El presidente Donald Trump viaja este lunes a Florida habiéndose declarado “inmune” al virus mientras su nominada para la Suprema Corte de Justicia, Amy Coney Barrett, habla en la Comisión de Justicia del Senado.
Si bien, los analistas miran con atención estos dos temas de cara al 3 de noviembre, lo que resta de la campaña estará, más que antes, dominado por el manejo de la crisis sanitaria, presagia el informe US Politics Watch realizado por ING y Oxford Anlytica.
Una posibilidad es que un Trump revitalizado personificará, a través de su recuperación, la capacidad de llevar al país más allá de la pandemia y hacia la economía prosperidad en un segundo mandato. De lo contrario, el virus lo podría dejar letárgico e incapaz para recuperar el impulso de Joe Biden.
El mandatario anunció en su cuenta de Twitter que ya estaba “inmune” al COVID-19 y se presenta en Florida este lunes en un evento con público coordinado para las 19:00 (ET).
Sin embargo, este panorama, con Trump sin querer perder minutos, tiene a las elecciones del 2020 como las primeras en años en las que se ha prestado tanta atención el propio proceso electoral, asegura el estudio.
Los expertos afirman que ese enfoque podría eventualmente producir cambios fundamentales para panorama cívico del país.
Por ejemplo, la decisión de los republicanos de seguir adelante con la confirmación de la nominación de Amy Coney Barrett en reemplazo de la difunta jueza Ruth Bader Ginsburg en la Corte Suprema, o bien el estilo hostil del primer debate presidencial, han sido eclipsadas por preguntas sobre si el sistema político del país podrá producir un resultado justo.
La posibilidad de que una elección muy pareja no permita conocer al vencedor esa misma noche podría traer cuestionamientos sobre el proceso electoral.
Trump ha cuestionado repetidamente a la votación por correo, argumentando a que no ofrece las suficientes garantías.
En las elecciones de mitad de período de 2018, uno de cada cuatro votantes envió su boleta por correo en lugar de votar en persona en un colegio electoral.
Se espera que la proporción de votos enviados por correo significativamente mayor este año.
Debido a la pandemia, la mayoría de los estados han expandido sus programas de votación por correo o en ausencia para que los votantes registrados no tengan que salir sus lugares de votación, pero pueden solicitar que se les envíen las boletas por correo.
Para esta elección de noviembre, el 84% de los elegibles para votar tendrán la opción de hacerlo por correo sin tener que dar ninguna razón de por qué no pueden hacerlo en persona.
La gran cantidad de boletas por correo esperadas en esta elección podría extender el conteo por días o semanas.
Un trabajo reciente de los expertos sobre una elección impugnada presentó numerosos escenarios de diversa plausibilidad, la mayoría de los cuales incluyeron una larga batalla legal antes de un resultado final.
En ausencia de una clara victoria del presidente Trump, el resultado más probable es que el mandatario acuse que ha perdido realmente por fraude, pero también se espera que deje el cargo.
Las protestas de sus partidarios podrían volverse violentas por un corto tiempo, pero a largo plazo la consecuencia puede ser un endurecimiento de la base de Trump contra una presidencia de Biden que alentará la obstrucción republicana en el Congreso. Finalmente, el resultado sería más estancamiento.