Fitch Ratings acaba de publicar una nota en la que le echa un vistazo al sector de las aseguradoras latinoamericanas en el marco del aumento de los aranceles estadounidenses. Y las primeras conclusiones son que las entidades del sector son robustas: «Se espera que las calificaciones de las aseguradoras latinoamericanas resistan los posibles efectos secundarios de un menor crecimiento económico derivado de la guerra comercial en curso y los aranceles resultantes, incluyendo un menor crecimiento de las primas y una mayor inflación de costos», señala la calificadora.
México será el país más afectado por los cambios en la política estadounidense en el marco de un crecimiento internanual positivo para el sector, aunque más lento, de las primas para las aseguradoras latinoamericanas en 2025, debido a la estabilización de precios y suscripción.
«Una menor inflación y un crecimiento económico moderado podrían impulsar ciertas líneas de negocio, como los seguros de crédito y de vida crédito, al tiempo que reducen los costos de siniestros. Sin embargo, aún se pueden esperar aumentos de tarifas para ciertas líneas de negocio con reclamos catastróficos o donde la inflación de reclamos supera la inflación general, como los seguros de salud», dice la nota de la clasificadora de riesgos.
Fitch prevé un crecimiento moderado del PIB regional en 2025, con un menor crecimiento relativo en México y Brasil, parcialmente compensado por un mayor crecimiento en Argentina. Sin embargo, el sector de seguros no vida podría enfrentar un aumento significativo en los costos debido al aumento de las tasas de interés, dada la mayor inflación, así como al riesgo cambiario. Las interrupciones en la cadena de suministro también podrían afectar los ramos de seguros de motocicletas y daños. El seguro de vida se vería algo menos afectado, gracias a la estabilidad de las inversiones en renta fija, pero aún sufriría los efectos de un menor crecimiento y las dificultades de suscripción.
En Brasil, las dificultades económicas podrían reducir la demanda de seguros de vida, mientras que el seguro no vida podría enfrentar impactos moderados por el aumento de los costos de reparación (seguro de automóviles). En Chile, el seguro de vida se mantiene estable a pesar de la posible volatilidad del mercado, mientras que el seguro no vida podría verse afectado por los tipos de cambio y los problemas en la cadena de suministro. Colombia y México probablemente experimentarían tendencias similares, con los sectores no vida más expuestos a la inflación y las presiones económicas. Se espera que Perú, Panamá y Uruguay experimenten efectos comparables, concluyeron.