Foto: Modadesnuda, Flickr, Creative Commons. BME lanzará nuevos servicios de transparencia en el ámbito de la normativa MiFID II
BME prepara el lanzamiento de nuevos servicios de transparencia para ayudar a los participantes del mercado a cumplir con los requisitos regulatorios de la Directiva MiFID II, que entrará en vigor en 2017.
Para ello, BME Market Data solicitará a los supervisores autorización para operar una Approved Publication Arrangement (APA), una nueva figura contemplada por MiFID II en el contexto del nuevo régimen europeo de transparencia post-contratación.
El APA gestiona el sistema a través del cual las empresas de servicios de inversión tienen obligación de publicar, en tiempo real, los detalles de sus transacciones OTC de renta variable, renta fija, certificados, ETFs, productos financieros estructurados y derivados para dar cumplimiento a sus obligaciones de transparencia post-contratación en el marco de la nueva normativa.
La autorización como APA otorga una licencia para operar en toda la UE y supone la obligación de difundir la información recibida de las entidades de manera rápida, no discriminatoria y a un coste razonable. Asimismo, el APA deberá contar con sistemas que le permitan llevar a cabo un control de la información que publica, e informar al cliente de errores potenciales en la información suministrada.
BME Market Data solicitará el estatus de APA en cuanto la autoridad competente comience a aceptar registros. La información de operaciones sobre las que se realice el reporting se difundirá a través de las Data Feeds de BME.
MiFID II tendrá un impacto significativo en los mercados financieros europeos en los próximos años. Mientras que muchas de las obligaciones de transparencia de MiFID I eran sólo de aplicación a instrumentos financieros regulados específicos, MiFID II amplía su alcance para afectar a los instrumentos de renta variable, renta fija, certificados, ETFs, productos financieros estructurados y derivados. El objetivo es hacer aún más transparente la negociación de instrumentos financieros complejos y de aquellas transacciones que tienen lugar fuera de un mercado regulado, SMN u OTF.
Foto: JimMullhaupt, Flickr, Creative Commons. Educación financiera: en busca de luz tras la tormenta
Desde siempre me han apasionado las historias de aventuras. Explorar lugares remotos, acechando los riesgos en busca de secretos ocultos, de tesoros por compartir que nos abran la mente a una nueva realidad. Y en esta búsqueda, encontrar el éxito inversor se presenta tan apasionante como dar con el arca de la Alianza.
Con frecuencia solemos hablar de los “mercados” como el ente intangible que movido por la codicia es el causante de gran parte de los males que nos rodean, cuando en realidad han sido los “mercaderes”, escudados en cierta incompetencia o vagando en la coartada de los conflictos de interés, los que han perpetuado las imperfecciones sesgadas del dinero fácil hacia la faz que menosprecia los riesgos. Y es en este punto cuando nuestra aventura deviene tormentosa por el desengaño de la indefensión.
A lo largo del tiempo, se han aceptado como verdades absolutas en el ámbito de las inversiones financieras ciertas creencias que han condicionado nuestra forma de actuar. Convicciones erróneamente centradas en encontrar respuestas, en lugar de en hacer las preguntas adecuadas. Tan sólo los inversores privilegiados suelen disfrutar de un asesoramiento personalizado y analítico, donde se pone en práctica uno de los grandes secretos de las finanzas: el de sabernos seres racionales antes que adivinos.
En un mundo interconectado, cada día son más las variables que interactúan unas con otras. La economía financiera, como ciencia social, se ve influenciada por ellas, pero la predicción de su comportamiento y evolución no puede ser definida por una fórmula exacta. Por tanto, lo único que podemos hacer es conocer cuáles son algunas de las más importantes, definir su ámbito de aplicación y exponer posibles escenarios de evolución en base a su definición e influencia. Hasta hace no mucho, el comportamiento financiero se creía regido por unas cuantas leyes y modelos cuya validez se consideraba irrefutable. Influjos como el efecto globalización o el behavioral finance, han derivado en relaciones cada día más complejas que han favorecido la aparición de nuevas teorías a tener en cuenta en el campo inversor. Consecuentemente, no se trata tanto de predecir el futuro sino de reaccionar a tiempo ante los factores que influyen en el valor de los activos financieros.
Desde que nacemos hasta el último gran viaje, en todos sus ámbitos, la vida se convierte en un camino de obstáculos, en un trayecto de cruces binomiales que marcarán nuestro destino. Del análisis de esas decisiones y de la adecuada valoración de sus riesgos dependerá que la travesía sea más o menos llevadera. En este recorrido, con frecuencia nos escudamos en actuaciones de terceras personas para justificar errores que, en última instancia, son responsabilidad nuestra. Por responsabilidad sostenible entendemos la aplicación de aquella conducta moral, más allá del paradigma financiero, que nos allana el camino para conseguir un desarrollo, bienestar y progreso viables y continuados en el tiempo. Como parte de esta responsabilidad, en el ámbito financiero e inversor, la educación representa a día de hoy un claro déficit que es necesario equilibrar. La falta de unos conocimientos mínimos impide, en muchos casos, el seguir una visión crítica a la hora de tomar decisiones analíticas. Y es que, si bien es cierto que con educación financiera no vamos a eliminar la incertidumbre, también lo es que la podemos acotar significativamente. Las finanzas pueden ser muy complejas, pero pueden llegar a ser entendibles y útiles si asumimos el reto de adentrarnos poco a poco en ámbito de influencia.
Decía Séneca que ni el mejor viento es suficiente si uno no sabe hacia dónde va. Hagamos que la educación financiera constituya el faro que guíe esta aventura. Sólo así podremos evitar el volver a tener esa sensación de que alguien decidió por nosotros, sólo así podremos recorrer el largo camino que nos queda para ver la luz después de la tormenta.
Óscar Bastanchury. Profesor del IEB y autor del libro “Tierra de Mercaderes”.
Foto: Jennie O, Flickr, Creative Commons. Los expertos internacionales sostienen que cada vez habrá que destinar más ahorro privado para la jubilación
Los expertos internacionales sostienen que cada vez habrá que destinar una mayor proporción de ahorro privado para la jubilación. Ésta es una de las principales conclusiones de la conferencia internacional “¿Hacia una crisis global de las pensiones? Cómo afrontar una creciente longevidad’’, organizada por Analistas Financieros Internacionales (Afi), en colaboración con el Instituto Aviva.
En la conferencia ha participado un grupo de expertos de talla internacional como el profesor James Vaupel, director ejecutivo y fundador del Instituto Max Planck de Investigación Demográfica; Nicholas Barr, profesor de Políticas Publicas de la London School of Economics; Clive Bolton, director de Retirement Solutions de Aviva UK & Ireland, y la profesora Elisa Chuliá, de la UNED.
El presidente de Afi, Emilio Ontiveros, y el consejero delegado de Aviva España, Ignacio Izquierdo, abrieron la conferencia destacando la necesidad de afrontar con decisión los retos que la creciente longevidad implica en el plano de las pensiones, en su dimensión financiera propiamente dicha, pero también de aseguramiento y de educación financiera de la población.
El profesor Vaupel realizó un repaso del tratamiento de la longevidad (senectud) y precisó que las ganancias en esperanza de vida son lineales y no presentan signos de desaceleración en el ritmo que han mantenido en las últimas décadas. En su opinión, vamos a vivir cada vez más, en mejor estado de salud a cada edad, vamos retrasar la discapacidad hacia edades cada vez más tardías y vamos a trabajar más años, pero menos horas.
Clive Bolton, basándose en las tendencias recientemente observadas en el Reino Unido, destacó que los productos tradicionales para afrontar la jubilación están sufriendo cambios radicales como consecuencia de nuevas regulaciones de los mercados. Por tanto, se van a multiplicar las opciones, pero los ahorradores deberán asumir un mayor control de sus finanzas e inversiones. Según Bolton, se echan en falta productos innovadores que permitan al ahorrador financiar su jubilación.
Por su parte, el profesor Nicholas Barr abordó en su ponencia el futuro de las pensiones y la eventualidad de una crisis global en esta materia. La naturaleza del problema radica, en su opinión, en que somos muy tardíos en reaccionar e instrumentar las adaptaciones necesarias. Incluso en ausencia de fenómenos demográficos como el baby-boom tendríamos problemas en las pensiones si no adaptamos los sistemas con la suficiente premura. La solución al problema creado por la creciente longevidad pasa, en su opinión, por reducciones de las pensiones mensuales, jubilaciones más tardías, mayores cotizaciones o ahorros y una mayor productividad, o una mezcla de todas ellas.
Finalmente, la profesora Chuliá recordó que las encuestas en diferentes países revelan la preocupación que causa la vejez entre la población y su desconfianza en que puedan disponer de suficientes recursos para afrontarla. En esa línea, dijo que desconcierta algo ver cómo la preocupación individual y social sobre la jubilación contrasta con una demanda incesante de apoyo públicos, una cartera creciente de servicios sociales y un debate casi plano sobre estos problemas.
Aitor Jauregui, responsable de desarrollo de negocio de BlackRock en España, Portugal y Andorra, comenta los datos de septiembre en los ETPs mundiales.. BlackRock: "La industria de ETFs continúa encaminada a registrar un 2015 histórico”
En septiembre, la inversión mundial en ETPs alcanzó los 28.000 millones de dólares, lo que impulsó los flujos totales de inversión en estos productos hasta los 230.000 millones de dólares en 2015. El sector sigue encaminado a registrar un año histórico, según los últimos datos del ETP Landscape Report de BlackRock correspondiente a septiembre.
La inversión de septiembre se vio apuntalada en todo el mundo por los productos cotizados de renta variable estadounidense —que registraron unos flujos cinco veces superiores a los de agosto— y de renta variable japonesa, así como de deuda pública estadounidense. Los ETPs de renta variable europea, en su conjunto, siguieron captando inversión, aunque a un ritmo inferior que en los meses anteriores.
En Europa, la inversión en ETPs se ralentizó y alcanzó los 2.000 millones de dólares durante el mes: la menor cifra en lo que va de año. Los productos cotizados de renta variable europea en su conjunto captaron buena parte de los flujos de inversión, que se ralentizaron hasta los 1.700 millones de dólares, en comparación con los 4.600 millones de agosto. No obstante, esta reducida cifra de inversión no afectó al panorama general del año completo, dado que los flujos totales de inversión en 2015 se sitúan en los 60.000 millones de dólares, la cifra más alta registrada en septiembre desde 2008 hasta la fecha
“Al comparar el volumen de inversión en ETPs europeos y mundiales, descubrimos un robusto dinamismo continuado a escala mundial, no así entre los inversores europeos. En nuestra opinión, el motivo principal de tal divergencia de inversión radica en la decisión de la Fed de retrasar la subida de tipos en su reunión del Comité de Operaciones de Mercado Abierto (FOMC) de septiembre. Esta decisión empujó a los inversores estadounidenses a apostar por su propio mercado de renta variable, a diferencia de Europa, donde el BCE se encuentra en una fase muy diferente”, comenta Ursula Marchioni, directora de estrategia de iShares para la región EMEA.
Menos salidas en emergentes
Las salidas de capital registradas en los productos cotizados de los mercados emergentes parecen haber amainado durante el mes pasado. Asimismo, BlackRock ha detectado un repunte en el interés por estrategias de mínima volatilidad centradas en los mercados emergentes, lo que podría representar una señal premonitoria de que los clientes quieren recuperar la exposición a esta temática, con una cierta protección frente a caídas. “Las salidas registradas en el tercer trimestre en esta categoría sigue siendo notables y, si bien podría ser demasiado pronto para determinar que los mercados emergentes han alcanzado mínimos, debemos mantenernos alerta. La actitud de sacar siempre el lado positivo de las cosas que observamos tras la publicación de los datos sobre las nóminas no agrarias el pasado viernes 2 de octubre implica que las perspectivas de una subida de tipos por parte de la Fed se retrasan, lo que podría crear un contexto tácticamente favorable para los mercados emergentes”.
Aitor Jauregui, responsable de desarrollo de negocio de BlackRock en España, Portugal y Andorra, añadió: “El sector ha sufrido cambios importantes en los últimos años pero su evolución ha sido magnífica. No podemos olvidar que hace solamente unos años el 20% de los inversores institucionales utilizaban los ETFs para periodos de más de seis meses y ahora, esa tendencia se ha incrementado notablemente. El 80% de las gestoras, fondos de pensiones y aseguradoras los mantienen en cartera durante más tiempo. La industria de ETFs continúa encaminada a registrar un 2015 histórico”.
Decir que el último trimestre ha sido difícil para los inversores sería un eufemismo, puesto que ni los mercados ni la confianza de los inversores habían experimentado una debilidad tan acusada desde hace muchos años. Todos hemos leído y oído sobre los desafíos a los que se enfrenta China y sus consecuencias para la economía mundial, pero los problemas no se limitan a cómo harán frente China y los países desarrollados a la inevitable desaceleración del gigante asiático. Mientras escribo, el índice MSCI World (Total Return) ha cedido un 8,3% en el tercer trimestre en dólares estadounidenses, aunque, dados los desplomes en algunos sectores, a veces parece mucho peor.
En función del punto de partida que tomemos, ya han pasado unos siete u ocho años desde el estallido de la crisis financiera mundial. Si sirve de algo, mi punto de referencia es la revisión a la baja de los beneficios de HSBC en febrero de 2007, cuando recortó sus previsiones de beneficios a causa del aumento de los préstamos dudosos en la división de créditos subprime estadounidenses que acababa de adquirir. Aunque la crisis no se intensificó de verdad hasta 2008, la historia indicaría que estamos más cerca del comienzo del próximo ciclo bajista que del final del último. El problema es que, incluso con una política monetaria hiperexpansiva con tipos de interés cero y abundante liquidez procedente de (efectivamente) medidas de expansión cuantitativa adoptadas a escala mundial, el crecimiento económico del mundo desarrollado es, en el mejor de los casos, modesto.
Según nuestras previsiones, el crecimiento mundial será de tan solo un 3,5% en 2016, y gran parte de los países desarrollados registrará un crecimiento muy inferior a este. En Estados Unidos, el mercado desarrollado más sólido del mundo, los pronósticos sobre el crecimiento siguen sometidos a presión, lo que limita la capacidad de las autoridades para comenzar a normalizar los tipos de interés. En Europa, el crecimiento podría registrar un ligero avance de tan solo el 1,5% el próximo año, a pesar del masivo programa de estímulos monetarios, la acusada depreciación del euro y el desplome de los precios de la energía. Incluso en Japón, donde las medidas de expansión cuantitativa ahora representan más el 14% del PIB anual, está resultando complicado generar crecimiento e inflación, y se prevé que el crecimiento no superará el 1,5% el año que viene.
Por esto es por lo que China resulta tan importante; ha sido un poderoso motor del crecimiento marginal. Puesto que resulta inevitable que el gasto de inversión impulsado por el crédito pierda gas, o incluso desaparezca, los efectos que esto tiene sobre la economía mundial y el sistema financiero son trascendentales.
Por lo que respecta a los precios de las materias primas, ya hemos sido testigos del hundimiento más generalizado del precio del petróleo y de los metales industriales a medida que se ha ido reduciendo el consumo. Con la aparición de nuevas fuentes de petróleo y la reticencia de la OPEP de recortar la producción, el precio del oro negro ha caído hasta niveles que antes costaba imaginar. Aunque en realidad esto representa una rebaja fiscal muy necesaria para los consumidores occidentales, por ahora parece que prefieren ahorrar sus ganancias a gastarlas. A su vez, esto ha generado una presión bajista para muchas de las divisas de los mercados emergentes, y numerosas economías se están viendo obligadas a aplicar políticas de tipos de interés procíclicas para impedir que sus divisas se desplomen. Todo esto resulta perjudicial para el crecimiento mundial, y pone al sistema financiero bajo cierta presión. Es difícil predecir cómo se desarrollarán los acontecimientos, pero lo que sí sabemos es que las previsiones sobre el crecimiento económico mundial seguirán revisándose a la baja.
Resulta complicado explicar por qué el crecimiento de los mercados desarrollados es tan débil, pese a los abundantes estímulos monetarios. Quizá se deba a la fuerza invisible del desapalancamiento a medida que lidiamos con el excedente de deuda acumulado durante la primera década del siglo XXI. Quizá se deba a las desfavorables tendencias demográficas o a la falta de mejoras de productividad. Sea cual sea el motivo, una China más débil no es una buena noticia, porque, de forma marginal, su crecimiento ha sido muy importante. Debería preocuparnos el hecho de que, si aparece una presión real sobre el crecimiento mundial, poco podrán hacer las autoridades para estimular la economía: los tipos de interés ya están al 0%, las medidas de expansión cuantitativa han tenido una repercusión limitada y los déficits presupuestarios limitan la capacidad de gasto de los gobiernos para resolver los problemas existentes.
En nuestro escenario central, el crecimiento anual del PIB de China se frenará hasta quizá el 5%. En tal caso, no sería necesario esperar a saber qué hace China a continuación en el frente político, ya que probablemente no se precisarán nuevos estímulos importantes. Sea cual sea el resultado, parece claro que los tipos se mantendrán más bajos durante más tiempo, y el punto de llegada de los tipos de interés cuando comiencen las subidas será muy inferior al de ciclos anteriores.
Antes de que nos deprimamos del todo, de esto también se derivan noticias positivas. Tras años perdiendo cuota de mercado a costa de los proveedores pasivos, los gestores activos están contraatacando. Este año, en Europa y el Reino Unido el gestor activo medio supera al índice en un cifra entre un 3% y un 5%, y la mayoría de nuestros fondos ha obtenido resultados mejores que estos. Como reflejo de nuestra postura prudente y nuestro estilo de inversión, hemos mantenido posiciones muy infraponderadas en valores de grandes empresas de energía y recursos, y hemos observado desde la barrera cómo se hundían las cotizaciones de muchas empresas antaño todopoderosas a causa del lastre que acarreaba una revisión a la baja tras otra. Para las que además están mal financiadas, esto podría ir a peor, y cabe esperar que se produzcan algunas quiebras. Los diferenciales crediticios ya lo reflejan, puesto que los diferenciales del alto rendimiento han subido a casi 600 p.b. con respecto de la deuda pública británica desde el mínimo de 300 p.b. de 2014. En nuestra opinión, a medida que la coyuntura sigue empeorando, será imprescindible contar con unos procesos sólidos de selección de valores, gestión del riesgo y construcción de carteras.
Afortunadamente, estas son áreas, todas ellas, en las que creemos despuntar. Aunque podemos decir que ahora nos encontramos en el contexto de mercado y macroeconómico más complicado desde el comienzo de la crisis financiera mundial, consideramos firmemente que estamos bien posicionados para generar buenos resultados para nuestros clientes. Estamos contentos con nuestra rentabilidad y son escasas las áreas de debilidad. Sin embargo, ahora es momento de centrarse y permanecer atentos, algo que recordaremos siempre a la hora de gestionar las carteras.
Mark Burgess es director de Inversiones para EMEA y Director Global de Renta Variable de Columbia Threadneedle Investments.
CC-BY-SA-2.0, FlickrAdam Mac Nulty, Client Portfolio Manager for Multi-Asset Solutions at Pioneer Investments. Pioneer Investments: “We Must Open up The Range of Opportunities and Ideas in order to Generate Alpha”
La volatilidad ha vuelto a los mercados y los inversores se están dando cuenta de que, en este entorno de incertidumbre, existe la posibilidad de perder dinero en activos tradicionalmente considerados como seguros, como la renta fija. De hecho, algunos mercados de deuda y de renta variable parecen estar sobrevalorados y las dudas sobre su comportamiento son cada vez más acuciantes. “Los inversores quieren retornos más estables pero no quieren asumir pérdidas ni riesgo y, en este sentido, las soluciones de retorno absoluto son una buena opción. Estas estrategias realmente tienen un lugar en las carteras”, afirma Adam Mac Nulty, client portfolio manager de Soluciones Multiactivo de Pioneer Investments, en una entrevista con Funds Society.
El experto, que participó recientemente en el Foro de Pioneer Investments en Miami, desvela las virtudes de un abanico de soluciones multiactivo de la gestora que abarca productos multiactivo con inversión directa -incluso en formato de rentas-, fondos de fondos, soluciones a medida y estrategias multiactivo de retorno absoluto. Estas últimas, que vienen gestionando desde 2004, han despertado un gran apetito entre los inversores, sobre todo en los últimos 18 meses, debido a las condiciones del mercado.
Pero no vale cualquier estrategia de retorno absoluto. Mac Nulty explica que la clave es la diversificación, ser consciente de lo que hay en cartera, y cada vez más, dar un papel menos relevante a la beta y más a la generación de alfa. “No debemos depender de la beta porque las percepciones a veces no se corresponden con la realidad”, dice. Y a esa generación de alfa ayudan, por ejemplo, las estrategias long-short: “En las estrategias tradicionales solo puedes generar valor en la parte larga pero en aquellas sin restricciones es diferente. Es importante abrir el abanico de oportunidades de inversión y las ideas, adoptar posiciones de valor relativo, hacer múltiples apuestas asegurando su descorrelación y que hay una verdadera diversificación”, afirma. Todo ello, con la intención de evitar la volatilidad de la renta fija y la variable.
Y reconoce que el hecho de tener una perspectiva de retorno absoluto es más sencilla con una cartera multiactivo que con un solo activo: “El hecho de no estar limitado a un activo te ofrece más oportunidades”. En sus estrategias invierten en activos que sean líquidos y negociables, incluyendo renta fija, renta variable, real estate, bonos convertibles, estrategias con derivados y materias primas,…
Desde que comenzaron con las estrategias de retorno absoluto con varios activos en 2004, mucho han cambiado los mercados. “Han ocurrido muchos eventos extremos, como la crisis de 2008 y periodos de volatilidad de los que hemos aprendido y nos han servido para mejorar la estrategia”, explica Mac Nulty. Como ejemplos, en los últimos años han introducido más diversificación en las carteras (antes tenían en torno a 45 estrategias y ahora rondan el centenar); más estrategias de valor relativo; han mejorado la descorrelación entre sus apuestas frente a los activos tradicionales; han fortalecido su equipo, que ahora cuenta con profesionales en Dublín, Milán y Múnich; y han introducido mayores coberturas frente a posibles riesgos extremos, en forma de opciones de venta o posiciones en oro, como cobertura de su visión macro. “Hemos aprendido mucho de las experiencias pasadas. También es muy importante realizar tests de estrés a las carteras de forma regular, para analizar cómo se comportarían en diferentes escenarios. Porque la próxima crisis puede ser diferente y queremos estar preparados”, afirma.
Como prueba, su comportamiento el pasado mes de agosto. Tras el rally en el primer trimestre del año, los gestores decidieron adoptar una visión más cauta al considerar que el valor frente al riesgo que ofrecían los mercados se había deprimido por causas artificiales, como la liquidez artificial. “Veíamos al mercado demasiado complaciente y las valoraciones no eran atractivas”. Por eso, redujeron el riesgo –con menos posiciones en bolsa y bajando la duración de 4 a 1,5 años- y, durante el verano -sobre todo en las caídas de agosto- se beneficiaron del poco riesgo de su cartera. “No hacemos timming de mercado pero sí somos muy buenos gestionando el riesgo. En verano teníamos muy poca exposición a bolsa y una duración moderada cuando se produjo el sell off; estábamos bien posicionados y caímos muy poco”, explica. Tras las caídas, han asumido algo más de riesgo en las carteras pero aún se encuentran en niveles bajos y no creen que aún haya buenos puntos de entrada. “Creemos que la volatilidad está volviendo a escena, lo que incrementará la correlación entre los activos”, advierte el experto.
Entre las estrategias multiactivo de retorno absoluto de la entidad destacan dos fondos, ambos gestionados de forma flexible, domiciliados en Luxemburgo: el primero, «Multi-Strategy» –un fondo de retorno absoluto multiestrategia lanzado en 2008, flexible y con sesgo hacia una posición larga en duración- pretende obtener un retorno por encima de la liquidez de entre el 3,5% y el 4,5% y el segundo, «Multi-Strategy Growth», es una versión algo más agresiva que pretende batir al cash en entre un 5% y un 6%. “Pretendemos ofrecer retornos estables centrándonos en el riesgo, sin depender de la beta y con las estrategias de valor relativo jugando un papel clave”, explica.
En general, las estrategias multiactivos de Pioneer (tanto fondos de fondos como multiactivos de inversión directa o con enfoque de retorno absoluto) se basan en cuatro pilares de gestión. El primero es la macro, según el cual los gestores obtienen un escenario principal que les lleva a favorecer unos activos frente a otros y unas regiones sobre otras (por ejemplo, les lleva a estar positivos con Europa o el dólar estadounidense pero evitar invertir en emergentes, aunque sí en algunos mercados como India). El segundo pilar es la cobertura macro: un grupo de especialistas en coberturas, crítico con el riesgo tomado en la estrategia macro, se dedica a analizar esos riesgos, sus probabilidades y su posible impacto en las carteras. Por ejemplo, ahora consideran que hay riesgos de un hard landing en China, de burbuja en sus mercados, de que las subidas de tipos en EE.UU. se produzcan de forma demasiado rápida o lenta, de que haya deflación en Europa… y analizan el impacto en las carteras. “Si consideran que las probabilidades son altas realizan coberturas”, explica el experto, y esas coberturas pueden implementarse de forma sencilla -con oro, por ejemplo- o más compleja, con derivados y swaps.
El tercer pilar se basa en las estrategias satélite, de valor relativo, que favorecen un activo, país, sector o divisa sobre otros… Por ejemplo, en emergentes favorecen países que han realizado reformas, como India, frente a otros endeudados, y apuestan por posiciones largas en el país asiático frente a posiciones cortas en divisas de países como Hungría o Brasil. La idea es que sean estrategias no correlacionadas entre ellas ni tampoco con la visión macro. Y el cuarto pilar es el de la selección, que intenta no replicar la visión macro, clave para estrategias de fondos de fondos pero no tanto para las de retorno absoluto. De hecho, estos pilares tienen distintos pesos dependiendo de si las carteras multiactivo son de fondos de fondos, de inversión directa o de retorno absoluto.
Actualmente, la gestora tiene 2.000 millones de euros en estrategias de retorno absoluto multiactivo pero se siente muy cómoda y consideran que pueden crecer mucho más. “Podemos gestionar 20.000 millones”, dice el experto.
Gonzalo Rodríguez, nuevo CEO de Imantia Capital, la antigua AC Gestión. Foto cedida. AC Gestión, gestora de Abanca, se convierte en Imantia Capital con el fin de hacerse un hueco entre las gestoras independientes
AC Gestión, gestora española con más de 40 años de historia y ahora en manos de Abanca -que compró oficialmente la gestora a Ahorro Corporación la pasada primavera– , inicia una nueva etapa y lo hace estrenando identidad corporativa. Desde hoy se convierte en Imantia Capital, un nombre inspirado en la fuerza de los imanes y metáfora de la capacidad de atracción y crecimiento.
La entidad pretende hacerse hueco entre las gestoras independientes españolas, liderada por un nuevo CEO, Gonzalo Rodríguez, que se incorpora a la gestora después de una dilatada carrera profesional en entidades financieras como Banco Santander, Crédit Agricole o Barclays. Con más de 20 años de experiencia como jefe de equipos de trading, llega a Imantia Capital con el objetivo de liderar el nuevo proyecto de crecimiento e internacionalización. “Tenemos el reto de situar a Imantia Capital a la cabeza de las gestoras independientes de España”, explica.
La entidad cuenta con cerca de 3.000 millones de euros bajo gestión en fondos de inversión, la mayoría de los cuales tienen marca AC, y el resto son fondos de antiguas cajas de ahorros. La gestora, que no quiere ser la gestora de un banco sino una entidad realmente independiente, se ha fijado como meta que el 30% de sus activos estén en manos de Abanca y el 70% pertenezcan a otro tipo de clientes, tanto institucionales como minorista. Para incidir en esa independencia, también quieren que la gestora esté en manos de más socios al margen del banco: aunque ahora Abanca es dueña de la totalidad de Imantia, el objetivo es que su participación vaya cayendo hasta por debajo del 50% dando entrada a nuevos socios.
En una primera fase, la entidad se centrará en crecer en España y más adelante se lanzará a la expansión internacional: “En un mercado globalizado como el actual, el desarrollo de negocio fuera de nuestras fronteras es una oportunidad única de crecimiento que está dentro de los planes de Imantia Capital”, dice el CEO. Una de las regiones en el punto de mira será Latinoamérica, aprovechando la presencia del banco en la región.
El equipo y el producto
La gestora, que presentará su plan estratégico en los próximos meses, aún no cuenta con director de inversiones y su equipo de 12 gestores –de AC gestión- depende del CEO. Las decisiones las toma un comité estratégico compuesto por los principales cargos de la gestora y el banco.
Sus fondos están registrados en todas las plataformas (Allfunds, Inversis, Selfbank) y en comercializadores como EVO Bank, Ahorro.com y Abanca. De hecho, van a lanzar una plataforma online para comercializarlos desde la propia entidad. Aunque de momento solo tienen fondos, la idea es convencer a Abanca para gestionar y desarrollar el negocio de pensiones y sicavs.
Imagen corporativa
“Con el color vino como dominante, la nueva imagen rompe con la anterior, reflejando la renovación de la gestora, ya que no se trata únicamente de un cambio de imagen. Imantia Capital da comienzo a una nueva andadura en la que estará más cerca del cliente, eje central de todas las decisiones”, explica en un comunicado la entidad.
En esta nueva etapa Imantia Capital va a estar más cerca del inversor, primando la transparencia y facilitando a sus clientes el acceso a la información. Para ello dará el salto a las redes sociales como complemento a los medios tradicionales, añaden desde la gestora.
Foto: Frédéric Janbon, nuevo responsable de BNP Paribas IP.. BNP Paribas nombra a Frédéric Janbon nuevo responsable de la división de asset management
BNP Paribas anunció ayer el nombramiento de Frédéric Janbon como responsable de BNP Paribas Investment Partners (IP), especialista en gestión de activos del Grupo. Janbon sucede en el cargo a Philippe Marchessaux, que le brindará su apoyo y le asesorará durante el período de transición antes de asumir, a petición de éste, otro proyecto dentro del Grupo BNP Paribas.
Tras dirigir con éxito la integración de los distintos equipos de gestión de activos de ABN Amro AM, Fortis IM y BNP Paribas Investment Partners para construir un negocio de gestión de activos a escala mundial, Philippe Marchessaux trabajó para simplificar su estructura, consolidar su base de clientes y preparar el negocio para los desafíos de cara al futuro.
Frédéric Janbon asumirá las responsabilidades de su nuevo cargo a partir del 20 de octubre de 2015. Su principal tarea será la de acelerar aún más el desarrollo de BNP Paribas Investment Partners como una firma de referencia en la gestión de activos institucionales y servicio al cliente.
Frédéric acumula más de 25 años de experiencia en los mercados financieros. En el Grupo BNP Paribas ha desempeñó diversos cargos, antes de ser nombrado jefe global de renta fija en 2005, una labor que dirigió con éxito hasta el final de 2014. Aportará a BNP Paribas Investment Partners a su larga experiencia en la gestión de relaciones con los inversores institucionales internacionales y en el desarrollo de soluciones para clientes.
El CEO de BNP Paribas, Jean-Laurent Bonnafé, dijo: “BNP Paribas Investment Partners es una división clave para el Grupo, tanto en términos de servicio a nuestros clientes institucionales como en la propuesta de soluciones de inversión a los clientes minoristas. Este negocio es una parte muy importante de nuestra estrategia de crecimiento».
Edificio de Groupama en Madrid.. Groupama Asset Management divide en dos su Dirección de Gestión y nombra nuevos responsables para su negocio
Para satisfacer mejor las necesidades de los clientes y afrontar los retos ligados a la evolución de los mercados, Groupama Asset Management ha realizado cambios en su organización. En concreto, ha nombrado a Jean-Marie Catala director general adjunto, a cargo de un perímetro que incluye las funciones legales, control y riesgos y desarrollo de negocio.
Al mismo tiempo, se ha reorganizado la Dirección de Gestión: se han creado dos direcciones. Gaëlle Malléjac se hace cargo de la Dirección de inversiones de gestión activa, que agrupa la renta fija, renta variable, convertibles, asignación dinámica, multi-gestión direccional e ingeniería financiera, y Claire Bourgeois se hace cargo de la Dirección de inversiones ALM, que se encarga de la gestión aseguradora como un centro de expertise al servicio del Grupo Groupama y de la clientela externa. Ambas direcciones de inversión reportarán directamente al director general, Philippe Setbon.
Thierry Goudin asumirá la responsabilidad de la Dirección de Desarrollo de Negocio. Como tal, su perímetro agrupará la Dirección Comercial, Marketing y Comunicación Productos, así como la Dirección de Servicio al Cliente.
Esta nueva organización, aumentando la transversalidad entre los equipos y acortando los circuitos de toma de decisiones, tiene como objetivo aumentar la eficacia operativa global de la estructura, dice la gestora en un comunicado.
Foto: Ingberrio, Flickr, Creative Commons. El selector de fondos: a la altura, como mínimo, del analista de renta variable o renta fija
La industria de gestión de activos es, sin lugar a dudas, una industria viva. No tenemos que irnos muy atrás en el tiempo para constatar la transformación continua que experimenta, no sólo a través de novedades legislativas, sino que nos encontramos con nuevos métodos de análisis, técnicas de gestión, metodologías de control de riesgo y nuevos activos en los que invertir por una mayor madurez y liquidez de los mercados o por nuevos vehículos, entre otros. Los perfiles profesionales que se demandan no son ajenos a estas novedades, y si hay uno que destaca sin lugar a dudas, en los últimos años, es el de selector de fondos de inversión.
El primer fondo de fondos se le atribuye a Berni Cornfeld en 1962 en EE.UU., dos años antes de la primera legislación sobre fondos de inversión en España. El auge de este vehículo en nuestro país no tuvo lugar hasta comienzos de este siglo, por lo que se trata de una industria joven pero que ha evolucionado muy rápidamente y este factor, unido a la cada vez mayor penetración de las gestoras internacionales junto con la mayor cultura financiera y la proliferación de entidades de asesoramiento, entre otros factores, ha hecho que el papel del analista de fondos de inversión esté a la altura del analista de renta variable o fija, e incluso en algunos caso les haya ganado terreno.
La cada vez mayor facilidad por parte del inversor final a la contratación de fondos de cualquier entidad, acceso a la información y cultura financiera es, no cabe duda, una excelente noticia. Pero también lleva aparejados ciertos riesgos a la hora de elegir el producto adecuado que hace del papel del experto en selección de productos si cabe aún más importante. Y no nos olvidemos de las implicaciones que tendrá cuando se implemente MIFID II con las clasificaciones tanto de clientes como de entidades.
Y de manera más concreta, la importancia de entender que incluso dentro de una misma categoría no se pueden catalogar todos los productos de igual manera, ni analizar cada clase de activo asignándole el mismo peso a las distintas variables que entran en juego a la hora de elegir un producto. Otro aspecto que cada vez cobra más importancia es llevar a cabo un adecuado análisis de la entidad gestora, y no sólo desde un punto de vista de tamaño y solvencia, sino también en lo que a su cultura corporativa y buenas prácticas se refiere.
El equilibrio entre ofrecer al cliente una gama de producto lo suficientemente amplia sin que se pierda entre el universo de fondos cada vez mayor, es complejo. Pero uno de los mayores valores añadidos de los selectores es tener la oportunidad de conocer de primera mano a gestores no conocidos por el inversor final y ponerlos a disposición de sus clientes bien vía directa, bien mediante la inversión a través de los fondos de fondos. Es por ello por lo que resulta preocupante que el 85% del patrimonio de la industria esté invertido en las cinco principales entidades tanto nacionales como internacionales.
Desde luego, el selector de fondos cobra una importancia cada vez mayor en esta industria de la cual formamos parte.
Columna de Ana Guzmán Quintana, responsable de Iberia en Aberdeen Asset Management