EFPA España ha presentado los resultados de su última encuesta “Retos del inversor minorista en 2025”, realizada entre más de 390 profesionales del sector financiero certificados por la asociación. El estudio analiza los obstáculos que dificultan la participación de los pequeños inversores en los mercados financieros, destacando la falta de educación financiera y el miedo a las pérdidas como las dos principales barreras.
Esta iniciativa forma parte de la aportación de EFPA España a la consulta pública lanzada por ESMA (la Autoridad Europea de Valores y Mercados), con el objetivo de proporcionar datos reales sobre el comportamiento de los inversores minoristas a nivel europeo.
Uno de los principales hallazgos del estudio es que el 74% de los profesionales encuestados considera que el desconocimiento de conceptos financieros clave constituye un hándicap fundamental que limita la contratación de productos de inversión. Esta falta de formación genera en los inversores una percepción de alto riesgo, inseguridad y desconfianza frente a los mercados.
Asimismo, el 58% de los participantes señala que las malas experiencias previas actúan como un factor disuasorio, empujando a los pequeños ahorradores a decantarse por productos de ahorro básicos, como las imposiciones a plazo. En esta línea, el 52% de los asesores indica que muchos ahorradores continúan suscribiendo en exclusiva depósitos bancarios por su percepción de mayor seguridad, lo que reduce el atractivo de otras opciones con mayor rentabilidad potencial.
El grado de comprensión de los productos de inversión
El desconocimiento también se traslada a la comprensión de las recomendaciones de inversión. El 68% de los encuestados cree que la falta de conocimiento financiero dificulta la asimilación de la información que se les traslada. Asimismo, un 70% reconoce que existen reticencias de los minoristas hacia el asesoramiento, ya que entienden que los consejos pueden estar sesgados por intereses comerciales.
No todos los productos se prescriben con la misma asiduidad. Un 41% de los asesores considera que productos como los ETFs o la inversión directa en bonos rara vez se incluyen en las propuestas para minoristas, debido a la menor remuneración para los distribuidores o la preferencia de cada entidad financiera por centrarse en sus propios productos.
Exceso de información, poca claridad y barreras normativas
El diseño de la información comercial choca con la baja formación financiera de los minoristas. Casi un 90% de los profesionales consultados considera que la información excesiva o poco clara complica la toma de decisiones, especialmente en lo referente a costes, riesgos y características de los productos. A ello se suma que el 45% indica que el documento de datos fundamentales sobre los Packaged Retail and Insurance-Based Investment Products (PRIIP) no logra facilitar la comprensión de los productos al inversor medio.
En su conjunto, de acuerdo con la Encuesta EFPA España “Retos del inversor minorista en 2025”, la información de los productos es abrumadora para el 61% de los inversores particulares, lo que dificulta una correcta comprensión del producto y puede generar confusión. De hecho, un 31% asegura que la información de marketing y los documentos contractuales son mejorables.
El 40% de los asesores cree que la prueba de idoneidad necesita mayor flexibilidad, frente a otro 40% que la considera una herramienta útil para proteger al inversor. Solo un 20% opina que estos trámites desincentivan directamente la inversión.
Inversores jóvenes: inmediatez y exposición mediática
Entre los jóvenes, el deseo de obtener rentabilidad en el menor tiempo posible (65%) y la alta exposición a información y marketing sobre criptomonedas (28%) explican su preferencia por activos especulativos, en detrimento de productos tradicionales o diversificados.
Respecto a las preferencias de sostenibilidad, el 63,7% de los asesores señala que la mayoría de los pequeños inversores las desconocen o no tienen opinión al respecto. Solo un 15% cree que sí es un factor que les preocupa y por el que muestran interés.
Andrea Carreras-Candi, directora de EFPA España, destaca que: “Esta encuesta refleja un reto estructural: necesitamos acercar el mundo financiero al ciudadano, con más formación, mayor transparencia y un asesoramiento más centrado en las necesidades reales del inversor. La confianza es la base para construir una cultura de inversión sólida y sostenible”.