Foto cedidaMario Cuccia, nuevo miembro del Consejo de Administración de Carmignac.. Mario Cuccia se incorpora al Consejo de Administración de Carmignac
Carmignac ha anunciado el nombramiento de Mario Cuccia como consejero y su incorporación al Consejo de Administración de la firma. Cuccia ha desempeñado la mayor parte de su carrera profesional en el sector financiero en Italia, donde ha ocupado destacados puestos en instituciones de primer nivel.
Desde la entidad destacan de su trayectoria su puesto de director general en Banca Fideuram y, posteriormente, su trayectoria dentro de Allianz Group en Italia, donde ostentó el mismo puesto. Además, fue consejero delegado y presidente del Consejo de Administración de la filial bancaria del grupo, Allianz Bank. Cuccia es actualmente presidente del Consejo de Administración de Eurovita Holding y Eurovita SpA, una aseguradora de vida italiana, y asesor del Consejo de Administración de MoneyFarm, una plataforma digital británica de gestión patrimonial.
A raíz de este anuncio, Edouard Carmignac y Eric Helderlé, cofundadores de Carmignac, han declarado: “Estamos encantados de dar la bienvenida a Mario Cuccia a nuestro Consejo de Administración. Sus conocimientos y saber hacer sobre los sectores bancario y financiero resultarán sumamente valiosos para nosotros a la hora de reforzar aún más el conocimiento estratégico de los retos de transformación y desarrollo de nuestros clientes, especialmente en Italia”.
Pixabay CC0 Public Domain. Los flujos hacia los ETFs de renta variable se ralentizaron en mayo por segundo mes consecutivo
Las asignaciones a ETFs globales alcanzaron casi 500.000 millones de euros a finales de mayo. Los flujos de entrada se ralentizaron el pasado mes hasta los 87.300 millones de euros, frente a los 104.000 millones de abril, ya que el apetito de los inversores por los activos de mayor riesgo se redujo.
Según los datos correspondientes a finales de mayo de 2021, a pesar de esta moderación, la renta variable siguió siendo más popular que la renta fija, con 59.100 millones de euros y 22.500 millones de euros asignados a estas dos clases de activos, respectivamente. “Este es el segundo mes en el que los flujos hacia la renta variable se han ralentizado, tras alcanzar un máximo de 109.000 millones de euros en marzo”, indica el análisis mensual sobre los flujos del mercado de ETFs elaborado por Amundi.
En renta variable, los inversores asignaron 8.300 millones de euros a los ETFs de renta variable registrados en europa, lo que supone una reducción con respecto a los 9.400 millones de euros del mes pasado. Los índices mundiales y estadounidenses siguieron siendo populares, captando 3.400 millones de euros y 1.900 millones de euros, respectivamente. Además, la renta variable europea y japonesa se han visto favorecidas, sumando 1.000 millones de euros y 900 millones de euros, mientras que se produjeron salidas de varias regiones de mercados emergentes, como Asia, Europa y América Latina.
“Esto refleja el mayor optimismo de los inversores sobre la recuperación económica en algunas regiones en comparación con otras. Este optimismo económico siguió impulsando las estrategias value, que captaron 1.500 millones de euros en mayo, con inversores que asignaron principalmente a la renta variable estadounidense y mundial. La infravaloración relativa del value en comparación con otras estrategias de smart beta ha contribuido a esta tendencia”, añaden desde Amundi.
En este sentido, los datos muestran que los sectores financiero y energético recibieron flujos de entrada de 483 millones de euros y 446 millones este mes, mientras que las estrategias climáticas sumaron 323 millones de euros. Las asignaciones a renta variable ESG fueron menores este mes, con 2.900 millones de euros, en comparación con los flujos observados a principios de año.
Respecto a los productos de renta fija registrados en Europa, continuaron siendo menos populares que la renta variable, con asignaciones de 3.200 millones de euros a esta clase de activos, lo que supone un descenso respecto a las entradas del mes pasado, que alcanzaron 5.300 millones de euros. “Las asignaciones estuvieron casi perfectamente equilibradas entre bonos del Estado y bonos corporativos, con asignaciones de 1.500 millones de euros y 1.200 millones de euros, respectivamente. El interés por la deuda pública china se aceleró con entradas de 875 millones de euros, mientras que la preocupación por el aumento de los precios al consumo impulsó la asignación continua a los bonos ligados a la inflación, con 451 millones de euros en la zona euro y 135 millones de euros en Estados Unidos”, destaca el análisis mensual de Amundi. Por último, la deuda corporativa y high yield de EE.UU. captaron grandes flujos de entrada de 476 millones y 345 millones de euros.
Por último, la gestora apunta que tras varios meses de reembolsos, las entradas en ETFs de materias primas revirtieron las salidas en el mercado estadounidense, donde más de 5.600 millones de euros se dirigieron principalmente al oro y a los índices de materias primas en general. En lo que va de año, los inversores han reembolsado 1.000 millones de euros de las estrategias de materias primas estadounidenses.
Los asesores financieros deben enfatizar la planificación a largo plazo, proporcionar herramientas para consolidar activos cuando sea necesario y comprender las preocupaciones de los inversores durante un período de incertidumbre a corto plazo, dice el último número de The Cerulli Edge —U.S. Asset and Wealth Management Edition.
Aunque los mercados financieros se recuperaron rápidamente de la recesión inducida por la pandemia en el segundo trimestre de 2020, el optimismo económico no se movió a la par.
Según Cerulli, un 34% de los inversores minoristas informan de la necesidad de tener más control sobre sus propias inversiones. Esta noción se correlaciona inversamente con la edad, disminuyendo de un máximo del 60% para los encuestados menores de 30 años a solo el 12% de los de 70 años o más.
Los inversores con proveedores de servicios en línea automatizados (57%) son los más propensos a querer más control, mientras que aquellos con proveedores independientes (18%) se sienten más cómodos con su nivel de control existente.
A medida que los inversores afrontan el impacto de la pronunciada volatilidad relacionada con el empleo, los asuntos políticos y sociales y su propia salud, Cerulli espera que evolucione el porcentaje de inversores moderados que se identifican a sí mismos, una medida que se ha mantenido cercana a dos tercios desde 2014.
Los proveedores deben estar equipados para el cambio con herramientas que ayuden a evaluar la capacidad y el apetito por el riesgo de la cartera, según Scott Smith, director de Cerulli.
“El personal de atención al cliente debe estar preparado para ayudar a los inversores a alcanzar sus objetivos y mitigar el riesgo con carteras diseñadas de manera óptima”, comentó.
Los proveedores que pueden consolidar el panorama financiero de sus clientes al tiempo que brindan un acceso más fácil a sus finanzas también satisfarán la creciente demanda de control de los inversores, lo que dará como resultado relaciones más profundas entre el cliente y el proveedor.
Con herramientas como la planificación presupuestaria a través de la banca digital y las opciones de inversión basadas en la tolerancia al riesgo, la prestación de servicios personalizados puede crear una planificación personalizada orientada a objetivos para inversores jóvenes y mayores en función de sus necesidades de inversión, al tiempo que impulsa a los clientes hacia mejores decisiones financieras para obtener rendimientos. carteras más grandes.
En general, el 61% de los inversores están de acuerdo en que están dispuestos a asumir riesgos calculados para ganar más dinero con sus inversiones. Si bien el número de encuestados que informan un perfil de riesgo agresivo en general es mínimo, los inversores siguen interesados en aprovechar las oportunidades para obtener ganancias siempre que se calcule su acción.
“En última instancia, cuando el riesgo y la recompensa se presentan a los clientes de una manera intuitiva, y de una manera que les permite ver las estrategias en relación con sus objetivos financieros, se vuelve más fácil tomar una decisión de inversión informada al tiempo que permite clientes para aprovechar al máximo los mercados en alza, incluso en tiempos más inestables ”, concluyó Smith.
La Bolsa Institucional de Valores (BIVA) y Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) realizaron el lanzamiento del “Programa de Bursatilización Conjunta”, con el que buscan atraer al mercado de valores a nuevas empresas, primordialmente del sector agro, a través de un esquema integral e innovador que permita a intermediarios financieros no bancarios (IFNBs) realizar una bursatilización conjunta en BIVA.
Este programa busca reducir una de las principales barreras a las que se enfrentan las empresas para poder acceder al financiamiento bursátil: los costos iniciales asociados a la preparación. Incluso, financieras de tamaño mediano podrán beneficiarse de una colocación en el mercado a costos competitivos, con ahorros que van del 35% al 60% (dependiendo el número de emisiones), permitiendo que las empresas se institucionalicen y logren diversificar sus fuentes de financiamiento desde etapas tempranas.
Para esto, BIVA reunió un grupo de trabajo con aliados de alto nivel que diseñaron este innovador esquema, teniendo a “Inteligencia Capital” como líder estructurador y a FIRA como banca de desarrollo que ofrece diferentes productos para bursatilizaciones, además de contar con otros aliados del mercado que brindarán sus servicios, financiando la preparación a costos competitivos. El programa podría replicarse con otro tipo de empresas en otros sectores.
“Este Programa de Bursatilización Conjunta con FIRA resulta muy relevante para BIVA, al estar en línea con nuestro objetivo de generar condiciones óptimas que incentiven el desarrollo equitativo del mercado, colocando a BIVA como una opción accesible y competitiva para que nuevas empresas puedan financiarse en el mercado público a través de deuda y/o capital”, aseguró María Ariza, directora general de BIVA.
Las características que distinguen a este esquema son: el que cada IFNB asume su propio riesgo hasta cierta calificación, en un segundo momento se crea un fideicomiso maestro emisor de deuda al mercado de valores, cuya calificación crediticia se buscará sea mayor. Como parte de los productos de FIRA, se espera que la estructura tenga una garantía parcial de cobertura de riesgo de crédito como banca de desarrollo, para facilitar la colocación entre el público inversionista, y cuenta con un sistema de control interno y de alertas tempranas.
“Desde BIVA conformamos este grupo de trabajo, en el cual la firma legal Kuri Breña Sánchez Ugarte y Aznar participará como abogado colocador, Inteligencia Capital como agente estructurador, HR Ratings y PCR Verum como calificadoras, CI banco como fiduciario, Monex como Representante Común, CXC como administrador maestro, FIRA como banca de desarrollo y Deloitte como gestor de riesgo y gobernanza”, comentó Daniela Calleja, Titular de Nuevas Emisoras en BIVA.
Jaime Cuadra Jr.se ha unido como socio, director gerente y miembro fundador de Better Way LLC, una firma de inversión privada donde lidera los esfuerzos de crecimiento global enfocándose en la obtención de capital, asociaciones institucionales, empresas conjuntas y relaciones con inversionistas.
En Better Way, une fuerzas con Alex Gregory, quien fundó la empresa, construyó su infraestructura y atrajo a sus inversores iniciales.
Better Way LLC es un gestor de inversiones que ofrece un programa de acceso único para invertir en fondos de private equity con un enfoque en mitigar el riesgo y evitar conflictos de intereses para los inversores. Clientes de Better Way -asesores de inversión, family offices e inversores institucionales- aprovechan de una trayectoria de más de una década de alto rendimiento y las relaciones profundas con gestores del equipo.
Jaime Cuadra tiene más de 15 años de experiencia en gestión global de activos, banca privada y estrategia corporativa. Recientemente fue director global de Clientes Institucionales en Compass Group en Nueva York, una firma de inversión con más de 41.000 millones de dólares en activos, donde lideró la unidad de la firma que recaudó capital y asesoró a inversionistas globales con inversiones latinoamericanas.
A lo largo de su carrera, el nuevo socio de Better Way ha ocupado múltiples puestos de liderazgo y habilitado negocios en América, Europa y Asia a través de asociaciones. Jaime es ingeniero industrial y de sistemas y también tiene una licenciatura en finanzas.
En su tiempo libre, Jaime esta involucrado en el arte contemporáneo y colecciona personalmente artistas emergentes globales. Jaime ha sido nombrado recientemente copresidente del Comité de Adquisiciones del YCC en el museo Guggenheim de la ciudad de Nueva York.
“El aumento y relevancia de private equity en las carteras de clientes (ya sean institucionales o individuales) es cada vez mayor, se espera que esta tendencia continúe en el futuro y no esperamos que sea una moda pasajera. La asignación a capital privado o deuda privada sigue siendo baja en relación a las carteras institucionales, y hay mucho margen para que esto evolucione”, expresó Jaime Cuadra.
“Dicho esto, hay muchas firmas, distribuidores y bancos que ofrecen fondos de PE de marcas de renombre; sin embargo, en el panorama competitivo, nuestros clientes nos han dicho que no escuchan un enfoque en el riesgo o una diligencia debidamente completada cuando se presentan estas oportunidades. En nuestra opinión, creemos que invertir periódicamente en una pequeña cantidad de oportunidades de calidad cuidadosamente seleccionados marca una gran diferencia en el rendimiento”, añadió.
Foto cedidaGianfranco Ferrari, futuro gerente general de Credicorp Ltd.. Gianfranco Ferrari, futuro gerente general de Credicorp Ltd.
Esta semana el directorio de Credicorp Ltd., el holding del que se desprenden todos los negocios del grupo financiero peruano, eligió al ejecutivo que reemplazará a Walter Bayly, quien decidió retirarse al finalizar este año tras casi tres décadas en el grupo.
El elegido es Gianfranco Ferrari de las Casas, informó la entidad a través de un comunicado, que actualmente se desempeña como gerente general del Banco de Crédito del Perú (BCP) y gerente general adjunto de la matriz. Él tomará las riendas del grupo financiero de capitales peruanos a partir de enero de 2022.
BCP es la principal empresa subsidiaria de Credicorp Ltd., holding que también agrupa a Pacífico Seguros, Mibanco, Mibanco Colombia, BCP Bolivia, Prima AFP, Atlantic Security Bank y Krealo. Además, cuentan con su brazo de asset management, Credicorp Capital, con presencia en Perú, Chile y Colombia.
En esa línea, Ferrari liderará las operaciones del Grupo Credicorp en todos los mercados que participa, es decir, en Perú, Chile, Colombia, Bolivia, Panamá y Estados Unidos.
Ferrari también es director de Mibanco y, en su extensa trayectoria en Credicorp ocupó, entre otras posiciones, las gerencias de Transformación Digital, Banca Minorista y Gestión de Patrimonios del BCP y la gerencia general de BCP Bolivia. Es administrador por la Universidad del Pacífico y MBA por Kellogg School of Management.
El ejecutivo reemplazará a Walter Bayly Llona, quien tomó la decisión de retirarse a fines del 2021 de su posición de CEO luego de 28 años en el grupo financiero, diez de los cuales fue CEO del BCP y los últimos tres CEO de la matriz.
“Gianfranco es la persona idónea para liderar a Credicorp en esta nueva etapa. No solo ocupará la cabeza de la holding por su extraordinaria trayectoria de 25 años en el Grupo y sus cualidades como líder, sino porque es el indicado para guiar a las empresas de Credicorp en los dos principales retos que tienen por delante”, indicó el presidente del directorio del holding, Luis Romero.
En ese sentido, destacó como dos grandes desafíos para la firma la “creación de una economía sostenible e inclusiva en Latinoamérica”, que genere valor para todos sus grupos de interés, yprofundizar la transformación digital, donde Ferrari la lideró en el BCP y actualmente encabeza su programa de sostenibilidad. “No podríamos estar más contentos de que sea el próximo CEO del Grupo”, sostiene Romero.
Otros cambios en el grupo
El directorio de la firma también aceptó la renuncia del gerente general adjunto de Credicorp Ltd., Álvaro Correa, que se hará efectiva a fin de año, tras 24 años en el grupo financiero.
El ejecutivo se mantendrá como presidente del directorio de Prima AFP y director de Credicorp Capital y Atlantic Security Bank. El directorio decidió además que, cuando Ferrari asuma la gerencia general en el 2022, se eliminen las gerencias generales adjuntas y que todas las líneas de negocios le reporten directamente.
La mesa directiva también aprobó la creación del puesto de gerente de Operaciones (COO), que reportará a la Gerencia General y será ocupado por Alejandro Pérez-Reyes desde enero del 2022.
Actualmente, él se desempeña como COO de Credicorp Capital y fue el líder de Gestión de Patrimonios de esta empresa por seis años. Anteriormente, fue gerente de Inversiones de Prima AFP y gerente de Derivados y Productos Estructurados en el BCP. Es economista por la Universidad de Lima y MBA por Harvard University.
Por su parte, en reemplazo de Ferrari, los directores de la matriz del Grupo Credicorp eligieron a Diego Cavero, actual gerente general adjunto de Empresas del banco. Es administrador por la Universidad de Lima y MBA por The University of Texas at Austin.
“Es un privilegio contar con Diego, quien hace 27 años trabaja en el Grupo. Es uno de los profesionales con más experiencia en banca empresarial del país. Su conocimiento de diversas industrias no solo garantiza que sigamos liderando el mercado financiero, sino que le permitirá ayudar a otros sectores y clientes a buscar un mayor impacto social con sus actividades”, acotó Romero.
“Agradecemos de una manera muy especial a Walter y Álvaro por todo su tiempo en Credicorp. Han sido líderes que transformaron nuestras empresas, definieron nuestro éxito e inspiraron a quienes los rodearon”, agregó el presidente del grupo financiero, sobre los ejecutivos salientes.
GALIUM CAPITAL, empresa de inversión inmobiliaria con oficinas centrales en Miami, Florida, fundada por socios mexicanos y que administra más de 500 millones de dólares en distintas propiedades a lo largo de Estados Unidos, fortalece su presencia en México.
En los planes de corto plazo de la compañía está la formación de un CERPI, para darle la oportunidad a inversionistas institucionales mexicanos de acceder al mercado de multifamily en EE.UU. «Galium ofrece a inversionistas mexicanos la posibilidad de invertir en bienes raíces en EE.UU. bajo las mismas condiciones con las que invierten las mayores empresas institucionales americanas, incluyendo la mejor calidad de propiedades, transparencia, y operación y costos eficientes.
“Somos una empresa 100% americana, pero fundada por socios mexicanos. Eso ha impregnado la diversidad de nuestra cultura, no sólo creando relaciones personales y entendiendo lo que el inversionista quiere, sino también a la hora de operar. Somos más proactivos e innovadores que el típico administrador americano”, indicó Jacques Bessoudo, CEO de Galium Capital.
Galium cuenta con oficina de representación en México, mientras que el corporativo y su equipo operativo está basado en Miami, lo que hasta el día de hoy los ha posicionado como referentes de la industria inmobiliaria en EE.UU. administra más de 500 millones de dólares, incluyendo más de 400 millones en propiedades residenciales de multifamily, y más de 75,000 m2 en espacios comerciales y de oficina en diferentes estados del país.
La economía mundial se está recuperando, y muchos países (sobre todo en el universo desarrollado) están venciendo a la pandemia de COVID-19 mediante campañas de vacunación coordinadas y estrictas medidas de confinamiento. En este contexto de reapertura de las economías a nivel mundial, ¿por qué han experimentado los mercados globales rachas regulares de turbulencia este año?
Tras permanecer largo tiempo latente, el espectro de la inflación ha despertado para atormentar a los inversores, señala BNP Paribas Asset Management en un nuevo análisis de la serie La Gran Inestabilidad. ¿Es su aparición un mero efecto transitorio de las medidas extremas de confinamiento del año pasado, o deberían los inversores prepararse para un entorno prolongado de precios crecientes?
La inflación aumenta
En lo que llevamos de siglo, la inflación apenas ha preocupado a los inversores, pues ha permanecido obstinadamente baja pese al considerable estímulo proporcionado por políticas monetarias acomodaticias a largo plazo. Sin embargo, los datos actuales muestran señales de un pronunciado aumento del nivel de precios. La cifra más reciente de los precios al consumo en los Estados Unidos reveló una subida del 4,2% en abril en tasa interanual, la más alta desde septiembre de 20081.
Aunque las autoridades han tratado de tranquilizar a los mercados declarando que las subidas de la inflación a corto plazo no son preocupantes, otras voces influyentes están poniendo en duda esta opinión. La secretaria del Tesoro estadounidense (y antigua presidenta de la Reserva Federal) Janet Yellen se vio obligada a rectificar tras plantear la necesidad de mayores tipos de interés en el país. Al mismo tiempo, el exsecretario Larry Summers y el antiguo economista jefe del FMI Olivier Blanchard han acusado a la administración Biden de espolear la inflación a través de un estímulo fiscal excesivo.
Ante mensajes tan dispares, ¿existe una respuesta definitiva para la cuestión de la inflación?
La inflación es un problema transitorio…
Para muchos, el motivo de la subida de la inflación es simple y no debería ser motivo de alarma. Gran parte del reciente aumento de los precios puede atribuirse a efectos de base: la corrección del bajón de los precios (sobre todo de las materias primas) que acompañó a los primeros confinamientos en marzo de 2020 y de las cifras de inflación deprimidas de ese momento.
Al relajarse los confinamientos y reabrir los servicios presenciales, los precios de bienes y servicios sensibles al confinamiento están comenzando a estabilizarse. Asimismo, y en base a lo ocurrido tras la reapertura del verano pasado, cabe esperar subidas de los precios de los vuelos, los alquileres de coches y el entretenimiento en los próximos meses.
También se anticipa una subida de la demanda de bienes, en base a la combinación de mejor confianza del consumidor y una renta disponible marcadamente superior para muchos hogares; ya solo en los Estados Unidos, se estima que la pandemia habrá generado un exceso de ahorro de 1,6 billones de dólares2. Esta acumulación de dinero disponible se ha visto amplificada por el reciente estímulo del presidente Biden, que ha emitido cheques de 1.400 dólares a muchos hogares estadounidenses.
Los cuellos de botella en el suministro son otro motor de inflación «a corto plazo». De nuevo, la pandemia trastocó gravemente las cadenas de suministro el año pasado, lo cual ha reducido las existencias en muchas áreas y regiones, y los usuarios no han podido reabastecerse. El ejemplo más claro de ello es la escasez de semiconductores. Sorprendentemente, esto no solo afecta a la producción de artículos tecnológicos: también ha rezagado la producción de electrodomésticos y de nuevos vehículos, que incorporan asimismo estos componentes. Cualquier escasez de producto contribuye a la subida de sus precios.
Por último, las carencias en el mercado laboral podrían llevar a los empleadores a ofrecer primas o mayores salarios para tentar a empleados cualificados a volver a su trabajo. Se prevé que la combinación de mayores salarios y mayor renta disponible tendrá un impacto inflacionario en el coste de la vivienda, y sobre todo en el mercado de alquiler, cuyas cifras sugieren que la negociación de nuevos contratos ya está conduciendo a mayores alquileres.
Muchos economistas, incluidos los de la Fed, creen que estos factores son transitorios y que la inflación volverá a los niveles objetivo, tal como ocurrió tras la crisis financiera global (CFG).
…o bien ha comenzado un cambio de régimen inflacionario
Una segunda corriente de pensamiento (y la visión que suscriben en BNP Paribas Asset Management) sostiene que, más allá de los efectos de base y cuellos de botella transitorios, existen motivos cíclicos y estructurales que han desencadenado un cambio de régimen hacia una inflación más elevada.
Para empezar, las cadenas de suministro globales se están reconfigurando. Históricamente, la globalización ha sido una fuerza deflacionaria, pero la era Trump dio pie a un aumento del proteccionismo que se vio exacerbado por la disrupción de las cadenas de suministro provocada por la pandemia. Ahora, tanto países como empresas están diversificando, reorganizando y repatriando cada vez más cadenas de suministro vulnerables, concentrándose en artículos médicos, vacunas, microchips y tecnologías avanzadas como inteligencia artificial y desarrollo de baterías, que por su importancia para la seguridad nacional requieren cierto grado de protección y autosuficiencia a nivel doméstico. Se anticipa que un descenso de la globalización, impulsado asimismo por aranceles comerciales crecientes y por restricciones en la transferencia tecnológica, limitará la competencia y desencadenará inflación.
En segundo lugar, la respuesta monetaria y fiscal ante la pandemia (liderada por Estados Unidos) ha sido extraordinaria en términos de escala, coordinación y ambición, y es otra causa potencial de inflación a largo plazo. Los confinamientos impuestos para frenar la propagación del Covid-19 han provocado una conmoción económica muy diferente a la de la crisis financiera global, y deberían permitir una recuperación mucho más rápida. Para muchos (incluidos Summers y Blanchard), la mera magnitud de la intervención fiscal plantea un claro riesgo de sobrecalentamiento de la economía, reduciendo el paro y espoleando la inflación salarial.
Por último, mucha gente cree que el clima de inflación de los últimos 20 años obedece a presiones demográficas domésticas y globales, en las que un crecimiento moderado de las poblaciones en edad de trabajar se ha visto respaldado por la inmigración neta. De cara al futuro, la mayoría de las economías desarrolladas están iniciando un retroceso demográfico, en virtud del cual el envejecimiento poblacional supondrá una mayor carga sobre los sistemas de pensiones y sanidad, y reducirá las tasas de ahorro globales. La expectativa es que tales desarrollos, combinados con mayores restricciones sobre la inmigración y la ralentización del crecimiento de la fuerza laboral, impulsarán los salarios reales y la inflación, pero tendrán la ventaja de reducir la desigualdad.
Los cambios demográficos en China son un buen ejemplo de estas influencias inflacionarias potenciales. En los últimos 30 años, la expansión económica del gigante asiático se ha beneficiado enormemente de un aumento del 30% de su población en edad de trabajar, y de la emigración sin precedentes del campo a la ciudad. Sin embargo, esta tendencia demográfica está a punto de dar marcha atrás. Al caer la población activa, se anticipa una subida de los salarios a medida que la población pasa de ser productora neta a consumidora neta, creando más competencia para los trabajadores productivos.
¿Intervención inminente de los bancos centrales?
La respuesta típica ante la inflación creciente es el endurecimiento de la política monetaria. La perspectiva de tipos de interés al alza preocupa claramente a unos inversores más sensibilizados, a juzgar por la marcada caída de los mercados globales ante el menor indicio de repunte de la inflación.
No obstante, los bancos centrales apuntan a un enfoque mucho más pragmático.
El verano pasado, la Fed adoptó un nuevo Objetivo de Inflación Media Flexible (FAIT, por sus siglas en inglés). En lugar de atenerse proactivamente a su objetivo de inflación del 2%, el nuevo enfoque más reactivo permitirá que la inflación se quede corta o supere este objetivo «durante un tiempo», de forma de que promedie un nivel general cercano al 2%. Su presidente Jerome Powell ha señalado de forma constante que las actuales tendencias de inflación son «transitorias», y declarado que la entidad no comenzará a reducir gradualmente sus medidas hasta que la economía haya registrado «avances significativos» hacia sus objetivos de pleno empleo y estabilidad de precios.
Los demás bancos centrales suelen seguir la línea marcada por la Fed, y el Banco Central Europeo manifestó que no dudará en utilizar plenamente la flexibilidad de la que dispone para evitar un endurecimiento de las condiciones financieras. Sin embargo, a juzgar por la reciente actividad de mercado, los inversores no están del todo convencidos de la postura de «esperar a ver» de las autoridades monetarias.
Abróchense los cinturones, se avecinan turbulencias
En última instancia, el tiempo dirá si la actual subida de la inflación acaba siendo transitoria o persistente, pero una cosa está clara: esta falta de visibilidad provocará turbulencias en los mercados globales a medida que los datos se analizan en detalle en busca de señales definitivas.
Así, los inversores deberían prepararse para un periodo inquietante. La incertidumbre es una constante en esta era de La Gran Inestabilidad, pero las fases de volatilidad dan pie a oportunidades de inversión significativas, y los retrocesos del mercado pueden y deberían verse como oportunidades de compra para el inversor paciente.
En BNP Paribas Asset Management «queremos ayudar a los inversores a navegar estos tiempos de incertidumbre, equipándolos con los conocimientos que les permitan tomar decisiones de inversión mejor fundadas. Para ello, investigamos antes de invertir y analizamos las cosas desde distintos ángulos. Porque en un mundo en pleno cambio, encontrar las mejores oportunidades requiere mantener una mente abierta y curiosa», escribe la gestora.
Pixabay CC0 Public Domain. Los ETFs sostenibles: una vía para “aportar nuestro grano de arena” que los minoristas empiezan a demandar con fuerza
Cada vez hay más interés en invertir de manera pasiva aplicando criterios de sostenibilidad. “Lo vemos en los flujos de entrada. La motivación es aportar un pequeño grano de arena para un mundo mejor y beneficiarse de que estas acciones han demostrado en el largo plazo”, ha explicado Antonio Royo-Villanova, Passive Specialist and ESG en DWS, en un encuentro organizado por Spainsif enmarcado en su Semana de la ISR.
Esta relación positiva entre rentabilidad y la ISR se puede comprobar a través de un meta estudio realizado por DWS en colaboración con la Universidad de Hamburgo. Los resultados señalan que el 80% obtienen una mejor rentabilidad, en el 89% unos cash flows más estables y una menor volatilidad en los ingresos, por tanto, un menor coste por capital.
A la hora de construir un índice de inversión sostenible hay dos grandes pilares, las exclusiones y las inclusiones, donde se eligen las mejores compañías que cumplen con los criterios ESG. “Estos pilares quitan en nuestros ETFs cerca del 60% del índice”, señala Royo-Villanova. En el caso de sus ETFS, combinan además un filtro de baja huella de carbono. “Esta combinación aporta una resiliencia y un retorno ajustado a riesgo mejor que el índice no ESG. Las exclusiones aportan más estabilidad a nivel macroeconómico y las inclusiones aportan compañías con sólidos fundamentales y métricas ESG”.
Pero construir un índice sostenible no solo es un tema de riesgos, también son capaces de capturar cuando el mercado recupera. “Los índices sostenibles baten a sus índices tradicionales de manera estructural y sostenida en el tiempo”, añade.
Para Fernando Gómez-Bezares, catedrático de Finanzas de Deusto Business School, es positivo “buscar productos que aúnen sostenibilidad e inversión indexada, dos tendencias recientes que unidas pueden dar interesantes posibilidades a los inversores con un beneficio social”.
Por su parte, Elisa Dorronsoro, directora de la Banca Privada Norte de BBVA, explica que, a pesar de que hace unos seis años naciese esta corriente con mucha fuerza e interés, hasta el año pasado con la Taxonomía era más difícil estructurar una oferta. Cumpliéndose, además, este año otro hito con la SFDR.
En cuanto a la demanda, la experta distingue entre el cliente institucional, que desde muy al principio ha demandado las inversiones ESG, y el minorista, un cliente que define como muy receptivo. “Más allá del extra de rentabilidad, perciben que se asumen menos riesgos, y más engagement, ya que a través de las gestoras tienen voz en las juntas. Estos dos mensajes le han calado al particular”, analiza.
Los ETFs sostenibles reúnen varias ventajas, pero, ¿están diversificados los índices sostenibles? Fernando Luque, senior Financial Editor de Morningstar, explica que excluir determinados sectores era uno de los argumentos en contra de la inversión sostenible porque reducir el universo de inversión suponía reducir las oportunidades. Sin embargo, según explica, “el grado de diversidad de los índices de sostenibilidad depende de cómo se hayan construido y la corriente actual mayoritaria es la best in class: incluir a las mejores empresas en sostenibilidad, frente a la exclusión», explica. En este sentido, insiste en que debe haber índices sostenibles diversificados.
La fiscalidad de los ETFs
A pesar de que los fondos de inversión tengan el beneficio de la traspasabilidad frente a los ETFS, los expertos insisten en que la fiscalidad no debe ser un impedimento ni debe privilegiar a los fondos de inversión frente a los ETFs. “Aunque la estructura jurídica es la misma. No tienen las mismas condiciones y es una pena”, admite Antonio Royo-Villanova.
Pero, según añade Luque, “la inversión sostenible es a muy largo plazo y a largo plazo hay pocas diferencias fiscales entre el fondo y ETF”.
Pixabay CC0 Public Domain. Audun Wickstrand-Iversen: El año de las grandes tecnológicas “no va a repetirse”
2020 fue el año de las grandes tecnológicas, como Apple, Google, Amazon y demás. «No va a repetirse», en opinión de Audun Wickstrand-Iversen, gestor del DNB Disruptive Opportunities Fund, al menos hasta que esté claro qué va a ocurrir en el plano normativo.
Según el gestor, los políticos a ambos lados del Atlántico parecen decididos a acotar el poder de las empresas de Internet en un momento en el que muchas acciones de estas firmas están muy caras. En su condición de principales vectores del cambio en el futuro, el comportamiento de los consumidores, la tecnología y el endurecimiento de la normativa están sentando las bases para una alteración profunda en este sector.
VW es uno de los casos más destacados de reorganización empresarial para los próximos años
Actualmente, el Green Deal es especialmente importante para abordar cuestiones tan relevantes como el cambio climático, la economía circular y la electrificación. «Si los Verdes se imponen en las elecciones federales en Alemania o entran en un gobierno de coalición, tendrán un gran impacto en estas áreas», señala Wickstrand-Iversen.
En este sentido, añade, el sector automovilístico se encuentra inmerso en la fase de transformación más profunda desde que Ford fabricó en la década de 1920 su Modelo T, el vehículo más vendido del mundo en aquel momento. Este gestor de fondos de DNB aprecia unas oportunidades enormes en esta transformación; sin embargo, reconoce que las empresas europeas tienen que ponerse todavía al nivel de sus homólogas de EE.UU. o Asia.
«Volkswagen, por ejemplo, será el mayor fabricante de vehículos eléctricos del mundo el próximo año«, pronostica Wickstrand-Iversen. «Con un PER entre 7 y 8 veces y un balance fantástico, Volkswagen se encuentra en una excelente situación, habida cuenta de que el grupo está invirtiendo mucho en software y capacidad de baterías». Durante los próximos tres-cuatro años, el segundo mayor fabricante automovilístico del mundo podría convertirse en uno de los casos más destacados de reorganización empresarial, observa este experto.
Los drones optimizan la agricultura
Con la vista puesta en los cambios demográficos, la alimentación ecológica está cobrando una importancia cada vez mayor a medida que los países ricos prestan más atención a los productos sostenibles y naturales. Las explotaciones agrícolas, sobre todo en EE.UU., pero también en Europa, está invirtiendo en maquinaria y equipos.
John Deere es uno de los mayores fabricantes de maquinaria agrícola. De acuerdo con Wickstrand-Iversen, esta empresa estadounidense está alumbrando grandes éxitos e innovaciones para optimizar la agricultura mediante el uso de drones y está probando sistemas completamente nuevos, como maquinaria agrícola autónoma, que traerán consigo una revolución en la agricultura a lo largo de los próximos años.
Por último, pero no por ello menos importante, este gestor de fondos está observando un desplazamiento desde las «acciones con expectativas elevadas» hacia las acciones baratas. Por ejemplo, cita el fabricante sueco de equipos de telecomunicaciones Ericsson, que pasa por ser un valor «aburrido», pero que está muy barato y genera mucha caja.
“También se encuentran oportunidades relacionadas con el estándar de comunicaciones móviles 5G, que es una de las temáticas de infraestructuras más importantes del momento. Junto con Nokia y Samsung, Ericsson es el líder en el mercado mundial de infraestructuras para redes 5G”, concluye.