Cristian “Toro” Reynal, Partner y Country Head Argentina y Uruguay de Excel Capital, fue apartado de la empresa este lunes 23 de junio, según anunció el interesado en su cuenta de Linkedin y confirmó Funds Society.
El viernes último, la compañía había prescindido de los servicios de Macarena León, Wholesale en Chile de la firma, según publicó ella también en su perfil de Linkedin.
“Como todo ciclo, este también llega a su fin”, escribió Reynal este martes en su perfil personal de Linkedin. “Ahora me toca frenar la pelota, tomar perspectiva y pensar bien el próximo paso. La banca privada en el Río de la Plata sigue evolucionando y el mercado está saturado de managers, por lo que es fundamental entender el valor agregado que uno puede aportar antes de avanzar”, continuó.
La firma especializada en distribución de fondos mutuos internacionales, colocación de activos alternativos y estructuración de transacciones secundarias en la región andina tiene varias líneas de negocio: fondos de pensiones, wholesale, family offices, MFO, banca privada y compañías de seguros. El grupo trabaja con gestoras de primer nivel como Aberdeen, Amundi y Janus Henderson.
Fundada por Felipe Monárdez y Gastón Angélico, exsocios de Celfin Capital, la empresa tiene presencia en Chile, Colombia, Perú, México, Argentina y Uruguay. Su enfoque está en ofrecer productos de inversión de gestoras globales reconocidas a clientes institucionales como fondos de pensiones, aseguradoras y family offices.
Reynal estuvo cuatro años en Excel Capital, cubriendo elsegmento de banca privada en Argentina y Uruguay. Anteriormente fue director de ventas de Schroders, donde tuvo a cargo el mercado offshore argentino y uruguayo. Previamente se desempeñó durante más de ocho años en MFS, tanto en Londres como en Argentina.
Foto cedidaLuis de Guindos, vicepresidente del BCE, en el evento de la APIE en Santander.
Hay tres factores que ponen en peligro la estabilidad financiera en la zona euro: la alta valoración de los mercados de valores, el peligro de que la desaceleración económica afecte a la solvencia de las empresas y los riesgos derivados de la política fiscal. Así lo señaló Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo, en el marco del XLII Seminario de la APIE, Cuarenta años de España en la UE: evolución de la economía española, en el que participó ayer en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander. “Sorprende la escasa volatilidad de los mercados ante situaciones geopolíticas complejas, descuentan un escenario benigno, con valoraciones altas y primas de riesgo comprimidas en renta variable y deuda privada, de forma que cualquier accidente o evento que pudiera desacreditar un escenario benigno podría provocar una reacción relativamente rápida”, advirtió.
En segundo lugar, mostró su preocupación por la desaceleración económica, que podría empezar a afectar a la solvencia de las empresas, sobre todo aquellas castigadas por el covid y endeudadas: “Somos más positivos con las familias, que cuentan con más ahorro y gracias a la fortaleza del mercado laboral en Europa”.
Y en tercer lugar, advirtió del riesgo de política fiscal: “El espacio disponible presupuestario en Europa es reducido y sin embargo habrá un incremento importante del gasto en defensa que no será fácil de encajar. Además los mercados no están prestando atención a la política fiscal, pero no solo en Europa sino también en EE.UU., donde se está aprobando una ley tributaria que aumentará el gasto pese al déficit público del 6%-7% y la ratio deuda pública/PIB por encima del 100%, de forma que la ley puede deteriorar la posición fiscal, con consecuencias. Si hay una subida de tipos a medio y largo plazo –el bono americano a 10 años ya cotiza en el 4,5%, y el de 30 años está ligeramente por debajo del 5%-, esa subida, con un escenario de valoraciones altas, dibuja un escenario preocupante que podría afectar a los mercados, que podrían sufrir correcciones”.
Sobre el gasto en defensa, afirmó que “es una prioridad absoluta en Europa, puesto que el paraguas protector tras la II Guerra Mundial ya no será lo que ha sido, y el continente necesita incrementar su independencia y autonomía”. Pero, como se dejará de computar gracias a la cláusula de escape, advirtió que habrá que financiarlo, reduciendo otras partidas presupuestarias, subiendo impuestos o emitiendo deuda, o con una mezcla de las tres medidas: “Si queremos evitar una subida de tipos de interés de los mercados, este gasto en defensa debe estar compensado con una moderación de gastos o más impuestos; hay que poner planes de estabilidad presupuestaria a medio plazo que convenzan a los inversores. Pero hay un riesgo ahí. Por el momento los mercados están muy tranquilos en relación con los niveles de deuda pública pero esto puede cambiar en el futuro próximo y hay que hacer un esfuerzo para cuadrar este círculo de mayor necesidad de gasto en defensa entre los países con mayor posibilidad de gasto fiscal y aquellos que tienen menos, y mantener la estabilidad presupuestaria”.
Las stablecoins, parte de la integración europea
De Guindos advirtió también sobre la importancia de vigilar la evolución de las stablecoins: “Contamos con MiCA en Europa, mientras EE.UU. apoya una nueva regulación sobre medios de pago con implicaciones sobre la estabilidad financiera importantísimas. Hay un proceso de innovación muy intenso que nos lleva a necesidad del euro digital. No creo que Europa se esté quedando atrás pero sí que la fragmentación de los mercados es un obstáculo para una provisión adecuada de los servicios financieros”, dijo.
Sobre el euro digital, explicó que se trata de la “evolución digital de los billetes bancarios”, una posibilidad de pago que no pretende sustituir al efectivo sino complementarlo, pero que, como podría tener implicaciones en la estabilidad financiera, requiere establecer límites. “El euro digital es dinero público digital. En Europa no tenemos un medio de pago transnacional, el bizum está bien pero para uso doméstico y el euro digital permitiría ser una especie de bizum para los consumidores en la zona euro”, defendió, recordando que el debate está en el legislador europeo (Parlamento, Consejo y Comisión).
De Guindos resumió que “Europa está en una encrucijada: necesitamos mayor independencia pero también hay oportunidades y todo pasa por actuaciones en el ámbito de la defensa, que exigirán un esfuerzo presupuestario, pero también en temas como los medios de pago o el papel del euro en el contexto internacional. Es un momento de dificultades pero va a depender de nosotros mismos y habrá que realizar reformas pendientes en torno a la integración económica, relacionadas con el mercado interior, el bancario y el mercado de capitales. Si hacemos eso, el papel del euro se verá reforzado en el contexto internacional”.
Proyecciones económicas con riesgo bajista
El vicepresidente recordó que sus proyecciones, en las que contemplan varios escenarios (uno central, suave, y otro más severo), están sujetas a las capas de incertidumbre de los últimos acontecimientos en Oriente Medio, contando también con que el próximo 9 de julio acaba la pausa arancelaria con EE.UU. “Nuestro escenario central contempla que los aranceles se quedan en el 10% y no hay acción de respuesta por parte de Europa hacia EE.UU., con un crecimiento del 0,9%, pero en el adverso barajamos aranceles superiores y reacción por parte de Europa”, contaba. Un escenario con riesgos a la baja en el crecimiento, pues aunque el primer trimestre ha arrojado un crecimiento del 0,6%, los datos cuentan con distorsiones, como la aportación de Irlanda, que siempre genera volatilidad, y un adelanto de las exportaciones de la zona euro hacia EE.UU. por la polémica proteccionista.“Para el segundo y tercer trimestre esperamos un crecimiento muy limitado, próximo a cero, y con riesgos a la baja, ante el impacto negativo por los aranceles”, dijo.
También destacó la buena evolución de la inflación, por debajo del objetivo, con la subyacente también cerca del 2% y la de servicios en desaceleración, igual que la evolución salarial. Pero reconoció riesgos como el impacto arancelario, que puede ser mayor al previsto, o derivados del mayor proteccionismo en el mundo: “Esperamos que el impacto de los aranceles sobre la oferta (al alza) se compense con la depresión de la demanda”, y además hay otros dos factores que apoyan la evolución a la baja: la evolución del tipo de cambio del euro, que se ha apreciado, y los precios de la energía, por debajo de antes de la escalada del conflicto Israel-EE.UU.-Irán. “Pero hay un tercer elemento que puede pesar negativamente a largo plazo, que es la fragmentación de la economía mundial y el proteccionismo. Puede llevar a ruptura de las cadenas de valor en el mundo que tenga un impacto negativo en los costes de las empresas y afectar negativamente a la inflación, al reducirse el proceso de globalización”, explicó.
Otro riesgo es que esos dos factores antes mencionados que han contribuido a su control a corto plazo –el tipo de cambio y el precio de la energía- se den la vuelta. Al otro lado, el aumento de las exportaciones de China a Europa podría tener el efecto contrario.
“Nuestras proyecciones para el primer trimestre de 2026 son ver la inflación en el 1,4%, pero eso era antes de los acontecimientos recientes y, si el precio del petróleo sube, habrá que tenerlo en consideración pero siempre en un entorno en el que el proceso desinflacionista subyacente está claro. No obstante, todo puede cambiar y hay que estar atentos pero con lo que vemos hoy no creo que el proceso de desinflación haya descarrilado en absoluto”.
Por todas estas incertidumbres, el planteamiento del BCE es el de una comunicación muy prudente, reunión a reunión, con decisiones dependientes de los datos: “El forward guidance no tiene sentido con un nivel de incertidumbre así. Estamos satisfechos con la evolución de inflación, se va cumplir el mandato en estabilidad de precios pero, teniendo en cuenta que el nivel de incertidumbre es brutal y cambia día a día, nos obliga a la prudencia”. Recordó que el BCE ha bajado tipos ocho veces, en 25 puntos básicos cada una, ante la evolución de la inflación y quieren mantener «toda la opcionalidad posible por la situación de incertidumbre».
“La industria de inversiones alternativas está experimentando una expansión significativa, con asesores que buscan ofrecer soluciones cada vez más sofisticadas a una gama más amplia de clientes”, le explicó a Funds Society Alan Strauss, Senior Partner & Director of Investor Relations de Crystal Capital Partners, plataforma alternativa con 30 años en el mercado a través de la cual los asesores financieros pueden personalizar con simplicidad operativa carteras de inversiones alternativas.
No es ninguna novedad que el panorama de la inversión global vive una transformación elocuente, que se acentuó este año con el desconcierto mundial que generaron las políticas arancelarias de la administración Trump, con su impacto sobre las proyecciones de crecimiento económico e inflación.
En este nuevo escenario, los inversores buscan más que nunca diversificación para reducir la volatilidad y el riesgo sistémico de sus carteras tradicionales, y los activos alternativos protagonizan un momento de auge, unido a la tendencia creciente de asesores que abandonan las empresas tradicionales para ofrecer de manera independiente soluciones personalizadas.
En la entrevista con Funds Society, Strauss reconoció que Crystal se mueve en un entorno competitivo, donde diversas plataformas atienden a clientes de alto patrimonio neto. Sin embargo, destacó el compromiso con la transparencia con el cliente que ofrece la empresa al tratarse de una RIA, lo que evita los conflictos de intereses asociados a las plataformas de los corredores de bolsa.
“Nosotros empezamos en los ’90 y fuimos unos de los primeros inversionistas en los hedge funds líderes de la actualidad, creando y gestionando varios fondos de fondos dirigidos a inversionistas offshore de alto patrimonio, y hacia 2001 ampliamos aún más la oferta de fondos de fondos para atender a instituciones estadounidenses y a inversionistas onshore de alto patrimonio”, relató Strauss, nacido en Colombia y radicado en Miami.
Al alejarse del modelo tradicional de fondos de fondos, la empresa comprendió que una solución única no se adapta a todos los casos, y que los asesores financieros necesitan opciones más personalizables para evitar la superposición de gestores y estrategias en las carteras de sus clientes. Fue así como en 2007, Crystal lanzó el Programa de Carteras Personalizadas para ofrecer a los asesores financieros la posibilidad de construir carteras de hedge funds a medida. Según Strauss, con esta transición, la compañía pudo lograr una mayor escalabilidad ofreciendo soluciones personalizadas.
La empresa administra hoy 1.200 millones de dólares en activos, trabaja con más de 200 firmas de asesoría financiera y ha experimentado una tasa de crecimiento constante del 15% al 20% durante la última década. A través de la plataforma se han creado más de 500 portafolios personalizados y sus clientes pueden acceder a aproximadamente 50 fondos privados a los que pueden suscribirse con un único documento electrónico.
Strauss describió la naturaleza dinámica de la plataforma, que se centra en clases de activos con altas barreras de entrada, como los fondos de cobertura y el private equity, pero que ofrece “everything under the sun” en el universo de alternativos.
A medida que pasan los años, nos vemos obligados a tener en cuenta y abordar los factores de salud que muchos de nosotros no habíamos considerado en momentos previos de nuestras vidas.
El colesterol es un buen ejemplo de ello. Aunque antes no le prestaba demasiada atención, desde luego lo tengo muy presente ahora que he superado los 50. Si bien las menciones al colesterol suelen ir seguidas de la expresión «demasiado alto», los niveles demasiado bajos también pueden causar problemas. El colesterol tiene una misión esencial y no podemos vivir sin él. Fluye constantemente por el organismo mientras crea células y hormonas, y realiza otras tareas esenciales. Al no ser soluble, el colesterol requiere un vehículo de transporte, las lipoproteínas.
Con el capital pasa algo parecido. El capital desempeña una función esencial en la sociedad, fluye de forma constante en la economía y precisa de modo de transporte. Cuando el nivel de capital es demasiado alto o demasiado bajo, la salud de la economía o los mercados financieros puede resentirse.
Fuimos testigos de ello en la primera década de este siglo, cuando se destinó demasiado capital a la construcción de demasiadas viviendas, lo que provocó un exceso de préstamos dudosos e infló el apalancamiento de las entidades financieras, el riesgo de los balances y las rentabilidades. En la década anterior, hubo un exceso de capital en la financiación de la fabricación desmesurada de hardware tecnológico, lo que catalizó la mayor burbuja de valoración de la renta variable de la historia de Estados unidos.
La naturaleza no homeostática del capital explica por qué, a lo largo de la historia, se producen ciclos en los mercados financieros y las economías. Las personas y las decisiones que toman son lo que transporta el capital. Los inversores retiran capital de proyectos poco rentables para financiar ideas mejores. Aunque el capitalismo se ha revelado el medio más eficiente para asignar los recursos sociales, con frecuencia da lugar a excesos en la economía y los mercados. Puesto que no todos los participantes conocen todas las medidas adoptadas por los responsables de la asignación del capital, los excesos y déficits de capital que se crean sin que nos demos cuenta acaban saliendo a la superficie, y se traducen en auges y crisis. Y así, una y otra vez.
De la misma manera que nos hacemos análisis de sangre periódicos, los inversores deberían comprobar constantemente dónde hay una sobreabundancia o una carencia excesiva de capital en la economía y en los mercados financieros. Descubrámoslo.
El ciclo del capital después de 2008
Ante la debilidad del crecimiento económico y de los beneficios que siguió a la crisis financiera mundial, la globalización permitió a las empresas de los mercados desarrollados reducir la intensidad de capital trasladando la fabricación a los mercados emergentes. La reducción de las inversiones en activos tangibles trajo consigo otro beneficio adicional: la necesidad de menos trabajadores. Por consiguiente, el gasto en equipos y mano de obra pasó a representar un porcentaje más reducido respecto de los ingresos.
Al mismo tiempo, la eliminación artificial de los tipos de interés por parte de los bancos centrales permitió que las empresas se endeudaran y distribuyeran capital a los accionistas aumentando los dividendos y las recompras de acciones.
Mientras la inversión y el crecimiento se estancaban, el capital seguía fluyendo. En lugar de invertir en bienes físicos e ingeniería, como los bienes inmuebles en a principios de la década de 2000 o el hardware de tecnología en los años noventa, el capital se dirigía a mejorar los resultados financieros. Este cambio se tradujo en unos márgenes de beneficios y unas rentabilidades del capital excesivos.
¿Qué ha cambiado?
Creemos que el ciclo del capital posterior a 2008 inició, a partir de 2022, una transición que puede incidir en las rentabilidades de las empresas y, en última instancia, en los mercados financieros. Lo resumimos en tres categorías:
Antes, las cadenas de suministro mundiales privilegiaban la eficiencia y la maximización del rendimiento frente a la resiliencia. Sin embargo, algunos acontecimientos, como la pandemia, los conflictos en Europa y Oriente Próximo, y las políticas arancelarias, han dado pie a un cambio de prioridades. Las empresas han comenzado a destinar capital al rediseño de las cadenas de suministro más cercanas a ellas mismas o al cliente, si bien todavía nos hallamos en una fase temprana del proceso. Aunque estos cambios son necesarios, conllevan gastos superfluos que ejercerán presión en los resultados de aquellas empresas que no puedan subir los precios por ofrecer productos sustituibles.
Si bien no sabemos qué nivel alcanzarán los tipos de interés en un entorno de mayor crecimiento derivado de un aumento de los gastos de capital y los costes de la mano de obra, creemos que es poco probable que regresen a los mínimos históricos observados en el ciclo anterior. Esto resulta especialmente cierto en vista de los elevados déficits presupuestarios a los que se enfrenta Estados Unidos. Actualmente, los ratios de cobertura de intereses de muchas empresas del S&P 500 son elevados, pero una parte nada desdeñable de la deuda emitida en los años posteriores a la crisis financiera mundial se refinanciará pronto y a tipos mucho más elevados. De este modo, será necesario dirigir más capital a los gastos por intereses, lo que ejercerá presión en los resultados de las empresas que no puedan subir los precios por ofrecer productos sustituibles.
Al mismo tiempo, la inteligencia artificial avanza. Aunque existen más incógnitas que certezas sobre su impacto futuro, la historia ha demostrado que las nuevas tecnologías resuelven problemas en la sociedad. A lo largo de la historia, las empresas que obtenían sus márgenes gracias a esos problemas se han mercantilizado y han registrado una deflación de los precios y una caída de los beneficios. Mientras que internet transformó las experiencias de los consumidores al ofrecerles más opciones, más comodidad y mejores precios, la IA podría aportar un nuevo nivel de valor a los clientes al darles un mayor control. Los grandes modelos lingüísticos dejarán de lado la publicidad inteligente y analizarán cada reseña de los clientes para identificar productos que interesen al consumidor en lugar de al fabricante, por medio de un marketing inteligente. A los fabricantes de productos mediocres, cuya ventaja económica consistía en un enorme gasto en publicidad, podría resultarles difícil replicar los resultados pasados a medida que productos mejores y más adecuados acaparan cuota de mercado. Esta nueva situación presionará los resultados de las empresas que no puedan subir los precios.
Conclusión
El mundo ha sufrido grandes cambios en los últimos años, y uno de los más ignorados ha sido el cambio en la asignación del capital por parte de las empresas. Al igual que con el colesterol, quizá pudiéramos permitirnos no prestarle demasiada atención en nuestra juventud, pero ya no sería sensato seguir haciéndolo dada la avanzada edad de este ciclo de mercado.
Al fin y al cabo, los precios de los activos reflejarán la rentabilidad real de las empresas y no se verán influenciados por las noticias. Es posible que este cambio provoque un abanico mucho más amplio de rentabilidades de los activos financieros que el observado en los últimos años, y por eso creemos que el valor del asesoramiento financiero crecerá considerablemente en el futuro en comparación con el periodo siguiente a 2008.
Artículo escrito por Robert M. Almeida, gestor de Carteras y estratega de Inversión Global de MFS Investment Management.
Janus Henderson Investors ha anunciado el lanzamiento del Janus Henderson Horizon Asset Backed Securities Fund. Se trata de una estrategia ABS, disponible como sicav, y que está dirigida principalmente a asesores financieros, gestores de patrimonios discrecionales e inversores institucionales en Europa. Según informa la gestora, el vehículo está gestionado por los experimentados gestores de cartera especializados en titulizaciones, Ian Bettney y Denis Struc.
Sobre el fondo explica que, mediante una gestión activa basada en datos, tiene como objetivo ofrecer una rentabilidad a largo plazo a través de una combinación de ingresos y crecimiento del capital. En concreto, invertirá al menos el 70 % de sus activos netos en valores respaldados por activos (ABS), incluidos los valores respaldados por hipotecas (MBS). Además, se enfoca exclusivamente en valores de grado de inversión (calificados como BBB- o superior por al menos una agencia de calificación crediticia independiente) en el momento de la compra. No podrá mantener más del 10 % de su valor neto en ABS —incluidos MBS— que hayan sido degradados a una calificación inferior a grado de inversión tras su adquisición.
“Estoy encantado de que hayamos lanzado otro vehículo para proporcionar a una amplia gama de clientes en Europa acceso al mercado global de titulizaciones. Seguimos observando oportunidades en ABS que ofrecen mayores rendimientos que otras opciones de calidad crediticia similar o equivalente. Como clase de activo, los ABS han proporcionado liquidez incluso en tiempos de crisis”, ha comentado Ignacio De La Maza, responsable de Grupo de Clientes EMEA y Latam en Janus Henderson Investors.
Sobre el lanzamiento, Ian Bettney, gestor de cartera especializado en titulizaciones de Janus Henderson Investors, haañadido: “La gestión activa basada en datos es clave para identificar las mejores rentabilidades ajustadas al riesgo para nuestros inversores en el mercado global de titulizaciones, que cuenta con decenas de miles de valores. El mercado de ABS es dinámico y cambia constantemente en función del comportamiento del consumidor y las condiciones del mercado. Denis y yo contamos con el apoyo de un equipo consolidado de analistas de titulizaciones, tanto para seleccionar valores con mejor potencial de rentabilidad-riesgo como para realizar análisis en profundidad sobre los activos subyacentes”.
Desde Janus Henderson Investors destacan que cuenta con una sólida trayectoria en inversiones globales en renta fija titulizada, con activos titulizados por valor de 57.000 millones de dólares, incluidos Obligaciones de Préstamos Titulizados con calificación AAA, MBS y ABS.
2025 se perfila como notablemente diferente, marcado por la agitación comercial y cambios en la asignación de activos. En este contexto, la Asociación Europea de Fondos y Gestión de Activos (Efama, por sus siglas en inglés) ha presentado una nueva edición de su FactBook con cuatro claras tendencias dentro de la industria: el coste de los UCITS continúa descendiendo; aumenta el tamaño de los fondos; los UCITS pasivos gana popularidad; y peso de la renta variable estadounidense es considerable en estos vehículos.
“La edición 2025 del EFAMA Fact Book muestra una industria en un momento crucial: la concentración de fondos está aumentando, las asignaciones de activos están cambiando y los costos de los fondos continúan disminuyendo. Aunque las finanzas sostenibles enfrentan obstáculos, los inversores minoristas están incrementando su participación, una señal alentadora para el éxito de la Unión de Ahorro e Inversión (SIU). La clave para ese éxito será la preservación de los UCITS como estándar de referencia y la promoción de estrategias de inversión por ciclo de vida para el ahorro para la jubilación”, ha destacado Tanguy van de Werve, director general de Efama.
Por su parte, Thomas Tilley, economista senior de Efama, ha comentado que el análisis de datos muestra el fuerte crecimiento de los AIFs cerrados en los últimos años, así como una disminución de la popularidad de los fondos de renta variable sectoriales y de los UCITS de bonos ligados a la inflación, y el aumento constante de la propiedad transfronteriza de fondos entre los hogares europeos.
En un mirada global a la industria, en 2024, el patrimonio en fondos UCITs aumentaron un 13% hasta alcanzar los 23,4 billones de euros, gracias a unas entradas netas de 685.000 millones de euros en 2024, lo que supuso triplicar los 235.000 millones de euros de 2023. “Los ETFs UCITS atrajeron 269.000 millones de euros en ventas netas en 2024. Las entradas netas récord en ETFs fueron impulsadas principalmente por los ETFs de renta variable (201.000 millones de euros), lo que contrasta con los UCITS de renta variable no ETF, que registraron salidas netas de 53.000 millones de euros a lo largo de 2024, siendo este su segundo año consecutivo con salidas netas”, recoge el informe en sus conclusiones.
El número de fondos domiciliados en Europa siguió aumentando, con 857 nuevos fondos netos a lo largo del año. Con ello se alcanzó un total de 67.940 a finales de 2024. “En conjunto, desde 2014, el número total de fondos ha aumentado un 18,5%”, indican desde Efama.
Principales tendencias
Sobre las principales tendencias que marcaron el año, el informe de Efama destaca que los costes de los fondos están disminuyendo en todos los principales tipos de UCITS a largo plazo. “Los UCITS de renta variable vieron cómo sus costes promedio bajaron gradualmente en los últimos años, disminuyendo un 21% entre 2020 y 2024 hasta un 0,75%. Los costes promedio de los UCITS de renta fija bajaron un 8% en el mismo periodo, hasta el 0,56%. Los UCITS multiactivos siguieron siendo más caros que otros fondos, pero sus costes también se redujeron un 8%, situándose en un promedio del 1,16%”, indica el informe.
Los inversores perciben estos menores costes como una ventaja competitiva al ponerlos en relación con la rentabilidad de estos productos. El informe señala que el rendimiento anual promedio de 2024 de todos los principales tipos de UCITS superó la media de los últimos 5 años: los fondos de renta variable entregaron un rendimiento promedio del 18,1%, los multiactivos un 9,8%, los de renta fija un 8,9% y los fondos del mercado monetario un 7,8%.
En segundo lugar, el análisis de los fondos muestra que los fondos más grandes representan una proporción cada vez mayor del mercado UCITS. En concreto, los vehículos UCITS con menos de 100 millones de euros representaron menos del 4% del total de activos netos de UCITS en 2024, y su participación está disminuyendo drásticamente. En contraste, la proporción de fondos más grandes —los que superan los 1.000 millones de euros y especialmente los que superan los 10.000 millones de euros— continúa aumentando, favorecida en los últimos años por la mayor demanda de ETFs y MMFs.
Una tendencia que ha llamado la atención en 2024 ha sido la popularidad que han ganado los UCITS pasivos. Según indica el informe, la cuota de mercado de los UCITS pasivos aumentó del 11% en 2014 al 29% a finales de 2024, creciendo tres puntos porcentuales durante 2024. “Este fuerte aumento refleja la creciente preferencia de los inversores por los ETFs”, comentan.
Hogares europeos
Sobre el interés de los inversores, destaca que las ventas de fondos SFDR Artículo 9 se volvieron negativas, mientras que las de los fondos de Artículo 8 y 6 se recuperaron. Según explica Efama, las ventas netas de fondos SFDR Artículo 9, que mostraron resistencia durante la caída del mercado en 2022, se volvieron negativas en 2024. Por el contrario, los fondos de Artículo 6 y Artículo 8 experimentaron un cambio positivo, con un fuerte aumento en las entradas netas. “Este cambio se debió principalmente al aumento en la popularidad de los ETFs y los fondos del mercado monetario”, matizan.
Por último, desde Efama ponen el foco en que los hogares europeos realizaron fuertes compras de fondos. En 2023, los fondos enfrentaron competencia directa de emisiones de bonos gubernamentales dirigidas a inversores minoristas domésticos. Sin embargo, en 2024, las compras minoristas de valores de deuda disminuyeron mientras que las adquisiciones de fondos por parte de los hogares aumentaron a 258.000 millones de euros, el segundo nivel más alto de la última década. “Esto confirma que los inversores minoristas europeos dependen en gran medida de los fondos de inversión para obtener exposición a los mercados de capitales”, afirman desde la organización sectorial.
Foto cedidaCarlos Cuerpo, ministro de Economía, en su intervención telemática hoy en Santander ante decenas de periodistas, en el 42º curso de la APIE.
El Consejo de Ministros ha acordado autorizar la operación de concentración del BBVA sobre el Banco Sabadell con la condición de que, durante tres años, ambos mantengan personalidad jurídica y patrimonios separados y autonomía en la gestión. Asimismo, ha acordado confirmar los compromisos establecidos por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Esto supone que cada entidad deberá preservar la autonomía en la gestión de su actividad orientada al mantenimiento de los criterios de interés general, distintos de los relativos a la defensa de la competencia, que fundamentan la decisión del Consejo de Ministros. “Estos criterios encuentran arraigo en la Constitución Española, se encuentran promulgadas por distintas normas del ordenamiento jurídico y están avaladas por la Jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea”, apunta la nota de prensa distribuida tras el Consejo de Ministros.
En concreto, estos criterios de interés general son garantía de un adecuado mantenimiento de los objetivos de la regulación sectorial vinculada al apoyo al crecimiento y a la actividad empresarial; protección de los trabajadores; cohesión territorial; objetivos de política social relacionados con la obra social de las fundaciones, la protección del consumidor financiero y la vivienda asequible; y promoción de la investigación y el desarrollo tecnológico.
Carlos Cuerpo, ministro de Economía, Comercio y Empresa de España, lo explicaba en el marco del XLII Seminario de la APIE, celebrado esta semana en Santander. “El propio análisis de la CNMC ha llevado una operación en este sector a una segunda fase, con condiciones específicas. La normativa habilita la entrada del Gobierno solo cuando se da esta segunda fase, cuando la CNMC considera suficiente relevante la operación. Y por eso el Gobierno ha establecido condiciones de interés generales distintas a las de competencia. La norma también exige que las condiciones estén justificadas y bien motivadas, impone un límite, es decir, un elemento de equilibrio y proporcionalidad necesario en las condiciones a establecer, y este es el marco en el que nos movemos. Desde el principio he señalado mi preocupación por elementos relacionados con la competencia pero ahora se trata de razones de interés general donde el Gobierno ha entrado a autorizar la operación pero con condiciones específicas, tratando de avanzar para que se cumpla la protección de los intereses generales pero con equilibrio”.
Respecto a la autonomía en la gestión de su actividad, explican que se deberá concretar, al menos, en el mantenimiento de una gestión y toma de decisión autónoma en relación con las decisiones que afecten a la política de: financiación y crédito, en particular a pymes; recursos humanos; red de oficinas y servicios bancarios; y obra social a través de sus respectivas fundaciones.
«No estamos impidiendo la operación, estamos en la siguiente etapa», añadió el ministro. Aseguró que “no habrá deterioro de plantillas como consecuencia de la operación”, algo que aplica a la inclusión financiera y la red de oficinas, y defendió que la decisión se ha producido “en base a criterios técnicos y de interés general, de forma proporcionada en base a lo que nos permite la ley”.
El comunicado señala además que “la existencia de múltiples intereses generales afectados, y la propia escala de la operación, aconseja evitar la imposición de condiciones parciales que pretendan proteger cada uno de ellos de manera aislada, cuyos resultados serían difíciles de predecir”. Por lo tanto, señalan que se ha optado por un enfoque finalista, en el que se obligue a la protección de todos y cada uno de los distintos intereses a garantizar identificados, mediante la introducción de una condición única, que favorezca una transición ordenada, contribuya a preservar estos intangibles y, con ello, el interés general afectado.
Siguentes pasos
Una vez comunicado a la CNMC y a las partes, el Gobierno explica que este Acuerdo de Consejo de Ministros pone fin al procedimiento de control de concentraciones económicas establecido en la Ley de Defensa de la Competencia. Además, Economía evaluará la eficacia de la condición acordada, con una antelación de entre seis y dos meses respecto de la fecha de finalización del menor plazo establecido en la condición acordada (tres años), BBVA y Banco Sabadell deberán remitir a la Secretaría de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa un informe de situación cada una, que detallará el modelo de gestión autónoma que se ha llevado a cabo y su contribución al mantenimiento de los criterios de interés general mencionados.
También, con la misma antelación, las entidades deberán elaborar y publicar en su sitio web un plan estructural a largo plazo en el que se detalle en qué medida su estrategia corporativa afectará, en al menos los cinco años siguientes, a los criterios de interés general identificados. “Transcurridos tres años, el Consejo de Ministros valorará la eficacia de la condición establecida, pudiendo ampliar su duración por un periodo adicional de dos años”, apunta el comunicado oficial.
Según explicó el ministro Cuerpo en Santander, tras los tres años ambas entidades tendrían que solicitar la fusión: «La temporalidad es uno de los elementos que asegura la proporcionalidad de la condición; si a los tres años no se cumple, no habrá prorrogas en la condición, la siguiente entrada del gobierno se produciría en el caso de que las entidades pidieran fusionarse, algo sujeto a la ley de solvencia», aseguró.
Dos planos separados
En justificación de la decisión, el ministro diferenció dos planos separados en toda la operación: el marco legal y el teórico o conceptual: “Hemos seguido de forma escrupulosa el ordenamiento jurídico, la normativa de 2007 alineada con la europea. A partir de aquí podemos tener una discusión de fondo, teórica o ideológica, sobre el sector financiero que queremos a futuro para competir con los grandes bancos internacionales y sobre la transición hacia un sector financiero más competitivo, pero, en esta discusión, podemos estar en desacuerdo con respecto a otras instituciones”, dijo, en respuesta a algunas críticas que empiezan a aparecer de organismos europeos.
“Somos conscientes sobre la realidad de los bancos europeos en cuanto a tamaño y es necesario avanzar en la unión bancaria y tener actores con más escala pero en ese proceso hay que tener en cuenta dos elementos esenciales: aquí hablamos de una operación doméstica entre dos entidades españolas –siendo el mercado relevante el doméstico español- y la imposición de la condición no va en contra del objetivo último de la consecución de la unión bancaria. Sobre la forma en la que deba configurarse el sistema financiero de cada país al final del camino podemos hablar pero en este sentido es relevante que, además de tener instituciones financieras de suficiente tamaño, tengamos un sector diversificado, que también incluya instituciones con un elemento de proximidad con el cliente, aterrizaje local o regional”. En resumen, defendió el ministro, “entidades financieras más grandes, sí, pero hay que considerar a qué coste y con qué procedimiento de transición al marco europeo donde hay que integrarse para que nuestros bancos accedan a esa mayor escala”, dijo, recordando que “en España lideramos ese proceso con iniciativas como el laboratorio de competitividad”.
Mayor complejidad
Para los expertos, la operación sigue adelante, aunque añade complejidad: “El visto bueno del Gobierno español a la adquisición de Sabadell por parte de BBVA viene acompañado de una serie de condiciones, como la obligación de mantener abiertas las redes de sucursales, mantener los préstamos a las pymes y mejorar la competencia en mercados específicos. Todas ellas tienen por objeto salvaguardar el interés público y la estabilidad económica. La condición clave de que BBVA y Sabadell deben seguir siendo entidades jurídicamente independientes durante un máximo de cinco años parece dura, pero no es inesperada. Aunque añade complejidad operativa, no cambia la lógica que subyace a la operación”, explica Filippo Alloatti, Head of Research for Financials – Crediten Federated Hermes.
Foto cedidaCarlos Asilis (izq) y Lisandro Chanlatte (der), fundadores de AC Global Investment Partners
Lisandro Chanlatte y Carlos Asilis, profesionales con larga experiencia en el mercadofinanciero, se independizaron para crear AC Global Investment Partners, una plataforma independiente de asesoría y gestión de inversiones dispuesta a “actuar como administrador de confianza del patrimonio generacional” de familias de ultra alto patrimonio.
Ambos se proponen ser “socios a largo plazo de inversores sofisticados”, según sus propias palabras. Tienen como objetivo alcanzar los 500 millones de dólares de AUMs en tres años, trabajando con entre 20 y 40 familias, tanto en el mercado onshore como offshore.
En los documentos fundacionales de AC Global -a los que tuvo acceso Funds Society-, pueden leerse los servicios que ofrecerá la firma, y también el modo en el que trabajará. Ambos socios ofrecerán una solución integral personalizada para la supervisión profesional del patrimonio. La misma fue diseñada para atender de forma exclusiva a familias de ultra alto patrimonio con más de 25 millones de dólares en activos líquidos bajo asesoramiento. Basados en New York (Chanlatte) y Miami (Asilis), prometen mediar entre sus clientes y los múltiples proveedores financieros, asegurando un manejo óptimo de los activos.
Pero por sobre todas las cosas, lo que distinguirá a AC Global, le aseguró Chanlatte a Funds Society, será su perspectiva independiente, que evitará conflictos de intereses en las recomendaciones de inversión y sesgos a la hora de la toma de decisiones. La nueva firma dejará que sus clientes sigan trabajando con sus bancos y proveedores preferidos, pero “optimizados ahora por una supervisión profesional”.
Para Chanlatte, “esto será más que una nueva empresa: es un modelo reinventado para ofrecer una gestión de inversiones de calidad institucional con la alineación, la transparencia, el servicio personalizado y la independencia que nuestros clientes merecen”.
El director de inversiones de AC Global, Carlos Asilis, ha gestionado capital institucional para fondos de pensiones, fondos de dotación, fundaciones, compañías de seguros, oficinas familiares y clientes de banca privada de EE.UU.. “Su trayectoria multicíclica refuerza nuestra capacidad para ofrecer rendimientos constantes y ajustados al riesgo, tanto en regímenes de mercado estables como en situaciones de tensión”, dice el documento fundacional de la firma.
Trayectorias diferentes pero complementarias
Las trayectorias de Chanlatte y Asilis son distintas pero muy complementarias, lo que agrega valor a la firma. El primero tiene una amplia experiencia, adquirida principalmente en Citi Private Bank, donde ha dirigido equipos de asesoramiento de inversión y estrategias para clientes institucionales y con un patrimonio neto muy elevado. En tanto, el segundo tiene una especialización en inversión macro y gestión de riesgos de cartera.
Lisandro Chanlatte es un ejecutivo de la industria de la gestión patrimonial privada con amplia experiencia en estrategia de inversión, construcción de carteras y soluciones integrales de asignación de activos para personas con un patrimonio neto ultra alto e instituciones. En Citi, fue miembro del equipo directivo de Global Private Bank, el área de Ida Liu, quien renunció a su puesto a fines de enero último.
Con una trayectoria profesional de más de dos décadas, su experiencia en gestión de activos globales y estrategia empresarial se centró en dirigir el departamento de Asesoramiento de Inversiones de Citi Private Bank en Norteamérica.
Anteriormente, como director de inversiones para Latinoamérica en Citi, gestionó un importante negocio de inversiones y dirigió un gran equipo en múltiples centros financieros. Sus responsabilidades incluían el desarrollo de estrategias de inversión y la supervisión de unos 50.000 millones de dólares en activos. Casi toda la carrera profesional de Lisandro Chanlatte estuvo relacionada al banco estadounidense. Antes de incorporarse a Citi, se desempeñó como equity research associate, también en New York, en J.P. Morgan, y fue Managing Director & Investment Officer en BAP Capital, un fondo de real estate.
Chanlatte es licenciado en Administración de Empresas por la Universidad Loyola de Nueva Orleans (summa cum laude) y tiene un MBA por la Harvard Business School. También es analista certificado en inversiones alternativas (CAIA), y posee las licencias FINRA Series 7, 24, 31, 63 y 65.
Carlos Asilis es un experto con 30 años de experiencia en inversión macroeconómica global, análisis económico y construcción de carteras. Antes de cofundar AC Global, fue portfolio manager en Graham Capital Management y co-fundador y director de inversiones en Glovista Investments, donde gestionó estrategias de activos múltiples y mercados emergentes, con un volumen máximo de activos de más de 1.100 millones de dólares.
Anteriormente, fue estratega jefe de inversiones en JPMorgan Chase, donde asesoró a clientes institucionales de todo el mundo y definió las perspectivas de asignación de activos a nivel global. Al principio de su carrera, trabajó en algunas de las plataformas de negociación macro y propietarias más respetadas del mundo: VegaPlus Capital Partners, Santander Global Proprietary Trading y Credit Suisse First Boston. Estas experiencias profundizaron su comprensión de los ciclos del mercado y la gestión de riesgos, habilidades que siguen siendo fundamentales para su filosofía de inversión como director de inversiones de AC Global Investment Partners.
Asilis también trabajó como economista investigador en el Fondo Monetario Internacional (FMI), donde se ocupó de programas de supervisión económica y reforma estructural en China y Rusia. Tiene un doctorado en Economía por la Universidad de Chicago y una licenciatura en Economía y Finanzas por la Wharton School de la Universidad de Pensilvania. Su enfoque de los mercados se basa en los datos y en la información global.
Foto cedidaDe izquierda a derecha Francisco Uría, Juanjo Cano, presidente de KPMG en España, y Francisco Pérez Bermejo.
Francisco Pérez Bermejo, socio del área de Financial Services Consulting de KPMG en España, será el próximo responsable del sector financiero de la firma en España a partir del 1 de octubre. Sustituirá en el cargo a Francisco Uría que, a petición propia y de conformidad con KPMG, abandonará la firma el próximo 30 de septiembre tras 15 años como responsable del sector para iniciar una nueva etapa profesional.
“Es para mí un orgullo y una gran responsabilidad liderar a partir de octubre a un gran equipo de profesionales de KPMG especializados en Banca, Seguros y Gestión de Activos. Con la ayuda de todos ellos estoy convencido de que vamos a consolidar a KPMG como la firma de servicios profesionales de referencia en el Sector Financiero aprovechando el gran legado que recibimos de Paco Uría”, ha explicado Francisco Pérez.
En su opinión, el sector financiero atraviesa un momento muy retador, pero a la vez lleno de oportunidades. “La necesidad de reformular sus estrategias, la presión regulatoria, potenciales operaciones corporativas y los retos asociados a integrar las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial en el negocio y las operaciones son temas prioritarios para nuestros clientes y queremos ayudarles a avanzar con una sólida propuesta de valor”, ha añadido.
Francisco Pérez acumula más de 20 años de experiencia en el campo de la consultoría a entidades financieras. Es especialista en la gestión de riesgos, la adaptación e implantación de nuevas regulaciones, la medición y optimización de capital y ha participado en operaciones corporativas e iniciativas de transformación digital. Asimismo, ha liderado equipos a nivel internacional en KPMG, demostrando una destacada capacidad para articular soluciones multidisciplinares para los clientes. Además, ha compaginado su labor profesional con la docencia en distintos programas de formación de posgrado y participado en diversos foros sectoriales como ponente.
Por su parte, Francisco Uría deja la firma para iniciar una nueva etapa profesional a partir de octubre. Sus conocimientos técnicos y su capacidad de liderazgo y de integrar equipos han sido claves para situar a la firma como opción de referencia en el sector de los servicios financieros y, particularmente en el de banca y mercado de capitales, sector del que ha sido responsable global de la firma en los últimos cuatro años. Uría es abogado del Estado excedente y doctor en Derecho y, previamente a su incorporación a KPMG en 2010, ocupó altos cargos en la Administración General del Estado y fue vicesecretario general y jefe de la Asesoría Jurídica de la Asociación Española de Banca (AEB).
“Dejo la firma en un momento en que me siento en plenitud para iniciar un nuevo proyecto profesional no competidor con KPMG y con la confianza de dejarla en las mejores manos. Siento una profunda gratitud a la firma por darme la oportunidad de vivir una experiencia tan enriquecedora, a sus magníficos profesionales, con los que tanto he aprendido, y por supuesto a nuestros clientes. No puedo sentirme más orgulloso de lo que hemos conseguido juntos en estos años y de dejar una firma mucho mejor que a la que me incorporé. Mirando al futuro, deseo a mis compañeros y amigos todo lo mejor. Estoy seguro de que continuarán los grandes éxitos y nadie estará más satisfecho que yo al contemplarlos”, ha manifestado Francisco Uría.
El equipo de KPMG en el Sector Financiero está integrado por 1.600 profesionales y 70 socios que prestan servicios en las principales entidades financieras, aseguradoras y gestoras de activos a través de sus especialistas de consultoría, auditoría y asesoramiento legal y fiscal.
En menos de 24 horas hemos pasado de una posible escalada militar en Oriente Medio -tras las agresiones entre Irán, Israel y EE.UU.- al anuncio de “alto al fuego», y a una cierta desescalada de las tensiones. Según las firmas de inversión y las gestoras internacionales, el reflejo de esta situación geopolítica se ve con claridad en el comportamiento del petróleo, pero lo que más destacan es la aparente serenidad que se observa en los mercados financieros.
En opinión de Thomas Hempell, responsable de análisis macroeconómico y de mercados en Generali AM (parte de Generali Investments), durante el lunes, en general, los mercados reaccionaron con una actitud de aversión al riesgo, con subidas de los precios del petróleo y caídas de los mercados de renta variable.
“Sorprendentemente, el dólar estadounidense subió en un primer momento, pero parece haberse desvanecido rápidamente, lo que refuerza la preocupación por la disminución de su estatus de refugio seguro. Aun así, se trata de una mejora con respecto a la respuesta negativa del dólar estadounidense a las crecientes tensiones comerciales de las últimas semanas: de hecho, un aumento más pronunciado de los costes energéticos perjudicaría especialmente a los importadores de energía (incluidos la zona del euro y Japón), mientras que EE.UU. se ha convertido en un exportador neto de petróleo”, destaca Hempel. Según su visión, los bonos del Tesoro (y los bunds) tampoco actuaron como refugio seguro, ya que los rendimientos de la deuda estadounidense a 10 años cotizan en torno al 4,40%.
Por su parte, las bolsas reaccionan con optimismo a la desescalada de Oriente Medio, mientras que los precios del petróleo caen un 3% el martes y, en Europa, los precios del gas se desploman un 11%. “La tibia respuesta iraní y el rápido cese al fuego apuntan a un escenario de distención en los próximos días, lo que devolverá el protagonismo a la moratoria arancelaria –que vence en 15 días– y a la negociación de la reforma fiscal americana, actualmente en el Senado”, reconocen los analistas de Banca March en su informe diario.
“Los conflictos militares son siempre impredecibles. Incluso los expertos en Oriente Medio tienen dificultades para anticipar cómo se desarrollará esta guerra y cuáles serán sus consecuencias en los próximos días, semanas o meses. Antes de que comenzara la guerra entre Israel e Irán, el orden mundial en evolución y el cambiante panorama geopolítico —marcado por aranceles y guerras comerciales— ya añadían incertidumbre sobre los rendimientos esperados en todas las clases de activos”, reconocen desde AllianceBernstein.
Activos y mercados más sensibles
Según explican Kerstin Hottner, directora de materias primas de Vontobel y los gestores Regina Hammerschmid y Renato Mettler, aunque de forma generalizada se esperaba una subida de los precios del petróleo y un sentimiento de huida hacia la seguridad para empezar la semana, el panorama observado en los mercados europeos fue muy distintos. “Los futuros del crudo Brent abrieron con una fuerte subida en Asia, a 81 dólares, antes de retroceder antes de la apertura europea y cotizar ligeramente por encima del cierre del viernes, en torno a 77,10 dólares. El sentimiento de aversión al riesgo fue moderado en todas las clases de activos, con la renta variable y los rendimientos de los bonos cotizaron ligeramente a la baja y el dólar estadounidense se fortaleció. Curiosamente, la demanda de oro es limitada a pesar del aumento de las tensiones geopolíticas. La débil respuesta sugiere que los mercados están a la expectativa, centrados especialmente en cómo responderá Irán en los próximos días. Por el momento, Estados Unidos ha anunciado un alto el fuego de 12 horas. Todo dependerá de qué ocurra después”, apuntan los expertos de Vontobel.
Por último, desde Ebury consideran que la guerra entre Israel e Irán dominará el mercado de divisas tras la intervención de Estados Unidos. En este contexto, “la divisa estadounidense parece estar manteniendo su condición de divisa refugio en tiempos de grave inestabilidad geopolítica y ha subido frente a todas las principales divisas del mundo”, explican los analistas de la fintech. Además, consideran que el euro cotiza casi exclusivamente en respuesta a acontecimientos externos, en particular la guerra entre Israel e Irán, y “se ve afectado en general por la subida de los precios del petróleo y el hecho de que Europa es un gran importador neto de energía, mientras que Estados Unidos es un exportador”, apuntan los analistas de Ebury, quienes prevén que esta semana persista la misma tónica: “La moneda única ha abierto a la baja mientras los precios del petróleo siguen subiendo”.
No precipitarse
En opinión de la gestora estadounidense Payden & Rygel, las tensiones en Oriente Medio acapararon la atención de los inversores esta semana, lo que provocó movimientos en los mercados solo unas semanas después de que las acciones de EE.UU. se recuperaran de una caída del 18,9 %. Sin embargo, recomiendan mantener la calma en medio de la agitación.
“En primer lugar, una recopilación de las crisis geopolíticas ocurridas desde 1939 sugiere que la caída media del mercado provocada por acontecimientos geopolíticos es solo del 5,6% y dura solo 16 días. En segundo lugar, los mercados tienden a recuperarse rápidamente. En el 60 % de los casos, el índice S&P 500 recuperó las pérdidas en el plazo de un mes desde el mínimo, y en el 80 % de los casos en el plazo de dos meses. Las excepciones suelen ser crisis que provocan o coinciden con una recesión, o una inflación persistente que mantiene elevados los tipos de interés de los fondos federales, como el embargo petrolero de 1973. En tercer lugar, la rentabilidad media 12 meses después de una crisis geopolítica fue del 14%, muy por encima de la rentabilidad media anual del S&P 500 en ‘épocas normales’. En otras palabras, a menos que se espere una recesión o una subida de tipos por parte de la Fed en los próximos 6 a 12 meses, conviene adoptar una perspectiva a largo plazo y mirar más allá de la volatilidad a corto plazo”, afirman.
Un mensaje similar lanza Gregor MA Hirt, CIO global de multiactivos de Allianz Global Investors: “Los inversores deben prepararse para una turbulencia a corto plazo, con los precios de la energía y a las expectativas de inflación. No obstante, como en crisis anteriores, los movimientos excesivos del mercado podrían dar pie a oportunidades interesantes. Los bancos centrales, en particular la Fed, podrían verse obligados a reconsiderar sus trayectorias de política si la inflación se acelera mientras el crecimiento se desacelera”. Para MA Hirt, en los próximos días, será fundamental conocer el alcance de los daños en las instalaciones nucleares iraníes, la magnitud de la respuesta iraní y la posición que adopte la comunidad internacional. “Todo ello marcará el rumbo del sentimiento de los mercados en el corto plazo”, matiza.
Es más, Dan Ivascyn, director de inversiones de PIMCO, recuerda a los inversores que la incertidumbre proporciona un impulso para la renta fija. Ivascyn reconoce que el mercado puede estar ante una inversión del excepcionalismo estadounidense y que sean otros mercados los más rentables, lo que supone una oportunidad para diversificar fuera de EE.UU.
“La evolución de los precios y las noticias de este año son un ejemplo de lo incierto que es el entorno macroeconómico. Siempre es importante recordar a los inversores que el rendimiento o los ingresos actuales impulsan una parte significativa de la rentabilidad de la renta fija. A pesar de la gran volatilidad, la rentabilidad ha sido bastante buena, especialmente si se ha tenido una cartera global con activos no denominados en dólares y mercados emergentes de mayor calidad. En PIMCO, adoptamos una orientación a largo plazo, utilizamos todas las herramientas a nuestro alcance, reconocemos la gran incertidumbre, reforzamos la resiliencia de las carteras y nos esforzamos por ofrecer rendimientos muy atractivos a nuestros clientes”, afirma Ivascyn.
Carteras resilientes y prudencia
Las gestoras también recuerdan que no se puede jugar a predecir qué ocurrirá, por ello apuestan por construir carteras que sean resilientes. “Las próximas semanas presentan múltiples riesgos para los mercados, incluidos los desarrollos de tarifas y otras políticas de EE.UU. – pero estos son bidireccionales, ya que los mercados también podrían ‘escalar la pared de preocupación’ una vez que pasen”, argumenta Salman Ahmed, responsable global de macro y asignación estratégica de activos en Fidelity International.
En su opinión, desde una perspectiva de asignación de activos, este es un momento para mantenerse ampliamente neutral frente al riesgo mientras se toman puntos de vista más granulares en las distintas regiones y clases de activos, comprando y vendiendo muy selectivamente. “La diversificación sigue siendo clave, así como la flexibilidad para gestionar activamente los riesgos – incluidas las posiciones de divisas y coberturas selectivas (por ejemplo, el oro)”, apunta.
Por su parte, Michaël Nizard, responsable de multiactivos y overlay y, Nabil Milali, gestor de multiactivos y overlay en Edmond de Rothschild AM, reconocen que, en este contexto, mantienen su visión prudente de los mercados de renta variable ante la actual incertidumbre económica y geopolítica, especialmente porque las valoraciones han vuelto a niveles elevados. “En cuanto a las inversiones en renta fija, mantenemos una opinión neutral sobre la duración y seguimos prefiriendo el carry, mientras que la incapacidad del dólar para recuperar su estatus de activo refugio refuerza nuestra opinión negativa”, añaden los expertos de Edmond de Rothschild AM.