El mercado de ETFs en Brasil aún representa solo el 0,5% de la industria de fondos, pero comienza a mostrar señales de madurez. Según Maria Luiza Gregório, Head de Brazil & Latam Client Development del área de Securities Services de BNP Paribas, existe una creciente demanda y un aumento de la inversión por parte de los gestores.
«Comenzamos el año con 35 ETFs. Ya hemos lanzado dos nuevos con BlackRock y tenemos tres más en desarrollo para finales de año, además de otros seis en negociaciones con diferentes gestores», declaró Gregório en una entrevista con Funds Society. Las estrategias abarcan desde activos locales hasta fondos con exposición offshore e incluso criptomonedas como bitcoin.
En los mercados desarrollados, especialmente en Estados Unidos, la estructura de los ETFs ha impulsado una profunda transformación en la industria de los fondos mutuos.
“Los ETFs comenzaron como estructuras pasivas que replicaban un índice. Sin embargo, en varios mercados, la regulación ha evolucionado para permitir también los ETFs de gestión activa, lo que ha llevado a gran parte de la industria de fondos mutuos a migrar a estructuras negociadas electrónicamente”, explica. Según ella, este cambio ha generado una mayor eficiencia operativa y reducción de costos, lo que ha impulsado la preferencia por los ETFs incluso entre los gestores activos.
En Brasil, sin embargo, el panorama es diferente. «Aquí aún no contamos con gestión activa. La industria de ETFs representa una porción muy pequeña del total de la industria de fondos. Esto se debe en parte a la forma en que se distribuye en el país, principalmente a través de la banca minorista«, afirma, destacando la falta de asesoramiento personalizado y la dificultad de acceder fácilmente a las casas de bolsa como obstáculos para el crecimiento de la estructura: «Brasil aún tiene su propio modelo único, pero con el tiempo, tiende a seguir las tendencias globales».
La transparencia de costos y la educación financiera deberían impulsar el sector
La combinación de una mayor transparencia regulatoria y los avances en educación financiera podría impulsar el crecimiento de los ETFs en Brasil, según la directora de Securities Services. Para ella, el modelo de distribución tradicional –centrado en los grandes bancos minoristas– dificulta el acceso a productos más eficientes como los ETFs, especialmente para inversores menos familiarizados con las casas de bolsa o las plataformas digitales.
«Existe un componente de madurez y educación financiera necesario para que los inversores comprendan su funcionamiento y los riesgos, especialmente al abandonar el entorno bancario tradicional», afirma.
Destaca que los recientes cambios regulatorios, implementados a finales de 2024, han creado un entorno más propicio para el crecimiento de los ETFs.
«El mercado espera que, con la combinación de educación financiera sobre las mejores opciones a largo plazo y transparencia en la remuneración de la cadena de distribución, los ETFs se consoliden como una opción más rentable», afirmó.
La estructura tiene costos operativos más bajos que los fondos distribuidos a través de agencias de transferencia, lo que podría convertirse en un diferenciador competitivo, a medida que los inversores comiencen a comparar alternativas con mayor claridad.
Gregório reconoce que la nueva regulación que exige mayor transparencia en la remuneración de los distribuidores ejerce una presión positiva sobre el modelo actual, pero no es suficiente, por sí sola, para generar un cambio radical.
«Este es uno de los impulsores, no exactamente un detonante. Es una petición de los gestores para que se regule esto, para que todos puedan competir en igualdad de condiciones», afirmó. Para ella, el avance de los ETFs depende de una serie de factores, como el trabajo de gestores más creativos, la entrada de nuevos inversores y el trabajo simultáneo en diferentes frentes, incluyendo la creación de infraestructura y la oferta de productos más competitivos.