Los activos en cuentas administradas crecieron un 19,8% hasta alcanzar los 13,7 billones de dólares (trillons, en términos americanos) en 2024, después de haber aumentado un 19,6% en 2023. A medida que los activos fiduciarios continúan representando una mayor parte del mercado de asesoría, las cuentas administradas están preparadas para un crecimiento robusto, según el informe de la consultora internacional Cerulli titulado The Cerulli Report—U.S. Managed Accounts 2025.
Los flujos netos totales hacia programas de cuentas administradas fueron de 811,8 mil millones de dólares en 2024, alcanzando su segundo nivel más alto de la historia. Los programas de cuenta administrada unificada (UMA, por sus siglas en inglés) registraron los flujos netos más altos (257,7 mil millones de dólares), seguidos por los programas de cuenta administrada separada (SMA, por sus siglas en inglés), con 218,4 mil millones de dólares.
Según Cerulli, los programas UMA y SMA mostraron las tasas de crecimiento anual compuesto (CAGR) más altas a cinco años, con tasas anualizadas del 18,7% y el 18,3%, respectivamente.
A medida que las firmas patrocinadoras de cuentas administradas continúan consolidando sus plataformas dispares en una oferta unificada, y la demanda por carteras personalizadas y optimización fiscal aumenta, la consultora basada en Boston espera que ambos tipos de programas continúen experimentando un crecimiento sólido.
“Con tasas de crecimiento a tres, cinco y diez años muy superiores a las registradas por los programas de representante como gestor de cartera (RPM), que actualmente son la plataforma más grande con 3,4 billones (trillones, en términos americanos) de dólares, las UMAs (3,2 billones de dólares) podrían arrebatar el título a lo largo de 2025”, afirmó Scott Smith, director sénior de Cerulli.
“Aunque los programas UMA todavía representan menos de una cuarta parte del total de los activos en cuentas administradas, este cambio simbolizará el traspaso del liderazgo a la próxima generación de plataformas que ofrecen flexibilidad tanto en vehículos como en discreción”, agregó.
Aunque la mayoría de los patrocinadores de plataformas han reconocido esta evolución, más de uno de cada cinco encuestados indica que su empresa tiene la intención de operar varios programas separados en el futuro cercano.
“Aunque la consolidación de plataformas es inherentemente una propuesta compleja y costosa, los patrocinadores que no han definido una estrategia a largo plazo están retrasando lo inevitable”, señaló Smith. “Aquellos que no cuentan con recursos internos suficientes para gestionar la consolidación deberían conectarse prontamente con sus proveedores de servicios actuales y potenciales para trazar un camino hacia una experiencia de inversión mejorada para los asesores”, concluyó.