Altum Faithful Investing ha anunciado el lanzamiento de su servicio de Proxy Voting, una solución pionera que integra una política de voto específicamente diseñada para alinear las decisiones corporativas con los principios éticos y morales del magisterio de la Iglesia Católica.
Todo inversor, como accionista de una empresa es, de alguna manera propietario de una parte alícuota de esa empresa. Altum Proxy Voting consiste en votar como accionista en las empresas de forma delegada, tomando decisiones guiadas por la Doctrina Social de la Iglesia.
Esta iniciativa se fundamenta en las Altum Investment Guidelines y en la recién publicada Altum Voting Policy, elaborada meticulosamente para guiar el ejercicio del voto de sus clientes de manera coherente con su fe.
Una herramienta para votar en juntas de accionistas con coherencia
“Desde Altum, queremos acompañar a nuestros clientes que tengan el deseo de votar en las juntas de accionistas de acuerdo con sus creencias. Les ayudamos a votar en coherencia con el objetivo de generar una comunión que nos permita alzar la voz en las empresas a la hora de tomar decisiones que impacten al bien común”, ha afirmado Borja Barragán, fundador de la entidad.
Altum Faithful Investing se posiciona así como un referente en el ámbito de la inversión coherente con la fe, proporcionando asesoramiento especializado y herramientas que facilitan la toma de decisiones en consonancia con los valores cristianos.