T2ó ONE presenta su informe t2ó ONE Industry ‘Tendencias digitales en finanzas’, un análisis exhaustivo de las principales innovaciones tecnológicas que están transformando el sector financiero. En un entorno marcado por tensiones geopolíticas, regulación cambiante, ciber amenazas y nuevas exigencias sociales, el estudio destaca que la transformación digital ya no es una opción, sino una necesidad estratégica.
La función financiera avanza hacia un modelo más predictivo, inteligente y seguro, donde la capacidad de anticipar riesgos, automatizar procesos clave y tomar decisiones en tiempo real se convierte en una ventaja competitiva fundamental. Según la Encuesta Global de Tesorería 2024 de Deloitte, los CFO priorizan especialmente la gestión del riesgo de liquidez y la planificación estratégica en tiempo real, áreas en las que la tecnología puede marcar una gran diferencia.
Además, el informe subraya que el uso eficiente y estratégico de los datos es esencial para la toma de decisiones financieras. En palabras de Shruti Gupta, consultora de Valor Empresarial, “una decisión financiera es tan buena como la calidad de los datos con los que se ha tomado”. Esta precisión, combinada con sólidas políticas de privacidad y ciberseguridad, es crucial para combatir el fraude y otros delitos financieros en un contexto digitalizado.
En paralelo, innovaciones como los pagos instantáneos, la tokenización de activos y el modelo Open Finance están acelerando la transformación estructural del sistema financiero, impulsando modelos de negocio más flexibles y personalizados. Las fintech continúan destacando como aliados clave por su capacidad de innovación y agilidad, aportando soluciones disruptivas y escalables.
Asimismo, tecnologías avanzadas de seguridad como la biometría, el cifrado y la autenticación avanzada seguirán siendo tendencias clave para proteger la integridad de los datos y reforzar la confianza en cada operación.
Principales tendencias tecnológicas para 2025
Banca hiperpersonalizada
En 2025, la banca pasa a ser una experiencia a medida. Los clientes exigirán acceso omnicanal, recomendaciones personalizadas gracias a la inteligencia artificial y atención automatizada en tiempo real con asistentes virtuales inteligentes.
IA al mando
La inteligencia artificial está acelerando la automatización del análisis de datos. Surgen herramientas capaces de simular escenarios, asesorar decisiones estratégicas y facilitar la interacción con clientes y socios, marcando un antes y un después en la gestión financiera.
Ciberseguridad predictiva
Los algoritmos permitirán detectar amenazas en tiempo real, anticipar movimientos sospechosos y reforzar la autenticación mediante analítica avanzada y modelos predictivos. La protección de los datos será clave para mantener la confianza.
Open Finance en expansión
El modelo de finanzas abiertas gana terreno. Al facilitar el intercambio de datos financieros entre bancos y terceros autorizados, impulsa servicios más personalizados y competitivos. Las nuevas normativas fomentan esta colaboración y abren la puerta a productos adaptados a cada cliente.
Datos conectados
Sensores, blockchain y realidad aumentada enriquecen el análisis financiero en tiempo real. Junto a un entorno regulatorio más exigente, impulsan decisiones más precisas, seguras y sostenibles.
Experiencias inmersivas
La realidad virtual, la aumentada y el metaverso abren nuevas vías para conectar con los clientes. Entornos virtuales, productos financieros gamificados y asesoramiento inmersivo permiten construir relaciones más duraderas y experiencias de marca memorables.
Anticiparse al cambio: clave para liderar el sector financiero
El informe concluye que, en este entorno competitivo y tecnológico, liderar no es cuestión de tamaño, sino de anticipación, agilidad y enfoque estratégico. Las organizaciones que logren alinear visión estratégica, calidad de datos y capacidad tecnológica no solo se adaptarán al cambio, sino que definirán su ritmo.
Con este análisis, t2ó ONE reafirma su compromiso con el desarrollo de soluciones digitales avanzadas que permitan a las compañías del sector financiero anticiparse a los cambios del mercado y mantenerse competitivas en un entorno en constante evolución.