UBS Chief Investment Office advirtió en un análisis reciente sobre el aumento de la deuda pública estadounidense, y aseguró que el gobierno de EE.UU. podría recurrir a medidas de «represión financiera» para aumentar los ingresos, recortar la carga de intereses y contener los rendimientos, lo que plantea riesgos para los inversores internacionales y tiene relevancia potencial para México.
Con el sugestivo título ¿De la guerra comercial a la guerra fiscal?, el banco suizo analizó posibles cambios en las políticas fiscales de EE.UU., que incluyen el uso de medidas de política fiscal o monetaria para aumentar los ingresos o reducir la carga de intereses. Estas medidas, y las que se adopten en el futuro, plantean riesgos para los inversores, sobre todo teniendo en cuenta que EE.UU. es una parte esencial de la mayoría de las carteras de los inversores mundiales, señaló el banco suizo en el informe.
El Senado de Estados Unidos tiene bajo revisión el «One Big Beautiful Bill Act» (OBBBA), un paquete legislativo clave que cuenta con aprobación de la Cámara de Representantes. Junto a una serie de reformas, como la de los impuestos estatales y locales, la seguridad fronteriza y el Medicaid, hay dos disposiciones que generan atención entre los inversores internacionales y que tienen relevancia potencial para México.
Se trata de la Sección 899, que propone impuestos de retención adicionales (con un aumento del 5% cada año, con un tope del 20%) sobre ciertos tipos de ingresos de origen estadounidense para gobiernos, fundaciones, empresas y personas residentes fiscales de países que imponen “impuestos extranjeros injustos”.
Y la Sección 4475, que propone un impuesto especial del 3,5% sobre las transferencias de efectivo de consumidores en Estados Unidos a beneficiarios extranjeros. Esto impactaría directamente las remesas enviadas desde EE.UU. a México.
“Con una deuda pública estadounidense elevada y en aumento, creemos que EE.UU. recurrirá cada vez más a medidas de represión financiera para aumentar los ingresos, recortar la carga de intereses y contener los rendimientos”, dice el análisis. Aunque el banco aclara que el OBBBA aún no ha sido aprobado y sus detalles podrían cambiar, sugiere una serie de estrategias para los inversores internacionales para hacer frente a los posibles riesgos asociados a la OBBBA y a la posible represión financiera en el futuro.
Estrategia 1: Ajustar la exposición a la renta variable estadounidense a los índices de referencia estratégicos
El escrito sugiere que si se aprueba la normativa en su forma actual, los dividendos en acciones pagados por empresas estadounidenses a gobiernos, empresas o particulares residentes fiscales en países que imponen «impuestos injustos» a EE.UU. podrían estar sujetos a retenciones adicionales ese país, en virtud de la Sección 899. Dice también que dado que las empresas estadounidenses suelen pagar dividendos relativamente bajos, el efecto de unas retenciones fiscales más elevadas sobre los dividendos estadounidenses puede no ser muy significativo.
UBS sugiere mantener una postura neutral en acciones estadounidenses. El banco recomienda mantener esa exposición cerca del 50% de la asignación total en renta variable. Y sugiere que los inversores con sobreexposición deberían considerar reducir su peso relativo a niveles estratégicos para gestionar mejor el riesgo.
Estrategia 2: Considerar las ventajas relativas de mantener acciones de EE.UU. directamente o a través de fondos domiciliados en una jurisdicción diferente
«Una vez que los inversores se sientan cómodos con el «nivel» de su asignación a la renta variable estadounidense, también pueden considerar la forma en que asumen la exposición» a esas acciones, señala el informe. Dado que es probable que los fondos domiciliados en Irlanda y Luxemburgo se enfrenten a retenciones fiscales más elevadas sobre los dividendos estadounidenses si se aprueba la OBBBA en su forma actual, los inversores pueden considerar las ventajas relativas de los fondos de renta variable estadounidense domiciliados en otras jurisdicciones. En este sentido, asegura que los fondos domiciliados en Irlanda o Luxemburgo pueden tener una mayor retención sobre dividendos, pero menor riesgo sucesorio y mayor reconocimiento regulatorio.
El análisis dice que los cambios en la ley OBBBA podrían encarecer la retención fiscal en fondos fuera de EE. UU.
Estrategia 3: Cambiar parte de la exposición a renta fija en dólares por grado de inversión en euros
UBS espera que el euro se aprecie frente al dólar (llegaría a 1,20 EUR/USD para junio de 2026, lo que implica un 6% de apreciación para la divisa europea), por lo que sugiere reducir exposición a bonos en dólares (salvo necesidad directa) y aumentar renta fija en euros con grado de inversión, ya que puede ofrecer beneficios cambiarios y fiscales.
Estrategia 4: Cambiar la exposición a renta fija estadounidense por renta fija en dólares emitida en el extranjero
Los inversores que están conformes con su asignación a renta fija en dólares también pueden considerar si diversificar geográficamente su exposición a renta fija en esa divisa, y esto podría ayudar a mitigar posibles riesgos derivados de políticas económicas, señala UBS.
Muchas empresas calificadas como grado de inversión en Asia y Europa emiten bonos en dólares estadounidenses, a veces con rendimientos más altos que los disponibles en bonos corporativos estadounidenses con calificación similar, aunque a costa de una menor liquidez. De manera similar, los inversores pueden considerar sustituir su exposición a bonos del Tesoro de EE. UU. por bonos en dólares emitidos por agencias no estadounidenses o instituciones supranacionales.
Aunque este tipo de cambio mantendría la exposición al valor del dólar estadounidense y a los movimientos en la curva de rendimientos de EE. UU. (ya que el mercado de bonos del Tesoro sigue siendo un referente clave para los activos globales de renta fija en dólares), la diversificación geográfica puede ayudar a los inversores a limitar su exposición a posibles cambios de política desfavorables en una sola jurisdicción, según el informe.
Estrategia 5: Considerar los méritos relativos de los bonos con bajo cupón
Los inversores que están conformes con su asignación a renta fija en dólares y con su nivel de exposición geográfica a emisores estadounidenses también pueden considerar si reemplazar bonos con cupones altos por bonos con cupones bajos (con características similares como calificación crediticia, duración y rendimiento hasta el vencimiento) puede aportar beneficios netos en el retorno, sugiere el informe.
Al reducir el ingreso corriente, los bonos con bajo cupón pueden disminuir el impacto potencial de los impuestos de retención estadounidenses sobre la renta fija en dólares. Además, los bonos con bajo cupón podrían sustituir una obligación fiscal doméstica sobre ingresos por una obligación sobre ganancias de capital, lo que puede ser favorable según la jurisdicción local del inversor y su situación fiscal individual.
El banco también sugiere a los inversores internacionales utilizar el excedente de efectivo en dólares para compras en otras divisas o en oro, así como utilizar estrategias de renta variable con cobertura para gestionar la exposición deseada a divisas internacionales, mientras se incrementa la exposición a efectivo y renta fija en el mercado local.