HSBC Global Asset Management y la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) listaron en el SIC el ETF HSBC Hang Seng TECH UCITS (con clave HSTEN MM), el primer y único ETF UCITS que replica el comportamiento del índice Hang Seng TECH.
Este ETF, que tiene un TER de 0,50%, ha sido diseñado para brindar a los inversionistas acceso al sector de tecnología de rápido crecimiento de China siguiendo el desempeño del índice Hang Seng TECH, que tiene como objetivo capturar el potencial de las 30 compañías de tecnología más grandes que cotizan en la Bolsa de Valores de Hong Kong. El índice contiene empresas de cinco sectores diferentes que incluyen tecnología de la información, industria, salud, consumo discrecional y finanzas.
Entre varios criterios de elegibilidad, las empresas incluidas en el índice deben tener una alta exposición comercial a al menos uno de los cinco temas tecnológicos. También se les exige que pasen por un screening de potencial de innovación, bajo el criterio de que operan un modelo de negocio habilitado para Internet o una plataforma móvil, tienen una fuerte inversión en investigación y desarrollo o un crecimiento” de ingresos anuales de en al menos el 10%.
«El sector tecnológico de China ha experimentado un crecimiento explosivo en los últimos años y la región es el segundo centro mundial más grande de empresas unicornio, las cuales se benefician del acceso a incentivos gubernamentales y del mercado interno de rápido crecimiento de consumidores de clase media y conocedores de la tecnología. El ETF HSBC Hang Seng TECH UCITS ofrece a los inversionistas una forma transparente y rentable de invertir en este creciente sector y aprovechar la oportunidad única que representa», explicó Olga de Tapia, directora global de Ventas de ETFs de HSBC Global Asset Management.
Por su parte, María Ariza, directora general de BIVA, señaló: “El listado de este ETF es una muestra clara del esfuerzo constante de BIVA por seguir innovando en el sector bursátil, además del trabajo en conjunto con HSBC, mediante la atracción de nuevas opciones con la finalidad de que los inversionistas puedan cumplir sus objetivos. Estamos muy estusiasmados porque este ETF, una vez más comandado por HSBC, amplía la oferta de ETFs de BIVA que siguen una ruta hacia China, uno de los mayores mercados del mundo”.
HSBC Global Asset Management en los mercados asiáticos ofrece también el HSBC Asia Pacific ex Japan Sustainable Equity UCITS ETF, el primer ETF UCITS sustentable del mercado que ofrece exposición a un índice de referencia de Asia Pacífico (con excepción de Japón) y el HSBC MSCI China UCITS ETF, cuyo objetivo es replicar el comportamiento del índice MSCI China.
Pixabay CC0 Public Domain. Cecabank se une al Plan Sumamos de la Fundación CEOE para mitigar el impacto del covid-19
Cecabank ha mostrado desde el inicio de la pandemia preocupación por garantizar la seguridad y la salud de sus empleados y sus familias. Así, ha facilitado el trabajo telemático y ha adaptado sus oficinas a las nuevas exigencias de seguridad sanitaria, estableciendo todas las medidas para evitar la transmisión del COVID-19, manteniendo a la vez el servicio al cliente.
Gracias a las medidas adoptadas y a la actividad solidaria ejercida en la prevención y minimización de los riesgos que puede provocar el COVID-19, el banco ha sido reconocido por la Comunidad de Madrid con el identificativo “Garantía Madrid”, que distingue el compromiso de la empresa de minimizar el impacto del coronavirus. De esta forma, se reconoce el cumplimento por parte de Cecabank de las normas relacionadas con la prevención del virus y de aquellas extraordinarias adoptadas para ofrecer a sus empleados y clientes la mejor experiencia y los mejores servicios.
Este compromiso se ha reforzado con la reciente adhesión de Cecabank al Plan Sumamos Salud+Economía de la Fundación CEOE, que persigue apoyar a las administraciones públicas en la mitigación de los efectos adversos de la pandemia y a las comunidades autónomas en la contención del virus, reforzando la actuación de las autoridades sanitarias competentes y dotando a empresas de herramientas que ayuden a frenar el contagio.
Las iniciativas adoptadas por la entidad desde el inicio de la pandemia están plenamente alineadas con el propósito del Plan Sumamos. Entre tales medidas destacan la asistencia por turnos, creando los denominados “grupos burbuja”, la exención de presencialidad para las personas de riesgo, el teletrabajo voluntario y la adaptación de los espacios para garantizar un entorno laboral seguro con el uso obligatorio de mascarilla quirúrgica o FFP2, instalación de puntos de higienización y el respeto al distanciamiento social.
La adhesión al Plan Sumamos refuerza esta política con la incorporación de nuevas medidas preventivas, entre las que destaca la realización de test de diagnóstico periódicos de los empleados que acudan a la oficina, clave para frenar la propagación.
En palabras de Antonio Romero, director corporativo de Cecabank, “en un contexto de empeoramiento de los indicadores epidemiológicos, sumarnos a esta iniciativa es una oportunidad de participar en una iniciativa público-privada con el objetivo común de mitigar la propagación del coronavirus. Las empresas, y especialmente las del sector bancario, jugamos un papel crucial no solo en la lucha contra el COVID-19, sino en la recuperación económica gracias a nuestra capacidad de desplegar medidas extraordinarias que contribuyan al desarrollo económico y al progreso de todos”.
RIA Americana Partners has announced in a press release that Ronald E. Thacker, a veteran wealth management executive, is joining the firm as President. He will be based in Austin, Texas, and will report to Jason Fertitta, Chief Executive Officer.
“I am delighted to be joining Jason and his impressive team at Americana Partners. I see great opportunity for any advisors who want to be entrepreneurs more than employees. I am looking forward to working in the fast-growing independent space and see significant opportunities for Americana to build out its business», Thacker said.
With 35 years of experience in the financial services industry, he is a former Managing Director and Regional Director for Morgan Stanley Wealth Management, where he worked 30 years before leaving in January 2020. Thacker led Morgan Stanley’s Central Region management team, among other numerous leadership roles.
Meanwhile, Fertitta pointed out that he has worked with Thacker for over a decade and claimed to be «delighted» to have him join Americana Partners as President. “He has considerable stature in the industry, and we are looking forward to having him work on expanding Americana Partners in Texas and beyond. Ron possesses a high level of industry expertise, respect within the advisory community, and in-depth knowledge of the needs and objectives of advisors», he added.
Launched on April 29, 2019, Americana Partners is one of the industry’s largest breakaways and the largest single team to join the Dynasty Network. The firm has 3.5 billion dollars in client assets as February 2021, and offices in Houston, Austin, and Dallas, with longstanding ties to Texas
Casi un año después del inicio de la pandemia de COVID19, está claro que los responsables políticos están dispuestos a llevar sus economías al límite para generar una inflación por encima del objetivo. Dada la naturaleza exógena de la crisis por el COVID-19, los responsables políticos no se han visto afectados por las preocupaciones de riesgo moral que constantemente bloquearon su respuesta en la crisis financiera mundial (CFG). Esto ha sido evidente tanto en la magnitud como en la velocidad de la reacción política a la crisis de COVID-19 frente a 2008.
«La inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario»
Milton Friedman
Podemos ver el impacto de la expansión de los balances de los bancos centrales en las principales variables monetarias (para enero de 2021: Oferta monetaria estadounidense M2 +26% interanual, oferta monetaria británica M4 +13% interanual, oferta monetaria de la zona del euro M3 +13% interanual). A largo plazo, sabemos que existe una estrecha relación entre el crecimiento del dinero en sentido amplio y la inflación. Todo esto se ve reforzado por la retórica de los bancos centrales. A diferencia de los ciclos anteriores, cuando la Reserva Federal (Fed) endureció su política mucho antes de que la inflación se situara de forma sostenible por encima del 2%, los bancos centrales han sido explícitos al afirmar la improbabilidad de dicha evolución, lo que concede más tiempo al aumento inicial de la inflación.
En el ámbito fiscal, los gobiernos tienen posiblemente sólo tres maneras de manejar la enorme cantidad de deuda que se está emitiendo: 1) incumplimiento 2) aumento del crecimiento nominal para amortizar la deuda 3) deflación del valor real de la deuda mediante una inflación progresiva.
Esta última es la única opción conveniente para los responsables políticos en la actualidad. En cuanto a la magnitud de la respuesta fiscal, el desempleo relacionado con la pandemia ha costado a los sectores domésticos estadounidenses 330.000 millones de dólares en pérdida de ingresos salariales, aunque estos mismos sectores ya han recibido 1 billón de dólares en transferencias agregadas. Esta cifra excluye el inminente gasto fiscal de Joe Biden. Los sectores domésticos de EE.UU. disponen actualmente de un exceso de ahorro de 1,4 billones de dólares. Se trata de una enorme cantidad de combustible para la demanda reprimida, que probablemente se encontrará con una oferta limitada a medida que la economía vuelva a abrirse.
«Sólo el gobierno es capaz de tomar un papel perfectamente limpio, cubrirlo con tinta perfectamente fresca y convertir la combinación en algo sin valor»
Milton Friedman
Síntomas observables
En los sectores de alta demanda (electrodomésticos, ferretería) ya se observan signos de expansión de los márgenes. Los alquileres de la vivienda representan el 40% del índice de precios al consumo (IPC) básico en Estados Unidos. Durante el año hasta el cuarto trimestre de 2020, la mediana de los alquileres solicitados creció al ritmo más rápido registrado (+18% interanual). El índice de precios pagados de enero, un subcomponente del índice de gestores de compras (PMI) del sector manufacturero del Instituto de Gestión de Suministros (ISM), ha alcanzado los niveles más altos de la década. Fuera de Estados Unidos, los precios de las materias primas y del petróleo ejercen un fuerte impulso inflacionista a corto plazo. Los precios de los fletes en contenedores al contado desde Shanghái triplican los niveles de mayo de 2020, una tendencia que se repite en otros índices de fletes.
El gráfico de puntos de la Fed, utilizado para señalar las perspectivas de la trayectoria de los tipos de interés, señala la primera ascensión en 2023. Creemos que es muy probable que el gasto de consumo personal básico se sitúe por encima del objetivo de la Fed a finales de 2021, lo que podría desencadenar una colisión entre la Fed y el mercado a finales de este año.
«La inflación es la única forma de tributación que puede imponerse sin necesidad de legislación»
Milton Friedman
Medidas recomendadas
La reflación, la protección contra la inflación, la sostenibilidad fiscal y el factor valor son, en nuestra opinión, los temas más atractivos de la renta fija y las divisas. Los swaps de inflación a 10 y 30 años en EE.UU. representan una forma directa de beneficiarse potencialmente de las expectativas de inflación creciente. El IPC de EE.UU. ha tenido una media de alrededor del 2,5% en los últimos 30 años, mientras que los puntos de equilibrio a 10 y 30 años cotizan actualmente al 2,2-2,3%. Esperamos que las curvas se inclinen por la reflación y la incontinencia fiscal.
Asimismo, cabe considerar aspectos más idiosincrásicos y de valor relativo con respecto a las temáticas más amplias. Por ejemplo, los datos económicos de Noruega siguen siendo sólidos. El país es un exportador de materias primas y el Norges Bank es uno de los pocos bancos centrales que proyecta un crecimiento de los tipos de interés a finales de este año. Desde una perspectiva fiscal, creemos que la corona noruega se beneficia de la circunstancia de que el fondo soberano de Noruega debe vender divisas para comprar coronas noruegas con el fin de financiar el gasto fiscal. En nuestra opinión, Noruega es excepcional en términos de sostenibilidad fiscal: los activos gestionados del fondo soberano superan la deuda pública, lo que significa que Noruega tiene la envidiable ventaja de una necesidad de financiación bruta negativa. Otras posibles operaciones de valor relativo que recogen los factores idiosincrásicos relativos, además de las divergencias en las perspectivas de crecimiento / inflación / fiscalidad, podrían incluir posiciones en el Reino Unido y Nueva Zelanda frente a Canadá, por ejemplo, y en la parte delantera del mercado de deuda pública australiana frente a la estadounidense, por ejemplo.
En última instancia, creemos que los participantes en el mercado están subestimando los riesgos de inflación y, en nuestra opinión, el conjunto de oportunidades en la renta fija y las divisas parece convincente.
Columna de Adrian Owens, director de inversiones, y Rahul Mathur, gestor de inversiones en GAM Investments.
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Pixabay CC0 Public Domain. La prima de la renta variable española a largo plazo fue un 1,6%, inferior a la prima de cualquiera de los otros países
Credit Suisse ha publicado el anuario 2021 ‘Global Investment Returns‘, elaborado en colaboración con el Credit Suisse Research Institute. El estudio se centra este año en evaluar los rendimientos y los riesgos de invertir en acciones, bonos, efectivo, divisas y factores en 23 países y en cinco índices compuestos diferentes desde 1900. Este año, la base de datos se amplió, para incluir 90 mercados tanto desarrollados como emergentes, y se incluye un análisis en profundidad de nueve mercados nuevos. España aparece situada dentro de los mercados desarrollados, y el estudio analiza la evolución los rendimientos de las clases de activos españoles del siglo pasado.
El español es el idioma internacional más hablado del mundo después del inglés y ocupa el cuarto lugar en número de hablantes nativos después del chino, el hindi y el inglés. Debido en parte a este motivo, España tiene una visibilidad e influencia que trascienden con creces sus fronteras del sur de Europa y son de suma importancia en toda América Latina, contextualiza el informe.
Si bien durante las décadas de 1960 y 1980 los rendimientos reales de la renta variable española estuvieron favorecidos por un mercado alcista y ocupaban el segundo lugar a escala mundial, en las décadas de 1930 y 1970 se registraron los peores rendimientos en nuestro país. Durante los 121 años que abarca el anuario, la prima de la renta variable española a largo plazo, medida en relación con los bonos, fue un 1,6%, inferior a la prima de cualquiera de los otros países que cubrimos durante todo nuestro periodo.
Aunque España se mantuvo al margen durante las dos guerras mundiales, las acciones españolas perdieron gran parte de su valor real durante el periodo de la Guerra Civil, de 1936 a 1939, mientras que el regreso a la democracia en la década de 1970 coincidió con la cuadruplicación de los precios del petróleo, acentuada por las importaciones de las que España depende para cubrir las necesidades energéticas del 70% del país.
España ingresó en la Unión Europea en 1986. Se vio fuertemente afectada por la crisis financiera mundial e hizo frente a un gran déficit presupuestario. Los bancos del país estuvieron expuestos al desplome de las industrias inmobiliaria y de la construcción. Las medidas de austeridad que se adoptaron dieron lugar a una de las tasas de desempleo más altas de Europa. Sin embargo, España está volviendo a crecer desde 2014.
La Bolsa de Madrid se fundó en 1831 y ocupa actualmente el decimoséptimo lugar en el mundo por tamaño, estimulada por un sólido crecimiento económico desde la década de 1980. Las principales empresas españolas mantienen una fuerte presencia en América Latina, a lo que se suma una solidez cada vez mayor en los sectores de banca e infraestructura en toda Europa.
Las acciones más importantes son Iberdrola (21% del índice FTSE World Spain), Banco Santander (13%), Inditex, BBVA y Amadeus IT Group (8% cada una).
Los rendimientos del siglo pasado
En su estudio, Credit Suisse desvela los rendimientos de las clases de activos españolas a lo largo del siglo pasado, abarcando acciones, bonos, letras del Tesoro y analizando también la inflación. Pueden verlo en el siguiente cuadro:
El último trimestre de 2020 marcó un punto de inflexión para los beneficios de los bancos europeos, una evolución que ya se abordó en el primer semestre del año pasado. Aunque los beneficios quedaron bajo presión durante el año, la solvencia de los bancos superó las estimaciones y las previsiones del Banco Central Europeo (BCE). Se espera que los repartos a los accionistas crezcan este año, sobre todo porque en septiembre de 2021 se levanta la prohibición de las distribuciones.
La solvencia se mantiene como el principal atractivo de los informes de resultados de los bancos. El coeficiente medio de capital ordinario de nivel 1 (CET1) de nuestra muestra (1) de bancos (en línea con nuestros anteriores artículos sobre resultados) volvió a aumentar en el trimestre, llevando el coeficiente medio CET1 al 14,2% desde el 13,4% anterior al COVID-19. Sin embargo, lo más importante para los inversores es que el exceso de capital en relación con las necesidades aumentó a 18.000 millones de dólares, casi un 50% más que los niveles anteriores al COVID-19. La resistencia de los bancos estuvo muy por encima de las expectativas y superó las previsiones del BCE en su escenario central como parte de su análisis de vulnerabilidad realizado en julio de 2020. Este escenario central suponía un descenso del CET1 por debajo del 13%, frente al aumento observado hasta ahora.
Con las posiciones de capital de los bancos superando significativamente tanto los objetivos de gestión como los requisitos reglamentarios en el último trimestre del año pasado, el enfoque se ha desplazado hacia las distribuciones a los accionistas. Aunque las distribuciones se prohibieron en 2020 y están restringidas a un nivel limitado hasta septiembre de 2021, también hay una clara voluntad por parte de los equipos de gestión de devolver el excedente (por encima de los objetivos de gestión) a los accionistas. En teoría, las distribuciones a los accionistas son perjudiciales para los obligacionistas, ya que reducen el exceso de capital, pero la historia ha cambiado. La capacidad de pagar dividendos ahora refleja tanto la satisfacción de los reguladores con los modelos de negocio de los bancos como las perspectivas económicas. El levantamiento de las restricciones nos parece un catalizador positivo, ya que supone una mayor certeza de repunte en lugar de que los bancos sigan reteniendo beneficios. Creemos que esto es una noticia positiva para los obligacionistas, ya que los accionistas seguirán asumiendo las desventajas. También observamos que la capacidad de pagar dividendos es positiva para las valoraciones de las acciones y reducirá el coste de los fondos propios de los bancos, lo que creemos que apoyará la capacidad de los bancos de obtener fondos propios cuando sea necesario y, por tanto, la resistencia del sistema financiero.
La calidad de los activos sigue sorprendiendo positivamente
En un nuevo signo de normalización, la calidad de los activos se mantuvo estable en el cuarto trimestre, con pérdidas crediticias que vuelven a situarse en los niveles anteriores al trimestre 19. La incertidumbre se mantiene, con nuevas suspensiones (principalmente en Europa) compensadas por los avances en el programa de vacunación y los nuevos datos de apoyo a la infección. Las pérdidas crediticias en el cuarto trimestre aumentaron en comparación con el tercero, lo que refleja tanto la estacionalidad como el impacto de los bancos al realizar ajustes en sus escenarios macro. Con los costes de riesgo justo por debajo de los 60 puntos básicos, los bancos han reservado menos de la mitad del pico de 120 puntos básicos de crédito en la primera mitad de 2021.
Una cuestión clave para los inversores sigue siendo la evolución futura de los préstamos morosos (non-performing loans, NPL). Con los planes de garantía del gobierno que sustituyen a los ingresos personales y proporcionan liquidez a las empresas, las tasas de morosidad se han mantenido bajas. Los ratios de morosidad de los bancos no han sufrido un impacto significativo hasta la fecha y, de hecho, han descendido ligeramente hasta un mínimo del 2,8% en septiembre de 2020, según el cuadro de riesgos del tercer trimestre de la Autoridad Bancaria Europea. Esta cifra aumentará inevitablemente a medida que las medidas de apoyo a los particulares y a las empresas lleguen a su fin, lo que probablemente ocurrirá en la segunda mitad de 2021 y en 2022, aunque su alcance sigue siendo incierto. Dada la fuerte respuesta de los gobiernos, los bancos centrales y los reguladores, vemos un impacto más limitado que en ciclos anteriores. Además, se han producido algunos movimientos positivos en la resistencia de las carteras de préstamos de los bancos. Una gran parte de las moratorias concedidas a los clientes ya han expirado en el cuarto trimestre de 2020, y la gran mayoría de los clientes han vuelto a sus calendarios de pago normales y quedan muy pocos impagos. Por ejemplo, el 80% de los 112.000 millones de euros de moratorias concedidas por el Banco Santander expiraron en el cuarto trimestre, y sólo el 3% de las moratorias expiradas se convirtieron en morosas, en línea con la cartera de préstamos global de la empresa. Esta tendencia ha sido ampliamente consistente en todos los bancos y ha sido una sorpresa positiva para la calidad de los activos de los bancos.
La resistencia de los bancos sigue estando respaldada por una sólida posición de solvencia y la distribución anticipada de las futuras pérdidas crediticias previstas en las nuevas normas contables (NIIF 9), lo que refleja nuestra convicción sobre el sector financiero europeo. Aunque siguen existiendo importantes incertidumbres, es probable que un aumento necesario de las provisiones provoque la volatilidad de los beneficios en lugar de poner en peligro el capital. Por ejemplo, HSBC estima que, en su escenario económico más severo, se habrían necesitado 7.200 millones de dólares más de provisiones en 2020. Esto se compara con unos 9.000 millones de dólares en beneficios antes de impuestos (esto ya incluye los aproximadamente 9.000 millones de dólares en proyectos de responsabilidad limitada (LLP) que se producirán en 2020). Por lo tanto, el grupo puede absorber el impacto adicional sólo con los beneficios. Esto refleja la capacidad del sector para absorber un aumento de la morosidad y un mayor deterioro de los escenarios macro.
Si bien esperamos un cierto aumento de la morosidad hacia un nivel manejable, el alcance de la distribución anticipada de provisiones en 2020 debería conducir a un descenso de los LLP en 2021.
La rentabilidad sigue bajo presión
Los beneficios del cuarto trimestre superaron ampliamente las estimaciones del consenso, aunque la rentabilidad de los bancos sigue estando bajo presión. Esto sucede porque los préstamos minoristas se deben al impacto de los tipos de interés a largo plazo más bajos, a la menor actividad minorista y a que las provisiones para pérdidas de préstamos se mantienen por encima de los niveles favorables anteriores a Covid 19. Los ganadores relativos en 2020 fueron los bancos con una exposición limitada al crédito (centrados en la gestión de patrimonios/activos) o aquellos con actividades de banca de inversión relativamente mayores, que se beneficiaron de la volatilidad del mercado y de la mayor actividad del mercado de capitales durante el año.
Las perspectivas de rentabilidad en 2021 siguen siendo difíciles, dada la incertidumbre que rodea al Covid-19 y la continua presión sobre los márgenes de interés neto de los bancos debido a los bajos tipos de interés. A medio plazo, esperamos que la rentabilidad del sector mejore mediante una combinación de recortes de costes agresivos, fusiones y adquisiciones, y otros movimientos estratégicos de los bancos para preparar sus modelos de negocio para el futuro. Desde el punto de vista de los obligacionistas, la clave de 2020 es la capacidad de los bancos para seguir siendo rentables a pesar de un escenario real de prueba de resistencia.
Salida hacia el año 2021
De cara a 2021, mantenemos nuestra postura positiva sobre el sector bancario. Los bancos han demostrado que tienen una solvencia sólida y son capaces de absorber las incertidumbres relacionadas con el COVID-19. Los inversores seguirán prestando atención a la calidad de los activos este año y vigilarán de cerca la formación de la morosidad y la confirmación de la normalización de las LLP. Las pruebas de resistencia también serán un elemento clave del calendario. Se espera que la ABE publique sus conclusiones en julio, lo que permitirá conocer la capacidad de resistencia de los distintos bancos. Dada la incertidumbre restante, los inversores deberían centrarse en los bancos que son capaces de soportar un escenario prolongado de COVID-19 sin comprometer los fundamentos del crédito. Por esta razón, seguimos centrándonos en los principales bancos europeos, ya sean bancos de importancia sistémica mundial o campeones nacionales.
Columna de Romain Miginiac, jefe de investigación en Atlanticomnium S.A, firma de inversión especializada en bonos corporativos. Atlanticomnium gestiona activos para GAM Investments.
Anotaciones:
(1) La muestra incluye a UBS, Credit Suisse, Standard Chartered, HSBC, Deutsche Bank, Barclays y Banco Santander. Sólo con fines ilustrativos.
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Banca March se suma a Dalion —proyecto colaborativo que agrupa a diversas empresas para profundizar en la tecnología blockchain y la identidad autogestionada—, con el objetivo de seguir velando por la máxima seguridad de sus clientes en términos de identidad digital y gestión de datos personales. Esta iniciativa se enmarca en el plan de digitalización de la entidad, que tiene como objetivo consolidar un modelo de negocio enfocado al asesoramiento ágil y omnicanal, apoyado en la mejor tecnología y en productos diferenciados.
Banca March se incorpora a un proyecto de vanguardia en la gestión de datos personales que permitirá mejorar la eficiencia de los trámites y, por tanto, la experiencia del cliente.
Gracias al modelo Alastria ID, basado en tecnología blockchain, los usuarios conservan el control total de sus datos personales digitales (identidad autogestionada), garantizando la privacidad e integridad de los datos. Por ejemplo, los usuarios podrán dar consentimiento explícito al uso de sus datos, incluyendo la posibilidad de rectificar, suprimir u oponerse a su tratamiento. Esta tecnología innovadora supone un paso adelante en la protección de datos de los clientes, que permanecerán centralizados en una sola identidad digital y que los usuarios podrán almacenar desde cualquier dispositivo.
Gracias a esta tecnología, se facilita la contratación de forma rápida, sencilla y segura, al eliminarse la necesidad de realizar el onboarding digital completo (alta remota) cada vez que se contrata un producto o servicio. Cuando un usuario decide dar de alta una nueva solicitud, sus datos se envían por un canal adicional seguro y se firma la transacción para su almacenamiento en blockchain que, además, permite registrar las huellas electrónicas necesarias para proporcionar un pleno respaldo legal a las operaciones realizadas.
Los usuarios también podrán utilizar sus datos de forma automática entre diferentes empresas e instituciones, reduciendo considerablemente los trámites burocráticos. Por ejemplo, se podrán utilizar los datos validados por otras entidades a la hora de alquilar un coche, contratar un seguro, solicitar un préstamo, dar de alta el suministro eléctrico o cualquier servicio que el usuario desee.
El Proyecto Dalion es una iniciativa colaborativa surgida del consorcio Alastria y formada por grandes empresas españolas, que tiene como objetivo ayudar a los individuos a gestionar de forma autónoma sus datos personales digitalmente para ser utilizados en cualquier organización pública o privada.
Banca March y planes de digitalización
Banca March continúa avanzando en un intenso proceso de transformación en las áreas de digitalización, tecnología y operaciones. Tras el ambicioso Plan de Transformación Digital 2018-2020, con inversiones por importe de 75 millones de euros, la entidad sigue profundizando en esos ámbitos, como eje estratégico del Plan Trienal #JuntosEnAcción 2020-2022. Durante el pasado ejercicio, los clientes de Banca March pudieron disfrutar de nuevas funcionalidades que optimizaron en gran medida la experiencia del cliente en sus interacciones con el banco. Entre ellas, destaca el nuevo reportingonline, que permite a los clientes con contrato de asesoramiento visualizar la evolución de su inversión y tener acceso a un resumen de sus posiciones en cartera ordenadas por titularidad. Además, los clientes pueden acceder a gráficos de distribución y composición de su cartera, así como consultar todos los informes que elaboran los expertos de la entidad con los cambios que se producen en sus carteras. También se ha reforzado la seguridad de los pagosonline y se ha mejorado el proceso de contratación de productos, agilizando los procedimientos e incluyendo soluciones que permiten su ejecución completa a distancia, como la firma certificada vía email.
Cabe destacar que la operativa a través de la web y la aplicación de Banca March se intensificaron en 2020. La tasa de uso de los canales digitales por parte de los clientes de Banca Privada de la entidad aumentó un 13% hasta situarla en el 66% en diciembre de 2020, lo que refleja el ambicioso proceso de transformación digital en el que está inmersa Banca March para seguir desarrollando un modelo de negocio enfocado en el asesoramiento ágil y omnicanal, apoyado en la tecnología y en productos diferenciados.
Este incremento se produce dentro de un contexto marcado por la COVID-19, en el que los clientes han demandado una mayor atención a distancia, como consecuencia de las medidas de distancia social aplicadas para preservar la salud de los ciudadanos. Banca March dio respuesta a las nuevas necesidades de los clientes reforzando los servicios de banca online y banca telefónica. Gracias a todo ello, la entidad ha observado un aumento notable en el uso de estas herramientas por parte de todos sus segmentos de clientes, entre los que destaca el de Banca Privada.
Pixabay CC0 Public Domain. Fiscalidad global, China y cambio climático: los grandes temas geopolíticos que los inversores deben tener en cuenta
Mientras que los bonos soberanos de los mercados emergentes tienen una historia que se remonta a la década de 1980, comenzando con los bonos Brady que fueron emitidos principalmente por los países latinoamericanos como una forma de reestructurar su deuda, los bonos corporativos de los mercados emergentes son más recientes.
De hecho, los índices de JP Morgan, que son el estándar del sector para el seguimiento de las empresas de los mercados emergentes, no han existido hasta las dos últimas décadas. A continuación, abordamos algunos mitos más extendidos sobre la clase de activos de los bonos corporativos de los mercados emergentes.
Mito 1: Los bonos corporativos de los mercados emergentes son una clase de activos «de nicho”
Esto pudo ser cierto hace una década, pero la realidad es que actualmente esto es muy distinto. Entre 2009 y 2019, el volumen de bonos corporativos de mercados emergentes en circulación creció un 294%, superado únicamente por el crecimiento de las empresas locales de mercados emergentes. En la actualidad, los bonos corporativos de los mercados emergentes denominados en dólares son una clase de activos de 2,5 billones de dólares; el doble del tamaño del mercado de alto rendimiento (high yield) de Estados Unidos y también el doble del tamaño del mercado de bonos soberanos de los mercados emergentes en dólares.
De hecho, la clase de activos ha crecido hasta tener el mismo tamaño que el mercado europeo de grado de inversión (investment grade). El gran tamaño del mercado de bonos corporativos de los mercados emergentes difícilmente puede calificarse de «nicho». Además, esta clase de activos cuenta entre sus filas con algunas de las mayores y más reconocidas empresas del mundo que emiten bonos. Entre ellas se encuentra el Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), el mayor banco del mundo por activos, con una base de activos de 4,3 billones de dólares, casi el doble que JP Morgan Chase, y Saudi ARAMCO, el mayor productor de petróleo del mundo. De hecho, Baidu, Alibaba y Tencent, los gigantes de Internet, así como Teva Pharmaceuticals, el mayor fabricante de medicamentos genéricos del mundo, emiten bonos en este mercado.
Mito 2: Las empresas de los mercados emergentes tienen más riesgo que los bonos soberanos de los mercados emergentes
Los datos sugieren lo contrario. Los inversores en bonos de países emergentes denominados en dólares están sujetos a dos fuentes principales de riesgo: el crédito (riesgo de diferencial) y la duración (riesgo de tipo de interés). En cuanto al riesgo de tipo de interés, los soberanos de los mercados emergentes suelen tener curvas más desarrolladas y tienden a emitir bonos de mayor duración en comparación con sus homólogos corporativos.
El JPM EMBI Global Diversified Index, que representa a los soberanos de los países emergentes denominados en dólares, tiene una duración de 8,3 años, casi tres años más que su equivalente corporativo, el JPM CEMBI Diversified Index, cuya duración es de 5,1 años.
En pocas palabras, en igualdad de condiciones, una inversión de 1.000 dólares estadounidenses en deuda soberana de los mercados emergentes podría perder 83 dólares de su valor si los tipos de interés suben un 1%, frente a los 51 dólares de un inversor en deuda corporativa de los mercados emergentes. Desde el punto de vista del riesgo crediticio, las empresas de los mercados emergentes han sido sistemáticamente una clase de activos con calificación investment grade, mientras que los soberanos de los mercados emergentes han oscilado entre las calificaciones investment grade y high yield.
Además, durante la última década, las empresas de los mercados emergentes han demostrado una notable resistencia en tiempos de crisis. Como muestra el siguiente gráfico de rendimiento, durante el inicio de la pandemia mundial del COVID-19, cuando los diferenciales de crédito se ampliaron a un ritmo más rápido que incluso la crisis financiera mundial (CFG), las empresas de los mercados emergentes se comportaron mejor que prácticamente todas las clases de activos comparables, con la excepción de las empresas estadounidenses con calificación investment grade, que se beneficiaron del apoyo fiscal directo de la Reserva Federal. Además, las empresas de los mercados emergentes han tenido, históricamente, menos impagos que los soberanos, como muestra la siguiente tabla:
Además, las empresas de los mercados emergentes han experimentado mayores tasas de recuperación en caso de impago en comparación con los soberanos de los mercados emergentes. Los incidentes de impago mucho más elevados en los mercados emergentes soberanos pueden explicarse en parte por los niveles de apalancamiento generalmente más altos en relación con las empresas.
Mito 3: Un emisor corporativo de los mercados emergentes es tan bueno como el país en el que está domiciliado
Esto es cierto sólo en parte. Hay varios factores que determinan hasta qué punto un emisor corporativo puede desviarse de su soberano subyacente. Por ejemplo, según Fitch Ratings, factores como la proporción del EBITDA externo de la empresa que proviene de fuentes extranjeras frente a las locales, la importancia estratégica de la empresa para el país y la forma en que está constituida jurídicamente influyen para determinar si está sujeta a una «restricción por país». Por ejemplo, FEMSA, una empresa de bebidas y venta al por menor, y América Móvil, un operador de telecomunicaciones, están domiciliadas en México. Debido a la gran diversificación de sus negocios y a su presencia global, las respectivas calificaciones crediticias a largo plazo de estos emisores son de «A» y «A-«5 respectivamente, en comparación con la calificación soberana de México de «BBB-«5.
Dicho de otro modo, se ha considerado que estos emisores tienen una solvencia significativamente mayor que los países en los que están domiciliados. Otra prueba de la resistencia de las empresas frente a los conflictos soberanos puede observarse en dos países. De los cuatro impagos soberanos de los mercados emergentes en 2020, dos también tenían bonos corporativos que formaban parte de los índices de bonos globales, Argentina y Zambia. Como muestran los siguientes gráficos, aunque los bonos corporativos se vendieron inicialmente en línea con los respectivos bonos soberanos, se recuperaron significativamente en cada caso para cotizar a la par o cerca de la par, mientras que los soberanos incumplieron sus emisiones.
No cabe duda de que las empresas de los mercados emergentes han madurado hasta convertirse en una clase de activos por derecho propio. A medida que la búsqueda de rendimiento continúa en todo el mundo, en nuestra opinión, esta clase de activos sigue siendo una alternativa mejor a los bonos soberanos de los mercados emergentes o a los bonos corporativos de los mercados desarrollados debido a la deseable trinomio de alta calidad media, riesgo moderado de tipos de interés y rendimientos normalmente superiores a los del mercado.
Además, como muestra el gráfico siguiente, añadir una asignación de bonos corporativos de mercados emergentes a una cartera global de FI mejora históricamente el potencial de subida y la diversificación, contribuyendo a una cartera más eficiente.
Pixabay CC0 Public Domain. Aegon AM convierte su estrategia Global Diversified Growth en un fondo sostenible
Aegon Asset Management ha completado la transformación del Aegon Global Diversified Growth Fund en una estrategia multiactivo centrada en la sostenibilidad. Como reflejo de este cambio, a partir del 1 de abril de 2021 el fondo pasará a denominarse Aegon Global Sustainable Diversified Growth Fund.
Según explica la gestora, este cambio se produce después de que el Aegon Diversified Growth Fund, domiciliado en Reino Unido, también haya adoptado un enfoque sostenible y haya pasado a llamarse Aegon Sustainable Diversified Growth Fund, como anunció Aegon AM a principios de mes.
Co-gestionado por Colin Dryburgh y Robert-Jan van der Mark, del equipo de multiactivos de Aegon AM, el fondo se propone generar una rentabilidad del 4% por encima de la inflación a través de una cartera diversificada de acciones, bonos y activos alternativos de todo el mundo. En enero de 2020, los gestores empezaron a reposicionar la cartera para aprovechar temáticas de inversión atractivas relacionadas con la sostenibilidad, comenzando con la asignación a renta variable global y siguiendo con las asignaciones a renta fija y activos alternativos. El nombre y la política de inversión del fondo se modificarán para reflejar este énfasis en la sostenibilidad, aunque el objetivo del fondo seguirá siendo el mismo.
El equipo de multiactivos de Aegon AM define como negocios sostenibles aquellos cuyos productos, servicios y prácticas de negocio están alineados con al menos una de seis temáticas clave de sostenibilidad: cambio climático, soluciones ecológicas, uso eficiente de recursos, crecimiento sostenible, inclusión y salud y bienestar.
El fondo invierte tanto en empresas líderes en sostenibilidad, que son aquellas con unas credenciales ejemplares según los filtros de sostenibilidad de Aegon AM, como en empresas que están “en proceso de mejora” en materia de sostenibilidad (improvers), en las que los gestores intentan capitalizar los cambios positivos.
“Aegon Global Diversified Growth Fund ya aprovecha muchos de los cambios en materia de sostenibilidad que se están produciendo en todo el mundo. Incorporar la sostenibilidad a nuestra filosofía y nuestras prácticas nos ayudará a capturar las oportunidades y a minimizar los riesgos no deseados relacionados con los factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). El cambio de nombre del Aegon Global Sustainable Diversified Growth Fund marca el fin del proceso de transición y hace explícito nuestro compromiso con la sostenibilidad de cara a los inversores y a los asesores”, destaca Stephen Jones, director de inversiones (CIO) mundial de Multiactivos y Soluciones de Aegon AM.
Aegon AM cuenta con una larga historia gestionando estrategias de inversión responsable, ya que lanzó su primer fondo especializado hace más de treinta años. En la actualidad, Aegon AM gestiona 213.000 millones de euros en todo el mundo en carteras de inversión responsable especializadas
Pixabay CC0 Public Domain. El private equity se recuperó tras el impacto inicial del COVID-19 y 2021 será un año dinámico para la industria
En el segundo trimestre de 2020 se detuvo repentinamente la actividad de private equity, cuando la realidad del COVID-19 se hizo evidente. Pero la industria recuperó rápidamente su posición y demostró una resistencia extrema. El valor de la transacción y la salida se recuperó vigorosamente en el tercer trimestre, terminando el año un 8% más alto en comparación con los niveles de 2019.
Según todos los indicios, el private equity resistió la tormenta de 2020 sin ver afectados sus rendimientos, ya que las valoraciones se mantuvieron muy altas. En términos de poner a trabajar grandes cantidades de dinero, la segunda mitad del año terminó siendo tan sólida como cualquier carrera de dos trimestres recientes.
Un número a destacar fue el volumen de acuerdos negociados por empresas de private equity, que se redujo en un 24% en 2020 con respecto a los niveles recientes, lo que significa que el valor total de la inversión fue respaldado por acuerdos más grandes. Con un alto nivel de reservas de efectivo y mercados crediticios sólidos, los acuerdos de 2021 prometen estar increíblemente ocupados a medida que los inversores buscan recuperar el tiempo perdido. Si se observan los datos de 2021 hasta febrero, el valor del acuerdo de compra global es un 60% más alto que el promedio de los primeros dos meses durante los últimos cinco años.
Sin embargo, las valoraciones elevadas también significan que hay poco margen de error. El aumento de los precios de los activos en sectores como la tecnología significa que los múltiplos de los acuerdos que se realizan hoy están en o cerca de máximos históricos. Esto tiene varias implicaciones importantes para los inversores en 2021 y más allá.
Las empresas de adquisición de fines especiales (SPAC) volvieron a aparecer en la escena financiera en 2020, recaudando 83.000 millones de dólares en capital fresco, principalmente en los EE.UU., más de seis veces el récord anterior establecido solo un año antes. Como parece que su aumento continuará en 2021, la investigación de Bain & Company encontró que los retornos de SPAC parecen estar mejorando en conjunto, pero el desempeño individual sigue siendo muy variable.
Por otro lado, la inversión ambiental, social y de gobierno corporativo (ESG) continúa enfrentándose al escepticismo. Pero los líderes de la industria del private equity se están moviendo rápidamente para incorporar la sostenibilidad y la responsabilidad en la forma en que invierten y operan. Bain & Company cree que los factores ESG son imprescindibles para las empresas de capital privado a nivel mundial.
«El private equity se mantuvo bien en un contexto tumultuoso y sin precedentes. El mercado absorbió la caída observada en el segundo trimestre y terminó en un nivel alto en general, ya que los negociadores se adaptaron rápidamente a trabajar en un mundo remoto. Con el número de ofertas en 2020 en comparación con los niveles recientes, esperamos ver una gran cantidad de demanda reprimida que regrese al mercado. Si a eso le sumamos los crecientes niveles de reservas de efectivo y mercados sólidos, 2021 se perfila como un año increíblemente ocupado», explica Hugh MacArthur, director global de la práctica de capital privado de Bain & Companny.
Escapando del abismo de 2020
Después de haberse recuperado de un pésimo desempeño en el segundo trimestre, la industria global generó 592.000 millones de dólares en valor de acuerdo de compra en 2020. Eso fue un aumento del 8% con respecto al desempeño de 2019 y un 7% más alto que el promedio de cinco años de 555.000 millones. Un total de 410.000 millones de dólares de ese total llegó en el tercer y cuarto trimestres cuando los General Partners (GP) se apresuraron a poner dinero a trabajar.
Los múltiplos aumentaron en todas las industrias en 2020, pero fueron especialmente optimistas en los sectores más inmunes al COVID-19, como los pagos o aquellos que se beneficiaron de la pandemia, como la tecnología. Lo que equivalía a una huida hacia la calidad, significaba que el capital privado apuntaba a empresas que podían respaldar más deuda, y los bancos estaban felices de suministrarla. Los múltiplos de deuda se dispararon en 2020, con casi el 80% de las operaciones apalancadas a más de seis veces el EBITDA (intereses, impuestos, depreciación y amortización).
Según el informe de Bain & Companny, la actividad de salida en 2020 siguió el mismo patrón que las inversiones. El valor de salida se recuperó en la segunda mitad, ya que la reactivación de los múltiplos de precios y la amenaza de un cambio en la legislación fiscal en los EE. UU., dio a los vendedores un amplio incentivo para poner empresas en el mercado, especialmente las grandes. El número de salidas estuvo por detrás del total de 2019, pero el valor de salida global alcanzó los 427.000 millones de dólares en 2020, a la par con 2019 y en línea con el promedio de cinco años.
La recaudación de fondos global de 989.000 millones de dólares fue una disminución del récord histórico de 2019, pero seguía siendo el tercer total más alto de la historia. Esto indica que el capital privado resistió la tormenta de 2020 sin sufrir un impacto en los rendimientos. En cuanto a la tasa interna de rendimiento (TIR) anualizada a 10 años, los fondos hasta ahora han evitado el tipo de daño sufrido en la crisis financiera mundial.
SPAC: aprovechando una oportunidad en evolución
Según el documento, las empresas de adquisición con fines especiales, o SPAC, están demostrando ser una forma más rápida y segura de hacer pública una empresa. Sin embargo, los aspectos económicos benefician en gran medida al patrocinador y a los inversores que redimen la oferta pública inicial (OPI), mientras que diluyen significativamente a los accionistas públicos que no redimen
Habiendo desaparecido después de la crisis financiera mundial, las SPAC encontraron una nueva vida hace unos años y luego volvieron a explotar en la escena financiera en 2020, recaudando 83.000 millones de dólares en «capital fresco». Según Bain & Company, podrían desempeñar un papel significativo a largo plazo en los mercados de capitales a medida que las empresas buscan alternativas a las OPI tradicionales. Pero es probable que las estructuras de SPAC evolucionen para que sus patrocinadores estén más expuestos al desempeño de la empresa a largo plazo, tanto a través del capital en riesgo inicial como de los acuerdos de compra a plazo.
Según explica Brian Kmet, socio de Bain & Company, en el entorno actual, cualquier objetivo probable con un perfil de empresa pública tiene patrocinadores de SPAC haciendo cola en la puerta. “Los jugadores ganadores que busquen un éxito a largo plazo y repetible deberán equilibrar su esfuerzo en tres trabajos igualmente importantes: encontrar el trato adecuado a tiempo, fortalecer las capacidades de debida diligencia para analizar y examinar sus objetivos de mayor potencial, e impulsar el rendimiento a través de la experiencia en gestión, redes de talentos y planificación de creación de valor de clase mundial», señala.
La expansión de la ESG
La inversión ESG continúa enfrentándose al escepticismo en la industria de capital privado, especialmente en los EE.UU. Un análisis del desempeño ESG entre empresas de capital privado realizado por EcoVadis, un proveedor mundial de calificaciones de sostenibilidad empresarial, muestra que las empresas de cartera propiedad de empresas con sede en EE.UU., están 12 puntos por detrás de las de empresas con sede en la Unión Europea. Sin embargo, aún queda mucho camino por recorrer, incluso en Europa. De hecho, si se analizan únicamente los factores de sostenibilidad, la gran mayoría de las empresas de cartera de propiedad de la UE no han lanzado iniciativas significativas.
Lo que sí muestran los datos de EcoVadis, es que las empresas y corporaciones propiedad de private equity están muy comprometidas cuando se trata de puntajes de madurez ESG, tanto en los EE.UU. como en Europa. Los actores proactivos de capital privado no están esperando que los estudios de retorno de la inversión (ROI) funcionen antes de incorporar la sostenibilidad y la responsabilidad social en la forma en que invierten y operan.
Según las conclusiones del informe, la relevancia de los factores medioambientales se ve reflejada en que ya hay empresas, principalmente en Europa, que han llegado a considerar los criterios ESG como una parte fundamental de lo que las diferencia como competidores, moldeando los principios sostenibles para afinar la diligencia debida, construir planes de creación de valor más sólidos y preparar las historias de salida.