Pixabay CC0 Public Domain. Bankia traspasa su negocio de depositaría institucional de fondos a Cecabank
Bankia ha llegado a un acuerdo con Cecabank para transmitir su actividad de depositaría institucional de fondos de inversión, sicavs y fondos de pensiones, que suman un volumen de 26.000 millones de euros. Esta operación hará que el patrimonio total depositado en Cecabank supere los 160.000 millones de euros.
Así, Bankia separará la actividad de depositaría de la comercialización o la gestión, lo que permitirá aportar una mayor seguridad a los partícipes en fondos de inversión y de pensiones, así como cumplir los mejores estándares de mercado, según aseguran desde la entidad.
El precio a cobrar por Bankia en esta transmisión es de 170 millones de euros, aunque a esa cifra podrán añadirse cobros adicionales a lo largo de la duración del contrato en función del cumplimiento de determinados objetivos del plan de negocio.
Además, el acuerdo contempla que Cecabank administrará el negocio de depositaría institucional de Bankia durante un periodo de 10 años. Está previsto que el cierre de la operación se produzca a lo largo del presente ejercicio, una vez se obtengan las autorizaciones pertinentes.
“Para Bankia es una satisfacción anunciar este acuerdo con un socio de referencia en el negocio de la depositaría como Cecabank, que el año pasado fue galardonado por tercer año consecutivo como Mejor Banco Custodio de España”, asegura el director general adjunto de Gestión de Activos y Participadas de Bankia, Fernando Sobrini. Y añade que, con esta operación, “Bankia se alinea con las mejores prácticas del sector, que aconsejan la separación en distintos grupos de las actividades de depositaría y gestión. De esta manera, nos centramos en el negocio de gestión de activos, en el que tenemos más de 30 años de experiencia”.
“Esta operación se inscribe en nuestro planteamiento estratégico de establecer relaciones a largo plazo con nuestros clientes. Nuestra aportación se basa en la alta especialización en una actividad que cada vez tiene una mayor exigencia y carga regulatoria, y en la independencia, ya que Cecabank no presta servicios minoristas ni realiza la actividad de gestión de activos de terceros”, subraya José María Méndez, director general de Cecabank.
Pixabay CC0 Public Domain. Los asesores financieros ven el ASG como una oportunidad de crecimiento empresarial
Los asesores financieros ven cada vez más los productos que invierten utilizando criterios ASG como una oportunidad para hacer crecer sus negocios y forjar lazos más estrechos con sus clientes. Un estudio mundial patrocinado por Franklin Templeton y realizado por NMG Consulting muestra que están recurriendo más a estas estrategias a través de su conocimiento de los productos y las asignaciones de sus carteras.
Tras analizar las actitudes de más de 800 asesores e intermediarios financieros hacia la inversión responsable en 10 de los principales mercados del mundo (EMEA, Asia-Pacífico y Norteamérica), la encuesta reveló que los asesores aceptan cada vez más el valor de incluir criterios ASG en la adopción de decisiones de inversión.
La investigación mostró que, en Europa, Italia y Francia están a la cabeza, ya que 9 de cada 10 encuestados asignan inversiones a productos ASG (91% y 90%, respectivamente). En lo que respecta a la ISR o a los productos centrados específicamente en el impacto, los asesores financieros suecos lideran el grupo con un 70% y un 68%, respectivamente, de asignaciones a estas estrategias.
Dicho esto, Franklin Templeton destaca en una nota de prensa que los inversores minoristas del Reino Unido están ligeramente por delante de sus pares de Europa continental cuando invierten utilizando criterios ASG: un 87% de los asesores británicos tienen clientes que invierten en esos fondos, frente al 85% de la media europea. Por otro lado, los inversores minoristas alemanes están en línea con sus pares de la región: un 84% invierte con criterios ASG y un 62% en productos ISR (frente al 61% del promedio europeo).
Según Julie Moret, directora global de ASG en Franklin Templeton, la creciente relevancia de las cuestiones ambientales relacionadas con la transición climática, la escasez de recursos naturales y la eficiencia está impulsando un mayor interés por las soluciones ASG. A su juicio, las presiones reglamentarias también están acelerando estas temáticas. “Es alentador que las conclusiones del estudio muestren que los asesores están respondiendo al aumento de la demanda de los clientes, lo que contribuirá a profundizar los conocimientos y la innovación de la industria en este espacio», asegura.
ASG como oportunidad de crecimiento
Todos los asesores financieros encuestados revelaron un creciente interés de los clientes en los productos de inversión con efectos ASG positivos, en consonancia con la creciente preocupación pública por las cuestiones ambientales y el cambio climático. Además, los asesores con experiencia en inversión responsable creen que es bueno para los negocios, ya que 9 de cada 10 consideran la inversión responsable como una oportunidad de negocio, incluyendo el 42% que la ve como una «gran oportunidad».
El director senior para Europa ex-Reino Unido de la gestora, Michel Tulle, considera que la industria de gestión de activos debe responder apoyando a los asesores a medida que se forman a sí mismos y a los clientes en ASG, “así como responder a la demanda de los inversores proporcionando una gama más amplia de productos y soluciones más innovadoras«.
Mientras, Moret advierte de que la industria necesita asegurarse de que está en consonancia a la hora de discutir la terminología y las prácticas ASG. “Una mayor transparencia sobre los riesgos y la medición de esos criterios no solo educará e informará mejor a los inversores en su toma de decisiones, sino que fomentará la inversión responsable».
Un impulso al interés de los clientes
A nivel macro, casi la mitad (46%) de los asesores creen que los factores ambientales (“A”) son los más importantes para sus clientes a corto plazo, con los de gobernanza (“G”) citados por el 34%, y los sociales («S») por el 20%. Además, las cuestiones ambientales atraen más a los clientes minoristas cuando invierten tanto a corto como a largo plazo (46% y 63%, respectivamente). En concreto, las preocupaciones sobre el cambio climático, la sostenibilidad y la eficiencia en el uso de los recursos son las tres principales cuestiones ASG que los asesores creen que cambiarán la forma de invertir.
David Zahn, jefe de renta fija europea, destaca que Franklin Templeton cuenta con “un sólido conjunto de productos de estrategias que integran ASG” como el Templeton Global Climate Change Fund, el Templeton Global Bond Fund y el Franklin European Total Return Fund. Este último recibió recientemente la etiqueta “Towards Sustainibility” de la CLA, una asociación sin ánimo de lucro bajo la normativa belga. “Además, seguimos respondiendo a las necesidades de los clientes añadiendo productos de inversión específicos para la iniciativa climática», añade.
Mayor asignación a ASG
Muchos asesores europeos ya han modificado su asignación de activos para dirigir la creciente demanda hacia la inversión con criterios ASG. Además, la encuesta reveló que el 77% de los asesores a nivel mundial espera que sus clientes aumenten su asignación a fondos ISR en los próximos dos años. Los asesores europeos exigen ahora opciones de inversión más responsables para satisfacer la demanda de los clientes. Dentro de las categorías de productos, la preferencia de los clientes es la gestión activa sobre la pasiva, y la nacional sobre la global, lo que, según Franklin Templeton, “refleja en parte el deseo de presentar narrativas convincentes de inversión responsable a los clientes”.
Foto cedida. Eurocaja Rural confía la gestión de su principal fondo de inversión a Mutuactivos
Eurocaja Rural confía la gestión del Rural Selección Conservadora, su principal fondo de inversión perfilado, a Mutuactivos. El vehículo continuará siendo un fondo dirigido a inversores de perfil conservador.
Rural Selección Conservadora es un fondo de renta fija mixta internacional dirigido a inversores de perfil conservador, con nivel de riesgo 2 sobre 7, según la calificación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El vehículo invertirá principalmente en renta fija pública y privada de emisiones de alta calificación crediticia y hasta un 12% en renta variable de cualquier capitalización o sector. La gestión estará basada en el control de la volatilidad, con un límite del 2% anual. El fondo presenta una inversión mínima de 10 euros.
Según la entidad, han elegido a Mutuactivos para gestionar su fondo por su “experiencia y enfoque en la preservación del capital y el control del riesgo, factores claves dado el momento de elevada incertidumbre en el mercado que vivimos en la actualidad”. Además, destacan el trabajo de la gestora de Mutua de la gestión activa en la captación de mandatos, tanto para inversores institucionales como distribuidores. El equipo de Mutuactivos está compuesto por 20 personas y liderado por Emilio Ortiz.
Eurocaja Rural cuenta con más de 88.000 socios, un millar de profesionales, más de 446.000 clientes y una red comercial que supera las 400 oficinas distribuidas en los territorios donde opera.
Mutuactivos es la primera gestora independiente de grupos bancarios por volumen de patrimonio gestionado. Administra más de 7.800 millones de euros distribuido a través de 32 fondos de inversión, 23 planes de pensiones (7 del sistema individual y 16 del sistema de empleo) y diversos seguros de ahorro.
Foto cedidaElena Segura se une al equipo de banqueros privados de A&G Banca Privada. A&G incorpora a Elena Segura al equipo de banqueros privados
A&G Banca Privada amplía su equipo de banqueros con la incorporación de Elena Segura en la oficina de la firma en Sevilla. Con más de 20 años de experiencia en el sector financiero, Segura se une al equipo de A&G desde el Banco BPM en Italia donde ha trabajado en el área de relaciones con inversores.
También formó parte del equipo de banca de inversión de JP Morgan tanto en Madrid como en Londres, y trabajó en Safei Gestores y Asesores de Inversión, entre otras entidades.
Es licenciada en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Sevilla y cuenta con un Máster en Gestión de Carteras y el Programa de Análisis Técnico y Cuantitativo por el Options & Futures Institute – IEB en Madrid. Actualmente está cursando el Programa IESE Women Angels en el IESE Business School.
“A pesar de la situación que estamos atravesando, en A&G no hemos detenido nuestra actividad. Seguimos construyendo la mejor casa para gestionar clientes y eso lo hacemos de la mano de los mejores banqueros, los que cuentan con una mayor experiencia. Por ello, nos sentimos muy satisfechos con la incorporación de Elena Segura al equipo de la oficina de Sevilla”, asegura Juan Espel, director general comercial de A&G Banca Privada.
En España, el Grupo A&G cuenta con 179 empleados y 75 banqueros distribuidos en ocho oficinas (Madrid, Barcelona, León, Logroño, Santander, Sevilla, Valladolid y Valencia) y 11.000 millones de euros en activos bajo gestión. El grupo cuenta además con una gestora en España y otra en Luxemburgo.
Está participado en un 42,51% por el banco suizo EFG, mientras que el 57,49% restante está en manos de los principales banqueros y ejecutivos de la firma.
Foto cedidaLola Solana, Head of Small Caps & ESG Equity Funds de Santander AM. Lola Solana (Santander AM)
Para Lola Solana, Head of Small Caps & ESG Equity Funds de Santander AM, la crisis del coronavirus ha supuesto una oportunidad “única” de inversión. Según ha explicado en su intervención en el Foro MEDCAP 2020, la crisis les ha permitido comprar valores de calidad, sin deuda, en sectores que no están estructuralmente dañados, con crecimiento y que, además, habían caído hasta un 30%. “Es una oportunidad muy interesante que hemos aprovechado”, explica. “El fondo ha estado al 100% invertido, en compañías con visibilidad, calidad y un management de credibilidad”, aclara.
Su filosofía se basa en evitar aquellos sectores estructuralmente dañados y apuntar por las empresas que, después de esta crisis, saldrán reforzadas. Entre estos sectores ganadores Solana nombra el tecnológico, farmacéutico, el consumo estable o las comunicaciones.
Según la experta, en cuanto vieron los primeros indicios de la crisis vendieron todo aquello relacionado con el consumo social. Dentro de esta categoría, entran, por ejemplo, aerolíneas, hoteles o centros comerciales. Asimismo, bajaron la exposición a petróleo, sector inmobiliario y empresas con deuda. A día de hoy recomienda cautela, sobre todo en sectores relacionados con la libertad de movilidad, ya que ante un posible rebrote serían los más perjudicados.
Las smalls caps, un acierto a largo plazo
Para Lola Solana,las small caps se presentan como una inversión muy acertada en tiempos de alta volatilidad. Su comportamiento en estos meses ha sido bueno y la experta encuentra cuatro razones que lo justifican: no están sujetas a la gestión pasiva, son empresas de nicho, tienen capacidad de crecimiento y se mueven por temas específicos y no por factores macro o de mercado. “Los factores específicos te llevan a mantener un valor a pesar lo que ocurra alrededor porque estás convencido de ese negocio”, aclara.
Para la experta, el contexto de volatilidad que ha provocado el coronavirus no ha hecho otra cosa más que resaltar el papel que juega la gestión activa. “Vemos que las subidas y bajadas son indiscriminadas, la gente compra y vende sin mirar los fundamentales. Esto pone en evidencia lo importante que es el papel del gestor y la experiencia que aporta. Pone en evidencia la importancia de un gestor que discrimine los sectores estructural o coyunturalmente dañados”, explica.
En su opinión, el valor se encuentra en fondos diferentes, que den otro ángulo y con los que el inversor se sienta identificado. “Tiene que despertar su confianza e ilusión por invertir y esto pasa por los fondos temáticos, ESG y small caps”, expresa.
Su interés por la inversión en small caps lo justifica explicando que son compañías que están en sectores nicho, con barreras de entrada muy altas, donde no hay competidores y son empresas líderes. “Son sectores con mucho crecimiento, como tecnología, farma o ciberseguridad, y en un entorno sin crecimiento, donde las compañías tienen problemas estructurales y van a tener crecimientos de ventas y de ebitda cero, las gente quiere comprar y mantener estas empresas que siguen creciendo”. Pero insiste en que el horizonte tiene que ser a largo plazo: “Si eliges bien, las small caps lo harán mejor a largo plazo, tienen mucho potencial”.
De hecho, Solana cree que las small caps liderarán la recuperación de la crisis. «En 2008 me acuerdo de que salimos de la crisis gracias a los empresarios y empresas, la necesidad les obliga a ser ágiles y reinventarse. Al final, sin ellas no hay salida de la crisis». Asimismo, la experta considera que con este tipo de compañías los inversores invierten con convicción e ilusión: “En las pequeñas empresas la gente invierte como un socio y en las grandes hay más especulación”, aclara.
Para Solana, pase lo que pase con la economía, “siempre encontrarás pequeñas compañías en sectores nicho e identificados que lo harán bien y es imposible acceder a ellas porque no están en los grandes índices. La demanda estará en la especialización, la diferenciación y en aportar valor. Los gestores es lo que tenemos que saber hacer, incorporar el valor para nuestros inversores”, añade.
La inversión socialmente responsable
La inversión sostenible ha sido una de las tendencias que más ha salido reforzada con la irrupción del coronavirus. Sin embargo, para Lola Solana, ya se trataba de una tendencia “imparable” antes de la crisis sanitaria. “El inversor había cambiado su forma de invertir y se sentía identificado con la inversión sostenible y con invertir con conciencia social. Todos, en general, buscamos ser parte de la solución y no el problema”, apunta.
A su parecer, esta crisis solo ha puesto más en evidencia la necesidad de que todos sumemos para conseguir un planeta más limpio, una sociedad más unida y gobiernos corporativos más transparentes y comprometidos con sus empleados. Asimismo, cree que, si antes de la crisis el medioambiente se llevaba todo el protagonismo, con el COVID-19 a la sociedad y a la gobernanza se les va a dar más importancia. “Queremos gobiernos transparentes, líderes empresariales y consejos que lideren e inspiren confianza, esta crisis también ha sido de confianza y tenemos que recuperarla. La ESG estaba para quedarse y ahora está para aumentar”, sostiene.
Pixabay CC0 Public Domain. El coste de riesgo de la banca casi triplica los niveles anteriores a la pandemia
Los fondos de inversión de Metagestión SGIIC se podrán contratar, a partir de ahora, a través de cuentas ómnibus en Inversis, la mayor plataforma de contratación de fondos españoles.
Las cuentas ómnibus permiten a los distribuidores agrupar el envío de órdenes a la gestora a través de una misma cuenta. Esto, además de equiparar la operativa de los vehículos españoles con los de las gestoras internacionales, hace que los productos sean más accesibles para un abanico mayor de clientes.
Otras gestoras, como Mutuactivos o Dunas Capital, también se han apuntado recientemente a la operativa con cuentas ómnibus.
Este mecanismo permitirá a los inversores acceder a toda la gama de fondos de inversión de la gestora. Entre ellos, destacan Metavalor, Metavalor Internacional y Metavalor Global. “Llevamos más de 30 años aportando valor a los partícipes y con este acuerdo queremos acercar la gestión activa e independiente al ahorrador medio de una forma cómoda y segura”, afirma Miguel Méndez, director general de Metagestión.
Además, en los últimos años la gestora también ha invertido en el proceso de operativa online y un área privada renovada.
“La decisión de Metagestión de adoptar este modelo de distribución es un gran paso para la industria. El crecimiento del número de gestoras con esta operativa facilita el acceso a sus fondos, incrementando las posibilidades de contratar productos de calidad por parte de los inversores”, asegura Alberto del Cid, consejero delegado de Inversis. Además, del Cid subraya que Inversis aspira a “proporcionar a las gestoras un conjunto de soluciones que les permita poner el foco en su verdadero valor añadido, la gestión de activos”.
Inversis cubre un abanico de servicios que va desde los más intrínsecos a las IICs, como los de administración y depositaría, hasta los de intermediación y ejecución de órdenes. Además, la plataforma también permite distribuir los productos a sus más de 130 clientes institucionales.
La pandemia del COVID-19 está teniendo un gran impacto en los mercados y la industria de gestión de activos se adapta a la situación. En lo que a inversión temática se refiere, está reenfocando las miradas hacia nuevas ideas, entre las que destacan la búsqueda de rentas, el sector de salud, el consumo online o la tecnología, pero también otras como las infraestructuras cotizadas, la ESG o la aceleración de las monedas digitales.
Como nuevas tendencias, Alicia García Santos, responsable de M&G Investments para España, Portugal y Andorra, destaca todas aquellas temáticas que permitan descorrelacionar la cartera y explica que es más que posible que se ponga el foco en aquellas megatendencias con capacidad para recuperarse de potenciales crisis de forma más rápida, como es el caso de las infraestructuras cotizadas, cuya recuperación tras la crisis financiera global de 2008 fue superior a la media del mercado.
“Contemplamos la inversión temática como aquella centrada en modelos de negocio que aumentan su relevancia debido a cambios y tendencias sociales estructurales e irreversibles. Esta crisis nos permite centrarnos en compañías que además de estar sujetas a dicho cambio estructural tienen balances sólidos que les permitirán capear la recesión que va a impactar a todos los sectores económicos, beneficiándose de las dinámicas estructurales que se están viendo fortalecidas durante este tiempo”, explica Marisa Aguilar, directora general para España de Allianz Global Investors.
La experta menciona temas como el trabajo a distancia (empresas que proporcionan servicios o aplicaciones que apoyan la comunicación y la colaboración eficientes entre los equipos y con los clientes, con un acceso estable, seguro y rápido a los datos y aplicaciones de una empresa, en un momento el que el teletrabajo podría implantarse en todo el mundo, incluso tras esta crisis), las actividades “en casa” (con temas como la educación, la economía de las mascotas, el uso de la inteligencia artificial y la vida digital, la ciberseguridad, los pagos digitales y los videojuegos), el sector salud, deporte y comida sana y finalmente, cuestiones relacionadas con el medioambiente (gestión de agua y residuos, energías limpias, etc) si los estímulos fiscales se canalizan a través de soluciones ambientales.
Desde Janus Henderson apuntan a un mayor interés por los sectores vinculados a la asistencia sanitaria y las ciencias de la vida, así como por la tecnología, ya que se ha puesto de manifiesto el papel fundamental que ha desempeñado al permitir el funcionamiento de muchas empresas y hogares. “Las tendencias disruptivas que estaban en curso, como la digitalización, se acelerarán, y es probable que aumente el interés de los inversores por las cuestiones ESG”, afirma Ignacio de la Maza, responsable de ventas de Europa Continental y América Latina en Janus Henderson Investors.
Búsqueda de rentas
La búsqueda de rentas será otra de las temáticas clave: “La rebaja de los tipos de interés en todo el mundo exacerbará aún más la búsqueda de rentas. Es probable que asistamos a un mayor interés en soluciones multisectoriales de generación de rentas, ya que los inversores buscan combinar la reducción de riesgos a través de la diversificación con la generación de rentas. Es posible que los inversores también tengan que replantear sus puntos de vista tradicionales sobre los sectores que aportan rentas a medida que los dividendos de sectores como la banca, el comercio minorista y el petróleo se vean presionados”, añade De la Maza.
Sobre nuevas temáticas, en Ninety One hablan de “diversificación de las cadenas de suministro mundiales, mayor regionalización resultante de la aceleración de la ruptura del anterior orden «quimérico», o la aceleración del uso de las monedas digitales oficiales por parte de los bancos centrales”, destaca Philip Saunders, co responsable de Multi-Asset en Ninety One.
Temáticas ya existentes
“Más que nuevas tendencias, pensamos que se reforzarán fuertemente las mayores inversiones temáticas a largo plazo en las que ya llevamos algunos años invertidos, como son la sanidad, la demografía, energías limpias, gestión de agua o residuos y tecnología”, añade Andrew McCaffery, CIO Global de Gestión de Activos de Fidelity.
También para Kevin Thozet, miembro del Comité de Inversión de Carmignac, en realidad la pandemia y, más aún, la respuesta de las autoridades a la pandemia, han conducido más bien a la aceleración de las tendencias de largo plazo imperantes, a saber: la de los bajos tipos de interés durante un período de tiempo aún más largo, o la de los consumidores conectados, que ha estado en auge con la crisis -como ilustra el auge del comercio electrónico en Estados Unidos, pero también en América Latina, o los videojuegos, que han reforzado su papel de líderes en el entretenimiento-. “A este respecto, la digitalización de nuestras economías y el creciente papel de los datos también debería reforzarse”, explica. Y también lo harían los temas relacionados con la salud junto con la necesidad de reforzar la atención sanitaria en todo el mundo.
Sin embargo, añade, podrían surgir o ganar más impulso otras posibles inversiones denominadas «temáticas»: “China ha sabido afrontar notablemente bien la crisis y ha demostrado que se encuentra entre las principales áreas de crecimiento, innovación y desarrollo. Otro tema que podría cobrar impulso en el futuro es el creciente escepticismo con respecto a las monedas fiduciarias y la preocupación por la degradación del dinero. De hecho, las respuestas monetarias y fiscales para reducir el impacto del virus han sido enormes, en lo que puede interpretarse como una forma de financiación directa del gasto público por parte de los bancos centrales, lo que a la postre ha dado lugar a una devaluación de las principales divisas. En ese entorno, el oro y los activos relacionados con el oro deberían ganar terreno”, añaden desde Carmignac.
Chris Iggo, CIO de Core Investments, en AXA IM, habla de las siguientes tendencias al pensar en inversión temática: reducción de la demanda de espacio de oficinas; capacidad de transporte en las grandes ciudades, ya que más personas trabajan desde casa; capacidad de difundir la fuerza de trabajo para un mayor porcentaje del tiempo de trabajo; cambios en las cadenas de suministro; el papel de China en la red mundial de cadenas de suministro se verá cuestionado; mayor inflación a medida que se restablezcan las cadenas de suministro y por el efecto de los grandes déficits y los balances de los bancos centrales (aunque es probable que sea un efecto a más largo plazo).
Foto cedidaStephen Cohen, responsable de iShares e inversiones indexadas para la región EMEA en BlackRock.. Stephen Cohen (iShare) : “Ha llegado el momento de dejar atrás el término de gestión pasiva”
En opinión de Stephen Cohen, responsable de iShares e inversiones indexadas para la región EMEA en BlackRock, ha llegado el momento de dejar atrás el término “gestión pasiva”. Considerando su actual éxito, y tras 20 años desde que iShares (parte de BlackRock) lanzara su primer ETFs al mercado, Cohen defiende el papel de los ETFs como “pilar central” de la cartera.
En su opinión ya no tiene mucho sentido el debate que la gestión activa y la gestión pasiva como dos estilos enfrentados. “Este planteamiento asume, falsamente, que el inversor tiene que elegir entre uno de los dos tipos de gestión. La palabra pasivo, que a menudo se utiliza indistintamente con la inversión en índices, proyecta una imagen que no refleja la forma en que los inversores usan los ETFs y los fondos indexados”, afirma.
En este sentido defiende que los ETFs se están convirtiendo en “una herramienta integral” para poner en práctica sus decisiones activas de inversión, incluso para aquellos gestores que se centran en lograr alfa. También, considera que se han convertido en una opción para momentos de crisis, pese a que ha sido una de las principales críticas que se le ha hecho a este vehículo de inversión.
“Los ETFs han pasado otra prueba en estas últimas semanas. En medio de la mayor volatilidad del mercado que hemos visto desde 2008, los productos funcionaron exactamente como están diseñados. En la renta fija en particular, a medida que los mercados de bonos subyacentes se volvían más volátiles y difíciles de negociar, los inversores recurrieron a los ETFs para reequilibrar las tenencias, cubrir las carteras y gestionar el riesgo. Los compradores y vendedores pudieron realizar transacciones a través del mercado secundario de ETFs a precios en tiempo real, accediendo a la liquidez cuando más la necesitaban. Mirando hacia atrás en los últimos 20 años, cada vez que hemos experimentado la volatilidad del mercado, el número de nuevos usuarios de ETFs ha aumentado. Creo que la experiencia durante esta crisis acelerará la adopción de ETFs en todo el mundo”, argumenta.
De cara a una mayor adopción de los ETFs por parte de los inversores, Cohen considera que MiFID II ha sido positivo ya que la normativa ha puesto el acento en la transparencia y la información sobre los costes en torno a los vehículos de inversión. Según afirma, MiFID II “ha catalizado un impulso para la eficiencia de costes dentro de las carteras, lo que en última instancia va a beneficiar a los ETFs, tal como hemos visto en Estados Unidos. Además ahora, los inversores europeos pueden ver ahora los volúmenes reales y la liquidez de que disponen en el mercado de ETFs, que está atrayendo a nuevos usuarios tanto en Europa como en Asia y América Latina. El cambio no se produce de la noche a la mañana, pero MiFID ciertamente ha sentado las bases para el crecimiento futuro”.
Teniendo esto en cuenta, el responsable de iShares e inversiones indexadas para la región EMEA en BlackRock estima que el mercado de ETFs tiene mucho margen de crecimiento. “Hay 5 billones de dólares en ETFs a nivel mundial, y más de 800.000 millones de dólares en ETFs europeos, sin mencionar los fondos indexados. Estas cifras pueden subir y bajar en la actual volatilidad del mercado, pero la trayectoria a largo plazo no ha cambiado. Por el contexto, los ETFs siguen representando sólo una pequeña parte de los mercados: el 10% del total de los activos de renta variable, y menos del 2% para los bonos”, concluye
Pixabay CC0 Public Domain. Los fondos UCITS registraron salidas netas por valor de 313.000 millones de euros en marzo
La crisis del COVID-19 provocó importantes salidas netas en los fondos UCITS por un importe de 313.000 millones de euros, en marzo. Según los datos de la asociación europea de la gestión de activos, Efama, estas salidas no fueron superiores a las registradas en octubre de 2008, en el momento más duro de la anterior crisis financiera mundial.
En su última nota informativa, Efama indica que los mercados bursátiles de todo el mundo sufrieron un fuerte descenso impulsado por el menor crecimiento económico y del beneficio de las empresas. “Tal y como se había previsto, la crisis provocó importantes salidas netas en vehículos UCITS en marzo de 313.000 millones de euros”, apuntan.
Los fondos de bonos, por ejemplo, registraron salidas netas por valor de 150.000 millones de euros, ya que la tensión del mercado de bonos coincidió con una mayor percepción del riesgo y una mayor demanda del efectivo. Respecto a los fondos de renta variable y de multiactivos, sufrieron salidas netas moderadas de 60.000 millones de euros y 44.000 millones de euros, respectivamente. Según indican desde Efama, esto sugiere que muchos inversores evitaron sacar el dinero de los fondos al considerar que las bajas valoración también pueden representar una oportunidad de compra.
Por último, fondos del mercado monetario registraron salidas netas relativamente fuertes, de 43.000 millones de euros, ya que los grandes inversores institucionales buscaron posiciones de liquidez y los grandes inversores corporativos se enfrentaron a desembolsos al final del trimestre.
«A pesar de los importantes flujos de salidas de fondos en marzo, en general los inversores pudieron rescatar su dinero a diario. Esto demuestra la eficacia del actual marco reglamentario para los fondos domiciliados en la UE, especialmente en lo que respecta a la gestión del riesgo de liquidez», ha señalado Tanguy van de Werve, director general de Efama.
Claves de la resiliencia
Desde Efama defienden que la industria de fondos ha demostrado mucha resiliencia durante este evento de mercado. Una resiliencia que se explica, primero, por el robusto marco regulatorio con el que cuenta. “Las herramientas de gestión de la liquidez a disposición de los gestores de vehículos UCITS han resultado útiles para gestionar eficazmente las solicitudes de reembolso, evitando la venta forzosa o las suspensiones para la gran mayoría”, defienden desde Efama.
En este sentido matiza que las “pocas suspensiones de UCITS” observadas en marzo se debieron principalmente a problemas en la valoración de los activos subyacentes (sobre todo bonos en mercados con menor profundidad, y en el sector inmobiliario) ante las condiciones volátiles del mercado.
Junto con la robustez legislativa, Efama también destaca la estrecha cooperación entre el sector y los supervisores, las medidas de liquidez tomadas por los bancos centrales y la resistencia de la infraestructura del mercado como otros tres elementos que han ayudado a esa resilencia. En su opinión, los paquetes de estímulo económico y fiscal a gran escala para apoyar la economía tuvieron un efecto positivo en las perspectivas de las empresas, mejoraron las valoraciones y “pueden haber contribuido a convencer a muchos inversores de no desinvertir”.
Justamente, Efama destaca el papel que han jugado los inversores y la resistencia que han mostrado ante la volatilidad. “El tamaño relativamente bajo de las salidas netas de fondos de capital en marzo sugiere que muchos inversores han aprendido de la crisis financiera mundial que es mejor pensar a largo plazo que entrar en pánico y vender cuando el mercado de valores cae. Por el contrario, algunos inversores vieron la caída del mercado como una oportunidad para comprar cuando los precios eran bajos”, apuntan.
Por último, consideran que las gestoras y firmas de inversión han dado la talla y han sido capaces de seguir totalmente operativas, pese a que la mayoría de los equipos están trabajando desde sus casas. En opinión de Efama, esto constituye otro ejemplo de madurez y resiliencia de la actual industria de fondos europea.
Pixabay CC0 Public Domain. Private Equity: invertir a largo plazo para construir un mundo más resiliente
En medio de la crisis actual, el private equity ha resurgido como una herramienta indispensable para apoyar a las empresas en el camino hacia un desarrollo sostenible. Hoy, más que nunca, las estrategias de inversión para la regeneración de áreas urbanas y la infraestructura social/ambiental, así como la relocalización de las cadenas de suministro, deben tener un papel prioritario.
El private equity está perfectamente posicionado para establecerse como un camino hacia el mundo del mañana, un camino que esperamos que proporcione un crecimiento sostenible, equitativo y duradero.
Con independencia del escenario económico, la principal ventaja de esta clase de activo radica en su enfoque a largo plazo, que la protege de la toma de decisiones apresurada y de la volatilidad asociada a los activos cotizados en bolsa. El sector también se beneficia de la confianza de los socios inversores o limited partners que tratan de diversificar sus activos en un entorno de tipos de interés bajos o incluso negativos. Tanto es así que los gestores de fondos o general partners tenían una volumen récord cercano a los 2 billones de dólares preparados antes de la crisis.
De manera que, disponen de amplias reservas no sólo para proteger las carteras, sino también para aprovechar las oportunidades de adquisición y recapitalización si los precios caen o las circunstancias empeoran. Tampoco es el momento de reducir las posiciones. En una reciente encuesta de private equity International, sólo el 5% de los encuestados dijeron que buscaban reducir sus carteras en el mercado secundario.
Relación estrecha con las empresas
La industria del capital riesgo es hoy mucho más madura que en 2008-2009, cuenta con equipos de inversión especializados y experimentados que han perfeccionado sus habilidades técnicas, financieras y de gestión. Estos profesionales se esfuerzan por mantener una estrecha relación con las compañías en las que invierten, formando parte de los consejos de administración, contribuyendo a la gestión y a las decisiones estratégicas y adquiriendo derechos mediante acuerdos con los accionistas. El resultado es una mejor gobernanza, una sólida capacidad operativa y el intercambio de las mejores prácticas entre las diversas empresas que forman parte de una cartera.
No obstante, si el capital riesgo aspira a desempeñar un papel destacado en la fase de «reconstrucción» posterior al cierre por el COVID-19, debe evitar las estrategias de especulación a corto plazo. En cambio, debe centrarse en estrategias de crecimiento viables y en empresas con potencial para transformarse, para crear valor sin un apalancamiento excesivo y capaces de generar cash flow recurrente.
Ir más allá del ESG para colocar el impacto en el corazón de la gestión de riesgos
Aunque la rentabilidad seguirá siendo clave, los mejores temas de inversión en el futuro serán aquellos que den cuenta de todas las «externalidades» y reflejen una comprensión del impacto empresarial en el mundo. Los criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) deben convertirse en un verdadero instrumento para gestionar los riesgos y asegurar la estabilidad de la cartera y no seguir siendo simplemente un instrumento de cumplimiento o de comercialización.
Por consiguiente, en los próximos meses y años, el capital riesgo desempeñará un papel fundamental en la satisfacción de las crecientes necesidades no sólo en lo que respecta a la infraestructura social, en particular para las personas de edad, sino también en lo que respecta a la infraestructura ambiental. Esto se aplica a la gestión del agua y los desechos, la descontaminación de los suelos para reducir la presión sobre las tierras de cultivo, o la búsqueda de soluciones reales al crecimiento de las ciudades, promoviendo la movilidad y la diversidad urbana. Estos activos también proporcionarán a los gobiernos un medio para facilitar la recuperación económica mediante una mayor colaboración entre el sector público y el privado.
Las limitaciones de la globalización
Además, si bien la crisis ha confirmado la importancia de la innovación tecnológica para la salud, la educación y la digitalización, también ha puesto de relieve los excesos de la globalización y la necesidad de la regionalización.
Las cadenas de suministro deben redefinirse para lograr una mayor autonomía y un aumento del comercio interregional en un mundo tripolar (América del Norte-Asia-Europa). A este respecto, la región de Europa meridional (España, Portugal, etc.) y la región de Oriente Medio y Norte de África (MENA), en particular Marruecos, tendrán indudablemente un papel clave que desempeñar como alternativa a las regiones más distantes, especialmente Asia. La regionalización de las cadenas de suministro debe primar sobre un modelo globalizado que ha llegado a su límite. Nuestro objetivo es contribuir a estas transformaciones dedicando la energía y el tiempo necesarios para asegurar su éxito
Trinbuna de Johnny El Hachem, CEO de Edmond de Rothschild Private Equity.