significativo, pero apenas es suficientemente grande con para afectar a la política de la Fed. La libra ha caído mucho frente al dólar, pero el índice general de la fortaleza del USD ha cambiado muy poco. Esto solo deja como opción los canales de contagio financiero, pero en todo caso la reacción del mercado ha sido mucho más moderada de lo que casi nadie esperaba de antemano. La relación entre los mercados financieros del Reino Unido y la necesidad de la Fed de esperar en su subida de tipos de interés parece ser algo inconsistente.
El impacto en el mercado de divisas no es sólo importante para los ingresos, también es importante para los compradores extranjeros. Si usted invierte fuera del Reino Unido, entonces al FTSE no le afecta cuál es el valor de la libra, pero si se preocupa por el valor de su moneda. Así que los recortes de tipos de interés del Banco de Inglaterra le ayudan menos dado que esa rebaja de tipos hace caer la divisa. Incluso si las posiciones están en su mayoría cubiertas, el comprador marginal mirará el FTSE y decidirá si vale la pena comprar. Por ejemplo, en una base de dólar, el FTSE 100 y FTSE 250 han caído considerablemente y no se han recuperado. En otras palabras, los inversores extranjeros no se sienten atraídos por comprar renta variable británica a pesar del hecho de que ahora es más barato para ellos.
En el resto de la UE, muchos en el mercado esperaba una reacción de aversión al riesgo bastante dura en la zona euro. Efectivamente, el día después del referéndum, en Italia y en España la deuda pública cayó 20 puntos básicos y Alemania repuntó más o menos en la misma cantidad. Pero poco después de España comenzó a subir (su elecciones tuvieron un resultado relativamente favorable al mercado) e incluso Italia se recuperó. Ahora España cotiza más ajustada a Alemania que antes del referéndum de Reino Unido, y lo mismo sucede en Italia, aunque a un ritmo absoluto menor.
El mercado parece indiferente a las consecuencias para el resto de la zona euro de la salida de Reino Unido. Una vez más, existe la expectativa de que el banco central intervenga para hacer el proceso más fácil. Pero al Banco Central Europeo le está resultando cada vez más difícil llevar a la práctica su política monetaria (en gran parte debido a sus propias reglas), por lo que planteamiento podría llegar a ser demasiado optimista.
En un mundo globalizado, la interdependencia de las principales economías y sus bancos centrales es a la vez fuerte y complicada. Pero si hay algo que parece que el mercado puede estar esperando demasiado es un impacto en EE.UU., y muy poco en el resto de la UE.
Joshua McCallum es responsable del equipo de economistas de renta fija de UBS AM.