La vida interior del “agujero negro” de los tipos de interés
La política de la Reserva Federal de tipos de interés a cero, que dura ya varios años, ha aplastado los rendimientos del Tesoro hasta un punto en el que el aumento de tasas y la inflación son manifestaciones prácticamente aseguradas. Es posible que los inversores tengan que enfrentarse a la amenaza de las subidas de los rendimientos de los bonos. Es posible que antes de que se produzca un incremento en los tipos de interés, los instrumentos de deuda de alta calidad de larga duración se verán dañados y sujetos a periodos de volatilidad significativa. En este entorno, ¿cuáles son los riesgos para las carteras?
Según afirma Michael Temple, director de Crédito de Estados Unidos de Pioneer Investments, en su reciente white paper “The Danger of Duration in Investor Portfolios”, el “Gran Experimento Monetario”, la política de tipos cero de la Fed, está llegando a su fin. Pero muchos inversores se están dejando llevar por una potencial falsa sensación de seguridad de que el aumento de las tasas es aún lejano. La Fed no sólo espera un curva más empinada, sino que puede incluso alentarlo. Esto será una llamada de atención.
Es probable que la economía de Estados Unidos nos sorprenda en breve al alza, impulsada por múltiples fuerzas seculares que incluyen el resurgimiento de los precios inmobiliarios y la construcción de viviendas, el renacimiento de la energía y la reactivación de la demanda de crédito. En este punto, dada la probabilidad de aceleración de la actividad económica, la Fed comenzará disminuir sus programas de compras.
Esto impulsaría a una normalización de la curva de rendimientos. Con la tasa de fondos federales anclada en cero, la secuencia y la velocidad de eliminación de la acomodación monetaria tendrán consecuencias que irán de acuerdo a la rapidez con la que la curva de rendimiento se ajuste.
Los inversores deben ser conscientes de las posibles consecuencias para sus inversiones de renta fija si este cambio de paradigma se lleva a cabo. Si analizamos las matemáticas de la duración, es particularmente peligroso en este entorno históricamente de bajo rendimiento.
Según el Temple, mientras los mercados financieros lidian con el próximo cambio estructural en el entorno de rendimiento y tasas de interés, es probable que los bonos de alta calidad experimenten períodos de volatilidad significativa. La transición hacia un nuevo paradigma de la inversión no suele ser suave y calmada. Sin embargo, considera que la Fed va a tratar de manejar las expectativas para que la curva de rendimientos no se ajuste con demasiada violencia.
Puede ver el White Paper completo en el documento adjunto.