Foto cedidaLena Jacquelin analista senior del equipo de renta variable temática internacional de La Financière de l’Echiquier.. La Financière de l’Echiquier incorpora a Lena Jacquelin al equipo de gestión temática internacional
La Financière de l’Echiquier (LFDE) ha anunciado el nombramiento de Lena Jacquelin para el cargo de analista senior, en el marco del desarrollo de su división de renta variable, creada hace diez años. Además, la firma ha marcado como una de sus prioridades aumentar la gama de soluciones temáticas.
Según explican desde LFDE, la incorporación de Jacquelin refuerza el equipo de renta variable internacional, dirigido por Rolando Grandi, CFA, que gestiona, entre otros, los fondos Echiquier Artificial Intelligence (8 millones en activos) o Echiquier World Next Leaders, fondo multitemático que invierte en las mega tendencias que determinarán la economía del futuro (470 millones en activos).
“Damos la bienvenida a Lena Jacquelin, cuyo perfil y experiencia enriquecerán nuestra competencia en la selección de valores y consolidarán el desarrollo de nuestra gama temática internacional”, ha destacado Olivier de Berranger, director general delegado responsable de la gestión de activos de La Financière de l’Echiquier.
En marzo de 2021, Lena Jacquelin se incorporó a La Financière de l’Echiquier como analista senior al equipo de renta variable temática internacional, que ahora cuenta con tres personas. Jacquelin es graduada en finanzas de mercado por la Escuela Superior de Ingenieros Leonard de Vinci de París La Défense, Lena Jacquelin inició su carrera profesional en Invest Securities como analista de ventas. En 2015, se incorporó a Natixis Investment Manager Asia, en Singapur, como asistente de gestor, siendo nombrada analista de renta variable posteriormente. En 2018 pasó a integrar el comité de inversión de un fondo tecnológico y en 2019, el de un fondo Global Sport.
Pixabay CC0 Public Domain. La recuperación, la regularidad y convicción de las rentabilidades aúpa la inversión por factores
Las materias primas vuelven al rádar de los inversores. Según explican los expertos, gran parte de ellas están experimentado un rally y sus rentabilidades superan a la renta variable por primera vez en mucho tiempo. Las gestoras, por su parte, están analizando si estamos ante un nuevo superciclo de mercado caracterizado por el alza de los precios y qué está impulsando su precio.
Mientras que la energía, los metales industriales y la agricultura siguen registrando fuertes ganancias, los metales preciosos se mantienen rezagados. Según apunta el último informe mensual de WisdomTree, los precios de la energía han liderado el comportamiento de las materias primas. “La combinación de una ola de frío en EE.UU. y la sorprendente falta de voluntad de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus países asociados (combinados como OPEP+) para aumentar la producción, han hecho que los precios del petróleo suban”, señala el informe.
La excepción en este rally lo ha marcado el oro. Según explica WisdomTree, el oro se ha visto presionado por el aumento de los rendimientos del Tesoro estadounidense que, en el caso de bono a 10 años, se dispararon cerca del 1,6% en marzo de 2021, desde un mínimo del 0,5% en agosto de 2020. “La fuerte relación inversa del oro con los rendimientos de los bonos del Tesoro no augura nada bueno. Sin embargo, las expectativas de inflación están aumentando rápidamente y esto sí es positivo para el precio del oro. Los precios del oro tienden a reaccionar a la inflación realizada más que a las expectativas de inflación”, señalan desde WisdomTree.
“El aumento de la demanda de materias primas de China, el control de la oferta en el sector petrolero, así como los compromisos gubernamentales para mantener el apoyo económico fiscal, han contribuido a ello”, explica James Luke, gestor de fondos de Schroders. El gestor reconoce que tanto ellos como un número cada vez mayor de inversores ven varias similitudes estructurales entre los principios de la década de 2020 y los principios de la de 2000, la última vez que las materias primas comenzaron un largo y poderoso ascenso a precios récord.
“Ahora, como entonces, hemos visto una importante reducción de la inversión en el suministro de materias primas con el capex en las empresas de petróleo y gas y minería cayendo alrededor del 40% desde 2011. A principios de la década del 2000, China representaba una fuente importante de demanda de materias primas. Hoy, podemos estar a punto de entrar en un período sin precedentes de inversión de capital global coordinada para facilitar la transición energética. El cambio a fuentes de energía limpia y vehículos eléctricos puede provocar una aceleración de la demanda de materias primas”, explica el gestor de Schroders.
En opinión de Luke hay cinco razones que respaldan el nuevo “superciclo” de las materias primas: su actual bajo precio; una mayor inflación; una mayor demanda al calor de la recuperación económica; la falta de inversión; y un dólar más bajo. Sobre este último aspecto explica que la intervención de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) durante la pandemia del COVID-19 para apuntalar las finanzas de empresas y consumidores ha limitado la apreciación del dólar.
“Un dólar más débil es positivo para las materias primas. Aunque la mayoría de las materias primas se producen en los mercados emergentes, su precio suele expresarse en dólares. Cuando el dólar se debilita, el precio de estas materias primas en términos de dólares aumenta”, matiza Luke.
Vientos a favor
Desde WidsomTree apuntan que el precio de las materias primas seguirá en alza en la medida que la recuperación de la economía global tome mayor ritmo. “De cara a lo que queda de 2021, creemos que una recuperación económica continuada, combinada con un gasto en infraestructuras intensivo en materias primas y una transición energética verde, proporcionará un entorno favorable para las materias primas. Los metales industriales se beneficiarán especialmente de estas tendencias. Sin embargo, el posicionamiento de los inversores en estos metales es relativamente elevado. Por lo tanto, no descartamos que se produzcan periódicamente reorganizaciones de las posiciones largas, que podrían hacer bajar los precios temporalmente. Ya hemos visto algo de esto la semana pasada. Sin embargo, en general, los precios de los metales básicos podrían estar preparados para un periodo plurianual alcista”, señala la gestora en su informe mensual.
Misma visión comparten desde Lyxor. Según recuerda en su informe semanal en el que analiza las tendencias en el universo hedge fund, las materias primas se benefician de vientos favorables en el plano macroeconómico. “Una fase temprana del ciclo, con la salida de la recesión inducida por la pandemia, y las políticas reflacionistas a escala mundial ofrecen un enorme respaldo. También asistimos a un repunte de la liquidez mundial, impulsada por los estímulos monetarios, que pasará el relevo a los ahorros de los hogares y las empresas cuando puedan ponerlos en circulación. Parte de la amplia liquidez de mercado, que busca opciones de asignación, acabará destinándose a las materias primas. Además, conforme aumentan los tipos y la inflación, los inversores buscarán la protección que las materias primas ofrecen de manera natural. Habida cuenta de la decreciente demanda de refugios seguros y el empeoramiento de la posición exterior de Estados Unidos, una nueva debilidad del dólar también podría servir de ayuda”, señala el documento de Lyxor.
Además, destaca que también hay “vientos favorables” desde el plano fundamental. En este sentido, el informe argumenta que las materias primas afrontan un déficit de oferta/demanda, fruto de años de restricciones en la oferta desde la crisis financiera y, más recientemente, debido a la guerra comercial y a la pandemia, dadas las limitadas inversiones en capacidad y exploración. Y espera que la demanda se dispare gracias a los programas de vacunación. No cabe duda de que la situación varía de una materia prima a otra.
“Por último, los vientos favorables procedentes de las tendencias seculares también apuntalarán la demanda y los precios. El sector inmobiliario ha comenzado un periodo de bonanza, especialmente en Estados Unidos. La descarbonización y el auge de los vehículos eléctricos espolearán la demanda de metales básicos. Las perspectivas de un creciente gasto en infraestructura serán sumamente beneficiosas para la mayor parte de las materias primas cíclicas y los materiales de construcción”, añade el informe de Lyxor.
Pixabay CC0 Public Domain. Asia, renta variable y high yield: las palabras clave de este año para los gestores y analistas de BNY Mellon IM
Los gestores y analistas de cinco de las firmas de inversión de BNY Mellon Investment Management (Alcentra, Insight, Mellon, Newton y Walter Scott) han compartido sus perspectivas de inversión para este año. En total, 106 profesionales respondieron arrojando tres conclusiones: Asia ofrecerá las mayores oportunidades de inversión; la renta variable resultará prometedora este año; y la visión sobre el high yield es positiva.
Según los resultados de la encuesta en la que participaron, los gestores y analistas se muestran optimistas y ven probable que la economía se recupere con fuerza, aunque también identifican importantes riesgos a los que habrá que estar atentos. Más del 70% de los participantes espera que el PIB mundial crezca de forma robusta o acusada en 2021, mientras que un 27% cree que el crecimiento será marginal. Solo un 3% afirma que la economía se contraerá este año. Teniendo en cuenta estos porcentajes, “no sorprende que casi la mitad de los analistas y gestores que respondieron se muestre favorable a adoptar un posicionamiento más agresivo que el del año pasado, mientras que solo el 11% asegura que adoptará un enfoque de inversión más defensivo”, señalan desde BNY Mellon IM.
Con respecto a qué región ofrecerá las mejores rentabilidades de inversión, Asia se erige claramente como la vencedora: casi la mitad de los encuestados cree que esta región ofrece oportunidades, frente al 30% que se decanta por EE.UU. Según indica la gestora, esto supone un cambio notable con respecto a la encuesta de 2019, cuando las respuestas fueron prácticamente opuestas: un 43% votó por EE.UU. y un 30%, por Asia. “Si sumamos las respuestas de la encuesta de 2020 que optan por Latinoamérica (12% de los participantes) y Oriente Próximo (2%) parece que, este año, parte de nuestros equipos de inversión buscará las mejores oportunidades de inversión en los mercados emergentes y no tanto en los desarrollados”, añade en sus conclusiones la gestora.
Por el contrario, explica, una vez consumado el Brexit, solo un 3% de los encuestados sitúa al Reino Unido entre las mejores regiones del año. Casi un 12% escogió Europa como su destino favorito para encontrar las mejores oportunidades.
En cambio, se muestran más divididos con respecto a los principales riesgos a los que podríamos enfrentarnos en 2021. El aumento de la deuda (23%), la política de los bancos centrales (17%), el riesgo político (15%) y la inflación (14%) fueron algunos de los más votados, aunque la principal preocupación sea el desempleo, que señaló un 32% de los participantes. De nuevo, este resultado contrasta con el del año pasado: a finales de 2019, la mayoría de nuestros expertos identificó el riesgo político como su principal preocupación.
Perspectivas de inversión
Respecto a su visión para la renta variable, el 80% de los encuestados se declara “positivo” o “selectivamente positivo” de cara a 2021. En cambio, solo un 5% se declara «selectivamente negativo» y un 15%, “neutro”. Además, tres de cada cuatro encuestados creen que la volatilidad será más baja en 2021 que en 2020, lo que probablemente no resulta sorprendente tras el impacto que tuvo la pandemia del COVID-19 en los mercados el año pasado.
Según indica la gestora, las opiniones sobre sectores concretos también son bastante claras: el 30% considera que los valores tecnológicos están sobrevalorados. La otra cara de la moneda es que el valor del value empieza a ganar reconocimiento como parte de un cambio generalizado en el sentimiento del mercado y más de la mitad de nuestros expertos asegura que las acciones de este estilo están infravaloradas ahora mismo. Por otra parte, los expertos de nuestras cinco firmas de inversión subrayaron el atractivo de la renta variable emergente
Por último, respecto a la renta fija, los encuestados se mostraron positivos en high yield y negativos en deuda soberana. “Mientras que los gestores y analistas de renta variable y de multiactivos que respondieron a la encuesta se declaran mayoritariamente optimistas, los participantes del mundo de la renta fija se muestran más cautos”, señalan desde BNY Mellon IM.
De hecho, más de la mitad se declaró “negativo” o “selectivamente negativo” con respecto a la deuda soberana frente al 6% que confía en las perspectivas de esta clase de activo. Los compromisos de gasto para reactivar las economías tras la pandemia, así como la posible amenaza de inflación, enfrían las opiniones con respecto a la deuda gubernamental.
Sin embargo, la situación cambia por completo en el caso de la deuda corporativa, donde un 65% se declara “positivo” o “selectivamente positivo”. Por lo tanto, entre sus activos de renta fija favoritos se encuentran: high yield (38%), deuda privada (30%) y ángeles caídos (22%). Los expertos en renta fija se muestran menos entusiastas con respecto a las perspectivas de la deuda investment grade y solo un 8% espera que genere rendimientos superiores en 2021. Pese al potencial riesgo de inflación, solo un 5% seleccionó los bonos ligados a la inflación como una de las subclases de activo con más posibilidades de comportarse bien este año.
Pixabay CC0 Public Domain. Schroders celebra el veinte aniversario de la firma de microfinanzas BlueOrchad
Schroders celebra el 20º aniversario de BlueOrchard, firma pionera en microfinanzas e inversión de impacto, que ha generado un impacto positivo y duradero para las personas y el medio ambiente en todo el mundo, al tiempo que ha proporcionado rentabilidades atractivas a los inversores desde 2001.
Según destacan desde la gestora, a través de las inversiones de BlueOrchard, millones de personas con bajos ingresos en mercados emergentes y frontera recibieron acceso a servicios financieros y otras prestaciones relacionadas. Algunos de ellos están reflejados en el libro del aniversario de BlueOrchard, en colaboración con National Geographic: «This Is My Story – Giving a Face to 20 Years of Impact Investing«.
Hace 20 años BlueOrchard nació como el primer gestor comercial de inversiones en microfinanciación y deuda y desde entonces, se ha convertido en un gestor líder a nivel mundial, habiendo invertido más de 8.000 millones de dólares en más de 90 países. Más de 215 millones de personas sin recursos y en situación vulnerable en mercados emergentes y fronterizos se han beneficiado del apoyo de BlueOrchard.
«BlueOrchard es una organización totalmente orientada a un fin, y su trabajo en microfinanciación y con agencias de desarrollo ha proporcionado a los inversores una sólida rentabilidad financiera, pero lo que es más importante, BlueOrchard también ha beneficiado de forma demostrable a millones de personas en los mercados emergentes durante las últimas dos décadas”, ha destacado Peter Harrison, director general del Grupo Schroders.
Según ha recordado, la inversión de impacto es ahora una megatendencia, pero ha matizado que BlueOrchard ha sido pionera en este campo durante 20 años. Schroders, alineada con estos propósitos, se enorgullece de trabajar tan estrechamente con BlueOrchard y estamos deseando colaborar como inversores especializados centrados en el impacto durante muchos años más”.
En los últimos años, BlueOrchard, que también se ha expandido hacia el capital privado y las infraestructuras sostenibles, ofrece soluciones de inversión de impacto en todas las clases de activos, conectando a millones de emprendedores en mercados emergentes y frontera con inversores, con el objetivo de hacer que las soluciones de inversión de impacto sean accesibles para todos y avanzar en el uso consciente del capital.
Por su parte, Peter Fanconi, presidente del Consejo de Administración de BlueOrchard, ha declarado: “Desde su creación, BlueOrchard ha conseguido equilibrar la generación de un impacto duradero con una atractiva rentabilidad financiera, demostrando que pueden ir de la mano. Ha sido un viaje increíble y estamos deseando cumplir otros 20 años. Agradecemos a nuestros socios de todo el mundo su continua confianza en BlueOrchard».
“Durante dos décadas, la misión y la visión de BlueOrchard ha sido hacer que las soluciones de inversión de impacto sean accesibles para todos y avanzar en el uso consciente del capital que beneficia a la sociedad y al medio ambiente. Seguiremos por este camino y atenderemos la demanda de los inversores de estrategias innovadoras y con impacto real”, ha recordado y se ha comprometido Philipp Mueller, director general de BlueOrchard.
Pixabay CC0 Public Domain. El fondo La Française Sub Debt recibe el Sello ISR francés
El fondo de deuda subordinada La Française Sub Debt, con cerca de 1.000 millones de euros en activos bajo gestión, ha obtenido el sello ISR (Inversión Socialmente Responsable), reglado por las autoridades públicas francesas y otorgado por EY France, una organización de certificación aprobada por el organismo de acreditación francés COFRAC.
El fondo de La Française AM está compuesto por una cartera diversificada que comprende aproximadamente 130 títulos de deuda subordinada con una calificación media de grado de inversión A-. Está gestionado por Paul Gurzal, responsable de crédito, y Jérémie Boudinet, gestor de crédito.
Además, se enmarca en el ámbito de aplicación del artículo 8 del Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles (SFDR), y tiene como objetivo lograr una rentabilidad superior al 7% anual en un horizonte de inversión recomendado de más de 10 años mediante la exposición, en particular, a títulos de deuda subordinada con un perfil de riesgo específico diferente al de los bonos convencionales. Los emisores son seleccionados aplicando criterios medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG).
El modelo de gestión del fondo no ha cambiado desde su creación en 2008 y se basa en tres fundamentos: liquidez, diversificación y calidad. La selección de valores incluye ahora un análisis exhaustivo extrafinanciero, realizado por La Française Sustainable Investment Research, basado en un modelo propio.
En colaboración con el equipo de gestión y gracias a un diálogo continuo, los criterios ESG de los emisores públicos y privados de la Unión Europea, Suiza, Reino Unido y Noruega contribuyen a enriquecer el análisis crediticio y la selección de emisores. La estrategia de gestión histórica del fondo se mantiene sin cambios, ya que está alineada con el enfoque de selección ESG implementado desde el 10 de marzo de 2021.
A raíz de este reconocimiento, Jean-Luc Hivert, presidente y director global de inversiones de La Française AM, ha declarado: «Creemos que las finanzas van a desempeñar un papel crucial en esta transición, por lo que nuestro objetivo es comercializar una gama de fondos abiertos 100% sostenibles para finales de 2022. La obtención de la etiqueta para el fondo La Française Sub Debt era fundamental para nosotros y natural para una clase de activos tan específica».
Según destaca Hivert, se trata de un nuevo paso adelante en su compromiso con la financiación sostenible. «La Française AM cuenta ahora con siete fondos con sello, lo que subraya nuestro desempeño en las estrategias sostenibles, en particular las de bajas emisiones de carbono, desarrolladas en renta variable, crédito y bonos soberanos. Actualmente estamos implementando nuestra estrategia sostenible en todas nuestras clases de activos para ofrecer una gama multiactiva sostenible», ha afirmado Hivert para concluir.
Foto cedida. ¿Qué vehículos de inversión son los que atrajeron más dinero en el universo ETFs?
El universo de productos de gestión pasiva sigue creciendo. Según los datos recopilados por ETFGI, firma de análisis y consultoría independiente especializada en ETFs y ETPs, los activos invertidos a nivel global en esta industria han aumentado un 25,6%, pasando de 6,36 billones de dólares a un nuevo récord de 7,99 billones de dólares a finales de diciembre de 2020.
A cierre de año, el sector mundial de ETFs y ETPs contaba con 8.607 ETFs/ETPs, con 17.134 listados, activos por valor de 7,99 billones de dólares, de 514 proveedores que cotizan en 75 bolsas de 60 países. Ahora bien, ¿qué vehículos lideran este creciente mercado?
La forma más natural de medir este liderazgo es seguir el dinero y analizar los flujos de entradas y salidas. Tomando como referencia el mes de diciembre, ETFs/ETPs recogieron entradas netas por valor de 92.300 millones de dólares. Los flujos de entrada sustanciales pueden atribuirse a los 20 principales ETFs por nuevos activos netos, que colectivamente reunieron 41.820 millones de dólares durante diciembre, el ETF Vanguard Total Stock Market (VTI US) reunió 5.280 millones de dólares por sí solo.
En cambio, los 10 principales ETPs por nuevos activos netos reunieron colectivamente 1.450 millones de dólares en diciembre. Siendo el más destacable iShares Silver Trust (SLV US), que reunió 373,48 millones de dólares.
Otro criterio que podemos tomar es el tipo de ETFs, es decir, en qué invierte. En este caso, los flujos nos dicen que los ETF/ETP de renta variable que cotizan en todo el mundo reunieron entradas netas de 62.840 millones de dólares durante diciembre, lo que eleva las entradas netas para 2020 a 365.670 millones de dólares, por encima de los 282.780 millones de dólares en entradas netas que los productos de renta variable habían atraído en 2019.
Por su parte, los ETF/ETP de renta fija registraron 19.780 millones de dólares de entradas netas, lo que sitúa las entradas netas para 2020 en 230.270 millones de dólares, ligeramente por encima de los 227.660 millones de dólares de entradas netas en 2019. En último lugar, los ETFs/ETPs de materias primas reportaron 2.100 millones de dólares en salidas netas, llevando las entradas netas para 2020 a 61.250 millones de dólares, lo que es significativamente más que los 18.640 millones de dólares en entradas netas en 2019.
Balance de 2020
Los ETFs y ETPs cotizados a nivel mundial reunieron entradas netas por valor de 92.300 millones de dólares durante el mes de diciembre, lo que eleva las entradas netas en lo que va de año a un récord de 762.870 millones de dólares, que es superior a los 568.980 millones de dólares reunidos durante 2019 y al récord anterior de todo el año de 653.260 millones de dólares establecido en 2017, según el último informe de ETFGI correspondiente a 2020.
«El S&P 500® subió un 3,8% en diciembre y terminó el año en un máximo histórico, habiendo sumado un 18,4% en el año. Los valores sin contar con Estados Unidos ganaron un 5,5% en diciembre y terminaron el año con una subida del 11,1%. El S&P Emerging BMI ganó un 6,1% en diciembre y terminó el año 2020 con una subida del 15,5%. El S&P Emerging BMI ganó un 6,1% en diciembre y terminó el año 2020 con una subida del 15,5%”, señala Deborah Fuhr, socia directora, fundadora y propietaria de ETFGI.
Pixabay CC0 Public Domain. Todo seguirá bien… mientras se pague la deuda
El reciente repunte de tipos de interés provocado por el incremento de las expectativas de inflación (en EE.UU. el forward a 10 años supera con claridad el 2%) y la positivización de las curvas de rentabilidades de los bonos soberanos han vuelto a poner sobre la mesa de análisis el debate sobre la viabilidad del pago de la deuda pública.
Los aparentemente todopoderosos bancos centrales saben que la incipiente recuperación económica apoyada en la mayor rapidez del proceso de vacunación puede no ser suficiente para sostener el castillo de naipes en el que se mueven las finanzas públicas de los países desarrollados que están ahora más deterioradas por la avalancha de ayudas que la crisis del COVID-19 ha obligado a implementar.
Bonos soberanos, los grandes perdedores
Creo que el nivel de las TIRes que estaban ofreciendo los bonos emitidos por los estados de los países desarrollados rozaba el absurdo y algunos se habían acostumbrado a éste. Tampoco es que las cosas hayan cambiado mucho pero, al menos, retrocesos superiores al -4% en un mes en el precio del treasury a 10 años (su rentabilidad se mueve ya por encima del 1,7%, máximos desde enero de 2020) ayudan a recordar que la renta fija es sensible a los datos de inflación y que ésta, a pesar de las múltiples fuerzas desinflacionistas entre las que el mundo avanza (demografía, tecnología, mercado laboral, etc.) sigue siendo una variable permanentemente intrínseca a los mercados financieros.
Evolución de la TIR del bono americano a 10 años desde comienzo de año:
Fuente: Investing.com
Conclusión: hasta que el ajuste sea mayor, mejor mantenerse alejados de los bonos soberanos.
La renta variable puede verse afectada
En la reciente reunión de la Fed quedó claro que no moverá los tipos de interés oficiales hasta 2023, tranquilizando los temores a un cambio más temprano, y se transmitió un mensaje de inflación esperada moderada. Lo primero lo puede controlar, pero lo segundo no. De ahí que la cotización de la onza de oro, uno de los activos refugio en caso de escenarios inflacionistas, pueda estar comenzado a reponerse tras una caída acumulada del 9% en 2021.
El paralelismo del siguiente gráfico alienta esa potencial recuperación:
Con todo, el hecho de que la Fed revisara al alza las previsiones de crecimiento del PIB de 2021 hasta el +6,5% y anticipara una reducción de la tasa de desempleo al 5% está dando gasolina a las bolsas para mantener las alzas. Sin embargo, una corrección podría estar a la vuelta de la esquina: la realidad de que la renta fija puede recobrar su atractivo inversor al ofrecer tipos más altos y las valoraciones de precios objetivo de muchas compañías cotizadas pueden verse penalizadas por descontar sus beneficios futuros a una tasa superior a la actual, son razones para que las bolsas reaccionen con caídas.
Si a ello sumamos el extremo cortoplacismo de muchos inversores, el cóctel bajista acaba de mezclarse y podría provocar alguna resaca a bolsistas poco reflexivos.
La montaña de deuda pública de fondo
El inevitable aumento de los déficits públicos podría poner en duda la solvencia de algunos países para atender sus compromisos y desencadenar bajadas en sus calificaciones crediticias. Con sus compras de bonos, los bancos centrales están logrando asegurar la liquidez del sistema: hasta 20.000 millones semanales en el caso del BCE y 120.000 millones mensuales de la Fed.
Pero lo anterior no puede hacer desaparecer la montaña de deuda que acumulaban los países ya antes de la crisis sanitaria. La consecuencia de tal situación podría ser un encarecimiento del coste de la financiación de muchos países unida a la caída del precio de los bonos.
En el entorno descrito, un aumento del nivel de precios podría ayudar a reducir el valor de la deuda y hacer la situación más llevadera. Eso siempre sucede con los hogares y las empresas que ingresan más de lo que gastan y tienen préstamos a interés fijo. Pero, en la actualidad, puede ser más incierto en el caso de los estados pues sus déficits crecen con la inflación y al tener que seguir emitiendo deuda, sea para cubrir el nuevo déficit o para refinanciar la que vence, una inflación al alza podría incrementar progresivamente el coste de la deuda ante la presión de los acreedores que exigirían una mayor prima. Además, unos tipos de interés situados permanentemente por debajo del nivel de la inflación son difícilmente asumibles por los inversores.
No debemos olvidar que nadie presta dinero si tiene dudas sobre si se le devolverá lo prestado, por lo que asegurar la confianza de los inversores en la solvencia y capacidad de repago de los estados se convierte más que nunca en el factor clave para evitar que el sistema salte por los aires. El sentimiento bullish que invade los mercados de acciones apoyado en la evidencia de la eficacia de la vacuna, así como en la velocidad creciente de su aplicación, no debería verse contaminado por la inflación y la subida de rentabilidades siempre que la apariencia de seguridad y estabilidad reine en las finanzas públicas.
Tribuna de Guillermo Santos, socio de la EAF iCapital
Foto cedidaRamón de la Riva será responsable de la Banca Privada de Sabadell. . sabadell
El consejo de administración de Banco Sabadell, en su reunión del jueves 18 de marzo, oficializó el relevo de la figura del primer ejecutivo del banco. Así, el consejo ha aceptado la renuncia de Jaime Guardiola como consejero delegado de la entidad y ha procedido al nombramiento de César González-Bueno como su sustituto, tras haber recibido las autorizaciones preceptivas del Banco Central Europeo (BCE). En esa misma reunión, el consejo de administración también ha aprobado la estructura organizativa propuesta por el nuevo consejero delegado.
La nueva estructura, con ejes principales en el mayor foco en el cliente y el aumento de la rentabilidad, se divide en tres grandes unidades de negocio en España con características muy diferentes: Particulares, Empresas y Corporativa. Según han comunicado desde el banco, la nueva estructura de Particulares tendrá una dirección de banca privada para cubrir las necesidades específicas de este segmento. Según ha podido saber Funds Society, al cargo de la misma estará Ramón de la Riva, antes al frente de Mercados y Banca Privada y que ahora se centrará en esta segunda actividad, como nuevo responsable de este segmento. En ese rol sustituye a Pedro Dañobeitia, responsable de la banca privada desde la primavera de 2017 y que ahora podría abandonar la entidad, según fuentes del mercado.
«La unidad de Particulares se reorganiza para mejorar los procesos, así como para adecuar la oferta de productos y servicios a las necesidades de los clientes en un entorno que ha experimentado una profunda transformación. Por ello, la digitalización será un elemento clave de soporte a los más de 3.500 profesionales de la red de oficinas de Sabadell. La mejor experiencia de cliente vendrá acompañada de un crecimiento más rentable y más eficiente», dice el banco en su comunicado.
En concreto, la dirección de Banca de Particulares se estructurará en unidades de producto, con el fin de asegurar una mayor cercanía al cliente. Además de Financiación, Financiera, Marketing, y Cuentas y Seguros, también habrá un área de Ahorro e Inversión, además de la dirección de Banca Privada.
Temporalmente, César González-Bueno estará al frente de esta unidad hasta la próxima incorporación de su futuro responsable.
Para abrir boca, les hacemos un adelanto en un vídeo, de la mano de algunos de los colaboradores que han escrito tribunas de opinión, y también expertos de la industria de gestión de activos y asesoramiento que nos han dado su visión en algunos de los artículos. En el vídeo, explican algunas de las claves del contenido en el que han participado.
Entre los protagonistas, Rocio Ledesma, socia de Navis Capital, explica las claves y distintas posibilidades para incorporar el arte a las carteras de inversión y analiza las ventajas de este activo que, aunque es ilíquido, ofrece oportunidades de rentabilidad y diversificación.
También Leticia Travesedo, abogada especialista en Derecho regulatorio financiero en Alter Legal, analiza los principales hitos regulatorios y fiscales que afrontará el sector de la gestión de activos, las gestoras de pensiones y la banca privada este año.
En un artículo sobre los retos que afrontan las entidades internacionales que han llegado a España en 2020, Francisco Rodríguez D’Achille e Iván Díez Sainz, socios y directores de desarrollo de negocio para el sur de Europa y Latinoamérica en LONVIA Capital, analizan algunas de las claves de su negocio.
En el vídeo también participan Álvaro Requeijo Torcal y Álvaro Requeijo Pascua, abogados en Álvaro Requeijo Abogados y Partners de Ambar Partners, que escriben en la revista sobre el sistema de remuneración de los agentes.
También Álvaro Antón Luna, responsable para Iberia en Aberdeen Standard Investments, nos cuenta las claves del fondo que destacamos en nuestra sección de fondos de armario.
Y Pedro Torroja, Senior Principal Financial Practice en Badenoch + Clark, consultora de dirección de directivos del Grupo Adecco, analiza las oportunidades que vendrán para los profesionales de la banca privada este año, desde una perspectiva de recursos humanos.
En el vídeo también participa Julián Pascual, presidente y fundador de Buy & Hold, y patrono de la Fundación Amigos de Rimkieta (FAR), que protege la vida en el barrio más pobre de Burkina Faso.
Pixabay CC0 Public Domain. Andbank España dona 250.000 euros a CRIS contra el cáncer a través de su fondo SIGMA Global Sustainable Impact
La entidad especializada en banca privada, Andbank España, ha donado 251.029 euros a la Fundación CRIS contra el cáncer a través de su fondo SIGMA Global Sustainable Impact (GSI). Este fondo, que invierte bajo criterios ESG y de impacto, destina el 9% de la comisión de gestión y 100% de la comisión de éxito a esta fundación, permitiendo dar soporte a proyectos de investigación para el tratamiento y la cura del cáncer.
Este es el segundo año consecutivo que Andbank España dona lo recaudado a través del fondo GSI a la financiación del proyecto STAB de la Unidad CRIS de Inmuno-Oncología del Hospital 12 de Octubre. Consiste en una revolucionaria estrategia de inmunoterapia para acabar con el cáncer de una forma más eficaz que otras terapias celulares en determinados tumores de sangre y que podría trasladarse a tumores sólidos.
Según el Dr. Luis Álvarez-Vallina, Jefe de la Unidad CRIS de Inmuno-Oncología del Hospital 12 de Octubre, “este proyecto se encuentra en un momento clave ya que prevemos que en el último trimestre de 2021 podremos aplicar en pacientes esta estrategia de inmunoterapia tan innovadora que hemos desarrollado con el soporte de CRIS contra el cáncer y Andbank. Es un proyecto espectacular, pionero en nuestro país, con gran compromiso social”.
El GSI es un fondo multiactivos de renta variable que persigue generar un impacto positivo y directo a través de sus inversiones y un impacto social, al destinar parte de la comisión de gestión a financiar proyectos de investigación contra el cáncer. Cuenta con cerca de 50 millones de patrimonio bajo gestión y su filosofía de gestión le ha permitido obtener la máxima calificación en el Morningstar Sustainability Rating.
La forma de aplicar los criterios ESG en la filosofía del fondo GSI se centra en la búsqueda de las compañías líderes en su sector en materia de buen gobierno corporativo y de prácticas sostenibles, siguiendo la estrategia Best in class, y en la inversión de impacto, que invierte en compañías que por su actividad generen un impacto medioambiental o social positivo.
La investigación contra el cáncer es el eje principal de actuación de la estrategia de responsabilidad social corporativa de Andbank. La entidad, además de apoyar a la Fundación CRIS contra el cáncer, colabora con la Fundación Fero y el SJD Pediatric Cancer Center.