Las generaciones jóvenes en España están explorando cada vez más alternativas para construir su patrimonio a largo plazo, alejándose del mercado inmobiliario, que resulta cada vez más inaccesible para ellas. Aunque la vivienda sigue siendo popular entre las generaciones mayores, la Generación Z muestra una clara preferencia por los mercados de capitales, especialmente por las acciones y los fondos cotizados (ETFs), con un 46% de jóvenes de entre 18 y 24 años que los eligen frente al sector inmobiliario.
Esta tendencia es consecuencia del crecimiento exponencial de los precios de la vivienda en España. Según datos del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, los precios subieron un 10,4% en el segundo trimestre de 2025 respecto al mismo periodo del año anterior, alcanzando el tercer valor más alto de este siglo, con un precio medio de 2.093,5 euros por metro cuadrado.
Una nueva mentalidad de inversión entre la Generación Z en toda Europa
Sin embargo, esta no es una tendencia exclusiva de España. Los datos de Revolut revelan que, en toda Europa, el 37% de los jóvenes de entre 18 y 24 años considera las acciones y los ETFs como su principal opción para crear riqueza a largo plazo, superando al sector inmobiliario, mencionado solo por el 30% de los encuestados de la Generación Z. Entre todos los grupos de edad, este es el que muestra menor confianza en la vivienda como oportunidad de inversión.
En España, la tendencia es aún más clara: la vivienda ha dejado de ser una opción atractiva, con solo un 24% de los encuestados considerándola una forma efectiva de generar riqueza a largo plazo, frente al 38% que elige acciones y ETFs.
El cambio es especialmente evidente entre la Generación Z: el 46% de los jóvenes de entre 18 y 24 años opta por los mercados de capitales, mientras que solo un 18% elige la vivienda. Lo mismo ocurre con la siguiente franja generacional (25–34 años), donde el 45% de los millennials se decanta por los mercados de capitales, frente a un 22% que sigue viendo la vivienda como una opción de inversión.
Los inversores jóvenes abrazan los ETFs
Una nueva generación está asumiendo un papel protagonista en la participación en los mercados de capitales en España, con un 60% de los inversores de Revolut en el país con edades comprendidas entre los 18 y los 34 años. Según datos internos, las carteras de los jóvenes de 18 a 24 años son las que tienen mayor proporción de ETFs (21,40%), seguidas por las de 25 a 34 años (16,30%), lo que refleja un claro interés de los más jóvenes en comparación con otros grupos de edad.
Además, en el caso de las inversiones recurrentes, los jóvenes de 18 a 34 años confían principalmente en el mercado estadounidense, siendo los ETFs que replican el S&P 500 el plan de inversión más popular entre las nuevas generaciones.
Los usuarios más jóvenes también están combinando su vida diaria con la planificación a largo plazo. Muchos españoles de entre 18 y 24 años están utilizando la función de redondeo de Revolut, que invierte automáticamente el cambio sobrante de sus compras cotidianas. El hecho de que usen esta función en aproximadamente el 35% de sus transacciones demuestra que las nuevas generaciones están dispuestas a invertir de forma automática el dinero que les sobra de sus gastos diarios en su futuro financiero, siendo el grupo con mayor proporción de uso entre todos los segmentos de edad de Revolut.
«Estamos viendo un cambio claro en la forma en que las generaciones más jóvenes abordan la creación de riqueza. Ya no esperan a comprar su primera vivienda para empezar a construir su futuro financiero: comienzan antes, invierten pequeñas cantidades y utilizan herramientas que antes estaban reservadas a los inversores profesionales. Esta tendencia es consecuencia directa de una mayor educación financiera y del acceso a nuevas plataformas», explica Rolandas Juteika, Head of Wealth and Trading (EEA) en Revolut.
Las preferencias de inversión varían notablemente en toda España
Aunque los mercados de capitales lideran claramente a nivel nacional, las diferencias regionales dibujan un panorama inversor diverso. En el norte, regiones como Cantabria (69% frente a 8%), Asturias (50% frente a 17%) y Navarra (36% frente a 7%) muestran una marcada preferencia por las acciones y los ETFs frente al sector inmobiliario. La tendencia también es fuerte en Aragón, donde casi la mitad (48%) opta por los mercados de capitales frente a solo un 14% que invierte en vivienda.
En cambio, en las Islas Canarias y en Castilla y León, la vivienda sigue manteniendo su peso —con un 26% y un 29% de los inversores priorizando el inmobiliario frente a los mercados de capitales (24% y 27%, respectivamente)—. Estos contrastes reflejan cómo las economías locales y los perfiles de los inversores influyen en las actitudes hacia el riesgo y la rentabilidad, incluso cuando el panorama nacional se inclina claramente hacia los mercados de capitales.