Por primera vez desde que realizan el evento masivo, Credicorp Capital llevó su Investor Conference fuera de su natal Perú, convocando a profesional de la industria y representantes de firmas emisoras en Santiago de Chile. Y además de una nutrida parrilla de perspectivas internacionales, el evento también contó con la perspectiva propia de la casa de inversiones andinas, que entregó insights relacionados con deuda privada, deuda latinoamericana y elecciones en Chile, Perú y Colombia, entre otros.
El evento se llevó a cabo en el centro de eventos Metropolitan Santiago –anteriormente conocido como CasaPiedra– la semana pasada y tuvo como plato fuerte la presencia del laureado economista Paul Romer, ganador del Premio de Economía Conmemorativo de Alfred Nobel –llamado popularmente Nobel de Economía–, quien se refirió al crecimiento endógeno y la “economía de las ideas”.
Por el lado de la compañía organizadora, por su parte, la firma destacó grandes tendencias relacionadas con las carteras de altos patrimonios locales y el estado macroeconómico de la región.
Asesoría y carteras asesoradas
Analizando la dinámica de los portafolios, Samuel Levy, vicepresidente de Asesoría de Inversiones de Wealth Management de Credicorp Capital, enfatizó en el creciente acercamiento entre los clientes de alto patrimonio y los activos privados. “Los Fondos semilíquidos, con sus estructuras abiertas y flexibles, están eliminando las barreras, permitiendo que un mayor rango de inversionistas participe en los mercados privados”, recalcó en su presentación.
En ese sentido, el profesional destacó la relevancia del mercado privado, ya que el 88% de las empresas con ingresos mayores a 100 millones de dólares son privadas.
En esa línea, Levy indicó que los portafolios asesorados en el segmento han evolucionado, desde una industria centralizada en fondos mutuos hacia una estructura más diversificada incorporando fondos de inversión, ETFs e Instrumentos directos (acciones y bonos principalmente). “Esto evidencia que parte del rol de los asesores ha sido generar ‘trajes a la medida’ en vez de carteras de inversión estandarizadas según las necesidades de cada inversionistas”, recalcó en su presentación.
Por el lado de los productos puntuales, Credicorp Capital también recalcó que está creciendo el uso de ETFs como un componente básico en la construcción de portafolios y la gestión activa. Los ETFs activos puntualmente han tenido un auge, alcanzando los 1,4 billones (millones de millones) de dólares en AUM a junio de este año y un crecimiento compuesto anual (CAGR) de 46% en la última década.
Sesgo por deuda privada
En cuanto a alternativos, Levy destacó que los clientes de alto patrimonio han ido cambiando su estilo de inversión, de un enfoque anclado en la frontera eficiente estándar a un estilo más enfocado en metas, con asesoría personalizada.
Respecto a los inversionistas de alto patrimonio chilenos, puntualmente, Credicorp Capital señaló que tiene ubicado el 59% de su patrimonio en el extranjero y el 41% restante en activos locales. En la porción internacional, un 23% está destinado a alternativos (versus un 35% en renta fija y un 42% en renta variable), mientras que en la cartera nacional, destinan un 30% a mercados privados (junto a un 45% en renta fija y un 25% en renta variable local).
“La mayoría de los multifamily offices y bancas privadas poseen una fuerte preferencia por invertir en mercados extranjeros”, apuntó Levy en su presentación, agregando que Estados Unidos es el principal destino para inversionistas chilenos, tanto en alterntivos como renta fija.
Dentro de los activos alternativos la deuda privada es el instrumento preferido en Chile y el extranjero. En segundo lugar se encuentran los fondos inmobiliarios, en el frente doméstico, y el private equity, en los mercados extranjeros.
Viento a favor para activos locales
Una visión optimista trajo la presentación de Klaus Kaempfer, CIO de Credicorp Capital, quien se enfocó en el viento a favor que tienen los activos latinoamericanos, particularmente la renta fija, dado el contexto macroeconómico actual.
En un contexto en que las tasas están bajando –aunque seguirían relativamente altas, según las expectativas de la casa de inversiones– y la inflación se mantiene persistente, además de una tensión China-EE.UU. que algunos ven como una amenaza y otros como una oportunidad para la región, la deuda latinoamericana se está mostrando resiliente.
Según destacó Kaempfer, los bonos high yield corporativos de América Latina –medidos a través de CEMBI correspondiente– tiene el nivel más bajo de apalancamiento en el mundo emergente (con un spread de 243 puntos base, frente a los 151 pb globales, 111 pb de Asia y 76 pb de EE.UU.)
Además, los emisores de bonos de grado de inversión han ido reduciendo su apalancamiento durante el último año y se anticipa una reducción en las tasas de incumplimiento en América Latina y un menor impacto por deuda impagas en 2025. “Tasa de incumplimiento proyectada en Latinoamérica para el 2025 se reajusta a la baja, de 3,4% a 2,7%, mientras que aumentó en otras regiones emergentes”, enfatizó el ejecutivo en su presentación. En esa línea, anticipan una “reducción sustancial” de los papeles distressed en la región.
Todo esto apunta a que el perfil de vencimientos de la deuda latinoamericana está mejorando, en comparación con el resto de los emergentes.
Un nuevo ciclo electoral
Con las elecciones presidenciales y parlamentarias de Chile a la vuelta de la esquina, la política también tuvo un espacio en el Investor Conference de Credicorp Capital. Durante su presentación, Kaempfer enfatizó en el péndulo político que ha vivido la región en las última década y media.
América Latina, explicó el ejecutivo, está dejando atrás la “marea rosa” –lo que describen como un período de auge para la izquierda política en la región– y entrando a un nuevo ciclo electoral.
Haciendo zoom en la región andina, el profesional destacó que ni Chile ni Perú ni Colombia realizaron asambleas constituyentes que alteraran el rayado de cancha de las economías locales. Hacia delante, hay tres grandes elecciones que la casa de inversiones andina tiene en mente.
Para el 16 de noviembre –primera vuelta presidencial– en Chile, la firma anticipa un posible giro hacia la derecha política, destacando que esta será la primera elección presidencial donde se volvió a instalar el voto obligatorio. Perú, por su parte, volverá al sistema de Congreso bicameral y celebrará sus elecciones generales el 12 de abril de 2026. En el caso de Colombia, los comicios presidenciales serán el 31 mayo del próximo año, en un proceso en que el presidente Gustavo Petro no puede optar a reelección.
En su charla, Kaempfer hizo hincapié en la marcada desaprobación que cuentan las actuales administraciones –que tienen un corte de izquierda– en los tres países. Cifras compartidas en el evento muestran un desapruebo de 85%-90% para la peruana Dina Boluarte, 60%-70% para el chileno Gabriel Boric y 58%-61% para Petro.
Otro evento político que de peso, recalcaron, serán las elecciones generales de Brasil. Estas se llevarán a cabo el 4 de octubre de 2026 y es posible que cuenten con una candidatura del actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.