Triodos Bank lanza un plan de pensiones con criterios sostenibles
| Por Alicia Miguel | 0 Comentarios

El banco ético europeo Triodos Bank ha lanzado al mercado un plan de pensiones que invierte con criterios de inversión socialmente responsable (ISR) y de impacto. De esta forma, Triodos Bank amplía su gama de productos y servicios bancarios sostenibles para aquellas personas que deseen hacer un uso más responsable del dinero.
“El plan de pensiones Triodos es una efectiva opción de planificar los ahorros a largo plazo, sabiendo además que durante 20 o 30 años dichos ahorros estarán trabajando por construir una sociedad más sostenible y humana. Se trata por tanto de disponer de una previsión familiar en lo económico, y al mismo tiempo, de contribuir con una previsión social acorde con los ideales. Las inversiones del plan se realizan con rigurosos criterios de inversión socialmente responsable y de impacto que buscan equilibrar la rentabilidad, el riesgo y el impacto social”, explica Mikel García-Prieto, director general de Triodos Bank.
El 80% del fondo lo constituyen bonos verdes y soberanos emitidos por estados europeos. El 20% restante se invierte en renta variable de empresas sostenibles a través de fondos de inversión y de impacto Triodos que invierten en microcréditos, energías renovables, alimentación ecológica y tecnología ambiental, como por ejemplo Triodos Sustainable Pioneer Fund, Triodos Microfinance Fund, Triodos Renewables Europe Fund y Triodos Organic Growth Fund.
Rentabilidad a largo plazo
El plan Triodos Renta Fija Mixta tiene un perfil de riesgo de 3 sobre 7 para esta categoría de producto. El objetivo es alcanzar una rentabilidad razonable a largo plazo, en línea con la rentabilidad media de planes de pensiones de la misma categoría, que era del 1,27% en los últimos 10 años, según el índice Morningstar de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) a octubre de 2016. Cifras que sirven de referencia pero que no garantizan rentabilidades futuras.
Triodos Renta Fija Mixta exige una aportación mínima de 30 euros y máxima de 8.000 euros anuales y está pensado como producto de ahorro a largo plazo que permite al cliente aumentar, reducir o cancelar sus aportaciones en cualquier momento. La aportación se podrá realizar de dos maneras: periódica, estableciendo una orden de domiciliación o transferencia periódica al fondo mensual, trimestral, semestral o anual; o extraordinaria, realizando de manera puntual una aportación libre.
Es un producto que además ofrece ventajas fiscales que permiten por un lado reducir la base imponible del IRPF y por otro la exención de la tributación de los derechos consolidados en el Impuesto sobre el Patrimonio. Los límites fiscales aplicables serán la cantidad menor de o bien el 30% de los rendimientos netos de trabajo y de actividades económicas o bien 8.000 euros anuales.
ISR e inversión de impacto
En los últimos años ha aumentado la demanda de inversores particulares e institucionales por las inversiones sostenibles. En España, el mercado de la ISR ha crecido un 16,3% en los últimos dos años, según el último estudio del Foro Español de Inversión Socialmente Responsable (Spainsif).
Dentro de la ISR, la inversión de impacto –que pretende generar un impacto social y medioambiental positivo además de obtener un retorno financiero- se encuentra en su fase inicial en España y supone menos del 1% del mercado regional, según datos del Foro Europeo de Inversión Socialmente Responsable (Eurosif). Las fórmulas son diversas: bonos verdes y sociales, bonos de impacto social, microfinanzas, crowdfunding, capital riesgo social, fondos de inversión de impacto, etc. El interés de los inversores y emprendedores en este tipo de inversiones responde a la búsqueda de mercados con mayor transparencia, que permitan alinear capital con valores e impacto positivo, según se revela en elinforme “Inversión de impacto para todos”, elaborado por Triodos Bank y el Grupo de Trabajo sobre Inversión de Impacto Social del G8 en 2014.
Por su parte, los bonos verdes, aunque solo representan el 0,13% del mercado total de bonos, crecen de forma continuada y la demanda va en aumento. Según un estudio reciente de la Comisión Europea, la emisión total de bonos verdes a noviembre de 2016 era de 65.400 millones de euros, y las principales inversiones se dan en proyectos de energías renovables (45,8% en 2015), eficiencia energética (19,6%), transporte bajo en carbono (13,4%), agua sostenible (9,3%) y anticontaminación y reciclaje (5,6%).