Solo el 5% de la Generación Z y el 16% de los Millennials aseguran que el Seguro Social será su fuente principal de ingresos en la jubilación, lo que indica que las generaciones más jóvenes probablemente son escépticas sobre la salud fiscal y la futura existencia del programa, de acuerdo a los resultados compilados en la última edición de Cerulli Edge—The Americas Asset and Wealth Management Edition.
La investigación demuestra que los participantes en planes 401(k) son más propensos a depender de cuentas personales de jubilación, lo que brinda una oportunidad para que los administradores de estos planes desempeñen un papel más importante en la orientación de las decisiones de los participantes.
La investigación de Cerulli mostró que más de la mitad (58%) de los participantes de la Generación Z y los Millennials con planes 401(k) esperan que sus cuentas personales de jubilación sean su fuente principal de ingresos durante la jubilación. Mientras tanto, el 49% de todos los participantes activos en planes 401(k) identifican las cuentas personales de jubilación como su fuente anticipada de ingresos principales para el retiro.
A pesar de esto, la consultora internacional basada en Boston encuentra que muchos participantes de planes 401(k) están desconectados de sus cuentas de jubilación. Aunque la adopción generalizada de inversiones predeterminadas y funciones automáticas del plan ha ayudado a más personas a ahorrar para su jubilación, también ha contribuido a que los participantes adopten un enfoque de “configúralo y olvídalo” respecto al ahorro.
Si bien algunos participantes utilizan los recursos de planificación para el retiro que ofrecen los administradores de los planes, hay un amplio margen de mejora.
En 2024, el 28% de los participantes dijo haber utilizado las herramientas y calculadoras en línea de su administrador en el último año, y el 29% llamó a su administrador, aunque muy pocas de esas llamadas estuvieron relacionadas con la planificación para la jubilación.
La investigación de Cerulli reveló que solo el 12% de esos participantes llamó “para evaluar su preparación para la jubilación o desarrollar una estrategia de ingresos para el retiro”. Con mayor frecuencia, las llamadas se hicieron para cambiar inversiones, solicitar asistencia técnica, comprender las comisiones o transferir dinero fuera de su 401(k).
Cerulli sugiere que los administradores de planes continúen desarrollando y perfeccionando las herramientas de planificación para el retiro a fin de ayudar a los participantes a establecer y actualizar sus objetivos de jubilación, entender su situación en relación con esos objetivos y ofrecer recomendaciones específicas y prácticas que puedan impactar su jubilación, incluidas las posibles compensaciones.
“Los administradores de planes tienen la oportunidad de generar confianza con estos participantes para ayudar a retener activos y obtener traspasos de fondos, ya sea a una cuenta individual de jubilación (IRA) o de un plan a otro”, afirmó Elizabeth Chiffer, analista de la consultora.
“Siempre que sea posible, los administradores deberían ofrecer o promover la interacción con expertos internos que puedan ayudar a responder preguntas y guiar la toma de decisiones”, concluyó la experta.