Ampliación, aumento y debilitamiento son las tres palabras claves que, según Franklin Templeton, los inversores deben tener en su radar si no quieren perderse en la dinámica actual, que tan rápido cambia, y que subirse a las “vías de rentabilidad”, que también están en constante evolución.
“El panorama inversor mundial está evolucionando, debido a la mejora de la rentabilidad y al aumento de las valoraciones en sectores y regiones que históricamente se han pasado por alto, lo que supone un giro positivo para los inversores. Aunque Estados Unidos sigue siendo un imán para los flujos de inversión globales, las regiones, sectores y clases de activos fuera de Estados Unidos están bien posicionados para beneficiarse en 2026 de la flexibilización monetaria que está ganando terreno a nivel mundial y de la presión sobre el dólar”, ha señalado ”, afirmó Stephen Dover, responsable de Estrategia de Mercado y Director del Franklin Templeton Institute.
Temas para 2026
Según su outlook, dada la resistencia de la economía estadounidense y el aumento de los beneficios empresariales, se espera un repunte de las acciones no estadounidenses, especialmente en los mercados emergentes y Europa, a medida que mejoren las valoraciones y se acelere el impulso de los beneficios. “Se espera que las acciones de pequeña capitalización estadounidenses y los sectores cíclicos, incluidos el industrial y el financiero, se beneficien de la reducción de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal y de la disminución de los costes del servicio de la deuda”, sostiene.
La firma también destaca que la relajación de la política monetaria por parte de los bancos centrales mundiales, junto con el aumento de la demanda de inversión en infraestructura y capital para apoyar la innovación impulsada por la inteligencia artificial y los proyectos energéticos, empujará al alza los tipos de interés a largo plazo y pronunciará la curva de rendimiento. A su vez, espera que una curva de rendimiento más pronunciada debería incitar a los inversores a mirar más allá del efectivo y buscar oportunidades en bonos, crédito y renta variable.
Por último, debido a los nuevos recortes de tipos de interés por parte de la Reserva Federal y al debilitamiento del mercado laboral estadounidense, el Franklin Templeton Institute prevé que el dólar estadounidense continúe su trayectoria bajista hasta 2026. “El debilitamiento del dólar estadounidense debería mejorar la rentabilidad para los inversores globales y proporcionar un contexto favorable para los activos remunerados en dólares, como la deuda de los mercados emergentes y las acciones no estadounidenses”, explica.
Más allá del ciclo
A largo plazo, el Instituto prevé tres fuerzas seculares que darán forma al panorama de las inversiones: la IA, los mercados privados y los gobiernos. Sobre la primera de estas fuerzas seculares señala que la inteligencia artificial, la infraestructura de datos y las tecnologías avanzadas impulsarán la demanda estructural de capital en todos los sectores y geografías. La necesidad de “alimentar a la bestia” de la IA generará nuevas inversiones en la producción, transmisión y almacenamiento de electricidad.
“Los mercados privados se expanden. El capital privado, el crédito privado y otras inversiones alternativas están a punto de expandirse. Este crecimiento crea oportunidades para que un mayor número de ahorradores participen en fuentes de rendimiento más elevadas y diversificadas, lo que implica mayores entradas de capital”, añade sobre la segunda de las fuerzas.
Por último, concluye que estamos ante la “era del gran gobierno”. En este sentido, explica que es probable que el aumento del déficit fiscal, la política industrial y las tendencias de desglobalización eleven los costes estructurales de endeudamiento y modifiquen las expectativas de rentabilidad, lo que se traducirá en tipos de interés reales más elevados durante el resto de la década.
“De cara a 2026, la innovación será el principal motor de la rentabilidad, especialmente en tecnología, mercados privados y finanzas digitales. Sin embargo, ante la probabilidad de que persistan las divisiones geopolíticas, las presiones inflacionistas y los posibles cambios en la política de la Reserva Federal, los inversores deben mantenerse selectivos y alerta en los próximos años”, concluye Larry Hatheway, estratega de Inversiones Global de Franklin Templeton.



