España conserva un sistema de pensiones públicas sólido y con buena adecuación de las prestaciones, pero continúa enfrentando importantes retos en materia de sostenibilidad y cobertura, según la última edición del Mercer CFA Institute Global Pension Index (MCGPI) 2025. El estudio, elaborado por Mercer junto al Centro de Estudios Financieros de la Universidad de Monash y el CFA Institute, sitúa al sistema español con una puntuación global de 63,8 puntos (C+), ligeramente superior a los 63,3 puntos de 2024.
El avance refleja una mejora en las previsiones económicas del país, aunque el informe insiste en la necesidad de reforzar el sistema ante el envejecimiento de la población y el déficit de los planes de pensiones de empleo. España mantiene un equilibrio entre una adecuación elevada (83 puntos), gracias a un sistema público de reparto que proporciona prestaciones razonables, y unas notas más bajas en sostenibilidad (34,2) e integridad (74,4).
El MCGPI analiza 52 sistemas de pensiones en todo el mundo, que representan al 65% de la población global, a partir de más de 50 indicadores distribuidos en tres subíndices: suficiencia (40%), sostenibilidad (35%) e integridad (25%).
En el caso español, el estudio destaca la buena cobertura del sistema público, pero advierte de que la baja tasa de natalidad y el aumento de la esperanza de vida presionarán su equilibrio financiero. Además, la limitada penetración de los planes de empleo y las restricciones regulatorias a la inversión de los fondos, como el límite del 30% en activos inmobiliarios, limitan su capacidad de diversificación y rentabilidad.
El informe recomienda fomentar la participación en planes de empleo colectivos y potenciar instrumentos que aseguren una renta periódica complementaria durante la jubilación. En esta línea, destaca la necesidad de reforzar el ahorro privado y mejorar la educación financiera de los trabajadores para avanzar hacia un sistema más sostenible.
Según Miguel Ángel Menéndez, director del área de previsión social de Mercer España, “aunque el sistema de pensiones español registra una leve mejora en esta edición, persisten desafíos estructurales, especialmente en materia de sostenibilidad y cobertura. Desde Mercer, creemos que es fundamental seguir impulsando medidas que refuercen el sistema y aporten mayor seguridad de cara al futuro. El índice de este año vuelve a subrayar la importancia de adaptarse continuamente a las nuevas realidades demográficas y económicas para asegurar la protección de los jubilados”.
En los últimos años, el Gobierno ha aprobado diversas medidas para impulsar el ahorro complementario a través de los planes de empleo de promoción pública, con el objetivo de aumentar la cobertura entre pymes y trabajadores autónomos. Sin embargo, el informe señala que la implantación sigue siendo limitada y que será necesario reforzar los incentivos fiscales y la participación empresarial para consolidar este segundo pilar del sistema.
En comparación con otros países europeos, España se mantiene por debajo de potencias como Francia (70,3 puntos), Alemania (67,8) o Portugal (67,6), aunque supera a Italia (57,0). Los líderes del índice (Países Bajos, Islandia y Dinamarca) logran puntuaciones superiores a 82 gracias a sistemas mixtos más diversificados, con amplios fondos de capitalización y mecanismos automáticos de ajuste a la esperanza de vida.
El informe concluye que, aunque España cuenta con un sistema robusto en términos de prestaciones, la sostenibilidad financiera seguirá siendo su talón de Aquiles si no se amplía la base de cotizantes y se refuerza el ahorro complementario.