. UBS pierde un equipo de brokers que gestiona 228 millones de dólares
Solo un mes después de abandonar el Protocol for Broker Recruiting, UBS perdía esta semana un equipo de brokers que maneja hasta 228 millones de dólares en activos de sus clientes.
Jason Bratt, David Nanson y Ashley Colvin dejaron la firma suiza para integrarse en TRUE Private Wealth Advisors, que forma parte de Dynasty Financial Partners, en un año plagado de este tipo de movimientos hacia firmas independientes.
Mientras Nanson es especialista en planificación financiera, transferencia patrimonial y gestión de impuestos, Bratt se centra en los planes de jubilación y las estrategias impositivas eficientes. Por su parte, Colvin aporta al equipo experiencia en clientes UHNW.
“En la mayoría de las empresas, los asesores financieros a menudo se encuentran encerrados en un entorno de productos y servicios propios. Muchos asesores han reconocido este conflicto y han intentado resolverlo yendo al brazo «independiente» de las mismas firmas. Con demasiada frecuencia, se encuentran atrapados en otra plataforma cerrada que ofrece solo lo que la empresa matriz considera apropiado”, explica TRUE Private Wealth Advisors.
“TRUE es un RIA que nace bajo la regla fidiuciara, lo que implica que estamos obligados a buscar las soluciones que van en mejor interés de nuestro clientes”, añaden.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Merrill Lynch. ‘Protocol for Broker Recruiting’: Merrill Lynch anuncia que se queda
Después de que la división de wealth management de Morgan Stanley, y más recientemente, la de UBS, decidieran abandonar el pacto de reclutamiento, el conocido como ‘Protocol for Broker Recruiting’, Wall Steet Journal revela esta semana que, tras analizarlo detenidamente, Merrill Lynch seguirá siendo parte de el, en un movimiento poco esperado en la industria.
No en vano, junto con Citigroup y UBS, el banco fue uno de los artífices allá por 2004. El pacto fue creado con el objetivo de reducir el número de litigios sobre los acuerdos de no competencia. Reducía costes de transición y las malas experiencias de los clientes cuando un banquero cambiaba de firma.
Sin embargo, a estas alturas muchos en el mercado consideran que este acuerdo voluntario –que aglutina más de 1.600 jugadores del wealth management – ha supuesto un costoso pacto de caballeros para las grandes firmas, si tenemos en cuenta que durante años los más beneficiados han sido los pequeños brokers de la industria.
Tras Merrill Lynch, que forma parte de Bank of America, el mercado se pregunta quién será el siguiente y todas las miradas se posan ahora en Wells Fargo.
Uso oportunista
Morgan Stanley hilaba incluso más fino en su comunicado en octubre al decir que había detectado un uso oportunista del pacto.“Las firmas se han unido para realizar contrataciones estratégicas y luego se han retirado«, argumentaba al anunciar su salida y lanzar un programa interno para mejorar las condiciones de sus banqueros.
Y es que con los cambios regulatorios, los riesgos reputacionales y el aumento de los mínimos para los clientes, hemos asistido a fuerte movimientos de financial advisors hacia firmas independientes. Sin ir más lejos, Miami fue testigo el año pasado de la aparición de varios broker dealers independientes emergiendo con fuerza en el panorama del wealth management internacional.
En una reciente encuesta de Schwab Advisor Services, casi la mitad de los que participaban, el 41%, respondió que cree que el modelo independiente se diferenciará más significativamente de los modelos cautivos porque pueden ofrecer a los clientes una gama más amplia de servicios, como planificación tributaria, sanitaria y filantrópica, que caen fuera del ámbito de la gestión tradicional de una cartera.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Dr. Bashi. Vanguard abre su estrategia de mercados emergentes a todos los inversores
Vanguard anunció la apertura el Emerging Markets Bond Fund a todos los inversores, ofreciendo una exposición amplia y activamente gestionada a los mercados emergentes de renta fija.
El fondo, que se lanzó en marzo de 2016 con Vanguard como único inversor, invierte sobre todo en deuda denominada en dólares estadounidenses emitida por gobiernos en mercados emergentes y empresas de propiedad estatal en esos mercados.
«The Emerging Markets Bond Fund amplía aún más nuestra línea de renta fija global y gestionada de forma activa«, dijo John Hollyer, director global de Vanguard Fixed Income Group y asesor del fondo. «El fondo es una oferta más especializada respaldada por un equipo global integrado de profesionales de inversión de Estados Unidos, Londres y Hong Kong».
La estrategia utiliza el J.P. Morgan EMBI Global Diversified Index como referencia e invierte en gobiernos y empresas estatales de todos los tamaños en países con mercados emergentes, incluidos México, Rusia, China, Turquía e Indonesia. El fondo también tiene una capacidad limitada para invertir en sectores de mercados emergentes fuera del índice de referencia, como bonos corporativos de mercados emergentes y bonos en moneda local.
Hay dos clases de acciones de bajo costo del fondo disponibles.
Foto: Marco Verch
. Los datos que demuestran que la riqueza sigue estando en manos masculinas
Si hay algo que salta a la vista en el extenso análisis sobre la riqueza de individuos UHNW llevado a cabo por UBS Group AG y la consultora internacional PwCes que el mundo de los ricos es netamente masculino y aunque las mujeres han ido ganando presencia en este segmento, lo hacen de forma lenta y con cuentagotas.
Los activos totales de los multimillonarios aumentaron un 17% en 2016, pasando desde los 5,1 millones de dólares a los 6 billones de dólares el año pasado. El número de personas que pertenecen a este exclusivo club aumento un 10%.
Sin embargo de los 1.542 multimillonarios con que cuenta la base de datos, sólo un 11% son mujeres, un dato que en los últimos años ha permanecido casi plano según UBS. El 89% de la riqueza queda en manos del genero masculino.
Como vemos en el gráfico, en Estados Unidos el número de mujeres consideradas UHNW supera ligeramente esa cifra del 11%, mientras Asia se queda muy por debajo. Es en Europa donde hay mayor número de mujeres ricas –por encima del 15% del total– y eso que desde 2013, la cifra tiende a caer ligeramente.
“Crear un plan filantrópico que se enfoque en las mujeres UHNW será especialmente importante de cara al futuro ya que este número sin dudas va a crecer. Un estudio de 2009 del Centro sobre Filantropía de la Universidad de Boston encontró que se espera que las mujeres de los Estados Unidos hereden el 70% de los 41 billones de dólares en transferencia de riqueza intergeneracional en los próximos 40 años”, explica la firma especializada Bentz Whaley Flessner.
Foto cedidaChristian Villouta. Christian Villouta se convierte en gerente de inversiones de LarrainVial
Christian Villouta ha sido nombrado gerente de inversiones de LarrainVial, después de desempeñarse como CEO de Latam Asset Management, gestora boutique especializada en la gestión de fondos alternativos de real estate, private equity y venture capital para clientes institucionales y de banca privada.
Con anterioridad, Villouta fue gerente general de Penta AGF, la división de asset management del grupo chileno Banco Penta, dejando la firma cuando se materializó la venta de la gestora al Grupo Security.
Durante su etapa en Penta AGF, Christian estuvo a cargo de desarrollar los fondos de inversión como estrategia de producto, para que la firma no sólo se posicionara como administradora de fondos mutuos, sino que también se especializara en la gestión.
Pixabay CC0 Public DomainFotografieLink. ¿Qué ha permitido la mejora del PIB europeo?
El año comenzaba con la vista puesta en la inestabilidad política y la debilidad del proyecto de la Unión Europea. Tras el Brexit, las citas electorales se juntaron en el calendario con el miedo del populismo en el horizonte. Sin embargo, la victoria de Macron en Francia rebajó el nivel de tensión sobre los riesgos políticos.
Según el último informe de Capital Group, justamente esta menor tensión política ha favorecido a que el PIB de Europa continúe su ritmo de crecimiento. “El año pasado, el mercado europeo de renta variable se vio afectado por el entorno de incertidumbre política, ante los programas de marcado acento populista que presentaban los candidatos a las elecciones celebradas en Holanda y en Francia. En ambos casos, acabó prevaleciendo la visión europeísta. Los mercados europeos de renta variable comienzan ya a beneficiarse de esta rápida disminución del riesgo político”, apunta en su informe.
Si se observan los datos, en 2016, el Euro Stoxx 50 subió menos del 2%, frente al 10% del S&P5002. “La reducción de la incertidumbre política ha permitido que los inversores puedan concentrarse en los fundamentales subyacentes”, apunta la gestora.
Y es que, tras varios años de debilidad, las empresas de la eurozona comienzan a registrar un crecimiento significativo de sus beneficios, lo que refleja un entorno macroeconómico más favorable. Además, ha aumentado la confianza de los consumidores y de las empresas, impulsando así la inversión y el gasto familiar. “El PIB de la eurozona por fin crece por encima de la media (lo que supone que se está reduciendo la brecha de producción), y en el primer semestre de 2017 ha alcanzado una tasa anualizada superior al 2%”, explican desde Capital Group.
Impulsores del crecimiento
Para la firma, la mejora que ha experimentado la tasa de crecimiento de la eurozona es el reflejo de varios factores. En primer lugar, la región se ha visto favorecida por la fuerte mejora de la actividad económica mundial, especialmente en Estados Unidos y China.
No obstante, también han influido ciertos factores internos. “El Banco Central Europeo (BCE) ha mantenido la orientación expansiva de su política monetaria, con tipos reales y nominales reducidos. A pesar del repunte de la actividad económica, las presiones sobre los precios y los salarios no han sido muy acusadas, lo que parece indicar que el BCE va a mostrarse prudente a la hora de reducir sus estímulos monetarios. Pensamos que dicha reducción comenzará a principios del próximo año, pero los tipos de interés podrían mantenerse en los niveles actuales hasta 2019”, señala.
Junto a la ayuda que ha supuesto la política monetaria, considera que la política fiscal ha dejado de suponer un freno para el crecimiento, una vez superado el error de los planes de austeridad que los gobiernos pusieron en marcha después de la crisis. “En Alemania, Francia e Italia comenzamos a ver leves estímulos. Además, el gasto de las empresas y los hogares está favoreciendo el aumento de la demanda de crédito, y los bancos empiezan a estar más dispuestos a conceder préstamos”, pone como ejemplo.
Oportunidades y riesgos
Según sus previsiones, tras un prolongado periodo de bajo rendimiento, hay margen para que la renta variable de la eurozona continúe generando ganancias en términos relativos.
“Normalmente, el mercado estadounidense supera al de la eurozona cuando el índice PMI del Institute for Supply Management se sitúa por encima del índice PMI de la eurozona (es decir, por encima de 1,00 en el eje derecho del gráfico). Pero resulta curioso comprobar que el rendimiento superior del mercado estadounidense durante el año 2016 no se vio acompañado por un PMI superior (hasta el breve repunte registrado tras las elecciones estadounidenses a finales de 2016). Ello indica que los inversores estaban incorporando una importante prima de riesgo político a la inversión en renta variable de la eurozona”, apunta.
De momento, según indica el informe, la mayor parte de la mejora experimentada por los mercados europeos se ha concentrado en el sector financiero, que fue el más perjudicado durante los años 2012-2015 y que se ha visto ahora favorecido por la reversión hacia la media de los elevados niveles de valoración.
“No obstante, aún existen tres riesgos evidentes”, advierte. En su opinión, estos riesgos son: que la economía mundial sufra una recaída por la ralentización del crecimiento en Estados Unidos o China; que se cometa un error político en la eurozona; y que se produzca algún tipo de crisis política en la eurozona. “En nuestra opinión, la precaria situación política y económica que se vive en Italia continúa siendo el eslabón más débil de la eurozona”, concluye en este último informe sobre Europa.
Wikimedia Commons. El Banco Nación vuelve al ruedo y emitirá deuda por primera vez en tres décadas
El Banco Nación de Argentina anunció que emitirá bonos tanto en la plaza local como en el extranjero, por primera vez desde la década de los 90, en una nueva señal de la reactivación del mercado de capitales que vive el país rioplatense.
La entidad, que este año multiplicó por siete su stock de préstamos, necesita esta emisión para fondear nuevos créditos y continuar su progresión dentro del sistema.
Aunque se desconoce el monto de la emisión, sí se sabe que tendrá durante el segundo semestre de 2018 y que la colocación sería tanto en pesos y UVAs como dólares, en el mercado local y en el extranjero.
El Banco Nación también anunció la emisión de un bono verde como señal de la implicación de la entidad en las prácticas de la banca sustentable.
Sophie del Campo, directora general de Natixis Investment Managers para Iberia, Latinoamérica y US Offshore. Foto cedida. Los inversores institucionales creen que el escenario actual de volatilidad, burbujas y mercados frágiles favorece la gestión activa
Dos tercios de los inversores institucionales de todo el mundo (65%) esperan que las burbujas en los activos afecten negativamente a sus inversiones en 2018 y tres de cada cuatro (75%) creen que el entorno actual de mercado favorece la gestión activa, teniendo en cuenta que la asignación a gestión pasiva ha caído por tercer año consecutivo, según un nuevo estudio publicado por Natixis Investment Managers.
Para posicionar sus carteras para la volatilidad, esperan que los bancos centrales vayan retirando gradualmente el apoyo monetario al sistema que implementaron desde la crisis financiera: Además, están aumentando la asignación a activos no tradicionales, incluyendo private equity, deuda privada e inmobiliario, en busca de alternativas a los bonos y rentabilidades más atractivas en un mercado muy saturado.
Sophie del Campo, directora general de Natixis Investment Managers para Iberia, Latinoamérica y US Offshore, afirma: “Los inversores institucionales de todo el mundo son conscientes de las frágiles condiciones de mercado, la distorsión de los precios y los riesgos sistémicos provocados por la intervención de los bancos centrales y el aumento de popularidad de la gestión pasiva, por lo que siguen recurriendo a los gestores activos para gestionar las condiciones actuales. Confían en que sus carteras están preparadas para afrontar cualquier escenario futuro, pero advierten de que los inversores de a pie no comprenden el riesgo sistémico que ha provocado el auge de la inversión pasiva”.
Natixis encuestó a ejecutivos en 500 inversores institucionales que, en total, gestionan más de 19 billones de dólares en activos para pensionistas, gobiernos, aseguradoras y otras entidades. El estudio reveló que el 59% de los inversores cree que la volatilidad ha sido suprimida artificialmente por los flujos de entrada a estrategias de inversión pasivas. Más de la mitad (57%) opina que el aumento de la inversión pasiva distorsiona los precios de las acciones e incrementa el riesgo sistémico (63%), algo de lo que el 72% de los inversores individuales todavía no se dan cuenta.
Navegando por el mercado de forma activa
Las estrategias activas gozan de una aceptación cada vez mayor entre los inversores institucionales, ya que ahora el 76% de ellos cree que el entorno de mercado actual probablemente sea favorable para la gestión activa de carteras.
Comparando directamente los enfoques pasivos y activos, una mayoría del 57% señala que los gestores activos baten a los pasivos a largo plazo. Tres cuartas partes de estas entidades (75%) afirman que los gestores activos acceden mejor a las oportunidades en los mercados emergentes y un porcentaje similar (74%) señala que los gestores activos ofrecen mejor exposición a clases de activos descorrelacionadas.
“Gestionar los riesgos bajistas será más complejo en 2018, pero el nuevo año también debería verse como una oportunidad. La volatilidad puede impulsar las rentabilidades de aquellos que sean capaces de aprovecharlas. Sin embargo, las entidades que no cuentan con carteras verdaderamente diversificadas y duraderas se arriesgan a reaccionar ante las correcciones y la volatilidad de los mercados, en lugar de beneficiarse de estos movimientos. Los mercados parece que vivirán un 2018 más movido y volátil y, por lo tanto, hará falta tener un planteamiento más activo”, dice Del Campo.
Burbujas en los bonos frente a volatilidad bursátil
Una inmensa mayoría de inversores institucionales (77%) cree que un periodo prolongado de bajos tipos de interés ha provocado burbujas en los activos. Además, de cara al futuro, el 62% de los inversores institucionales considera que las subidas de los tipos de interés son el factor más preocupante para las carteras en 2018 y podrían provocar una corrección en las cotizaciones de la renta fija.
La encuesta también refleja que las burbujas en los activos rivalizan con los acontecimientos geopolíticos (algo que preocupa al 74% tras los sucesos recientes) y que superan a las subidas de los tipos de interés (61%) como el factor que los inversores institucionales creen que tendrá un efecto más negativo en sus inversiones en 2018.
Los inversores institucionales creen que el mercado de bonos es la clase de activos tradicional con más probabilidades de sufrir una burbuja. Un 42% de los inversores institucionales espera una “burbuja en el mercado de bonos”, lo que prácticamente duplica el porcentaje de ellos que espera una burbuja inmobiliaria (23%) y se podría comparar con el 64% que aprecia una burbuja en el bitcoin.
“Ahora que todas las inversiones en renta fija están sujetas a la posibilidad cada vez mayor de que los tipos de interés suban de forma sostenida en todo el mundo, muchos inversores institucionales están empezando a ver con recelo las valoraciones actuales de los mercados de bonos. Por consiguiente, los inversores están volviendo la vista cada vez más a los activos alternativos y a las soluciones de inversión descorrelacionadas que puedan ayudarles a sortear los retos que plantearán los mercados en 2018”, dice Del Campo.
Un elevado porcentaje de inversores institucionales (30%) también observa una “burbuja” en las bolsas. Sin embargo, el principal rasgo de la renta variable en 2018 parece que será un repunte de la volatilidad (más que una corrección sostenida): una inmensa mayoría de los inversores institucionales (78%) espera un incremento de la volatilidad bursátil el próximo año. Analizando la ausencia de volatilidad este año, la mayoría de los inversores institucionales (59%) cree que esta situación es insostenible y, de hecho, es algo que les preocupa gravemente.
La búsqueda de diversificación
Los inversores institucionales están depositando más confianza en la renta variable y las inversiones alternativas descorrelacionadas para capear las dificultades en los mercados:
Las exposiciones a renta variable han aumentado hasta el 37,1% (frente al 33,8% en 2016), mientras que las exposiciones a renta fija han experimentado un ligero descenso y ahora se sitúan en el 33,9%, frente al 35,0% de 2016.
Posiblemente en respuesta al miedo a que se produzca una burbuja en las valoraciones de la renta fija, un tercio de los inversores institucionales (33%) está reduciendo la cantidad de bonos corporativos de alto rendimiento en sus carteras, mientras que una cuarta parte (26%) está haciendo lo mismo con sus posiciones en deuda pública.
Casi dos tercios (64%) afirman que la renta fija ha dejado de prestar su función tradicional de gestión del riesgo en las carteras, mientras que el 60% cree ahora que los activos tradicionales guardan, en general, una correlación demasiado elevada como para ofrecer fuentes de rentabilidad diferenciadas.
Por el contrario, el 78% afirma que usar más los activos alternativos es una forma eficaz de gestionar el riesgo, y casi la misma proporción de entidades va aún más lejos y asegura que las inversiones alternativas son, de hecho, esenciales para diversificar el riesgo de las carteras (70%, frente al 67% hace un año).
Dentro de las inversiones alternativas, se observa interés por los activos ilíquidos, ya que el 74% cree que sus rentabilidades potenciales hacen que merezca la pena correr el riesgo derivado de los plazos fijos que conllevan estas inversiones. El capital riesgo es el ejemplo más citado y el 39% de las entidades está aumentando sus inversiones en esta área; en este sentido, dos tercios (67%) de las entidades están satisfechas con los resultados de las inversiones de capital riesgo de sus carteras.
En términos de sector: muchos institucionales (45%) esperan que el sector tecnológico sea el que mejor se comporte con respecto al mercado en 2018, seguido por el sector salud (44%), defensa/aeroespacial (43%) y finanzas (41%).
En competencia directa con la renta fija, más de tres cuartas partes de los inversores institucionales declaran ahora que la deuda privada ofrece rentabilidades ajustadas al riesgo más altas que los vehículos de renta fija (frente al 73% hace un año) y el 36% de las entidades está elevando actualmente sus posiciones en deuda privada.
También está surgiendo una visión a más largo plazo sobre la sostenibilidad de las rentabilidades. Tres de cada cinco entidades (60%) afirman ahora que la incorporación de criterios medioambientales, sociales y de buen gobierno (conocidos por sus siglas en inglés ESG) será algo habitual en todas las gestoras dentro de cinco años. La razón parece ser tanto práctica como ética; una mayoría similar (59%) señala que la inversión con criterios ESG puede generar alfa.
“Los inversores institucionales de todo el mundo están preparándose para la corrección de los activos y la posible aparición de burbujas, así como para las subidas de los tipos de interés y el aumento de la volatilidad. Más allá de la inversión tradicional en renta variable y renta fija, también estamos viendo que muchos inversores institucionales buscan refugio en estrategias de inversión alternativas con la idea de proteger y diversificar sus carteras, y al mismo tiempo generar rentabilidades satisfactorias. Estamos viendo un mayor análisis en las carteras y también una nueva búsqueda de diversificación”, añade Del Campo.
CC-BY-SA-2.0, FlickrFoto: Bündnis 90/Die Grünen No. Invesco: “Hay una correlación muy estrecha entre el sector de consumo básico europeo y el mercado de bonos, ambos sobrevalorados”
El equipo de renta variable europea de Invesco, ubicado en Henley, ha elaborado un informe sobre el sector de consumo básico y su infraponderación en las carteras respecto al índice de referencia.
Desde su punto de vista, pagar de más por cualquier activo, independientemente de su calidad, es asumir un riesgo añadido. El sector de consumo básico se ha revalorizado significativamente en los últimos años gracias a la estabilidad y su percepción como valor refugio, situando sus valoraciones en un nivel complicado para encontrar oportunidades atractivas. El equipo de gestión ve otras áreas del mercado con mucho más potencial.
“En términos de rentabilidad, lo que no tenemos en cartera puede ser igual de importante, especialmente si una empresa, sector o factor es una parte importante de un índice. Al no tenerlos en cartera, estamos tomando una posición explícitamente contraria frente al índice. Dentro de nuestras carteras europeas, un sector que no tenemos es una de nuestras posiciones activas más importantes. Es el de consumo básico, referido a alimentación, bebidas y productos para el hogar”, explica Stephanie Butcher, gestor de fondos en el equipo de renta variable europea de Invesco en Henley.
El equipo estima que este sector se ha revalorizado significativamente en los últimos años, especialmente desde la crisis financiera global, donde la calidad percibida de un flujo de beneficios con baja volatilidad, crecimiento estable y solidez financiera le han convertido en el ejemplo de estabilidad y carácter defensivo en un mundo deflacionario de bajo crecimiento. La prima asociada al sector, dicen, ha aumentado constantemente y durante algún tiempo sus múltiplos absolutos y relativos han hecho difícil encontrar compañías con valoraciones adecuadas para contar con un lugar en la cartera.
“Aunque lo macro domina, estamos cada vez más intrigados por la evidencia de que los méritos bottom-up (las cualidades de estabilidad, confiabilidad y bajo riesgo de solvencia) están exagerados. De hecho, en este periodo en el que hemos visto una marcada recalificación del sector, tanto el crecimiento de los ingresos y volumen, la calidad de los beneficios y las rentabilidades se han deteriorado, mientras que el apalancamiento ha aumentado”, añade Butcher.
Para Invesco, hay evidencias a largo plazo de que hay una clara relación entre el crecimiento y la publicidad/marketing/promoción. El recorte de costes producido en este ámbito parece ser a muy corto plazo y el equipo de Invesco piensa que deberán repuntar de nuevo con el tiempo, afectando de nuevo a los márgenes.
En ausencia de crecimiento orgánico, la otra alternativa es comprar crecimiento, que es lo que las empresas del sector están haciendo, frecuentemente con el apoyo de los mercados de renta variable. Sin embargo, escribe Butcher, el resultado final es un balance que parece cada vez más “exigente”.
Por todo ello, el equipo de Invesco mantiene una posición claramente infraponderada en el sector de consumo básico.
“Creemos que está sobrevalorado frente al resto del mercado y frente a su propia historia. Hay una correlación extremadamente estrecha con el mercado de bonos, que también creemos que está sobrevalorado. Además de ello, pensamos que los fundamentales subyacentes que estarían detrás de la seguridad y carácter defensivo que atraen el interés de los inversores están deteriorándose. En un entorno en Europa de sólido crecimiento económico, inflación positiva y recuperación del crecimiento de los beneficios empresariales, vemos otras áreas del mercado con mucho más atractivo para el dinero de nuestros clientes”, concluye la gestora.
Sesión de debate sobre las pensiones organizado por Ibercaja en el Congreso de los Diputados.. Educación financiera, mercado laboral y PIB: las tres claves para que el sistema de pensiones recupere el equilibrio
“Las pensiones de hoy y del futuro”: es el título de la jornada de debate que Ibercaja organizó el pasado mes de noviembre en el Congreso de los Diputados. Un debate que abordó cuál será el futuro del sistema español de pensiones y que recogió también esas voces críticas, del ámbito de la política y la economía, que advierte de que el sistema no es sostenible a largo plazo.
En esta jornada participaron José Luis Aguirre, presidente de Ibercaja; Celia Villalobos, presidenta de la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo en el Congreso de los Diputados; Miguel Ángel García, director general de Ordenación de la Seguridad Social; Juan Van-Halen Acedo, presidente de la Asociación de ex Diputados y ex Senadores de Las Cortes Generales, y Carlos Ocaña, director general de Funcas; además de representantes de los principales grupos parlamentarios.
Todos los intervinientes coincidieron en destacar la importancia de los Acuerdos del Pacto de Toledo y la voluntad común que hay por seguir trabajando a favor del sistema de pensiones. En este sentido, José Luis Aguirre, presidente de Ibercaja, quiso recordar “el necesario consenso entre los partidos políticos, las organizaciones empresariales y sindicales, medios de comunicación y entidades financieras, a la hora de acometer la reforma estructural que el desafío de las pensiones requiere”.
Igualmente, todos los ponentes manifestaron su preocupación porque sea un sistema sostenible, sobre todo que ataje el problema de desequilibrio al que actualmente se enfrenta. “No hay soluciones únicas, ni una medida que de un solo golpe pueda devolver el equilibrio financiero al sistema de pensiones y que garantice que dentro de 40 o 50 años no tengamos que volver a reflexionar sobre ello”, señaló Carlos Ocaña, director general de Funcas.
Cuestión de números
El reto al que se enfrenta el sistema público de pensiones es grande. Según los datos oficinales, el número de pensiones se ha doblado en los últimos 36 años y su cuantía media también se ha duplicado en el mismo periodo. Según explicó Miguel Ángel García, director general de Ordenación de la Seguridad Social, el reto a corto plazo es neutralizar el saldo negativo.
“El reto está marcado por el envejecimiento de la población. Hay certeza de que el número de pensiones que habrá que asumir en 2050 habrá supondrá pagar 4,9 millones de pensiones adicionales, que corresponde en su mayoría a las pensiones del baby boom. Tener esto presente es fundamental cuando se tomen decisiones sobre el futuro del sistema de pensiones”, apunta García.
Como es lógico, una menor población dañaría la capacidad del sistema de recaudar; según García un escenario con menos población activa condena a la sociedad a una situación muy insostenible. Para sostener el sistema, propone, lo primero, mejorar el potencial de crecimiento económico de España. “Menos PIB es menos dinero para pagar pensiones, así que es necesario romper el techo del desempleo, apoyar políticas de natalidad y políticas de inmigración”, propone.
En este sentido, Hernández de Cos, director general de Economía y Estadística del Banco de España, destacó la importancia de la evolución del mercado de trabajo y la productividad de la economía para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones.
“La cotizaciones sociales dependen del peso que tienen los salarios en la economía y del tipo efectivo. Ha habido un pequeño incremento del tipo de efectivo y a la par se ha producido una reducción de la participación de los salarios en el PIB. La caída de la participación de los salarios en el PIB se ha visto compensada por un aumento del tipo efectivo debido en parte al incremento de la base máxima de cotización con respecto al salario medio. Ese efecto positivo con la reducción se ha visto compensado con un pérdida de peso del salario en el PIB”, explicó De Cos.
¿Cuestión exclusiva de España?
Durante estas jornadas, también participó Pablo Antolín-Nicolás, economista jefe de la Unidad de Pensiones Privadas de la OCDE, quién comparó el sistema español con otros sistemas europeos. “No hay ningún sistema perfecto; todos tienen su parte buena y mala. Todos los países se enfrentan a los mismo problemas, España no es diferente, lo que sí es diferente es cómo cada uno lo abordo y en eso sí podemos aprender de otras experiencias”, advirtió.
Tras y como trasladó a los asistentes, entre las recomendaciones que la OCDE hace para el sistema de pensiones español se encuentra:
Es necesario diversificar las fuentes para garantizar la jubilación, ya que un solo sistema no es suficiente
Las pensiones de capitalización deben ser complementarias a las pensiones públicas de reparto. Éstas se tiene que diseñar de forma global, es decir, teniendo en cuenta las que tiene el país
Separar las fuentes de financiación del sistema pública de pensiones: todo lo que no es contributivo se tiene que separar y llevarlo a los presupuestos del estado. Su objetivo es la lucha contra la pobreza, ya que el sistema de pensiones tiene como objetivo ahorrar para financiar el futuro
Mejorar el diseño de los sistemas de pensiones de capitalización
Para afrontar el problema de suficiencia de la pensiones es necesario contribuir más y por periodos más largos. Se debe discutir cómo hacerlo
“Nuestra labor es aconsejar y dar ideas a los países de la OCDE, pero no es nada obligatorio tomar las medidas que se comentan”, recalcó tras exponer estas recomendaciones. También insistió en la relevancia de la educación financiera ciudadana y en la cultura del ahorro a largo plazo, incluso mencionó la necesidad de una reforma que haga más atractiva los planes de pensiones privados.