ETFGI, una empresa independiente especializada en análisis y consultoría, desvela que los activos invertidos en la industria de ETFs globales han alcanzado un nuevo récord de 17,34 billones de dólares estadounidenses a finales de julio. De esta forma, supera el máximo histórico de 16,99 billones de dólares anterior, registrado, precisamente, en junio. Estas cifras de activos bajo gestión alcanzadas en julio suponen un crecimiento acumulado en lo que va de año del 16,8%, desde los 14,84 billones de dólares a finales de 2024.
En ese mes, las entradas netas de inversión a nivel mundial alcanzaron un valor de 191.550 millones de dólares, lo que eleva las suscripciones netas en lo que va de año a un récord de 1,09 billones de dólares, “lo que pone de relieve la confianza sostenida de los inversores”, según recoge el último informe mensual de la firma.
Además, la entrada de flujos de inversión de julio supera los máximos anteriores de 944.180 millones de dólares en 2024 y 739.110 millones de dólares en 2021. Julio de 2025 marcó el 74.º mes consecutivo de entradas netas, “lo que demuestra la resistencia estructural y el atractivo de los ETFs”. Esta evolución “refleja una demanda generalizada en todas las clases de activos y geografías”.
El estudio también desvela que este aumento en los flujos y los activos bajo gestión pone de relieve el papel central que desempeña el sector de los ETFs en la construcción de carteras globales, “con una adopción cada vez mayor en los canales institucionales, minoristas y de activos digitales”.
A finales de julio, el sector mundial de los ETFs contaba con 14.640 productos, procedentes de 889 proveedores en 81 bolsas de 63 países.
Los ETFs y ETPs de renta variable lideraron la carga en julio, ya que lograron captar 89.430 millones de dólares en entradas, impulsados por el buen rendimiento y las asignaciones tácticas.
Tendencias entre las distintas clases de activos
En julio, los ETFs de renta variable atrajeron 89.430 millones de dólares, lo que elevó las entradas en lo que va de año a 477.820 millones de dólares, ligeramente por debajo de los 522.430 millones de dólares registrados en este mismo periodo de 2024, lo que sugiere una modesta desaceleración en las asignaciones de renta variable, según ETFGI.
Los fondos cotizados de renta fija registraron entradas por valor de 35.740 millones de dólares en el mes, con entradas en lo que va de año que alcanzaron los 216.450 millones de dólares, superando los 187.340 millones de dólares del año pasado, lo que es una señal de la creciente demanda de rendimiento y diversificación de carteras. Mientras, los de materias primas revirtieron las salidas del año pasado, acumulando 3.110 millones de dólares en julio y 44.960 millones de dólares en lo que va de año, en comparación con los 2.750 millones de dólares de salidas netas durante el mismo periodo de 2024.
Los ETFs activos continuaron su año de auge, atrayendo 56.720 millones de dólares en julio y 323.740 millones de dólares en lo que va de año, superando con creces los 189.290 millones de dólares acumulados en este mismo periodo del año pasado. Una muestra, a juicio de ETFGI, del interés de los inversores por estrategias diferenciadas.
“Estas cifras subrayan un cambio en las preferencias de los inversores, con el rendimiento fijo, las materias primas y las estrategias activas ganando terreno en medio de la evolución de las condiciones del mercado”, aseguran en la firma.
Las entradas sustanciales pueden atribuirse a los 20 principales ETFs por activos netos nuevos, que en conjunto reunieron 73.990 millones de dólares durante el mes de julio. El ETF Vanguard S&P 500 (VOO US) reunió 12.530 millones de dólares, la mayor entrada neta individual.