Foto cedidaStella Ma, gestora de la estrategia global de high yield de Vontobel. . Vontobel AM nombra a Stella Ma gestora para su estrategia global de high yield
Vontobel refuerza su equipo de bonos corporativos con el nombramiento de Stella Ma para el cargo de gestora de cartera senior de la estrategia de high yield global. Según explica la gestora, este nombramiento refuerza su compromiso con “atraer a los mejores talentos de la inversión para ofrecer mejores resultados a sus clientes”.
Stella Ma se incorpora a Vontobel desde Julius Bär Investment Management, donde ha sido responsable del lanzamiento y la gestión de la estrategia global high yield. Anteriormente, fue gestora de carteras y socia de BlueCrest Capital Management, en Londres y Ginebra, donde era responsable de estrategias long-short en los mercados de high yield, crossover CDS y bonos corporativos europeos. Stella adquirió experiencia como analista de crédito high yield en Morgan Stanley e ING Financial Markets en Londres y Ámsterdam. Tiene un máster en Contabilidad y Finanzas por la London School of Economics y es titular de la certificación CFA.
“La trayectoria de 20 años de Stella en la gestión de fondos globales de high yield, tanto en mercados desarrollados como emergentes, nos ayuda a generar valor para nuestros clientes en este prolongado entorno de bajos rendimientos. Ella comparte nuestra pasión por la inversión activa y su experiencia global nos ayudará a encontrar oportunidades de inversión atractivas en toda la gama que ofrece el high yield”, ha destacado Mondher Bettaieb-Loriot, responsable de bonos corporativos de Vontobel.
Actualmente, Vontobel ofrece soluciones de renta fija desde 1988. Su boutique de renta fija gestiona 24.000 millones de francos suizos en activos de clientes en crédito global, bonos globales, mercados emergentes y estrategias flexibles. El equipo de renta fija está formado por 41 profesionales de la inversión ubicados en Zúrich, Nueva York y Hong Kong.
Antes del verano, el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) ha realizado una nueva actualización de la lista de jurisdicciones de alto riesgo que presentan carencias graves en prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo (PBCyFT). «Esta labor periódico busca el objetivo de que se apliquen medidas para proteger el sistema financiero internacional de estos riesgos, continuos e importantes», recuerdan desde finReg360.
Según el análisis que hacen desde finReg360, comparando la lista que acaba se acaba de publicar con la anterior, correspondiente al 25 de junio de 2021, la principal novedad es que Ghana ha salido de ella. En cambio, el GAFI ha incluido a nuevas jurisdicciones en su lista, en concreto a Haití, Malta, Filipinas y Sudán del Sur. Estos países deberán implantar mejoras en sus sistemas de prevención de blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo.
Por tanto, el listado actualizado de países de alto riesgo que presentan deficiencias estratégicas en materia PBCyFT, según el GAFI, es el siguiente:
Albania
Barbados
Birmania
Botsuana
Burkina Faso
Camboya
Corea del Norte (call for action)1
Filipinas
Haití
Irán (call for action)
Islas Caimán
Jamaica
Malta
Marruecos
Mauricio
Nicaragua
Pakistán
Panamá
Senegal
Sudán del Sur
Siria
Uganda
Yemen
Zimbabue
1 Con la expresión call for action, el GAFI hace referencia a los países incluidos en su lista negra.
El family office de Francisco Riberas, directivo de Gestamp, ha fichado a Philippe Muñoz, gestor veterano de la gestora del banco Santander, para apoyarle en la gestión de sus inversiones, según ha adelantado Bloomberg.
En su nuevo puesto, Muñoz será responsable de la gestión de inversiones líquidas de la firma. Según la información de la agencia, Riberas transformará la sociedad patrimonial Halekulani –utilizada por Riberas para canalizar sus inversiones- en un family office que adaptará el nombre de Orilla.
Según Bloomberg, Muñoz reportará a Francisco López Peña, que dejó a principios de año su cargo como CEO de Gestamp.
Muñoz era hasta ahora responsable de Inversiones de Previsión Colectiva y Carteras de Santander Asset Management España. Entró en el grupo en 2006. Antes de llegar al banco, el financiero había trabajado en Société Générale y BNP Paribas.
Riberas es presidente de Gestamp, con un valor de mercado de 2.530 millones de euros.
Latinoamérica es la región del planeta más afectada por la pandemia de COVID-19. De los casi cuatro millones de fallecidos a cierre de junio de 2021, más de un millón proceden de Latinoamérica. Tres de los cinco países con más víctimas mortales proceden de la región, y si a Brasil, México, Perú, le añadimos Colombia y Argentina, suman casi un 30% de las víctimas en todo el mundo, cuando la población conjunta de la región no llega al 10% del planeta.
¿Cuáles son las razones de esa mayor mortalidad en Latinoamérica respecto de otras regiones? “Unos recursos inferiores para atender servicios básicos como la salud, elementos clínicos, como una mayor preponderancia de tasas de diabetes y obesidad entre la población, dificultad para implementar distanciamiento social por la estructura social y económica de los países, y un menor acceso a las vacunas”, son los factores que explican esta peor evolución, según Manuel Balmaseda, economista jefe de Cemex, durante el último episodio de Economics Café, en una conversación con Manuel Aguilera, director general de MAPFRE Economics.
“Estas debilidades”, continua el propio Aguilera, “se ven amplificadas por la debilidad de los sistemas sanitarios latinoamericanos, que no es un tema coyuntural por la pandemia, sino estructural, viene de décadas atrás. En MAPFRE Economics analizamos hace un tiempo la eficacia de los sistemas de salud en todo el planeta, y ninguno de los países latinoamericanos aparece entre los 25 primeros en el mundo”.
Esto se traduce en cifras como un gasto en sanidad que es dos puntos por debajo de la media global en Latinoamérica. Lo mismo sucede con el número de camas de hospital o el número de tests de coronavirus que se hacen.
La caída del PIB y la incertidumbre de la recuperación
Todo esto está teniendo, sin duda, un impacto directo sobre la actividad económica en la región. La caída del PIB en 2020 ha sido con total seguridad la mayor en más de un siglo, superior al 7%, y más del doble de la caída registrada a nivel mundial. Y ese es el dato agregado, porque ha habido países como México, Argentina o Perú con caídas superiores.
“A mí lo que me preocupa más no es tanto la caída del 2020, sino que la recuperación va a ser menos fuerte de lo que sería deseable dada la fuerza de la corrección vivida el año pasado”, explica Balmaseda.
“Es la tormenta perfecta”, constata Aguilera, “según el BID la mayor caída desde los movimientos independentistas en el primer cuarto del siglo XIX; es la combinación de una caída de la demanda interna, un hundimiento de la demanda externa, por las restricciones mundiales, y un desplome de la inversión tanto local como extranjera, y esto explica los niveles de contracción. Además, la economía latinoamericana ya estaba muy debilitada en los años anteriores a la pandemia, y ahora en el momento de la recuperación esas debilidades se están manifestando y están complicando el proceso de reactivación económica”.
“Los retrocesos en términos sociales durante la pandemia pueden tener consecuencias en economía política”, apunta también Manuel Balmaseda, citando los recientes disturbios en países como Colombia, Chile o Perú, que pueden tener efectos a largo plazo sobre la creación de riqueza en la región.
“Casi 40 millones de personas han caído en la pobreza como resultdo de la crisis; la desigualdad es el problema ancestral de la región, y el que limita la posibilidad de tener un crecimiento sostenido a largo plazo”, explica Manuel Aguilera.
¿Y cuáles son las medidas que podrían adoptar los países de la región para amortiguar el impacto y preparar a la región para una posición de partida más sólida para el futuro?
Manuel Aguilera da una receta con cinco grandes recomendaciones:
fortalecimiento fiscal
independencia de la política monetaria
vigilar los efectos de la política económica sobre el canal bancario,
fomentar el ahorro interno y
avanzar en el fortalecimiento institucional.
“Los problemas ya los conocemos”, abunda Balmaseda; “la clave está en la implementación de estas reformas. El esfuerzo igual ahora deberíamos ponerlo en la microeconomía, en las pequeñas cosas que hacen que un país funcione bien, desde la libertad de horarios a las facilidades para montar una empresa. Hay que andar antes de correr, las reformas tienen que ser paulatinas, para evitar que las sociedades se vuelvan en contra. Que los beneficios lleguen lo más abajo posible”.
Buenos indicadores sociales y políticos, libertad cambiaria, un sistema financiero sólido, estabilidad jurídica y un marco regulador serio: así se resumieron las ventajas de Uruguay como hub financiero durante una conferencia auspicidada por SURA Inversiones.
“En SURA Inversiones establecemos relaciones sólidas con nuestros clientes para diseñar portafolios de inversión adecuados a cada uno de ellos, en base a su perfil, su aversión al riesgo, su horizonte y tiempo de exposición que deseen mantener dentro del mercado”, expreso Pablo Perrotta, gerente comercial de SURA Asset Management Uruguay, quien fue el encargado de dar comienzo a la actividad.
El encuentro contó con la participación de Jean Jacques Bragard, abogado con más de 25 años de experiencia en asesoría legal, banca y mercados de capitales, quien abordó la posición actual de Uruguay para la región y el mundo en materia de inversión.
“Uruguay es una plataforma financiera robusta y esto se debe a que el sistema financiero es un activo que se ha adaptado a las nuevas realidades, ganándose con ello la confianza de los inversores y contrapartes en el mundo”, expresó Bragard.
Los indicadores sociales y políticos del país lo posicionan en un lugar estratégico tanto en materia de inversión como en lo que respecta al compromiso sustentable en el tiempo de un sistema, lo que lo convierten en un hub que regula a un amplio abanico de agentes financieros de la región.
Respecto a las cualidades financieras, Bragard destacó la libertad cambiaria que el país fomenta desde 1973 con un sistema libre para la compra y venta de divisas. Agregó que las transacciones se realizan en moneda extranjera sin necesidad de autorización previa de organismos y lo mismo ocurre en el caso de la repatriación de capitales. Además, el país cuenta con un secreto bancario muy sólido, pero adaptado a las exigencias actuales.
Con una plaza financiera estable, el país apuesta fuertemente a atraer agentes que estén alineados con los intereses del activo financiero, por lo que las licencias a entidades reguladas se otorgan luego de un proceso riguroso llevado a cabo por laSuperintendencia de Servicios Financieros del Banco Central, al tiempo que cuenta con un mercado que otorga gran importancia al usuario financiero y con una ley de inversión que da un tratamiento igualitario tanto al inversor local como al extranjero.
Como aspecto no menor, Uruguay cumple con los lineamientos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), otorgando facilidad para la apertura de cuentas bancarias y trato favorable en terceros países. Además, cuenta con una red de convenios para evitar la doble imposición y con un sistema de confidencialidad de la propiedad con un registro de beneficiarios finales sin acceso a privados.
Por su parte, Pablo Perrotta profundizó en las diferentes instancias que conforman los procesos de inversión para analizar el mercado y asesorar de forma personalizada a cada cliente. “En SURA Inversiones nos esforzamos por conocer al cliente, aunque este no se encuentre presente en el país, para diseñar portafolios de inversión que respondan exactamente a sus necesidades. Para ello, contamos con un equipo de trabajo de amplia experiencia, con acceso a una gran variedad de instrumentos financieros locales e internacionales para el manejo de activos”, expresó.
En esta línea, se refirió al proceso en el momento de definir un portafolio de inversión, que inicia con la asesoría personalizada de un experto para establecer el perfil del inversor, su capacidad y disposición a tomar riesgos, el horizonte de inversiones que busca alcanzar y su experiencia en este ámbito.
Luego de un minucioso proceso se llega a la selección de activos en donde se realiza un análisis detallado de la selección de gestoras, metodología cuantitativa y cualitativa, para luego dar paso al portafolio modelo, que se desarrolla a través de una plataforma online que permite realizar optimizaciones y asignar la mejor cantidad de recursos según el perfil de cada inversor.
SURA Asset Management es una compañía experta en pensiones, ahorro e inversión con presencia en Chile, México, Colombia, Perú, El Salvador y Uruguay. Es una filial de Grupo SURA, con otros accionistas de participación minoritaria. A diciembre de 2020, SURA Asset Management cuenta con 153 billones de dólares en activos bajo administración pertenecientes a cerca de 20,3 millones de clientes en la región.
* Clientes y AUM incluyen a AFP Protección en Colombia y AFP Crecer en El Salvador, aunque no son compañías controladas, SURA AM posee una participación relevante.
Pixabay CC0 Public DomainImagen de Lars_Nissen. BNP Paribas AM
BNP Paribas Asset Management presentó sus perspectivas de mitad de año en una nueva conferencia online de su serie La Gran Inestabilidad, en la que Daniel Morris, estratega jefe de mercado, analizó la transición post COVID-19 y anticipó algunas de las megatendencias para el resto de 2021, entre ellas un pronóstico positivo para la renta variable, una inflación contenida y una renta fija a la expectativa de lo que ocurra con los tipos de interés.
A nivel macroeconómico, Morris destacó el entorno positivo, incluso pese a las amenazas que representan las mutaciones del coronavirus, como la variante Delta. En Estados Unidos ya se ha producido la reapertura gracias al intenso ritmo de vacunación, Europa está adquiriendo ritmo en la inmunización y se espera que en los próximos meses puedan conseguirlo también los mercados emergentes. En cuanto a la inflación, estimó que a medio plazo probablemente se mantenga entre un dos y un tres por ciento.
En EE.UU. todas las miradas están puestas en la Fed y en los tiempos y alcance de la retirada de los estímulos financieros. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha anticipado que tendrá en cuenta dos elementos fundamentales: la recuperación del mercado laboral y la inflación.
Respecto del empleo, considera que habrá una rápida recuperación probablemente a partir de septiembre. La economía estadounidense sigue teniendo un déficit de ocho millones de puestos de trabajo, con los sectores del ocio y la hostelería como los más afectados respecto de las cifras de antes de la pandemia. Además de la reactivación, otro elemento fundamental de cara al empleo es el levantamiento de las restricciones de movilidad, ya que existe una correlación entre un mayor cierre y un desempleo más elevado.
«El fin de las prestaciones por desempleo y el levantamiento de las restricciones deberían reforzar a su vez el crecimiento de las nóminas», señaló Morris. Por ello, consideran que la Fed no tendrá dificultades para empezar a planificar el tapering.
Aunque Europa comenzó más rezagada en la vacunación, ha ido reduciendo distancias y los últimos resultados económicos muestran una buena recuperación, «incluso mejor de lo esperado en comparación con EE.UU., sobre todo en los datos blandos. Por eso pensamos que la mirada de los inversores va a moverse próximamente en términos de apertura primero hacia Europa, también por la llegada de los fondos europeos, que contribuirán a que se alcance el pico de crecimiento, frente a las expectativas de crecimiento de Estados Unidos que han tocado techo», explicó.
Mercados emergentes y China
La situación en los mercados emergentes representa en cambio un desafío. Hacia la mitad de la pandemia parecía que sobre todo Asia había conseguido doblegar al virus, «pero ahora tienen la presencia de las variantes con unos niveles de vacunación mucho más bajos. Eso los sitúa en una especie de limbo en el que tienen que seguir enfrentando brotes como los que hemos visto en Corea del Sur, Taiwán o incluso China sin tener tantas herramientas», reconoció Morris.
Ha habido que reintroducir confinamientos, por lo que el escenario de la reapertura tendrá que esperar un poco más. Pese a ello, las cifras del índice PMI se sitúan de media en 50, frente a los poco más de 60 de EE.UU. y Europa, por lo que existe una recuperación, aunque más lenta, subrayó el experto.
China en particular tuvo un comportamiento peor de lo esperado en el primer trimestre, pero hay que recordar que el Gobierno chino lleva años trabajando en reducir el endeudamiento, y ha retomado esa senda tras la pandemia, por eso se ha frenado probablemente el crecimiento, indicó. Y un elemento crucial será la evolución de las relaciones entre este país y EE.UU., considerando que la Administración Biden no ha variado casi en nada las medidas adoptadas por su antecesor, Donald Trump. Esto era de esperar porque «el consenso respecto de China es muy amplio en EE.UU. y no sólo de un partido», pero el movimiento ha sido incluso menor de lo previsto por los analistas.
Morris destacó que el gran interrogante es si las tensiones derivarán en una eventual «desglobalización», con el desarrollo de estándares tecnológicos y económicos paralelos en China y alrededores frente a los existentes en EE.UU. y Europa, y qué implicaciones tendría esta situación sobre la inflación.
Evolución de la renta variable y la renta fija
En BNP Paribas AM continúan sobreponderando en las carteras multiactivos la renta variable y en particular la estadounidense, porque ha rendido bien en la primera mitad de año y en términos relativos se sitúa mejor que los bonos.
Los principales motivos se relacionan con el momento económico actual, en el que estiman que el impacto de la subida de los tipos de interés sobre estos activos sería marginal, mientras que las muy positivas expectativas de beneficios importan mucho más. «Nos iremos moviendo a un ciclo de subida de los tipos, pero su influencia sobre la renta variable depende de en qué parte del ciclo te encuentres. Si estamos en el principio del ciclo, que es donde pensamos que estamos, las tasas pueden aumentar, pero también las equities», consideró Morris.
Por otra parte, aunque observan el buen momento del estilo value, el experto indicó que es probable que su mayor rendimiento frente al growth termine cuando el patrón vuelva a ser el de antes de la pandemia.
En lo que respecta a los bonos, en la actualidad las valoraciones son difíciles. «No hay ningún catalizador a la vista que haga aumentar mucho los diferenciales», dijo. El grado de inversión es mejor para el carry, «pero los diferenciales de alto rendimiento podrían ajustarse aún más».
«En high yield en moneda local hay que ser cuidadosos porque anticipamos sorpresas relacionadas con la inflación o subidas de tipos antes de lo esperado», añadió. Como los mercados emergentes serán la siguiente región que se recupere después de Europa, pueden resultar atractivos para los inversores.
Finalmente, Morris destacó que continuará la volatilidad del dólar por la incertidumbre sobre los tipos y la inflación, pero que el aumento esperado de los rendimientos en EE.UU. y en la zona del euro estará impulsado por los rendimientos reales y no por la inflación, por lo que el entorno seguirá siendo favorable.
Pixabay CC0 Public DomainLos títulos a cinco años en UF han subido en torno a 200 puntos base en 2021. Los títulos a cinco años en UF han subido en torno a 200 puntos base en 2021
A la espera de que el Banco Central de Chile dé el primer paso en el proceso de normalización monetaria, después de meses de estímulo a la alicaída economía local, las tasas de renta fija nacionales se han ido levantando paulatinamente hasta niveles que no se veían en años. Y en este contexto, los inversionistas locales ven más oportunidades en los bonos de corta duración indexados a la inflación.
En medio de proyecciones con distintos niveles de optimismo para la economía chilena, autoridades han señales de que Tasa de Política Monetaria (TPM) empezará a subir pronto, lo que ha profundizado el proceso de aumento de los rendimientos de bonos soberanos que inició a mediados de febrero.
En la curva de papeles en UF,los títulos a cinco años han subido en torno a 200 puntos base, de -1,06% a 1,04% entre el 30 de diciembre de 2020 y el 5 de julio de 2021 (último dato disponible), según cifras del Banco Central. En ese mismo período, el rendimiento promedio de los papeles soberanos a diez años subió de -0,20% a 2,00%, el mayor desde 2017.
En el caso de la curva nominal, la subida ha sido incluso un poco más pronunciada. Datos del ente rector muestran que la tasa de los bonos a cinco años ha pasado de 1,53% a 3,90 en lo que va del año, mientras que la de los papeles a diez años ha pasado de 2,65% a 4,98%, la más alta desde 2014.
Estrategia de cartera
En ese entorno, los consejos de los inversionistas locales es a mantenerse en la parte de la curva y privilegiar los bonos indexados a la inflación.
Para Andrés de la Cerda, gerente de Renta Fija y Monedas de BICE Inversiones, “las subidas de la TPM ya están bastante incorporadas” en los precios, y la tasa rectora podría mantenerse expansiva pese a las subidas.
Ante este panorama, su recomendación es a preferir los bonos en UF, donde los inversionistas pueden capear el riesgo inflacionario mantenerse en plazos cortos. Específicamente, le gustan los plazos entre dos y tres años.
“Es donde hay menos incertidumbre”, explica. En cambio, la parte larga tiene una mayor incertidumbre, considerando que las AFP son actores relevantes en el mercado de bonos de largo plazo y que actualmente han visto un aumento en el riesgo regulatorio, considerando la coyuntura política en Chile, agrega.
En la curva nominal, De la Cerda no ve mucho atractivo, considerando que no tiene el componente de indexación. “En bonos en UF, puedes compensar la baja del precio con la inflación”, mientras que no funciona así para los papeles en pesos chilenos.
Para el economista jefe de Fynsa, Nathan Pincheira, la conclusión es la misma. Considerando todos los factores de la ecuación –incluyendo la futura subida de TPM, las colocaciones de deuda que tiene programadas el Gobierno y el riesgo inflacionario, entre otros–, “la recomendación es estar en la parte corta de la curva y en UF”, indica, idealmente con duraciones inferiores a dos años.
Además de los riesgos asociados a la política monetaria, el economista describe un riesgo adicional ligado a proyectos de ley que podrían tener un efecto económico, como la iniciativa de rebaja de IVA.
En esa línea, Pincheira describe una falta de demanda en los papeles de largo plazo, pese a que las valorizaciones están “baratas” en términos históricos. “Los inversionistas están bastante reticentes a estar largos”, comenta.
Expectativas de TPM
Después de la publicación de las minutas de la última reunión de política monetaria del Banco Central –celebrada el 8 de junio–, el consenso apunta a que la entidad podría elevar los tipos de referencia en el corto plazo, después de meses de esfuerzos de liquidez y estímulo.
Para Santander, el documento del ente rector sugiere que julio vería materializarse el alza en la instancia de julio, agendada para el 13 y el 14 de este mes, aunque también destacan que el mercado anticipa que se dé en agosto.
“Es importante recalcar que la recuperación aún no está afianzada y no es descartable que un deterioro en la situación sanitaria lleve a nuevos retrocesos en la actividad, en un contexto donde el mercado laboral sigue débil”, indicó el Departamento de Estudios de la firma.
En esa línea, en el banco de capitales españoles califican el escenario base de crecimiento delineado por el Central en el último Informe de Política Monetaria (IPoM), como “optimista” ante las proyecciones de consenso.
Por su parte, Itaúprevé –a raíz de las minutas publicadas a finales de junio– que el ente rector podría llevar la TPM a 1,5% hacia fin de 2021. A partir de ese punto, indicó la firma, “se desarrollaría un ritmo más moderado durante 2022 y 2023”.
Eso sí, advirtió el banco de matriz brasileña en su momento, la evolución de las medidas restrictivas ligadas a la pandemia de COVID-19 podría cambiar el escenario y retrasar la normalización monetaria.
Creada en 2002, la firma argentina Balanz está experimentando una veloz transformación: de ser una financiera tradicional se ha convertido en una fintec que abre 300 cuentas retail digitales por día, llegando a mas de 160.000 clientes en la totalidad del grupo. La pandemia y una inversión temprana en tecnología impulsan este crecimiento, según Claudio Porcel, fundador de la compañía.
Durante una visita a las oficinas de Balanz en Montevideo, Porcel explica la ambiciosa agenda de expansión de la empresa, que está trabajando para extender su aplicación móvil a toda Latinoamérica: “Nuestro objetivo en Argentina fue proporcionar una experiencia de inversión superior a nuestros clientes. Ahora queremos llevar ese modelo de negocio al resto de Latinoamérica. La plataforma estará disponible a finales de año o principios de 2022”, afirma Porcel.
Actualmente, el volumen de operaciones digitales crece a una tasa anual del 40% y mueve unos 36 billones de dólares por año en transacciones.
Empiezan a operar en Uruguay, centrados en Wealth Management
En Argentina, Balanz es Agente de Liquidación y Compensación en los mercados BYMA, MAE, MAV y Rofex, también administra su propia Sociedad Gerente de Fondos Comunes de Inversión y tiene una división de Wealth Management. La firma también trabaja con las principales gestoras de fondos del mundo y su equipo de reserarch que sigue la evolución de 20 o 30 estrategias.
La gestión de altos patrimonios será la prioridad de la oficina de Montevideo, donde actualmente hay 20 personas contratadas, se espera llegar a 100 y, además, atraer nuevos asesores independientes. El Wealth Management es actualmente el principal motor de crecimiento de Balanz, con un 70% anual.
Claudio Porcel enumera los proyectos que Balanz tiene actualmente en el pipeline y vuelve constantemente a lo que parece ser su prioridad: las nuevas tecnologías, cómo aprovecharlas para mejorar el negocio y cómo abordarlas como inversión. Durante el primer año de la pandemia, y producto del boom de su aplicación para minoristas, la empresa contrató a distancia a 250 personas (sobre las 600 actuales en Argentina) y tuvo que poner en marcha aceleradamente un proceso de e-learning que está siendo una de las bases de otro proyecto, Balanz University.
Un fondo de fondos con Credit Suisse
Mientras tanto, es inminente el anuncio de la apertura de un fondo de fondos con Credit Suisse que, entre otros, se pondrá a disposición del público retail. A través de Balanz Capital SGFCI, Balanz administra una familia de 14 Fondos Comunes de Inversión con más de 60.000 millones de pesos en AUM.
Por el lado del Wealth Management, se avanza en la apertura de un RIA en Miami, operación que se dará a conocer próximamente.
A la hora de invertir, Claudio Porcel considera que los bonos corporativos argentinos son una oportunidad: “Nosotros conocemos a los dirigentes y principales administrativos de las empresas grandes argentinas y sabemos que son sólidas. Por eso las recomendamos”. Interrogado sobre cuándo podrían levantarse los controles de capital en Argentina, Porce prefiera no dar fechas y expresa la necesidad de que se reconstruya la confianza de los inversores antes de que eso suceda.
Actualmente el Grupo Balanz administra más de 3.000 millones de dólares
Pixabay CC0 Public Domain. Deuda emergente: una solución atractiva para cosechar tasas de interés real positivas frente al bajo rendimiento de los mercados desarrollados
La deuda de los mercados emergentes puede representar en la actualidad una de las oportunidades de inversión más atractivas en el segmento de renta fija. Carmignac piensa que las condiciones de mercado existentes sitúan a este universo de inversión como el único que puede ofrecer hoy tasas de interés real positivas, en contraste con el bajo rendimiento de los bonos en los mercados desarrollados. La gestora sugiere un estilo de inversión flexible, oportunista y sostenible como llave de acceso a una amplia gama de catalizadores de rentabilidad en este universo, que incluye algunos de los mercados de renta fija más importantes del mundo.
En un reciente evento Carmignac, Joseph Mouawad, gestor del fondo Carmignac Portfolio EM debt y co-gestor del fondo Carmignac Portfolio Emerging Patrimoine, señaló que los mercados emergentes gozan de un entorno macroeconómico especialmente favorable no solo en el presente, sino también a corto y largo plazo.
En un contexto global marcado por la represión financiera y la incipiente inflación, este universo debería beneficiarse del repunte en la actividad económica mediante el aumento de las exportaciones y la subida de los precios de las materias primas. Además, el policy mix de los Estados Unidos debería conducir a un ciclo de depreciación del dólar con efectos positivos en los mercados emergentes, con sólidos motores de crecimiento secular a largo plazo, según Joseph Mouawad.
Aprovechar las oportunidades en renta fija en todo el universo emergente
Con la vista puesta en identificar las diferentes oportunidades que ofrecen los mercados emergentes de renta fija en todo tipo de coyunturas, Carmignac lanzó en 2017 su estrategia de renta fija en mercados emergentes, que aplica un enfoque de inversión socialmente responsable.
Mientras que la mayoría de los fondos de deuda de los países emergentes suelen centrarse de manera aislada bien en moneda fuerte, moneda local o en deuda corporativa, esta propuesta de Carmignac destaca por implementar amplias estrategias flexibles y no referenciadas en el espectro completo de inversión que ofrece la deuda denominada en moneda local y extranjera, así como en el mercado de divisas, aprovechando la descorrelación entre clases de activos, países, curvas y divisas.
Selección de valores: doble filtro, engagement y la importancia de la ESG
La estrategia se caracteriza por la aplicación de un sistema de doble filtro durante el proceso de selección de valores y, a continuación, el engagement directo por parte del equipo gestor con destacados stakeholders del mercado emergente que podría ver añadir algún valor en cartera. “No nos limitamos a aplicar filtros algorítmicos que nos indiquen dónde invertir”, puntualizó Joseph Mouawad.
El primer filtro analiza las valoraciones de diferentes activos respecto a los fundamentales macro (systemic sygnals) a fin de delimitar el universo de inversión. En segundo lugar, los potenciales valores seleccionados son sometidos a un exigente examen ESG conforme a un rating propio de Carmignac, el cual permite evaluar si los países en los que se encuentran esos valores están realmente – y seguirán en un futuro – progresando en término de sostenibilidad, social y gobernanza.
¿Dónde se encuentran las mejores oportunidades?
En líneas generales, la estrategia de Carmignac no favorece un producto o mercado emergente concreto. “Aprovechamos la flexibilidad que nos otorga nuestro mandato para elegir realmente la mejor clase de activos, en la mejor región, y construir la cartera en base a estos”, según Joseph Mouawad.
Esa flexibilidad y oportunismo que define la estrategia es manifiesta atendiendo a las convicciones del equipo gestor para la coyuntura actual, que favorecen activos y regiones dispares.
Así, en deuda denominada en moneda local, encuentra oportunidades atractivas en bonos de China, bonos de Corea y bonos de Rusia. Mientras, en deuda denominada en moneda extranjera, identifica alternativas interesantes en países como Rumanía, que debería beneficiarse de los fondos de recuperación de la Unión Europea, la República Dominicana o algunos países con buena gobernanza en África. Respecto a Forex, el gestor del fondo destacó las oportunidades que ofrecen algunas divisas asiáticas y aquellas ligadas al precio de las materias primas, como el rublo ruso o el sol peruano.
Si quiere saber más sobre las oportunidades que ofrecen los mercados de deuda emergente, le invitamos a descubrir más información aquí.
Pixabay CC0 Public Domain. La recuperación, la regularidad y convicción de las rentabilidades aúpa la inversión por factores
Aberdeen Standard Investments (ASI) ha anunciado el lanzamiento de una gama de fondos climáticos destinados a apoyar el cambio hacia las emisiones cero globales netas. La gestora explica que la lucha contra el cambio climático es uno de los problemas más importantes a los que se enfrenta el mundo. Además, considera que el camino hacia una economía de cero emisiones globales netas presentará retos y oportunidades.
En ese contexto de oportunidades se enmarca esta nueva gama de fondos clasificados como artículo 9* dentro de la regulación SFDR de la UE, cada uno de los cuales se centra en aspectos específicos del camino hacia las emisiones cero netas, ofreciendo a los inversores el acceso a las oportunidades de inversión que representa la transición climática mundial.
La gama climática de ASI permite a los clientes acceder a una serie de resultados en función de cómo quieran asignar su capital para impulsar este cambio. Por ejemplo con la estrategia Aberdeen Standard SICAV I – Global Climate and Environment Equity Fund invierte en empresas que están innovando y aportando las soluciones que necesitamos para alcanzar las emisiones cero netas. Es decir, invierte en las empresas que aportarán soluciones a los sectores más intensivos en carbono de la economía mediante un marco temático combinado con un análisis fundamental.
El fondo posee una cartera concentrada de empresas que reflejan nuestra mayor convicción tanto en términos de rentabilidad financiera como de impacto climático. Y cuenta con un equipo de inversión dinámico y experimentado, que se beneficia de la amplia base de análisis de más de 130 gestores de renta variable de todo el mundo que se comprometen activamente con los equipos directivos de las empresas en cuestiones climáticas.
Otro de los fondos de esta nueva gama es el Aberdeen Standard SICAV I – Climate Transition Bond, que invierte en los principales reductores de emisiones; empresas con planes de transición creíbles y ambiciosos de sectores con altas emisiones y empresas destacadas de otros sectores. Según explica la gestora, también invierte en proyectos que abordan los impactos físicos del cambio climático, así como en proveedores de soluciones que apoyan la descarbonización de otras partes de la economía a través de sus productos o servicios. “El resultado es una cartera de emisores de deuda que mitigan las causas y adaptan a la sociedad a las consecuencias del cambio climático”, señalan desde ASI.
Este fondo adopta un enfoque global sin restricciones para ofrecer una rentabilidad total atractiva y unos ingresos elevados e invierte en el esfuerzo de transición global hacia una economía baja en carbono y apoya la adaptación de las sociedades a los impactos del cambio climático. El equipo global de renta fija de más de 130 personas gestiona activamente más de 16.000 millones de euros en activos de renta fija ESG.
Por último, dentro de la gama se encuentra el Aberdeen Standard SICAV II – Multi- Asset Climate Opportunities Fund, que invierte en soluciones climáticas como la energía limpia, los vehículos eléctricos y las tecnologías de trabajo inteligente, invirtiendo en acciones, bonos e infraestructuras renovables. El fondo se beneficia de los altos niveles de diversificación de nuestro enfoque multiactivo y busca generar una rentabilidad atractiva a largo plazo. Es una estrategia que invierte en una cartera diversificada de acciones y bonos emitidos por empresas cuya actividad principal es ofrecer productos y servicios que permitan la transición a una economía sostenible con bajas emisiones de carbono. Según indica la gestora, se espera que tenga una puntuación líder en el mercado dentro de la Taxonomía de la UE.
“El cambio climático es una de las mayores amenazas de nuestros tiempos y en la actualidad afecta no sólo a las generaciones futuras, sino también a muchos países y empresas de todo el mundo. Para hacerle frente se necesitan billones de dólares de inversión cada año para transformar nuestro mundo en uno que emita cero gases de efecto invernadero. Esta transformación conlleva importantes oportunidades para los inversores. Para tener un impacto real en el mundo, tenemos que mirar hacia el futuro e invertir en los proveedores de soluciones y en las empresas que ayudarán a hacer realidad esta transición hacia las cero emisiones netas”, ha señalado Eva Cairns, directora de Estrategia de Cambio Climático de Aberdeen Standard Investments, a raíz del lanzamiento de esta nueva gama.
La gama climática de ASI destinará una parte importante de su capital a soluciones climáticas, es decir, a aquellas que la Taxonomía de Actividades Sostenibles de la UE define como «facilitadoras de la transición climática». Por ello, los tres fondos tienen una alta puntuación en la Taxonomía de la UE. Además, la exclusiva herramienta de análisis de escenarios climáticos de ASI, desarrollada en colaboración con el Aberdeen Standard Research Institute, facilita la identificación de las empresas que, en nuestra opinión, liderarán este momento de importante transformación.
“El enfoque de nuestro análisis de escenarios climáticos está motivado por la convicción de que una metodología rigurosa, prospectiva y transparente es esencial para incorporar los riesgos y las oportunidades climáticas a nuestra toma de decisiones de inversión y para intentar ofrecer resultados superiores a nuestros clientes. Creemos que este enfoque a medida representa un avance significativo en el campo del análisis de escenarios climáticos, lo que nos da una mayor confianza en los resultados y su aplicabilidad a la inversión en el mundo real”, ha añadido Cairns.
Por último, ASI ha asumido un papel proactivo en las iniciativas climáticas más importantes del sector, habiendo manifestado su compromiso con el objetivo de cero emisiones netas al unirse a la iniciativa Net Zero Asset Managers. En la Junta General de Accionistas de 2021 se publicaron más detalles sobre los compromisos de ASI con el objetivo «Net Zero» y ocho compromisos específicos sobre el clima que sustentan nuestra estrategia de inversión dirigida a este objetivo.
*Los fondos del artículo 9 se definen como aquellos fondos que tienen específicamente objetivos sostenibles como objetivo. Por ejemplo, invertir en empresas cuyo objetivo es reducir las emisiones de carbono.