Tras un inicio volátil en 2025, los family offices norteamericanos están adoptando un enfoque más estratégico y tecnológico para asegurar su éxito a largo plazo, según el North America Family Office Report 2025, elaborado por RBC y Campden Wealth.
El informe revela una rápida transformación digital del sector: el uso de la IA generativa se ha triplicado en comparación con 2024. Actualmente, el 29% la emplea para generar informes de inversión y el 30% para investigación. Además, el 69% de los family offices ha implementado sistemas automatizados de reporte, frente al 46% del año anterior.
“La IA permite liberar tiempo para tareas de mayor valor y agiliza la toma de decisiones”, explicó Manju Jessa, vicepresidenta de Family Office y Clientes Estratégicos de RBC.
En materia de inversión, el optimismo se ha moderado: las expectativas de rendimiento promedio para 2025 se sitúan en 5%, frente al 11% del año pasado. Las prioridades han pasado a ser aumentar la liquidez y reducir riesgos, con muchos inversores apostando por mantener efectivo. Los sectores más atractivos siguen siendo IA, defensa y las “Magnificent Seven” tecnológicas.
La transferencia de riqueza entre generaciones también está cobrando fuerza. Casi la mitad de los family offices esperan un cambio de control en los próximos diez años, y 69% ya cuenta con un plan de sucesión, frente al 53% en 2024.
“Las familias están adoptando una visión más estructurada de la continuidad del legado y los valores”, afirmó Angie O’Leary, directora de Estrategias Patrimoniales de RBC Wealth Management.
La filantropía continúa siendo un pilar clave, con el 90% de los family offices donando más de 1 millón de dólares anualmente como vía para involucrar a las nuevas generaciones.
Pese a la incertidumbre económica y política, el interés por los mercados privados se mantiene firme. El 88% de los family offices invierte en ellos, y estas posiciones representan el 29% del portafolio promedio. Aunque el rendimiento reciente ha sido moderado, se espera que los mercados privados sigan ofreciendo las mejores rentabilidades ajustadas al riesgo a largo plazo.
En conjunto, el estudio muestra cómo los family offices están pasando de la cautela a la estrategia activa, utilizando la tecnología y la planificación generacional para fortalecer sus operaciones y prepararse para un futuro más complejo, pero lleno de oportunidades.




Por Carlos Ruiz de Antequera