Foto cedidaKeko Martínez, presidente y fundador de Ariete Family Office. Ariete Family Office diez años de gestión al patrimonio familiar de los futbolistas
Ariete Family Office, presidida y fundada por el ex jugador de fútbol Keko Martínez, celebraba recientemente su décimo aniversario. La empresa nació tras la experiencia de fracaso económico que sufrió el jugador a mitad de su carrera, con 24 años, y tiene como objetivo aconsejar y guiar a un colectivo especial, tanto por sus peculiaridades propias, como por las importantes sumas de dinero generadas en un corto periodo de tiempo y su imprevisibilidad futura.
En la actualidad, la compañía cuenta con un equipo profesional de 20 personas y está situada en una oficina de Avenida Diagonal de Barcelona, aunque con la previsión de abrir otra sede en Madrid en los próximos meses. Cuentan con una cartera de más de 100 familias aconsejadas y, a lo largo de estos diez años, la empresa ha ido incrementando sus productos y servicios con un know-how propio creado alrededor del financial planning con el fin de sistematizar una idea propia de asesoramiento basada en la búsqueda de los objetivos y sueños que los clientes les proponen, siempre desde una vertiente muy patrimonial y estable.
El acto de celebración tuvo lugar en la Sala Esferic, en Montjuic, Barcelona y contó con la asistencia de más de 120 personas entre las que se encontraban familiares, futbolistas en activo y exfutbolistas, partners y clientes.
“Yo era ese que iba para estrellita y acabó estrellado. Yo iba a ser futbolista y por eso entendía que no me hacía falta acabar ni el BUP ni el COU. A los 24 años, no me quería fichar ningún equipo. En ese momento, me quedé sin rumbo y sin casi dinero. Hasta entonces, había estado acostumbrado a un sueldo más alto que el de un empleado al uso, siendo este además una ayuda muy importante en mi casa. De repente, te ves que has vivido al día y que no tienes nada en la cuenta”, narraba Keko Martínez, presidente de Ariete.
Meses después, el deportista logró incorporarse de nuevo al fútbol con el equipo de segunda B, Guadix, en un pequeño pueblo de Granada. En esta segunda ocasión, además de jugar al fútbol, Martínez comenzó la carrera de empresariales y realizó un máster en Mercados Financieros en la Universidad Pompeu Fabra.
Fue en su retirada, a los 37 años, cuando Ariete cobró vida: “Decidí aprovechar mis conocimientos tanto deportivos como patrimoniales para ayudar a otros deportistas profesionales, en especial a jugadores de fútbol, a que su éxito deportivo en el campo se reflejara también en un éxito económico y no en un problema, como vi pasar en multitud de ocasiones”.
Ariete presta un servicio de consejo integral y multidisciplinar al patrimonio familiar desde los valores y la independencia. El método, de creación propia, está basado en el financial planning, especializado y orientado a familias cuyo patrimonio procede del mundo del deporte, arte, espectáculo, emprendimiento o empresa.
Estos campos tienen ciclos irregulares y asimétricos de generación de patrimonio y exigen soluciones especiales y a medida. Así pues, Ariete trabaja desde un modelo de consejero personal, que junto a un equipo multidisciplinar, busca la aplicación oportuna al patrimonio según los objetivos y aspiraciones acordados en su plan vital patrimonial.
Pixabay CC0 Public Domain. ¿Supergrandes o supersostenibles?
¿Constituye la búsqueda de empresas superestrella entre tecnológicas disruptivas, innovadores de consumo y small caps una búsqueda de lo obvio? ¿O tiene más sentido concentrarse en compañías sostenibles en ambos sentidos del término, como entidades responsables y como valores con una evolución sólida? BNP Paribas Asset Management responde en un artículo de su campaña “Investigator Series”.
La disyuntiva entre el superestrellato y la sostenibilidad
“Nuestra meta es invertir en empresas con modelos de negocio sostenibles”, asegura la gestora al apuntar que, aunque las superestrellas pueden ser sostenibles, las firmas más pequeñas también. “Por ejemplo, con frecuencia invertimos en compañías jóvenes que todavía no han alcanzado el liderazgo de mercado o la proporción de beneficio que suele asociarse con una superestrella, pero que, en nuestra opinión, podrían lograrlo en el largo plazo”.
En ese sentido, hace hincapié en que, aunque el tamaño puede aportar economías de escala y más oportunidades de interacción, también conlleva riesgos como gastos generales insostenibles, burocracia, ineficiencia y falta de agilidad. Por eso también invierte en empresas que, pese a no ser muy grandes en términos de ingresos o capitalización bursátil, dominan un nicho de mercado y, por ende, “son capaces de generar rentabilidades positivas y sostenibles sobre su capital invertido por encima de su coste de capital”.
Según BNP Paribas AM, los minoristas gigantes y las cadenas de suministro globales han puesto a muchos negocios tradicionales de la antigua economía entre la espada y la pared. En este contexto, las empresas de menor tamaño que han sobrevivido son aquellas que no han podido ser socavadas por minoristas centralizados o proveedores globales.
Estos “supervivientes” de menor tamaño brindan una experiencia minorista especializada, ofrecen un producto nicho o se concentran en un segmento particular del mercado que otros no pueden alcanzar. “Pese a ser muy rentables y crear valor, estas compañías nunca se considerarían superestrellas desde una perspectiva global, pero con el tiempo pueden generar rentabilidades significativas para sus accionistas”, apunta.
Resiliencia fundamental
Para descubrir a estas empresas prometedoras, la gestora emplea un análisis fundamental de valores llevado a cabo por especialistas sectoriales, en busca de empresas sostenibles con ventajas competitivas duraderas que cotizan con valoraciones atractivas. “Debemos destacar que no todas las empresas superestrella satisfacen nuestros criterios de valoración. Tratamos de invertir en compañías que ofrecen valoraciones atractivas respecto a sus homólogos y a su propio historial de contratación, pero también en términos absolutos; por ejemplo, en base al valor de sus activos”, señala.
En otras palabras: para BNP Paribas AM, la sostenibilidad va más allá de los factores o criterios ESG e incluye perspectivas financieras, económicas y estratégicas. En este sentido, “una empresa sostenible tiene un modelo de negocio resistente, en virtud de un ancho ‘foso económico’ basado en ventajas competitivas procedentes de innovación o propiedad intelectual, diferenciación de producto, poder de mercado, activos únicos, una marca distintiva o barreras de entrada”, afirma.
Además, a su juicio, la resiliencia procede de un balance sólido, una estrategia de negocio prudente y una oportunidad de mercado considerable o creciente. Desde una perspectiva ESG, una empresa sostenible debería, como mínimo, no causar daños y, preferiblemente, contribuir de forma positiva a objetivos medioambientales, sociales y de buen gobierno, añade la gestora.
Small caps, innovadores de consumo y disruptores técnicos
¿Dónde se pueden encontrar candidatos prometedores? “Sin duda, entre las empresas de pequeña capitalización, pero también en sectores como el de la innovación en consumo, marcados por temas seculares de ámbito global como el crecimiento y el envejecimiento de la población”, responde BNP Paribas AM. Los candidatos pueden proceder de industrias tan variadas como las ciencias biológicas, la computación en la nube, la inteligencia artificial, la robótica o la salud.
De hecho, mucha innovación tiene lugar en empresas de pequeña capitalización y de capital privado. No obstante, muchas compañías superestrella tienen la voluntad -y los medios- para innovar. “Este es uno de los motivos por los que creemos que las inversiones en innovación y disrupción deberían estar distribuidas entre distintas capitalizaciones de mercado”, insiste.
Diversificar: las superestrellas (de cualquier tamaño) no lo son para siempre
Según la gestora, esto también tiene sentido desde un punto de vista histórico: “Diversos estudios han encontrado cierta rotación entre las empresas superestrella, lo cual puede ser reflejo del fenómeno por el que los cambios sociales siempre dan pie a una rotación natural entre las compañías más rentables”.
El superestrellato no es garantía de éxito a largo plazo, ya que la innovación disruptiva puede cambiar radicalmente el paisaje y crear oportunidades para nuevas empresas. “De ahí nuestra concentración en la sostenibilidad y nuestros esfuerzos por evitar a potenciales ángeles caídos, reevaluando continuamente las características fundamentales de los modelos de negocio sostenibles y resistentes de compañías de cualquier tamaño”, sentencia.
Inversis, compañía española líder en la prestación de servicios integrales de inversión y en outsourcing de servicios financieros dirigidos a otras entidades financieras, ha anunciado hoy la firma de un acuerdo en exclusiva con 360 Fund Insight. La colaboración entre ambas entidades permitirá ofrecer en una primera fase soluciones de mejor ejecución y selección de fondos totalmente alineadas con la regulación MiFID II y las directrices de los reguladores europeos.
A partir de esta alianza estratégica, Inversis se convierte en la primera plataforma de distribución de fondos en España que permitirá disponer de un servicio integral de mejor ejecución en línea con las directrices de la CNMV en términos de la oferta de fondos que los distribuidores han de poner a disposición de sus clientes finales. Las soluciones que ofrecerán Inversis y 360 Fund Insight se extenderán en una segunda fase para incluir otras funcionalidades de valor añadido que, asegurando el cumplimiento de la normativa, permitan a las entidades financieras incrementar el valor de su negocio de distribución de fondos de inversión.
Con este acuerdo y, en línea con su política de transparencia y de mejora constante, Inversis dispondrá de una mayor cobertura en información sobre fondos de inversión, con el objetivo de seguir ofreciendo el mejor servicio a sus clientes institucionales.
Javier Povedano, consejero delegado de Inversis, destacó que “este acuerdo refuerza nuestro posicionamiento de liderazgo como única plataforma global, que incluye fondos de inversión españoles e internacionales, ETFs y planes de pensiones españoles. Todo ello con una apuesta clara y decidida por la transparencia y la innovación. Somos conscientes de que la industria está cambiando y, en este nuevo ecosistema, queremos que nuestros clientes puedan disponer de una oferta diferencial integrando nuestros servicios de valor añadido con los desarrollados por otras compañías que ofrezcan soluciones realmente innovadoras”.
En palabras de Enrique Pardo, CEO de 360 Fund Insight, “la industria de fondos de inversión está experimentando cambios colosales, tanto en sus modelos de gestión como en los modelos de distribución. Los cambios regulatorios han llegado en un momento en que la tecnología impulsa la transformación de este sector a un ritmo más acelerado. Estamos encantados de asociarnos con Inversis, quien para nosotros aúna dos aspectos claves para el éxito como plataforma de distribución de fondos, por un lado, tiene la vocación de liderazgo en la provisión de tecnología B2B para sus clientes, y por otro lado ha realizado una apuesta por la transparencia de costes en sus acuerdos de distribución con las gestoras disponibles en su plataforma”.
Asimismo, Pardo añadió que «esperamos trabajar codo con codo con Inversis aprovechando las capacidades de ambas empresas para respaldar el crecimiento en los mercados que operan actualmente y los nuevos, al mismo tiempo que ayudamos a los clientes a incorporar las mejores prácticas en selección de fondos de inversión, reducir sus costes de intermediación y cumplir con las nuevas exigencias regulatorias”.
Pixabay CC0 Public Domain. Renta variable, high yield y alternativos, antídoto frente a los tipos bajos
El empuje de las economías emergentes y el buen tono de la economía estadounidense permitirá a la economía a nivel global cerrar 2019 con un crecimiento por encima del 3%, pese a la debilidad que está mostrando la eurozona, con Alemania cerca de la recesión técnica (su economía se contrajo un 0,1% en el segundo trimestre) e Italia sufriendo los estratos de la parálisis política que ha frenado en seco su actividad económica. La desaceleración del crecimiento de la economía a nivel mundial, tras un prolongado periodo de crecimiento, es evidente, aunque los riesgos de una contracción son todavía limitados.
No cabe duda de que la guerra comercial seguirá siendo el principal catalizador de los mercados en los próximos meses, con una Administración Trump que, con las elecciones a un año vista, se verá empujada a llegar a acuerdos con China, aunque sean parciales, y mantendrá su presión sobre la Fed para que adopte una política monetaria más laxa, con el objetivo de mantener una economía robusta y a los mercados en calma de cara a una cita con las urnas donde Trump querrá convertir la situación económica en una de las palancas para su reelección.
Sin duda, los bancos centrales y sus decisiones de política monetaria se han convertido en uno de los grandes catalizadores de los mercados en los últimos meses, aunque el viraje que han experimentado la Fed y el BCE desde antes del verano ha tenido un impacto limitado en unos mercados que ya habían descontado, en buena parte, ese cambio de rumbo.
La Fed ha recortado 25 puntos básicos los tipos de interés de forma consecutiva en las últimas reuniones, por primera vez en la última década, ante los previsibles efectos negativos de la guerra comercial, y frenará la normalización del balance a partir de otoño. Del mismo modo, el BCE ha retrasado cualquier subida de tipos hasta finales de 2020, volviendo a abrir la puerta a nuevos estímulos, ante el estancamiento de la actividad económica en las grandes potencias del continente y el elevado nivel de deuda pública. También ha adoptado un tono acomodaticio, insistiendo en el uso de estímulos para mantener en el entorno el 2% la inflación, que se ha convertido en el gran fantasma para el organismo, con la amenaza latente de aumentos de precios muy bajos por la globalización, los moderados precios de las materias primas y la ausencia de presiones salariales.
En el escenario actual del mercado, la mayor parte de activos de renta fija pueden acumular pérdidas en próximos meses, debido a la existencia de una burbuja provocada por las compras del BCE para estimular la economía. Con las Letras del Tesoro en negativo, influidas por la tasa de facilidad de depósitos en el BCE, la tesorería no va a ser rentable, aunque siempre es buena opción para reducir la volatilidad de las carteras, si es posible por la vía de depósitos bancarios con una remuneración nula o si no con fondos monetarios asumiendo ligeras pérdidas. Las otras oportunidades, en esta ocasión con expectativas de retorno positivo, las encontramos en la renta variable americana y emergente y en los activos alternativos.
El excelente comportamiento de las bolsas este ejercicio hace que la relación entre las cotizaciones y los resultados (PER) esté ligeramente por debajo de la media histórica, pero no son tan exigentes si se produce el aumento de beneficios que se espera para el próximo año. Las rentabilidades por dividendo, salvo en EE.UU., son muy atractivas, en comparación con el retorno que se puede obtener con la renta fija, con las empresas anunciando subidas de dividendos y recompra de acciones.
En el caso de los activos alternativos, se sitúan como una buena opción frente a los bajos retornos esperables de los bonos europeos, asentados en mínimos históricos por la compra de bonos por parte del BCE. No debemos perder de vista high yield de EE.UU. y Europa, siempre con una diversificación recomendable vía fondos.
La volatilidad y los tipos bajos alargados en el tiempo complican alcanzar rentabilidades positivas en los mercados, pero existen todavía opciones interesantes donde encontrar oportunidades para maximizar el retorno de nuestras carteras. La diversificación y la búsqueda constate de oportunidades permiten conseguir un retorno razonable para el nivel de riesgo que se asume en las carteras.
Pixabay CC0 Public DomainFoto: StockPick. Foto: StockPick
Los propietarios de activos a nivel mundial tienden a mostrar un sesgo hacia las empresas y los puntos de referencia domiciliados local o regionalmente, lo que demuestra que tienden a sentirse más cómodos con las empresas con las que están familiarizados.
Teniendo esto en cuenta, Nicholas J. Paul, gestor de carteras institucionales en MFS Investment Management, propone una forma en la que los propietarios de activos fuera de los EE.UU. pueden mejorar potencialmente la diversidad de su exposición a la renta variable estadounidense, independientemente de su asignación actual.
Deconstrucción de la exposición regional por sectores e industrias específicas
En primer lugar, Nicholas J. Paul examina más de cerca dónde pueden encontrarse los inversionistas no estadounidenses sobre-expuestos o sub-expuestos con puntos de referencia locales o regionales.
Comenzando por Europa, el índice MSCI Europe ha concentrado casi la mitad de su exposición (47%) en sólo tres sectores (a 31/8/19): financiero, consumo básico y salud. Por el contrario, la tecnología de la información, que ha sido el sector prevaleciente en el índice de crecimiento de gran capitalización de EE.UU., representa tan solo el 6% del índice de referencia (como se muestra en el recuadro 1).
Asimismo, cuando nos trasladamos de la Europa continental al Reino Unido, vemos una exposición similar desde una perspectiva sectorial. Las empresas financieras y de bienes de consumo básico son las principales ponderaciones del Índice FTSE 100, lo que representa una exposición del 37%. Sin embargo, el tercer y cuarto puesto se destinan a las materias primas, donde la energía y los materiales básicos representan un 26% adicional del índice de referencia. Entonces, efectivamente, terminamos con un 65% de exposición a las finanzas, los productos básicos y las materias primas. Donde los inversionistas nacionales están más obviamente subexpuestos, al igual que en Europa continental, es en la tecnología, que representa tan solo el 1% del índice.
Este fenómeno se ve no sólo en Europa y el Reino Unido, sino también en muchas otras regiones, particularmente en Canadá y Australia, y también en América Latina. Por ejemplo, en Canadá (definido por el índice S&P TSX Equity) el sector financiero representa el 31% del índice de referencia, seguido por la energía al 16% y los materiales al 12%. Por el contrario, la tecnología solo representa el 6% del índice de referencia.
Un cuadro similar también se observa en Australia (definido por el índice S&P ASX 200), donde el sector financiero representa el 32% del índice de referencia, seguido por los materiales con un 17%. En este caso, la tecnología constituye tan solo el 3% del índice de referencia. También se observa un patrón similar en muchas otras regiones y países, incluida América Latina.
Examen más detallado de las industrias en el sector de TI de Asia
Si se observa los mercados de Asia (Japón y Asia ex Japón), se encuentra un poco más de exposición a los nombres conocidos de la tecnología. En Japón, los mayores sectores de exposición son los industriales (21%), los de consumo discrecional (19%) y los tecnológicos (11%). En Asia ex Japón, los mayores sectores de exposición son los financieros (24%) y la tecnología (17%).
Sin embargo, a medida que se profundiza a nivel de la industria, la exposición tecnológica en esta región tiende a estar más concentrada en las industrias de hardware (incluidos los semiconductores) y de equipos eléctricos.
En MFS IM creen que faltan empresas de las industrias de software y servicios (como se muestra en el recuadro 2). Por lo tanto, el hilo conductor en la mayoría de los mercados no estadounidenses es la relativamente pequeña exposición de las empresas de tecnología y, en el caso de Japón y Asia, ex Japón, la falta de exposición de las empresas de software y servicios de TI.
Conclusión
Entonces, ¿cómo podrían los propietarios de activos fuera de los EE.UU. remediar la subponderación estructural en el sector de la tecnología y las industrias relacionadas? Una forma podría ser considerar los activos financieros «sin etiquetas» -en MFS IM creen que los inversores pueden optar por no hacer demasiado hincapié en las etiquetas y centrarse más en la relevancia- y considerar una asignación a la renta variable de crecimiento de EE.UU. como su asignación de renta variable estadounidense «central».
¿Por qué? El crecimiento en EE.UU., si bien sigue siendo un índice de renta variable estadounidense diversificado, ha tenido una mayor exposición a los tipos de acciones que probablemente falten en su cartera de renta variable nacional, que son acciones de tecnología (37%).
Además, en el caso de Japón y Asia ex Japón, la clase de activos de crecimiento de EE. UU. ha mantenido la mayor parte de su exposición tecnológica en empresas de software y servicios de TI (un 63% combinado del sector de TI, como se ilustra en el recuadro 3).
En otras palabras, en MFS IM creen que los propietarios de activos podrían beneficiarse al desetiquetar la clase de activos de crecimiento de EE. UU., y en lugar de aferrarse a las categorías o etiquetas sobreprescritas, optar por lo que tenga más sentido desde una perspectiva de diversificación. Por otra parte, en MFS IM piensan que la diversificación debe ser algo más que una decisión geográfica, también debe incluir sectores e industrias como parte importante del proceso decisorio.
Foto cedidaMiguel de Solis, responsable del Cono Sur para la división de Investment Solutions de AIS Financial Group.. Miguel de Solis se une al equipo de AIS como responsable del Cono Sur
AIS Financial Group incorpora a Miguel de Solis como responsable del Cono Sur para la división de Investment Solutions. De Solis se centrará en el mercado latinoamericano y reportará a Samir Lakkis, socio fundador de la compañía.
De Solis es licenciado en Negocios Internacionales y Finanzas por la Escuela europea de dirección y empresa en Londres y cuenta con más de siete años de experiencia en el sector. Ha trabajado en la división de venta para bancas privadas en Commerzbank Londres, donde se centró en la distribución de productos estructurados y market making de ETFs para el mercado latinoamericano.
Hasta ahora, desempeñaba el cargo de responsable de la mesa de Latam&US Offshore en Exane, Ginebra.
AIS distribuye actualmente más de 1.000 millones de dólares al año en productos estructurados y se encuentra en un proceso de diversificación de su línea de negocio. Con oficinas en Madrid, Ginebra y Bahamas, y en proceso de apertura de una cuarta oficina en Panamá, AIS buscará asociarse con aquellas gestoras que quieran externalizar su fuerza de ventas.
Pixabay CC0 Public Domain. Santander invierte en Ebury para reforzar su oferta de comercio internacional a pymes
Banco Santander anuncia una inversión estratégica en Ebury, empresa especializada en pagos internacionales y divisas a precios muy competitivos, por valor de 350 millones de libras esterlinas (aproximadamente 400 millones de euros). Esta inversión reforzará su oferta de comercio internacional y busca consolidar su posición como el banco de preferencia para las pymes que operan o tienen previsto operar internacionalmente en mercados europeos o americanos y, más adelante, en los asiáticos.
Ebury es una empresa especializada en pagos internacionales y divisas con sede en Reino Unido. Opera con una plataforma de distribución global única y ya trabaja en 19 países y 140 divisas. La compañía ha aumentado sus ingresos una media anual del 40% en los últimos tres años con un modelo de negocio basado en los datos.
De acuerdo con las condiciones de la operación, Santander adquirirá el 50,1% de Ebury por 350 millones de libras esterlinas, de los que 70 millones corresponden a nuevas acciones (aproximadamente 80 millones de euros) para apoyar los planes de la compañía de entrar en nuevos mercados en Latinoamérica y Asia. Santander prevé obtener una rentabilidad del capital invertido (RoIC) superior al 25% en 2024. Los inversores actuales de Ebury, incluidos los cofundadores y los gestores, reinvertirán en la transacción. El equipo directivo actual continuará liderando la expansión de la empresa.
Ana Botín, presidenta del Banco Santander, ha resaltado: “Las pequeñas y medianas empresas son un motor fundamental de crecimiento en todo el mundo. Aportan hasta el 60% del empleo total y el 40% del PIB de las economías emergentes. Santander es el banco mejor posicionado para acompañar a las pymes en su expansión internacional facilitándoles servicios globales de financiación al comercio. El acuerdo alcanzado con Ebury nos permitirá ofrecer a las pymes productos y servicios que antes solo estaban al alcance de las grandes empresas de un modo más rápido y eficiente”.
Ebury es una empresa especializada en pagos internacionales y divisas. Tiene una amplia base de clientes que incluye pymes y empresas y acuerdos con socios financieros y de otras industrias. Cuenta con 900 empleados que trabajan en 22 oficinas de 19 países, ofrece una plataforma tecnológica de primer nivel y una cultura corporativa impulsada por sus cofundadores, Juan Lobato y Salvador García, que han recibido más de 134 millones de dólares de capital desde su fundación en 2009. En 2018, la empresa procesó 16.700 millones de libras esterlinas en pagos para sus 43.000 clientes.
Sergio Rial, consejero delegado de Santander Brasil y patrocinador del negocio Global Trade Services (servicios de comercio internacional para pymes) del grupo, se incorporará al consejo de administración de Ebury como presidente. Trabajará estrechamente con el equipo de la compañía, capitaneado por Lobato y García.
Ebury continuará operando como una unidad independiente, pero se apoyará en la experiencia de Santander para impulsar el crecimiento y el desarrollo de las empresas en las que invierte, como ocurrió con su filial brasileña Getnet. Santander trabaja con 1,2 millones de comercios en todo el mundo, que alcanzan una facturación total de 150.000 millones de euros, lo que sitúa al Grupo entre los 10 principales competidores en este mercado por volumen.
En octubre, Santander lanzó, junto con otros bancos internacionales, Trade Club Alliance, una red global de bancos que tiene como objetivo simplificar el comercio internacional con una nueva plataforma digital.
Foto cedidaLeft to right, Mark A. Boyar and Jonathan Boyar. boyar
La gestora estadounidense Boyar Asset Management, con sede en Nueva York, cerraba recientemente una alianza con la gestora española Mapfre AM, según la cual se beneficiarán de las capacidades mutuas e impulsarán sus negocios. En esta entrevista con Funds Society, Jonathan Boyar, presidente de Boyar Research –con 11 años de experiencia en inversiones, y desde 2008 reubicado en Boyar, desde donde mejora el análisis y el proceso de gestión, además de estar al mando de las ventas institucionales tanto para el área de research como el de servicios de gestión-, explica las claves de esta alianza y cómo planean hacerse un hueco, con su particular estilo de inversión value, en las carteras del inversor español. Sobre todo, porque el value tendrá su revancha, como ha ocurrido en otros momentos de la historia, y volverá a brillar.
Recientemente han firmado con Mapfre AM una alianza en gestión de activos. ¿Qué se aportarán mutuamente?
Todo el equipo de Boyar Asset Management está emocionado. Con Mapfre no solo ganamos acceso a un capital paciente de largo plazo, lo que nos permite hacer inversiones en renta variable a largo plazo, sino que también podremos aprovechar sus significativas capacidades en distribución. También esperamos acceder a la experiencia de Mapfre tanto en la inversión con criterios ESG como en renta variable europea, que son dos áreas que nos interesan mucho. A través de este acuerdo estratégico, Mapfre ganará acceso a nuestro expertise en inversión value dirigida por catalizadores de largo plazo, que hemos estado aplicando desde 1975. Mapfre también se beneficiará del conocimiento de nuestro equipo de expertos profesionales de inversión.
¿Qué planes tiene Boyar AM en renta variable europea?
Aunque no tenemos actualmente planes para lanzar un producto europeo, es cierto que es algo que estamos considerando seriamente en la medida en que crecemos. Esperamos ser capaces de aprovechar el expertise de Mapfre en esta área cuando el timing sea adecuado.
¿Y sobre la ESG, piensan que es una tendencia con potencial?
La ESG ha venido para quedarse, no es una moda. Muchos buenos gestores de activos han adoptado esta práctica y esperamos beneficiarnos de las capacidades de Mapfre en este segmento.
Con esta alianza, ¿Boyar AM buscará también de algún modo posicionarse en el mercado español?
Absolutamente. Planeamos utilizar la red de distribución de Mapfre en España para apuntar al mercado español. Pensamos que esta audiencia abrazará un estilo de inversión orientado al value de largo plazo.
Boyar AM es una gestora value y ofrecerá a Mapfre su expertise en gestión de activos en EE.UU. ¿Qué características distinguen su estilo de inversión de otras casas value?
Boyar es bastante diferente con respecto a la mayoría de gestores, pues tomamos una perspectiva de private equity a la hora de invertir en los mercados cotizados. Desde 1975, nuestra publicación insignia Asset Analysis Focus –AAF-, que a través de otra entidad vendemos a través de suscripciones, ha sido leída de forma regular por algunos de los inversores más sofisticados del mundo. Manteniendo el mandato de AAF de fijarnos en valores infravalorados y no cubiertos, usamos ese mismo análisis para construir y gestionar carteras individualizadas para la gestión del capital de nuestros clientes. Muchas firmas de gestión reclaman que hacen sus propios análisis, pero nosotros podemos probarlo. Basándonos en ese análisis, invertimos en compañías cuyas acciones coticen significativamente por debajo de lo que creemos que valen, con la creencia de que dentro de un periodo de tiempo razonable el mercado de valores reflejará su valor intrínseco (o habrá un comprador para la firma por ese valor).
A diferencia de muchos otros gestores, estamos centrados en identificar catalizadores que creemos que ayudarán a la acción a elevar su valor en un periodo de tiempo razonable. Creemos que identificar esos catalizadores nos ayuda a evitar las trampas de valor.
¿Es complicado ahora, con las valoraciones en niveles altos en EE.UU., buscar oportunidades, empresas infravaloradas?
Aunque el mercado en general está algo caro teniendo en cuenta estándares históricos, estamos encontrando muchos nombres en el segmento de pequeña y mediana capitalización que se venden con descuentos significativos con respecto a lo que creemos que valen. Este mercado ha estado dirigido por unas pocas acciones de gigantes tecnológicos, pero en algún punto el liderazgo cambiará y creemos que inversores como nosotros que se mantienen fieles a su estilo contra viento y marea serán recompensados por su paciencia.
De hecho, el value no está en sus mejor momento… el performance ha sido malo frente al growth en los últimos tiempos. ¿Cambiará esta situación a corto plazo?
2019 ha sido todavía un año en el que los valores growth han sencillamente derrotado al value. El exceso de rentabilidad ha sido consistente en todas las capitalizaciones de mercado. Los valores más caros siguen encareciéndose, mientras los más baratos utilizando cualquier métrica aceptable siguen abaratándose. En algún momento esta tendencia revertirá su curso, como siempre ocurre. Simplemente, no podemos predecir el momento. Desde un punto de vista absoluto, las acciones value (justo igual que antes del crash de las puntocom) han ofrecido números respetables pero, comparadas con las growth, han obtenido rentabilidades mucho más bajas. Los inversores value fueron recompensados por su paciencia tras el estallido de la burbuja de las puntocom y la inversión en valor disfrutó de un renacimiento. No vemos razones para que la historia no se repita de nuevo.
En España han surgido en los últimos años gestoras con este estilo de inversión y mucho talento (Cobas AM, Magallanes, azValor, Horos AM…): ¿tiene a algún gestor español value entre sus referentes?
Es gente que conozco por su reputación y he hablado en conferencias donde estaban también presentes, pero desafortunadamente no los conozco personalmente y me gustaría tener la oportunidad.
En un entorno de creciente competencia y polarización en la industria de asset management (y en el que la escala importa más que nunca)… ¿cree que las alianzas son una buena alternativa a las fusiones entre entidades?
En cualquier momento en el que dos organizaciones inteligentes sean capaces de compartir conocimiento, ideas y sus mejores prácticas, supone una ganancia para cualquiera.
¿Cree que veremos mucho M&A en el sector? ¿Es necesaria una consolidación fuerte, o más bien veremos más alianzas y cooperación como forma de sumar fuerzas en este escenario?
Creo que debido a la compresión de márgenes habrá una consolidación en el sector. La escala ciertamente importa, pero también creo que los inversores aprecian boutiques como las nuestras que son capaces de invertir fuera de la corriente principal. Entienden, como el gran Sir John Templeton dijo una vez, que “si compras los mismos valores que el resto, tendrás los mismos resultados que todos los demás”.
Pixabay CC0 Public Domain. Cuatro formas de invertir en la revolución CleanTech
A medida que el cambio climático va causando estragos en el planeta, los consumidores, gobiernos y empresas están evaluando sus prácticas medioambientales y desarrollando nuevas tecnologías limpias, señala en un análisis Amanda O’Toole, experta en inversión de Thematic Equities en AXA IM.
El términco CleanTech (tecnologías limpias) alude a las compañías que buscan mejorar su rendimiento, productividad y eficiencia maximizando los efectos positivos sobre el medio ambiente. Con la población mundial en rápido crecimiento y los recursos limitados en peligro de agotarse, nunca ha sido mayor la necesidad de soluciones CleanTech. De hecho, la demanda es tan grande que se espera que el mercado global CleanTech alcance los tres billones de dólares en 2025, un aumento significativo frente a los 601.000 millones de dólares de 2014.
¿Qué significa esto para los inversores?
Existe una creciente toma de conciencia sobre las presiones por los escasos recursos naturales y la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Las empresas que estén preparadas para responder a este cambio de paradigma en cómo percibimos nuestro entorno disfrutarán de una ventaja sostenible y competitiva al reducir sus costes en insumos en el largo plazo. Estas medidas ofrecen un significativo potencial de crecimiento en las próximas décadas, junto con un interesante potencial de nuevas oportunidades para inversores por el camino.
En la gestora han identificado cuatro áreas principales que pensamos que ofrecerán nuevas oportunidades de inversión innovadoras: transporte sostenible, reducción del reciclado y los desechos, energía inteligente y nutrición responsable.
Transporte sostenible
En todo el mundo está creciendo la demanda de transporte sostenible, con una amplia gama de oportunidades de inversión en vehículos eléctricos, tecnología de baterías y sistemas de reducción de emisiones. El mercado de vehículos eléctricos crecerá globalmente a una tasa del 33% en 2030 y con una caída del coste de las baterías de litio de un 35% durante el pasado año, el potencial del transporte sostenible va en aumento.
Reciclado y reducción de desechos
Los daños causados por los plásticos y la creciente basura electrónica han dominado los titulares medioambientales de los últimos años. Con aproximadamente 8 millones de toneladas métricas de plástico lanzadas a los océanos cada año y solamente un 20% de aparatos electrónicos que se estima se reciclan al año, consumidores y gobiernos se están despertando a la necesidad de que haya un cambio.
Una acción que les gusta en este ámbito es Smurfit Kappa, una compañía del FTSE 100 que es uno de los proveedores líderes mundiales de empaquetado de papel.
Energía inteligente
La necesidad y la demanda de viviendas más verdes está creciendo, lo que ayuda a generar el ímpetu y los recursos necesarios para el desarrollo de tecnologías energéticas eficientes. Esto está creando oportunidades en renovables, viviendas más verdes y fábricas eficientes.
Nutrición responsable
El impacto de la producción no sostenible de alimentos ha puesto al planeta en una posición delicada. Sin embargo, las actitudes están cambiando. Las compañías están explorando nuevas formas de responder a las crecientes demandas de las poblaciones en crecimiento, limitando a la vez el uso del agua escasa y la tierra.
Esto ha hecho que algunos expertos apuesten por las algas, que algunos creen que podrían convertirse pronto en una importante fuente de proteínas para el mundo. Las algas, que crecen diez veces más rápido que las plantas terrestres, no requieren agua fresca, pueden aportar más proteínas que la carne y no compiten con otros cultivos por la tierra. El potencial de las algas está en sus inicios, pero se espera que el mercado de los productos con algas alcance los 5.200 millones de dólares en 2023.
Vivimos en un mundo de incertidumbre que ofrece poca confianza a los inversores desde una perspectiva macro o geopolítica. «En este contexto, nos reconforta invertir en empresas de alta calidad que se benefician de las claras tendencias de crecimiento estructural dentro de la Economía Limpia», explican en la gestora.
Amanda O’Toole es gerente de cartera senior de AXA Investment Managers Framlington Clean Economy Strategy y una de las principales estrategas del equipo de expertos en inversión de Thematic Equities en AXA IM.
Pixabay CC0 Public Domain. NN IP y Irish Life amplían su estrategia de renta variable sostenible con el lanzamiento de tres nuevos fondos índice
Con el objetivo de ampliar su oferta de estrategias de renta variable sostenible, NN Investment Partners (NN IP) e Irish Life Investment Managers (ILIM) han lanzado tres nuevos fondos índice “enhanced” registrados en Luxemburgo, que buscan facilitar las inversiones responsables al tiempo que replican un índice de referencia tradicional. Uno de ellos invierte en mercados globales desarrollados mientras que los otros dos se centran en Norteamérica y Europa.
A principios de 2019, ambas entidades anunciaron que se asociaban para gestionar de forma conjunta un rango de estrategias sostenibles de renta variable “enhanced” basadas en índices, como el fondo NN (L) Emerging Markets Enhanced Index Sustainable Equity lanzado en marzo. Las estrategias combinan la experiencia de NN IP en sostenibilidad con la de ILIM en replicar índices: el primero se centra en determinar la selección de activos y monitoriza las características sostenibles del fondo, mientras que el segundo se encarga de la gestión diaria de la cartera.
NN IP afirma que, cuando se trata de construir carteras responsables e integrar factores ASG, es necesario tomar ciertas decisiones activas sobre cuestiones de sostenibilidad, ya que los fondos pasivos tradicionales que simplemente replican un índice de referencia no incorporan ningún criterio de selección basado en la sostenibilidad. “Como resultado, poseen acciones que no son compatibles con una cartera de inversión sostenible, y tienen menos margen para hacerlo bien recompensando a empresas sostenibles”, advierte.
Los nuevos fondos índice sostenibles son el NN (L) European Enhanced Index Sustainable Equity, el NN (L) Global Enhanced Index Sustainable Equity y el NN (L) North America Enhanced Index Sustainable Equity; los cuales, según la gestora, están dirigidos “a aquellos inversores que quieren invertir de forma responsable a la vez que se mantienen cerca de un índice de referencia tradicional”.
En cuanto a su proceso de inversión mejorado o “enhanced”, NN IP revela que, primero, elimina todas las acciones que están en su lista de exclusiones (por ejemplo, aquellas con exposición al tabaco), las empresas con serias controversias evidentes (como cuestiones de desastres ambientales o problemas de soborno), y cualquier otra actividad que no coincida con su “mandato sostenible”, como los juegos de azar o las armas.
Después, la gestora selecciona positivamente en función de las emisiones de carbono, mirando las actuales y las que tienen objetivos ambiciosos para reducirlas. Por último, realiza una selección positiva a partir del índice de referencia basada en la gobernanza y otros aspectos de ASG. “Tomamos activamente estas decisiones de sostenibilidad al inicio del proceso de inversión, y luego son implementadas de una manera pasiva por ILIM”, revela.
Por su parte, ILIM gestiona la exposición al riesgo del fondo después de dirigirse hacia las empresas sostenibles para asegurarse de que la cartera no contenga riesgos no intencionados, lo que significa que el rendimiento estará en línea con los retornos del mercado.
El director del negocio de indexación de esa entidad, Shane Cahill, hace hincapié en que su gestora lleva varios años apostando por la sostenibilidad en sus negocios. “Expandir nuestra solución indexada para dar opciones a clientes con principios de inversión responsable es una prioridad clave”, asevera.
Con el lanzamiento de estos tres fondos, NN IP cuenta ya con más de 4.000 millones de euros en estrategias índice sostenibles, que “gozan del respaldo de más de 20 años de experiencia en la inversión responsable” y, desde principios del 2019, “la larga experiencia de Irish Life Investment Managers en la replicación de índices”, destaca NN IP.