Pixabay CC0 Public Domain. Los clientes de Allfunds podrán acceder a la inversión alternativa en mercados privados a través de iCapital
Allfunds e iCapital, la plataforma fintech global líder en impulsar el acceso y la eficiencia en la inversión alternativa para las industrias de gestión de activos y patrimonio, han puesto en marcha su alianza, anunciada el año pasado, para proporcionar oportunidades de inversión alternativa en el mercado privado a la red global de Allfunds.
Con la puesta en marcha de este acuerdo, los clientes de Allfunds podrán solicitar el acceso a esta nueva herramienta dentro del ecosistema Allfunds y tendrán la opción de invertir en una selecta gama de fondos alternativos de gestores de primera línea. Además, según explica la firma, los clientes podrán optar entre distintas geografías y estrategias, como capital privado, deuda privada o activos reales, y acceder a estas clases de activo con una inversión mínima inferior a la media habitual.
En los próximos meses, iCapital continuará seleccionando los mejores fondos de entre diversas estrategias para continuar ampliando su solución de inversión alternativa para la red de Allfunds. Según indican ambas compañías, el enfoque centrado en el cliente y la mentalidad digital-first, que comparten Allfunds e iCapital, se han materializado en una integración tecnológica fluida y eficiente.
En este sentido, explican que todos los procedimientos de suscripción y servicio al cliente durante todo el ciclo de vida de la inversión quedan automatizados, de esta manera se eliminan dificultades operativas y procesos manuales a los que asesores y clientes se han enfrentado históricamente con esta clase de activos. Adicionalmente, los inversores se beneficiarán de un centro de gestión de documentación centralizado, con visibilidad completa e información exhaustiva sobre todas sus inversiones.
“Allfunds está comprometido con proporcionar a sus clientes la mejor oferta de productos posible, tanto en calidad como en rango, por lo que, naturalmente, llevamos tiempo pensando en incluir una solución de inversión alternativa en mercados privados. Esta colaboración garantiza que nuestros clientes tengan la opción y oportunidad de inversión en mercados privados con la experiencia probada de iCapital. Estamos encantados de aliarnos con una plataforma fintech líder y, una vez más, aportar una solución tan innovadora a nuestros clientes”, ha indicado Juan Alcaraz, CEO de Allfunds.
Por su parte Lawrence Calcano, presidente y CEO de iCapital, ha destacado que ambos equipos tienen el objetivo común de que más gestores de patrimonio y bancos accedan a oportunidades de inversión que puedan ayudar a los clientes a cumplir los objetivos de sus carteras. “Estamos encantados de que nuestra alianza con Allfunds haya arrancado y sabemos que esto es sólo el comienzo de un trabajo conjunto para construir una amplia oferta de productos dentro de una experiencia de inversión privada eficiente, transparente y totalmente digital para nuestros clientes”, ha afirmado Calcano.
Para Marco Bizzozero, director de Internacional de iCapital, la creación de riqueza se produce cada vez más fuera del mercado público. “Nuestra alianza con Allfunds, la única de su clase, proporciona a bancos y gestores de patrimonio acceso a importantes oportunidades de crecimiento y diversificación en los mercados privados. Este es un hito clave en nuestra expansión internacional y estamos encantados de trabajar con Allfunds, un reconocido líder mundial en la distribución de fondos, para facilitar el acceso de un mayor número de inversores y asesores a oportunidades de inversión en los mercados privados”, ha afirmado Bizzozero.
Foto cedidaChristine Lagarde, presidenta del BCE durante la rueda de prensa de la reunión de diciembre de 2021.. ¿Será 2022 el año en el que el BCE empiece a reducir su política ultra acomodaticia?
Tras la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), la atención se centra ahora en el Banco Central Europeo (BCE), que celebrará mañana su primer encuentro del año. Según indican los análisis de las gestoras, pese a que la Fed ha endurecido su posición, el BCE sigue mostrándose continuista y con poca intención de modificar su política monetaria de forma abrupta. Por lo tanto, ¿qué se espera de la reunión de enero?
En opinión de Hans-Jörg Naumer, Director Global Capital, Markets & Thematic Research de Allianz Global Investors, en esta ocasión, no valen las medias tintas. “La política monetaria es una cuestión de confianza, y la confianza no debe ser socavada por la sospecha de que los objetivos de política fiscal prevalecen. Como escribió el Premio Nobel Friedrich August von Hayek en su libro de 1960 Los fundamentos de la libertad: Una política monetaria independiente de la política fiscal es posible siempre que el gasto público represente solo una parte relativamente pequeña de todo el gasto y que la deuda pública (y especialmente la deuda a corto plazo) represente solo una pequeña parte del volumen total de deuda. Esto sigue siendo plenamente válido”, señala.
Las gestoras interpretan que simplemente el BCE va a un ritmo diferente que otras instituciones monetarias, como la Fed o el Banco de Inglaterra, pero que transitará igualmente hacia una normalización de su política. De nuevo, la clave estará en la evolución de la inflación en la zona euro.
Franck Dixmier, Global CIO Fixed Income en Allianz Global Investors, considera que esta reunión debería ser una oportunidad para que el presidente del BCE retome la retórica comunicada por otros miembros del Consejo de Gobierno en las últimas semanas. “El BCE debería reiterar su voluntad de ser, como la Fed, pragmático y ágil, y estar dispuesto a intervenir si la inflación sigue siendo demasiado alta en relación con su objetivo del 2%. Entre las herramientas a disposición del BCE, la primera sería detener las compras netas, como sugiere Philip Lane, economista jefe del BCE”, añade Dixmier.
Inflación: la gran clave
En este sentido, los analistas de Monex Europe, destacan que hasta ahora, los responsables de la política monetaria del BCE siguen confiando en que la inflación caerá durante el próximo año y la mayoría de los miembros del Consejo de Gobierno rechazan la idea de una subida de tipos en 2022, a pesar de las expectativas del aumento de los tipos y de un contexto inflacionario más fuerte a nivel mundial. “Es probable que la reunión del BCE del jueves esté dominada por la forma en que el banco central hará retroceder las expectativas de subida de tipos al tiempo que aborda los riesgos al alza de la inflación sin que los mercados piensen que se incluyen en el escenario de partida”, comentan.
Desde Generali Investment recuerdan que la inflación general se disparó hasta el 4,9% interanual en noviembre, impulsada por los efectos de base, el aumento de los precios de la energía y los cuellos de botella de la oferta. Según sus estimaciones, en 2022, estos factores se reducirán y la inflación volverá a situarse por debajo del umbral del 2% en la segunda mitad del año. Dicho esto, argumentan que el régimen de baja inflación de los últimos años habrá terminado y la inflación anual se situará en una media del 2,3% en 2022. Por su parte, la inflación subyacente se acercará gradualmente al objetivo del 2% del BCE en los próximos años, mientras que las expectativas de inflación ya se han normalizado.
Según Bloomberg, el mercado espera que la inflación general se ralentice hasta el 4,4% interanual desde el 5,0% de diciembre, y que la inflación subyacente se desacelere aún más, pasando del 2,6% al 1,8%. Gilles Moëc, economista jefe de AXA Investment Managers, cree que una cifra superior a la esperada pondría a Lagarde en una posición menos cómoda este jueves, pero el verdadero problema para el BCE va a ser la próxima tanda de previsiones que se publicará en marzo.
En este sentido, Moëc señala: “Hemos argumentado que el banco central se ha dado a sí mismo bastante cobertura para permanecer en modo de supervisión hasta finales de 2022, dada su orientación futura que ya proporciona una fuerte visibilidad sobre su acción al menos hasta octubre en la flexibilización cuantitativa, mientras que empuja el debate sobre las subidas de tipos para más adelante. Sin embargo, los halcones se han hecho oír, y esperamos que Christine Lagarde baje la temperatura y repita que es poco probable que el BCE suba los tipos este año. Sin embargo, el tono de la conferencia de prensa puede depender de la inflación de enero, que se publicará hoy”.
Previsión sobre las subidas de tipos
Según recuerda Talib Sheikh, responsable de Estrategia Multi-Asset de Jupiter AM, el mercado europeo de tipos espera que el proceso de normalización se inicie con una única subida de 25 puntos básicos en 2022, seguida de dos subidas en 2023, lo que llevaría los tipos a territorio positivo. Pero, en su opinión, «esto nos parece demasiado agresivo».
«Aunque la incertidumbre en torno a las presiones salariales ha aumentado, pensamos que es poco probable que la dinámica laboral inflacionista se mantenga y dé lugar a espirales salariales y, por lo tanto, en última instancia, el BCE no se verá obligado a adoptar un modo más agresivo», concluye Sheikh.
Para Thomas Hempell, jefe de Análisis Macro y de Mercado, y Florian Späte, estratega de Bonos Senior, en Generali Investments, el entorno de la política monetaria ha cambiado notablemente. “La subida de tipos aún no está sobre la mesa, ya que la nueva estrategia del BCE ha elevado notablemente el listón para un endurecimiento temprano. La inflación general y la subyacente deben ser coherentes con el umbral del 2% mucho antes del final del horizonte de proyección del BCE (actualmente en 2024). Pero, a diferencia del pasado, los riesgos al alza de la inflación son ampliamente reconocidos y el BCE querrá estar preparado para actuar en todas las contingencias sin provocar cambios bruscos en el mercado”, afirman.
Por ello, según Hempell y Späte, lo más probable es que el BCE ponga fin al PEPP en marzo, pero que suavice la reducción de las compras mensuales del QE durante el resto del año mediante el aumento de las compras del APP. “De este modo, podría estar preparado para anticipar su primera subida de tipos de 2024 (hipótesis base) a 2023, por ejemplo, si se materializaran los efectos de segunda ronda del actual repunte de la inflación. El balance del BCE alcanzará probablemente su punto máximo a finales de 2022 y se reducirá posteriormente. Habrá medidas para evitar una caída brusca, por ejemplo, relacionadas con la expiración de los LTROs. Sin embargo, el camino está claro: 2022 será el año en el que el BCE empiece a reducir su política ultra acomodaticia”, añaden.
En cambio, según matiza su colega Martin Wolburg, economista senior de Generali Investments Partners, los mercados tienen una visión mucho más agresiva de las subidas de tipos del BCE, ya el pasado otoño abrazaron la idea de una subida de tipos en 2022. “Los miembros del Consejo de Gobierno (CG) del BCE no han dejado de comunicar que esto es exagerado y la presidenta Lagarde, entre otros, lo calificó de muy improbable. A pesar de estos comentarios, las expectativas de una subida de tipos en 2022 se intensificaron después de la reunión de diciembre. Una de las razones podría ser que los mercados toman a la Fed como modelo. Sin embargo, la situación allí es muy diferente, y es difícil imaginar circunstancias realistas en las que el BCE se apartaría de la secuencia de medidas políticas anunciada y subiría los tipos de interés sin dejar de aplicar el QE, ya que también podría suponer un indeseado aplanamiento de la curva de rendimiento”, explica Wolburg.
“En consecuencia, el BCE intentará que la reunión de política monetaria de febrero sea un acontecimiento discreto, y no esperamos que se tomen decisiones importantes en esta reunión. En marzo, recibiremos las nuevas proyecciones macroeconómicas del equipo. Si las proyecciones de inflación, que ya son razonablemente halagüeñas, se revisan al alza para 2023 y 2024, es probable que el BCE contemple una trayectoria de salida algo acelerada, un escenario que el mercado ya está valorando. Creemos que el BCE probablemente estará en piloto automático durante la mayor parte de 2022, ya que el listón para una flexibilización adicional importante más allá de la combinación de políticas anterior a la pandemia es alto”, concluye Konstantin Veit, gestor de carteras de PIMCO.
Según la visión de Annalisa Piazza, analista de renta fija de MFS Investment Management, a pesar de la división interna en el Consejo de Gobierno con respecto a la inflación, el BCE iniciará su ciclo de subidas lentas no antes del segundo o tercer trimestre de 2023 y el tono del anuncio de política de febrero no difiera mucho de lo que escuchamos en diciembre.
“Lagarde había dejado claro en una de sus últimas declaraciones que el BCE tiene buenas razones para no actuar con tanta rapidez como la Fed, lo que reduce los riesgos de que la presión de los homólogos sea el principal motor de la actuación del BCE. La evolución de la inflación y de las expectativas de inflación será el factor clave para que el BCE empiece a subir los tipos y, para entonces, se habrán celebrado varias rondas de negociaciones salariales y el BCE tendrá una visión más clara de las presiones inflacionistas subyacentes”, afirma Piazza.
“Los inversores deberían esperar que el BCE confirme su camino hacia la normalización gradual de la política monetaria en febrero. Esto hará que, en términos de endurecimiento monetario, vaya por detrás del Banco de Inglaterra y de la Reserva Federal. Es poco probable que se produzcan cambios en la política y podría reconocer que existe un alto nivel de incertidumbre respecto a la futura senda de la inflación. Las nuevas incertidumbres incluyen el impacto de la última ola del Covid-19, así como las presiones de los mercados de la energía. Los inversores deberían seguir considerando que el BCE mantendrá un enfoque flexible y basado en datos a lo largo de este año”, concluye Pietro Baffico, economista europeo en abrdn.
Pixabay CC0 Public Domain. Neuberger Berman amplía su oferta de private equity con el lanzamiento de un nuevo fondo ELTIF
Neuberger Berman ha anunciado el lanzamiento de su segundo Fondo Europeo de Inversión a Largo Plazo (ELTIF II, por sus siglas en inglés), el NB Direct Private Equity Fund 2022 ELTIF, centrado en coinversiones con los mejores gestores de private equity. Según indican desde la firma de inversiones, este nuevo fondo llega “tras el éxito del lanzamiento de la primera estrategia ELTIF el año pasado”.
El nuevo fondo coinvertirá en una serie de clases de activos de capital privado, invirtiendo principalmente en compañías de buyout, y de manera oportunista en compañías en fase de crecimiento y capital preferente. Las inversiones directas se realizarán principalmente en compañías con sede en Europa y América del Norte, así como en Asia y América Latina en menor medida.
Desde la firma explican que con esta nueva solución de inversión el acceder e invertir en capital global será más sencillo tanto para los inversores minoristas asesorados como para inversores profesionales. Además, ha anunciado que para los inversores que utilicen el fondo por primera vez, Neuberger Berman ofrece un descuento anticipado en la comisión de gestión para el primer año del 25%.
El primer fondo Neuberger Berman ELTIF I recaudó un total de 149,2 millones de euros (169 millones de dólares) durante el periodo de oferta de seis meses desde su lanzamiento en mayo, y a 31 de diciembre de 2021 ya ha invertido en 12 compañías, lo que demuestra, según la valoración que hacen, que el interés entre los inversores en este área que antes era difícil acceder para los inversores minoristas.
Tradicionalmente, los fondos de capital privado tienen mínimos de inversión elevados, pero Neuberger Berman propone con su fondo entrar a partir de los 25.000 euros para los inversores de toda Europa. Por último, indica que la duración inicial prevista del fondo es de 8 años.
“El NB Direct Private Equity Fund 2022 ELTIF coinvertirá en una gran variedad de oportunidades, tanto en nuevas operaciones como en compañías existentes en las carteras de las gestoras líderes de Private Equity . No tendrá limitación en cuanto a sectores, compañías y regiones geográficas en las que puede invertir”, explica José Luis González Pastor, director general de Neuberger Berman.
El NB ELTIF II aprovechará la experiencia del galardonado equipo de capital privado de Neuberger Berman, que cuenta con más de 245 profesionales especializados en mercados privados en nueve lugares del mundo y un amplio historial de más de 30 años gestionando activos privados.
En este sentido, González añade: “Tras el gran éxito que obtuvimos con el ELTIF I en 2021, lanzamos otro nuevo fondo innovador. Normalmente, el capital privado tiene muchas barreras de entrada, pero nuestro objetivo es superar esas barreras dando a los inversores acceso a una diversificación adecuada, y un exhaustivo y selectivo proceso de due diligence. El lanzamiento de este segundo fondo es un verdadero ejemplo de la potencia de nuestra plataforma y un paso decisivo para hacer que el capital privado sea accesible a los inversores minoristas asesorados con bajos mínimos de inversión en toda Europa”.
Por su parte, José Cosio, responsable global ex USA del canal de Intermediarios, ha comentado: “La inversión en private equity permite a los inversores acceder a las bondades de este activo: rentabilidades atractivas a largo plazo, disminución de la volatilidad y en consecuencia del riesgo y acceso a una cartera diversificada. Como compañía, llevamos muchos años hablando de la necesidad de poner este activo a disposición de más inversores. Aunque ya ocupa un lugar importante en la mayoría de los planes de pensiones públicos y privados, estos fondos que hemos lanzado son una forma de tener exposición a un impulsor tan importante de rentabilidad y diversificación de riesgo”.
En su opinión, el apetito por este tipo de inversión está creciendo, como detectaron con el ELTIF I el año pasado. “Creemos que este nuevo fondo hace que la inversión en capital privado sea accesible para los inversores que desean una solución sencilla y disponible de manera anual”, concluye Cosio.
Foto cedidaEmmanuel Daull, responsable de Deuda no cotizada de Groupama AM.. Groupama AM ficha a Emmanuel Daull como responsable de Deuda no cotizada
Groupama Asset Management ha anunciado la incorporación de Emmanuel Daull como nuevo responsable de la Deuda no cotizada. Según explican desde la gestora, se trata de un puesto de nueva creación que abre el camino para la construcción de un equipo de especialistas dedicados a esta clase de activos.
Como primer paso en el despliegue de esta clase de activos reales y como responsable de la deuda no cotizada, Duall tendrá como misión estructurar un equipo de especialistas experimentados, diseñar la gama de fondos y garantizar su promoción y desarrollo. Emmanuel Daull reportará a Xavier Hoche, director de gestión, y todo el equipo de deuda no cotizada se unirá al equipo de gestión de Groupama AM.
“Nos complace dar la bienvenida a Emmanuel Daull, un experimentado especialista en la clase de activos. Sus competencias y su experiencia son verdaderas bazas al servicio de las ambiciones de Groupama AM. De hecho, con el apoyo de nuestra matriz, queremos ofrecer a nuestros clientes una gama completa de fondos de deuda no cotizada con un fuerte carácter ESG”, ha destacado Xavier Hoche, director de gestión de Groupama AM.
A través del desarrollo de su experiencia en deuda no cotizada, Groupama AM aportará nuevas soluciones de diversificación que generarán rendimientos tanto para los inversores institucionales como para los profesionales de la distribución. Según adelanta la gestora, el universo de emisores del primer fondo debería incluir principalmente empresas con cifras de negocio de entre 50 y 500 millones de euros. Toda la gama de fondos se caracterizará por una fuerte dimensión de impacto ESG.
“El primer fondo que queremos lanzar se estructurará en torno al eje social-societal con fuertes convicciones de gestión”, continúa Xavier Hoche. Para ello, el equipo de gestión se apoyará en el trabajo del equipo de análisis interno, compuesto por 16 especialistas, tanto en el aspecto financiero como en el extrafinanciero.
Respeto a Emmanuel Daull, la gestora destaca que ha trabajado en AlixPartners como Asociado en el equipo de reestructuración financiera, en Allianz Global Investors como analista-gestor de deuda privada y, más recientemente, en Credit Value Investments, donde era Director de inversiones de deuda no cotizada – Europa Central, desde 2018. Emmanuel Daull tiene un Máster en Corporate Finance (Toulouse Business School) y un máster en Finanzas Gestión Contable y Management (Bradford School of Management).
Foto cedidaJorge Escribano, consejero delegado de Greenside, y Juan Simon, consejero asesor para Portugal de la entidad.. greenside
Greenside ha lanzado su primer fondo de inversión tras convertirse en gestora: se trata de Greenside Global High Yield Bond, un vehículo UCITS, FCP, domiciliado en Luxemburgo, y traspasable, que invierte en renta fija de alto rendimiento. Todo, en un contexto complejo para los mercados de deuda, pero en el que aún es posible encontrar oportunidades, sobre todo aprovechando los descuentos producidos a raíz del escenario cíclico o geopolítico.
“Hace años era posible obtener una atractiva rentabilidad en renta fija comprando bonos de empresas tradicionales de gran tamaño cotizadas en grandes índices. Sin embargo, hoy en día, debido al escenario generalizado de bajos tipos de interés, para obtener una buena rentabilidad en esta clase de activos, el universo de bonos se ha reducido a emisores de empresas con ratings más bajos y menor tamaño. En este entorno de mercado, nosotros recomendamos dar un enfoque diferente a la inversión, consistente en aprovechar los descuentos en las cotizaciones por circunstancias cíclicas o geopolíticas, como la pandemia del COVID-19”, afirma Jorge Escribano, consejero delegado de Greenside.
Como ejemplo, explica, actualmente los bonos de compañías aéreas afectadas por la pandemia -como Air France e IAG- descuentan un riesgo de crédito excesivo y, en consecuencia, pagan rentabilidades superiores al 4,25% y 5,25% anual respectivamente, muy por encima de las farmacéuticas favorecidas por la pandemia, tales como Roche y Bayer, que, a un plazo similar, están pagando rentabilidades de -0,15% y +0,63% anual.
El nuevo fondo será gestionado por el departamento de inversiones de Greenside, formado entre otros por Jorge Escribano, al frente, Juan Simon (consejero asesor para el desarrollo del negocio en Portugal) y otros miembros del equipo (analistas).
Jorge Escribano, responsable del departamento de inversiones de la entidad, nos indica que sus clientes le llevan pidiendo desde hace tiempo lanzar este producto por varias razones: “A raíz de la entrada en vigor en 2018 de la Directiva de la Unión Europea MIFID II gran parte del universo de bonos fue calificado como complejo y por tanto excluido para todos los inversores no profesionales, entre los cuales se encuentran la gran mayoría de sus clientes”, indica.
Además, “el actual escenario de bajos tipos de interés para hacer inversión directa en bonos ya no permite a sus clientes mantener las excelentes rentabilidades que han obtenido durante los últimos 20 años, sin asumir un riesgo elevado”, recuerda.
Lo anterior, explica Escribano, implica que en las condiciones actuales de mercado -limitación normativa y bajos tipos de interés- para alcanzar en esta clase de activo el objetivo mínimo de rentabilidad del 5% anual, sin asumir un riesgo excesivamente elevado, “lo racional es hacerlo invirtiendo principalmente a través de una gestión profesionalizada, vía este fondo de inversión, cuyo enfoque principal es la diversificación, selección y análisis exhaustivo de cada emisor”.
La tarificación del carbono constituye una herramienta política de vital importancia para promover la descarbonización y lograr una reducción de las emisiones de CO2 acorde con los objetivos del Acuerdo de París sobre el cambio climático. En este artículo, Natalia Luna, analista sénior de inversión temática responsable, y Roger Wilkinson, director de renta variable EMEA y análisis de inversión responsable en Columbia Threadneedle, examinan en mayor profundidad la función de la tarificación del carbono, el abanico de sistemas de tarificación del carbono a escala global y lo que los analistas, los gestores de carteras y los asesores deben tener en cuenta en relación con el posible impacto de la tarificación del carbono en las compañías, los sectores y la economía en general.
Un sistema eficaz de tarificación del carbono puede resultar decisivo para acelerar la transición hacia la neutralidad de carbono
Los gobiernos y el sector industrial están adoptando medidas para acelerar y superar los indicadores de referencia y los objetivos de emisiones de crucial importancia. Entre los catalizadores para lograr la neutralidad de carbono se incluyen la regulación climática y de los mercados de carbono a nivel nacional y regional, así como el desarrollo de nuevas tecnologías energéticas limpias por parte de las compañías.
En la Unión Europea, las reformas del régimen de comercio de derechos de emisión (RCDE) —anunciadas como parte del paquete de medidas “Objetivo 55” de la UE— tienen como objetivo adaptar el mercado del carbono a los objetivos climáticos provisionales para 2030, mientras que los reglamentos climáticos reforzados comprenderán políticas de energías renovables e impuestos energéticos.
En Estados Unidos, el programa de infraestructuras de la administración de Biden abarca un amplio abanico de políticas climáticas, como normas de electricidad limpia e incentivos fiscales para tecnologías limpias y energías renovables, y se prevé que se promulgue de una forma u otra a finales del año. Al mismo tiempo, se están adoptando políticas a nivel estatal que pretenden fijar las normas sobre tarificación del carbono y energías renovables.
Los gobiernos, los inversores y los consumidores también están ejerciendo presión sobre las compañías para que adopten compromisos significativos con respecto a la descarbonización. Tarificación del carbono: una herramienta esencial para lograr la neutralidad de carbono La tarificación del carbono representará un elemento clave para reducir las emisiones de CO2 con arreglo a los objetivos del Acuerdo de París y para acelerar la transición hacia la neutralidad de carbono. Conscientes de ello, más países han comenzado a adoptar sistemas de tarificación del carbono con el fin de limitar sus emisiones.
Ahora bien, mientras los precios de las emisiones de carbono están aumentando, los precios actuales siguen siendo demasiado bajos para lograr la necesaria descarbonización a largo plazo. La Agencia Internacional de la Energía (AIE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, entre otros organismos, estiman que, para lograr los objetivos del Acuerdo de París, es preciso que el precio del carbono oscile entre 75 y 100 dólares por tonelada de CO2. Hoy en día, el FMI estima que cuatro quintas partes de las emisiones de carbono del mundo siguen teniendo un precio insuficiente, y que el precio de carbono medio global es inferior a 5 dólares por tonelada. Existen tres enfoques con respecto a la tarificación del carbono: impuestos sobre el carbono, mercados de carbono de cumplimiento regulado y mercados de carbono voluntarios o de compensación.
1. Los impuestos sobre el carbono representan un instrumento de política fiscal con una aplicación relativamente fácil. Estos impuestos determinan un precio directo sobre el carbono mediante la definición de un tipo impositivo basado en las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) o el contenido de carbono de los combustibles fósiles. Con los impuestos sobre el carbono, el precio del carbono es fijo y no se establece un máximo general de emisiones, lo que significa que la reducción general de emisiones exacta dependerá del precio del carbono. No obstante, los impuestos sobre el carbono suelen ofrecer escasa flexibilidad, ya que los emisores de carbono no pueden pagar a otras compañías para reducir las emisiones cuando esta opción sea más rentable. Conforme los países aumentan el nivel de sus compromisos con la neutralidad de carbono, también suben los impuestos sobre el carbono en un intento por conseguir esos objetivos.
Por ejemplo, Noruega tiene previsto triplicar con creces su impuesto nacional sobre las emisiones de CO2 hasta 237 dólares por tonelada de aquí a 2030, mientras que Canadá planea multiplicar por más de cinco su impuesto sobre el carbono desde 30 a 170 dólares canadienses por tonelada antes de 2030.
2. Los mercados de carbono de cumplimiento regulado se basan en un modelo de “tope y trueque” (régimen de comercio de derechos de emisión con fijación previa de límites máximos que se reducen con el paso del tiempo). Un regulador asigna o vende derechos de emisión hasta el límite máximo establecido. Cada año las entidades deben entregar suficientes derechos de emisión para cubrir todas sus emisiones. Un mecanismo de penalización suele incorporarse en caso de incumplimiento. Los precios del carbono se determinan en el mercado: las entidades con reducidas emisiones pueden vender los derechos excedentarios a emisores más grandes, y viceversa. En la opinión de Columbia Threadneedle, los mercados de carbono de cumplimiento regulado representan el mecanismo más eficaz para incentivar y materializar la reducción de las emisiones (gráfico 1).
3. Los mercados de carbono voluntarios, o compensación de carbono, ofrecen a las compañías una oportunidad para gestionar las emisiones que no pueden eliminar. Estos mercados se basan en el supuesto de que las compañías no pueden neutralizar o compensar la cantidad de emisiones que generan. Un mecanismo de compensación se crea mediante la financiación de proyectos destinados a reducir, prevenir o eliminar emisiones de CO2 de la atmósfera (gráfico 2).
El precio del carbono se determina en el mercado y depende de la oferta y la demanda de compensaciones. Los proyectos de compensación del carbono incluyen soluciones basadas en la naturaleza, como la repoblación forestal, las energías renovables y la eliminación de residuos. Los resultados deben ser medibles, verificados y de eficacia probada. Una importante desventaja de los sistemas de compensación es que el mercado está fragmentado y presenta una gran complejidad por la variedad de registros y metodologías aplicadas. Tampoco existen suficientes normas, lo que plantea el riesgo de “lavado de imagen verde”, es decir, presentar información falsa o engañosa sobre cuán respetuoso con el medioambiente es un producto/ una compañía. Por esta razón, los mecanismos de compensación de carbono no se consideran actualmente una alternativa o un sustituto de peso frente a otras soluciones de reducción de emisiones más completas. El grupo de trabajo sobre los mercados de carbono voluntarios (“Task Force for Voluntary Carbon Markets”), la iniciativa recién lanzada de Mark Carney, trata de establecer las normas en este tipo de mercados con el fin de contribuir al proceso de descarbonización.
Opciones de descarbonización
Desde Columbia Threadneedle evalúan lo fácil y costoso que resulta para una compañía de un sector específico reducir las emisiones de carbono y, por lo tanto, compensar el impacto de unos mayores precios del carbono. Por ejemplo, los servicios públicos pueden rebajar las emisiones a través de las energías renovables, lo cual reduciría la sensibilidad de este sector al aumento de los precios del carbono.
Otros sectores como la aviación o los productos químicos dependen de tecnologías limpias que todavía están en fase de desarrollo y/o no están disponibles en el mercado, como los combustibles sostenibles y el hidrógeno. La transición hacia la neutralidad de carbono para estos sectores podría llevar más tiempo, lo que aumenta su vulnerabilidad ante unos mayores precios del carbono.
En la gestora utilizan estas tres lentes para determinar el impacto potencial del aumento de los precios del carbono y evaluar la capacidad de adaptación de los emisores en cada sector. Incluso en sectores de elevada intensidad de carbono, las compañías que adoptan planes de reducción de las emisiones inmediatos y creíbles y muestran un sólido poder de fijación de precios deberían salir mejor paradas que las que no lo hacen.
La neutralidad de carbono tendrá repercusiones en todas las compañías y en todos los sectores. Y ese impacto ya se está haciendo notar. Los inversores y sus asesores deberían informarse adecuadamente de los posibles efectos de la tarificación del carbono en la economía y en las compañías en las que invierten, así como determinar la mejor manera de posicionar sus carteras en vista de las iniciativas de descarbonización.
Acabaron muy bien el año, con subidas del 15% en sus activos en 2021, pero 2022 ha empezado con mal pie para los fondos españoles. ¿Los responsables? Los mercados financieros, que han sufrido notables correcciones tanto en renta fija como en variable, en medio de un escenario de subidas de tipos y restricciones monetarias.
La caída en los mercados ha sido mucho más fuerte que los flujos de entrada hacia los fondos en enero -de 372 millones de euros estos últimos-, de forma que los fondos empiezan 2022 con una pérdida patrimonial de 7.700 millones de euros. El patrimonio se sitúa así en 309.818 millones, un 2,4% por debajo del cierre de diciembre de 2021, según los datos provisionales de Inverco. Es una caída mayor a la vivida en noviembre y septiembre del año pasado, dos meses en los que los fondos sufrieron pequeños retrocesos en su volumen.
“La totalidad del ajuste patrimonial tuvo su origen en los rendimientos negativos por mercado, ya que los flujos repitieron signo positivo, continuando la tendencia de meses anteriores, lo que demuestra la confianza del ahorrador en este instrumento, a pesar de la volatilidad presente en los mercados”, destacan en Inverco.
De hecho, los partícipes suscribieron en enero 372 millones de euros, manteniendo la tendencia de flujos positivos de los últimos meses, a pesar de la extrema volatilidad presente en los mercados.
Por categorías, los fondos de renta variable internacional, compensados por motivo de rebalanceo de carteras, fueron los que más suscripciones netas registraron en enero (1.640 millones de euros). Los mixtos también registraron flujos de entrada positivos, pues en su conjunto registraron 536 millones de euros de captaciones netas, centradas en su vertiente de renta fija.
Por el lado contrario, los globales, afectados por el rebalanceo de carteras, fueron los que mayores reembolsos registraron (716 millones de euros), seguidos por los fondos de deuda (645 millones de euros), centrados en su componente de corto plazo. Estas dos categorías, junto con la de monetarios (con reembolsos netos cercanos a los 400 millones de euros) son las que registraron salidas de flujos de mayor magnitud.
Rentabilidad negativa para empezar el año
En este contexto, y a fecha de elaboración del informe, los fondos de inversión han experimentado en el mes una caída media en rentabilidad del 2,74%, donde la totalidad de las vocaciones han obtenido rentabilidades negativas acusadas por la elevada volatilidad experimentada en los mercados financieros.
De esta manera, los fondos de bolsa internacional son los que han generado una peor rentabilidad (-6,50%) seguidos por los globales (-4,77%).
No obstante, en los últimos 12 meses los fondos continúan generando una rentabilidad interanual positiva para sus partícipes superior al 3,6%.
El número de agentes creció un 2,3% en 2021 en España, y al frente sigue estando Banco Mediolanum. La entidad española especializada en el asesoramiento financiero a sus clientes a lo largo de todas las etapas de su vida se consolida como la primera red de agentes financieros en España, segúnlos datos del Registro de Agentes del Banco de España.
Banco Mediolanum cierra el ejercicio 2021 liderando el ranking de entidades financieras con un total de 1.504 asesores financieros y un crecimiento del 14% en su red de profesionales.
El fuerte crecimiento que ha experimentado el banco en el número de asesores financieros —family bankers—confirma, además, la importancia que está adquiriendo la relación personal y el asesoramiento financiero personalizado entre los ahorradores, que buscan el apoyo de un profesional certificado, cercano y de confianza para planificar y gestionar su patrimonio.
Los family bankers constituyen el eje central del modelo de asesoramiento financiero de la entidad, siendo los responsables de acompañar a los clientes en la planificación de sus objetivos y necesidades de ahorro, inversión, financiación y protección a lo largo del ciclo financiero de su vida. De hecho, cada cliente de la entidad tiene su propio asesor personal.
Salvo La Porta, director comercial y responsable de los asesores financieros de Banco Mediolanum, afirma que “este crecimiento es un motivo de orgullo y un objetivo por el que hemos trabajado con muchísimo empeño, lo que nos ha permitido crecer un 46% en los últimos dos años y aumentar así nuestra red de asesores financieros para ayudar a más ahorradores a alcanzar sus metas y a muchos profesionales a iniciar un proyecto de carrera motivador y de largo plazo”.
Desde sus inicios, Banco Mediolanum ha entendido el asesoramiento financiero como algo más que la mera proposición de servicios y productos. A través de la escucha activa y una relación constante, cada family banker acompaña y establece junto a su cliente una estrategia acorde a sus necesidades y objetivos reales.
Un reciente documento de debate de la Autoridad Bancaria Europea (ABE) sobre el uso del aprendizaje automático (machine learning o ML por sus siglas en inglés) en relación con el cálculo de los requisitos de capital regulatorio es uno de los primeros intentos de un importante supervisor financiero de llegar a esta nueva frontera. Si se implementan o, mejor dicho, cuando se implementen los modelos de ML, será un paso importante, tanto para los bancos como para sus reguladores.
La regulación es uno de los dos principales motores del cambio para el sector bancario (el otro motor es la tecnología). La adopción por parte del supervisor del aprendizaje automático para el Proceso de Evaluación de la Adecuación del Capital Interno (ICAAP) puede, a su vez, cambiar la forma en que el sector y los mercados analizan el riesgo de crédito bancario.
Más concretamente, el uso futuro del aprendizaje automático por parte de los reguladores para el ICAAP también dará un sólido impulso a su adopción por parte de los bancos para su propia evaluación del riesgo de crédito bancario. Sobre todo, cuando la precisión y la claridad de los modelos basados en el aprendizaje automático sean más evidentes.
El análisis fundamental tradicional no está preparado para incorporar e interpretar millones de puntos de datos sin recurrir a los sistemas de aprendizaje automático (y quizás a la inteligencia artificial en el futuro). Muchos argumentan que tal grado de complejidad no es necesario.
Sin embargo, cuando el análisis basado en el aprendizaje automático empiece a desempeñar un papel más destacado -impulsado por el proceso regulatorio del ICAAP- este argumento será menos creíble, especialmente si los resultados analíticos de los dos enfoques son divergentes. Muchos bancos ya utilizan sistemas expertos, algunos de los cuales incluyen el aprendizaje automático, para apoyar las decisiones de préstamo, la supervisión del crédito o la fijación de precios de los préstamos. Pero no han sido aceptados para el método basado en las calificaciones internas (IRB) para calcular los requisitos de capital regulatorio.
La ABE señala que una de las razones por las que los modelos de aprendizaje automático no se han utilizado en el proceso IRB es su complejidad, que provoca dificultades de comprensión e interpretación de los resultados.
Pero la ABE también reconoce que el coste de la complejidad que conlleva el aprendizaje automático (en el que la relación entre los inputs y los outputs es más difícil de evaluar y comprender) conducirá a una mejora del poder predictivo. Lo cual es un argumento válido y, en mi opinión, lo seguirá siendo en un futuro próximo. En todos los campos, la tecnología dirigida por expertos avanza mucho más rápido que la capacidad y la voluntad de los no expertos de adoptarla.
La alta dirección de los bancos suele adoptar una perspectiva más cauta ante el cambio que la que permite la nueva frontera tecnológica y los supervisores son doblemente cautelosos con respecto a la adopción de modelos de medición y gestión complejos y difíciles de entender.
En su informe, la ABE dice que las entidades deben «encontrar un equilibrio adecuado entre el funcionamiento del modelo y la capacidad de explicar los resultados». Pero, de nuevo, el mero hecho de que un supervisor convencional muestre una opinión cautelosamente positiva sobre el aprendizaje automático es un paso muy importante. Un paso que, en mi opinión, sitúa a la ABE como uno de los organismos de supervisión con más visión de futuro a nivel mundial.
Los sistemas de aprendizaje automático pueden añadir valor…
Reconociendo que los sistemas de ML podrían desempeñar un papel importante en la forma en que se presten los servicios financieros en el futuro, el informe de la ABE pretende identificar los retos y las ventajas de su utilización para los modelos IRB; y proporcionar recomendaciones basadas en principios para los bancos con propósitos prudenciales.
La ABE considera que el uso de los modelos de aprendizaje automático tiene varias ventajas. Una de ellas es la mejora de la diferenciación del riesgo, al optimizar el poder discriminatorio y proporcionar herramientas para identificar todos los factores de riesgo y las interconexiones pertinentes. Otra es la cuantificación del riesgo, mejorando la capacidad de predicción de los modelos y detectando sesgos importantes, así como sistemas más robustos para la validación y las pruebas de estrés.
…pero hay que ser cautos
Uno de los retos identificados en el informe de la ABE es la relación entre los modelos estadísticos y el razonamiento humano. De hecho, el uso de modelos estadísticos debe complementarse con el juicio humano en lo que respecta a la diferenciación de riesgos. Los bancos no confían ciegamente en los modelos estadísticos, ni deberían hacerlo. Pero la complejidad inherente a los modelos de aprendizaje automático puede dificultar la aplicación efectiva del juicio humano si no se interpretan adecuadamente.
Otro reto reside en el hecho de que pueden faltar datos para alimentar los modelos de Big Data (que utiliza el ML). La normativa vigente (artículo 180 del Reglamento sobre requisitos de capital) dice que los datos deben remontarse al menos a cinco años atrás. En el caso de las personas físicas en la UE, este obstáculo podría verse ampliado por las normas de retención de datos relacionadas con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
Un componente clave en el IRB es la validación del modelo y de los datos. Pero un modelo más complejo, como uno basado en aprendizaje automático, puede ser más difícil de cuestionar de forma eficiente.
La ABE se refiere en varias ocasiones a la interpretabilidad de los resultados como un obstáculo clave para la adopción de los modelos de aprendizaje automático por parte de los supervisores y los altos directivos y consejos de administración de los bancos: «un buen nivel de comprensión institucional sobre sus modelos IRB es un elemento clave, y con mayor relevancia aun cuando los modelos de aprendizaje automático se utilizan con fines regulatorios». La ABE sugiere técnicas sencillas para abordarlo, como el uso de herramientas gráficas para mostrar el impacto de diversas variables.
Una amenaza específica es la integridad de la implementación, que se hace más difícil a medida que aumenta la complejidad, o la exactitud de los procesos de depuración de algunos bancos cuando se trata de Big Data.
Tribuna de Sam Theodore, consultor senior de Scope
Foto cedidaDe izquierda a derecha: Andrea González González, subdirectora general de Spainsif; Rafael Herráiz, director general de la asociación Cooperación Internacional; P. bbva
BBVA Asset Management (BBVA AM) ha lanzado la cuarta Convocatoria Solidaria BBVA Futuro Sostenible ISR, a través de la que donará un total de un millón de euros repartidos entre 23 ONG que tengan como objetivo desarrollar proyectos sociales y/o medioambientales seleccionados de toda España.
BBVA Futuro Sostenible ISR es un fondo de inversión socialmente responsable que dona anualmente una parte de la comisión de gestión a proyectos solidarios. En las convocatorias solidarias de los tres años anteriores BBVA AM ha repartido en total más de dos millones de euros a 51 proyectos solidarios seleccionados.
Con esta nueva convocatoria, BBVA AM sigue apostando por distribuir las donaciones entre varios proyectos solidarios y cubrir así la mayor diversidad posible. Un hecho que permitirá a la gestora de activos hacer un seguimiento del impacto real de las donaciones en la sociedad y poder trasladarlo con transparencia a sus clientes.
Este año, de nuevo, los proyectos que se presenten deberán estar enmarcados dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y concretamente en tres ámbitos de actuación específicos: inclusión social, dependencia, mayores y salud y medioambiente.
Las ONG interesadas pueden consultar todos los detalles de la convocatoria en las bases legales y presentar su proyecto solidario desde el 14 de enero hasta el 13 de marzo de 2022, a través del siguiente cuestionario. El 15 de junio se publicarán los proyectos ganadores en la página web de BBVA Asset Management y las donaciones se harán efectivas antes del 31 de julio de 2021.
Se pueden enviar las consultas o dudas a la dirección: futuro.sostenible.isr@bbva.com