Foto cedidaGwenola Chambon, consejera delegada de Vauban Infrastructure Partners.
. Natixis IM crea Vauban Infrastructure Partners, una gestora especializada en inversiones en infraestructuras
Natixis IM fortalece sus capacidades en inversiones alternativas con la creación de Vauban Infraestructure Partners, una nueva gestora especializada en infraestructuras. La firma, que se suma a la familia de afiliadas a Natixis IM, se crea con la parte del actual equipo de Mirova especializado en este tipo de activos.
Según destacan desde Natixis IM, desde sus inicios, el equipo de Mirova ha estado “a la vanguardia” en este tipo de inversiones. Actualmente, el equipo gestiona activos por valor de 2.800 millones de euros, lo que da sentido a que se haya creado la nueva filial especializada. Entre sus objetivos prioritarios se encuentra el crecer como marca internacional y como gestora independiente dentro del paraguas de Natixis IM.
Vauban Infrastructure Partners estará dirigida por Gwenola Chambon, quien será nombrada consejera delegada próximamente, y Mounir Corm, quien ocupará el cargo de director general adjunto. Ambos son socios fundadores y dirigirán un equipo de 35 profesionales. En los últimos 10 años, este equipo ha gestionado con éxito cinco estrategias de infraestructuras y ha invertido en más de 50 clases de activos en toda Europa.
La gestora ha explicado que el nuevo equipo de Vauban Infrastructure Partners continuará especializándose en estructurar y gestionar fondos de renta variable (incluidos los que ya tienen) dedicados a invertir en activos de infraestructuras sostenibles globales enfocándose en transporte, utilites, infraestructuras digitales y sectores con infraestructuras sociales. La nueva firma se dirigirá a inversores institucionales –incluido planes de pensiones, compañías de seguros, instituciones financieras y family offices– de Europa y Asia. Además, Vauban Infrastructure Partners afrontará sus inversiones con una visión de sostenibilidad a largo plazo e incluirá los criterios ESG, que consideran determinante en el desempeño de sus inversiones a largo plazo.
A raíz del lanzamiento, Gwenola Chambon, consejera delegada de Vauban Infrastructure Partners, descató: «Nos complace convertirnos en una filial de Natixis IM, una de las principales gestoras de activos en el mundo. La creación de Vauban Infrastructure Partners es un paso natural en nuestro desarrollo y nos ayudará a lograr un mayor crecimiento en un mercado donde el tamaño es importante. Queremos continuar con nuestras estrategias de mid-market enfocadas en Europa, pero también queremos explorar más a fondo la expansión internacional».
Por su parte, Mounir Corm, director ejecutivo adjunto de Vauban Infrastructure Partners, añadió que la misión de la firma será “continuar brindando un valor sostenible a largo plazo a todos nuestros accionistas, incluidos inversores, comunidades locales, entidades públicas, empleados y socios industriales, con la más alta calidad de servicio. El objetivo es duplicar nuestros activos bajo gestión en los próximos años, aprovechando nuestro historial en la entrega de valor a largo plazo en inversiones en infraestructura para nuestros clientes «.
La familia de Natixis IM
Según ha explicado Natixis IM, esta nueva afiliada supone un paso más en el desarrollo de su negocio de real asset y activos alternativos. “Vauban Infrastructure Partners es una gran contribución a nuestra gama de activos alternativos y real asset. En un momento en el que la inversión en infraestructura está creciendo significamente, el lanzamiento permitirá a lo inversores globales acceder con mayor facilidad a la inversión en infraestructuras apoyándose en un casa de inversiones con una gran experiencia”, ha señalado Jean Raby, consejero delegado de Natixis Investment Managers.
Entre los últimos movimientos corporativos de Natixis IM destaca el lanzamiento de Flexstone Partners, un gestora de private equity global, en diciembre de 2018; la adquisición MV Credit, especialista en deuda privada, en junio de 2018; y el lanzamiento de una oferta de coinversión, para deuda privada de bienes raíces, infraestructura y aviación, entre su filial Ostrum Asset Management y la división de Banca Corporativa y de Inversiones de Natixis, en mayo de 2018.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Roger Mosley. Dos trimestres de turbulencias: qué indican sobre los mercados el desplome prenavideño y el repunte de principios de año (parte I)
Los índices de renta variable mundiales se derrumbaron en el cuarto trimestre del año pasado, para luego registrar una fuerte recuperación, al volver a ganar prácticamente todo el terreno perdido. Este giro extraordinario podría parecer irracional, pero indica un panorama coherente con la fragilidad de la confianza de los inversores al adentrarnos en el fin de este ciclo económico y acercarse las elecciones estadounidenses de 2020.
En tan solo seis meses —desde el pasado octubre hasta finales de marzo—, ha sucedido algo notable en los mercados mundiales. Tras tocar techo el 21 de septiembre de 2018, en el equinoccio de otoño, fue como si las estaciones cambiaran de golpe y llegara el invierno.
A medida que avanzaba el cuarto trimestre, se produjo una fuerte espiral de ventas durante la cual los principales mercados de renta variable experimentaron una caída de en torno a un 17%, tocando fondo finalmente en Nochebuena en Estados Unidos (el día de Navidad en Asia).
A continuación, tras perder todas las ganancias conseguidas en 2018 y aún más, dejaron atrás el abrazo polar del miedo: entre finales de diciembre y el equinoccio de primavera del 21 de marzo, los mercados mundiales dieron un giro, con unas avances del 18%. Había llegado la primavera.
¿Por qué este temor repentino de los mercados?
Y si sus inquietudes aparentes sobre la economía mundial estaban justificadas, ¿a qué se debe esa súbita recuperación del apetito por el riesgo? ¿Fue el descalabro del cuarto trimestre una aberración? ¿O tal vez el rebote posterior señala una despreocupación peligrosa sobre los peligros a los que se enfrentan los inversores en el resto del año y el próximo?
Mi respuesta a ambas preguntas es «no». Puede que la intensidad de la espiral de ventas del cuarto trimestre fuera inesperada, pero tiene una explicación, dado el contexto y algunos de los datos que se publicaban. También creo que el repunte de principios de año es justificable, aunque me sorprendió su magnitud. Tanto la espiral de ventas como el repunte supusieron una reacción a una serie de riesgos geopolíticos que cambiaban rápidamente —especialmente las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China– y que los inversores cada vez encuentran más difícil de predecir e integrar en los precios.
Dada la fragilidad de la confianza y la rapidez con la que a veces se suceden los acontecimientos, puede que los mercados oscilaran más bruscamente de lo normal, si bien sus reacciones no eran irracionales. El contexto a largo plazo cobra crucial importancia en este sentido. La expansión mundial actual y la correspondiente trayectoria alcista del mercado de renta variable son maduras en términos históricos. Como es de esperar, aumentan los temores de que el mundo se esté acercando al bajón que señalará el fin de este ciclo.
No es de extrañar que los inversores estén muy atentos a los signos de recesión: el crecimiento económico nominal se ha situado en el 3% – 4% anual en Estados Unidos y el 4%-5% a escala mundial durante gran parte de la década desde que el S&P 500 marcó mínimos en marzo de 2009, a lo que se sumó una inflación muy moderada. Sus inquietudes sin duda se intensificaron después de que el ritmo de crecimiento siguiera repuntando en 2017 y el año pasado.
No obstante, esta expansión de larga duración ha incluido varios miniciclos, durante los cuales algunos indicadores adelantados, como los índices de gestores de compras, han oscilado de unos niveles muy altos de más de 60 hasta en torno a 55 en el mundo occidental. Cada vez que los mercados iniciaban la fase bajista de uno de estos miniciclos, los inversores temían que denotara una recesión en toda regla. Este patrón volvió a repetirse a finales del año pasado.
Líderes firmes y tensiones comerciales
Dos factores principales provocaron la gran espiral de ventas de los últimos tres meses del año pasado. El primero fue un nuevo panorama político. En los últimos años, una serie de líderes nacionalistas ha llegado al poder en varias grandes economías de todo el mundo y adoptado un planteamiento más duro hacia las relaciones internacionales. Tal vez, los republicanos estadounidenses hayan perdido el control del Congreso, pero el presidente Trump sigue siendo una figura dominante e imprevisible.
En China, Xi Jinping ha consolidado su control sobre el gobierno y eliminado las limitaciones temporales de su cargo. En otros países, Narendra Modi en la India, Recep Tayyip Erdogan en Turquía, Jair Bolsonaro en Brasil, Shinzo Abe en Japón y el príncipe heredero Mohamed bin Salmán en Arabia Saudita son todos líderes más firmes y nacionalistas que sus antecesores, mientras que algunos personajes heterodoxos como Vladimir Putin y Kim Jong Un ejercen una influencia internacional considerable.
Por consiguiente, el mundo se ha adentrado en una fase en que un obstinado presidente estadounidense está dispuesto a discutir con contundencia que deben renegociarse las relaciones de su país con el resto del mundo, pero tiene que hacer valer sus pretensiones ante unos líderes cada vez más firmes y populistas de otros países. No se trata de un contexto propicio para la calma y la estabilidad en los mercados mundiales.
Si consideramos este riesgo potencial para la estabilidad junto con el segundo gran problema que dominó los últimos meses de 2018 —el deterioro de la relación comercial entre las dos principales economías mundiales, Estados Unidos y China—, resulta fácil ver por qué los mercados empezaron a temer cada vez más la posibilidad de una brusca desaceleración.
Una alteración importante de los flujos comerciales mundiales y una ralentización del proceso de globalización que dura desde hace décadas reduciría inevitablemente la actividad económica, la rentabilidad empresarial y la inversión; eso provocó la fuerte corrección sincronizada de las bolsas mundiales.
Y ahí es donde el escenario del Brexit se torna especialmente relevante. El Reino Unido, una economía abierta y conectada internacionalmente, está muy integrado en numerosas cadenas de suministro transfronterizas utilizadas para los flujos comerciales. No obstante, si los cambios geopolíticos implican que ya no podemos estar seguros de si esas cadenas de suministro seguirán funcionando como antes, las empresas no saben dónde deberían invertir.
Por consiguiente, muchas aplazan sus decisiones o cancelan futuras inversiones de capital, lo que inevitablemente merma el crecimiento. En este contexto, resulta bastante posible que el riesgo de aranceles comerciales convierta una debilitación del crecimiento en una brusca desaceleración. Esta era la situación de los mercados a finales de noviembre.
Por fin, buenas noticias
En esos momentos, surgió la primera buena señal importante: Estados Unidos aplazó el aumento de los aranceles sobre importaciones chinas por 200.000 millones de dólares del 10% al 25% con el que habían amenazado. Esta moratoria de 90 días disipó el riesgo inmediato de más perturbaciones comerciales hasta finales de febrero, aliviando un motivo de nerviosismo importante para los mercados mundiales.
No obstante, los índices bursátiles siguieron cayendo, y sus pérdidas se aceleraron al acercarse las Navidades. En vez de deberse a las preocupaciones sobre el comercio, la espiral de ventas obedecía en esos momentos a unos endebles datos económicos, especialmente de Europa, cuyos exportadores, entre los que se incluyen Daimler y BMW, fueron de los primeros en alertar de que los aumentos de aranceles afectarían sus beneficios.
En Japón hubo algunas señales similares, por ejemplo, de empresas de robótica que exportan a China, cuyos pedidos registraron unas drásticas caídas. Al mismo tiempo, el aplanamiento de la curva de tipos del mercado de deuda pública estadounidense —a menudo considerado como un indicador adelantado de contracciones económicas— indicaba que llegaban unos tiempos difíciles.
Al aumentar las inquietudes sobre los datos económicos que se publicaban, los mercados recibieron su segunda señal positiva importante: tras hablar de nuevas alzas de tipos aún en el último trimestre de 2018, la Fed estadounidense reaccionó ante las perspectivas más débiles e indicó que ya no preveía subir los tipos en 2019.
Este cambio de postura, junto con el aplazamiento de los nuevos enfrentamientos comerciales, ayudó a impulsar el rebote de los índices bursátiles que se produjo a lo largo del primer trimestre. Por lo tanto, la notable trayectoria registrada por los mercados —con un retroceso de casi el 20% en un trimestre y luego una subida de la misma magnitud en el siguiente— puede atribuirse al entorno económico y geopolítico.
Lo que se interpretó por parte de algunos como los indicios tempranos de una contracción importante no se produjo y extendió como temían, y los acontecimientos del 4.º trimestre del año pasado ahora parecen más bien otro bache de mediados de ciclo seguido de un rebote. Dada la inestabilidad potencial que comportan unos líderes nacionales más duros, creo que ahora tendría que haber una mayor prima de riesgo en los mercados en general. Por consiguiente, me sorprende la fortaleza del repunte de los mercados mundiales, pero coincido en que tenían que subir con respecto a las Navidades porque las perspectivas no son tan nefastas como se temía.
Columna de William Davies, director de renta variable en Columbia Threadneedle.
Foto cedidaPramol Dhawan, gestor del fondo y responsable del equipo de gestión de carteras de los mercados emergentes.
. PIMCO lanza el fondo GIS Emerging Markets Opportunity
PIMCO presenta el fondo GIS Emerging Markets Opportunity Fund, una estrategia que adopta un enfoque de inversión flexible y que está centrada en un amplio abanico de títulos de renta fija emitidos por empresas o gobiernos vinculados económicamente con los mercados emergentes.
Según ha explicado la gestora, este fondo tiene como objetivo proporcionar ventajas en términos de diversificación, al tiempo que reduce la volatilidad y brinda a los inversores un flujo de rentabilidades más estable, a lo largo de un ciclo de mercado completo, en comparación con las estrategias de beta tradicionales de los mercados emergentes. El fondo está gestionado por Pramol Dhawan, Managing Director y responsable del equipo de gestión de carteras de los mercados emergentes.
La firma explica que ha creado este fondo con el fin de sacar partido de las oportunidades en los diferentes segmentos de los mercados emergentes, “por lo que podrá invertir en deuda denominada en moneda fuerte o local, títulos con calificación investment grade o inferior, así como en divisas de mercados emergentes”, explica.
A raíz de este lanzamiento, Pramol Dhawan ha señalado que “la deuda de los mercados emergentes es una clase de activos intrínsecamente ineficiente debido a factores como la ausencia de información completa, periodos de menor liquidez en el mercado y distorsiones de valor relativo. Tratamos de sacar partido de estas ineficiencias capturando la mayor parte del potencial alcista de la clase de activos, al tiempo que se limitan las pérdidas”
Por su parte, Ryan Blute, Managing Director de PIMCO y responsable de la gestión global de patrimonios en EMEA, añadió: “Consideramos que esta estrategia puede desempeñar una función importante en la cartera de un inversor en varios aspectos: como asignación central a los mercados emergentes, como complemento de la exposición a los mercados emergentes ya existente o como parte de la exposición crediticia general de una cartera mundial”.
La firma explica que, dependiendo de sus necesidades particulares, “los clientes podrán acceder al PIMCO GIS Emerging Markets Opportunity Fund a través de una variedad de clases de acciones denominadas en distintas divisas”. La gama de fondos Global Investor Series (GIS) de PIMCO, conforme con la normativa UCITS, está compuesta por 61 subfondos con activos gestionados por valor de 158.600 millones de dólares estadounidenses a 31 de marzo de 2019.
Foto cedidaAnu Narula, director del equipo de gestión de renta variable global de Mirabaud Asset Management y el gestor principal de los fondos Global Equity High Income y Global Equity Focus.. Anu Narula (Mirabaud): “Ante la guerra comercial, hay sectores interesantes para invertir”
Anu Narula, director del equipo de gestión de renta variable global de Mirabaud Asset Management y gestor principal de los fondos Global Equity High Income y Global Equity Focus, es uno de los mayores expertos en renta variable global. En una entrevista exclusiva concedida a Funds Society señala que la guerra comercial entre Estados Unidos y China es un tema relevante para los inversores y que, además, se sigue muy de cerca de cara a configurar las carteras.
Ante este contexto de guerra comercial Estados Unidos-China, ¿cómo está posicionando sus carteras?
Realizamos numerosos análisis antes de que Donald Trump alcanzara la presidencia. Su retórica es coherente con su visión y postulado sobre el comercio, y Estados Unidos no salía beneficiado por los acuerdos que se pretendían cerrar. Hemos de tener en cuenta que, en la guerra comercial y en términos de exportación, Estados Unidos aporta más a China de lo que China aporta a Estados Unidos, por lo que este último tendría todas las de ganar. Por otra parte, desde Mirabaud apostamos por la selección temática. Durante dos años mantuvimos la temática “Fin de la globalización” como criterio de selección, lo que implicaba preferencia por los márgenes de compañías nacionales frente a los que mostraban las grandes multinacionales. Cuando este criterio empezó a convertirse en un riesgo, decidimos dejar de invertir en compañías de sectores como, por ejemplo, automoción. Adicionalmente, hemos tenido que realizar análisis más exhaustivos de las cadenas de suministro para ver nuevas ideas de inversión y aproximaciones.
Estas tensiones comerciales puede ser un peligro para el crecimiento mundial, pero ¿está generando alguna oportunidad para las acciones?
En nuestra opinión, las compañías estadounidenses que más pueden beneficiarse de la situación y de las políticas proteccionistas, como las relacionadas con el acero o el aluminio, son demasiado cíclicas para invertir. Las compañías de electrodomésticos, por ejemplo. Sin embargo, sí contamos en la cartera con Union Pacific, que está transportando muchas de estas commodities en Estados Unidos por ferrocarril y es un líder con fuertes márgenes y flujos de efectivo. Es una compañía que, a modo de ejemplo, refleja algunos de los atributos que buscamos en una empresa.
Teniendo en cuenta que las acciones estadounidenses han sido uno de los activos clave de este año, ¿qué consecuencias tendrá este entorno para los activos de renta variable de EE. UU.
Habrá ganadores y perdedores. Entre estos últimos encontraremos, sobre todo, a compañías que confían en empresas chinas para obtener piezas o suministros, o aquellas otras que tienen un alto nivel de comercio con Estados Unidos, lo que les acarreará con poco margen de duda represalias de China. Entre las empresas que creemos que se beneficiarán, entrando en el grupo de ganadores, tenemos preferencia por compañías nacionales con cadena de suministro local. Un ejemplo muy ilustrativo de la situación es, por ejemplo, el sector de los cosméticos. Actualmente, tenemos Ultra Salón, de Estée Lauder. Un tercio de lo que la firma vende en China se produce en Estados Unidos, por lo que la compañía podría sufrir represalias por parte del país asiático
¿Cree que todo esto beneficiará a los mercados emergentes? En su opinión, ¿cuáles son los mercados más atractivos?
Dentro de los mercados emergentes, las principales compañías chinas se han visto afectadas, y, nuevamente, podemos identificar compañías ganadoras y compañías perdedoras. Las peor paradas son aquellas que han sido proveedoras de empresas estadounidenses, o que han despuntado sobremanera en el mercado nacional, como Huawei, con alta dependencia de la cadena de suministro desplegada en Estados Unidos. Otros países dentro de los mercados emergentes, como India, no se han visto afectados y, tras el resultado de las elecciones generales, esperamos que les vaya bien. Una de nuestras posiciones en la cartera es HDFC, especializado en sector inmobiliario y líder en el nicho hipotecario.
Otra de las tendencias de inversión que hemos visto en acciones es una mayor atención por parte de las empresas de pequeña y mediana capitalización, ¿son el nuevo activo estrella dentro de las acciones?
Siempre hemos tenido en cartera algunas empresas de pequeña y mediana capitalización conviviendo con otras de gran capitalización en el que más nos movemos. Son compañías a las que llamamos “ganadores del mañana” ya que tienen capacidad para duplicar o, incluso, triplicar su tamaño en tiempos relativamente controlados. Es verdad que nos gustan las grandes empresas, pero tenemos que analizar bien su futuro y realidad; y no podemos dejar de observar y aprovechar ciertas oportunidades en midcap porque pueden dar sorpresas muy positivas en cuanto a rentabilidad
¿Qué papel puede jugar España dentro de una cartera global de renta variable?
Buscamos líderes mundiales y si esos líderes mundiales están domiciliados en España, podrían encajar en nuestra cartera. Actualmente no tenemos nombres españoles, pero una empresa como Amadeus, por ejemplo, cumpliría con muchos de nuestros criterios de selección.
Foto cedidaBenjamin Melman, director global de gestión de activo de Edmond de Rothschild AM.. Benjamin Melman, nombrado director global de gestión de activos de Edmond de Rothschild AM
Edmond de Rothschild refuerza su negocio de gestión de activos con tres nuevos nombramientos. Según la firma, estos cambios se llevan a cabo para reforzar esta unidad y, al mismo tiempo, añadir capacidades clave. Además, sostiene que con ello, Edmond de Rothschild Asset Management demuestra que su compromiso con la promoción interna del talento.
Por un lado se trata de el nombramiento de Benjamin Melman, anteriormente director de asignación de activos y deuda soberana, como nuevo director global de gestión de activos. Desde este nuevo puesto estará al cargo de la supervisión de los equipos de gestión de activos en Edmond de Rothschild, además formará parte del Comité Ejecutivo de Gestión de Activos del Grupo. Melman se incorporó al Grupo Edmond de Rothschild en 2006 como jefe de asignación de activos, inversiones estructuradas y cuantitativas. En 2009, fue nombrado jefe de rentabilidad absoluta antes de convertirse en director de asignación de activos y deuda soberana en 2012, y en 2018 pasó a ocupar el cargo de director global de inversiones CIO Asset Allocation y Sovereign Debt.
Pero la promoción interna de Melman no es la única novedad que ha anunciado la compañía, sino que también ha realizado cambios en su plataforma de inversión organizada en cuatro divisiones asignación de activos y deuda soberana, renta variable, renta fija e ISR (Inversión Socialmente Responsable). De tal forma que Michaël Nizard se hará cargo de la unidad de asignación de activos y deuda soberana, Christophe Foliot y Jacques-Aurélien Marcireau de la división de renta variable, y Jean-Philippe Desmartin continuará al frente del equipo de ISR con un enfoque cross-funcional en todo el espectro de clases de activos gestionados. Por último, Alain Krief se une al Grupo Edmond de Rothschild Group para llevar la división de renta fija.
“De manera que, en su nuevo puesto, Alain Krief, pasará a llevar deuda corporativa y bonos convertibles a partir del 1 de julio. Su extensa experiencia, así como su excelente experiencia suponen una oportunidad clave para nuestra plataforma de gestión de inversiones”, explican desde Edmond de Rothschild AM.
La firma considera que esta propuesta combina la promoción de gestores de fondos altamente experimentados y expertos, que han demostrado su valor y calidad dentro del Grupo en los últimos tiempos, con un profesional externo ampliamente reconocido en el sector por su capacidad de inversión. “Estos cambios nos ayudarán a seguir desarrollando nuestro enfoque activo y de alta convicción en la gestión de carteras con el objetivo de crear valor a largo plazo y satisfacer las necesidades de nuestros inversores”, apuntan.
Por su parte, Christophe Caspar, consejero delegado global en Edmond de Rothschild Asset Management, apunta que “como una firma de Inversiones impulsada por la convicción, nos esforzamos por ofrecer a nuestros inversores soluciones transparentes y de alta rentabilidad que demuestren nuestra capacidad de innovación y diferenciación. Estoy seguro de que todos harán todo lo posible para alcanzar este ambicioso objetivo y quisiera felicitarlos a todos y desearle a Alain una cálida bienvenida”.
Pixabay CC0 Public Domain. Acceso a los datos: la clave para que las empresas incorporen la sostenibilidad a su estrategia de inversión
Con motivo de la celebración del Día del Medio Ambiente, Refinitiv presentó ayer su informe sobre qué están haciendo las empresas para reducir su impacto en el medio ambiente. El documento, que ha sido elaborado a partir de los datos de su herramienta sobre inversión socialmente responsable ESG. pone en evidencia la creciente necesidad de datos que existe para que las empresas puedan incorporar la sostenibilidad a su estrategia de inversión.
Según apunta el informe, el creciente interés en ESG por parte de los inversores y el giro hacia la regulación sobre finanzas sostenibles explican la creciente necesidad de datos y análisis de los gestores de activos para incorporar la sostenibilidad en su estrategia de inversión.
Entre las principales conclusiones del informe, Elena Philipova, directora global de ESG en Refinitiv, apunta los puntos más relevantes que los inversores pueden tener en cuenta a la hora de decidir qué industrias incluir en su cartera sostenible. De hecho, los cinco principales grupos en la industria, en términos de porcentaje, de empresas con políticas sobre emisiones son: automóviles e industria auxiliar, venta al por menor de alimentos y medicinas, servicios de telecomunicaciones, productos químicos y transporte. El 63% de las empresas tiene una política para reducir las emisiones (hasta un 56% desde hace cinco años); sin embargo, solo el 35% de las empresas tiene objetivos específicos de reducción en torno a las emisiones.
“Es fundamental que la industria promueva la transparencia y la estandarización de los datos para habilitar e informar a los inversores sobre qué compañías están mejorando su impacto en el medio ambiente y redirigir el capital hacia los sectores, compañías y clases de activos beneficiosos para el futuro sostenible», asegura Philipova. Según arroja el informe, por áreas geográficas, Japón, Europa, África y Oriente Medio tienen el mayor porcentaje de empresas que informan sobre las emisiones objetivo. Y Asia es la región con el promedio más alto de emisiones de CO2 por empresa. En concreto, Hong Kong produjo más del doble de CO2 por cada millón de ingresos en comparación con el país contaminante más cercano y 17 veces más que el país menos contaminante, Francia.
Otro dato que aporta el documento es que el 78% de las empresas tiene políticas de reducción de recursos, sin embargo, solo el 30% está estableciendo objetivos tangibles y solo el 26% tiene ambos. En los últimos 5 años, se ha producido un aumento del 25% en las empresas con políticas de eficiencia de agua y un 34% más de empresas que establece objetivos específicos de eficiencia del agua.
Por su parte, el director de ventas de Refinitiv en Iberia, José Luis Martín Velasco, afirma que “la transición a una economía verde es de suma importancia para la preservación de nuestro planeta y nuestra economía. La COP21 fijó un objetivo de mantener el calentamiento global por debajo de 2° C, sin embargo, si nos fijamos en las contribuciones nacionales actuales, la tendencia apunta a 3,3° C a finales de este siglo, según las proyecciones actuales”.
En este sentido, añadió que “la regulación está marcando el camino; El Parlamento Europeo votó recientemente para reducir la emisión de CO2 de los automóviles nuevos en un 37,5% para 2030, pero las empresas tienen que ampliar este movimiento tomando iniciativas propias. El 63% está comprometido a implementar una política al respecto, pero podemos preguntarnos acerca de la efectividad de esas políticas cuando solo el 35% de las compañías tiene objetivos sostenibles. Es necesario que haya un cambio para que las empresas se comprometan con cifras reales a respaldar su voluntad de proteger el planeta”.
. Tikehau IM ofrecerá su visión de mercado y sus propuestas alternativas líquidas en dos eventos
Tikehau Capital organiza los días 11 y 18 de junio en Barcelona y Madrid, respectivamente, dos desayunos en los que Etienne Gorgeon, jefe de estrategias líquidas de Tikehau IM, compartirá la visión de mercado de la gestora para los próximos meses y hará hincapié en una alternativa de inversión muy adecuada para este entorno volátil: Tikehau Income Crosss Assets, un fondo multiactivo con un enfoque de retorno total.
En Barcelona, el encuentro tendrá lugar el martes 11 de junio a las 17:30h en el Hotel Mandarín Oriental (Pº de Gracia, 38 – Barcelona). En Madrid, se celebrará el martes 18 de junio en el Hotel Villa Magna (Pº de la Castellana, 38) a las 17:30h. Posteriormente se servirá un cocktail en ambos eventos.
Después de este rally en renta variable, Etienne actualizará el posicionamiento de este fondo, el cual obtuvo en 2018 un -0,4% de rentabilidad, pudiendo estar entre -50% y +110% en renta variable y que llevaba una ganancia del 5% a finales de abril con una volatidad del 3,1%. Su objetivo, ante todo, es la preservación de capital.
También actualizará el posicionamiento del fondo de crédito flexible de duración corta TTV.
Dado que el aforo es limitado, puede registrarse a través de esta dirección de correo.
En los últimos días, la amenaza de Donald Trump de una ruptura de las negociaciones con China y el despliegue del aumento de los derechos de aduana han puesto en tela de juicio la tendencia al alza del crecimiento económico que comenzó a principios de año. La escalada de la guerra comercial entre Estados Unidos y China constituye una seria amenaza para los mercados.
Hasta ahora, aparte de este importante riesgo, el contexto macroeconómico estaba evolucionando favorablemente. Así, desde el principio de año hemos observado, en primer lugar, un crecimiento mundial más sólido que debería confirmarse a medida que se reduzca la debilidad del sector manufacturero.
Por otro lado, los intentos de la Fed por evitar la desaparición de la liquidez y limitar los costes de financiación en dólares han favorecido a las operaciones de carry y a los activos de riesgo, como suele suceder generalmente. En última instancia, también se ha registrado una menor desaceleración de las exportaciones mundiales, fundamentales para la economía mundial y los beneficios.
Aunque todavía quedan posibilidades de acuerdo, es hora de mantener una posición neutral con los activos de riesgo, adaptándonos a la vez al repunte de volatilidad actual. Para ello, se pueden llevar a cabo distintas acciones como la recogida de beneficios de acciones y bonos emergentes, dada su sensibilidad al comercio mundial.
Otra opción sería ajustar la ponderación de las acciones europeas de pequeña capitalización a neutral, reduciendo su riesgo político a corto plazo, consecuencia del aplazamiento de la fecha límite del Brexit y el riesgo limitado relacionado con las elecciones europeas.
También se podría reforzar el componente de renta fija para aprovechar el carry todavía atractivo y su duración ante una posible rebaja de los tipos. No se trata de eliminar el riesgo de las carteras de momento, sino de preparar los ajustes en función de los escenarios.
ODDO BHF Asset Management trabaja con dos escenarios principales. Por un lado, un escenario de abandono de las negociaciones e intensificación de la guerra comercial. En este caso, se llevaría a cabo una venta total de las posiciones emergentes, una fuerte reducción de la exposición a los activos de riesgo de renta variable como máximo del 25%-30%, así como a los de renta fija high yield, además de la compra de yenes japoneses y deuda pública alemana.
Por otro lado, si se materializa el acuerdo comercial entre China y EE.UU., la estrategia sería muy diferente, ya que se procedería a la compra de acciones europeas cíclicas y de estilo value, de acciones emergentes, sobre todo asiáticas, y de carteras de alto rendimiento, con sobreponderación de los sectores cíclicos, que están más expuestos a la calificación B. Asimismo, llevaríamos a cabo mayores ventas de dólar/euro.
Aunque los mercados de renta variable ya no ofrecen descuentos respecto a sus niveles históricos, siguen existiendo estímulos al alza tales como la revisión al alza de los beneficios por acción, que han registrado mínimos, 3,5% en EE. UU. y 4,5% en Europa para 2019, en un contexto de variables constantes. Otro estímulo podría ser la importante rotación hacia las empresas value, que podrían beneficiarse de la fuerte reducción de los múltiplos. En cualquier caso, habrá que ser pacientes, en un sentido u otro, ya que las prisas casi nunca han generado valor.
Tribuna de Laurent Denize, director adjunto global de Inversiones de ODDO BHF AM
Alfonso Benito, director de gestión de activos de Dunas Capital Asset Management. . Dunas Capital apuesta por la diversificación en un contexto de desaceleración de la economía global
Dunas Capital, la plataforma independiente de gestión de activos mobiliarios, inmobiliarios y alternativos, ha hecho pública su visión de mercados y estrategia de inversión para el segundo semestre de 2019. La firma considera que los inversores deberían adoptar un enfoque basado en la diversificación entre distintas clases de activos ya que, en su visión, se está produciendo una desaceleración incluso superior a la prevista por el consenso de analistas. No obstante, consideran que no hay riesgo de recesión y ven oportunidades tanto en bolsa, como en renta fija y otra serie de estrategias.
En este contexto, los expertos de Dunas Capital consideran que, aunque es momento de ser cautos, la renta variable es la inversión más atractiva, en términos de valoración, entre los activos de riesgo pero también el menos protegido por la acción de los bancos centrales. De ahí que sea necesario adoptar un enfoque basado en la diversificación. En todo caso, los sectores donde ven mejores oportunidades en bolsa son automoción, servicios financieros e industria gasística.
En cuanto a renta fija, Dunas Capital ha ido reduciendo su exposición a este tipo de activos, más notablemente a bonos subordinados de aseguradoras y high yield. Además, ha reducido durante 2019 sus posiciones en ciertos bonos de entidades financieras y aseguradoras. Por otro lado, en este momento Dunas Capital opta por posiciones cortas en deuda pública de Alemania y Reino Unido mientras que se decanta por posiciones largas en bonos de EE.UU.
A pesar de la desaceleración económica, los riesgos de recesión se ven alejados, salvo que haya una explosión de la guerra comercial entre EE.UU. y el resto del mundo, especialmente China y la Unión Europea. Asimismo, es importante tener en cuenta los riesgos políticos como el Brexit y la situación en Italia. Otros factores a vigilar que podrían tener un impacto negativo en la economía global son el crecimiento del crédito en China y un deterioro del crecimiento de los beneficios por acción (BPA).
A juicio de Dunas Capital, la inflación no parece que vaya a ser un problema, ni por exceso (trabas arancelarias) ni por defecto (recesión), lo que mantendrá los tipos reales en niveles muy deprimidos.
En lo que llevamos de año todos los fondos de Dunas Capital se encuentran en niveles positivos, lo que pone de manifiesto el éxito de la metodología propia de la firma: Dunas Value Cross Asset and Risk (D-VCAR), una filosofía value que combina el análisis de distintas clases de activos (renta fija y renta variable, entre otros). David Angulo, Chairman de Dunas Capital, comentó: “El equipo de gestión de Dunas Capital Asset Management ha demostrado una gran capacidad para generar resultados en distintos tipos de mercado. De hecho, nuestros fondos de retorno absoluto han obtenido retornos positivos en un contexto de dificultades para este tipo de productos”.
Borja Fernández-Galiano, responsable de Ventas de Dunas Capital, resaltó: “Contamos con un catálogo de productos aptos para todo tipo de inversor, basados en la preservación de capital y en una excepcional gestión del riesgo, lo que nos permite aportar soluciones para distintos perfiles de inversión en diferentes contextos de mercado”.
Alfonso Benito, director de gestión de activos de Dunas Capital Asset Management, agregó: “Creemos que de cara a los próximos meses los inversores tendrán que adoptar un enfoque multidisciplinar basado en la diversificación por activos. El mercado presenta muchas oportunidades, pero una buena selección de las inversiones a través del análisis de la renta variable y la renta fija y otra serie de factores, será esencial”.
Imagen tomada durante el evento. . Regulación sobre inversión sostenible: un nuevo frente para asesores, gestores y entidades financieras
El desarrollo e implementación de MiFID II ha sido un reto para las entidades financieras, asesores financieros y gestoras tanto nacionales como internacionales, pero el aluvión normativo no acaba aquí. La Unión Europea tiene en marcha un importante paquete de sobre las finanzas sostenibles que supondrá, de nuevo, cambios para toda la industria financiera, también en MiFID II.
“La UE tiene un Plan de Acción, aprobado en 2018, del que emanan diferentes cambios legislativos. El primer objetivo que se han marcado es definir qué es la inversión sostenible y cuáles son los criterios básicos para considerar qué lo es y qué no”, explicaba Sara Gutiérrez, socia de finReg 360, durante las Jornadas sobre Finanzas Sostenibles, organizada por el despacho de abogados.
El evento, que se centró en repasar cuáles son los principales cambios normativos y qué supondrá para la industria, arrojó como principal conclusión que tienen que demostrar que su implicación no es una cuestión de imagen, sino que realmente están comprometidas. “El Banco Central Europeo y las exigencias normativas son un motor para el desarrollo de la inversión sostenible, pero también la propia demanda y la ventaja que ven los inversores en este tipo de inversión”, sostuvo Ángel Berges, vicepresidente de AFI, a la hora de valorar en qué punto de esta tendencia estamos.
Cambios normativos
Los jugadores de la industria consideran que dar respuesta a esta demanda y cumplir con la normativa será fundamental para demostrar su compromiso, pero saben que esto supondrá asumir nuevos costes y realizar cambios. Quizás una de las novedades que más ha llamado la atención es la afecta a MiFID II. “En el asesoramiento y en la evaluación del cliente habrá que introducir preguntas claras al clientes para saber si tienen preferencia por la inversión sostenible, por lo que habrá que incluirlo en los test de idoneidad y también en las descripciones de los productos”, apuntó Gutiérrez.
La segunda área donde tendrá un impacto será en toda la actividad de divulgación e información que a raíz de MiFID II realizan ahora las gestoras, asesores y entidad financieras. Según explicó José María Olivares, socio de finReg, esto todavía está en borrador. “Vendrá dado por Europa, que está trabajando por lograr la máxima armonización posible para preservar la transparencia y la protección al inversor. Afectará principalmente a aquellos que participen en los mercados financieros, es decir, a toda la industria de gestión de activos y a los asesores financieros. Será una forma de evitar el efecto washing green: que todos se abanderen como sostenibles y que no lo sean verdad”.
En su opinión, esto es algo muy relevante y se concretará en obligaciones muy directas de transparencia: “Por ejemplo, se tendrá que hacer pública y estar accesible la política de integración de los riesgos de sostenibilidad, además de cómo se integran en la fase de asesoramiento y contratación del producto. Pero también, todo esto deberá estar en la web de las entidades, incluso el impacto global que tiene todas estas iniciativas de sostenibilidad”.
Úrsula García, socia de finReg, y Javier Zapata, secretario general de emisiones españoles, pusieron sobre la mesa otras dos normativas que también se verán modificadas: la ley de información financiera y el reglamento de benchmarks. En ambos casos el objetivo es armonizar lo que hacen los países de la Unión Europea, así como llevar los criterios sostenibles desde la creación de productos hasta su divulgación.
Frente a la falta de concreción en muchas de estos cambios normativos, Zapata insistió: “A las entidades reguladas nos interesa mucho saber cómo se va a supervisar todas estas cuestiones. En el caso de MiFID II, se va a evaluar un contenido que hemos elaborado el día 3 de enero, cuando una semana antes no sabíamos todavía si tendríamos ley”.
Impacto en la industria
Durante la jornada, las principales firma de la industria quisieron transmitir cómo están viviendo y aplicando ellas toda esta avalancha normativa. Según defendieron la mayoría de los participantes, ésta está muy alineada con todo lo que es la sostenibilidad y los criterios ESG. “Nosotros nos dimos cuenta que no era cuestión de integrar algo en los productos o en el negocio, sino que tenía que ser parte de nuestra cultura, y así lo hicimos”, señaló Alicia Muñoz Lombardía, directora de gobierno, regulación y privacidad de Santander España.
“Creo que toda esta normativa arrastra a la gente a la parte del asesoramiento, además ha introducido el diálogo de la inversión sostenible y los intereses medioambientales y sociales del inversor, por lo que hará crecer esta tendencia”, argumentó Elisa Rincón, directora general de Inverco.
Por su parte, Juan Aznar, presidente ejecutivo de Mutuactivos, se mostró algo más escéptico, y recordó que aún quedan algunas barreras importantes. “Evidentemente, hay una mayor sensibilidad a los aspectos ASG en la sociedad, en especial en el inversor institucional, y en la comunidad financiera, pero aún no hay una demanda masiva. Creo que por ahora, ésta es una tendencia que se está dirigiendo más hacia la inversión temática o de nicho. Además, seguimos sin tener una comprobación empírica de que contar con criterios ESG aporte más rentabilidad, pero sí es un gran argumento que ayuden a la gestión del riesgo”, señaló.