A pesar de la intensa volatilidad e incertidumbre en los mercados, los selectores de fondos suelen mantenerse fieles a su metodología y criterios de análisis, pero eso no significa que su labor no se vea impactada por todo lo que ocurre a su alrededor. El creciente protagonismo del análisis cuantitativo en su día a día, el mayor uso de la gestión pasiva -incluyendo los ETFs activos- a la hora de construir sus listas, el impacto de la digitalización en la operativa de trabajo, los nuevos modelos de negocio, como los mandatos, la evolución de la arquitectura abierta o el auge de los activos privados en las carteras fueron algunos de los temas sobre los que debatieron en la mesa titulada “Visión 360º: cómo piensan los selectores de fondos en la nueva era de la inversión”, en el marco del primer Funds Society Leaders Summit, celebrado el pasado miércoles en Madrid.
Los profesionales, moderados por Leonardo López, CAIA, Country Head Iberia & Latam en ODDO BHF, se mostraron de acuerdo en el creciente protagonismo del análisis cuantitativo, aunque siempre complementado con el cualitativo. “Ambos tipos de análisis son necesarios y complementarios”, defendía Jose María Martínez-Sanjuán, CFA, CAIA, Global Head of Fund Selection en Santander Private Banking. “La herramienta cuantitativa es de gran ayuda pero también entender a los gestores, los medios con los que cuentan, su filosofía y la de la gestora… hace 10 años diría que el análisis cualitativo era más relevante pero el mercado evoluciona, y el cuantitativo ahora se usa cada vez más”.
En la misma línea, Sebastián Larraza, director de Selección de Fondos y Gestión Multiperfil de Andbank WM, explicó esta evolución: “Venimos de unos últimos cinco años de volatilidad extrema y en los que el control cuantitativo va más allá de la selección de fondos, y gana relevancia considerando que cada vez hay más productos en la industria. Hemos reforzado el equipo con un perfil cuantitativo y otro cualitativo, a partes iguales, pero las revisiones cuantitativas se producen más en base diaria. En 2010 la revisión cuantitativa no se producía todos los días, pero en un mundo en el que manda la inmediatez, y teniendo que dar servicio a toda una red -tenemos que contestar a asesores, agentes y banqueros-, hacemos revisión cuantitativa todos los días y reducimos la cualitativa para tener relación más estrecha con las grandes posiciones”.
Mercados privados: auge en las carteras
También creciente es el protagonismo de los mercados privados en las carteras, que no dejan de crecer. “Vemos demanda y en BBVA la forma de abordarlo ha sido la especialización. Llevamos años con inversiones en mercados privados (tanto en asset allocation como en los fondos de pensiones de empleo y en los fondos de fondos para la banca privada), hasta ahora con volúmenes medianos pero que vienen creciendo. Apostamos por la especialización: contamos con un equipo para la gestión de fondos de fondos, en selección hay tres profesionales que se encargan de los mercados privados y tenemos experiencia en due dilligence (son las due dilligence más complejas)”, comentaba Pablo Martín Pascual, CFA, Head of Quality Funds en BBVA. Y añadía que es un área en la que es clave la educación: “Tenemos una relación amplia con todos los equipos para que, cuando llegue al cliente, se entienda bien. Tenemos que trabajar en la industria para que, por ejemplo, los fondos evergreen –que son ilíquidos- sean una pieza importante en las carteras y no una fuente de disgustos”.
Martínez-Sanjuán ve asimismo una demanda real por los mercados privados, y también un auge por el lado de la oferta, lo que explica que no dejen de crecer. En Santander cuentan con un equipo dedicado al análisis y la selección de estrategias en mercados privados, que, según el experto, aportan ventajas como diversificación, descorrelación y una potencial fuente de alfa adicional sobre los mercados públicos ante su prima de iliquidez, argumentos que explican su crecimiento. Otro de ellos es su democratización, que supone un viento de cola. El experto apuesta por conjugar la ampliación de estos activos en las carteras con la educación, puesto que son “estrategias más complejas, menos transparentes, con valoraciones más complicadas… y ése es el gran reto”.
Digitalización y futuro de la arquitectura abierta
Otra de las realidades que están “trastocando” la labor diaria de los selectores de fondos es la digitalización. “No es una realidad a tres o cinco años, nos está afectando ahora, va a cambiar muy rápido los procesos y tenemos que ver cómo nos posicionamos, como profesionales y como entidades. Ahora ya trabajamos pon python o con machine learning para hacer seguimiento de las due dilligence… está claro que vamos a poder usar la IA pero el selector sigue teniendo mucha importancia, gracias a su experiencia y criterio. La labor de selección de fondos no la podrá hacer un junior solo porque cuente con herramientas de IA: la figura del selector seguirá siendo relevante porque su juicio será muy requerido y tendrá cada vez más valor”, defendió Martín Pascual.
Elena Ruiz Takata, directora de Arquitectura Abierta en CaixaBank AM, también explicó que poco a poco están implantando la IA en su entidad. “En cinco años veo modelos de due dillienge con IA, scoring automático de gestoras y fondos… eso permitirá ganar estabilidad, trazabilidad, y quitar algunos sesgos, pero la selección de fondos además de ciencia también es arte, y la IA supondrá un input más en estos modelos. No se puede sustituir al selector a la hora de valorar y entender el valor añadido de un fondo, creo mucho en el juicio y la intuición basados en la experiencia”.
Otro punto de transformación está en los nuevos modelos de negocio como los mandatos. Ruiz Takata habló del gran crecimiento de CaixaBank AM en este negocio y de sus ventajas (“se pueden adaptar a tu marco interno, incluyendo ESG, tienes el control de las posiciones, una absoluta transparencia sobre las posiciones, eficiencia de costes y escalabilidad; está siendo, en Arquitectura Abierta, un tema que nos ocupa”). Explicó también que en la gestora la selección de mandatos es transversal, y desde su área aportan conocimiento de las gestoras y no solo tratan de buscar al equipo que mejor implemente la estrategia sino de establecer partnerships con las entidades, buscando un alineamiento de valores y una capacidad y compromiso para los mandatos.
Martínez-Sanjuán reflexionó sobre la evolución de la arquitectura abierta, “el estandarte de la independencia para un distribuidor, y el leit motiv de la banca privada”. El experto reconoció que “el entorno ha cambiado y, la presión regulatoria, en costes, o tendencias como la consolidación de la industria están llevando el modelo de distribución hacia una arquitectura más controlada, ordenada y guiada”. Defendió que, para el distribuidor, convivir con un menú 100 por 100 abierto e ilimitado es caro y complejo, y una forma de atajar el problema es con una arquitectura más guiada, u otras opciones como los mandatos o incluso el fomento de producto propio. Eso sí, “desde el punto de vista de la gestión discrecional de carteras, la arquitectura abierta es imbatible y tiene que existir, tiene su razón de ser”.
Gestión activa y pasiva: un equilibrio inestable
Los selectores debatieron también sobre el mayor uso de la gestión pasiva en las carteras, dejando claro que no será el fin del producto fondo o de la gestión activa tradicional. “En nuestras listas conviven vehículos de gestión activa y pasiva, si bien hemos visto un gran crecimiento en últimos años en la parte de gestión indexada, con fondos y ETFs. Antes se utilizaban más para apuestas tácticas pero ahora forman parte de la parte core de muchas carteras, también en gestión discrecional y asesoramiento independiente, porque, entre otras cosas, permiten controlar el tracking error frente al benchmarck”, reconocían desde CaixaBank AM. Y, al otro lado, en la parte más satélite de las carteras, ven apetito por fondos de mucha convicción y mucho tracking error –en inversión temática, fondos globales, de dividendo o renta fija con más beta (productos híbridos, etc)-, mientras, donde ven menos apetito es en el fondo tradicional por ejemplo con enfoque geográfico. En Andbank WM cuentan con enfoque triple, explicaba Larraza: cuentan con una parte más indexada, con vehículos “más aburridos” y bajo tracking error, otra parte más “picante”, con fondos de gestoras boutique o de autor, que se diferencian del resto o se ponen de moda en redes sociales, y una última parte con los grandes block busters.
Martínez-Sanjuán reconocía el gran crecimiento de la industria de ETFs, sobre todo en EE.UU., pero también apuntaba a factores clave para su desarrollo, como la fiscalidad: “Según algunos estudios, la industria de ETFs alcanzará los 35 billones de dólares en 2025 –trillions, en inglés-, desde los 15 actuales, lo que supone un crecimiento anualizado durante 10 años del 10%. De cumplirse, habrá más dinero en 20230 en ETFs que en fondos. Existe una clara demanda del inversor basada en menores costes, mayor transparencia y liquidez, pero hay que tener en cuenta que la fiscalidad importa, y varía de país a país. En EE.UU. favorece al ETF, lo que explica la demanda, mientras en España ocurre lo contrario frente a los fondos; en el resto de Europa es neutra. La fiscalidad puede hacer que cambie el equilibrio entre fondos y ETFs”. Por ello, también sobre el desarrollo de los ETFs activos, defendió que, con la fiscalidad a favor, habrá más. Y además, analizó que, dentro de los productos pasivos, la naturaleza también puede cambiar, pues ya no son todos vehículos pasivos y basados en la capitalización de mercado, sino que hay productos temáticos, de renta variable activa o renta fija activa.
Para Larraza, los ETFs activos suponen una evolución natural dentro de la industria, teniendo en cuenta que el ETF es solo una carcasa y que ha llegado para quedarse. “En los próximos años vemos una selección natural para todos los productos, la gestión pasiva tradicional, la nueva gestión pasiva, los productos híbridos, las especies nuevas… unas morirán y otras tendrán éxito”. Eso sí, defendió que “el fondo va a sobrevivir, es necesario, aunque buscaremos nuevas siglas o tendencias, regulación y productos”. Incluso es una carcasa válida para los nativos digitales.
Consejos para novatos: aprendizaje y pasión
El panel terminó con lecciones derivadas de la experiencia y consejos para aquellos que se inicien en la selección de fondos. Para Ruiz Takata, “una de las lecciones más importantes ha sido fijarme en la liquidez de las carteras para evitar sustos. Y aconsejaría a los nuevos preparar bien las reuniones con los gestores”. El consejo de Martínez-Sanjuán es “tener criterio propio. Un selector es analista antes que selector, así que debe tener criterio: la independencia de criterio es el alfa del analista. Y también debe tener inquietud, interés, y una curiosidad intelectual constante, preguntarse el porqué de un track record más allá del dato en sí. Aprender, preguntar, cuestionarse las cosas, escuchar más que hablar, estudiar mucho, aprender todos los días y tener humildad”.
Martín Pascual también lo tiene claro: “Mi consejo es que aprenda de los profesionales -que hay muy buenos en este país-, de los compañeros, de los interlocutores de las gestoras, y que estudie mucho, hay que aprender constantemente”. “Les digo ‘viajad”, y, desde punto de vista de la vocación, un selector tiene que ser apasionado, de los mercados que es la materia prima, y ser ante todo analista. También aconsejaría poder adaptarse al mercado, no estar enfocado a ideas pasadas, pues el ciclo de los gestores y el gestor cíclico son cosas distintas”, apostilló.